Como siempre los derechos de estos personajes son de Masami Kurumada y su
equipo.
Un triangulo amoroso, Shun, Hyoga, Ikki; un sacrificio, o tal ves no, esto tiene continuación, y no es lo que parece; después de todo Shun es mi personaje favorito.
Sacrificio en nombre del amor.
¿Como saber, si esta vida es verdad, como aceptarla cuando el dolor nos domina?. Mi corazón sufre hoy, pero extraño es este sentimiento, sufro y soy ¿feliz?. No se si soy una persona egoísta o ya he dejado de serlo. Quisiera culpar a alguien de mi sufrimiento, culpar a alguien por lo que siento; elegir una victima diferente a mi. ¿Tal ves leerás esto tú?, o ¿tal ves no?, incluso puede ser quien causa mi dolor o quien hizo a mi corazón el mas feliz e infeliz.
Pero aun cuando siempre has tratado de protegerme hermano, parece que esta ves fallaste, por que tu eres ahora quien me daña, que irónico ¿no?, y no puedo culparte, no lo sabes, no te imaginas cuanto dolor me causa tu felicidad.
Por que yo siempre te inste a enamorarte a olvidar todo rencor y encontrar a alguien especial que te devolviera esa sonrisa perdida.
Y lo encontraste Ikki, posaste tus ojos en él, pero él, era la persona que yo amaba, y aun mas doloroso es saber que el te corresponde, que nunca me podrá mar y saber que yo no puedo odiar a quien se me adelanto en su corazón, por que esa persona que debería ser repulsiva a mi corazón, es la persona mas apreciada por el, demasiado amada, eres tu mi propio hermano.
Cuanto desearía que el amor que sentía por el fuera solo un capricho pasajero, pero no pues yo lo he amado toda mi vida; desde el instante en que el me sonrió por primera ves, hace tanto, pero tu Ikki; ¿ desde cuando lo amas?, quisiera creer que tan solo es un capricho tuyo, una aventura de un momento; pero, por desgracia, te conozco demasiado bien, mejor que nadie, y se que tu no amas así, que si te has enamorado de él, será para toda la vida.
Y no puedo, ni siquiera imaginar el causarte dolor; tu eres mi hermano y debo obligar a mi corazón a aceptar que tú amor, es mas importante que el amor por el, por Hyoga. Recuerda mi constelación, mi destino es Andrómeda, soy el caballero del eterno sacrificio, quien debe buscar el bien por otros antes que mi propia felicidad.
Pero como cuesta, es para mi mas fácil renunciar a mi vida, que a mi amor, pero debo hacerlo.
Ayer cuando ustedes nos dijeron de su relación, mi corazón se destrozo en mil pedazos, pero aun así pude sonreír, fingir mi sonrisa y felicitarlos, en serio fue sincero, pues te amo Ikki como a nadie, eres toda mi familia, pero también, lo amo a él, con lo que resta de mi.
Se fueron, se alejaron, pues tal ves creer que yo debo aprender por mi mismo y crecer, y que solo con la soledad lo lograre. Pero te equivocas, esta ves hermano, si mi corazón podría dejar de sangrar, pero la herida es demasiado profunda.
Ikki, eres tu o soy yo; y por ese amor que te tengo, por aquel sacrificio que tu hiciste ya una ves por mi; es mi turno de sacrificar algo por ti, tu estuviste a punto de sacrificar tu vida, es justo que yo pague con la mía, en recompensa.
Entiende mis razones, no puedo vivir, pues podría cometer alguna tontería, no podría controlar mas mi corazón, para que aceptara soportar, mi vida a cambio de tu felicidad, por una ves Ikki yo daré todo por ti.
No sufras por mi, se que un día volveremos a encontrarnos y entonces nuestro destino será diferente, nada nos enfrentara hermano, solo el amor guiara nuestros pasos.
Olvídame si eso deseas, es mas , te lo ruego; olvida a aquel desdicha que fue tu hermano, tu carga, tu lastre, tu sufrimiento; solo recuerda que mi amor si fue verdadero.
Con mis lagrimas, espero poder pagar por todos mis pecados, pagar por haber pensado en amar a quien tu amabas, ruego a un Dios de bondad, que me perdone, que me permita olvidar y les de a ustedes la felicidad que merecen.
Hyoga, tú mi amor imposible, te ruego cuida de mi hermano, ámalo como a nadie, dale toda la felicidad que merece, y olvídame te lo ruego.
Ikki, perdóname, tu siempre fuiste lo mas importante, mi corazón fue débil, nunca conseguiste transformarme, si cobardemente huyo de esta batalla, es porque contra ti, nunca peleare.
