The Sakura Files
Episodio 9
"Gritos en la Oscuridad"
Por Rainy
NOTAS DEL AUTOR: AWOOO!!! Bueno, la primera de las noticias es que la mi web ya esta lista y operando. Rainy's Moon (http://ice.prohosting.com/moonrain) es una página hecha con mucho cariño y paciencia... Bueno, mis perros están ahora con que les duele la panza luego de atascarse todos los tallarines que habÃa hecho para la cena... :/ En fin.
DISCLAIMER: CCS y todos sus personajes son propiedad de CLAMP y asociados. Los personajes extras son propiedad mÃa y están protegidos.
ADVERTENCIA: Este episodio puede contener material no apto para personas sensibles a temas como violencia gráfica. Tampoco es apto para menores de edad.
**************************************************************************** ****
"Just cut our wrists
like cheap cupons
and say that death was on sale today"
-- Marilyn Manson, "The Fight Song"
Sakura...
Sakura...
Sakura despertó. Estaba su cama flotando enmedio de la nada, por lo que supuso que se trataba de un sueño. Kero no estaba con ella. Se volvió para todos lados y de pronto una figura se comenzó a formar frente a ella. Era una lucecita que se posó entre las manos de Sakura, quien miraba esta lucecita con cierta curiosidad pero a la vez cierto grado de temor. De pronto, la lucecita comenzó a transformarse en una figurita alada, femenina, de largos cabellos azules y ojos violetas. Una mini-ángel con un hermoso vestido. Era joven. No podÃa ser mayor que Sakura misma (o por lo menos eso pensó Sakura) La joven la miraba con ojos de súplica.
"Por favor", le dijo con voz que parecÃa danzar con el viento, "Ayúdalo... Ayuda a mi hijo..."
"¿A tu hijo?" preguntó Sakura. La joven movió afirmativamente la cabeza.
"El... él no recuerda... Y por eso su alma se atormenta, tratando de recordar... Por favor, ayúdalo a recordar... Y a cambio él te ayudará a recuperar las Cartas de Clow..."
"Pero... ¿quién es tu hijo?"
"Kube... su nombre es Kube..."
La joven cerró los ojos y con una luz, Sakura se vio en un lugar desconocido. Era como un gran pasillo con muchas puertas. Era un laboratorio. Gente caminaba de arriba a abajo, viendo información, hablando entre ellas, sin darse cuenta de la presencia de Sakura. Todo era a blanco y negro, a excepción de ella, quien comenzó a caminar, siguiendo a la lucecita, por los pasillos, hasta llegar a una puerta que leÃa "Lab 32-A - Special Unit Containers" "Abre la puerta", la voz de la joven dijo. Sakura asà lo hizo, lentamente, temerosa de lo que podrÃa encontrar ahÃ.
Era un enorme laboratorio. En el centro habÃan dos mesas de cirugÃa, con lámpara quirúrgica colgando del techo. Las paredes eran metálicas. HabÃan estantes y escritorios a lo largo de una de las paredes, con cajones, repisas, aparatos, instrumentales y portasueros sobre y al lado de todo eso. Del otro lado de la pared habÃan jaulas y dentro de las jaulas habÃan ángeles, todos hechos bola, plumas entresaliendo de los barrotes. PodÃa escuchar gemidos, pero no eran de ese lugar. Los ángeles dentro de las jaulas parecÃan estar indiferentes al medio, inmóviles dentro de su prisión, acostumbrados a ella. De pronto la puerta se abrió y el instinto de Sakura fue el de esconderse. Dos personas de batas blancas traÃan a un joven, semi-inconsciente, con un extraño aparato en su cabeza a manera de tiara, pero con lucecitas que se apagaban y prendÃan una tras otra. Las personas abrieron una de las jaulas vacÃas y dejaron al joven ahÃ, saliendo luego, hablando cosas que Sakura no entendÃa. Luego, escuchó la voz de un niño, misma que provenÃa de una de las jaulas, "¿Miz? ¿Miz, eres tú?"
Sakura fijó sus ojos en las jaulas. El chiquillo se acercaba a la puerta y sacaba una de sus manos, dirigiéndola hacia la jaula de enseguida, en donde el joven habÃa sido colocado. "¿Miztli?", preguntó el niño con voz ahogada, "Miztli, ¿eres tú?". El joven apenas sà pudo moverse para alcanzar a tocar la mano del chiquillo por entre los barrotes. Se veÃa que el movimiento en sà dolÃa hasta los huesos. "Soy yo, soy yo... Por fa...vor no llores... es...estoy bien..."
