"SEPARACION"
Autora:ATENEA
atenea81sv@yahoo.com
Capitulo Tres.
Darien parecía absorto en sus pensamientos, la oficina estaba vacía, eran la 1:30 de la tarde y todos estaban almorzando, él no tenia hambre, se quedo a terminar el trabajo que le faltaba, pero no podía concentrarse...
-Darien, ¿Estas bien?
La voz lo sacó de sus pensamientos, volteo a ver quien era.
-Pensé que estaba solo, ¿No saliste a almorzar?
La chica se acercó un poco a él.
-Como soy nueva en esta oficina, debo de enterarme de todo, y si salgo a almorzar no terminaré, además mi compañera aun no ha empezado su trabajo y quiero ayudarla con lo que pueda-contestó.
-¿El trabajo lo harán entre dos?-pregunto Darien.
-Si-respondió ella- es muy extenso, además las dos hacemos buen equipo, somos muy buenas amigas.
-Será mejor que continué en lo que estaba y te deje trabajar a ti- comento Darien- sino nunca terminaremos.
-Debo ir por algunos papeles al archivo, te veo luego.
Ella se alejó hacia la puerta y salió.
Darien intento concentrarse, pero le fue imposible, sobre su escritorio había una fotografía de la que alguna vez fué su familia, la tomó poco antes de que Serena muriera en el ataque, estaban él, ella y la bebé. La contempló, y siguió escribiendo.
Layra estaba terminando de trenzar su cabello, eran las dos de la tarde y Josh no tardaría en pasar por ella, se recogió el cabello castaño formando una trenza que le llegaba a la mitad de la espalda.
El timbre del departamento sonó.
-Ahora abro- alcanzó a decir desde su cuarto, se miró por ultima vez al espejo y salió, al abrir la puerta un ramo de rosas apareció frente a ella.
-Para darte la bienvenida- dijo Josh apareciendo detrás de las flores.
-Son hermosas.
-Recuerdo lo mucho que siempre te gustaron.
-Muchas gracias, pasa mientras las pongo en agua.
Josh entro en el departamento.
-¿Imery supongo estará trabajando?
-Si, se fue muy temprano hoy- contesto Layra mientras colocaba las flores en un jarrón y las acomodaba en una pequeña mesa de la sala.
-Si no te importa, te llevare a almorzar.
-¿No estas muy ocupado?
-Claro que no, además debo examinar tu comportamiento-dijo Josh sonriendo.
Layra lo miro dulcemente.
-Nos vamos.
-Sí.
Salieron del departamento.
En la oficina de Darien.
-Darien, sé que la muerte de tu esposa fue un golpe muy fuerte para ti- dijo un señor mirándolo a los ojos, era su jefe- además es muy reciente, solo ha pasado un mes desde entonces y necesitas descansar.
-Lo sé, señor, pero por ahora hay mucho trabajo-respondió él.
-Con la ayuda de las consultoras todo ira bien, unos días de descanso te ayudarán, los necesitas, he arreglado tus vacaciones, es mas, tómate la tarde libre y regresa hasta mañana.
-Pero...
-Nada de peros, soy tu jefe y tu amigo y por ahora es lo mejor.
El jefe salió de la oficina.
"Creo que tiene razón" pensó Darien y se dispuso a dejar sus asuntos en orden.
Layra almorzaba tranquilamente con Josh en un hermoso restaurante japonés.
-¿Te gusta el lugar?-pregunto él, mientras tomaba el postre.
-Es muy bueno, ¿cómo lo encontrastes?
-Un amigo me lo recomendó.
Ella se puso seria de pronto.
-¿Pasa algo?-pregunto Josh algo preocupado.
-No, es solo que odio no recordar nada de mi pasado- dijo ella con tristeza.
Josh tomó su mano y la miro a los ojos.
-No es necesario que te desesperes, Imery y yo te ayudaremos a recordar.
-Y si nunca lo logró- respondió ella.
-Tienes un futuro que vivir, el pasado importa poco.- le dijo tratando de reconfortarla.
-Gracias por apoyarme.
-¿Somos amigos verdad?
La frase desconcertó a Layra.
-Esa frase, la he escuchado antes.
Josh se perturbo por un momento.
-Me la dijiste hace mucho tiempo, ¿Ves como recuerdas poco a poco?
-Si- contesto ella- pero no recuerdo donde.
El beeper de Josh sonó en ese momento.
