The Sakura Files
Episodio 18
"Pase lo que pase..."
Por Rainy
NOTAS DE LA AUTORA -- ^.^ Estoy contenta!!! Acabo de ver los reviews y no puedo creer que ya van a 19 de ellos!! 19!! Podría saltar y bailar por eso. En fin. Tomaré este espacio para contestar preguntas hechas por ustedes, mis amados lectores, con un poco de ayuda de Sean (osea yo). No se preocupen, voy a compensarlos con un largo episodio, sale? (Más te vale, sinvergüenza) ¡Cállate!
Angelmt -- Bueno, eso de poner de pareja a Sean y a Sakura SI cruzó mi mente por un momento, pero luego me arrepentí pues me gusta la pareja que forma con Syaoran (¡Mentira! ¡Lo que pasa es que le remordió la conciencia porque sabe perfectamente que Sakura nunca me haría caso!) Pero eso no quiere decir que Sean no tenga ciertos (ahem!) sentimientos por la chamaca... [¡Mentira! (*Sean se ruboriza*)] Además, eso de querer suicidarse de Sean es una característica "patonogmónica" (Sean's original trademark) Pero no te preocupes, más adelante en su vida deja de tenerla (porque eventualmente me da flojera hacerlo, así que mejor lo dejo por la paz)
Lauzip -- Primero que nada, me disculpo. Tardé siglos en actualizar y eso se debió a cargas inhumanas de trabajo escolar, bloqueo mental y una depresión de la cual hasta hace poco comencé a salir de (Eso y porque la carga de licor en sus venas era de 0... ji ji ji..) Ah! ja ja! Muy gracioso!. Me da mucho gusto que te haya gustado la descripción de la muerte de Eriol!!! :) De pronto me siento halagada! (¡Por primera vez en tu vida!) En fin. Ahh.. en cuanto a tu pregunta, Kaho habla con Gaiev, quien (si te acuerdas del Episodio 10, "El Nacimiento de las Dark Cards I: El Sueño") tomó posesión de Yukito y obligó a Yue a separarse de su identidad falsa. Gaiev entonces tiene la imagen deYukito, pero eso no quiere decir que sea Yukito, ¿capice?
Reinalt -- Joy joy joy!!! Bajé la historia a mi drive. La leeré esta noche que tengo más tiempo. Gracias por leer esta!! (¡Saluditos de mi parte!)
Dany-Chan -- Gracias por tus comentarios. Intentaré hacer de los capítulos unos más largos y sin tantos comentarios de la autora... (Ni del ángel que la acompaña)
Misao Kurayami -- Me doy cuenta de que escribí tu nombre mal la última vez!!! *^.^* Gomen!!! Gracias por los comentarios. Sean está kawaii??? Vaya! (¿Ya ves? Te digo que debes de abrir mi club oficial de admiradoras...) ¡Bájale a tus tacos, diantre de ángel! (No tengo la culpa de ser bonito) Bonito, sí, a-ah....
Mei Ikari -- AMIGAAAAA!!! Te extraño! (Y te mando muchos besos desde acá) En verdad, Sean, eres un coqueto...
Como pueden ver, Me da mucha alegría saber de todos ustedes (A mí también). Ya saben, si tienen preguntas, no duden en hacerlas. Ya algunos de ustedes saben que las respondo en cuanto puedo y pues, este espacio es clara prueba de ello. Para todas (y todos) ustedes admiradores de Sean, de nuevo les recomiendo leer "Medianoche" pues es ahí donde se cuenta lo que pasa luego en la vida de este personaje (mi vida es una tragedia... tras otra...) Párale ya, melodramático. En serio, ¿saben lo que es tener que vivir con este todo el día? (La envidia te corroe porque no tienes tanta gente que te quiera) ¡Cállate ya! Dices puras incoherencias... En fin. Dejemos esto ya por la paz. Sean, despídete de la gente (¡SMUAK! Good night everybody!) Bueno. Comencemos con el episodio de esta vez, sale??
DISCLAIMER -- Cardcaptor Sakura y todos sus personajes pertenecen a CLAMP. Medianoche y todos sus personajes pertenecen a Rainy.
ADVERTENCIA -- Este fic puede contener situaciones o vocabulario no apto para menores de edad.
**************************************************************************** ******************************** "Bobby told Lucy the world ain't round, Drops off sharp at the edge of town. Lucy you know, this world must be flat 'cause when people leave town they never come back...
They go 90 miles an hour to the city limit sign Put the pedal to the middle before they change their mind!
They howl at the moon, shoot off a light, it's a small town, saturday night..."