"¿De verdad?"
El joven apretaba los dientes para no gritar al sentir que el chiquillo apretaba su mano con fuerza, tratando de buscar cierto alivio o confort. "S- sÃ... de verdad... lo estoy.."
"Quiero irme a casa, Miz...", dijo el chiquillo llorando.
"Lo sé...no llores...", dijo Miz trantando de consolarlo.
"Maz está muerto.."
"¿Qué dices...?"
"Maz... ya no me contesta... Y yo le hablo... y le hablo.... y ya no me contesta...MÃralo..."
El chiquillo señaló hacia la derecha de Sakua. Ella también se volvió y tuvo que ahogar un grito de susto al ver el cuerpo inconsciente de otro joven, casi idéntico al que acababan de meter a la jaula (Miz), pero con la diferencia de que el de la jaula seguÃa con vida y el que estaba ahà parecÃa tener ya varias horas de muerto. Miz no dijo nada por un momento. Luego, elevó su voz. "¿Maz? ¡MazatzÃn, contesta que estás asustando a Kube...!"
Pero no hubo respuesta. Sakura se acercó a verlo. TenÃa un tubo saliendo de su garganta y varios cables metidos en su espalda. TenÃa moretones y heridas por todos lados.
"Ya no llores Kube... Vamos... qui-qui... ¿Quieres que te cuente... un cuento...?" dijo Miz acomodándose en su jaula para poder tomar la mano de Kube mejor.
"M-hm..."
"Bueno... ¿Ya te conté cuando... tu tÃo Heavy y Hard... se volvieron dragones...?"
"N-hn"
"Bueno... re---"
En eso, entraron varios de bata, buscaron por todos lados y el que parecÃa ser el jefe dijo señalando a Kube, "A él..."
Los hombres lo sacaron. Pudo ver que Kube tenÃa alas infantiles, mismas que revoloteaba a la vez de que gritaba y trataba de soltarse, pero los hombres lo tenÃan bien sujetado. Miz se puso como histérico, gritando, "¡Déjenlo en paz!", pero uno de ellos tenÃa una especie de control remoto y, apuntándolo a Miz, presionó un botón, mismo que activó la tiara de su cabeza y dio una terrible descarga a su cerebro, dejándolo temblando e inconsciente. "¡Miztli!" gritó Kube antes de que lo sacaran de ahÃ. Sakura los siguió pero sus piernas se detuvieron antes de llegar a la puerta por donde los habÃa visto desaparecer.
No quiso ver. No quiso ver por qué eran aquellos gritos tan llenos de dolor, furia y angustia. No quiso ver por qué los gritos eran acompañados por voces y risas varoniles. No quiso ver pero pudo sentir en su corazón el dolor que esos gritos sentÃan, gritos que poco a poco se fueron apagando hasta que sólo se escuchaba llanto. Luego, los tipos salieron y Sakura se logró colar antes de que cerraran la puerta con llave. Era una habitación algo oscura, pequeña. El chiquillo estaba tratando de levantarse, llorando en silencio, y Sakura pudo ver los hilos de sangre que corrÃan por sus piernas, sus alas maltratadas, una de ellas partida por la mitad, sangrando y sujetada sólo por las plumas y el cuero. "¿Kube?" preguntó temerosa. El chiquillo se volvió asustado y Sakura se asustó también al comprobar que el chiquillo la escuchaba y la veÃa, con ojos bicolores, que contrastaban perfectamente con el resto blanco y negro que era él. Su carita estaba golpeada, llena de lágrimas. "Kube... "
"¿Qui-Quién eres?" preguntó Kube entre sollozos.
