Tercera parte
Los días pasaron, y Rika y Ryo continuaron saliendo todas las tardes pero, por desgracia, el última día ya había llegado. Aquella sería su última tarde juntos, al menos durante un tiempo, pero eso sí, iba a ser la mejor. La noche precedente, habían quedado en ir a pasar la tarde a Odaiba, mientras que Rika y Ryo estarían en la playa, Miyuki, Maoko y la abuela de Rika pasarían la tarde en alguna cafetería. Pero antes de ello, en el Messenger...
Ruki dice: Hola Ryo
El Yena dice: Hola, preciosa.
Ruki: JOe, ya estamos.
El Yena dice: Preciosa Preciosa
Preciosa Preciosa Preciosa Preciosa Preciosa Preciosa Preciosa Preciosa
Ruki dice: Muy bonito xro no sabes decir otra cosa???????'
El Yena dice: Sí
El Yena dice: Tia buena, tia buena, tia buena
El Yena dice: Tia buena, tia buena, tia buena
Ruki dice: Kiers q t desadmita???????
El Yena dice: NOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Ruiki dice: Pues di algo interesante!!!!!!!!
El Yena dice: Vale he desayunado tostadas morenas
Ruki dice: Qú?
El Yena dice: Kemaaaaaaaaaaaaaaaaaaadas
Ruki dice: Interesante. Q artemos sta tard en la playa?
El Yena dice. Pos había pensao en ahogarte....pero claro ntonces me kedo sin vert ya por siempre....
Ruki dice: : D
Ruki dice: Ahora en SERIO (pa variar)
El Yena dice. Lo q tu quiereas
El Yena dice:
O sea, kieras.
Ruki dice: Vale, o sea q no se te ocurre na y me endiñas a mi el muerto...
El Yena dice: Exacto!!!!!!
El Yena dice: Vas a ver qu bueno estoy con bañador...
Ruki dice: Ya será menos...
El Yena dice: Va en serio, estoy bueníiiiiiiiiiiiiiiiisimo.
Al medio minuto...
Ruki dice: Joe, esto está muerto....no es lo mismo hablar contigo aki qu en la calle pa nada.
El Yena dice: T aburres?
Ruki dice: Pos un poco...
El Yena dice: Te quiero.......
Ruki dice: Qué?
El Yena dice: Q te quiero.....
Ruki dice: Ryo. yo...
El Yena dice: Te quiero.......
El Yena dice: Nseñar una cosa esta tarde ¿q pensabas q decía, o que´?
Ruki dice: Cabrón...lo has hecho a posta...
El Yena dice: Q pensabas q habia dixo?????????? Dimelo, plis
Ruki dice: Q me kerías (d amar, pesao)
El Yena dice: Ah! Eso también
Ruki dice:
Ah, chico, dja de bromear...
El Yena dice: Allá tú y tus pensamientos....
Ruki dice: Q me kerías enseñar??????????'
El Yena dice: Unas fotos mias de pequeño
Ruki dice: Q mono!!!!!!!
El Yena dice: Yo siempre e sido mono....como tú.
Ruki dice: Ya, claro, y todos los niños de pekerños tb lo son, así q no te emociones.
El Yena: Je, je....me gusto lo del otro día....
Ruki dice: Qú?
El Yena dice: Lo de "me gusta estar contigo, estar tan cerca de ti como para... sentir tu respiración...oír tus latidos... ver brillar tu sonrisa y... admirar tu mirada" Fue muy bonito...
Ruki dice: mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm
El Yena dice: Mola cunado te pones así de romántica...no te conoce ni tu madre.
Ruki dice: Y tú, q te pegas todo el día tirándmoe los tejos descaradamente?????????????
El Yena dice: Xro eso en mi es normal....
Ruki dice: Ya, claro.
El Yena dice: Sabes? Eres muy guapa....me gustan tus ojos.
Ruki dice: Joe, ya estamos...si x cada vez q me dices eso, me dieraqn un yen, sería rica.
El Yena dice: Xro hay más cosas q me gustan...
Ruki dice: Como qué? Mi mirada? Mis labios? MI forma de ser?
El Yena dice: NO
El Yena dice: TU CULO
Ruki dice: Pervertido, deprabado!!!!!!!!!!!! No me extraña q tu padre no t aguante!!!!!!!!!!!!!
El Yena dice: Admitelo, tienes buen culo
El Yena dice: Xro tranui, q lo otro q as dicho tb me gusta...en especial tu mirafa....lo mejor si es asesina....el 90 % del tiempo : P : P : P
Ruki dice: A mi me gusta mucho tu sonrisa
Ruki dice: Y tu cuerpo....
Ruki dice: Bueno, no, eso no.
Ruki dice: ; )
El Yena dice: N intentes arreglarlo ahora....
El Yena dice: Te djo, bonita, q tengo q comer
El Yena dice: Un beso asta luego!
Ruki dice: Adiós!!!!
¿Ya has terminado de hablar con ese chico? - preguntó Miyuki a su hija.
No es "ese" chico. Es Ryo. Es...distinto de los demás.
Vas a sufrir mucho su partida ¿verdad? Le quieres mucho.
¡No le quiero! Pero si que le echaré de menos...es muy simpático.
Ya, claro que no le quieres. Venga, vamos a comer, que si no se nos va a hacer tarde ¿te has puesto ya el bañador?
Sí.
Horas más tarde, en el coche del padre de Ryo...
Venga, Miyuki, usted será mi copiloto - decía Maoko, mientras la madre de Rika se sentaba a su lado.
¡Qué divertido es usted!
Esto se pone un poco raro ¿no crees, Ryo? - le preguntó Rika, que se sentaba a su lado, en la parte de atrás.
Tranquila, se porta así con todas las mujeres.
Rika, nieta mía, apretújate un poco más contra ese chico, que si no no quepo.
Si, abuela. Ryo, échate tú también un poco p'allá.
Claro, Rika - al fin Rika pudo moverse. Ryo le dijo, susurrando - Dime una cosa, Rika ¿sientes ya mi respiración, y todo eso?
Serás jodío...última vez que te digo algo así.
Venga, Rika, no me digas que te vas a enfadar el último día que vamos a pasar juntos...
No me lo recuerdes, por favor, Ryo.
Perdona.
Nada va a ser lo mismo sin ti...
Eh, oye, no te desanimes.
¿Cómo pretendes que no lo haga? - dijo con la mirada triste.
Rika... ¡¡¡PAPÁ, PON MÚSICA COMO TÚ SABES, QUE ESTA ME SE ESTÁ DEPRIMIENDO!!!
¡Ryo! ¡No me estoy deprimiendo! ¡Sólo... - sonrió Rika.
No, ya no - sonrió también Ryo.
¡YA VOY, HIJO! - gritó Maoko.
El viaje, no duró demasiado, a penas media hora. Primero, los adultos (al menos físicamente, porque el padre de Ryo...) dejaron a Rika y Ryo en la playa, y luego se fueron a una cafetería.
Fin
Que nooooooooo, que era coñaaaaaaaaaaaaaaaa.
Bueno, como iba diciendo, Maoko, Miyuki y Kibumi (la abuela de Rika) se sentaron en la cafetería y comenzaron hablar.
¿Qué vais a tomar? Os invito - dijo Maoko.
¡No hace falta! - contestó Miyuki.
¡Que sí, rediez! Yo una birrica, o dos.
Bueno, pues yo un café con leche ¿y tú mamá?
Yo un té verde.
¡Estupendo, voy a comandarlo, y también pediré unas pastas, para llenar el estómago!
Vale, te esperamos - dijo Miyuki.
Entre tanto, en la playa...
¿Se supone que estás bueno?
Claro que sí, ¿acaso no ves lo musculoso que estoy?
Pos hombre, no sé que decirte...
Siempre has sido así.
¿Cómo así?