- Al Ketchum, "Small Town, Saturday Night"
"Perfecto," observaba Gaiev desde el interior del templo mediante su esfera visora mientras que Kaho seguía en el mismo lugar, incapaz de moverse ante la falta de ese algo que Gaiev le había quitado, "Pronto, todas las cartas Clow estarán en nuestro poder y todo regresará a manos de quien corresponde - la tierra volverá al cielo... y los humanos volverán al lugar de donde no debieron de haber salido..." Se volvió a ver a Kaho con una gran sonrisa, "Deberías estar orgullosa; estás cooperando a finalizar el Gran Plan Divino..."
Al verla de pie en la entrada del templo, sintieron un aire frío recorrer sus espaldas, pero ninguno de ellos hizo el menor comentario al respecto. Syaoran se quedó sorprendido al ver a la misma Kaho que hacía tanto tiempo había dejado de ver, cuando Sakura logró convertirse en la dueña de las Cartas Clow. La mujer vestía el traje de sacerdotiza, con su mirada serena y su cabello flotando al viento. Detrás, el templo aguardaba en total silencio.
"Kaho Misuki?" preguntó Sean al llegar. Kaho sonrió levemente.
"Tú debes ser Sean, ¿cierto?" dijo. Sean afirmó con la cabeza. Yue y Keroberos se encontraban a los lados de Syaoran. Rati y Cronos habían abandonado al grupo, discutiendo que tenían que hacer ciertos acomodos y que luego se verían en el Templo. Kaho dio una vista a todos ellos, "Es bueno volverlos a ver," dijo refiriéndose a Keroberos, Yue y Syaoran. Los dos primeros movieron ligeramente la cabeza, sin embargo, Syaoran seguía viéndola con la misma o mayor desconfianza que tenía de ella en aquel entonces, cuando sintió su poder mágico antes de recolectar todas las cartas. La mujer avanzó con paso lento hacia ellos.
"Tenemos todo listo," dijo Kaho señalando al Templo, "Debemos convertir las cartas lo antes posible..." y dirigiéndose a Syaoran, preguntó, "¿Cuántas cartas quedan?"
Syaoran sacó las cartas que quedaban. Cada vez que una de ellas era transformada desaparecía para reunirse con sus hermanas, así que ahora sólo quedaban 11: Fight, Light, Dark, Time, Firey, Watery, Windy, Shot, Dream, Earthy y Love.
"Son pocas," dijo Kaho reflexionando en ello por un momento, "Pero serán suficientes para detener el hechizo... Primero que nada, debemos despertar el poder que reside en tí," dijo dirigiéndose a Syaoran, "Despertar el poder heredado por Clow Reed a su descendiente. Para eso, tendremos que crear un sello: El Sello Li. Síganme."
Decidieron seguirla. Keroberos se detuvo al escuchar ruidos sospechosos que venían del follaje de los árboles. Yue fue quien se detuvo y se volvió a verle, "¿Ocurre algo, Keroberos?"
"Nada... Es sólo... Estoy paranóico, eso es lo que pasa..." dijo Keroberos avanzando con paso desconfiado hacia Yue y una vez que estuvo al lado del ángel prosiguió su camino como si nada, pero en el fondo sintiendo que algo no estaba del todo bien.
"¿Tú también lo sientes?" escuchó la voz de Syaoran en su cabeza. Se detuvo sorprendido por un momento, pues el chamaco nunca se había comunicado con él por medio de la telepatía. Luego, avanzó rápidamente hacia Syaoran, quien lo miraba con rostro desconfiado, alternando entre los ojos de Kero y la espalda de Kaho.
"¿Puedes escuchar mis pensamientos?" pensó Kero.
"Los tuyos solamente. Sean los tiene herméticamente bloqueados al igual que Yue. En cuanto a esta mujer... no lo sé... es extraño..."
"Yo tendría cuidado con ella," pensó Kero volviéndose a ver a Kaho, "Tampoco tengo la seguridad de que esto sea para bien."
"Siento otras presencias aquí y no son precisamente espirituales," pensó Syaoran viendo para todos lados, como si nunca hubiese estado en el templo antes.
"Igual yo."
Llegaron hasta donde los templos formaban un círculo alrededor de un área despejada, en la parte posterior. "Este lugar será perfecto," dijo Kaho volviéndose hacia arriba, "Aquí la luna pega directamente sobre este suelo y su poder se refleja con mayor fuerza. Formaremos un círculo para purificar y de ahí partiremos para formar el Sello de Li."
"Me parece bien," dijo Sean, "Comencemos..."
"Mejor esperamos a que la luna se encuentre en buena posición," observó Yue, "La magia de Clow siempre se aumenta con los poderes de la luna..."
