Dinah bajó de la camioneta y se colocó los lentes inflarrojos. Hábilmente
entró al edificio, sorteando algunos pasillos pudo cercarse al lugar donde
estaba Huntress. Bárbara la guiaba desde el vehículo, hay un tipo a tu
izquierda, ten cuidado, ve por el otro lado. Dinah llega frente a la cámara
de refrigeración y ve al guardia.
-Estoy aquí -indicó-, hay un solo hombre.
-Tienes el camino libre -indica Bárbara- sólo es él.
-¡Hola! - Dinah salió de su escondite y le sonrió- ¿Ha visto a mi tía por aquí?
-¿Es ese el plan? -pregunta Huntress al oírla.
-No hay tiempo y mucho menos ideas... -respondió Dinah al momento que desarmaba al guardia de una patada y lo dejaba inconsciente de otra. Sin mayor problema abrió la puerta de la cámara y se introdujo arrastrando al guardia inconsciente adentro.
Huntress suspiró al verla -Por fin ¿porqué tardaste tanto?.
-¿Te das cuenta lo que te pasa por ser tan difícil? -Dinah se acercó a ella y observó el cinturón que le traía puesto.
-Creí que era tolerable ¿Qué es eso? -preguntó Huntress viendo como Dinah sacaba la cajita negra que le había dado Bárbara de uno de sus bolsillos y la colocaba sobre el aparato. Le avisó a Bárbara que estaba instalado y esta le pidió describiera lo que le habían colocado a Huntress.
-Es una especie de cinturón -dijo Dinah-, de unos 15 centímetros de ancho y unos dos de grueso... esta cerrado al frente con un seguro muy sencillo y... -miró la espalda de Huntress- unos brazaletes que salen del cinturón encadenan sus manos por la espalda... El seguro es muy sencillo también, podría cortarlo con un golpe del láser... En las piernas solo tiene unas argollas.
-Pero puedes hacer explotar la bomba... -Bárbara revisó desde su camioneta el sistema- ok, puedes liberarle las piernas, no hay problema.
Dinah comenzó a cortar el metal. -Ten cuidado con el pantalón -pidió Huntress-, es nuevo. Dinah terminó su labor, Helena sintió un gran alivio.
-El sistema es delicado y complejo,,, Se ve difícil... -Bárbara observaba preocupada las imágenes en su computadora y después se fijó en la hora, el tiempo se acababa- Escuchen -se dirigió ambas jóvenes-, tenemos que ganar tiempo, el muelle tres está al otro lado de la bahía, si me quedo aquí no podré encontrarme con Shiva a la hora indicada y puede cumplir su amenaza de hacer detonar el aparato.
-¿Ese es el plan? ¿Estás loca? -le reclamó Huntress a Bárbara.
-¿Siempre tenemos que andar hablando de "el plan"? -preguntó Dinah a Huntress.
-Reclámale a la líder -respondió Huntress molesta- ella es la que siempre exige que tengamos un plan antes de actuar.
-Simplemente no quiero disminuir tus posibilidades -explicó Bárbara- y realmente no sé si pueda desarmar la bomba a tiempo -seguiré intentándolo en el camino; Bárbara arrancó la camioneta y se dirigió al muelle tres. Huntress la llamó insistentemente sin obtener respuesta, Bárbara la escuchaba pero decidió no seguir discutiendo.
-Se supone que la rebelde y que la que apaga el radio soy yo ¿qué le pasa?- dijo Huntress levantándose molesta-. Dinah, no hay plan, así pasemos a la acción ¿A dónde va ella?
-Al otro lado, en el muelle tres.
Huntress salió con Dinah del cuarto; en el pasillo se toparon a un guardia, sin pensarlo dos veces y lo dejaron fuera de combate en un instante.
-Hay tres más en la salida -le indicó Dinah-Tenemos que deshacernos de ellos y rápido, para que no delaten nuestra presencia.
Ambas chicas se acercaron a la salida, analizaron la situación, los guardias no tenían radios, sólo armas. Se ubicaron en lugares opuestos y salieron de la bodega golpeando a los guardias que vigilaban afuera. Bárbara llegaba mientras a su encuentro con Sandy, se sentía un poco frustrada, decidió hacer un último intento por desactivar la bomba.