-Grandioso, es un excelente momento para interrumpir-comento Josh- debo de llamar al hospital, ¿me disculpas?
-Ve-dijo ella, un poco más tranquila.
Josh se levanto y fue a un teléfono publico, Layra miraba a la gente pasar frente a la ventana. Josh regreso a la mesa.
-¿Ocurre algo?-preguntó Layra.
-Si hay una emergencia que debo atender, ¿me perdonarías si te dejo?
-Mmmm... claro, te perdono.-contesto ella sonriendo.
-Si gustas podría llevarte a casa antes de irme hacia el hospital.
-No, gracias, deseo quedarme un rato mas aquí y luego dar una vuelta por la ciudad.
-¿Estas segura?-pregunto él, preocupado- podrías perderte.
-Por favor, sé cuidarme sola, además tomaré un taxi a casa, no te preocupes.
-Esta bien-dijo Josh- pagaré la cuenta al salir, nos vemos después o te llamo en la noche.
-Como quieras.
Josh se dirigió a la caja, canceló la factura y salió del restaurante, Layra lo vio alejarse en su auto. Miro a su alrededor el restaurante estaba medio lleno, había gente que conversaba y niños que jugaban de aquí a allá, ella sin embargo estaba sola, contemplo la taza de café que estaba frente a ella, se quedo así algunos minutos.
-¿Se le ofrece algo más?
Layra levanto la cabeza, una chica un par de años mayor que ella estaba frente a su mesa con una libreta en la mano.
-No, gracias-respondió ella, sin embargo le parecía familiar.
-¿Ocurre algo?-pregunto la muchacha.
-¿Nos conocemos?
-No creo, mi nombre es Lita, y soy la dueña del restaurante.
-Mucho gusto, yo soy Layra, le parecerá extraño, pero tengo la sensación de conocerla.
-¿De verdad?-dijo Lita- es extraño.
De pronto Laya sintió en el pecho un malestar.
-¿Se siente bien?-pregunto Lita.
-Si, es momentáneo, será mejor que me vaya a descansar- dijo Layra
-A sido un gusto, Layra, espero nos vuelva a visitar.
-Gracias.
Layra se levanto y salió del restaurante, el pecho le dolía, paro un taxi y se subió en él.
Darien marcó desde su oficina el teléfono del templo.
-¿Rey? Habla Darien.
-Ah, Hola Darien.
-Hoy salgo temprano y quería saber si paso por la niña antes de llegar al departamento.
-Riny esta dormida ahora, ¿Por qué no descansas? La niña estará bien conmigo y a ti te convendría relajarte un poco, has estado muy deprimido últimamente.
-Tengo suficientes motivos para hacerlo.
-Lo sé, todos los tenemos, pero debemos ser fuertes.
-Caminaré un poco por el parque y luego iré a recoger a la niña, ¿esta bien?
-Como quieras, nos vemos luego.
-Adiós.
Colgó el teléfono y salió de la oficina.
-Déjeme aquí por favor.
-Pero señorita, aun no llegamos a la dirección que me indicó- respondió el chofer del taxi.
El dolor de pecho era cada vez mas fuerte en Layra, era una opresión, casi no la dejaba respirar.
-No importa, pare, aquí esta el dinero-dijo mientras hacia esfuerzos por respirar.
El taxi se detuvo, Layra se bajo de él.
-Puedo llevarla a un hospital si lo desea- dijo el taxista a Layra.
-No, gracias, estaré bien-respondió ella.
Camino algunos pasos, el taxi se alejo del lugar.
Trato de tranquilizarse, el dolor no cesaba, pero no quería ir al hospital de nuevo, siguió caminando, de pronto su cabeza también empezó a dolerle.
Darien caminaba por el parque, miró a su alrededor, gente conversando, padres con sus hijos, pensó que no había sido una buena idea ir allí, su mente dibujó la sonrisa y el rostro de su hija, lo cual lo puso de mejor humor. Se sentó en una banca del parque, eran como las tres y media de la tarde.
De repente, escucho gritar a alguien a sus espaldas, se levantó y corrió hacia el lugar de donde provenía.
Layra estaba sentada sobre el suelo, sus manos sobre la cabeza, la agitaba como tratando de quitarse un peso de encima.
-¡Aléjate de mí, déjenme en paz!-grito casi llorando.
