Capítulo 2: Entrenar es difícil
-¡¡Detente!!- gritó Vice mientras era derribada por Mature. Pero esta no la escuchaba, solo la azotaba contra el piso y le arañaba la cara. Vice se percató de un detalle que no había visto antes: el reflejo en los ojos de Mature. ¿Pero qué había de raro en ellos? Normalmente el reflejo debería ser el de ella misma, pero esta vez el reflejo era el símbolo de Orochi. -¿Qué diablos?- fue lo último que alcanzó a decir Vice antes de desmayarse. -Listo- gruñó Mature con una voz de ultratumba. Entró al bar y buscó a la pareja que vio hace unos momentos, pero no estaban en ninguna parte. Aún en su estado "bersek" (o es berserk?), Mature saltó sobre una mesa, los ocupantes lanzaron un grito al ver la horrenda apariencia de la mujer e intentaron derribarla en vano. Mature comenzó a recitar frases en un extraño idioma que sonaba como el japonés. -"Mi dios Orochi vendrá sobre la tierra y acabará con ustedes"- gruñó Mature con una voz masculina- "sufrirán el dolor de sus pecados, nada ni nada podrá librarlos, Orochi limpiará la tierra de ustedes, patéticos humanos". La gente del bar (al menos los que no estaban tan borrachos :P) intentó salir, pero las puertas no abrían. "Es una bruja" exclamó alguien. Mature saltó sobre el hombre que la llamó bruja y lo destrozó.
*********** Vice seguía inconsciente. En su estado había tenido sueños muy extraños, pero a la vez muy reales. Por ejemplo se veía a si misma dentro de un submarino, a su lado una pantera y frente a ella un hombre, pero no podía resolver las facciones de su cara. U otro donde veía a un hombre de cabellos rojos entrenando en un bosque. Aunque sabía que eran solo sueños, algo le decía que eran sueños premonitorios.
***********
-Ya habían pasado más de 30 minutos desde que Mature entró al bar. Ya no quedaba nadie con vida..... o eso es lo que ella creía. -Bien hecho- se escuchó una voz femenina, como un eco. -Eres una digna representante de nuestro señor Orochi- Mature logró reconocer esta voz. "Goenitz" se limitó a gruñir. -Impresionante- otra voz masculina sonó en el bar. Tres figuras se acercaron a Mature, Goenitz; una mujer de cabello morado, curvilínea figura y mirada maliciosa; un hombre alto, fornido, de cabello blanco y facciones juveniles. Todos llevaban unas túnicas azules muy adornadas. -Lo has hecho más que bien, Mature- Goenitz la miró y nuevamente ese fulgor apareció en sus ojos. -Lamentablemente aún te queda una prueba- la mujer interrumpió a Goenitz y dio un paso adelante. El hombre la imitó. -Si nos vences, vivirás. Si te vencemos, morirás lenta y dolorosamente- dijo el hombre con un tono amenazador. -¿De qué estás hablando, Tohido?- Goenitz subió su tono y dio un gesto de desaprobación. -Silencio, Goenitz. Ahora Mature, lucharás contra mí y contra Lya. Ahora, prepá... -¡¡ESO NUNCA!!- exclamó enojado Goenitz -¡ELLA ES UN DIAMANTE EMBRUTO!! -¡Ya cállate!- gritó Lya, y Goenitz quedó estático. Comencemos.
Mature corrió hacia Tohido, ejecutó un Death Row, pero Lya la golpeó en la cabeza con una botella. Mature se levantó como si nada y se abalanzó sobre Lya con un Dispair. Tohido saltó sobre las mujeres y lanzó un golpe al suelo. Lya recibió todo el impacto, levantó a Mature y la lanzó por los aires. -¡¡TEN CUIDADO, ESTÚPIDO!!- Lya abofeteó a Tohido y este reaccionó de forma mucho más violenta de lo esperado. -Cállate, perra- Tohido levantó a Lya por el cuello y comenzó a asfixiarla. Mature aprovechó la oportunidad y comenzó a rasgarle la espalda con sus afiladas uñas. -Muere- susurró Tohido antes de aplicar más presión sobre el cuello de Lya. -Maldito- fue lo último que dijo Lya antes de morir. Tohido la dejó caer, pero jamás vio a Mature corriendo hacia él y nunca escuchó su risa. Mature ejecutó un Heaven Gates sobre Tohido y este cayó estruendosamente sobre unas mesas. -Más fuerte de lo que creí- se limitó a decir, humillado y furioso. -Goenitz- gruñó nuevamente. Mature siguió sus ataques con furia, Death Row, Dispair, arañazos múltiples. Tohido no pudo atacar de forma exitosa y quedó con múltiples fracturas, pero aún así se mantenía de pie. -¡Perra!- exclamó Tohido mientras un aura roja aparecía a su alrededor. -Mature, mátalo- Goenitz ya estaba volviendo a la normalidad. Tohido solo miró a Goenitz, desconcertado. Y fue lo último que vio. -Bien hecho, Mature. Te devuelvo tu cordura- y dicho esto Mature volvió a la normalidad. Luego se desmayó. "Iré a ver a Vice" pensó Goenitz y abrió la puerta con suavidad.
