4. ALGÚN LUGAR CERCA DEL CIELO / SOMEWHERE NEAR DA SKY

Harry y Draco se cubrieron con la capa de invisibilidad de Harry y pasaron por la sala común de Slytherin haciendo el menor ruido posible, intentado por todos los medios no ser descubiertos. Al fin llegaron a la habitación de Draco y mientras Harry doblaba la capa de invisibilidad y miraba con curiosidad la habitación de Draco éste último encendió algunas luces y se acercó a Harry con timidez.

- No te preocupes Draco, se que tienes miedo a todo lo que está pasando y tambien que tienes miedo a que no salga bien, pero yo te quiero tambien, no se muy bien porque, es difícil explicar lo que ni tan siquiera yo entiendo, pero eso es lo que siento. Había pensado mucho acerca de este momento y nunca pensé que podría ocurrir, siempre te vi como algo lejano y según pasaba el tiempo me fui arrepintiendo más y más de haberte rechazado cuando nos conocimos. Cuando te vi por mi primera vez me pareciste muy guapo pero no estaba preparado para aceptar en ese preciso instante el hecho de que me gustara un chico y menos que ese chico fueras tú. Pero aqui me tienes, soy tuyo -dijo mientras lo abrazaba y lo besaba en la frente- y ahora que te tengo no te voy a dejar escapar -concluyó Harry deslizando sus manos por la espalda de Draco mientras éste temblaba bajo la gruesa túnica que llevaba puesta.

Draco apoyó su cabeza sobre el hombro de Harry aún temblando mientras éste le iba quitando la túnica y el jersey con extramo cuidado, rozando sus manos cálidas y nerviosas, rozando de nuevo el pecho pálido de Draco, recorriendo cada centímetro de piel con sus manos, disfrutando el tacto suave de la piel de Draco mientras éste hacía lo propio con él. Fue en este momento cuando Draco no se pudo contener por más tiempo y agarró la cabeza de Harry con sus dos manos y lo beso salvajemente mientrás lo llevaba hacia su cama donde se recostaron. Para aquel momento Draco se encontraba ya bastante excitado, cosa que Harry advirtió pronto y que aprovecho para deslizar su mano hasta su entrepierna y tocarle suavemente mientras Draco le arrancaba literalmente los pantalones a Harry y lo besaba en el pecho. Los besos y las caricias se prolongaron durante al menos media hora hasta que Draco tuvo la valentía de desnudarse completamente. Mientras Draco se iba desnudando, Harry se le quedó mirando con perplejidad admirando como podía ser que lo que Draco escondiera bajo esas gruesas túnicas de marca y esos jerseys y pantalones caros fuera algo tan bello. Admiro su total desnudez, sin tapujos, de un Draco de piel blanca, de músculos poco marcados, de pelo despeinado que formaba sugerentes mechones sobre una cara que escondía los ojos más profundos, tambien más tristes y enigmáticos que había conocido nunca. Cuando Draco terminó de desnudarse, Harry se avalanzó y sobre él y lo tumbó en la cama mientras él se desnudaba frenéticamente y recorría con su boca, rozando con sus labios, el pecho de Draco para llegar hasta su cintura. Para aquel entonces Harry ya se había desnudado al completo y se hallaba encima de Draco besándolo mientras sus manos tenían asidas el miembro de Draco y lo estimulaban vigorosamente. Entretanto Draco hacía lo mismo con Harry mientras el beso iniciado instantes antes se hacía frenetico y placentero prolongándose hasta minutos después en que ambos, sudorosos, experimentaban un placer intenso y prolongado.

Después de algunos minutos tumbados uno encima del otro besándose Draco se incorporó aún desnudo y se comenzó a vestirse mientras Harry buscaba su ropa por la habitación y hacía lo mismo. Cuando se hubieron vestido Draco se acercó a Harry y cogiendo sus dos manos lo besó en la boca suavemente,

- Estuvo muy bien Potter, espero poder repetirlo pronto -dijo Draco esbozando una sonrisa.

- Siempre que quieras, o puedas -dijo Harry riendo mientras revolvía el de por si revuelto pelo de Draco mientras buscaba con la mirada su capa de invisibilidad- Ahora me temo que me tengo que ir, mañana tengo clase a primera hora de la mañana y tendré que dormir un poco antes ¿no?