"Soy Sakura", dijo ella acercándose más. Cuando estuvo lo suficientemente cerca, Kube se echó en sus brazos y lloró con mas fuerza, Sakura lo abrazó y cerró sus ojos. Al hacerlo, uan serie de imágenes se vinieron a su mente, como una especie de flashback que le mostraba todo lo que ese chiquillo pasó. Vió la reciente violación y muchas otras que vinieron después, bajo la lluvia en la parte trasera del lugar, vió cómo lo ataron a una de las mesas y colocaron entradas en su espalda (semejantes a las entradas de los audÃfonos en un CD player) y cómo cables corrÃan entre sus vértebras, lanzando corrientes eléctricas cada vez que lo "conectaban" a aparatos que medÃan, extraÃan y cargaban energÃa; vió cómo le fueron cortadas sus alas una y otra, y otra, y otra vez, tantas veces hasta que se volvió frÃo, sin reaccionar al dolor ni a ninguna otra emoción; vio cómo lo encerraban en una habitación oscura y cómo no le era permitido el dormir durante dÃas, semanas inclusive, hasta que por fin lo sacaban de nuevo a la parte trasera del lugar, bajo la lluvia, a lo que él pronto aprendió a no oponer resistencia. Sintió su dolor, su rabia, su angustia; escuchó sus súplicas, sus gritos y su llanto, pero lo que más hizo moverse su corazón fue su silencio: el silencio de un alma que ya habÃa sido dominada, sometida y quebrajada.
Sakura lo soltó, no soportando ya ver más aquello y al verlo de nuevo era Sean, pero un Sean enfermo, demacrado, patético. Estaban en la habitación de Sakura, pero se veÃa borrosa. Kero no estaba ahÃ. El joven la veÃa con coraje.
"¿Sean...?" preguntó Sakura, sentada en su cama. Sean estaba de pie a un lado.
"No es justo", dijo Sean con voz cargada de rabia, pero baja, como si no quisiera que nadie mas que Sakura lo escuchara, "Habiendo tantos y tantos ángeles encubiertos en ese lugar... ninguno de ellos tuvo piedad... ninguno de ellos trató de ayudarme... y todos participaron en algún punto de esa pesadilla... Y pude ver en sus ojos que disfrutaban de cada momento... pude sentir en sus acciones que sus deseos eran calmados con mi cuerpo... una y otra vez... Y ahora.... Ahora soy yo quien debe salvarlos a ellos... Soy yo quien debe protegerlos..."
"Sean... " dijo Sakura sin realmente saber qué decir a aquello. Sean rió amargamente.
"Y sé que si no lo hago... Si no los protejo... Si no los salvo... Si no quiero hacerlo... Seré obligado a hacerlo... ¿Es eso justicia divina?..." dijo, su voz incrementando poco a poco hasta que prácticamente estaba gritando entre lágrimas de rabia que derramaba, mientras Sakura lo miraba, llorando también, "¡¡Que ellos puedan hacer todo lo que sus más... bajos... deseos quieran; que puedan destruÃrme, humillarme, cogerme, pisotearme, torturarme... matarme....!! ¡¿Y tenga que protegerlos de todo mal cuando son ellos los que han hecho en mà el PEOR DE TODOS LOS MALES?! ¡¡Porque no puedo PROTEGER AQUELLO QUE ODIO!! ¡¡¡NO PUEDO!!! ¡¡¡No puedo proteger aquello que DESEO ACABAR CON MIS MANOS!!!..."
Luego, calmándose un poco, dijo, "Syaoran Li se encuentra en peligro... ¡Despierta!"
Sakura despertó súbitamente. Kero la miraba angustiado, pues Sakura lloraba. "Tuviste un mal sueño, Sakurita", dijo Kero.
"No fue un sueño", dijo Sakura abrazando su almohada, sin poder dejar de llorar, "Fue cierto... lo que vi pasó..."
"¿Qué dices?" preguntó Kero preocupado. Sakura contó todo lo que habÃa soñado.
"Y lo comprendo" dijo Sakura entre sollozos, "Comprendo su rabia... su dolor... pero no entiendo... no parecÃa estar en ese estado la última vez..."
"Tal vez sea porque no lo recuerda... Y ese odio que sentÃa probablemente sea la razón por la cual no lo recuerda", dijo Kero, "Probablemente esté bajo el influjo de un conjuro..."
"Pero esa muchacha... me dijo que tenÃa que hacerlo recordar... para poder ayudar a las cartas..."
"¿Muchacha?"
"La de pelo azul... que te conté..."
"Sakura... dime, ¿tenÃa los ojos violetas?" Sakura movió afirmativamente la cabeza. La voz de Kero sonaba cada vez más y más preocupada, "¿Morena? ¿De pelos azul celeste, lacios como cascada de agua? ¿Voz muy calmada?"
"SÃ, sÃ..."