Dinah se deshizo de uno de los tipos fácilmente y le llegó un segundo, su defensa había mejorado mucho y lo derribó con facilidad. Huntress había noqueado a otro, de la nada salieron dos hombres y uno de ellos la abrazó por la espalda. Huntress se impulsó hacia atrás golpeando unos barriles intentando quitarse al hombre que tenía en su espalda, pero estos se vinieron abajo y cayeron ambos al agua. Dinah se deshizo del último hombre. Bárbara había llegado al muelle tres y estacionó su camioneta, el monitor de su computadora emitió una señal, la bomba se había desactivado.
-Está hecho -avisó por el micrófono-, libera a Huntress Dinah, se desactivó el sistema.
-¿Se desactivó? Fabuloso -Dinah sonrió tomando aire y mirando a todos lados buscando a Huntress- ¿Cómo lo lograste?
-No hice nada -respondió Bárbara-, ¿qué hicieron ustedes?
-No sé... -miró alrededor buscando a Huntress- Bárbara, sal de ahí...
Rick, armado con un rifle y acompañado por dos individuos más tocó la ventanilla de la puerta de la camioneta de Bárbara -Muy tarde -susurró ésta antes de bajar el vidrio.
-¿Cómo? Por favor Bárbara, sal de ahí -Dinah observó la orilla del muelle donde aún rodaban algunos barriles y corrió hacia allá. Alcanzó a ver el agua agitada y más barriles flotando en la superficie -El agua debe haber provocado el corto -pensó Dinah al momento de lanzarse al agua.
-Así que usted es la famosa Batichica... -dijo Rick- Tenemos mucho de que hablar, me enviaron a buscarla ¿podría hacer el favor de acompañarnos?, ah, por cierto, Shiva me encargó que por favor acepte nuestra cortesía -le mostró una silla de ruedas manual y sonrió guiñándole el ojo-, es por seguridad, usted sabe ¿no?
Huntress intentaba subir pero el peso del cinturón la hundía, y poco podía hacer con las manos atrapadas atrás. De pronto sintió como la jalaban del antebrazo, era Dinah, quien sacó de su cintura el láser que le había dado Bárbara, con el tacto tentó las orillas de las arillas buscando los seguros y los cortó liberando las manos de Huntress. Salieron tomado una gran bocanada de aire.
-¡Dios! -exclamó Dinah ayudándola a flotar- realmente no ha sido tu día.
-Quítame esto -Huntress tosió-, me tiene harta.
-Apurémonos, creo que Bárbara está en problemas -ambas empezaron a nadar hacia la escalera más cercana.
Rick y sus hombres condujeron a una vieja oficina ubicada al fondo de una de las bodegas abandonadas del muelle. Shiva la esperaba.
-Vaya, vaya -saludó- la mismísima Batichica en persona.
-Hola Sandy -Bárbara detuvo la silla de ruedas a unos pasos de ella-, te tomaste muchas molestias para que nos encontráramos... ¿De qué quieres hablar?
-No tenemos que hablar de nada -los ojos de Shiva se encendieron-, simplemente concluir un asunto pendiente.
-Necesitamos acabar con esto Sandy, no puedes seguir destruyéndote y destruyendo a las personas por cosas del pasado, por algo que solo nos compete a ti y a mí...
-¡Tu mataste lo que más quería¡ -exclamó Sandy.
-No, yo no la maté, fue un accidente provocado por ambas.
-¡Te pedí no pelear ahí!
-He pedido disculpas, acepto mi responsabilidad, así como también tienes que aceptar la tuya: el haberte dejado llevar por el lado equivocado, tu ambición, todo nos llevó a enfrentarnos esa noche. Shiva se acercó molesta a Bárbara apoyando sus manos en el borde de los brazos de la silla -No me vengas a decir lo que tengo que hacer.
-¿En que pensabas cuando disparaste a Helena?
-¡Eso no te incumbe!