No quieres admitir cosas que te dan vergüenza, e intentas mentir para ocultar la verdad. Habrá gente a quien le engañes, pero te aseguro que a mí no. No sabes mentir, Rika.
¿Insinúas que yo pienso que estás bueno, pero lo intento disimular?
Sí.
Qué creído eres ¿no?
Puede que un poco pero aun así, no me engañas.
Allá tú.
Voy a darme un chapuzón ¿vienes?
No, no me apetece mojarme.
¿Y para qué hemos venido aquí, entonces?
No sé.
Bueno, entonces vamos con nuestros padres ¿no?
¡De eso ni hablar! ¡Quiero estar a solas contigo! - exclamó Rika. Ryo sonrió ampliamente.
Je, y luego, tras mentir, metes la pata soberanamente. Además, con la de gente que hay aquí, esto no estar muy a solas que digamos ¿no crees?
Sin comentarios.
Hey, pero podemos ir allá, donde esas rocas, ahí no parece haber nadie. Y tengo agua cerca, pa mojarme un rato (y para tirarte al agua cuando menos te lo esperes) - pensó.
Está bien, vamos.
En las rocas...
Mira, soy el as. Ya verás qué bien me tiro al agua - dijo Ryo, poniéndose en pie sobre una roca, y saltando. Se sumergió en el agua, que allá era bastante profunda y al poco rato sacó la cabeza.
¡Está muy templada! ¿Por qué no bajas un rato?
Te he dicho que no me apetece.
Guay, pos voy a nadar un rato.
Vale.
Eh, oye, ¿por qué al menos no bajas a la roca más baja, para poder hablar contigo?
Está bien - contestó Rika, bajando a dicha roca - ¿de qué quieres hablar?
De lo que quieras... ¡eh, mira, una gaviota!
¿Dónde? - preguntó Rika, mirando al cielo. Ryo la agarró de una pierna y la tiró al agua.
¡Cabrón! - gritaba ella mientras sacaba la cabeza - ¿Por qué lo has hecho?
¡Encima que lo he hecho por ti! - exclamó Ryo, mientras sonreía.
¿Qué?
Así puedes sentir mi respiración, oír mis latidos, y tal.
¡Yo te mato! - dijo, sumergiendo la cabeza de Ryo en el agua - ¡Qué! ¿A gusto?
¡FÏIIIIIIIIIIIII! ¡MUY A FUFFTO!
Pues te vas a quedar así toda la tarde - sentenció. Ryo, que comenzaba a sentirse mal dijo:
FERÁ BROMA FBURBFRBFS.
No lo es.
¡¡¡FÁCAME DE AQUÍ, QUE ME AFOGOOOOOOOOO!!!
Si me pides perdón por tirarme.
PEFFDON!!!!!
Está bien - afirmó, satisfecha, y sacó la cabeza de Ryo del agua.
¡Joder, qué subidón! -dijo, agarrándose a los hombros de Rika, para recuperarse.
¿Estás bien?
Puf...creo que voy a necesitar el boca a boca ¿eh?
Serás... bueno, en serio, Ryo ¿te encuentras bien?
Sí, tranquila... ¿por quéte preocupas tanto por mí?
Lo hago por mí misma, si te hubieses ahogado me acusarían de homicidio. Menos mal que sigues vivo.
Tan sarcástica como siempre.
Y tú tan sonriente y encantador como siempre.
Esto me suena de algo... creo que ya me lo dijiste alguna vez.
Sí, yo también lo recuerdo. Fue el día que evolucioné por primera vez junto a Renamon en Sakuyamon, el día que nos encontraste de nuevo. Te portaste muy bien conmigo, además, ayudándome a detener el d-reaper, cuidando de Calumon y también...salvándome la vida. Si Cyberdramon no hubiese detenido aquella burbuja en el último momento, y tú no me hubieses arrastrado hasta aquella cueva, no seguiría viva. Gracias - dijo, besándole en la mejilla con cierta dificultad. Ryo se puso rojo (por segunda vez ¡¡¡¡ueeeeeeeeeeeeee!!!!)
De nada, Rika. Parece mentira todo lo que hemos vivido juntos ¿no crees?
Sí, tengo muchos recuerdos tuyos, y todos muy buenos, aunque no lo pareciese. Oye, aquí estoy como que un poco mal para hablar, casi mejor si subimos de nuevo a las rocas.
Vale, pero antes ¿me puedes hacer un favor?
¿Cuál?
Siempre he tenido la ilusión de...joder, te va a parecer una chorrada...
DILO.
Pues de besar a alguien en el agua. ¿Me dejarías que lo hiciera?
Sí, claro, me parece bien. - dijo, abrazándose a Ryo y sonriéndole.
Gracias, no lo olvidaré nunca - al principio, rozó suavemente sus labios con los de Rika con timidez, pero luego ya, la besó como nunca lo había hecho. Era un momento para no olvidar nunca, además, era una suerte que el oleaje fuese débil, aquello hizo que no se sintieran incómodos para nada.
Joder, Ryo - dijo Rika, cuando se separaron - Esto SÍ que ha sido un subidón. A pocas me ahogo pero bueno.
O sea, que te ha gustado.
Mmmm...no te voy a responder. Al menos de momento. Sabes de sobra que no me gusta hablar de estas cosas... Subamos a las rocas. ¿de acuerdo?
En aquellos mismos momentos, en la cafetería...
Y dime, Maoko ¿cómo era tu hijo de pequeño? - preguntó Miyuki. Maoko, terminó de beber su primera cerveza y dijo:
¿Mi hijo? Bueno, cuando aún estaba Liu, se solía portar bastante bien, pero en cuanto me quedaba solo con él, se volvía loco perdido, y comenzab a dar botes por toda la casa. Me volvía loco: tan pronto le veías en su cuarto jugando, como viendo la tele, como rompiendo un jarrón, asaltando el frigorífico, o inundando el baño.
Era un poquito movido ¿no?
¿UN POQUITO MOVIDO? ¡Lo que era es un puto niño hiperactivo! Aunque los médicos nunca se lo diagnosticaron, claro, como siempre iba con su madre...
¿Y cuando se fue tu mujer? ¿Se portaba mejor? - preguntó Kibumi.
¿Mejor? ¡Anda ya! Cuando se fue mi mujer, es decir, cuando Ryo comenzó el colegio, se convirtió en un hijo puta, con perdón de la expresión. Las notas, penosas, y del comportamiento, mejor no hablar, se pegaba todo el día levantándoles las faldas a las niñas de su clase, el muy jodío. Raro era el día que no me llamaban del colegio para quejarse. ¡La bronca que le eché un día! Incluso le llevé al psicólogo, para ver que me recomendaba, aunque al final el que acabó en el psicólogo fui yo, de lo harto que me tenía Ryo.
¿Y qué te recomendó hacer? - preguntó Miyuki.
Me recomendó apuntarle a algún deporte para que se dejase en él parte de su energía. Le apunté a natación, que, según el psicólogo, le relajaría.
¿Y lo hizo? - volvió a preguntar la joven mujer.
¡Qué coño lo va a hacer! Bueno ¿y Rika? ¿Cómo era ella?
Bueno, era una niña muy tranquila, callada, y amable con todo el mundo, al menos hasta su séptimo cumpleaños.... cuando lo celebró, todo el mundo se reía de ella, porque no tenía padre. Ella insistía en que sí lo tenía, pero que estaba de viaje en el mar, buscando tesoros. Se armó una buena y Rika comenzó a llorar. Llegué yo, para ver qué ocurría, y me dijo que a que era verdad que su padre estaba de viaje. Cometí un gran error, le dije que no, que en realidad no estábamos juntos. Todos comenzaron a reírsele a la cara, y ella a pegarles, y echarles de casa. Desde entonces, siempre me ha estado preguntando el poruqé de nuestra separación, pero yo nunca se lo dije. Sin darme cuenta, se comenzó a encerrar en sí misma, y se volvió fría, insensible, y desarrolló su mal genio. Al menos, por suerte, se consiguió hacer respetar.
