Kenshin y co. no me pertenecen, qué lástima, me gustan tanto...
Se me has estado quejando porque mis capítulos son cortos. Pero mi otra historia nadie la lee y tiene capítulos muy largos, entonces se me ocurrió que esa era la razón. Igual voy a tratar de alargarlos un poco.
'...' Pensamiento
"..." Diálogo
-------------------------------------------
Capítulo 4_ Ya no se qué hacer contigo...
La mañana siguiente un cielo despejado iluminaba todo maravillosamente según Kaoru, y 'maldita sea, por qué no podía estar lloviendo' según Kenshin.
Antes del almuerzo llegó Sanosuke. 'Qué raro, a tiempo para comer. Como si con Kenshin no me alcanzara, ahora tendré que darle explicaciones a Sanosuke' Pensó Kaoru. Pero afortunadamente Sanosuke era solo una ayuda de Megumi
"Hey, Jou-chan, la zorra me dijo que fueras a verla después de comer, y Kenshin, me pidió que te diera esta ropa sucia" dijo el luchador tirando una gran bolsa al suelo "dijo que por favor la tuvieras lista para la tarde porque nosequé de la clínica."
"¡¿Oro?! ¿Es necesario que yo haga todo eso?"
"Vamos Kenshin, es solo un pequeño favor, además Sano puede ayudarte"
"¿¿Ehh?? ¡Estás loca! No lavaría esa ropa ni aunque me dieran de comer por 4 días seguidos."
"De hecho te damos de comer todas los días, así que más te vale que ayudes a Kenshin porque puede ser que tu suerte termine!!!" Replicó Kaoru cada vez más enojada.
Después del almuerzo Kaoru echó un vistazo a los dos hombres: Sanosuke mascullaba obscenidades entre dientes, seguramente maldiciéndolas a ella y a Megumi, mientras frotaba con fuerza una gran sábana blanca "¡Sanosuke! Ten cuidado con esa ropa, no queremos que le hagas un agujero" le dijo la chica para hacerlo enojar. Kenshin, sin embargo, tenía una actitud mucho más calma, su mirada triste posada sobre las prendas que lavaba con demasiada suavidad. Kaoru seguía preguntándose por qué actuaba de esa manera, qué lo preocupaba tanto, qué podía hacer ella para alegrarlo sin dejar de lado el regalo, ya había sido empezado y no iba a dejarlo por la mitad.
"Kenshin, estaré de vuelta en 4 horas, por favor fíjate que Yahiko practique por su cuenta hasta que yo llegue" le dijo acercándose" y prepárate, hoy empezaremos las clases de cocina, ¿recuerdas?"
"Hai. Srta. Kaoru, cuídese mucho."
Kaoru dejó el dojo pensativa, pero se le ocurrió una idea para que Kenshin se alegrara, y siguió su camino hacia la casa de Katsu, no sin antes pasar por la cínica a agradecerle a Megumi el favor.
Sanosuke, después de maldecir varias veces a las dos mujeres que lo habían puesto a trabajar, se dio cuenta del estado de Kenshin pero por más que insistiera el pelirrojo no le daba ni una pequeña pista.
"Kenshin, ya no soporto tu rostro de pobre idiota, mejor dime lo que te pasa y ya"
"Creo que estoy empezando a sentirme algo ofendido Sano, por favor entiende que no me pasa nada importante"
"¡¡Ahá!! Con que eso era, ¿eh? Te preocupa tu relación con jou-chan"
"¡¡¿¿EEhhhhhh??!! Sessha no es tan obvio, ¿o sí?"
"Perfecto, ahora SÍ LO SE, es una buena táctica, ¿no?"
"¡¡¿¿O sea que no te habías dado cuenta realmente??!!"
"Claro que no, contigo nunca se sabe. Pero cuéntame qué es lo que pasa."
"Oh, nada importante, solo me preocupa que pase demasiado tiempo afuera, tu sabes, puede sucederle algo."
"No creeré eso Kenshin, no soy tan idiota, vamos..."