"Ay... Dios... ¿Y-Y dijo que era su hijo?"
"SÃ... ¿Kero, qué pasa?"
La cara de angustia que puso Kero hizo que dejara de llorar, "Es que esto se acaba de complicar más, Sakura"
"¿Eeeh?"
"Esa mujer que viste era Universo... Y si el tal Sean es su hijo... Entonces... Oh no...no... no..."
En eso, la voz de Sean en la cabeza de Sakura volvió a escucharse. "Syaoran Li se encuentra en peligro"... Sakura se puso de pie y tan rápido como pudo se vistió.
"¿¡A dónde vas!?" gritó Kero, "¡Son las tres de la madrugada!"
"¡Syaoran está en peligro!" exclamó Sakura, "¡Debemos ir inmediatamente para allá!"
"Pero... Sakura... ", dijo Kero, pero la chamaca ya habÃa abierto la ventana y con "FLY!" emprendió el vuelo. Kero siguió a Sakura, transformándose en su verdadera forma tan pronto como estuvo del otro lado de la ventana.
"Bleu debe saber una manera", dijo Sakura.
"Pero, ¿y cómo sabes dónde vive Bleu?"
Sakura se detuvo. La verdad era que no sabÃa. Entonces, agarró aire y a todo lo que sus pulmones daban, gritó, "¡¡BLEUUUUUUUUUUUUU!!"
Frente a ellos apareció la figura de Bleu, tapándose los oÃdos con expresión de molestia, "¡No hace falta que grites!" exclamó. Al parecer, la única que podÃa causarle daño era la Cardmaster. Sakura la miró severa y dijo, "Necesito ir a Hong-Kong... ahora..."
Bleu la miró fijamente y asintió.
* * * * * * *
Yukito salió al patio y vio la luna. Respiraba agitadamente al correr hacia afuera. Sudaba a chorros. De pronto, el dolor de nuevo. Cayó de rodillas y no pudo evitar dejar escapar un grito de dolor, abrazando su estómago, sintiendo como si miles de cuchillos lo cortaran por dentro. Levantó la cabeza lentamente hacia el techo, en donde una figura alada sostenÃa algo hacia enfrente, una esfera de luz negra. Yukito no podÃa levantarse pues el dolor seguÃa siendo intenso. Apretaba los dientes para soportarlo, su mirada aún fija en la figura del techo.
"Yue, Guardián creado por Clow para Juzgar al nuevo dueño de las cartas", dijo la figura con voz gruesa, "Deja tu vieja forma y transfórmate para servir a tu nuevo dueño... "
"Mi dueña.... es Sakura.." dijo Yukito, con voz de Yue, al parecer sumergido en una marea de dolor que invadÃa su cuerpo.
"Yue... Guardián creado por Clow para Juzgar al nuevo dueño de las cartas... Deja tu vieja forma y transfórmate para servir a tu nuevo dueño...", insistió la voz. Yukito lanzó un grito de dolor, apoyando su peso con su mano derecha mientras que la otra seguÃa firme en su estómago.
"¡No!" gritó con voz de Yue, "¡Mi dueña es Sakura Kinomoto!"
"¡Yue! ¡Guardián creado por Clow para Juzgar al nuevo dueño de las cartas... Deja tu vieja forma y transfórmate para servir a tu nuevo dueño!' exclamó la figura. La esfera brilló más y un rayo fue lanzado por esta, pegando en el pecho de Yukito, quien se llevó las manos a la cabeza y gritó desgarradoramente mientras era forzado a tranformarse en Yue:
"¡¡TOUYAAAA!!"
***********************************
CONTINUARA EPISODIO 10
"De Cómo Nacen las Dark Cards"
NOTAS: Ok, no me maten... Planeo traducir este fic en inglés... Espero que os esté gustando lo que he estado haciendo. Lamento la tardanza de los episodios, pero tengo un terrible bloqueo... Para los que eran fans del fic de Sailor Moon "Moon Magic" y "Neo Angels", lamento que los haya quitado de Fanfiction.net! Pero, pueden verlos en mi página (http://ice.prohosting.com/moonrain) y en "A Sailor Moon Romance" (www.moonromance.com)
Si desean enviarme mails diciendome lo chida de la historia o para amenazarme de muerte si no pasa algo bueno pronto, tienen todo mi permiso de hacerlo :)
Rainy
Moon_Rainy@spellbox.com
Episodio 9
"Gritos en la Oscuridad"
Por Rainy
NOTAS DEL AUTOR: AWOOO!!! Bueno, la primera de las noticias es que la mi web ya esta lista y operando. Rainy's Moon (http://ice.prohosting.com/moonrain) es una página hecha con mucho cariño y paciencia... Bueno, mis perros están ahora con que les duele la panza luego de atascarse todos los tallarines que habÃa hecho para la cena... :/ En fin.