Son solo palabras que escribe, quien los amo, entiendan.
Shun
EL joven santo dejo la pluma caer y rodar por la mesa; leyó una ves mas la carta, sus ojos verdes derramaban incontables lagrimas, mientras recorría las letras que componían una confesión y despedida. Vio la ventana frente a si, con precaución doblo la carta y la dejo sobre la mesa; tras dudar un instante la tomo y la arrojo al fuego crepitante, de la chimenea, decidió que era mejor que no lo supieran, no quería ensombrecer la felicidad de aquellos dos seres a quienes amaba.
Camino, entre los árboles, con rapidez; sentía que su dolor se alejaba, entre mas él se acercaba al fin, al menos al que el había decidido tomar. Sus pasos lo condujeron por un sendero que tantas veces había recorrido junto a su hermano, ¿como imaginarse, que un día lo recorrería como el camino final de su vida?.
Llego ante el acantilado y se detuvo, la brisa fresca del mar, alborotaba sus verdes cabellos, vio las afiladas rocas y a las olas chocando con ellas. Sonrió con aquella eterna sonrisa que el caracterizaba, dio la vuelta y sin detenerse a pensar mas, atravesó la línea que le separaba, retrocedió los pasos y cayo al vació; el sonido del mar siempre lo había asustado cuando niño, tal ves en respuesta a que terminaría sus días en ese mar precisamente... Por su felicidad, fue su ultimo pensamiento, ahora que se sentía libre.
Ikki, no se como decirte esto, las líneas a escribir son tan difíciles; se que ustedes se fueron con animo de ser felices, de encontrar sus sueños y yo deseaba que así fuera mis amigos. Pero debo escribir, para traerles malas noticias; el día que se fueron, Shun actuaba un poco extraño, a la mañana siguiente no pudimos encontrarlo en su habitación , pero no nos preocupamos, el sale por las mañanas a correr, pero no regreso y nadie lo vio... lo buscamos desesperados y esta mañana, Ikki, cuanto los siento, el pequeño Shun... OH!, Dios, no se como escribir esto; en la playa solo encontramos trozos de ropa, de su ropa, ensangrentados, y junto a ellos el dije, que siempre llevaba consigo. ¿No sabemos que significa esto?, pero todos dejamos de percibir su cosmos; no se que deberíamos hacer, regresen si lo creen conveniente.
Nuevamente lo siento mucho Ikki, Tu amigo Seiya.
Un triangulo amoroso, Shun, Hyoga, Ikki; un sacrificio, o tal ves no, esto tiene continuación, y no es lo que parece; después de todo Shun es mi personaje favorito.
Sacrificio en nombre del amor.
¿Como saber, si esta vida es verdad, como aceptarla cuando el dolor nos domina?. Mi corazón sufre hoy, pero extraño es este sentimiento, sufro y soy ¿feliz?. No se si soy una persona egoísta o ya he dejado de serlo. Quisiera culpar a alguien de mi sufrimiento, culpar a alguien por lo que siento; elegir una victima diferente a mi. ¿Tal ves leerás esto tú?, o ¿tal ves no?, incluso puede ser quien causa mi dolor o quien hizo a mi corazón el mas feliz e infeliz.
Pero aun cuando siempre has tratado de protegerme hermano, parece que esta ves fallaste, por que tu eres ahora quien me daña, que irónico ¿no?, y no puedo culparte, no lo sabes, no te imaginas cuanto dolor me causa tu felicidad.
Por que yo siempre te inste a enamorarte a olvidar todo rencor y encontrar a alguien especial que te devolviera esa sonrisa perdida.
Y lo encontraste Ikki, posaste tus ojos en él, pero él, era la persona que yo amaba, y aun mas doloroso es saber que el te corresponde, que nunca me podrá mar y saber que yo no puedo odiar a quien se me adelanto en su corazón, por que esa persona que debería ser repulsiva a mi corazón, es la persona mas apreciada por el, demasiado amada, eres tu mi propio hermano.
Cuanto desearía que el amor que sentía por el fuera solo un capricho pasajero, pero no pues yo lo he amado toda mi vida; desde el instante en que el me sonrió por primera ves, hace tanto, pero tu Ikki; ¿ desde cuando lo amas?, quisiera creer que tan solo es un capricho tuyo, una aventura de un momento; pero, por desgracia, te conozco demasiado bien, mejor que nadie, y se que tu no amas así, que si te has enamorado de él, será para toda la vida.
Y no puedo, ni siquiera imaginar el causarte dolor; tu eres mi hermano y debo obligar a mi corazón a aceptar que tú amor, es mas importante que el amor por el, por Hyoga. Recuerda mi constelación, mi destino es Andrómeda, soy el caballero del eterno sacrificio, quien debe buscar el bien por otros antes que mi propia felicidad.