-¿Qué te hizo? ¿Cómo puedes usarla y exponerla colocándole una bomba? ¿En qué piensas?
-¡Tenía que atraparte a cualquier costo! - Shiva retrocedió enfurecida .
-¡Ella es tu amiga!
-¡No! -Shiva enardecida pegó una patada la silla haciendo caer a Bárbara al suelo- ¡El veredicto es culpable!
Bárbara comprendió que Sandy estaba totalmente fuera de sí y sólo podía intentar ganar tiempo. Se apoyó en su brazo para levantar su torso -¿Es esto un juicio? -preguntó.
-Es lo que quieres que sea... De cualquier manera vas a morir ¡Rick! -Shiva tronó los dedos y Rick hizo una seña a sus ayudantes quienes sacaron de la oficina varios tambos con gasolina y los vaciaron en el interior de la bodega. Bárbara comprendió en ese momento lo que planeaban.
-Estaba escrito que acabarías tus días bajo mi mano -le dijo Shiva.
-Si al menos fuera enfrentándome a alguien que no tiene miedo a una persona en silla de ruedas no me importaría -le dijo Bárbara.
-¿Quién te ha dicho que tengo miedo? -Shiva se inclinó junto a ella y tomó su cuello con una de sus manos apretándolo con fuerza -Simplemente quería evitar que escaparas, acabar contigo así sería demasiado fácil, quiero que pases por lo que mi hermana tuvo que vivir -Shiva la soltó, sacó una caja de cerillos de uno de sus bolsillos y lo encendió.
-Estás cometiendo un error -le dijo Bárbara.
-El error lo cometiste tú hace muchos años -Shiva salió de la oficina y arrojó un cerillo a la gasolina derramada -Fue realmente un error. Rick recogió la silla de ruedas del piso y la azotó contra la pared dos veces para despedazarla.
-Creo que has perdido tu último transporte -le dijo burlonamente mientras salía y cerraba la puerta de la oficina con llave.
Bárbara observó a su alrededor buscando una salida próxima pero no había nada a la vista, ni una ventana, excepto las que daban hacia la bodega que daba directo al incendio. No podía llamar a Dinah o Huntress ya que lo había estado haciendo a través del sistema de comunicación fijo de la camioneta y no llevaba equipo portátil.
-Estoy aquí -indicó-, hay un solo hombre.
-Tienes el camino libre -indica Bárbara- sólo es él.
-¡Hola! - Dinah salió de su escondite y le sonrió- ¿Ha visto a mi tía por aquí?
-¿Es ese el plan? -pregunta Huntress al oírla.
-No hay tiempo y mucho menos ideas... -respondió Dinah al momento que desarmaba al guardia de una patada y lo dejaba inconsciente de otra. Sin mayor problema abrió la puerta de la cámara y se introdujo arrastrando al guardia inconsciente adentro.
Huntress suspiró al verla -Por fin ¿porqué tardaste tanto?.
-¿Te das cuenta lo que te pasa por ser tan difícil? -Dinah se acercó a ella y observó el cinturón que le traía puesto.
-Creí que era tolerable ¿Qué es eso? -preguntó Huntress viendo como Dinah sacaba la cajita negra que le había dado Bárbara de uno de sus bolsillos y la colocaba sobre el aparato. Le avisó a Bárbara que estaba instalado y esta le pidió describiera lo que le habían colocado a Huntress.
-Es una especie de cinturón -dijo Dinah-, de unos 15 centímetros de ancho y unos dos de grueso... esta cerrado al frente con un seguro muy sencillo y... -miró la espalda de Huntress- unos brazaletes que salen del cinturón encadenan sus manos por la espalda... El seguro es muy sencillo también, podría cortarlo con un golpe del láser... En las piernas solo tiene unas argollas.
-Pero puedes hacer explotar la bomba... -Bárbara revisó desde su camioneta el sistema- ok, puedes liberarle las piernas, no hay problema.
Dinah comenzó a cortar el metal. -Ten cuidado con el pantalón -pidió Huntress-, es nuevo. Dinah terminó su labor, Helena sintió un gran alivio.