*************
-Levántate, ojos de rubí- ordenó Goenitz. -¿Dónde está Mature?- dijo Vice con dificultad. -Está en el bar. Me demostró que tiene mucho más potencial de lo que yo creía. Y ahora te toca a ti. -No voy a pelear contigo, "Guonitz" -¡GOENITZ! Y no, no vas a pelear conmigo, harás algo mucho más divertido- Goenitz alzó su mano, y él y Vice fueron elevados por un huracán. -¿¡No que nos ibas a visitar en un par de días!?- preguntó Vice mientras daba una última mirada al bar. -¡Para mi, el dios Orochi y los otros 3 reyes celestiales las horas humanas son días para nosotros!
Volaron rápidamente hasta llegar a un jardín. Descendieron. Un estanque con muchas carpas anaranjadas. Un aroma a jazmines y muchos árboles de cerezo les dieron la bienvenida. Vice se acercó al estanque, jugueteó con el agua y le lanzó una mirada de felicidad a Goenitz. Este solo le respondió con una leve sonrisa, imperceptible. -¿Qué es este lugar?- Vice cambió su mirada al decir estas palabras. -Es la mansión donde te entretendrás toda la noche- nuevamente aquel fulgor azul apareció en los ojos de Goenitz. -¿Qué se supone que voy a hacer? -Primero entrarás y después despertarás. -¿Despertar?- Vice dio señas de estar desconcertada. Goenitz la dirigió hasta la puerta principal. Le puso una mano en la cabeza y Vice comenzó a tener convulsiones y espasmos muy violentos. -¡¿Qué me has hecho, maldito?!- Vice apenas podía pronunciar una sílaba, la agitación y la sangre que fluía por su boca y sus ojos no la dejaban hablar.
*************
-¿Dónde estoy?- Mature entre abrió los ojos y pronunció estas palabras. -Levántate- una voz algo mecánica y lejana le habló. No era la de Goenitz, eso lo sabía. Era una voz totalmente distinta....
************* Goenitz había desaparecido sin dejar rastro. Vice había tomado una apariencia similar a la de Mature. Sentía un sabor a sangre. Tenía la vista borrosa y las manos le temblaban. Se dirigió al interior de la enorme mansión, donde se encontró con muchos adornos y muebles de estilo japonés antiguo. Con una mirada muerta comenzó a revisar la mansión, a gran velocidad. Aparentemente no había nadie. ¿Cómo quería que se entretuviera si no había nadie? -Maldito- gruñó lúgubremente. -¿Quién anda ahí?- la voz de un hombre resonó en toda la mansión. Vice corrió hacia el lugar de donde provenía. -Pues si no vas a salir tendré que ir a buscarte- y dicho esto el hombre se echó a correr a gran velocidad. Sus sandalias de madera sonaban muy fuerte sobre el delicado piso de mármol. Cuando llegó a la biblioteca vio la sombra de Vice a un lado de la chimenea, encendida. -¿Puedo ayudarla?- Vice no dijo nada, se quedó inmóvil. -Respóndame señorita, ¿puedo hacer algo por usted?- Vice caminó de espaldas hacia el hombre. Al llegar a su lado se volteó lentamente y dejó al descubierto su ahora horrenda cara. El hombre solo reaccionó un par de segundos después de verla y retrocedió instintivamente. -¿Qué te pasó en el rostro?- dijo tratando de disimular el miedo que sentía. Vice solo le dio un profundo beso y lo abrazó con fuerza. Sin que el hombre se diera cuenta Vice comenzó a rasgarle la espalda. -¿Qué estás haciendo, bruja?