Pobre Rika. - suspiró Maoko.
De todos modos, la cosa no se quedó solo en eso. Se escapaba de casa cada dos por tres, y luego volvía a las tantas de la noche. Nunca conseguía hacer amigos, aunque tampoco ella quería tenerlos. Incluso comenzó a comprarse ropa de chico, y a parecer un poco marimacho, es una pena, poruqe es una niña muy bonita... Bueno, y conmigo se portaba de lo más borde posible. Antes de lo del cumpleaños, era muy amable conmigo, y me lo contaba todo, pero después ya casi ni me hablaba, y aprovechaba cualquier momento para reprocharme el que nunca estuviese en casa. Luego, ya explotó definitivamente, con ocho años. Fue cuando comenzó toda la moda esa de los digimons, a la que solo se apuntaban los chicos. Pues bien, ella también se apuntó, seguramente para fastidiar, y comenzó a luchar en partidas de cartas contra todo el mundo, y siempre ganaba. Se hizo realmente fuerte, y el juego le comenzó a gustar de verdad. Aquel mismo año, se apuntó a aquel torneo de cartas. Ganó a todo el mundo sin ningún miramiento ni dificultad, pero luego, en la final...fue derrotada por un chico. Cuando llegó a casa, comenzó a romper jarrones, platos...no me atreví a decirle que parase, por un a parte quería que se desahogase... Y todo porque un niño le venció...
Una cosa, Miyuki, ¿eso en qué año fue?
En el 1999 ¿por qué?
Porque ese mismo año, mi hijo también se apuntó a ese mismo torneo, y ganó a una chica que me describió como tu hija.
Entonces, Ryo es...el que la ganó. Sí, es verdad, ella también me describió a alguien como tu hijo. Con algún calificativo desagradable, pero bueno.
Tiene gracia que ahora estén juntos y se lleven bien. De todos modos, ahora Rika parece ser, sin ánimo de ofender, más...normal ¿no cree?
Sí, y no me ofende, de hecho me alegro de que ahora sea como es. Sigue siendo un poquito borde, fría y tal, y pobre del que se meta con ella...pero ya no es la misma. Poco a poco, parece ser que se está volviendo a transformar en la niña amable que gustaba a todo el mundo...
Señores, sus pastas - aquel era el camarero, que llegab al fin (anda que no había tardado ni nada...) con el plato de pastas. Miyuki y Maoko, habían recordado el como eran sus hijos de pqueños, pero no eran los únicos que recordaban el pasado...en la playa...
O sea, que así fue como conociste a Renamon... - dijo Rika.
Sí, así fue.
La hechas de menos ¿no?
Sí, haría lo que fuera por volver a verla. Si es que siempre me pasa lo mismo, siempre pierdo cosas importantes en mi vida. Primero mi padre, luego a Renamon, y ahora, te voy a perder a ti.
Tienes razón Rika, no lo niego, pero solo en parte. A tu padre, le puedes volver a ver si quieres, a Renamon la verás sin duda un día u otro y a mí, te juro por lo que quieras que también me volverás a ver, y cuando vuelva, no me iré nunca más, aunque tenga que abandonar todo.
Típico de ti, Ryo. Siempre estás haciendo cosas por mí. Tengo algunas preguntas que hacerte.
Soy todo oídos.
¿Por qué ayudaste a Kyubimonn el día aquel que Kazu, Kenta y yo nos encontramos contigo?
Pos joé, hija, porque estaba en apuros. Pero yo también tengo que preguntarte algo sobre eso ¿Por qué no me lo agradeciste?
Porque te odiaba, o al menos creía que lo hacía. El día que te volví a ver, estaba muy cabreada, porque me ganaste, y más que nada, y esto no lo sabe mi madre, por cómo me ganaste. El colmo fue encima que Cyberdramon pudo vencer a esa bestia parda, y mi Kyubimon no. Era como una reafirmación de que eras mejor que yo, y luego además, va Kazu y me lo restriega, y para colmo, encima no me recuerdas. Por todo eso me fui, aunque sigo manteniendo que la mayor razón era el cómo me ganaste. Pero estaba muy equivocada contigo, Ryo. Me di cuenta cuando me estuviste cuidando cuando me envenené con aquella seta (ver "una cosa lleva a la otra", que por cierto, ya arreglé lo de los diálogos juntos). Fue entonces cuando me di cuanta de que sólo querías ayudar, de lo mucho que te preocupabas por mí. Además, fue muy bonita tu declaración de amor, y ese besito tímido que me diste, fue inolvidable.
Gracias, Rika. A mí, aquello me marcó mucho ¿sabes?
¿Sí?
Sí ¡no veas la marca que me dejó en toda la jeta tu tortazo!
¡Siempre igual de bromista! - dijo Rika, entre risas - y por cierto, no me enfadé contigo por lo del beso, en realidad estaba enfadada conmigo misma, por no tener el suficiente valor como para salir contigo. Creo que nunca te he odiado de verdad.
¿Estás enamorada de mí?
Vaya pregunta me haces, Ryo...tengo mis dudas. Cambiando de tema ¿por qué me seguiste el día de lo de Sakuyamon?
Porque quería ayudarte,. No pude quedarme quieto, además, nunca me hubiese podido perdonar el que te hubiese pasado algo malo. A un mala, me hubiese sacrificado yo por ti. Prefería morir yo antes que perderte. Eso no sería una vida. No sin ti.
O sea, que estabs dispuesto a morir por mí.
Sí.
Ryo...me avergüenzo de mí misma, tú siempre has hecho mucho por mí, y yo nunca te he ayudado en nada. Como aquella vez que me fuiste a buscar, a pesar de que el arca estuviese a punto de irse.
A mí me daba igual quedarme en el mundo digital, y quería que los demás volviesen. Además, quería volver contigo, no quería dejerte sola allá.
¿Ves? Si es lo que yo digo, tu siempre has hecho de todo por mí, y nunca te he ayudado. Nunca.
En eso te equivocas, Rika. Si que me ayudaste una vez...
Entre tanto, en la cafetería, Maoko iba ya por su sexta cerveza, comenzaba a hablar un poco raro:
Así que ttttttttu jijita Rika desde que volvió del mundo ese es la leche ¿no, Miyuki?
Eh...sí, lo es...¿no cree que debería dejar ya de beber?
¡Bah! ¡Sólo estoy unh foco colocau, na más! Joé, pos el cabrito de mi fijo, cuanfdo je fue al mundom eje con el piazo bicho ese, que jolo fabe fruñir, ni avisó ni nada...será guarro...podía hagerme dichfo al fenos algo como: ¡pa, me voy a un mundo paralelo! Por juerte, cuando comenzó to ejo de los digimones se volvió más tranquilo...fenos mal...el cabrón de mi hijo sieeeeeeeempre a jido un mujeriego, pero no se preocupe por Fika, para él ella es distinta, mi fijo sa enamorau de verdad... ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ALELUYAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!!!!!!!!!!
Pfff - reía Kibumi - este hombre está fatal...
A ver como acaba esto...
Volviendo a la playa:
Qué, Rika ¿no caes aún en la ayuda que me diste?
Pues no, que quieres que te diga...
En fin, me rindo. Te lo recordaré yo mismo, tranquila...
Flashback
Sakuyamon, quiero que cargues con toda tu energía la hoja de Justimon.
Pero qué locura pretendes - dijo Sakuyamon. Rika, desde su interior afirmó.
Pero Ryo, ¿tú estás loco? ¿No sabes lo que te puede pasar?
Rika, nosotros solos no podremos hacer nada, pero si vuelcas toda la energía de Sakuyamon en la hoja de Justimon, podremos partir al d-reaper por la mitad.
No, Ryo ¡es muy peligroso, te puede pasar algo terrible!
No me pasará nada, hazlo, ¡te lo pido por favor, Rika...!