- Como quieras Potter, siempre podrías quedarte a dormir aqui si quisieras, aunque el problema sería como salir mañana por la mañana... -dijo Draco pensativo.

- No te preocupes, ya nos veremos mañana, cuidate, te quiero enterito para mi sólo -dijo dando a Draco y sonoro beso de despedida y poniendose encima la capa de invisibilidad.

Cuando Harry se hubo ido, Draco aprovechó para ordenar un poco la desordenada habitación y hacer un poco de tiempo antes de irse a acostar definitivamente. Mientras recogía superficialmente la caótica habitación se puso a pensar acerca de lo que acababa de pasar entre él y Harry. Estaba claro que había deseado que pasara aquello desde hacía mucho tiempo. Había tenido otras experiencias sexuales anteriormente pero ninguna digna de mención como ésta ultima. Ahora realmente sabía que amaba a Harry y que haría lo que fuera por estar con él, en su misma casa, compartir aparte del creciente y nuevo amor algo más, vivencias y aventuras. Eso era lo que le gustaba de la relación de Potter con sus amigos. Era una relación de amistad profunda y aunque estaba claro que ahora compartía con Harry mucho más de lo que éste compartía con sus amigos, por lo menos hasta donde él sabía, añoraba poder estar sentado con él en clase, abrazarlo cuando lo viera y hablar de las mismas cosas.

Hasta entonces, aunque las cosas habían sido muy favorables, no había tenido tiempo de hablar con Harry de cosas triviales, de esas cosas que son la base de una amistad y que llevan al profundo y claro conocimiento de la otra persona. Sonaba estúpido pero era así, quería a Harry como amor y como amigo, pero en la práctica era algo complicado ya que nadie aceptaría que ambos fueran algo distinto que enemigos. Estaba en la conciencia de todo el mundo el hecho que de ellos sólo podían ser enemigos y que algo más sería antinatural. Por eso envidió a Ron y a Hermione cuando a la mañana siguiento los vió charlar animadamente en la clase de Pociones antes de que Snape llegara. Reían acerca de algo que había visto Ron y parecían llevarse de maravilla. Le hubiera gustado acercarse, introducirse en la conversación y haber podido ser por un momento tan amigo de Harry como lo eran Hermione y Ron y que todo el mundo lo viera como algo normal. Era obvio que el difícil carácter de Draco había sido el culpable de que ahora se encontrara solo. Tenía a Potter, la persona a la que quería, pero no tenía amigos sinceros y si alguien iba con él era porque quería sacarle algo. Era triste sentirse solo y confiaba en la remota posibilidad de que Harry lo convirtiera en alguien honesto y sincero y quizás entonces las cosas empezarían a cambiar.

En ese momento comprendió que el cambio debería empezar en él, puesto que él mismo era el culpable de su desgracia. Entonces decidió no sin dudar acercarse a hablar con Potter y quién sabe, a lo mejor la gente no lo veía como algo tan anormal.

- Hola Potter, ¿cómo va eso? ¿preparado para la clase de pociones? -dijo Draco con una sonrisa un tanto forzada.

- Bien Malfoy, dentro de todo lo bien que podría estar teniendo en cuanto que Snape me odia y me quita puntos a la mínima oportunidad -dijo Harry contrariado pero contento de que Draco se hubiera acercado a hablar con él.

- Lo siento mucho, supongo que yo no tengo ese problema -dijo avergonzado.

- ¿Querías algo más, Malfoy? -dijo Ron cortante fulminando con la mirada a Harry.

- Mmm, supongo que no, bueno, ¿vosotros dos ...bien... no? -dijo Draco refieriendose a Ron y a Hermione.

- Si, bien ¿lo preguntas por algo Malfoy? -dijo Hermione mirando a Draco con recelo.

- No, curiosidad supongo, bueno Potter, ¿bajamos hoy a estudiar juntos a la biblioteca? Creo que necesito ayuda en algunas cosas -dijo Draco mirando a Harry intensamente como implorándole que no lo rechazara.