- exclamó asustado y adolorido. Vice lo soltó violentamente, más bien lo empujó. Estiró rápidamente su brazo, Decide fue el resultado y el hombre voló por los aires hasta estrellarse con un enorme jarrón de porcelana. Mientras el hombre se levantaba, Vice saltó y comenzó a mover sus piernas a gran velocidad, Ravenous. El hombre se movió ligeramente a la derecha y logró esquivarla, levantó su brazo y la derribó con mucha fuerza. Con agilidad felina aterrizó Vice. Se acercó con un salto muy veloz y le pateó la cara, una vez que tocó el suelo lo sujetó del cuello con mucha fuerza y lo levantó, o sea un Blackend. El hombre se golpeó contra una lámpara colgante y cayó estrepitosamente. Se levantó lentamente, sentía un agudo dolor en su nuca, y sentía la sangre fluir por su pierna. Nuevamente Vice se acercó al hombre, dio un pequeño salto y puso sus piernas alrededor de su cuello. Tomó todo el impulso posible y dio 3 giros completos sobre si misma, azotando al hombre en la cabeza cada vez con más fuerza (Negative Gain). -Orochi- gruñó Vice, con una voz más humana. Se acercó al hombre para cerciorarse de que estuviera muerto, aparentemente lo estaba. Salió al jardín, y nuevamente se acercó al estanque, pero esta vez tomó un par de peces y los lanzó con fuerza hacia los cerezos. Goenitz reapareció de igual forma en que se fue, de la nada. -¡Bien hecho!- exclamó alegre Goenitz -Ya que demostraste que eres valiosa para Orochi puedes ser tú otra vez- Vice retornó a su apariencia normal, a excepción de su vestuario que seguía siendo el mismo. Luego se desmayó.....
Notas del autor (d nuevo?): quedó un poco más corto este capítulo, pero no importa porque quedé muy conforme con el resultado. Agradecimiento especial a mi amiga Leila que me ayudó en algunas partes ^______^
-¡¡Detente!!- gritó Vice mientras era derribada por Mature. Pero esta no la escuchaba, solo la azotaba contra el piso y le arañaba la cara. Vice se percató de un detalle que no había visto antes: el reflejo en los ojos de Mature. ¿Pero qué había de raro en ellos? Normalmente el reflejo debería ser el de ella misma, pero esta vez el reflejo era el símbolo de Orochi. -¿Qué diablos?- fue lo último que alcanzó a decir Vice antes de desmayarse. -Listo- gruñó Mature con una voz de ultratumba. Entró al bar y buscó a la pareja que vio hace unos momentos, pero no estaban en ninguna parte. Aún en su estado "bersek" (o es berserk?), Mature saltó sobre una mesa, los ocupantes lanzaron un grito al ver la horrenda apariencia de la mujer e intentaron derribarla en vano. Mature comenzó a recitar frases en un extraño idioma que sonaba como el japonés. -"Mi dios Orochi vendrá sobre la tierra y acabará con ustedes"- gruñó Mature con una voz masculina- "sufrirán el dolor de sus pecados, nada ni nada podrá librarlos, Orochi limpiará la tierra de ustedes, patéticos humanos". La gente del bar (al menos los que no estaban tan borrachos :P) intentó salir, pero las puertas no abrían. "Es una bruja" exclamó alguien. Mature saltó sobre el hombre que la llamó bruja y lo destrozó.
*********** Vice seguía inconsciente. En su estado había tenido sueños muy extraños, pero a la vez muy reales. Por ejemplo se veía a si misma dentro de un submarino, a su lado una pantera y frente a ella un hombre, pero no podía resolver las facciones de su cara. U otro donde veía a un hombre de cabellos rojos entrenando en un bosque. Aunque sabía que eran solo sueños, algo le decía que eran sueños premonitorios.