Darien llego junto a ella, miro a su alrededor, no había nadie, sin embargo la muchacha frente a él estaba sumamente afligida.
Se arrodilló junto a ella.
-¿Qué sucede? ¿Se encuentra bien?- preguntó él.
Layra lo miró, estaba llorando.
-¡Dígales que se vayan por favor!- le suplicó.
-¿Quiénes?-pregunto Darien.
-Las sombras- contestó ella; puso su mano sobre su pecho y empezó a respirar con dificultad, Darien la trato de levantar pero ella se desvaneció.
La respuesta de ella hizo que Darien recordara el ataque, la cargo y se alejo de allí.
Llevo a Layra a su departamento. Luego llamó a Amy al Hospital.
-Darien ¿te encuentras bien?-pregunto Amy al escucharlo afligido por teléfono.
-Yo estoy bien, es una chica que encontré en el parque la que necesita ayuda, ¿puedes venir?
-Claro, voy para allá- contesto ella y colgó.
Darien también colgó el teléfono, Layra estaba sobre el sofá de su sala, desmayada. Miro por la ventana del departamento, la tarde empezaba a caer en la ciudad.
Amy no tardo en llegar y la examinó.
Mientras en el departamento de Layra, Josh caminaba de un lado a otro, Imery lo miro desde la sala.
-Ya cálmate, no tardará en llegar- le dijo para tranquilizarlo.
-No debí dejarla sola, y menos en esta ciudad, tu sabes lo que puede pasar- le dijo mirándola a los ojos.
Imery se levanto y camino hacia él, tomo su mano y lo miro a los ojos.
-No te preocupes, ella regresará.
-Por eso era que yo no quería quedarme en este país, tú lo sabes bien, hubiéramos hecho nuestras vidas en otro lado.
-Pronto iremos a donde tu quieras, pero antes debo terminar lo que vine a hacer.
-Tú me prometiste que seria pronto.
-Y lo será, yo acostumbro cumplir lo que prometo- dijo ella sonriéndole.
Amy terminó de revisar a Layra.
-Parece ser un simple desmayo- dijo guardando sus instrumentos- puede deberse a muchas causas...
-Parecía que la atacaban- dijo Darien- estaba tan asustada.
Amy lo miro, estaba realmente preocupado.
-¿Sucede algo más?- pregunto ella.
-No, solamente era eso- contesto él.
Layra empezó a reaccionar, era como si despertara de un largo sueño.
-¿Dónde estoy?-pregunto ella.
-En mi departamento- respondió Darien- ¿me reconoce?
Layra lo miró extrañada, sin embargo recordó haber caminado por el parque y verlo ayudarla.
-Si- respondió ella- gracias por ayudarme ¿usted es?
-Amy Mizuno, doctora, soy amiga de Darien él me pidió que la ayudara.
-Soy Layra Anderson, perdone las molestias doctora.
-No hay porque, sin embargo me preocupa el desmayo.
-Sufri un accidente hace poco, seguramente fué por eso, estoy todavía muy débil y no debí salir sola- respondio Layra tratando de sentarse.
-Deberia hacerse más examenes- le dijo Amy- o un tratamiento con algún doctor.
-Un amigo mío, lo es, me receto algunos medicamentos, seguramente fue una molestia temporal- dijo Layra
-¿Quién es?- preguntó Amy- trabajo en el Hospital Central y tal vez lo conozca.
-Se llama Josh Lowless.
-No lo conozco, pero seguramente es un buen doctor- comentó ella.
Amy se levanto y tomo su maletín.
-Me voy, tengo un turno en el hospital y no quiero llegar tarde- le dijo a Darien.
-Gracias por venir- respondió él.
-Sabes que cuentas conmigo. Layra fue un gusto conocerla.
-Igualmente Doctora Mizuno, y gracias.
- Llameme Amy por favor, además le convendría descansar- sugirió Amy- nos vemos luego.
Salió del departamento.
Layra estaba un poco mas calmada, cerró los ojos y respiro profundamente. Darien la observaba.
-¿Podría usar su teléfono?- pregunto ella mirándolo.
-Claro- contesto él.
Layra marco a su departamento. Josh respondió.
-Layra ¿Estas bien?- dijo al otro lado de la linea.
-Si, me senti un poco mal y alguien me ayudo.
-¿Dónde estas?
-Ahora te lo digo.
Darien le dio la dirección a Layra, y ella se la dicto a Josh.