Ya sabía que eras todo un temerario... - sonrió Rika, emocionada, y con los ojos llenos de lágrimas.
Es la primera vez que me adulas - sonrió Ryo.
¿Estás segura, Rika? - inquirió Sakuyamon.
Sí, estoy segura, y confío PLENAMENTE en Ryo y Justimon.
Está bien, Rika - contestó Sakuyamon mientras reunía toda su energía.
Ryo ¡recíbela! - exclamó Rika. (Nota de la autora: esto ese lo que más o menos dice en la versión española, no sé qué dirá en la argentina, o en la americana).
Fin del Flashback
¡Ah! Sí, ya lo recuerdo...pero eso no es ni la mitad de lo que tú has hecho por mí, además, no te salvé la vida precisamente.
Pero me hiciste un favor, y confiaste en mí, y que alguien confíe en mí, es el mejor regalo que puede hacerme.
Aun así, yo sólo he hecho eso por ti, nada más.
Te equivocas, el permitirme estar contigo, también es un regalo.
Puede que para ti lo sea, pero aun así, te prometo que algún día, yo también te salvaré la vida.
Si insistes. Nunca hubiera imaginado que llegarías a decir eso, Rika.
Yo tampoco. Ryo...
¿Qué?
Cuando te vayas, te voy a echar mucho de menos...
Oye, que si quieres me desapunto e la universidad...
¡No digas tonterías, por Dios!
Pues entonces, te OBLIGO a que no me eches de menos, Rika. Como ya dijiste en una ocasión, no sirve de nada, si de todos modos te volveré a ver...
Ya claro, pero eso iba a ser por unas semanas, como mucho. Sé que te voy a echar de menos, porque ya lo hice cuando volviste a Fukuoka.
Pero si ni siquiera viniste a despedirme...
¡Precisamente porque no quería despedirme de ti! Aquel día me quedé en casa llorando ¿sabes? Estaba totalmente sola en el mundo. No quería ver a nadie, y ni siquiera mi abuela y mi madre estaban ahí, para ayudarme. ¿Y si eso me vuelve a pasar ahora? Tengo miedo de que ocurra.
Oye maja, que yo también te eché muchísimo de menos, y además, como añadido, creí que definitivamente me odiabas. Llegué a pensarlo de verdad.
Ya, tienes razón una vez más Ryo. Soy muy egoísta.
No, Rika, es normal que tengas miedo de que te vuelva a ocurrir algo, pero ¿sabes? Yo sé que no te va a volver a pasar. Tienes recuerdos míos, como esa foto, y me puedes llamar al móvil siempre que quieras. Además, ahora ya estamos bien el uno con el otro. Si la otra vez te pusiste triste era porque, seguramente, sentías como que no te habías portado bien conmigo del todo. Pero ahora sí que lo has hecho, y de hecho antes también, solo que no te lo dije.
¿Pues sabes qué te digo, Ryo? Que tienes razón, no te pienso echar de menos. ¡No es el fin del mundo! Ni siquiera eres mi novio, sólo un amigo, y dudo que seas mi novio algún día.
¿En serio que no...?
Recuerda tu teoría de antes, la de decir una cosa y pensar otra, aunque recuerda también esto: no siempre es así.
Así se habla Rika - dijo Ryo, con una amplia sonrisa - ¿Nos damos un último beso de despedida?
¡Ah, no! Ni hablar, si lo hago, sé que me volveré a colgar, y entonces si que no habrá remedio para que me deprima. Dejémoslo en un abrazo, ya habrá tiempo para lo demás cuando vuelvas. Pero eso sí, no pienso hablar de nada de lo que ha pasado estos días, pienso evitarlo.
Je, sabía que lo dirías - sonrió Ryo abrazando fuertemente a Rika.
Chico listo - suspiró ella - Ah, y no te quejes si, cuando vuelvas, vuelvo a ser una borde integral. Tú eres el único que me puede domar, y el único que lo ha conseguido.
¡No olvidaré eso, descuida! Y tampoco olvidaré tus ojos - añadió, cuando Rika se hubo desembarazado de él.
Ryo, no empecemos...
Rika...bueno, creo que ya es la hora. Tenemos que volver a la cafetería, con nuestros padres y tu abuela.
Sí, por cierto, Ryo. Lo que yo JAMÁS olvidaré de ti, será tu sonrisa.
En fin, volvamos a la cafetería, donde la cosa ya se estaba descontrolando bastante:
¡¡¡CAMAREROOOOOOOO!!!!! ¡¡¡¡PÓNGAME OTRA BIRRA, CAGÜEN FIEZ!!!!!!!!
Señor, le insisto que vamos a cerrar ya y....
¡¡¡¡ME LA SUDA!!!!! ¡¡¡¡¡QUIERO MI BIRRA!!!!! - exclamaba Maoko, pegando un puñetazo en la mesa.
Está bien, está bien... - el camarero, asustado, volvió al interior del restaurante. Miyuki dijo:
Maoko, creo que estás un poco...tocado ¿no crees?
¡¡¡Bah!!! Cofaf que fasan....¡¡¡¡¡HIIIIIIIIIIC!!!!! Miyuki, te aseguro que, si no tuviera casau, ¡¡¡te tiraría los tejos pero ya!!!!! ¡¡¡Estás como un tren!!!!!
Vaya, gracias, Maoko.
Hija mía - dijo Kibumi - es increíble que aún sigas siendo tan ligona.
¡Bueno, lo hago sin proponérmelo!
Señor, su cerveza.
Birra.
Cerveza.
¡¡¡Birra!!!
¡¡¡Cerveza!!!
¡¡¡BIRRA!!!
¡¡¡CERVEZA!!!
No me contradiga - dijo Maoko sacando su navaja.
Glups, señor...está bien, birra.
Así me gusta, majetón - sonrió Maoko, guardando su navaja y dándole unas palmaditas en la espalda al camarero - tenga lo que le febo, quédese con las fueltas - sacó un billete, que debía ser de una cantidad muy alta, porque se puso feliz.
Papá... - dijo Ryo, que acababa de llegar con Rika - ya has vuelto a beber...¡muy mal chico! ¡Te voy a confiscar todas las cervezas cuando lleguemos a casa!
¡Noooooooo, eso nooooooooooo! - dijo Maoko, arrodillándose ante su hijo.
Qué patético... - suspiró Rika.
Pues no has visto nada...otras veces ha sido aún peor.
¡Venga Maoko, tenemos que volver a Shinjuku! ¡Yo conduciré!
¡Genial, guapa, porque tooooooooooooodo me da vueeeeeeeeltas, y más vueeeeeeeeeeltas, y más vueeeeeeeeeeeltas.
Puff - suspiró Ryo - qué resacón va a tener el pobre...
Y bien, Fyo, ¿os habéis liado mucho Rika y tú?
¡Eso no te incumbe, papá! - le reprochó Ryo. Maoko comenzó a llorar, y Rika, su madre y su abuela a reír.
Cuando consiguieron levantar a Maoko del suelo, montaron al fin en el coche, que condujo Miyuki, y que dejó primero a Ryo y Maoko en su casa. Maoko se sentó en la puerta, mientras Rika y Ryo se despedían.
Bueno, Rika. Ya sabes, sé fuerte, como siempre lo has sido.
Está bien, Ryo - dijo, abrazándole con fuerza.
Ya sabes, llámame siempre que quieras. Ardes en deseos de hacerlo ¿no?
¡No me seas tan creído!
¡¡¡RYO, CAGÜEN TI, BÉSALA DE UNA VEZ!!!
¡No voy a hacerlo, papá!
Je, tu padre es la leche, se ve que os parecéis.... - le besó suavemente en la mejilla, le sonrió, y se volvió a montar al coche. Ryo, también le sonrió, y se giró... ¡su padre se había quedado dormido! Se encogió de hombros, y despidió con un gesto a Rika y su familia. Ellas hicieron lo mismo.
