|
Ja! Todo de JKRowling... Ya saben. Ya saben. De JKRowling... Rowling...
Agradecimientos |
Responsabilidad Aprendida
Desequilibrio
|
Pido públicamente disculpas por la brevedad del anterior capítulo ^^;; Pero no estaba de muy buen humor para haber escrito algo mucho más largo. Así que era un capi cortísimo, o tendrían que seguir esperando... Y como ya me había demorado bastante... pues... *tos**tos* Lo siento!! |
~*~
Observo hipnotizado la chimenea. El fuego baila ante mis ojos, burlándose de mi impotencia.
Naranja.
Rojo.
Olor a cenizas.
Gente quemada viva.
Gritos que murieron hace ya tanto tiempo, mientras sus vivos cuerpos se carbonizaban.
Niños.
Trago saliva, mi garganta está reseca.
Sé que debería estar asustado. Deprimido. Furioso. O... algo. Sin embargo, no llego a sentir emoción alguna. Simplemente... vacío. Cansancio. Apatía. Desgano. Desinterés.
¿Que si la guerra añadió más nombres a la lista de víctimas? Sólo unos cientos de cuerpos más... De seguro el futuro de la humanidad no peligra. Con la tasa demográfica de muggles en el presente, es más que seguro lograrán recuperar todos los muertos en un par de décadas.
¿Si la sangre mágica se diluye demasiado a tal punto que sea inútil? ¿Por qué debería ser mi problema? ¿Para qué sirve la magia sino para traer desgracias al mundo y otorgar poder a quienes no lo merecían? Mejor sería que no existiera.
Que no existiera nada.
Que todo se destruyera.
Que regresemos a la nada de la que salimos...
El universo es vasto y colosal, podría crear otra Tierra con otros Humanos en cualquier momento de su historia. ¿Qué importancia tenía éste?
Había que purificar el mundo...
Demasiada miseria. Muerte. Violencia. Victimas. Maldad. Hambre. Crueldad. Pobreza. Egoísmo. Odio. Poder. Enfermedad. Oscuridad. Inevitable... todo ello, inevitable.
Que el universo cree un cosmos perfecto. No la pesadilla que vivimos hoy.
Me sacuden de mi trance.
Parpadeo.
Alzo la vista.
Una Hermione preocupada me devuelve la mirada. Rastros de lágrimas visibles en su pálido rostro.
Me abraza.
Fuertemente.
-Harry... -solloza contra mi túnica.
Mi cordura regresa.
Oh...
Estaba perdiendo el control. Pronto... Pronto terminaría siendo un peor ser que el mismo Voldemort. Al menos él tenía suficiente mente y racionalidad como para hallar una causa por la que destruir. Yo...
Cerré mis ojos por un minuto.
Destrucción por el simple deseo de la destrucción, sin el placer involucrado, sino una completa purificación... Eso era desquiciado.
Estaba perdiéndome. Nuevamente.
Una fuerza me abrazó el cuello, meciéndose contra mi persona.
-Hermione, ¿estás bien? -oigo a Ron preguntar detrás mío.
Su enamorada me suelta y corre hacia él, continuando el mismo proceso en sus brazos.
-Se fuerte -lo oigo susurrar.
Me siento culpable. Culpable por mi incapacidad de sentir la pena. Me avergüenzo de no tener la sombra de tristeza en mi corazón. Culpable por no preocuparme ni una pizca por los muertos.
Al menos por ahora.
-¿Estás bien, Harry?
Volteo mi cuerpo y lo miro a los ojos.
Nublados y concientes del presente.
-Pronto lo estaré -respondo enigmáticamente, una deliberada sonrisa hallando camino a mi rostro.- Vamos, es hora del desayuno -mi tono alegre y jovial.
¿De dónde sale esta energía? Estoy conciente que no me siento feliz. De que no hay nada por lo que estar así. Y sin embargo... no puedo evitar la respuesta involuntaria de mi cuerpo.