-Voy por ti, no te muevas de alli.
-Te espero- contestó ella y colgó.
-Gracias por ayudarme, aunque aun no sé su nombre.
-Darien Chiba, y no tiene nada que agradecerme. Desea algo, de tomar.
-Agua por favor.
Darien se levantó de donde estaba y le sirvió a Layra un vaso de agua.
-Me alegro que se sienta mejor.
-Si, fue algo extraño.
-¿Lo de las sombras?- pregunto él.
Layra lo miró angustiada.
-¿También las vió?
-No, pero usted las mencionó antes de desmayarse.
Layra dejo el vaso sobre la mesa de la sala, estaba nerviosa.
-Debieron ser parte de mi imaginación- dijo
-¿Esta Segura?
-Creo que si- contestó ella.
El timbre del departamento sonó. Darien abrió la puerta, Josh entro sin mirarlo.
-¿Layra estas bien?- le preguntó, camino hacia ella y la abrazo.
-Si, pero cansada- le dijo ella.
Darien miró al hombre que acababa de llegar, le resultaba familiar.
-Esta bien, ya la reviso un doctor- le dijo a él.
Josh lo observó y se desconcertó, levanto a Layra y la acompaño a la puerta.
-Le agradezco su ayuda- le dijo a Darien- soy doctor y la cuidaré.
-No fue nada- contesto él, luego miro a Layra- espero volver a verla, por lo menos en estas condiciones no- le dijo.
Layra también lo miro y le sonrió agradecida.
-Yo también opino lo mismo- le contesto.
Josh la abrazo y salieron del departamento, en el pasillo encontraron a una muchacha con una bebé en brazos, una gata la acompañaba.
-Darien, traje a la niña, supongo que se te hizo tarde.
-Rey te lo agradezco, tuve algunos contratiempos.
-Bueno, me voy, ire a cenar con Nicolás, nos vemos mañana.
-Esta bien y gracias- dijo Darien cargando a la niña y entrando junto a Luna al departamento.
Lentamente caía la noche.
///////////////////////////////////////////////////////////////////////
Dudas, comentarios, a atenea81sv@yahoo.com por favor envíenme un e-mail, para saber si alguien ha leído la historia y si envío el siguiente capitulo.
Autora:ATENEA
atenea81sv@yahoo.com
Capitulo Tres.
Darien parecía absorto en sus pensamientos, la oficina estaba vacía, eran la 1:30 de la tarde y todos estaban almorzando, él no tenia hambre, se quedo a terminar el trabajo que le faltaba, pero no podía concentrarse...
-Darien, ¿Estas bien?
La voz lo sacó de sus pensamientos, volteo a ver quien era.
-Pensé que estaba solo, ¿No saliste a almorzar?
La chica se acercó un poco a él.
-Como soy nueva en esta oficina, debo de enterarme de todo, y si salgo a almorzar no terminaré, además mi compañera aun no ha empezado su trabajo y quiero ayudarla con lo que pueda-contestó.
-¿El trabajo lo harán entre dos?-pregunto Darien.
-Si-respondió ella- es muy extenso, además las dos hacemos buen equipo, somos muy buenas amigas.
-Será mejor que continué en lo que estaba y te deje trabajar a ti- comento Darien- sino nunca terminaremos.
-Debo ir por algunos papeles al archivo, te veo luego.
Ella se alejó hacia la puerta y salió.
Darien intento concentrarse, pero le fue imposible, sobre su escritorio había una fotografía de la que alguna vez fué su familia, la tomó poco antes de que Serena muriera en el ataque, estaban él, ella y la bebé. La contempló, y siguió escribiendo.
Layra estaba terminando de trenzar su cabello, eran las dos de la tarde y Josh no tardaría en pasar por ella, se recogió el cabello castaño formando una trenza que le llegaba a la mitad de la espalda.
El timbre del departamento sonó.
-Ahora abro- alcanzó a decir desde su cuarto, se miró por ultima vez al espejo y salió, al abrir la puerta un ramo de rosas apareció frente a ella.
-Para darte la bienvenida- dijo Josh apareciendo detrás de las flores.
-Son hermosas.
-Recuerdo lo mucho que siempre te gustaron.
-Muchas gracias, pasa mientras las pongo en agua.
Josh entro en el departamento.
-¿Imery supongo estará trabajando?
-Si, se fue muy temprano hoy- contesto Layra mientras colocaba las flores en un jarrón y las acomodaba en una pequeña mesa de la sala.