"Mientras tanto formaremos el círculo," dijo Syaoran. Sean movió afirmativamente la cabeza. De un salto se elevó y quedó suspendido en el aire. Yue le acompañó. Ambos señalaron el suelo con sus ídices y de ellos salieron pequeños rayos que trazaron dibujos que más bien parecían quemaduras sobre la piedra y tierra que eran parte del suelo del lugar. Kaho y los demás los observaban pacientemente. La verdad era de que no podían hacer otra cosa. Yue hizo el sello del Mago Clow mientras que Sean creó otro sello encima de ese, extraño y de caracteres diferentes, inclusive a los de Sakura. Un sello sobre otro, uno más grande que el otro; una mandala poderosa. Al finalizarla, Sean y Yue bajaron. El símbolo concordaba perfectamente con sí mismo.
"Ya está," dijo Sean, "Falta poco para que la luna salga."
"Horas, de hecho," dijo Kaho levantando la mirada, "Será mejor descanzar un poco. Va a ser una larga noche."
"Estoy de acuerdo," dijo Keroberos.
Syaoran se sentó recargado en uno de los árboles mientras que Kaho entraba a uno de los templos menores y Sean subía a uno de los techos para inspeccionar todo desde arriba. Keroberos se recostó al lado de Syaoran. "Mi presentimiento se hace cada vez más fuerte," dijo Kero con sus pensamientos. Syaoran movió afirmativamente la cabeza, "Es mejor mantener los ojos bien abiertos," dijo el joven mago, "Nunca he confiado en esta mujer."
Yue se acercó a ellos. La pose en que ambos estaban le trajo a la memoria muchos recuerdos, de cuando Clow y ellos vivían juntos; momentos felices que pensó que serían por siempre y que un buen día abrió los ojos para darse cuenta de que la cosa no era así. Su corazón dejó escapar un suspiro que venía de hace mucho tiempo.
* * * * * * * *
Sean por su parte estaba vigilando todo desde el techo, brazos cruzados al frente, mirada fija. Sus ojos se desviaron hacia su derecha, en donde una sombra comenzó a moverse. Extrañado, siguió a la sombra hasta el lago que se encontraba en el templo y una vez que estuvo en la orilla del lago, exclamó, "¡Muéstrate!"
El agua comenzó a formar una figura delicada y femenina. Sean la miraba extrañado.
"¿Quién eres tú?" preguntó.
"Mi nombre es irrelevante," dijo la mujer de agua, "Debes impedir que el descendiente de Clow se detenga en su trabajo, pase lo que pase, él debe continuar. Los guardianes se pondrán en su contra - es sólo cuestión de tiempo..."
"¿Yue y Keroberos?"
"La magia de la muchacha se debilita en ellos y necesitan una fuente para nutrirse, la misma que usan las cartas Clow, especialmente el guardián de la luna. Son presa fácil para las huestes que intentan dominar la magia de Clow."
"¿Porqué quieren hacerlo?"
"Deben confiar en su fuerza, eso es lo que el descendiente de Clow y el heredero del Hexágono deben hacer. Que nada los distraiga de su tarea, que nada los detenga. Si ellos toman el poder de las cartas, toda vida en este planeta dejará de existir pues el caos terminará y ni siquiera se librará un juicio pues las almas de todos se perderá en el limbo de la nada..."
* * * * * * * *
"Clow," murmuró.
"¿Y a tí qué te pasa?" preguntó Keroberos al verle, hecho que hizo que Yue volviera al presente un tanto sorprendido.
"Na-nada, nada," dijo volviendo su espalda a ellos. Le dolía regresar de sus recuerdos. Avanzó con paso lento hacia el círculo mágico trazado en la tierra y se quedó observándolo en silencio. Kero se sentó a su lado, viéndolo con aire de preocupación pues sentía que el ángel tenía algo atrapado en su alma (siendo ambos hermanos, tenían esa conección profunda). "¿Sabes una cosa Keroberos?" dijo Yue con la mirada perdida en la mandala, "Durante mucho tiempo estuve enojado con Clow porque aún sabiendo que su muerte era inevitable nos hizo creer lo contrario. En particular, batallé mucho para seguir adelante después de eso..."
"Tú... Dime la verdad Yue: lo amabas, ¿verdad?"
Yue bajó la cabeza sin decir palabra. Algunas veces el silencio habla volúmenes.
"Yue..."