DISCLAIMER: CCS y todos sus personajes son propiedad de CLAMP y asociados. Los personajes extras son propiedad mÃa y están protegidos.
ADVERTENCIA: Este episodio puede contener material no apto para personas sensibles a temas como violencia gráfica. Tampoco es apto para menores de edad.
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"Just cut our wrists
like cheap cupons
and say that death was on sale today"
-- Marilyn Manson, "The Fight Song"
Sakura...
Sakura...
Sakura despertó. Estaba su cama flotando enmedio de la nada, por lo que supuso que se trataba de un sueño. Kero no estaba con ella. Se volvió para todos lados y de pronto una figura se comenzó a formar frente a ella. Era una lucecita que se posó entre las manos de Sakura, quien miraba esta lucecita con cierta curiosidad pero a la vez cierto grado de temor. De pronto, la lucecita comenzó a transformarse en una figurita alada, femenina, de largos cabellos azules y ojos violetas. Una mini-ángel con un hermoso vestido. Era joven. No podÃa ser mayor que Sakura misma (o por lo menos eso pensó Sakura) La joven la miraba con ojos de súplica.
"Por favor", le dijo con voz que parecÃa danzar con el viento, "Ayúdalo... Ayuda a mi hijo..."
"¿A tu hijo?" preguntó Sakura. La joven movió afirmativamente la cabeza.
"El... él no recuerda... Y por eso su alma se atormenta, tratando de recordar... Por favor, ayúdalo a recordar... Y a cambio él te ayudará a recuperar las Cartas de Clow..."
"Pero... ¿quién es tu hijo?"
"Kube... su nombre es Kube..."
La joven cerró los ojos y con una luz, Sakura se vio en un lugar desconocido. Era como un gran pasillo con muchas puertas. Era un laboratorio. Gente caminaba de arriba a abajo, viendo información, hablando entre ellas, sin darse cuenta de la presencia de Sakura. Todo era a blanco y negro, a excepción de ella, quien comenzó a caminar, siguiendo a la lucecita, por los pasillos, hasta llegar a una puerta que leÃa "Lab 32-A - Special Unit Containers" "Abre la puerta", la voz de la joven dijo. Sakura asà lo hizo, lentamente, temerosa de lo que podrÃa encontrar ahÃ.
Era un enorme laboratorio. En el centro habÃan dos mesas de cirugÃa, con lámpara quirúrgica colgando del techo. Las paredes eran metálicas. HabÃan estantes y escritorios a lo largo de una de las paredes, con cajones, repisas, aparatos, instrumentales y portasueros sobre y al lado de todo eso. Del otro lado de la pared habÃan jaulas y dentro de las jaulas habÃan ángeles, todos hechos bola, plumas entresaliendo de los barrotes. PodÃa escuchar gemidos, pero no eran de ese lugar. Los ángeles dentro de las jaulas parecÃan estar indiferentes al medio, inmóviles dentro de su prisión, acostumbrados a ella. De pronto la puerta se abrió y el instinto de Sakura fue el de esconderse. Dos personas de batas blancas traÃan a un joven, semi-inconsciente, con un extraño aparato en su cabeza a manera de tiara, pero con lucecitas que se apagaban y prendÃan una tras otra. Las personas abrieron una de las jaulas vacÃas y dejaron al joven ahÃ, saliendo luego, hablando cosas que Sakura no entendÃa. Luego, escuchó la voz de un niño, misma que provenÃa de una de las jaulas, "¿Miz? ¿Miz, eres tú?"
Sakura fijó sus ojos en las jaulas. El chiquillo se acercaba a la puerta y sacaba una de sus manos, dirigiéndola hacia la jaula de enseguida, en donde el joven habÃa sido colocado. "¿Miztli?", preguntó el niño con voz ahogada, "Miztli, ¿eres tú?". El joven apenas sà pudo moverse para alcanzar a tocar la mano del chiquillo por entre los barrotes. Se veÃa que el movimiento en sà dolÃa hasta los huesos. "Soy yo, soy yo... Por fa...vor no llores... es...estoy bien..."