- Si, bueno, supongo que es buena idea, aunque espero que no seas muy hablador porque sino no vamos a estudiar nada... -dijo Harry esbozando una sonrisa.

- Vale -dijo Draco esperanzado- entonces a las cuatro alli. Hasta luego chicos -dijo mirando a Ron y a Hermione que tenían los ojos como platos.

Cuando se hubo ido la conversación entre Ron, Hermione y Harry se centró en lo que acababa de ocurrir.

- Vale Harry, ahora nos lo explicas -dijo Hermione- Esto si que no es normal, el hecho de que Malfoy se acerque en son de paz y nos pregunte tan amigablemente que qué tal nos va y que si quedamos con él para estudiar tan tranquilamente se aleja totalmente de la realidad.

- "Hasta luego chicos" -repitió asombrado Ron- ¿Creeis que necesita ayuda psicológica? Porque sinceramente, ese no es el Draco Malfoy de siempre.

- Supongo que ahora os lo puedo contar. Ultimamente Draco y yo nos llevamos mejor. No me pregunteis porqué pero lo que importa es que el ya no es la persona que conocíais y os pido que seais amables con él. Entiendo que nos ha hecho la vida muy difícil en innumerables ocasiones pero esta solo, esa es la desgracia de Draco Malfoy, necesita sentirse querido -dijo Harry.

- ¿Podías haber empezado contándonoslo, no crees? -dijo Hermione- Yo confio en tu buen criterio y tu actitud con Malfoy, sinceramente espero que no te equivoques -concluyó resignada.

- Pero...¿estais los dos locos? -dijo Ron casi gritando- Es de Draco Malfoy de quien estamos hablando, ¿recordais? El mismo Draco Malfoy que nos ha hecho la vida imposible durante tanto tiempo que casi ni me acuerdo cuando empezó a hacerlo.

- Bueno Ron, entiendo tu postura pero si yo he superado mis prejuicios creo que vosotros tambien podreis hacerlo, sólo darle una oportunidad -dijo Harry esperanzado.

- Por mi no hay problema -dijo Ron- sólo para que te des cuenta de lo equivocado que estas.

- No os preocupeis, seguro que os cae bien, cuando le conoces no es tan mezquino y pretencioso como parece -dijo Harry bromeando- Esta tarde bajaré a la biblioteca sobre las cuatro ya que he quedado con él, si quereis pasaros, supongo que estaremos allí un buen rato.

Aunque en un principio Ron y Hermione habían parecido entender la postura de Harry todavía no habían asimilado el hecho de que a partir de ahora tendrían que lidiar con Malfoy, y todavía no tenían del todo claro si iba a ser tarea fácil.

*** FIN ***
*** Espero que este capítulo os haya gustado. No he querido hacer la escena primera más larga, supongo que habrá tiempo para ello, así de paso os pregunto que os gustaría que pasara y así me adecuaré a vuestros comentarios. Respecto al cambio de actitud de Draco frente ya no sólo a Harry sino tambien a Ron y Hermione creo que era necesario, no estrictamente muy necesario pero creo que para que el relato quede medianamente interesante y no sólo sean un monton de escenas de sexo unidas entre si por "y a la mañana siguiente volvieron a quedar para follar" y no centrar toda la atención sólo y exclusivamente en Harry y Draco creo que la mejor forma es que todos se hagan amiguitos. Espero que el carácter de Draco no fluctue demasiado pese a su nueva relación con Ron y Hermione aunque está claro que no será tan borde como solía y aunque ese era su atractivo principal (porque esta fuera de toda duda que lo mejor de Malfoy es que es malo, supongo que si estuviera en el bando de los buenos no tendría tanto "sex-appeal" jejeje) supongo que ahora puedo experimentar con otros matices de la personalidad de Draco que considero interesantes descubrir y por supuesto explotar. Espero que en terminos generales os este gustando el relato. La trama de la acción está practicamente desarrollada y aunque todavía quedan de pasar bastantes cosas las trazas generales del relato ya están trazadas. Espero que el relato no se os haga pesado ni monótono, si esto ocurriera hacermelo saber y procuraré darle un poco de vida a la redacción jejeje. Espero vuestros reviews...