-Si no te importa, te llevare a almorzar.
-¿No estas muy ocupado?
-Claro que no, además debo examinar tu comportamiento-dijo Josh sonriendo.
Layra lo miro dulcemente.
-Nos vamos.
-Sí.
Salieron del departamento.
En la oficina de Darien.
-Darien, sé que la muerte de tu esposa fue un golpe muy fuerte para ti- dijo un señor mirándolo a los ojos, era su jefe- además es muy reciente, solo ha pasado un mes desde entonces y necesitas descansar.
-Lo sé, señor, pero por ahora hay mucho trabajo-respondió él.
-Con la ayuda de las consultoras todo ira bien, unos días de descanso te ayudarán, los necesitas, he arreglado tus vacaciones, es mas, tómate la tarde libre y regresa hasta mañana.
-Pero...
-Nada de peros, soy tu jefe y tu amigo y por ahora es lo mejor.
El jefe salió de la oficina.
"Creo que tiene razón" pensó Darien y se dispuso a dejar sus asuntos en orden.
Layra almorzaba tranquilamente con Josh en un hermoso restaurante japonés.
-¿Te gusta el lugar?-pregunto él, mientras tomaba el postre.
-Es muy bueno, ¿cómo lo encontrastes?
-Un amigo me lo recomendó.
Ella se puso seria de pronto.
-¿Pasa algo?-pregunto Josh algo preocupado.
-No, es solo que odio no recordar nada de mi pasado- dijo ella con tristeza.
Josh tomó su mano y la miro a los ojos.
-No es necesario que te desesperes, Imery y yo te ayudaremos a recordar.
-Y si nunca lo logró- respondió ella.
-Tienes un futuro que vivir, el pasado importa poco.- le dijo tratando de reconfortarla.
-Gracias por apoyarme.
-¿Somos amigos verdad?
La frase desconcertó a Layra.
-Esa frase, la he escuchado antes.
Josh se perturbo por un momento.
-Me la dijiste hace mucho tiempo, ¿Ves como recuerdas poco a poco?
-Si- contesto ella- pero no recuerdo donde.
El beeper de Josh sonó en ese momento.
-Grandioso, es un excelente momento para interrumpir-comento Josh- debo de llamar al hospital, ¿me disculpas?
-Ve-dijo ella, un poco más tranquila.
Josh se levanto y fue a un teléfono publico, Layra miraba a la gente pasar frente a la ventana. Josh regreso a la mesa.
-¿Ocurre algo?-preguntó Layra.
-Si hay una emergencia que debo atender, ¿me perdonarías si te dejo?
-Mmmm... claro, te perdono.-contesto ella sonriendo.
-Si gustas podría llevarte a casa antes de irme hacia el hospital.
-No, gracias, deseo quedarme un rato mas aquí y luego dar una vuelta por la ciudad.
-¿Estas segura?-pregunto él, preocupado- podrías perderte.
-Por favor, sé cuidarme sola, además tomaré un taxi a casa, no te preocupes.
-Esta bien-dijo Josh- pagaré la cuenta al salir, nos vemos después o te llamo en la noche.
-Como quieras.
Josh se dirigió a la caja, canceló la factura y salió del restaurante, Layra lo vio alejarse en su auto. Miro a su alrededor el restaurante estaba medio lleno, había gente que conversaba y niños que jugaban de aquí a allá, ella sin embargo estaba sola, contemplo la taza de café que estaba frente a ella, se quedo así algunos minutos.
-¿Se le ofrece algo más?
Layra levanto la cabeza, una chica un par de años mayor que ella estaba frente a su mesa con una libreta en la mano.
-No, gracias-respondió ella, sin embargo le parecía familiar.
-¿Ocurre algo?-pregunto la muchacha.
-¿Nos conocemos?
-No creo, mi nombre es Lita, y soy la dueña del restaurante.
-Mucho gusto, yo soy Layra, le parecerá extraño, pero tengo la sensación de conocerla.
-¿De verdad?-dijo Lita- es extraño.
De pronto Laya sintió en el pecho un malestar.
-¿Se siente bien?-pregunto Lita.
-Si, es momentáneo, será mejor que me vaya a descansar- dijo Layra
-A sido un gusto, Layra, espero nos vuelva a visitar.
-Gracias.
Layra se levanto y salió del restaurante, el pecho le dolía, paro un taxi y se subió en él.