Los días pasaron, y Rika y Ryo continuaron saliendo todas las tardes pero, por desgracia, el última día ya había llegado. Aquella sería su última tarde juntos, al menos durante un tiempo, pero eso sí, iba a ser la mejor. La noche precedente, habían quedado en ir a pasar la tarde a Odaiba, mientras que Rika y Ryo estarían en la playa, Miyuki, Maoko y la abuela de Rika pasarían la tarde en alguna cafetería. Pero antes de ello, en el Messenger...
Ruki dice: Hola Ryo
El Yena dice: Hola, preciosa.
Ruki: JOe, ya estamos.
El Yena dice: Preciosa Preciosa
Preciosa Preciosa Preciosa Preciosa Preciosa Preciosa Preciosa Preciosa
Ruki dice: Muy bonito xro no sabes decir otra cosa???????'
El Yena dice: Sí
El Yena dice: Tia buena, tia buena, tia buena
El Yena dice: Tia buena, tia buena, tia buena
Ruki dice: Kiers q t desadmita???????
El Yena dice: NOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Ruiki dice: Pues di algo interesante!!!!!!!!
El Yena dice: Vale he desayunado tostadas morenas
Ruki dice: Qú?
El Yena dice: Kemaaaaaaaaaaaaaaaaaaadas
Ruki dice: Interesante. Q artemos sta tard en la playa?
El Yena dice. Pos había pensao en ahogarte....pero claro ntonces me kedo sin vert ya por siempre....
Ruki dice: : D
Ruki dice: Ahora en SERIO (pa variar)
El Yena dice. Lo q tu quiereas
El Yena dice:
O sea, kieras.
Ruki dice: Vale, o sea q no se te ocurre na y me endiñas a mi el muerto...
El Yena dice: Exacto!!!!!!
El Yena dice: Vas a ver qu bueno estoy con bañador...
Ruki dice: Ya será menos...
El Yena dice: Va en serio, estoy bueníiiiiiiiiiiiiiiiisimo.
Al medio minuto...
Ruki dice: Joe, esto está muerto....no es lo mismo hablar contigo aki qu en la calle pa nada.
El Yena dice: T aburres?
Ruki dice: Pos un poco...
El Yena dice: Te quiero.......
Ruki dice: Qué?
El Yena dice: Q te quiero.....
Ruki dice: Ryo. yo...
El Yena dice: Te quiero.......
El Yena dice: Nseñar una cosa esta tarde ¿q pensabas q decía, o que´?
Ruki dice: Cabrón...lo has hecho a posta...
El Yena dice: Q pensabas q habia dixo?????????? Dimelo, plis
Ruki dice: Q me kerías (d amar, pesao)
El Yena dice: Ah! Eso también
Ruki dice:
Ah, chico, dja de bromear...
El Yena dice: Allá tú y tus pensamientos....
Ruki dice: Q me kerías enseñar??????????'
El Yena dice: Unas fotos mias de pequeño
Ruki dice: Q mono!!!!!!!
El Yena dice: Yo siempre e sido mono....como tú.
Ruki dice: Ya, claro, y todos los niños de pekerños tb lo son, así q no te emociones.
El Yena: Je, je....me gusto lo del otro día....
Ruki dice: Qú?
El Yena dice: Lo de "me gusta estar contigo, estar tan cerca de ti como para... sentir tu respiración...oír tus latidos... ver brillar tu sonrisa y... admirar tu mirada" Fue muy bonito...
Ruki dice: mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm
El Yena dice: Mola cunado te pones así de romántica...no te conoce ni tu madre.
Ruki dice: Y tú, q te pegas todo el día tirándmoe los tejos descaradamente?????????????
El Yena dice: Xro eso en mi es normal....
Ruki dice: Ya, claro.
El Yena dice: Sabes? Eres muy guapa....me gustan tus ojos.
Ruki dice: Joe, ya estamos...si x cada vez q me dices eso, me dieraqn un yen, sería rica.
El Yena dice: Xro hay más cosas q me gustan...
Ruki dice: Como qué? Mi mirada? Mis labios? MI forma de ser?
El Yena dice: NO
El Yena dice: TU CULO
Ruki dice: Pervertido, deprabado!!!!!!!!!!!! No me extraña q tu padre no t aguante!!!!!!!!!!!!!
El Yena dice: Admitelo, tienes buen culo
El Yena dice: Xro tranui, q lo otro q as dicho tb me gusta...en especial tu mirafa....lo mejor si es asesina....el 90 % del tiempo : P : P : P
Ruki dice: A mi me gusta mucho tu sonrisa
Ruki dice: Y tu cuerpo....
Ruki dice: Bueno, no, eso no.
Ruki dice: ; )
El Yena dice: N intentes arreglarlo ahora....
El Yena dice: Te djo, bonita, q tengo q comer
El Yena dice: Un beso asta luego!
Ruki dice: Adiós!!!!
¿Ya has terminado de hablar con ese chico? - preguntó Miyuki a su hija.
No es "ese" chico. Es Ryo. Es...distinto de los demás.
Vas a sufrir mucho su partida ¿verdad? Le quieres mucho.
¡No le quiero! Pero si que le echaré de menos...es muy simpático.
Ya, claro que no le quieres. Venga, vamos a comer, que si no se nos va a hacer tarde ¿te has puesto ya el bañador?
Sí.
Horas más tarde, en el coche del padre de Ryo...
Venga, Miyuki, usted será mi copiloto - decía Maoko, mientras la madre de Rika se sentaba a su lado.
¡Qué divertido es usted!
Esto se pone un poco raro ¿no crees, Ryo? - le preguntó Rika, que se sentaba a su lado, en la parte de atrás.
Tranquila, se porta así con todas las mujeres.
Rika, nieta mía, apretújate un poco más contra ese chico, que si no no quepo.
Si, abuela. Ryo, échate tú también un poco p'allá.
Claro, Rika - al fin Rika pudo moverse. Ryo le dijo, susurrando - Dime una cosa, Rika ¿sientes ya mi respiración, y todo eso?
Serás jodío...última vez que te digo algo así.
Venga, Rika, no me digas que te vas a enfadar el último día que vamos a pasar juntos...
No me lo recuerdes, por favor, Ryo.
Perdona.
Nada va a ser lo mismo sin ti...
Eh, oye, no te desanimes.
¿Cómo pretendes que no lo haga? - dijo con la mirada triste.
Rika... ¡¡¡PAPÁ, PON MÚSICA COMO TÚ SABES, QUE ESTA ME SE ESTÁ DEPRIMIENDO!!!
¡Ryo! ¡No me estoy deprimiendo! ¡Sólo... - sonrió Rika.
No, ya no - sonrió también Ryo.
¡YA VOY, HIJO! - gritó Maoko.
El viaje, no duró demasiado, a penas media hora. Primero, los adultos (al menos físicamente, porque el padre de Ryo...) dejaron a Rika y Ryo en la playa, y luego se fueron a una cafetería.
Fin
Que nooooooooo, que era coñaaaaaaaaaaaaaaaa.
Bueno, como iba diciendo, Maoko, Miyuki y Kibumi (la abuela de Rika) se sentaron en la cafetería y comenzaron hablar.
¿Qué vais a tomar? Os invito - dijo Maoko.
¡No hace falta! - contestó Miyuki.
¡Que sí, rediez! Yo una birrica, o dos.
Bueno, pues yo un café con leche ¿y tú mamá?
Yo un té verde.
¡Estupendo, voy a comandarlo, y también pediré unas pastas, para llenar el estómago!
Vale, te esperamos - dijo Miyuki.
Entre tanto, en la playa...
¿Se supone que estás bueno?
Claro que sí, ¿acaso no ves lo musculoso que estoy?
Pos hombre, no sé que decirte...
Siempre has sido así.
¿Cómo así?
