LET GO

Capitulo 7: Adivina quien viene a cenar...

- Sí, mamá - decía James con paciencia a su madre, con quien estaba hablando a través de una chimenea

- Recuerda, hijo, cámbiate los innombrables todo los días

- Sí, mamá

- No quiero que te enfermes, recuerda usar suéter y chaleco cuando estés en el colegio, ese castillo es tan frío - Por al menos otros diez minutos, la madre de James, Evelyn Potter, se la paso regañando y aconsejando, y haciendo todas esas cosas que las madres hacen. James contestaba con una paciencia que pocos le conocían, en el fondo no podía negar que era un niño de mamá - Ah, antes de que lo olvide, ya se acerca el baile anual de las orquídeas

- ¿Ya es esa época del año? - dijo James con horror, claro que su madre eligió interpretarlo como entusiasmo

- Así es, cariño, como te decía, tú padre espera que vengan todos, pero si te pido que entre tú y Remus controlen a Sirius, mi cruz y castigo por todo lo que he hecho mal en la vida (y lo digo con Cariño), no quiero que se repita el incidente del año anterior, o del año anterior a ese...

- o del anterior a ese, o de cualquier año desde que Sirius es mi mejor amigo y nos has forzado, con mucha dulzura, a asistir a todos los bailes anuales de las orquídeas desde que teníamos seis años

- Si, bueno, he estado pensando que deberías invitar a esa linda chica, la hija de los Colbert, como sus padres son tan buenos amigos nuestros, creo que es hora de que ustedes dos sean presentados - ahí fue donde James protesto, odiaba que su madre le arreglara citas con las hijas de sus amigos

- Gracias, pero no, gracias: creo que si tengo que ir, me gustaría llevar a mi propia cita, si le ruego, tal vez Lily acepte ir conmigo (a ella no le gusta mucho todo esto de los bailes)

- ¿Quién es Lily?

- Mi novia, mamá, te he hablado de ella - dijo adoptando sea expresión de felicidad que siempre ponía cuando hablaba de Lily - no le gustan mucho los bailes pero si se lo pido tal vez acepte venir

- Espero que lo haga, me dan ganas de conocerla - dijo Evelyn al notar que, quien fuera que fuese esa tal Lily, hacía a su hijo muy feliz - Bueno, entonces tendré que pedirle a Sirius o a Remus que inviten a la hija de los Colbert

- Tendrá que ser Sirius, Remus tiene novia

- Entonces creo que nadie invitara a la hija de los Colbert, la pobre niña no me ha hecho nada como para que la empareje con Sirius, pero si dile que mas le vale traer una cita decente, el año pasado se presento con.... uuhh, nada mas pensarlo me dan escalofríos, dile que este baile es muy importante que si me lo hecha a perder puede olvidarse de las vacaciones en Córcega

- Se lo diré - entonces miro el reloj - mamá voy a tarde a mi clase...

- Oh, esta bien, vete, pero recuerda todo lo que te dije

******

Mas tarde en la sala común, James decidió hablar con Lily y preguntarle si estaba dispuesta a ir con él al Baile de Las Orquídeas.

- Lily, amor de mis amores, luz de mis ojos, corazoncito amado...

- ¿Qué quieres, James?

- ¿Por qué asumes que quiero algo? - Lily lo miro como diciendo "Te conozco" - Oh, esta bien, mi madre va a dar una fiesta y quiere que vayas, se lo que opinas de todas esas funciones sociales y no te pediría que fueras pero es muy importante para ella...

- Esta bien, James, iré contigo si es lo que quieres. Mientras no sea algo como el Baile de las Rosas o algo por el estilo - la sonrisa de James se desvaneció un poco- ¿Acaso es el Baile de las Rosas?

- Nop - Lily respiro por un segundo - Es el de Las Orquídeas. Vamos, Lils, no será tan malo, Remus y Sirius también vienen, probablemente E. J. también. Y Sirius siempre se las arregla para hacerlo interesante. Además quiero que conozcas a mi madre, y a mis abuelos, a mi hermana, a la tía Pachita, al tío Filogonio... - James siguió nombrando algunos miembros de su familia

- ¿Tienes una familia muy grande?

- Define muy grande - Lily lo miro frunciendo un poco el entrecejo - Lily, mejor acostúmbrate a las familias grandes, imagínate cuando nos casemos y tengamos hijos, he pensado que serán tres niños, dos niñas; y seguro que cada uno tendrá su propio perro o gato. Además, con todo eso de que Sirius acabara solteron y sin hijos, Remus y yo nos hemos dividido sus años dorados y pasara seis meses de cada año con nosotros

- ¿Has pensado mucho en esto?