"¿De verdad?"
El joven apretaba los dientes para no gritar al sentir que el chiquillo apretaba su mano con fuerza, tratando de buscar cierto alivio o confort. "S- sÃ... de verdad... lo estoy.."
"Quiero irme a casa, Miz...", dijo el chiquillo llorando.
"Lo sé...no llores...", dijo Miz trantando de consolarlo.
"Maz está muerto.."
"¿Qué dices...?"
"Maz... ya no me contesta... Y yo le hablo... y le hablo.... y ya no me contesta...MÃralo..."
El chiquillo señaló hacia la derecha de Sakua. Ella también se volvió y tuvo que ahogar un grito de susto al ver el cuerpo inconsciente de otro joven, casi idéntico al que acababan de meter a la jaula (Miz), pero con la diferencia de que el de la jaula seguÃa con vida y el que estaba ahà parecÃa tener ya varias horas de muerto. Miz no dijo nada por un momento. Luego, elevó su voz. "¿Maz? ¡MazatzÃn, contesta que estás asustando a Kube...!"
Pero no hubo respuesta. Sakura se acercó a verlo. TenÃa un tubo saliendo de su garganta y varios cables metidos en su espalda. TenÃa moretones y heridas por todos lados.
"Ya no llores Kube... Vamos... qui-qui... ¿Quieres que te cuente... un cuento...?" dijo Miz acomodándose en su jaula para poder tomar la mano de Kube mejor.
"M-hm..."
"Bueno... ¿Ya te conté cuando... tu tÃo Heavy y Hard... se volvieron dragones...?"
"N-hn"
"Bueno... re---"
En eso, entraron varios de bata, buscaron por todos lados y el que parecÃa ser el jefe dijo señalando a Kube, "A él..."
Los hombres lo sacaron. Pudo ver que Kube tenÃa alas infantiles, mismas que revoloteaba a la vez de que gritaba y trataba de soltarse, pero los hombres lo tenÃan bien sujetado. Miz se puso como histérico, gritando, "¡Déjenlo en paz!", pero uno de ellos tenÃa una especie de control remoto y, apuntándolo a Miz, presionó un botón, mismo que activó la tiara de su cabeza y dio una terrible descarga a su cerebro, dejándolo temblando e inconsciente. "¡Miztli!" gritó Kube antes de que lo sacaran de ahÃ. Sakura los siguió pero sus piernas se detuvieron antes de llegar a la puerta por donde los habÃa visto desaparecer.
No quiso ver. No quiso ver por qué eran aquellos gritos tan llenos de dolor, furia y angustia. No quiso ver por qué los gritos eran acompañados por voces y risas varoniles. No quiso ver pero pudo sentir en su corazón el dolor que esos gritos sentÃan, gritos que poco a poco se fueron apagando hasta que sólo se escuchaba llanto. Luego, los tipos salieron y Sakura se logró colar antes de que cerraran la puerta con llave. Era una habitación algo oscura, pequeña. El chiquillo estaba tratando de levantarse, llorando en silencio, y Sakura pudo ver los hilos de sangre que corrÃan por sus piernas, sus alas maltratadas, una de ellas partida por la mitad, sangrando y sujetada sólo por las plumas y el cuero. "¿Kube?" preguntó temerosa. El chiquillo se volvió asustado y Sakura se asustó también al comprobar que el chiquillo la escuchaba y la veÃa, con ojos bicolores, que contrastaban perfectamente con el resto blanco y negro que era él. Su carita estaba golpeada, llena de lágrimas. "Kube... "
"¿Qui-Quién eres?" preguntó Kube entre sollozos.