No quieres admitir cosas que te dan vergüenza, e intentas mentir para ocultar la verdad. Habrá gente a quien le engañes, pero te aseguro que a mí no. No sabes mentir, Rika.
¿Insinúas que yo pienso que estás bueno, pero lo intento disimular?
Sí.
Qué creído eres ¿no?
Puede que un poco pero aun así, no me engañas.
Allá tú.
Voy a darme un chapuzón ¿vienes?
No, no me apetece mojarme.
¿Y para qué hemos venido aquí, entonces?
No sé.
Bueno, entonces vamos con nuestros padres ¿no?
¡De eso ni hablar! ¡Quiero estar a solas contigo! - exclamó Rika. Ryo sonrió ampliamente.
Je, y luego, tras mentir, metes la pata soberanamente. Además, con la de gente que hay aquí, esto no estar muy a solas que digamos ¿no crees?
Sin comentarios.
Hey, pero podemos ir allá, donde esas rocas, ahí no parece haber nadie. Y tengo agua cerca, pa mojarme un rato (y para tirarte al agua cuando menos te lo esperes) - pensó.
Está bien, vamos.
En las rocas...
Mira, soy el as. Ya verás qué bien me tiro al agua - dijo Ryo, poniéndose en pie sobre una roca, y saltando. Se sumergió en el agua, que allá era bastante profunda y al poco rato sacó la cabeza.
¡Está muy templada! ¿Por qué no bajas un rato?
Te he dicho que no me apetece.
Guay, pos voy a nadar un rato.
Vale.
Eh, oye, ¿por qué al menos no bajas a la roca más baja, para poder hablar contigo?
Está bien - contestó Rika, bajando a dicha roca - ¿de qué quieres hablar?
De lo que quieras... ¡eh, mira, una gaviota!
¿Dónde? - preguntó Rika, mirando al cielo. Ryo la agarró de una pierna y la tiró al agua.
¡Cabrón! - gritaba ella mientras sacaba la cabeza - ¿Por qué lo has hecho?
¡Encima que lo he hecho por ti! - exclamó Ryo, mientras sonreía.
¿Qué?
Así puedes sentir mi respiración, oír mis latidos, y tal.
¡Yo te mato! - dijo, sumergiendo la cabeza de Ryo en el agua - ¡Qué! ¿A gusto?
¡FÏIIIIIIIIIIIII! ¡MUY A FUFFTO!
Pues te vas a quedar así toda la tarde - sentenció. Ryo, que comenzaba a sentirse mal dijo:
FERÁ BROMA FBURBFRBFS.
No lo es.
¡¡¡FÁCAME DE AQUÍ, QUE ME AFOGOOOOOOOOO!!!
Si me pides perdón por tirarme.
PEFFDON!!!!!
Está bien - afirmó, satisfecha, y sacó la cabeza de Ryo del agua.
¡Joder, qué subidón! -dijo, agarrándose a los hombros de Rika, para recuperarse.
¿Estás bien?
Puf...creo que voy a necesitar el boca a boca ¿eh?
Serás... bueno, en serio, Ryo ¿te encuentras bien?
Sí, tranquila... ¿por quéte preocupas tanto por mí?
Lo hago por mí misma, si te hubieses ahogado me acusarían de homicidio. Menos mal que sigues vivo.
Tan sarcástica como siempre.
Y tú tan sonriente y encantador como siempre.
Esto me suena de algo... creo que ya me lo dijiste alguna vez.
Sí, yo también lo recuerdo. Fue el día que evolucioné por primera vez junto a Renamon en Sakuyamon, el día que nos encontraste de nuevo. Te portaste muy bien conmigo, además, ayudándome a detener el d-reaper, cuidando de Calumon y también...salvándome la vida. Si Cyberdramon no hubiese detenido aquella burbuja en el último momento, y tú no me hubieses arrastrado hasta aquella cueva, no seguiría viva. Gracias - dijo, besándole en la mejilla con cierta dificultad. Ryo se puso rojo (por segunda vez ¡¡¡¡ueeeeeeeeeeeeee!!!!)
De nada, Rika. Parece mentira todo lo que hemos vivido juntos ¿no crees?
Sí, tengo muchos recuerdos tuyos, y todos muy buenos, aunque no lo pareciese. Oye, aquí estoy como que un poco mal para hablar, casi mejor si subimos de nuevo a las rocas.
Vale, pero antes ¿me puedes hacer un favor?
¿Cuál?
Siempre he tenido la ilusión de...joder, te va a parecer una chorrada...
DILO.
Pues de besar a alguien en el agua. ¿Me dejarías que lo hiciera?
Sí, claro, me parece bien. - dijo, abrazándose a Ryo y sonriéndole.
Gracias, no lo olvidaré nunca - al principio, rozó suavemente sus labios con los de Rika con timidez, pero luego ya, la besó como nunca lo había hecho. Era un momento para no olvidar nunca, además, era una suerte que el oleaje fuese débil, aquello hizo que no se sintieran incómodos para nada.
Joder, Ryo - dijo Rika, cuando se separaron - Esto SÍ que ha sido un subidón. A pocas me ahogo pero bueno.
O sea, que te ha gustado.
Mmmm...no te voy a responder. Al menos de momento. Sabes de sobra que no me gusta hablar de estas cosas... Subamos a las rocas. ¿de acuerdo?
En aquellos mismos momentos, en la cafetería...
Y dime, Maoko ¿cómo era tu hijo de pequeño? - preguntó Miyuki. Maoko, terminó de beber su primera cerveza y dijo:
¿Mi hijo? Bueno, cuando aún estaba Liu, se solía portar bastante bien, pero en cuanto me quedaba solo con él, se volvía loco perdido, y comenzab a dar botes por toda la casa. Me volvía loco: tan pronto le veías en su cuarto jugando, como viendo la tele, como rompiendo un jarrón, asaltando el frigorífico, o inundando el baño.
Era un poquito movido ¿no?
¿UN POQUITO MOVIDO? ¡Lo que era es un puto niño hiperactivo! Aunque los médicos nunca se lo diagnosticaron, claro, como siempre iba con su madre...
¿Y cuando se fue tu mujer? ¿Se portaba mejor? - preguntó Kibumi.
¿Mejor? ¡Anda ya! Cuando se fue mi mujer, es decir, cuando Ryo comenzó el colegio, se convirtió en un hijo puta, con perdón de la expresión. Las notas, penosas, y del comportamiento, mejor no hablar, se pegaba todo el día levantándoles las faldas a las niñas de su clase, el muy jodío. Raro era el día que no me llamaban del colegio para quejarse. ¡La bronca que le eché un día! Incluso le llevé al psicólogo, para ver que me recomendaba, aunque al final el que acabó en el psicólogo fui yo, de lo harto que me tenía Ryo.
¿Y qué te recomendó hacer? - preguntó Miyuki.
Me recomendó apuntarle a algún deporte para que se dejase en él parte de su energía. Le apunté a natación, que, según el psicólogo, le relajaría.
¿Y lo hizo? - volvió a preguntar la joven mujer.
¡Qué coño lo va a hacer! Bueno ¿y Rika? ¿Cómo era ella?
Bueno, era una niña muy tranquila, callada, y amable con todo el mundo, al menos hasta su séptimo cumpleaños.... cuando lo celebró, todo el mundo se reía de ella, porque no tenía padre. Ella insistía en que sí lo tenía, pero que estaba de viaje en el mar, buscando tesoros. Se armó una buena y Rika comenzó a llorar. Llegué yo, para ver qué ocurría, y me dijo que a que era verdad que su padre estaba de viaje. Cometí un gran error, le dije que no, que en realidad no estábamos juntos. Todos comenzaron a reírsele a la cara, y ella a pegarles, y echarles de casa. Desde entonces, siempre me ha estado preguntando el poruqé de nuestra separación, pero yo nunca se lo dije. Sin darme cuenta, se comenzó a encerrar en sí misma, y se volvió fría, insensible, y desarrolló su mal genio. Al menos, por suerte, se consiguió hacer respetar.