- ¿En que? ¿En qué quiero estar siempre contigo? Sí, todo el tiempo - dijo Sonriendo muy contento como siempre que pensaba en el futuro con Lily a su lado

- Eso fue muy lindo - le dijo Lily antes de que procedieran a su habitual sesión de besuqueos, la sala común estaba demasiado acostumbrada a eso como para hacer algo mas que ignorarlos.

Mientras tanto, Sirius estaba pasando las duras y las maduras para convencer a Megan de que fuera con ellos a la fiesta, de que fuera con él para ser mas precisos

- Si va a ser algo como la fiesta de Kris Parks, no estoy interesada en lo mas mínimo

-Por favor, Meg, como amigos tienes que hacerme este favor, prometo que no será tan aburrido, habrá mucha comida y alcohol y muchas personas de las cuales burlarse , por favor di que si ¿si? ¿SI? ¡¿SI?! - dijo Sirius poniendo su mejor cara de perro a medio morir

- No lo sé, Sirius, por que no invitas a otra chica, no creo que tengas problemas para conseguir una cita, cualquiera ira contigo

- No quiero ir con cualquiera, quiero ir contigo - Sirius se callo de repente por suerte para él, Megan no entendió el doble significado - Mira, eres decente y agradable, una buena compañía, y eso es mas de lo que puedo decir de todas las chicas a las que he llevado a esta cosa. Por favor, Meg, ¿si?

- Pero... pero... oh, esta bien, agradece que tengo un buen corazón.

- Ni lo sueñes, no voy a ir - le decía al mismo tiempo E. J. a Remus

- ¿Por que no?

- Mi madre estará ahí, va todos los años y francamente no quiero verla. Además una vez que vas a uno de eso bailes has ido a todos, y la verdad siempre me aburro mucho en ellos

- ¿Has ido al baile de Las Orquídeas?

- Si mi madre nos arrastraba a mi padre y a mi, nunca me han gustado mucho esas cosas por eso siempre trataba de záfame o fingía enfermar para que me llevaran antes a casa. No quiero ir, por que si me encuentro con mi madre se va a desatar la tercera guerra mundial, ponernos en la misma habitación es como poner fuego y gasolina juntos, siempre explotamos - Remus se dio cuenta de que había gran tristeza en la voz de E. J.

- ¿Tan mal están las cosas con tu madre?

- Peor, es raro ¿sabes? Nunca la conocí, y creo que nunca lo haré, siempre fuimos dos extrañas viviendo en la misma casa, y era una casa bastante grande así que... de cualquier modo no puedo evitar sentirme mal por esa mujer que nunca conoceré, la que pudo quererme y ser todas esas cosas que las madres son.

- Estoy seguro que te quiere, ¿quién no lo haría? - Ella lo miro diciéndole "no la conoces" - Bueno, vas a ir conmigo o no, vamos... la casa de James es tan grande que probablemente no la verás, y si la ves empezamos a hablar en ruso y nos salimos de la habitación.

- Esta bien, iré contigo, ahora solo tengo que aprender ruso...

- Esa es mi chica

######

Lily y James fueron los primeros en llegar a casa de sus padres la mañana del baile, de inmediato James le presento a su madre, y se cayeron de maravilla, Evelyn era una mujer agradable, muy culta y de conversación inteligente. Lily llevaba puesto un hermoso vestido lavanda y el pendiente verde esmeralda que James le había regalado, era en definitiva la mas bella del baile, o al menos eso pensaba él

- Y dime, Lily, ¿qué piensas hacer después de que termines en Hogwarts?- preguntaba la Señora Potter

- Aun no lo he pensado bien, las posibilidades son muchas, estoy considerando una becas que me ofrecieron para continuar estudiando y sacar un titulo en Encantamientos o algo así

- Lily es la mejor en Encantamientos, Flickwick la adora, es su alumna favorita y la mejor de la Clase

- James exagera, señora, aunque no niego que encantamientos es mi materia favorita

- Es una materia tan interesante - dijo la Señora Potter - y tan esencial en la vida diaria - Entonces miro su reloj - bien, creo que es hora de ir a apurar a tu padre, aun sigue en el estudio hablando con no se quien, sobre Dios sabe que negocio, tu padre nunca descansa

- Tu madre es muy agradable - le dijo Lily a James una vez que el volvió de escoltar a su madre hasta el despacho de su padre

- Le encantaste, creo que te adora, pero ya sabía que le ibas a gustar

-¿A sí? ¿por qué?