Estoy cansado, me convenzo.
No me acosté anoche. Toda la madrugada me la pasé en vela frente a la chimenea. Siendo espectador de la Danza de Llamas. Otra vez. Las imágenes no lograron desvanecerse de mi acalambrado cerebro. Cansado de pelear contra ellas, les permití tener rienda libre.
No puedo hacer al respecto, me repito.
Hice mi camino hacia el retrato de la Dama Gorda, escabulléndome con varios de mis compañeros de la Sala Común. Varios rostros sombríos.
***
-Que sorpresa que el maravilloso héroe Harry Potter, se digne asistir a una humilde clases de pociones -sarcasmo inicia la lección de hoy.
Río. En voz alta. A gran escala. Maniáticamente.
Snape me dirige una mirada incisiva, que logra aumentar las energías de mis carcajadas. Puedo sentir los confusos ojos de mis compañeros, algunos negando la cabeza.
Juran que he perdido la razón.
No está tan lejos de la verdad.
Mi atención se divierte hacia cierto rubio de ojos grisáceos. Draco Malfoy sostiene mi mirada por varios segundos, una fingida sonrisa sarcástica en sus labios.
Le devuelvo una de las mías.
Es imposible volverte un maestro en máscaras, sin desarrollar el arte de ver a través de éstas.
Necesito hablar con mi némesis, me recuerdo.
Sonrío tranquilamente a Snape, que se confunde de mi actitud. Creo que se me pasó el control y le di una sonrisa enferma, de esas que demuestran mi creciente locura. Suelto una risita ridícula imaginando mi rostro.
Hoy estaba mucho más... desequilibrado de lo normal.
Suspiro internamente.
El día iba a ser demasiado largo.
-Potter, un momento de tu preciosa vida -el profesor Slytherin indica que me quede en el salón.
Me encojo de hombres hacia Ron y Hermione.
-Luego los alcanzo en el Gran Salón.
Ron me mira suspicazmente. Hermione me acusa con sus ojos.
Sé que desean conversar seriamente sobre mi... inusual comportamiento en clase. Pero no tengo ganas de hablar de ello. Esta era una gran oportunidad para escaparme del interrogatorio que vendría a continuación.
-Harry Potter, ¡pobre de ti que no llegues al Comedor! -me amenaza ella.
Asiento sonriente.
Ron alza una ceja, cuestionándome.
Uhh... Al parecer mis reacciones no están acorde a las situaciones del día. ¿Hubiera sido mejor la seriedad?
-¡Señor Potter, no tengo todo el día! -reprende una fría voz tras mío.
-Iré, Mione -digo antes de voltear y entrar al salón nuevamente.
Erguido orgulloso me detengo frente al escritorio de Severus Snape, conocido profesor por su justicia ante disputas Slytherin-Gryffindor, comprensión a sus dedicados alumnos y tolerante paciencia al enseñar.
Apoyo mi peso en una mesa a mi espalda, cruzándome de brazos.
-Dígame, Profesor Snape -imito su frío tono.
O eso intentaba. Una sonrisa sádica se deslizó de mi control, añadiéndole odio y malicia a mis palabras.
No puedo suprimir la carcajada burlona que brota ante la expresión guardada del hombre.
Cuando caigo en cuenta de qué estoy haciendo y con quién lo hacía, callo súbitamente. Mi rostro impasivo e inmutable.
-Lo siento -me disculpo en voz alta, voz libre de emoción.
El Slytherin alza una ceja acusadora.
-¿Se encuentra bien, Sr. Potter?
¿Qué era con esa pregunta? Últimamente todo el mundo me ha estado repitiendo lo mismo. Ya estaba harto de escucharlo.
-Estoy bien -respondo con una sonrisa idiota en mi rostro.
¡¿Qué hay con mi conducta el día de hoy?! ¿Acaso estaba condenada a no tener correlación con mi estado mental?!
Niego la cabeza.
