26 de noviembre. 11:00 AM. Estación de trenes de Tokyo.
Yoh, Anna, Manta, Horo Horo, Pilika, Tamao y Ren estaban sentados en un banco largo en el anden.
-Ay, a esta hora deberíamos estar en clase de matemáticas...-suspiro Manta mirando su reloj
-Deja de preocuparte, hombre- dijo Yoh
-¿Has entregado el justificante al profesor?-pregunto Anna
-Si, le pedí a uno de clase que se lo diese- contesto Manta -"Que tonta es. Si voy yo a dárselo, el profesor pensara que es una trola"- pensó después
-No se por que he venido- dijo Ren
-Venga, no seas aguafiestas- dijo Horo Horo
-¡Si has sido tu el que me has obligado!
-El tren con destino a la isla de Hokkaido saldrá por la via 5- anuncio el megáfono
-Ahí esta- dijo Tamao levantándose
-¿Ya os vais sin mi?- dijo una voz a sus espaldas. Todos se dieron la vuelta para ver quien era.
-¡Ryu!- exclamo Manta
-¿Tu también vienes?- pregunto Yoh
-Si. Horo Horo me ha invitado
-Cuantos mas seamos mejor ¿no?- dijo Horo Horo
Todos entraron en el tren y se acomodaron en sus butacas. El tren empezó a moverse. Ya estaban rumbo a Hokkaido.
El revisor paso para comprobar que todos tenían sus billetes. 15 minutos mas tarde, llego una azafata con un carrito de comida.
-¡Si, por fin! ¡Tenia hambre!- exclamo Horo Horo mientras le indicaba a la azafata que viniese con la mano
-¿Que quiere tomar?- pregunto la azafata
-A ver...- Horo Horo mira detenidamente el carrito- Quiero un poco de esto, dos bolsas de esto, cinco paquetes de aquello azul de ahí, un poco mas de esto, esas cajitas fosforescente de allí, 6 botes de coca cola, una botella del zumo es de ahí, y un poco mas de lo verde...
-O_o- la azafata estaba sorprendida
-Este hermano mío no va a cambiar nunca- suspiro Pilika
-¿Cuantos estómagos tiene este chico?- dijo Ren- ¿Cuatro como las vacas?
-Eh, tu! Que te he oído!- Horo Horo volteo la cabeza para mirar Ren. Luego vuelve con la azafata- Por donde íbamos...ah si! Una bolsita de eso de ahí...
-¿Esta seguro de que puede pagar todo esto?- pregunto la azafata
Horo Horo señala a Manta, que estaba leyendo un libro de esos que son muy gordos.
-¿Ve a aquel chaval bajito y cabezón? El se lo va a pagar todo
-¿¡QUE?! ¿Por que te lo tengo que pagar yo?- Manta se sorprende
-Manta, por favor, todo esto lo considero como regalo de cumpleaños. Venga, que yo te hice un regalo para el tuyo...
-Si, me regalaste una barra de hielo. Se hizo agua en cinco minutos- dijo Manta recordando
-Es que tu eres tonto. Haberlo metido en el congelador. Además, lo que cuenta es el detalle... Por favor, Manta...
Horo Horo consiguió convencer a Manta, que pago todo el festín a regañadientes
-Toma, te regalo este pirulí de menta para agradecértelo- Horo le ofrece el pirulí verde- es que a mi no me gusta la menta...
En poco mas de dos horas, todos llegaron por fin a Hokkaido.
-¿Esta muy lejos vuestra casa?- pregunto Anna
-Bueno, tenemos que escalar toda esa montaña para bajar luego al valle que hay al otro lado- dijo Pilika mientras señalaba una montaña nevada que estaba detrás de la estación de tren.
(Caída típica de anime donde solo se ven la piernas)
-Venga, que solo es una cuestita de nada- dijo Horo Horo con una sonrisa
Así pues, se hicieron al camino. El primer tramo, el camino hacia la montaña, fue fácil ya que fueron por una carretera llana. Anna intento hacer autostop porque no quería caminar, pero por ahí no pasaba ningún coche.