- Por que a mi me encantas - entonces la abrazo y la beso - ven, vamos a bailar...
Éowyn estaba en la terraza esperando a que Remus volviera, habían estado bailando y él había ido a buscar unas bebidas, pero pensando en todas las cosas que habían pasado desde el mismo baile el año anterior, no pudo evitar sentir algo de nostalgia, pero se sorprendió a si misma al darse cuenta que donde antes había habido mucho dolor, ahora solo estaba el dulce recuerdo de una vida feliz que había vivido antes, y la esperanza de un igualmente feliz futuro en frente de ella

- Te lo he dicho y te lo repito, eres la persona mas bella que he visto - le dijo Remus entrando a la terraza con dos copas de lo que parecía Champagne, cuando la vio ahí, en su vestido azul y con la noche estrellada detrás de ella, se pregunto que había hecho para merecerla. Claro, Éowyn era muy linda, pero Remus la veía con ojos de enamorado - Ten

- Gracias, por la bebida y por el cumplido. Mientes, pero gracias

- Yo no miento, en mis ojos tu eres lo mas hermoso que he visto en mi vida, y lo mejor que me ha pasado - Éowyn lo beso, y luego ambos miraron hacía el jardín

- Mira eso - le dijo E. J. a Remus señalando hacia el jardín donde dos personas paseaban

Sirius le estaba mostrando los jardines a Megan, caminaban y miraban las estrellas y la luna, ere un hermosa noche de primavera

- La casa de James es muy hermosa, nunca había visto un lugar menos afectado por el mal gusto humano

- Sí, dicen que el bisabuelo de James era un hombre muy respetuoso de la naturaleza. Deberías ver la casa que va ha heredar James cuando se casé, esta en el Valle Godric y es mas bien una cabaña rodeada de árboles, un lugar perfecto para criar una familia. Creo que algún día, será muy feliz ahí

- ¿Tú ya tienes planes para el futuro? - Sirius se quedo mirando a Megan, estaba como siempre, pare él, mas hermosa que las demás; pero al mismo tiempo noto que se veía algo triste

- Supongo que ya pensare en algo - Megan le sonrió, sabía que no lo había dicho con petulancia, era mas bien, y por mas descabellado que sonara, que estaba genuinamente satisfecho - bueno, creo que lo único que deseo es llegar a los grandes cuarenta y no arrepentirme de las cosas que no he hecho

- Eso me gustaría a mi también - dijo Megan con vehemencia, había algo a Sirius que le daba mala espina, por que la voz de Megan carecía de esperanza, en cambio había algo mas parecido a esa serie de complejos sentimientos que algunos llaman desesperación, tal vez algo de temor

- ¿Estas bien? Pregunto Sirius preocupado, de los muchos sentimientos que Megan demostraba, la desesperación nunca estuvo entre ellos

- Estoy bien. ¿Te importaría que nos quedáramos aquí un rato? - Sirius negó con la cabeza, para dar a entender que no le importaba - Gracias, me gustaría quedarme mucho tiempo así, que las cosas estuvieran tan bien como ahora... siempre.

Sirius no entendió del todo las palabras de Megan, aunque también quería que aquellos momentos duraran para siempre, pasarían algunos años para que entendiera lo que Megan había querido decir, una realización que le costaría mucho, más de lo que nunca temió

Finalmente había llegado la hora de la cena. James se había sentado a la derecha de su padre en la mesa principal, y había insistido en que Lily se sentará a su lado. A David Potter, también le había caído muy bien Lily, y lo permitió

La cena era bastante agradable, y la conversación igualmente placentera, todo iba sobre ruedas, hasta que se llego al tema de Voldemort

- Francamente pienso que es hora de que el ministerio se deje de tonterías, ni que importaran tanto unos cuantos sangre sucia - afirmo el padre de James - si dejaran de tratar de protegerlos, todos los demás magos de sangre limpia no correríamos ningún peligro

- Padre, ellos tienen tanto derecho a que el ministerio de magia los proteja como nosotros, las condiciones en las que uno nace no son importantes, es lo que uno hace con la vida lo que cuenta - respondió James. David le lanzo una mirada de advertencia, no le gustaba que lo contrahicieran en publico

- Sostengo lo que digo, no habrá cosa que me apee de esa idea - James volteo a mirar a Lily, treinta emociones pasaron por su rostro en menos de un minuto, finalmente, tristeza fue lo que vio en su ojos en el momento en el que decido levantarse y salir del comedor. James salió detrás de ella

- Oh, David ¿No sabias que Lily es hija de muggles? - intervino Evelyn con delicadeza y algo de reproche, amaba a su esposo con toda su alma, pero si había algo que siempre le había molestado era la importancia que le daba a la pureza de la sangre. Años de convivencia le habían enseñado que no se necesitaba de un mortifago o un Lord Voldemort para despreciar a los hijos de muggles... no, solo se necesitaba a un mago de sangre limpia y algunos prejuicios

- ¿Cómo? Mi hijo, el sabe lo que pienso y se atrevió a...