"P-pero... ¿qué otra cosa puede ser?"
"No lo se... tal vez ella quiere cocinar esta noche..." Kenshin lo miró con cara de 'qué-idiota' " o tal vez te pidió que salieras a trabajar porque ya no sabe cómo mantener el dojo, o te pidió que te casaras con ella y tu no quieres, o está engañándote con otro tipo..." Sanosuke bromeaba, pero cuando vio la expresión de Kenshin con lo último que dijo se dio cuenta de que el problema era serio.
"No me digas que Jou-chan... ¡¡Cómo se atreve!! ¿Te deja aquí lavando ropa y sale a 'divertirse' con otro tipo? ¿Quién es, Kenshin? ¡Ya mismo iré a darle una golpiza!"
"Cálmate, Sano, no podemos estar tan seguros, solo la vi salir de su casa..."
"¿De su casa? ¡¡Kenshin esto es intolerable!!"
"Sano, ella no me debe ninguna explicación, no hay nada entre nosotros..."
"¿Nada? ¡¿Nada?! ¡¡Por dios Kenshin, viven en la misma casa, tienen un niño, prácticamente están casados!!"
Kenshin no quería alterarse, pero Sano le metía esas ideas en la cabeza y no dejaba de insistir, por lo que Kenshin empezó a pensar que tenía razón, que ella estaba engañándolo, que solo lo usaba para cuidar la casa, que en cualquier momento lo echaría sin siquiera dar explicaciones, que había que matar al maldito que la seducía...
"Vamos" dijo Kenshin con un brillo ámbar en los ojos.
"¡Eso es Kenshin! ¡Debes luchar por lo que es tuyo!"
20 minutos más tarde llegaban a la casa de Katsu.
"Kenshin, ¿estás seguro de que es aquí? Es decir, no se si estás enterado pero esta es la casa de Katsu."
"Él estaba aquí cuando ella salió" con eso Sano quedó convencido, así que se dispuso a tocar la puerta hasta que un sorprendido Katsu salió a recibirlos.
"Maldito, dónde está, dónde la escondiste!!!" Gritaba Sano.
"¿Quién? ¿De qué hablas Sano? No hay nadie aquí, puedes revisar si quieres" dijo Katsu liberando el paso de la puerta. Afortunadamente Kaoru se había ido 5 min. atrás y el regalo estaba guardado.
Katsu observó mientras los dos revisaban cada rincón. Kenshin se agachó y pareció buscar algo en el piso, luego lo miró con ojos asesinos. 'Ese tipo está volviéndose loco por Kaoru. Pero supongo que no volverán a molestar si no encuentran nada' pensó el dueño de casa.
Kenshin y Sano se retiraron disculpándose por la intromisión, aunque había algo en Kenshin que daba a entender que no hablaba en serio.
"Está bien, no se preocupen. Nos vemos luego." dijo Katsu cerrando la puerta una vez que ellos salieron.
"¿Nos vemos luego? ¿A qué se refería? Bueno, no importa. Parece que estabas equivocado, ¿eh, Kenshin?"
"Tal vez, Sano, tal vez." respondió el pelirrojo volviendo a la actitud depresiva. 'No puedo culparla si prefiere a otro, pero me duele tanto... ¿Qué hacer?'
Al llegar al dojo Kaoru los esperaba enojada.
"¡¡Kenshin!! ¡Te dije que vigilaras a Yahiko! ¡Ni siquiera terminaron la ropa para Megumi!" Comenzó a gritar la chica. Pero en ese momento vio la cara de Kenshin y de dio cuenta de que no había mejorado desde ese mediodía.
"Oye, cálmate Jou-chan, ¿por qué nosotros tenemos que trabajar mientras tu sales a divertirte?"
"¿¿Ehhehhhehh?? ¡¿Divertirme?! ¡No tienes idea de lo que estuve haciendo! ¡Desaparece de mi vista antes de que te golpee, y llévate las cosas de Megumi, más vale que se las des y obedezcas cualquier cosa que ella te diga o te irá muy mal, Sanozuke Sagara!" Kaoru gritaba mientras lo empujaba hacia la puerta hasta que el joven estuvo fuera y cerró tirándole una gran bolsa sobre la cabeza.