"Aún en sueños tenía muy claro sus últimas palabras. Debo confesarte que al principio deseaba con toda mi alma que Sakura no fuera la indicada para ser la nueva dueña, pero sabía en el fondo que tú no cometerías un error al elegirla como tal... Pasó mucho tiempo antes de que renunciara a vivir en el pasado y luego de ese tiempo me di cuenta de que Sakura no quería ser realmente nuestra dueña, sino nuestra amiga, como lo fue Clow alguna vez. Y cuando por fin me di cuenta de ello, supe que Clow no se había ido nunca: Clow siempre estuvo conmigo, contigo, con Sakura, con todos y en todo momento. Fue hasta ese momento en que me sentí feliz, pues sabía que el amor de Clow... seguía ahí de alguna forma..." dijo Yue volviéndose a la luna, tratando de guardarse sus sentimientos, cosa que resultó un total fracaso pues (ante la sorpresa de Keroberos) el ángel comenzó a llorar sin realmente darse cuenta de ello, "¿Y para qué?" dijo con voz ahogada, llena de sentimientos de coraje, de desesperación, de tristeza, "Para que Sakura también se fuera y de nuevo sentir este vacío que no me ha dejado tranquilo desde el día en que Clow se fue; para sentirme vulnerable y completamente inútil ante la situación... ¡Para tener un nuevo dueño que seguramente se irá también!" exclamó bajando la cabeza y verdaderamente quebrándose. Keroberos deseó en ese momento poder abrazarlo y decirle que todo estaría bien, pero lo único que pudo decir fue...
"Yue..."
De pronto, una mano con un pañuelo se dejó ver y Yue se sorprendió. Syaoran le ofrecía el pañuelo con una mirada enternecedora. "No llores más Yue," le dijo, "Puedo comprender lo que debes estar sintiendo en estos momentos... No soy Clow, ni pretendo serlo, pero ahora te pido que seas fuerte para poder ganar esta batalla... y así recuperar a nuestra dueña... ambos..."
Yue sonrió, "Arigatou...," dijo.
"¡Awww! ¡Una escena asquerosamente conmovedora!" exclamó Rati haciendo acto de presencia junto con Sean, haciendo que los tres se volvieran a verle algo espantados. Al ver la mandala, el demonio dijo complacido, "Veo que ya han hecho todos los preparativos, ¡comencemos con esta fiestecita!"
"¿Y Cronos?" preguntó Keroberos.
"Cronos tiene que hacer una pequeña tareita antes de poder reunirse con nosotros. Digamos que es una de mis ideas más brillantes," dijo Rati con orgullo.
"Bien, iniciemos entonces," dijo Sean, "Syaoran, tú vas en el centro. Yue y Keroberos van en los circulitos de los lados. Syaoran, quiero que te concentres y dejes que el poder actúe en tí. Si tenemos la suficiente confianza uno en otro esto puede funcionar perfectamente."
"¿Y yo?" dijo Rati.
"Tú vas a darle energía a este hechizo," dijo Sean empujándolo hasta que quedaron a espaldas de Syaoran, "Desde aquí estarás perfecto. Kaho," dijo volviéndose a ver a la mujer, quien movió afirmativamente la cabeza.
"Estoy lista," dijo. Sean sonrió.
"Bien."
Una vez todos en su lugar, el joven mago cerró los ojos y comenzó a concentrarse al igual que todos los demás. Frente a él, Sean unía sus manos a manera de plegaria y comenzaba a recitar unas palabras extrañas a manera de mantra. Poco a poco, el símbolo en el piso comenzó a brillar y el viento comenzó a soplar, rodeándolos con un aura mágica. Rati estaba totalmente concentrado proporcionando energía al hechizo.
Syaoran se vio a sí mismo flotando en un limbo. Algo lo hizo levantar los brazos hacia el frente y ahí apareció su espada. De pronto, la figura de Sakura estaba frente a él, colocando sus manos sobre la espada, sonriente y bella como un ángel. Los ojos de Syaoran no podían creer que la estaba viendo. "Así como yo tuve el poder de mi estrella, tú debes tener tu poder interior. Haz de esta espada tu báculo mágico... y no pierdas la fé..."
Y ambos, en voz lenta, dijeron al unísono, "Pase lo que pase, todo estará bien..."
La espada brilló intensamente y justo en ese momento, Syaoran escuchó un grito desgarrador de dolor que lo hizo salir del trance.
***********************************************************************
¡Hola! Soy mala, ¿verdad? Estoy escribiendo esto desde mi trabajo mientras veo la putiza que les están metiendo a los Vaqueros de Dallas (30 a 0 hasta ahorita a favor de los Gigantes de Nueva York) mientras que maldigo al Canal Fox por no pasar el juego de Green Bay contra San Francisco (mismo que Green Bay va ganando 20 a 14 la última vez que vi los avances que pasan de vez en vez) En fin. Aviso que el Gran Final está a un episodio de distancia. (¡O por Dios! ¡Gigantes 37, Dallas 0! ¡Que alguien detenga esta masacre!) Prometo un final de impacto, sí que sí...
=D!
¡¡De nuevo saludos a mis queridos lectores!!
PD: El pedacito de canción lo puse porque fue esta la canción que me inspiró más en realizar este episodio.