-El sistema es delicado y complejo,,, Se ve difícil... -Bárbara observaba preocupada las imágenes en su computadora y después se fijó en la hora, el tiempo se acababa- Escuchen -se dirigió ambas jóvenes-, tenemos que ganar tiempo, el muelle tres está al otro lado de la bahía, si me quedo aquí no podré encontrarme con Shiva a la hora indicada y puede cumplir su amenaza de hacer detonar el aparato.
-¿Ese es el plan? ¿Estás loca? -le reclamó Huntress a Bárbara.
-¿Siempre tenemos que andar hablando de "el plan"? -preguntó Dinah a Huntress.
-Reclámale a la líder -respondió Huntress molesta- ella es la que siempre exige que tengamos un plan antes de actuar.
-Simplemente no quiero disminuir tus posibilidades -explicó Bárbara- y realmente no sé si pueda desarmar la bomba a tiempo -seguiré intentándolo en el camino; Bárbara arrancó la camioneta y se dirigió al muelle tres. Huntress la llamó insistentemente sin obtener respuesta, Bárbara la escuchaba pero decidió no seguir discutiendo.
-Se supone que la rebelde y que la que apaga el radio soy yo ¿qué le pasa?- dijo Huntress levantándose molesta-. Dinah, no hay plan, así pasemos a la acción ¿A dónde va ella?
-Al otro lado, en el muelle tres.
Huntress salió con Dinah del cuarto; en el pasillo se toparon a un guardia, sin pensarlo dos veces y lo dejaron fuera de combate en un instante.
-Hay tres más en la salida -le indicó Dinah-Tenemos que deshacernos de ellos y rápido, para que no delaten nuestra presencia.
Ambas chicas se acercaron a la salida, analizaron la situación, los guardias no tenían radios, sólo armas. Se ubicaron en lugares opuestos y salieron de la bodega golpeando a los guardias que vigilaban afuera. Bárbara llegaba mientras a su encuentro con Sandy, se sentía un poco frustrada, decidió hacer un último intento por desactivar la bomba.
Dinah se deshizo de uno de los tipos fácilmente y le llegó un segundo, su defensa había mejorado mucho y lo derribó con facilidad. Huntress había noqueado a otro, de la nada salieron dos hombres y uno de ellos la abrazó por la espalda. Huntress se impulsó hacia atrás golpeando unos barriles intentando quitarse al hombre que tenía en su espalda, pero estos se vinieron abajo y cayeron ambos al agua. Dinah se deshizo del último hombre. Bárbara había llegado al muelle tres y estacionó su camioneta, el monitor de su computadora emitió una señal, la bomba se había desactivado.
-Está hecho -avisó por el micrófono-, libera a Huntress Dinah, se desactivó el sistema.
-¿Se desactivó? Fabuloso -Dinah sonrió tomando aire y mirando a todos lados buscando a Huntress- ¿Cómo lo lograste?
-No hice nada -respondió Bárbara-, ¿qué hicieron ustedes?
-No sé... -miró alrededor buscando a Huntress- Bárbara, sal de ahí...
Rick, armado con un rifle y acompañado por dos individuos más tocó la ventanilla de la puerta de la camioneta de Bárbara -Muy tarde -susurró ésta antes de bajar el vidrio.
-¿Cómo? Por favor Bárbara, sal de ahí -Dinah observó la orilla del muelle donde aún rodaban algunos barriles y corrió hacia allá. Alcanzó a ver el agua agitada y más barriles flotando en la superficie -El agua debe haber provocado el corto -pensó Dinah al momento de lanzarse al agua.
-Así que usted es la famosa Batichica... -dijo Rick- Tenemos mucho de que hablar, me enviaron a buscarla ¿podría hacer el favor de acompañarnos?, ah, por cierto, Shiva me encargó que por favor acepte nuestra cortesía -le mostró una silla de ruedas manual y sonrió guiñándole el ojo-, es por seguridad, usted sabe ¿no?