- Tu hijo lo único que hizo fue traer a su novia, a la cual encontrabas encantadora hasta hacía unos minutos. Ahora serénate, y cállate, no quiero escenas ni escándalos. Tenemos invitados - Evelyn Potter podría ser toda una dulzura de mujer, pero era de armas tomar
- Lily, Lily ... - decía James corriendo tras de ella en el recibidor de su casa - lamento mucho lo que dijo mi padre, él es así, debí advertirte, lo siento

- Esta bien, James. Pudiste haberme advertido pero no importa, no mucho en realidad. Es solo que por un momento no pude controlarme; es la casa de tu padre y yo no tengo por que hacer escena alguna, menos a tu madre que ha sido muy amable conmigo... pero creo que no debería quedarme aquí como era el plan...

- Entiendo que no quieras quedarte, no te culpo después de lo que acaba de decir mi papá, pero ya es muy tarde, no vas a encontrar donde quedarte y es peligroso que estés sola

- Estaré bien, no te preocupes

- Al menos déjame acompañarte...

- No puedes dejar la fiesta de tu madre así como así, James...

- No me importa, no voy a dejarte...

- No te preocupes James - dijo E. J. apareciendo acompañada por Remus - la casa donde nací no esta muy lejos de aquí, podemos pasar ahí la noche y reunirnos mañana para volver juntos al colegio

- ¿Qué tan lejos esta tu casa? - pregunto James no muy seguro de que fuera una buena idea

- Unos veinte minutos, tal vez treinta

- Ves, James, no hay de que preocuparse. Es cierto, lo olvide, la casa de E. J. esta cerca de aquí, y hay bastante espacio ahí... - Iban a empezar a discutir, pues James no quería que se fuera pero Lily no llevo a un lado y para cuando termino con él, se estaba comportando como un angelito... simplemente la amaba demasiado lo cual le hacía imposible no ceder ante cualquier cosa que ella le pidiera

- Esta bien, le diré a Hamilton que las lleve - dijo James yendo a buscar al chofer de su padre - ¿Cuál es la dirección?

- Mmm... Calle Orange 1237; Park Hills - dijo E. J. tratando de recordar

- Esta bien, le diré...

Unos minutos mas tarde, Megan, Lily y E. J. estaban de camino a la calle Orange, se habían despedido de los chicos y pedido que le ofrecieran a la Señora Evelyn una disculpa por retirarse tan intempestivamente.

A la mañana siguiente, James se levanto como a eso de las diez y bajo a desayunar para ir a buscar a Lily, quería pasar algo de tiempo con ella antes de volver a la escuela aquella tarde. Conociendo a Sirius, seguía dormido, mas después de que se había puesto muy amigable con una de tantas chicas la noche anterior, después de que Megan se había ido, aunque no eran novios ni nada por el estilo, Sirius solía sentirse culpable cuando hacía algo mal en frente de Megan, en parte creo que no quería decepcionarla. Remus estaba desayunando mas despierto de lo que James hubiera esperado.

- James, debo hablar contigo sobre lo de anoche - le dijo su padre antes de que se fuera con sus amigos

- ¿De cómo insultaste a mi novia anoche?

- No digas que es tu novia, ¿qué pensarán nuestros conocidos? Un Potter con una San...

- Dices Sangre Sucia y te mejor ni te digo...- lo corto James enojado - Y francamente no me importa lo que tus conocidos puedan decir, amó a mi novia, pienso estar con ella. Y si nos quieres tanto a mamá y a mi ve trabajando en esos prejuicios tuyos, por que yo no pienso alejarme de Lily, y ya sabes que si algo le molesta a mi madre son tus prejuicios

- Pero hijo, entiende, venimos de una larga tradición de magos, la gente nos busca y nos admira... somos una de las familias mas respetadas del mundo mágico y...

- Y yo ya te he dicho como me siento. Siempre te he querido y admirado, papá, no me obligues a cambiar de opinión... - dijo James antes de marcharse

Fin del capitulo 7.

Finito, Terminado, finiquitado, Done with it, I finsh it, y creo que son todas las palabras que se me para decir: Finalmente termine.