Copyright 2002 Yaguar Media & Pandathieve Enterprises http://ice.prohosting.com/moonrain http://www.geocitites.com/Yaguarm al36662@alumnos.uacj.mx
Por Rainy
NOTAS DE LA AUTORA -- ^.^ Estoy contenta!!! Acabo de ver los reviews y no puedo creer que ya van a 19 de ellos!! 19!! Podría saltar y bailar por eso. En fin. Tomaré este espacio para contestar preguntas hechas por ustedes, mis amados lectores, con un poco de ayuda de Sean (osea yo). No se preocupen, voy a compensarlos con un largo episodio, sale? (Más te vale, sinvergüenza) ¡Cállate!
Angelmt -- Bueno, eso de poner de pareja a Sean y a Sakura SI cruzó mi mente por un momento, pero luego me arrepentí pues me gusta la pareja que forma con Syaoran (¡Mentira! ¡Lo que pasa es que le remordió la conciencia porque sabe perfectamente que Sakura nunca me haría caso!) Pero eso no quiere decir que Sean no tenga ciertos (ahem!) sentimientos por la chamaca... [¡Mentira! (*Sean se ruboriza*)] Además, eso de querer suicidarse de Sean es una característica "patonogmónica" (Sean's original trademark) Pero no te preocupes, más adelante en su vida deja de tenerla (porque eventualmente me da flojera hacerlo, así que mejor lo dejo por la paz)
Lauzip -- Primero que nada, me disculpo. Tardé siglos en actualizar y eso se debió a cargas inhumanas de trabajo escolar, bloqueo mental y una depresión de la cual hasta hace poco comencé a salir de (Eso y porque la carga de licor en sus venas era de 0... ji ji ji..) Ah! ja ja! Muy gracioso!. Me da mucho gusto que te haya gustado la descripción de la muerte de Eriol!!! :) De pronto me siento halagada! (¡Por primera vez en tu vida!) En fin. Ahh.. en cuanto a tu pregunta, Kaho habla con Gaiev, quien (si te acuerdas del Episodio 10, "El Nacimiento de las Dark Cards I: El Sueño") tomó posesión de Yukito y obligó a Yue a separarse de su identidad falsa. Gaiev entonces tiene la imagen deYukito, pero eso no quiere decir que sea Yukito, ¿capice?
Reinalt -- Joy joy joy!!! Bajé la historia a mi drive. La leeré esta noche que tengo más tiempo. Gracias por leer esta!! (¡Saluditos de mi parte!)
Dany-Chan -- Gracias por tus comentarios. Intentaré hacer de los capítulos unos más largos y sin tantos comentarios de la autora... (Ni del ángel que la acompaña)
Misao Kurayami -- Me doy cuenta de que escribí tu nombre mal la última vez!!! *^.^* Gomen!!! Gracias por los comentarios. Sean está kawaii??? Vaya! (¿Ya ves? Te digo que debes de abrir mi club oficial de admiradoras...) ¡Bájale a tus tacos, diantre de ángel! (No tengo la culpa de ser bonito) Bonito, sí, a-ah....
Mei Ikari -- AMIGAAAAA!!! Te extraño! (Y te mando muchos besos desde acá) En verdad, Sean, eres un coqueto...
Como pueden ver, Me da mucha alegría saber de todos ustedes (A mí también). Ya saben, si tienen preguntas, no duden en hacerlas. Ya algunos de ustedes saben que las respondo en cuanto puedo y pues, este espacio es clara prueba de ello. Para todas (y todos) ustedes admiradores de Sean, de nuevo les recomiendo leer "Medianoche" pues es ahí donde se cuenta lo que pasa luego en la vida de este personaje (mi vida es una tragedia... tras otra...) Párale ya, melodramático. En serio, ¿saben lo que es tener que vivir con este todo el día? (La envidia te corroe porque no tienes tanta gente que te quiera) ¡Cállate ya! Dices puras incoherencias... En fin. Dejemos esto ya por la paz. Sean, despídete de la gente (¡SMUAK! Good night everybody!) Bueno. Comencemos con el episodio de esta vez, sale??
DISCLAIMER -- Cardcaptor Sakura y todos sus personajes pertenecen a CLAMP. Medianoche y todos sus personajes pertenecen a Rainy.
ADVERTENCIA -- Este fic puede contener situaciones o vocabulario no apto para menores de edad.
**************************************************************************** ******************************** "Bobby told Lucy the world ain't round, Drops off sharp at the edge of town. Lucy you know, this world must be flat 'cause when people leave town they never come back...
They go 90 miles an hour to the city limit sign Put the pedal to the middle before they change their mind!
They howl at the moon, shoot off a light, it's a small town, saturday night..."
