Disclaimer: Todos los personajes usados en esta historia son creación de J.R.R. Tolkien, a excepción de Iszindriel, Hèrion, Norhim...y todos los demás no pertenecientes a El Señor de los Anillos

Los minutos se hicieron horas y al cabo de un tiempo en el cual Hèrion no había parado ni un instante para descansar, oyó un ruido de monturas acercándose al galope. La chica apenas tuvo tiempo para ocultarse y, de haberlo tenido, le habría sido imposible, pues atravesaba una gran llanura apenas surcada por unos pocos matorrales y algún que otro árbol.

Así se dio la vuelta e hizo frente al grupo de jinetes que se acercaban. Como pudo distinguir por sus ropajes parecían elfos en su mayoría. El que encabezaba el grupo se acercó a ella, era una chica elfa.

-Perdonad, no deja de resultarme extraño el ver a una mujer caminando sola por las llanuras de Rohan, ¿necesitáis ayuda? ¿quiénes sois?

Hèrion dudó por un momento y la elfa continuó.

-Oh, perdonad, mi nombre es Iszindriel, del reino de Earöl, vamos hacia allí...¿y vos?

La chica titubeó.

-Yo...mi nombre es...

-¡Hèrion!- exclamó una voz conocida tras la mujer elfa que acababa de presentarse.

-¿Aragorn?- preguntó la humana extrañada.

El humano bajó de la montura y se acercó a ella asombrado.

-No me lo puedo creer, ¿realmente eres tu?

Hèrion asintió y Legolas se acercó también junto a Aragorn.

-Te creíamos muerta- exclamó.

-Me alegro de que estés bien...-continuó el montaraz sonriendo mientras la abrazaba.

Iszindriel los contemplaba sin acabar de entender nada.

-¿Os conocíais?

Aragorn asintió-

-No terminamos de decirte todos los que iban con nosotros, ella es Hèrion, se unió a la Compañía poco después de que partiéramos de Rivendel...pero durante la emboscada en Amon Hen creímos haberla perdido.

-Logré escapar y ayudar a Merry y Pippin- aclaró la humana.

-No sabes lo que me alivia ver que sigues con vida- continuó Aragorn- vamos camino de Earöl, vendrás con nosotros, ¿verdad?

Hèrion pareció pensárselo pero finalmente accedió.

-Bien, pues...puedes montar conmigo si no tienes ningún problema, al menos hasta que te encontremos una montura- ofreció el humano. (¿¿y quien se negaría??yo no y ella tampoco :D).

-Gracias...

La chica subió al caballo de Aragorn y éste tras ella y retomaron el viaje en silencio.

-¿Hacia dónde te dirigías?- le preguntó el humano.

-Yo...pretendía llegar a Mordor.

-¡A Mordor!- exclamó el enano- ¡¿Qué iba a llevarte a hacer tal locura?!

-¿Pretendías ir sola?- añadió el elfo.

Hèrion asiente.

-Sí, no tengo a nadie más y es algo que tengo que hacer...

Iszindriel la miró.

-Ahora nos tienes a nosotros- dijo amablemente.

La chica miró a la elfa fríamente pero apartó la mirada y continuó en silencio. Iszindriel dirigió la vista hacia Aragorn algo extrañada.

-Mejor paremos un poco- sugirió él- los caballos necesitan descansar y beber algo de agua- dijo señalando un pequeño lago.

-Será lo mejor...-asintió la elfa.

Pararon, bajaron de los caballos y se sentaron a descansar y comer algo. Iszindriel se acercó a Hèrion que permanecía alejada y le tendió un trozo de lembas.

-Pan élfico...-murmuró la humana- gracias...-añadió sin levantar la mirada hacia la elfa.

Ella miró a los demás asegurándose de que no la oían y se dirigió a la humana de nuevo.

-¿Te encuentras bien?- le preguntó amablemente.

La chica la fulminó con la mirada

-No creo que eso sea de vuestra incumbencia .

-Sólo pretendía ayudarte...

-Pues no necesito ayuda...y menos la de alguien como tú.

Aragorn se giró al oírla.

-¿Qué te ocurre, Hèrion?- preguntó extrañado.

-Los humanos sufrimos las muertes...a diferencia de otros- contestó ella mirando a la elfa de reojo.

Pero ella no se acobardó.

-Por fortuna algunos tenemos el don de poder devolver la vida- dijo, y se alejó.

La humana miró a Aragorn extrañada.

-¿Qué ha querido decir?

-Hèrion...-empieza el humano- Iszindriel encontró a Boromir...logró devolverle la vida.

-¿Qué?

-Boromir está vivo, en Gondor de hecho...- aclaró él.

La chica apenas podía creer lo que estaba oyendo pero intentaba no mostrar demasiado entusiasmo.

-Eso...eso es estupendo- dijo con una sonrisa algo mas animada.

Aragorn sonrió al descubrir por fin el por qué de su comportamiento.

-Sí, creo que le debes una disculpa a ella...- añadió Legolas uniéndose a la conversación y mirando a la elfa.

-Si bueno...supongo, lo haré...luego ¿de acuerdo?

Legolas le lanzó una mirada de "mas te vale" y se alejó.

Hèrion miró a Aragorn.

-Lo siento, no podía saberlo...jamás lo hubiera imaginado...le vi morir y eso...se grabó en mi mente, no podía soportarlo y ahora...

-Tranquila, lo entiendo, pero Legolas tiene razón... debes...

-Que sí...que hablaré con ella...

Continuará...