Inmediatamente se dio vuelta y buscó a Kenshin. Y lo vio ya dispuesto a continuar su lavado. '¿Qué se supone que hago con él ahora? Está peor que antes...'
"¡Kenshin!" comenzó a acercarse y puso su mano sobre el hombro del pelirrojo dulcemente "Kenshin, no estoy enojada contigo. Siempre estás haciendo las cosas de la casa, se que te mereces un descanso"
"Está bien, srta. Kaoru, no me molesta"
"Sé que no te molesta, pero no debí ponerme así. Lo siento. Ahora deja eso, debes enseñarme a cocinar, ¿recuerdas? Además hoy tendremos invitados y debemos empezar temprano a preparar todo."
"¿Quiénes vendrán hoy?"
"Megumi, Sano (que sería mejor que no se apareciera), Tae, Katsu..."
Kenshin reaccionó levemente con ese nombre pero actuó normalmente y Kaoru no se dio cuenta.
Así los dos fueron a la cocina y empezó la clase. Las manos de Kenshin se movían ágilmente y a Kaoru le costaba mucho seguirlo, especialmente porque él estaba más concentrado en sus propios pensamientos que en ayudarla.
'A eso se refería Katsu con "nos vemos luego". Y Kaoru... debe quererlo para tratar de cocinar e invitarlo a probar su comida, está esforzándose mucho por mejorar. Será muy difícil actuar con naturalidad esta noche, creo que...'
"¡¡¡Aaaaayyyyyyy!!!" gritó Kaoru interrumpiendo los pensamientos del pelirrojo. Se había hecho un corte y el dedo le sangraba.
Kenshin inmediatamente tomó su mano y miró la herida con preocupación. Luego acercó a Kaoru hasta un recipiente con agua y como no tenía ningún trapo a mano usó su propia camisa para limpiar la sangre. Kaoru observaba todos sus movimientos amorosamente. Se sentía tan bien a su lado, tan segura, tan protegida. Kenshin acababa de arruinar su único gi para ayudarla y hubiera hecho cualquier otra cosa si hubiera sido necesario. Y ella no podía ayudarlo con su melancolía. Entonces se sintió tan inútil que no pudo evitar soltar unas lágrimas. Cuando Kenshin la vio pensó que era por la herida y se acercó para limpiarle las lágrimas con el pulgar, tomando su rostro con el resto de la mano.
"Esta bien, Srta. Kaoru, es un pequeño corte, yo terminaré la cena, no se preocupe."
Una vez más Kaoru se dio cuenta de cuánto él se preocupaba por ella. Lo miró a los ojos y se dio cuenta de que solo estaban a unos pocos centímetros el uno del otro. "Kenshin..." sus ojos brillaban "Kenshin, déjame ayudarte, por favor dime lo que te sucede." Kenshin bajó la mirada pero no dejó sostener el rostro de la chica "Kenshin... por favor... odio verte así". Kenshin no respondía. Entonces Kaoru lo abrazó fuertemente, posó su cabeza sobre el pecho del shockeado Kenshin, y esperó a que él le devolviera el gesto. Finalmente él respondió al abrazo y permanecieron así un largo rato, los dos llorando silenciosamente: Kaoru por no poder ayudar a Kenshin, y Kenshin porque cada vez se sentía más herido con la actitud desconcertante de Kaoru. 'Ya no puedo entender. Por la tarde está con otro. Luego viene y me trata con tanto... cariño. Te amo Kaoru.'
----------------------
¿Qué será lo que encontró Kenshin en el piso de la casa de Katsu?
¿Cuáles serán los planes de Kaoru al invitar a Katsu a cenar?
¡Esto y mucho más, en el próximo capítulo, a la misma batihora, por el mismo baticanal! (¿o debería decir en la misma Kenshistoria por la misma Kenshipágina o algo así?).