Huntress intentaba subir pero el peso del cinturón la hundía, y poco podía hacer con las manos atrapadas atrás. De pronto sintió como la jalaban del antebrazo, era Dinah, quien sacó de su cintura el láser que le había dado Bárbara, con el tacto tentó las orillas de las arillas buscando los seguros y los cortó liberando las manos de Huntress. Salieron tomado una gran bocanada de aire.
-¡Dios! -exclamó Dinah ayudándola a flotar- realmente no ha sido tu día.
-Quítame esto -Huntress tosió-, me tiene harta.
-Apurémonos, creo que Bárbara está en problemas -ambas empezaron a nadar hacia la escalera más cercana.
Rick y sus hombres condujeron a una vieja oficina ubicada al fondo de una de las bodegas abandonadas del muelle. Shiva la esperaba.
-Vaya, vaya -saludó- la mismísima Batichica en persona.
-Hola Sandy -Bárbara detuvo la silla de ruedas a unos pasos de ella-, te tomaste muchas molestias para que nos encontráramos... ¿De qué quieres hablar?
-No tenemos que hablar de nada -los ojos de Shiva se encendieron-, simplemente concluir un asunto pendiente.
-Necesitamos acabar con esto Sandy, no puedes seguir destruyéndote y destruyendo a las personas por cosas del pasado, por algo que solo nos compete a ti y a mí...
-¡Tu mataste lo que más quería¡ -exclamó Sandy.
-No, yo no la maté, fue un accidente provocado por ambas.
-¡Te pedí no pelear ahí!
-He pedido disculpas, acepto mi responsabilidad, así como también tienes que aceptar la tuya: el haberte dejado llevar por el lado equivocado, tu ambición, todo nos llevó a enfrentarnos esa noche. Shiva se acercó molesta a Bárbara apoyando sus manos en el borde de los brazos de la silla -No me vengas a decir lo que tengo que hacer.
-¿En que pensabas cuando disparaste a Helena?
-¡Eso no te incumbe!
-¿Qué te hizo? ¿Cómo puedes usarla y exponerla colocándole una bomba? ¿En qué piensas?
-¡Tenía que atraparte a cualquier costo! - Shiva retrocedió enfurecida .
-¡Ella es tu amiga!
-¡No! -Shiva enardecida pegó una patada la silla haciendo caer a Bárbara al suelo- ¡El veredicto es culpable!
Bárbara comprendió que Sandy estaba totalmente fuera de sí y sólo podía intentar ganar tiempo. Se apoyó en su brazo para levantar su torso -¿Es esto un juicio? -preguntó.
-Es lo que quieres que sea... De cualquier manera vas a morir ¡Rick! -Shiva tronó los dedos y Rick hizo una seña a sus ayudantes quienes sacaron de la oficina varios tambos con gasolina y los vaciaron en el interior de la bodega. Bárbara comprendió en ese momento lo que planeaban.
-Estaba escrito que acabarías tus días bajo mi mano -le dijo Shiva.
-Si al menos fuera enfrentándome a alguien que no tiene miedo a una persona en silla de ruedas no me importaría -le dijo Bárbara.
-¿Quién te ha dicho que tengo miedo? -Shiva se inclinó junto a ella y tomó su cuello con una de sus manos apretándolo con fuerza -Simplemente quería evitar que escaparas, acabar contigo así sería demasiado fácil, quiero que pases por lo que mi hermana tuvo que vivir -Shiva la soltó, sacó una caja de cerillos de uno de sus bolsillos y lo encendió.
-Estás cometiendo un error -le dijo Bárbara.
-El error lo cometiste tú hace muchos años -Shiva salió de la oficina y arrojó un cerillo a la gasolina derramada -Fue realmente un error. Rick recogió la silla de ruedas del piso y la azotó contra la pared dos veces para despedazarla.
-Creo que has perdido tu último transporte -le dijo burlonamente mientras salía y cerraba la puerta de la oficina con llave.
Bárbara observó a su alrededor buscando una salida próxima pero no había nada a la vista, ni una ventana, excepto las que daban hacia la bodega que daba directo al incendio. No podía llamar a Dinah o Huntress ya que lo había estado haciendo a través del sistema de comunicación fijo de la camioneta y no llevaba equipo portátil.