Es el cansancio, me repito por décimo sexta vez en el día. Quizá debería regresar a mi habitación a intentar dormir...
-El Director está preocupado por ti, Potter.
Una sonrisa burlona nace en mis labios.
¿Ah, si?
-Así como todos tus maestros, -conecta rígidos ojos- los NEWTs son este año, después de todo. Harías mal en descuidar tus estudios sólo porque hay... ruido ambiental -haciendo alusión a Voldemort y su preciada guerra.
-Las clases ya no me importan -declaro indiferente.
-¡Es obvio que no! ¡La falta de respeto al traer una serpiente ilegal al castillo! -enojo en sus palabras.
-Pensé que Slytherin sentía respeto por su símbolo -comento sarcásticamente.
-Te pareces más a Tom Riddle con cada día -murmura casi inaudible.
Endurezco mi mirada.
-Voldemort era diferente -informo con frialdad.
Él iba a clase, me recuerdo.
No.
No estoy sucumbiendo a la oscuridad. No, eso es mentira. Aún me queda tiempo. Todavía no me pierdo. Todavía no.
Por favor, que no sea cierto... Unos pocos días más. Pocos días.
-¿Cuál es tu problema, muchacho? -demanda saber.
Sonrío abiertamente.
-Con todo respeto, Profesor, mis problemas personales no le interesan.
Se resume en dos palabras.
Dumbledore. Voldemort.
Río ante la propuesta de contarle la verdad sobre Albus. Como Slytherin y seguidor del Dark Lord, era seguro que conocía la Gran Verdad. A menos que Dumbledore lo haya convencido de que era falso.
-¿Qué tan cercano es con el Director? -pregunto sin ánimo, contrastando con mi anterior estallido de emoción.
-¿Y eso a usted que le importa? -una chispa de impaciencia ante mis palabras.
Uh... Snape estaba perdiendo la paciencia. Snape estaba perdiendo la paciencia. La paciencia... Paciencia...
¡Arghh!
La falta de sueño me está afectando. Necesitaba ir a dormir. Ahora. Ya hablaré con Ron y Hermione más tarde.
-Snape, -bajo mi vista al suelo- agradezco... nuestra inusual relación -tono derrotado.- Me has ayudado a mantener mis pies en el suelo, y eso es bueno...
Es bueno...
Sonrío cansado.
-¿Te sorprendería si digo que eres mi maestro preferido? -tono burlón.
Él se prepara a contraatacar.
-Un gusto conocerte -digo antes de que pueda hablar.
Me mira extrañado. Confundido.
Me encojo de hombros.
-Ahora... -mi expresión plana- si me das detención, te advierto que no iré. Si me quitas puntos... me alegraré que Slytherin gane este año, se lo merece. Y si no me respondes, me retiraré a dormir porque anoche no pude hacerlo. Así que adiós -imito una reverencia burlona.
No le doy tiempo para que contestara.
Huí de los calabozos tan pronto puse pie en el pasillo.
Realmente necesitaba ese descanso.
Sólo faltaba que empezase a alucinar a Tom Marvolo Riddle bailando en tutú rosa por todo Hogwarts...
Tutú rosa... Música clásica... Ropa ajustada... Expresión frágil... Pasitos ridículos... Piruetas hábiles...
¡ARGHH! ¡Las imágenes! ¡Las imágenes!
Sueño. Urgente. Ahora. Yo.
|
Y se suponía que iba a descansar de escribir este fin de semana!! ¬¬ Lamentablemente mi conexión se fue a la mierda el viernes por la noche y ante la falta de actividades recreativas, decidí sacarme este capítulo de encima. Snape. Corta la conversación. Que más da? Harry está demasiado... fuera de sus cabales en este capítulo. Así que no lo culpen por soltar tontería y media (y reaccionar de la misma manera). Hogsmeade le afectó, aunque él piense que no es así. Eso y la falta de sueño... ^^;; Y se nota mi obsesión con los Harry/Tom Riddle? ^.- Jajajaja... XD |