Manden reviews!!!
Se me has estado quejando porque mis capítulos son cortos. Pero mi otra historia nadie la lee y tiene capítulos muy largos, entonces se me ocurrió que esa era la razón. Igual voy a tratar de alargarlos un poco.
'...' Pensamiento
"..." Diálogo
-------------------------------------------
Capítulo 4_ Ya no se qué hacer contigo...
La mañana siguiente un cielo despejado iluminaba todo maravillosamente según Kaoru, y 'maldita sea, por qué no podía estar lloviendo' según Kenshin.
Antes del almuerzo llegó Sanosuke. 'Qué raro, a tiempo para comer. Como si con Kenshin no me alcanzara, ahora tendré que darle explicaciones a Sanosuke' Pensó Kaoru. Pero afortunadamente Sanosuke era solo una ayuda de Megumi
"Hey, Jou-chan, la zorra me dijo que fueras a verla después de comer, y Kenshin, me pidió que te diera esta ropa sucia" dijo el luchador tirando una gran bolsa al suelo "dijo que por favor la tuvieras lista para la tarde porque nosequé de la clínica."
"¡¿Oro?! ¿Es necesario que yo haga todo eso?"
"Vamos Kenshin, es solo un pequeño favor, además Sano puede ayudarte"
"¿¿Ehh?? ¡Estás loca! No lavaría esa ropa ni aunque me dieran de comer por 4 días seguidos."
"De hecho te damos de comer todas los días, así que más te vale que ayudes a Kenshin porque puede ser que tu suerte termine!!!" Replicó Kaoru cada vez más enojada.
Después del almuerzo Kaoru echó un vistazo a los dos hombres: Sanosuke mascullaba obscenidades entre dientes, seguramente maldiciéndolas a ella y a Megumi, mientras frotaba con fuerza una gran sábana blanca "¡Sanosuke! Ten cuidado con esa ropa, no queremos que le hagas un agujero" le dijo la chica para hacerlo enojar. Kenshin, sin embargo, tenía una actitud mucho más calma, su mirada triste posada sobre las prendas que lavaba con demasiada suavidad. Kaoru seguía preguntándose por qué actuaba de esa manera, qué lo preocupaba tanto, qué podía hacer ella para alegrarlo sin dejar de lado el regalo, ya había sido empezado y no iba a dejarlo por la mitad.
"Kenshin, estaré de vuelta en 4 horas, por favor fíjate que Yahiko practique por su cuenta hasta que yo llegue" le dijo acercándose" y prepárate, hoy empezaremos las clases de cocina, ¿recuerdas?"
"Hai. Srta. Kaoru, cuídese mucho."
Kaoru dejó el dojo pensativa, pero se le ocurrió una idea para que Kenshin se alegrara, y siguió su camino hacia la casa de Katsu, no sin antes pasar por la cínica a agradecerle a Megumi el favor.
Sanosuke, después de maldecir varias veces a las dos mujeres que lo habían puesto a trabajar, se dio cuenta del estado de Kenshin pero por más que insistiera el pelirrojo no le daba ni una pequeña pista.
"Kenshin, ya no soporto tu rostro de pobre idiota, mejor dime lo que te pasa y ya"
"Creo que estoy empezando a sentirme algo ofendido Sano, por favor entiende que no me pasa nada importante"
"¡¡Ahá!! Con que eso era, ¿eh? Te preocupa tu relación con jou-chan"
"¡¡¿¿EEhhhhhh??!! Sessha no es tan obvio, ¿o sí?"
"Perfecto, ahora SÍ LO SE, es una buena táctica, ¿no?"
"¡¡¿¿O sea que no te habías dado cuenta realmente??!!"
"Claro que no, contigo nunca se sabe. Pero cuéntame qué es lo que pasa."
"Oh, nada importante, solo me preocupa que pase demasiado tiempo afuera, tu sabes, puede sucederle algo."
"No creeré eso Kenshin, no soy tan idiota, vamos..."
"P-pero... ¿qué otra cosa puede ser?"