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-Ya habían pasado más de 30 minutos desde que Mature entró al bar. Ya no quedaba nadie con vida..... o eso es lo que ella creía. -Bien hecho- se escuchó una voz femenina, como un eco. -Eres una digna representante de nuestro señor Orochi- Mature logró reconocer esta voz. "Goenitz" se limitó a gruñir. -Impresionante- otra voz masculina sonó en el bar. Tres figuras se acercaron a Mature, Goenitz; una mujer de cabello morado, curvilínea figura y mirada maliciosa; un hombre alto, fornido, de cabello blanco y facciones juveniles. Todos llevaban unas túnicas azules muy adornadas. -Lo has hecho más que bien, Mature- Goenitz la miró y nuevamente ese fulgor apareció en sus ojos. -Lamentablemente aún te queda una prueba- la mujer interrumpió a Goenitz y dio un paso adelante. El hombre la imitó. -Si nos vences, vivirás. Si te vencemos, morirás lenta y dolorosamente- dijo el hombre con un tono amenazador. -¿De qué estás hablando, Tohido?- Goenitz subió su tono y dio un gesto de desaprobación. -Silencio, Goenitz. Ahora Mature, lucharás contra mí y contra Lya. Ahora, prepá... -¡¡ESO NUNCA!!- exclamó enojado Goenitz -¡ELLA ES UN DIAMANTE EMBRUTO!! -¡Ya cállate!- gritó Lya, y Goenitz quedó estático. Comencemos.
Mature corrió hacia Tohido, ejecutó un Death Row, pero Lya la golpeó en la cabeza con una botella. Mature se levantó como si nada y se abalanzó sobre Lya con un Dispair. Tohido saltó sobre las mujeres y lanzó un golpe al suelo. Lya recibió todo el impacto, levantó a Mature y la lanzó por los aires. -¡¡TEN CUIDADO, ESTÚPIDO!!- Lya abofeteó a Tohido y este reaccionó de forma mucho más violenta de lo esperado. -Cállate, perra- Tohido levantó a Lya por el cuello y comenzó a asfixiarla. Mature aprovechó la oportunidad y comenzó a rasgarle la espalda con sus afiladas uñas. -Muere- susurró Tohido antes de aplicar más presión sobre el cuello de Lya. -Maldito- fue lo último que dijo Lya antes de morir. Tohido la dejó caer, pero jamás vio a Mature corriendo hacia él y nunca escuchó su risa. Mature ejecutó un Heaven Gates sobre Tohido y este cayó estruendosamente sobre unas mesas. -Más fuerte de lo que creí- se limitó a decir, humillado y furioso. -Goenitz- gruñó nuevamente. Mature siguió sus ataques con furia, Death Row, Dispair, arañazos múltiples. Tohido no pudo atacar de forma exitosa y quedó con múltiples fracturas, pero aún así se mantenía de pie. -¡Perra!- exclamó Tohido mientras un aura roja aparecía a su alrededor. -Mature, mátalo- Goenitz ya estaba volviendo a la normalidad. Tohido solo miró a Goenitz, desconcertado. Y fue lo último que vio. -Bien hecho, Mature. Te devuelvo tu cordura- y dicho esto Mature volvió a la normalidad. Luego se desmayó. "Iré a ver a Vice" pensó Goenitz y abrió la puerta con suavidad.
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-Levántate, ojos de rubí- ordenó Goenitz. -¿Dónde está Mature?- dijo Vice con dificultad. -Está en el bar. Me demostró que tiene mucho más potencial de lo que yo creía. Y ahora te toca a ti. -No voy a pelear contigo, "Guonitz" -¡GOENITZ! Y no, no vas a pelear conmigo, harás algo mucho más divertido- Goenitz alzó su mano, y él y Vice fueron elevados por un huracán. -¿¡No que nos ibas a visitar en un par de días!?- preguntó Vice mientras daba una última mirada al bar. -¡Para mi, el dios Orochi y los otros 3 reyes celestiales las horas humanas son días para nosotros!
Volaron rápidamente hasta llegar a un jardín. Descendieron. Un estanque con muchas carpas anaranjadas. Un aroma a jazmines y muchos árboles de cerezo les dieron la bienvenida. Vice se acercó al estanque, jugueteó con el agua y le lanzó una mirada de felicidad a Goenitz. Este solo le respondió con una leve sonrisa, imperceptible. -¿Qué es este lugar?- Vice cambió su mirada al decir estas palabras. -Es la mansión donde te entretendrás toda la noche- nuevamente aquel fulgor azul apareció en los ojos de Goenitz. -¿Qué se supone que voy a hacer? -Primero entrarás y después despertarás. -¿Despertar?- Vice dio señas de estar desconcertada. Goenitz la dirigió hasta la puerta principal. Le puso una mano en la cabeza y Vice comenzó a tener convulsiones y espasmos muy violentos. -¡¿Qué me has hecho, maldito?!- Vice apenas podía pronunciar una sílaba, la agitación y la sangre que fluía por su boca y sus ojos no la dejaban hablar.