Darien marcó desde su oficina el teléfono del templo.
-¿Rey? Habla Darien.
-Ah, Hola Darien.
-Hoy salgo temprano y quería saber si paso por la niña antes de llegar al departamento.
-Riny esta dormida ahora, ¿Por qué no descansas? La niña estará bien conmigo y a ti te convendría relajarte un poco, has estado muy deprimido últimamente.
-Tengo suficientes motivos para hacerlo.
-Lo sé, todos los tenemos, pero debemos ser fuertes.
-Caminaré un poco por el parque y luego iré a recoger a la niña, ¿esta bien?
-Como quieras, nos vemos luego.
-Adiós.
Colgó el teléfono y salió de la oficina.
-Déjeme aquí por favor.
-Pero señorita, aun no llegamos a la dirección que me indicó- respondió el chofer del taxi.
El dolor de pecho era cada vez mas fuerte en Layra, era una opresión, casi no la dejaba respirar.
-No importa, pare, aquí esta el dinero-dijo mientras hacia esfuerzos por respirar.
El taxi se detuvo, Layra se bajo de él.
-Puedo llevarla a un hospital si lo desea- dijo el taxista a Layra.
-No, gracias, estaré bien-respondió ella.
Camino algunos pasos, el taxi se alejo del lugar.
Trato de tranquilizarse, el dolor no cesaba, pero no quería ir al hospital de nuevo, siguió caminando, de pronto su cabeza también empezó a dolerle.
Darien caminaba por el parque, miró a su alrededor, gente conversando, padres con sus hijos, pensó que no había sido una buena idea ir allí, su mente dibujó la sonrisa y el rostro de su hija, lo cual lo puso de mejor humor. Se sentó en una banca del parque, eran como las tres y media de la tarde.
De repente, escucho gritar a alguien a sus espaldas, se levantó y corrió hacia el lugar de donde provenía.
Layra estaba sentada sobre el suelo, sus manos sobre la cabeza, la agitaba como tratando de quitarse un peso de encima.
-¡Aléjate de mí, déjenme en paz!-grito casi llorando.
Darien llego junto a ella, miro a su alrededor, no había nadie, sin embargo la muchacha frente a él estaba sumamente afligida.
Se arrodilló junto a ella.
-¿Qué sucede? ¿Se encuentra bien?- preguntó él.
Layra lo miró, estaba llorando.
-¡Dígales que se vayan por favor!- le suplicó.
-¿Quiénes?-pregunto Darien.
-Las sombras- contestó ella; puso su mano sobre su pecho y empezó a respirar con dificultad, Darien la trato de levantar pero ella se desvaneció.
La respuesta de ella hizo que Darien recordara el ataque, la cargo y se alejo de allí.
Llevo a Layra a su departamento. Luego llamó a Amy al Hospital.
-Darien ¿te encuentras bien?-pregunto Amy al escucharlo afligido por teléfono.
-Yo estoy bien, es una chica que encontré en el parque la que necesita ayuda, ¿puedes venir?
-Claro, voy para allá- contesto ella y colgó.
Darien también colgó el teléfono, Layra estaba sobre el sofá de su sala, desmayada. Miro por la ventana del departamento, la tarde empezaba a caer en la ciudad.
Amy no tardo en llegar y la examinó.
Mientras en el departamento de Layra, Josh caminaba de un lado a otro, Imery lo miro desde la sala.
-Ya cálmate, no tardará en llegar- le dijo para tranquilizarlo.
-No debí dejarla sola, y menos en esta ciudad, tu sabes lo que puede pasar- le dijo mirándola a los ojos.
Imery se levanto y camino hacia él, tomo su mano y lo miro a los ojos.
-No te preocupes, ella regresará.
-Por eso era que yo no quería quedarme en este país, tú lo sabes bien, hubiéramos hecho nuestras vidas en otro lado.
-Pronto iremos a donde tu quieras, pero antes debo terminar lo que vine a hacer.
-Tú me prometiste que seria pronto.
-Y lo será, yo acostumbro cumplir lo que prometo- dijo ella sonriéndole.
Amy terminó de revisar a Layra.
-Parece ser un simple desmayo- dijo guardando sus instrumentos- puede deberse a muchas causas...
-Parecía que la atacaban- dijo Darien- estaba tan asustada.
Amy lo miro, estaba realmente preocupado.