- Al Ketchum, "Small Town, Saturday Night"
"Perfecto," observaba Gaiev desde el interior del templo mediante su esfera visora mientras que Kaho seguía en el mismo lugar, incapaz de moverse ante la falta de ese algo que Gaiev le había quitado, "Pronto, todas las cartas Clow estarán en nuestro poder y todo regresará a manos de quien corresponde - la tierra volverá al cielo... y los humanos volverán al lugar de donde no debieron de haber salido..." Se volvió a ver a Kaho con una gran sonrisa, "Deberías estar orgullosa; estás cooperando a finalizar el Gran Plan Divino..."
Al verla de pie en la entrada del templo, sintieron un aire frío recorrer sus espaldas, pero ninguno de ellos hizo el menor comentario al respecto. Syaoran se quedó sorprendido al ver a la misma Kaho que hacía tanto tiempo había dejado de ver, cuando Sakura logró convertirse en la dueña de las Cartas Clow. La mujer vestía el traje de sacerdotiza, con su mirada serena y su cabello flotando al viento. Detrás, el templo aguardaba en total silencio.
"Kaho Misuki?" preguntó Sean al llegar. Kaho sonrió levemente.
"Tú debes ser Sean, ¿cierto?" dijo. Sean afirmó con la cabeza. Yue y Keroberos se encontraban a los lados de Syaoran. Rati y Cronos habían abandonado al grupo, discutiendo que tenían que hacer ciertos acomodos y que luego se verían en el Templo. Kaho dio una vista a todos ellos, "Es bueno volverlos a ver," dijo refiriéndose a Keroberos, Yue y Syaoran. Los dos primeros movieron ligeramente la cabeza, sin embargo, Syaoran seguía viéndola con la misma o mayor desconfianza que tenía de ella en aquel entonces, cuando sintió su poder mágico antes de recolectar todas las cartas. La mujer avanzó con paso lento hacia ellos.
"Tenemos todo listo," dijo Kaho señalando al Templo, "Debemos convertir las cartas lo antes posible..." y dirigiéndose a Syaoran, preguntó, "¿Cuántas cartas quedan?"
Syaoran sacó las cartas que quedaban. Cada vez que una de ellas era transformada desaparecía para reunirse con sus hermanas, así que ahora sólo quedaban 11: Fight, Light, Dark, Time, Firey, Watery, Windy, Shot, Dream, Earthy y Love.
"Son pocas," dijo Kaho reflexionando en ello por un momento, "Pero serán suficientes para detener el hechizo... Primero que nada, debemos despertar el poder que reside en tí," dijo dirigiéndose a Syaoran, "Despertar el poder heredado por Clow Reed a su descendiente. Para eso, tendremos que crear un sello: El Sello Li. Síganme."
Decidieron seguirla. Keroberos se detuvo al escuchar ruidos sospechosos que venían del follaje de los árboles. Yue fue quien se detuvo y se volvió a verle, "¿Ocurre algo, Keroberos?"
"Nada... Es sólo... Estoy paranóico, eso es lo que pasa..." dijo Keroberos avanzando con paso desconfiado hacia Yue y una vez que estuvo al lado del ángel prosiguió su camino como si nada, pero en el fondo sintiendo que algo no estaba del todo bien.
"¿Tú también lo sientes?" escuchó la voz de Syaoran en su cabeza. Se detuvo sorprendido por un momento, pues el chamaco nunca se había comunicado con él por medio de la telepatía. Luego, avanzó rápidamente hacia Syaoran, quien lo miraba con rostro desconfiado, alternando entre los ojos de Kero y la espalda de Kaho.
"¿Puedes escuchar mis pensamientos?" pensó Kero.
"Los tuyos solamente. Sean los tiene herméticamente bloqueados al igual que Yue. En cuanto a esta mujer... no lo sé... es extraño..."
"Yo tendría cuidado con ella," pensó Kero volviéndose a ver a Kaho, "Tampoco tengo la seguridad de que esto sea para bien."
"Siento otras presencias aquí y no son precisamente espirituales," pensó Syaoran viendo para todos lados, como si nunca hubiese estado en el templo antes.
"Igual yo."
Llegaron hasta donde los templos formaban un círculo alrededor de un área despejada, en la parte posterior. "Este lugar será perfecto," dijo Kaho volviéndose hacia arriba, "Aquí la luna pega directamente sobre este suelo y su poder se refleja con mayor fuerza. Formaremos un círculo para purificar y de ahí partiremos para formar el Sello de Li."
"Me parece bien," dijo Sean, "Comencemos..."
"Mejor esperamos a que la luna se encuentre en buena posición," observó Yue, "La magia de Clow siempre se aumenta con los poderes de la luna..."