"No lo se... tal vez ella quiere cocinar esta noche..." Kenshin lo miró con cara de 'qué-idiota' " o tal vez te pidió que salieras a trabajar porque ya no sabe cómo mantener el dojo, o te pidió que te casaras con ella y tu no quieres, o está engañándote con otro tipo..." Sanosuke bromeaba, pero cuando vio la expresión de Kenshin con lo último que dijo se dio cuenta de que el problema era serio.
"No me digas que Jou-chan... ¡¡Cómo se atreve!! ¿Te deja aquí lavando ropa y sale a 'divertirse' con otro tipo? ¿Quién es, Kenshin? ¡Ya mismo iré a darle una golpiza!"
"Cálmate, Sano, no podemos estar tan seguros, solo la vi salir de su casa..."
"¿De su casa? ¡¡Kenshin esto es intolerable!!"
"Sano, ella no me debe ninguna explicación, no hay nada entre nosotros..."
"¿Nada? ¡¿Nada?! ¡¡Por dios Kenshin, viven en la misma casa, tienen un niño, prácticamente están casados!!"
Kenshin no quería alterarse, pero Sano le metía esas ideas en la cabeza y no dejaba de insistir, por lo que Kenshin empezó a pensar que tenía razón, que ella estaba engañándolo, que solo lo usaba para cuidar la casa, que en cualquier momento lo echaría sin siquiera dar explicaciones, que había que matar al maldito que la seducía...
"Vamos" dijo Kenshin con un brillo ámbar en los ojos.
"¡Eso es Kenshin! ¡Debes luchar por lo que es tuyo!"
20 minutos más tarde llegaban a la casa de Katsu.
"Kenshin, ¿estás seguro de que es aquí? Es decir, no se si estás enterado pero esta es la casa de Katsu."
"Él estaba aquí cuando ella salió" con eso Sano quedó convencido, así que se dispuso a tocar la puerta hasta que un sorprendido Katsu salió a recibirlos.
"Maldito, dónde está, dónde la escondiste!!!" Gritaba Sano.
"¿Quién? ¿De qué hablas Sano? No hay nadie aquí, puedes revisar si quieres" dijo Katsu liberando el paso de la puerta. Afortunadamente Kaoru se había ido 5 min. atrás y el regalo estaba guardado.
Katsu observó mientras los dos revisaban cada rincón. Kenshin se agachó y pareció buscar algo en el piso, luego lo miró con ojos asesinos. 'Ese tipo está volviéndose loco por Kaoru. Pero supongo que no volverán a molestar si no encuentran nada' pensó el dueño de casa.
Kenshin y Sano se retiraron disculpándose por la intromisión, aunque había algo en Kenshin que daba a entender que no hablaba en serio.
"Está bien, no se preocupen. Nos vemos luego." dijo Katsu cerrando la puerta una vez que ellos salieron.
"¿Nos vemos luego? ¿A qué se refería? Bueno, no importa. Parece que estabas equivocado, ¿eh, Kenshin?"
"Tal vez, Sano, tal vez." respondió el pelirrojo volviendo a la actitud depresiva. 'No puedo culparla si prefiere a otro, pero me duele tanto... ¿Qué hacer?'
Al llegar al dojo Kaoru los esperaba enojada.
"¡¡Kenshin!! ¡Te dije que vigilaras a Yahiko! ¡Ni siquiera terminaron la ropa para Megumi!" Comenzó a gritar la chica. Pero en ese momento vio la cara de Kenshin y de dio cuenta de que no había mejorado desde ese mediodía.
"Oye, cálmate Jou-chan, ¿por qué nosotros tenemos que trabajar mientras tu sales a divertirte?"
"¿¿Ehhehhhehh?? ¡¿Divertirme?! ¡No tienes idea de lo que estuve haciendo! ¡Desaparece de mi vista antes de que te golpee, y llévate las cosas de Megumi, más vale que se las des y obedezcas cualquier cosa que ella te diga o te irá muy mal, Sanozuke Sagara!" Kaoru gritaba mientras lo empujaba hacia la puerta hasta que el joven estuvo fuera y cerró tirándole una gran bolsa sobre la cabeza.