"Soy Sakura", dijo ella acercándose más. Cuando estuvo lo suficientemente cerca, Kube se echó en sus brazos y lloró con mas fuerza, Sakura lo abrazó y cerró sus ojos. Al hacerlo, uan serie de imágenes se vinieron a su mente, como una especie de flashback que le mostraba todo lo que ese chiquillo pasó. Vió la reciente violación y muchas otras que vinieron después, bajo la lluvia en la parte trasera del lugar, vió cómo lo ataron a una de las mesas y colocaron entradas en su espalda (semejantes a las entradas de los audÃfonos en un CD player) y cómo cables corrÃan entre sus vértebras, lanzando corrientes eléctricas cada vez que lo "conectaban" a aparatos que medÃan, extraÃan y cargaban energÃa; vió cómo le fueron cortadas sus alas una y otra, y otra, y otra vez, tantas veces hasta que se volvió frÃo, sin reaccionar al dolor ni a ninguna otra emoción; vio cómo lo encerraban en una habitación oscura y cómo no le era permitido el dormir durante dÃas, semanas inclusive, hasta que por fin lo sacaban de nuevo a la parte trasera del lugar, bajo la lluvia, a lo que él pronto aprendió a no oponer resistencia. Sintió su dolor, su rabia, su angustia; escuchó sus súplicas, sus gritos y su llanto, pero lo que más hizo moverse su corazón fue su silencio: el silencio de un alma que ya habÃa sido dominada, sometida y quebrajada.
Sakura lo soltó, no soportando ya ver más aquello y al verlo de nuevo era Sean, pero un Sean enfermo, demacrado, patético. Estaban en la habitación de Sakura, pero se veÃa borrosa. Kero no estaba ahÃ. El joven la veÃa con coraje.
"¿Sean...?" preguntó Sakura, sentada en su cama. Sean estaba de pie a un lado.
"No es justo", dijo Sean con voz cargada de rabia, pero baja, como si no quisiera que nadie mas que Sakura lo escuchara, "Habiendo tantos y tantos ángeles encubiertos en ese lugar... ninguno de ellos tuvo piedad... ninguno de ellos trató de ayudarme... y todos participaron en algún punto de esa pesadilla... Y pude ver en sus ojos que disfrutaban de cada momento... pude sentir en sus acciones que sus deseos eran calmados con mi cuerpo... una y otra vez... Y ahora.... Ahora soy yo quien debe salvarlos a ellos... Soy yo quien debe protegerlos..."
"Sean... " dijo Sakura sin realmente saber qué decir a aquello. Sean rió amargamente.
"Y sé que si no lo hago... Si no los protejo... Si no los salvo... Si no quiero hacerlo... Seré obligado a hacerlo... ¿Es eso justicia divina?..." dijo, su voz incrementando poco a poco hasta que prácticamente estaba gritando entre lágrimas de rabia que derramaba, mientras Sakura lo miraba, llorando también, "¡¡Que ellos puedan hacer todo lo que sus más... bajos... deseos quieran; que puedan destruÃrme, humillarme, cogerme, pisotearme, torturarme... matarme....!! ¡¿Y tenga que protegerlos de todo mal cuando son ellos los que han hecho en mà el PEOR DE TODOS LOS MALES?! ¡¡Porque no puedo PROTEGER AQUELLO QUE ODIO!! ¡¡¡NO PUEDO!!! ¡¡¡No puedo proteger aquello que DESEO ACABAR CON MIS MANOS!!!..."
Luego, calmándose un poco, dijo, "Syaoran Li se encuentra en peligro... ¡Despierta!"
Sakura despertó súbitamente. Kero la miraba angustiado, pues Sakura lloraba. "Tuviste un mal sueño, Sakurita", dijo Kero.
"No fue un sueño", dijo Sakura abrazando su almohada, sin poder dejar de llorar, "Fue cierto... lo que vi pasó..."
"¿Qué dices?" preguntó Kero preocupado. Sakura contó todo lo que habÃa soñado.
"Y lo comprendo" dijo Sakura entre sollozos, "Comprendo su rabia... su dolor... pero no entiendo... no parecÃa estar en ese estado la última vez..."
"Tal vez sea porque no lo recuerda... Y ese odio que sentÃa probablemente sea la razón por la cual no lo recuerda", dijo Kero, "Probablemente esté bajo el influjo de un conjuro..."
"Pero esa muchacha... me dijo que tenÃa que hacerlo recordar... para poder ayudar a las cartas..."
"¿Muchacha?"
"La de pelo azul... que te conté..."
"Sakura... dime, ¿tenÃa los ojos violetas?" Sakura movió afirmativamente la cabeza. La voz de Kero sonaba cada vez más y más preocupada, "¿Morena? ¿De pelos azul celeste, lacios como cascada de agua? ¿Voz muy calmada?"
"SÃ, sÃ..."