Por fin llegaron a la montaña. Primero tuvieron que escalar unas rocas porque no había camino. Pilika y Horo Horo estaban acostumbrados a ese camino, pero lo demás no, así que después de por lo menos cinco caídas por persona, consiguieron subir todos.
-Por lo menos aquí ya hay camino- dijo Tamao, tocándose la rodillas, que las tenia doloridas y llenas de rasguños
El camino no es que fuese fácil. Estaba muy empinado y había tramos muy estrechos donde veías el fondo. Manta miro hacia abajo y casi se cae del vértigo que le dio. Algunos metros mas arriba, empezó la nieve.
-Tengo frió- protesto Anna
-No me extraña. Solo a ti se te ocurre ir en noviembre con un mini-vestido sin mangas. Sobre todo aquí, en las montañas- observo Pilika
-Espera- Yoh se apresuro a sacar un pantalón y una manta de su mochila- toma, con esto tendrás menos frío
Anna se puso los pantalones, pero eran cortos y finos, así que aun tenia un poquito de frío. La manta le calentó los brazos.
Llegaron a lo alto de la montaña.
-¡Me encanta el aire fresco de la montaña!- exclamo Horo Horo inspirando aire
-¿Ahora hay que bajar?- pregunto Ren
-Si. Abajo esta el valle donde vive la tribu de los Ainu- explico Pilika
-Tanto esfuerzo subiendo la montaña para ahora tener que bajarla...-suspiro Ryu
Si la cuesta arriba estaba muy empinada, en la cuesta abajo casi se caen. Entre que era una cuesta muy caída y resbalaban por la nieve, todos menos Horo Horo y Pilika acabaron con el trasero en el suelo.
Por fin llegaron al valle. El pueblo no era muy grande pero tampoco era muy pequeño. En cuanto entraron en el pueblo, se dieron cuenta que era un lugar muy poblado. Poblado por gente con el pelo azul.
-Que gente tan hortera. Mira que ir todos con el pelo azul- comento Ryu
-¿¡No estas llamando horteras!?- gritaron Horo Horo y Pilika
-No, no es eso... Olvidad lo que he dicho. No he dicho nada, jeje...
Horo Horo y Pilika dirigieron a todos a su casa. Cuando llegaron, sus padres les recibieron con los brazos abiertos.
-¡Horo Horo! ¡Pilika! ¡Que alegría volver a veros!- la madre abrazó a los dos a la vez, espachurrándoles
-Parece ser que has traído a todos tus amigos- observo el padre- Bienvenidos al pueblo de la tribu de los Ainu
Un grupo de chicas con el pelo azul llegaron de repente como una avalancha.
-¡Pilika! ¡has vuelto!- gritaron todas
-Hola, os echaba de menos- dijo Pilika
-¿Quienes son?- pregunto Tamao
-Son mis amigas del pueblo
-Que guapas son- dijo Ryu
-Que feo eres- dijeron las chicas al unísono mirándole
-Ayyy, nadie me quiere- lloro Ryu (cascaditas en lo ojos)
-Tranquilo, yo te quiero- Tokageroh aparece
-Gracias Tokageroh! ¿Me das un besito?
-O//O ¿Que? Te quiero como amigo, no como...
-¿Por que has vuelto, Pilika? ¿No estabas en Tokyo?- preguntaron las amigas de Pilika
-Mañana es el cumpleaños de Horo Horo y mis padres nos dijeron que viniésemos aquí a celebrarlo
-¿Horo Horo?- las chicas voltearon la cabeza a su izquierda. No se habían fijado que Horo Horo estaba allí. Se lanzaron en avalancha sobre el- ¡HORO HOROOOO!
Entre todo ese montonin de chicas eufóricas, a Horo Horo no se le veía.
-Hola... hola chicas... yo también estoy contento de veros...- se una vocecita ahogada entre las amigas de Pilika
-¿Que pasa?- pregunto Yoh
-Es que Horo Horo siempre ha sido muy popular entra todas mis amigas- explico Pilika
Ren no sabia porque, pero de repente, sintió celos de todas esas chicas.
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Este capitulo ya es mas largo. No se si la tribu Ainu es así, pero bueno, yo me la imagino así. ¿Por que Ren esta celoso? Ahhh, ya no sigo mas. Mas en el tercer capitulo.