"Mientras tanto formaremos el círculo," dijo Syaoran. Sean movió afirmativamente la cabeza. De un salto se elevó y quedó suspendido en el aire. Yue le acompañó. Ambos señalaron el suelo con sus ídices y de ellos salieron pequeños rayos que trazaron dibujos que más bien parecían quemaduras sobre la piedra y tierra que eran parte del suelo del lugar. Kaho y los demás los observaban pacientemente. La verdad era de que no podían hacer otra cosa. Yue hizo el sello del Mago Clow mientras que Sean creó otro sello encima de ese, extraño y de caracteres diferentes, inclusive a los de Sakura. Un sello sobre otro, uno más grande que el otro; una mandala poderosa. Al finalizarla, Sean y Yue bajaron. El símbolo concordaba perfectamente con sí mismo.
"Ya está," dijo Sean, "Falta poco para que la luna salga."
"Horas, de hecho," dijo Kaho levantando la mirada, "Será mejor descanzar un poco. Va a ser una larga noche."
"Estoy de acuerdo," dijo Keroberos.
Syaoran se sentó recargado en uno de los árboles mientras que Kaho entraba a uno de los templos menores y Sean subía a uno de los techos para inspeccionar todo desde arriba. Keroberos se recostó al lado de Syaoran. "Mi presentimiento se hace cada vez más fuerte," dijo Kero con sus pensamientos. Syaoran movió afirmativamente la cabeza, "Es mejor mantener los ojos bien abiertos," dijo el joven mago, "Nunca he confiado en esta mujer."
Yue se acercó a ellos. La pose en que ambos estaban le trajo a la memoria muchos recuerdos, de cuando Clow y ellos vivían juntos; momentos felices que pensó que serían por siempre y que un buen día abrió los ojos para darse cuenta de que la cosa no era así. Su corazón dejó escapar un suspiro que venía de hace mucho tiempo.
* * * * * * * *
Sean por su parte estaba vigilando todo desde el techo, brazos cruzados al frente, mirada fija. Sus ojos se desviaron hacia su derecha, en donde una sombra comenzó a moverse. Extrañado, siguió a la sombra hasta el lago que se encontraba en el templo y una vez que estuvo en la orilla del lago, exclamó, "¡Muéstrate!"
El agua comenzó a formar una figura delicada y femenina. Sean la miraba extrañado.
"¿Quién eres tú?" preguntó.
"Mi nombre es irrelevante," dijo la mujer de agua, "Debes impedir que el descendiente de Clow se detenga en su trabajo, pase lo que pase, él debe continuar. Los guardianes se pondrán en su contra - es sólo cuestión de tiempo..."
"¿Yue y Keroberos?"
"La magia de la muchacha se debilita en ellos y necesitan una fuente para nutrirse, la misma que usan las cartas Clow, especialmente el guardián de la luna. Son presa fácil para las huestes que intentan dominar la magia de Clow."
"¿Porqué quieren hacerlo?"
"Deben confiar en su fuerza, eso es lo que el descendiente de Clow y el heredero del Hexágono deben hacer. Que nada los distraiga de su tarea, que nada los detenga. Si ellos toman el poder de las cartas, toda vida en este planeta dejará de existir pues el caos terminará y ni siquiera se librará un juicio pues las almas de todos se perderá en el limbo de la nada..."
* * * * * * * *
"Clow," murmuró.
"¿Y a tí qué te pasa?" preguntó Keroberos al verle, hecho que hizo que Yue volviera al presente un tanto sorprendido.
"Na-nada, nada," dijo volviendo su espalda a ellos. Le dolía regresar de sus recuerdos. Avanzó con paso lento hacia el círculo mágico trazado en la tierra y se quedó observándolo en silencio. Kero se sentó a su lado, viéndolo con aire de preocupación pues sentía que el ángel tenía algo atrapado en su alma (siendo ambos hermanos, tenían esa conección profunda). "¿Sabes una cosa Keroberos?" dijo Yue con la mirada perdida en la mandala, "Durante mucho tiempo estuve enojado con Clow porque aún sabiendo que su muerte era inevitable nos hizo creer lo contrario. En particular, batallé mucho para seguir adelante después de eso..."
"Tú... Dime la verdad Yue: lo amabas, ¿verdad?"
Yue bajó la cabeza sin decir palabra. Algunas veces el silencio habla volúmenes.
"Yue..."