"Ay... Dios... ¿Y-Y dijo que era su hijo?"
"SÃ... ¿Kero, qué pasa?"
La cara de angustia que puso Kero hizo que dejara de llorar, "Es que esto se acaba de complicar más, Sakura"
"¿Eeeh?"
"Esa mujer que viste era Universo... Y si el tal Sean es su hijo... Entonces... Oh no...no... no..."
En eso, la voz de Sean en la cabeza de Sakura volvió a escucharse. "Syaoran Li se encuentra en peligro"... Sakura se puso de pie y tan rápido como pudo se vistió.
"¿¡A dónde vas!?" gritó Kero, "¡Son las tres de la madrugada!"
"¡Syaoran está en peligro!" exclamó Sakura, "¡Debemos ir inmediatamente para allá!"
"Pero... Sakura... ", dijo Kero, pero la chamaca ya habÃa abierto la ventana y con "FLY!" emprendió el vuelo. Kero siguió a Sakura, transformándose en su verdadera forma tan pronto como estuvo del otro lado de la ventana.
"Bleu debe saber una manera", dijo Sakura.
"Pero, ¿y cómo sabes dónde vive Bleu?"
Sakura se detuvo. La verdad era que no sabÃa. Entonces, agarró aire y a todo lo que sus pulmones daban, gritó, "¡¡BLEUUUUUUUUUUUUU!!"
Frente a ellos apareció la figura de Bleu, tapándose los oÃdos con expresión de molestia, "¡No hace falta que grites!" exclamó. Al parecer, la única que podÃa causarle daño era la Cardmaster. Sakura la miró severa y dijo, "Necesito ir a Hong-Kong... ahora..."
Bleu la miró fijamente y asintió.
* * * * * * *
Yukito salió al patio y vio la luna. Respiraba agitadamente al correr hacia afuera. Sudaba a chorros. De pronto, el dolor de nuevo. Cayó de rodillas y no pudo evitar dejar escapar un grito de dolor, abrazando su estómago, sintiendo como si miles de cuchillos lo cortaran por dentro. Levantó la cabeza lentamente hacia el techo, en donde una figura alada sostenÃa algo hacia enfrente, una esfera de luz negra. Yukito no podÃa levantarse pues el dolor seguÃa siendo intenso. Apretaba los dientes para soportarlo, su mirada aún fija en la figura del techo.
"Yue, Guardián creado por Clow para Juzgar al nuevo dueño de las cartas", dijo la figura con voz gruesa, "Deja tu vieja forma y transfórmate para servir a tu nuevo dueño... "
"Mi dueña.... es Sakura.." dijo Yukito, con voz de Yue, al parecer sumergido en una marea de dolor que invadÃa su cuerpo.
"Yue... Guardián creado por Clow para Juzgar al nuevo dueño de las cartas... Deja tu vieja forma y transfórmate para servir a tu nuevo dueño...", insistió la voz. Yukito lanzó un grito de dolor, apoyando su peso con su mano derecha mientras que la otra seguÃa firme en su estómago.
"¡No!" gritó con voz de Yue, "¡Mi dueña es Sakura Kinomoto!"
"¡Yue! ¡Guardián creado por Clow para Juzgar al nuevo dueño de las cartas... Deja tu vieja forma y transfórmate para servir a tu nuevo dueño!' exclamó la figura. La esfera brilló más y un rayo fue lanzado por esta, pegando en el pecho de Yukito, quien se llevó las manos a la cabeza y gritó desgarradoramente mientras era forzado a tranformarse en Yue:
"¡¡TOUYAAAA!!"
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CONTINUARA EPISODIO 10
"De Cómo Nacen las Dark Cards"
NOTAS: Ok, no me maten... Planeo traducir este fic en inglés... Espero que os esté gustando lo que he estado haciendo. Lamento la tardanza de los episodios, pero tengo un terrible bloqueo... Para los que eran fans del fic de Sailor Moon "Moon Magic" y "Neo Angels", lamento que los haya quitado de Fanfiction.net! Pero, pueden verlos en mi página (http://ice.prohosting.com/moonrain) y en "A Sailor Moon Romance" (www.moonromance.com)
Si desean enviarme mails diciendome lo chida de la historia o para amenazarme de muerte si no pasa algo bueno pronto, tienen todo mi permiso de hacerlo :)
Rainy
Moon_Rainy@spellbox.com