-¿Sucede algo más?- pregunto ella.
-No, solamente era eso- contesto él.
Layra empezó a reaccionar, era como si despertara de un largo sueño.
-¿Dónde estoy?-pregunto ella.
-En mi departamento- respondió Darien- ¿me reconoce?
Layra lo miró extrañada, sin embargo recordó haber caminado por el parque y verlo ayudarla.
-Si- respondió ella- gracias por ayudarme ¿usted es?
-Amy Mizuno, doctora, soy amiga de Darien él me pidió que la ayudara.
-Soy Layra Anderson, perdone las molestias doctora.
-No hay porque, sin embargo me preocupa el desmayo.
-Sufri un accidente hace poco, seguramente fué por eso, estoy todavía muy débil y no debí salir sola- respondio Layra tratando de sentarse.
-Deberia hacerse más examenes- le dijo Amy- o un tratamiento con algún doctor.
-Un amigo mío, lo es, me receto algunos medicamentos, seguramente fue una molestia temporal- dijo Layra
-¿Quién es?- preguntó Amy- trabajo en el Hospital Central y tal vez lo conozca.
-Se llama Josh Lowless.
-No lo conozco, pero seguramente es un buen doctor- comentó ella.
Amy se levanto y tomo su maletín.
-Me voy, tengo un turno en el hospital y no quiero llegar tarde- le dijo a Darien.
-Gracias por venir- respondió él.
-Sabes que cuentas conmigo. Layra fue un gusto conocerla.
-Igualmente Doctora Mizuno, y gracias.
- Llameme Amy por favor, además le convendría descansar- sugirió Amy- nos vemos luego.
Salió del departamento.
Layra estaba un poco mas calmada, cerró los ojos y respiro profundamente. Darien la observaba.
-¿Podría usar su teléfono?- pregunto ella mirándolo.
-Claro- contesto él.
Layra marco a su departamento. Josh respondió.
-Layra ¿Estas bien?- dijo al otro lado de la linea.
-Si, me senti un poco mal y alguien me ayudo.
-¿Dónde estas?
-Ahora te lo digo.
Darien le dio la dirección a Layra, y ella se la dicto a Josh.
-Voy por ti, no te muevas de alli.
-Te espero- contestó ella y colgó.
-Gracias por ayudarme, aunque aun no sé su nombre.
-Darien Chiba, y no tiene nada que agradecerme. Desea algo, de tomar.
-Agua por favor.
Darien se levantó de donde estaba y le sirvió a Layra un vaso de agua.
-Me alegro que se sienta mejor.
-Si, fue algo extraño.
-¿Lo de las sombras?- pregunto él.
Layra lo miró angustiada.
-¿También las vió?
-No, pero usted las mencionó antes de desmayarse.
Layra dejo el vaso sobre la mesa de la sala, estaba nerviosa.
-Debieron ser parte de mi imaginación- dijo
-¿Esta Segura?
-Creo que si- contestó ella.
El timbre del departamento sonó. Darien abrió la puerta, Josh entro sin mirarlo.
-¿Layra estas bien?- le preguntó, camino hacia ella y la abrazo.
-Si, pero cansada- le dijo ella.
Darien miró al hombre que acababa de llegar, le resultaba familiar.
-Esta bien, ya la reviso un doctor- le dijo a él.
Josh lo observó y se desconcertó, levanto a Layra y la acompaño a la puerta.
-Le agradezco su ayuda- le dijo a Darien- soy doctor y la cuidaré.
-No fue nada- contesto él, luego miro a Layra- espero volver a verla, por lo menos en estas condiciones no- le dijo.
Layra también lo miro y le sonrió agradecida.
-Yo también opino lo mismo- le contesto.
Josh la abrazo y salieron del departamento, en el pasillo encontraron a una muchacha con una bebé en brazos, una gata la acompañaba.
-Darien, traje a la niña, supongo que se te hizo tarde.
-Rey te lo agradezco, tuve algunos contratiempos.
-Bueno, me voy, ire a cenar con Nicolás, nos vemos mañana.
-Esta bien y gracias- dijo Darien cargando a la niña y entrando junto a Luna al departamento.
Lentamente caía la noche.
///////////////////////////////////////////////////////////////////////
Dudas, comentarios, a atenea81sv@yahoo.com por favor envíenme un e-mail, para saber si alguien ha leído la historia y si envío el siguiente capitulo.