Pobre Rika. - suspiró Maoko.
De todos modos, la cosa no se quedó solo en eso. Se escapaba de casa cada dos por tres, y luego volvía a las tantas de la noche. Nunca conseguía hacer amigos, aunque tampoco ella quería tenerlos. Incluso comenzó a comprarse ropa de chico, y a parecer un poco marimacho, es una pena, poruqe es una niña muy bonita... Bueno, y conmigo se portaba de lo más borde posible. Antes de lo del cumpleaños, era muy amable conmigo, y me lo contaba todo, pero después ya casi ni me hablaba, y aprovechaba cualquier momento para reprocharme el que nunca estuviese en casa. Luego, ya explotó definitivamente, con ocho años. Fue cuando comenzó toda la moda esa de los digimons, a la que solo se apuntaban los chicos. Pues bien, ella también se apuntó, seguramente para fastidiar, y comenzó a luchar en partidas de cartas contra todo el mundo, y siempre ganaba. Se hizo realmente fuerte, y el juego le comenzó a gustar de verdad. Aquel mismo año, se apuntó a aquel torneo de cartas. Ganó a todo el mundo sin ningún miramiento ni dificultad, pero luego, en la final...fue derrotada por un chico. Cuando llegó a casa, comenzó a romper jarrones, platos...no me atreví a decirle que parase, por un a parte quería que se desahogase... Y todo porque un niño le venció...
Una cosa, Miyuki, ¿eso en qué año fue?
En el 1999 ¿por qué?
Porque ese mismo año, mi hijo también se apuntó a ese mismo torneo, y ganó a una chica que me describió como tu hija.
Entonces, Ryo es...el que la ganó. Sí, es verdad, ella también me describió a alguien como tu hijo. Con algún calificativo desagradable, pero bueno.
Tiene gracia que ahora estén juntos y se lleven bien. De todos modos, ahora Rika parece ser, sin ánimo de ofender, más...normal ¿no cree?
Sí, y no me ofende, de hecho me alegro de que ahora sea como es. Sigue siendo un poquito borde, fría y tal, y pobre del que se meta con ella...pero ya no es la misma. Poco a poco, parece ser que se está volviendo a transformar en la niña amable que gustaba a todo el mundo...
Señores, sus pastas - aquel era el camarero, que llegab al fin (anda que no había tardado ni nada...) con el plato de pastas. Miyuki y Maoko, habían recordado el como eran sus hijos de pqueños, pero no eran los únicos que recordaban el pasado...en la playa...
O sea, que así fue como conociste a Renamon... - dijo Rika.
Sí, así fue.
La hechas de menos ¿no?
Sí, haría lo que fuera por volver a verla. Si es que siempre me pasa lo mismo, siempre pierdo cosas importantes en mi vida. Primero mi padre, luego a Renamon, y ahora, te voy a perder a ti.
Tienes razón Rika, no lo niego, pero solo en parte. A tu padre, le puedes volver a ver si quieres, a Renamon la verás sin duda un día u otro y a mí, te juro por lo que quieras que también me volverás a ver, y cuando vuelva, no me iré nunca más, aunque tenga que abandonar todo.
Típico de ti, Ryo. Siempre estás haciendo cosas por mí. Tengo algunas preguntas que hacerte.
Soy todo oídos.
¿Por qué ayudaste a Kyubimonn el día aquel que Kazu, Kenta y yo nos encontramos contigo?
Pos joé, hija, porque estaba en apuros. Pero yo también tengo que preguntarte algo sobre eso ¿Por qué no me lo agradeciste?
Porque te odiaba, o al menos creía que lo hacía. El día que te volví a ver, estaba muy cabreada, porque me ganaste, y más que nada, y esto no lo sabe mi madre, por cómo me ganaste. El colmo fue encima que Cyberdramon pudo vencer a esa bestia parda, y mi Kyubimon no. Era como una reafirmación de que eras mejor que yo, y luego además, va Kazu y me lo restriega, y para colmo, encima no me recuerdas. Por todo eso me fui, aunque sigo manteniendo que la mayor razón era el cómo me ganaste. Pero estaba muy equivocada contigo, Ryo. Me di cuenta cuando me estuviste cuidando cuando me envenené con aquella seta (ver "una cosa lleva a la otra", que por cierto, ya arreglé lo de los diálogos juntos). Fue entonces cuando me di cuanta de que sólo querías ayudar, de lo mucho que te preocupabas por mí. Además, fue muy bonita tu declaración de amor, y ese besito tímido que me diste, fue inolvidable.
Gracias, Rika. A mí, aquello me marcó mucho ¿sabes?
¿Sí?
Sí ¡no veas la marca que me dejó en toda la jeta tu tortazo!
¡Siempre igual de bromista! - dijo Rika, entre risas - y por cierto, no me enfadé contigo por lo del beso, en realidad estaba enfadada conmigo misma, por no tener el suficiente valor como para salir contigo. Creo que nunca te he odiado de verdad.
¿Estás enamorada de mí?
Vaya pregunta me haces, Ryo...tengo mis dudas. Cambiando de tema ¿por qué me seguiste el día de lo de Sakuyamon?
Porque quería ayudarte,. No pude quedarme quieto, además, nunca me hubiese podido perdonar el que te hubiese pasado algo malo. A un mala, me hubiese sacrificado yo por ti. Prefería morir yo antes que perderte. Eso no sería una vida. No sin ti.
O sea, que estabs dispuesto a morir por mí.
Sí.
Ryo...me avergüenzo de mí misma, tú siempre has hecho mucho por mí, y yo nunca te he ayudado en nada. Como aquella vez que me fuiste a buscar, a pesar de que el arca estuviese a punto de irse.
A mí me daba igual quedarme en el mundo digital, y quería que los demás volviesen. Además, quería volver contigo, no quería dejerte sola allá.
¿Ves? Si es lo que yo digo, tu siempre has hecho de todo por mí, y nunca te he ayudado. Nunca.
En eso te equivocas, Rika. Si que me ayudaste una vez...
Entre tanto, en la cafetería, Maoko iba ya por su sexta cerveza, comenzaba a hablar un poco raro:
Así que ttttttttu jijita Rika desde que volvió del mundo ese es la leche ¿no, Miyuki?
Eh...sí, lo es...¿no cree que debería dejar ya de beber?
¡Bah! ¡Sólo estoy unh foco colocau, na más! Joé, pos el cabrito de mi fijo, cuanfdo je fue al mundom eje con el piazo bicho ese, que jolo fabe fruñir, ni avisó ni nada...será guarro...podía hagerme dichfo al fenos algo como: ¡pa, me voy a un mundo paralelo! Por juerte, cuando comenzó to ejo de los digimones se volvió más tranquilo...fenos mal...el cabrón de mi hijo sieeeeeeeempre a jido un mujeriego, pero no se preocupe por Fika, para él ella es distinta, mi fijo sa enamorau de verdad... ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ALELUYAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!!!!!!!!!!
Pfff - reía Kibumi - este hombre está fatal...
A ver como acaba esto...
Volviendo a la playa:
Qué, Rika ¿no caes aún en la ayuda que me diste?
Pues no, que quieres que te diga...
En fin, me rindo. Te lo recordaré yo mismo, tranquila...
Flashback
Sakuyamon, quiero que cargues con toda tu energía la hoja de Justimon.
Pero qué locura pretendes - dijo Sakuyamon. Rika, desde su interior afirmó.
Pero Ryo, ¿tú estás loco? ¿No sabes lo que te puede pasar?
Rika, nosotros solos no podremos hacer nada, pero si vuelcas toda la energía de Sakuyamon en la hoja de Justimon, podremos partir al d-reaper por la mitad.
No, Ryo ¡es muy peligroso, te puede pasar algo terrible!
No me pasará nada, hazlo, ¡te lo pido por favor, Rika...!