Inmediatamente se dio vuelta y buscó a Kenshin. Y lo vio ya dispuesto a continuar su lavado. '¿Qué se supone que hago con él ahora? Está peor que antes...'
"¡Kenshin!" comenzó a acercarse y puso su mano sobre el hombro del pelirrojo dulcemente "Kenshin, no estoy enojada contigo. Siempre estás haciendo las cosas de la casa, se que te mereces un descanso"
"Está bien, srta. Kaoru, no me molesta"
"Sé que no te molesta, pero no debí ponerme así. Lo siento. Ahora deja eso, debes enseñarme a cocinar, ¿recuerdas? Además hoy tendremos invitados y debemos empezar temprano a preparar todo."
"¿Quiénes vendrán hoy?"
"Megumi, Sano (que sería mejor que no se apareciera), Tae, Katsu..."
Kenshin reaccionó levemente con ese nombre pero actuó normalmente y Kaoru no se dio cuenta.
Así los dos fueron a la cocina y empezó la clase. Las manos de Kenshin se movían ágilmente y a Kaoru le costaba mucho seguirlo, especialmente porque él estaba más concentrado en sus propios pensamientos que en ayudarla.
'A eso se refería Katsu con "nos vemos luego". Y Kaoru... debe quererlo para tratar de cocinar e invitarlo a probar su comida, está esforzándose mucho por mejorar. Será muy difícil actuar con naturalidad esta noche, creo que...'
"¡¡¡Aaaaayyyyyyy!!!" gritó Kaoru interrumpiendo los pensamientos del pelirrojo. Se había hecho un corte y el dedo le sangraba.
Kenshin inmediatamente tomó su mano y miró la herida con preocupación. Luego acercó a Kaoru hasta un recipiente con agua y como no tenía ningún trapo a mano usó su propia camisa para limpiar la sangre. Kaoru observaba todos sus movimientos amorosamente. Se sentía tan bien a su lado, tan segura, tan protegida. Kenshin acababa de arruinar su único gi para ayudarla y hubiera hecho cualquier otra cosa si hubiera sido necesario. Y ella no podía ayudarlo con su melancolía. Entonces se sintió tan inútil que no pudo evitar soltar unas lágrimas. Cuando Kenshin la vio pensó que era por la herida y se acercó para limpiarle las lágrimas con el pulgar, tomando su rostro con el resto de la mano.
"Esta bien, Srta. Kaoru, es un pequeño corte, yo terminaré la cena, no se preocupe."
Una vez más Kaoru se dio cuenta de cuánto él se preocupaba por ella. Lo miró a los ojos y se dio cuenta de que solo estaban a unos pocos centímetros el uno del otro. "Kenshin..." sus ojos brillaban "Kenshin, déjame ayudarte, por favor dime lo que te sucede." Kenshin bajó la mirada pero no dejó sostener el rostro de la chica "Kenshin... por favor... odio verte así". Kenshin no respondía. Entonces Kaoru lo abrazó fuertemente, posó su cabeza sobre el pecho del shockeado Kenshin, y esperó a que él le devolviera el gesto. Finalmente él respondió al abrazo y permanecieron así un largo rato, los dos llorando silenciosamente: Kaoru por no poder ayudar a Kenshin, y Kenshin porque cada vez se sentía más herido con la actitud desconcertante de Kaoru. 'Ya no puedo entender. Por la tarde está con otro. Luego viene y me trata con tanto... cariño. Te amo Kaoru.'
----------------------
¿Qué será lo que encontró Kenshin en el piso de la casa de Katsu?
¿Cuáles serán los planes de Kaoru al invitar a Katsu a cenar?
¡Esto y mucho más, en el próximo capítulo, a la misma batihora, por el mismo baticanal! (¿o debería decir en la misma Kenshistoria por la misma Kenshipágina o algo así?).
Manden reviews!!!