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-¿Dónde estoy?- Mature entre abrió los ojos y pronunció estas palabras. -Levántate- una voz algo mecánica y lejana le habló. No era la de Goenitz, eso lo sabía. Era una voz totalmente distinta....
************* Goenitz había desaparecido sin dejar rastro. Vice había tomado una apariencia similar a la de Mature. Sentía un sabor a sangre. Tenía la vista borrosa y las manos le temblaban. Se dirigió al interior de la enorme mansión, donde se encontró con muchos adornos y muebles de estilo japonés antiguo. Con una mirada muerta comenzó a revisar la mansión, a gran velocidad. Aparentemente no había nadie. ¿Cómo quería que se entretuviera si no había nadie? -Maldito- gruñó lúgubremente. -¿Quién anda ahí?- la voz de un hombre resonó en toda la mansión. Vice corrió hacia el lugar de donde provenía. -Pues si no vas a salir tendré que ir a buscarte- y dicho esto el hombre se echó a correr a gran velocidad. Sus sandalias de madera sonaban muy fuerte sobre el delicado piso de mármol. Cuando llegó a la biblioteca vio la sombra de Vice a un lado de la chimenea, encendida. -¿Puedo ayudarla?- Vice no dijo nada, se quedó inmóvil. -Respóndame señorita, ¿puedo hacer algo por usted?- Vice caminó de espaldas hacia el hombre. Al llegar a su lado se volteó lentamente y dejó al descubierto su ahora horrenda cara. El hombre solo reaccionó un par de segundos después de verla y retrocedió instintivamente. -¿Qué te pasó en el rostro?- dijo tratando de disimular el miedo que sentía. Vice solo le dio un profundo beso y lo abrazó con fuerza. Sin que el hombre se diera cuenta Vice comenzó a rasgarle la espalda. -¿Qué estás haciendo, bruja?- exclamó asustado y adolorido. Vice lo soltó violentamente, más bien lo empujó. Estiró rápidamente su brazo, Decide fue el resultado y el hombre voló por los aires hasta estrellarse con un enorme jarrón de porcelana. Mientras el hombre se levantaba, Vice saltó y comenzó a mover sus piernas a gran velocidad, Ravenous. El hombre se movió ligeramente a la derecha y logró esquivarla, levantó su brazo y la derribó con mucha fuerza. Con agilidad felina aterrizó Vice. Se acercó con un salto muy veloz y le pateó la cara, una vez que tocó el suelo lo sujetó del cuello con mucha fuerza y lo levantó, o sea un Blackend. El hombre se golpeó contra una lámpara colgante y cayó estrepitosamente. Se levantó lentamente, sentía un agudo dolor en su nuca, y sentía la sangre fluir por su pierna. Nuevamente Vice se acercó al hombre, dio un pequeño salto y puso sus piernas alrededor de su cuello. Tomó todo el impulso posible y dio 3 giros completos sobre si misma, azotando al hombre en la cabeza cada vez con más fuerza (Negative Gain). -Orochi- gruñó Vice, con una voz más humana. Se acercó al hombre para cerciorarse de que estuviera muerto, aparentemente lo estaba. Salió al jardín, y nuevamente se acercó al estanque, pero esta vez tomó un par de peces y los lanzó con fuerza hacia los cerezos. Goenitz reapareció de igual forma en que se fue, de la nada. -¡Bien hecho!- exclamó alegre Goenitz -Ya que demostraste que eres valiosa para Orochi puedes ser tú otra vez- Vice retornó a su apariencia normal, a excepción de su vestuario que seguía siendo el mismo. Luego se desmayó.....
Notas del autor (d nuevo?): quedó un poco más corto este capítulo, pero no importa porque quedé muy conforme con el resultado. Agradecimiento especial a mi amiga Leila que me ayudó en algunas partes ^______^