"Aún en sueños tenía muy claro sus últimas palabras. Debo confesarte que al principio deseaba con toda mi alma que Sakura no fuera la indicada para ser la nueva dueña, pero sabía en el fondo que tú no cometerías un error al elegirla como tal... Pasó mucho tiempo antes de que renunciara a vivir en el pasado y luego de ese tiempo me di cuenta de que Sakura no quería ser realmente nuestra dueña, sino nuestra amiga, como lo fue Clow alguna vez. Y cuando por fin me di cuenta de ello, supe que Clow no se había ido nunca: Clow siempre estuvo conmigo, contigo, con Sakura, con todos y en todo momento. Fue hasta ese momento en que me sentí feliz, pues sabía que el amor de Clow... seguía ahí de alguna forma..." dijo Yue volviéndose a la luna, tratando de guardarse sus sentimientos, cosa que resultó un total fracaso pues (ante la sorpresa de Keroberos) el ángel comenzó a llorar sin realmente darse cuenta de ello, "¿Y para qué?" dijo con voz ahogada, llena de sentimientos de coraje, de desesperación, de tristeza, "Para que Sakura también se fuera y de nuevo sentir este vacío que no me ha dejado tranquilo desde el día en que Clow se fue; para sentirme vulnerable y completamente inútil ante la situación... ¡Para tener un nuevo dueño que seguramente se irá también!" exclamó bajando la cabeza y verdaderamente quebrándose. Keroberos deseó en ese momento poder abrazarlo y decirle que todo estaría bien, pero lo único que pudo decir fue...
"Yue..."
De pronto, una mano con un pañuelo se dejó ver y Yue se sorprendió. Syaoran le ofrecía el pañuelo con una mirada enternecedora. "No llores más Yue," le dijo, "Puedo comprender lo que debes estar sintiendo en estos momentos... No soy Clow, ni pretendo serlo, pero ahora te pido que seas fuerte para poder ganar esta batalla... y así recuperar a nuestra dueña... ambos..."
Yue sonrió, "Arigatou...," dijo.
"¡Awww! ¡Una escena asquerosamente conmovedora!" exclamó Rati haciendo acto de presencia junto con Sean, haciendo que los tres se volvieran a verle algo espantados. Al ver la mandala, el demonio dijo complacido, "Veo que ya han hecho todos los preparativos, ¡comencemos con esta fiestecita!"
"¿Y Cronos?" preguntó Keroberos.
"Cronos tiene que hacer una pequeña tareita antes de poder reunirse con nosotros. Digamos que es una de mis ideas más brillantes," dijo Rati con orgullo.
"Bien, iniciemos entonces," dijo Sean, "Syaoran, tú vas en el centro. Yue y Keroberos van en los circulitos de los lados. Syaoran, quiero que te concentres y dejes que el poder actúe en tí. Si tenemos la suficiente confianza uno en otro esto puede funcionar perfectamente."
"¿Y yo?" dijo Rati.
"Tú vas a darle energía a este hechizo," dijo Sean empujándolo hasta que quedaron a espaldas de Syaoran, "Desde aquí estarás perfecto. Kaho," dijo volviéndose a ver a la mujer, quien movió afirmativamente la cabeza.
"Estoy lista," dijo. Sean sonrió.
"Bien."
Una vez todos en su lugar, el joven mago cerró los ojos y comenzó a concentrarse al igual que todos los demás. Frente a él, Sean unía sus manos a manera de plegaria y comenzaba a recitar unas palabras extrañas a manera de mantra. Poco a poco, el símbolo en el piso comenzó a brillar y el viento comenzó a soplar, rodeándolos con un aura mágica. Rati estaba totalmente concentrado proporcionando energía al hechizo.
Syaoran se vio a sí mismo flotando en un limbo. Algo lo hizo levantar los brazos hacia el frente y ahí apareció su espada. De pronto, la figura de Sakura estaba frente a él, colocando sus manos sobre la espada, sonriente y bella como un ángel. Los ojos de Syaoran no podían creer que la estaba viendo. "Así como yo tuve el poder de mi estrella, tú debes tener tu poder interior. Haz de esta espada tu báculo mágico... y no pierdas la fé..."
Y ambos, en voz lenta, dijeron al unísono, "Pase lo que pase, todo estará bien..."
La espada brilló intensamente y justo en ese momento, Syaoran escuchó un grito desgarrador de dolor que lo hizo salir del trance.
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¡Hola! Soy mala, ¿verdad? Estoy escribiendo esto desde mi trabajo mientras veo la putiza que les están metiendo a los Vaqueros de Dallas (30 a 0 hasta ahorita a favor de los Gigantes de Nueva York) mientras que maldigo al Canal Fox por no pasar el juego de Green Bay contra San Francisco (mismo que Green Bay va ganando 20 a 14 la última vez que vi los avances que pasan de vez en vez) En fin. Aviso que el Gran Final está a un episodio de distancia. (¡O por Dios! ¡Gigantes 37, Dallas 0! ¡Que alguien detenga esta masacre!) Prometo un final de impacto, sí que sí...
=D!
¡¡De nuevo saludos a mis queridos lectores!!
PD: El pedacito de canción lo puse porque fue esta la canción que me inspiró más en realizar este episodio.
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