Ya sabía que eras todo un temerario... - sonrió Rika, emocionada, y con los ojos llenos de lágrimas.
Es la primera vez que me adulas - sonrió Ryo.
¿Estás segura, Rika? - inquirió Sakuyamon.
Sí, estoy segura, y confío PLENAMENTE en Ryo y Justimon.
Está bien, Rika - contestó Sakuyamon mientras reunía toda su energía.
Ryo ¡recíbela! - exclamó Rika. (Nota de la autora: esto ese lo que más o menos dice en la versión española, no sé qué dirá en la argentina, o en la americana).
Fin del Flashback
¡Ah! Sí, ya lo recuerdo...pero eso no es ni la mitad de lo que tú has hecho por mí, además, no te salvé la vida precisamente.
Pero me hiciste un favor, y confiaste en mí, y que alguien confíe en mí, es el mejor regalo que puede hacerme.
Aun así, yo sólo he hecho eso por ti, nada más.
Te equivocas, el permitirme estar contigo, también es un regalo.
Puede que para ti lo sea, pero aun así, te prometo que algún día, yo también te salvaré la vida.
Si insistes. Nunca hubiera imaginado que llegarías a decir eso, Rika.
Yo tampoco. Ryo...
¿Qué?
Cuando te vayas, te voy a echar mucho de menos...
Oye, que si quieres me desapunto e la universidad...
¡No digas tonterías, por Dios!
Pues entonces, te OBLIGO a que no me eches de menos, Rika. Como ya dijiste en una ocasión, no sirve de nada, si de todos modos te volveré a ver...
Ya claro, pero eso iba a ser por unas semanas, como mucho. Sé que te voy a echar de menos, porque ya lo hice cuando volviste a Fukuoka.
Pero si ni siquiera viniste a despedirme...
¡Precisamente porque no quería despedirme de ti! Aquel día me quedé en casa llorando ¿sabes? Estaba totalmente sola en el mundo. No quería ver a nadie, y ni siquiera mi abuela y mi madre estaban ahí, para ayudarme. ¿Y si eso me vuelve a pasar ahora? Tengo miedo de que ocurra.
Oye maja, que yo también te eché muchísimo de menos, y además, como añadido, creí que definitivamente me odiabas. Llegué a pensarlo de verdad.
Ya, tienes razón una vez más Ryo. Soy muy egoísta.
No, Rika, es normal que tengas miedo de que te vuelva a ocurrir algo, pero ¿sabes? Yo sé que no te va a volver a pasar. Tienes recuerdos míos, como esa foto, y me puedes llamar al móvil siempre que quieras. Además, ahora ya estamos bien el uno con el otro. Si la otra vez te pusiste triste era porque, seguramente, sentías como que no te habías portado bien conmigo del todo. Pero ahora sí que lo has hecho, y de hecho antes también, solo que no te lo dije.
¿Pues sabes qué te digo, Ryo? Que tienes razón, no te pienso echar de menos. ¡No es el fin del mundo! Ni siquiera eres mi novio, sólo un amigo, y dudo que seas mi novio algún día.
¿En serio que no...?
Recuerda tu teoría de antes, la de decir una cosa y pensar otra, aunque recuerda también esto: no siempre es así.
Así se habla Rika - dijo Ryo, con una amplia sonrisa - ¿Nos damos un último beso de despedida?
¡Ah, no! Ni hablar, si lo hago, sé que me volveré a colgar, y entonces si que no habrá remedio para que me deprima. Dejémoslo en un abrazo, ya habrá tiempo para lo demás cuando vuelvas. Pero eso sí, no pienso hablar de nada de lo que ha pasado estos días, pienso evitarlo.
Je, sabía que lo dirías - sonrió Ryo abrazando fuertemente a Rika.
Chico listo - suspiró ella - Ah, y no te quejes si, cuando vuelvas, vuelvo a ser una borde integral. Tú eres el único que me puede domar, y el único que lo ha conseguido.
¡No olvidaré eso, descuida! Y tampoco olvidaré tus ojos - añadió, cuando Rika se hubo desembarazado de él.
Ryo, no empecemos...
Rika...bueno, creo que ya es la hora. Tenemos que volver a la cafetería, con nuestros padres y tu abuela.
Sí, por cierto, Ryo. Lo que yo JAMÁS olvidaré de ti, será tu sonrisa.
En fin, volvamos a la cafetería, donde la cosa ya se estaba descontrolando bastante:
¡¡¡CAMAREROOOOOOOO!!!!! ¡¡¡¡PÓNGAME OTRA BIRRA, CAGÜEN FIEZ!!!!!!!!
Señor, le insisto que vamos a cerrar ya y....
¡¡¡¡ME LA SUDA!!!!! ¡¡¡¡¡QUIERO MI BIRRA!!!!! - exclamaba Maoko, pegando un puñetazo en la mesa.
Está bien, está bien... - el camarero, asustado, volvió al interior del restaurante. Miyuki dijo:
Maoko, creo que estás un poco...tocado ¿no crees?
¡¡¡Bah!!! Cofaf que fasan....¡¡¡¡¡HIIIIIIIIIIC!!!!! Miyuki, te aseguro que, si no tuviera casau, ¡¡¡te tiraría los tejos pero ya!!!!! ¡¡¡Estás como un tren!!!!!
Vaya, gracias, Maoko.
Hija mía - dijo Kibumi - es increíble que aún sigas siendo tan ligona.
¡Bueno, lo hago sin proponérmelo!
Señor, su cerveza.
Birra.
Cerveza.
¡¡¡Birra!!!
¡¡¡Cerveza!!!
¡¡¡BIRRA!!!
¡¡¡CERVEZA!!!
No me contradiga - dijo Maoko sacando su navaja.
Glups, señor...está bien, birra.
Así me gusta, majetón - sonrió Maoko, guardando su navaja y dándole unas palmaditas en la espalda al camarero - tenga lo que le febo, quédese con las fueltas - sacó un billete, que debía ser de una cantidad muy alta, porque se puso feliz.
Papá... - dijo Ryo, que acababa de llegar con Rika - ya has vuelto a beber...¡muy mal chico! ¡Te voy a confiscar todas las cervezas cuando lleguemos a casa!
¡Noooooooo, eso nooooooooooo! - dijo Maoko, arrodillándose ante su hijo.
Qué patético... - suspiró Rika.
Pues no has visto nada...otras veces ha sido aún peor.
¡Venga Maoko, tenemos que volver a Shinjuku! ¡Yo conduciré!
¡Genial, guapa, porque tooooooooooooodo me da vueeeeeeeeltas, y más vueeeeeeeeeeltas, y más vueeeeeeeeeeeltas.
Puff - suspiró Ryo - qué resacón va a tener el pobre...
Y bien, Fyo, ¿os habéis liado mucho Rika y tú?
¡Eso no te incumbe, papá! - le reprochó Ryo. Maoko comenzó a llorar, y Rika, su madre y su abuela a reír.
Cuando consiguieron levantar a Maoko del suelo, montaron al fin en el coche, que condujo Miyuki, y que dejó primero a Ryo y Maoko en su casa. Maoko se sentó en la puerta, mientras Rika y Ryo se despedían.
Bueno, Rika. Ya sabes, sé fuerte, como siempre lo has sido.
Está bien, Ryo - dijo, abrazándole con fuerza.
Ya sabes, llámame siempre que quieras. Ardes en deseos de hacerlo ¿no?
¡No me seas tan creído!
¡¡¡RYO, CAGÜEN TI, BÉSALA DE UNA VEZ!!!
¡No voy a hacerlo, papá!
Je, tu padre es la leche, se ve que os parecéis.... - le besó suavemente en la mejilla, le sonrió, y se volvió a montar al coche. Ryo, también le sonrió, y se giró... ¡su padre se había quedado dormido! Se encogió de hombros, y despidió con un gesto a Rika y su familia. Ellas hicieron lo mismo.