Pero como cuesta, es para mi mas fácil renunciar a mi vida, que a mi amor, pero debo hacerlo.
Ayer cuando ustedes nos dijeron de su relación, mi corazón se destrozo en mil pedazos, pero aun así pude sonreír, fingir mi sonrisa y felicitarlos, en serio fue sincero, pues te amo Ikki como a nadie, eres toda mi familia, pero también, lo amo a él, con lo que resta de mi.
Se fueron, se alejaron, pues tal ves creer que yo debo aprender por mi mismo y crecer, y que solo con la soledad lo lograre. Pero te equivocas, esta ves hermano, si mi corazón podría dejar de sangrar, pero la herida es demasiado profunda.
Ikki, eres tu o soy yo; y por ese amor que te tengo, por aquel sacrificio que tu hiciste ya una ves por mi; es mi turno de sacrificar algo por ti, tu estuviste a punto de sacrificar tu vida, es justo que yo pague con la mía, en recompensa.
Entiende mis razones, no puedo vivir, pues podría cometer alguna tontería, no podría controlar mas mi corazón, para que aceptara soportar, mi vida a cambio de tu felicidad, por una ves Ikki yo daré todo por ti.
No sufras por mi, se que un día volveremos a encontrarnos y entonces nuestro destino será diferente, nada nos enfrentara hermano, solo el amor guiara nuestros pasos.
Olvídame si eso deseas, es mas , te lo ruego; olvida a aquel desdicha que fue tu hermano, tu carga, tu lastre, tu sufrimiento; solo recuerda que mi amor si fue verdadero.
Con mis lagrimas, espero poder pagar por todos mis pecados, pagar por haber pensado en amar a quien tu amabas, ruego a un Dios de bondad, que me perdone, que me permita olvidar y les de a ustedes la felicidad que merecen.
Hyoga, tú mi amor imposible, te ruego cuida de mi hermano, ámalo como a nadie, dale toda la felicidad que merece, y olvídame te lo ruego.
Ikki, perdóname, tu siempre fuiste lo mas importante, mi corazón fue débil, nunca conseguiste transformarme, si cobardemente huyo de esta batalla, es porque contra ti, nunca peleare.
Son solo palabras que escribe, quien los amo, entiendan.
Shun
EL joven santo dejo la pluma caer y rodar por la mesa; leyó una ves mas la carta, sus ojos verdes derramaban incontables lagrimas, mientras recorría las letras que componían una confesión y despedida. Vio la ventana frente a si, con precaución doblo la carta y la dejo sobre la mesa; tras dudar un instante la tomo y la arrojo al fuego crepitante, de la chimenea, decidió que era mejor que no lo supieran, no quería ensombrecer la felicidad de aquellos dos seres a quienes amaba.
Camino, entre los árboles, con rapidez; sentía que su dolor se alejaba, entre mas él se acercaba al fin, al menos al que el había decidido tomar. Sus pasos lo condujeron por un sendero que tantas veces había recorrido junto a su hermano, ¿como imaginarse, que un día lo recorrería como el camino final de su vida?.
Llego ante el acantilado y se detuvo, la brisa fresca del mar, alborotaba sus verdes cabellos, vio las afiladas rocas y a las olas chocando con ellas. Sonrió con aquella eterna sonrisa que el caracterizaba, dio la vuelta y sin detenerse a pensar mas, atravesó la línea que le separaba, retrocedió los pasos y cayo al vació; el sonido del mar siempre lo había asustado cuando niño, tal ves en respuesta a que terminaría sus días en ese mar precisamente... Por su felicidad, fue su ultimo pensamiento, ahora que se sentía libre.
Ikki, no se como decirte esto, las líneas a escribir son tan difíciles; se que ustedes se fueron con animo de ser felices, de encontrar sus sueños y yo deseaba que así fuera mis amigos. Pero debo escribir, para traerles malas noticias; el día que se fueron, Shun actuaba un poco extraño, a la mañana siguiente no pudimos encontrarlo en su habitación , pero no nos preocupamos, el sale por las mañanas a correr, pero no regreso y nadie lo vio... lo buscamos desesperados y esta mañana, Ikki, cuanto los siento, el pequeño Shun... OH!, Dios, no se como escribir esto; en la playa solo encontramos trozos de ropa, de su ropa, ensangrentados, y junto a ellos el dije, que siempre llevaba consigo. ¿No sabemos que significa esto?, pero todos dejamos de percibir su cosmos; no se que deberíamos hacer, regresen si lo creen conveniente.
Nuevamente lo siento mucho Ikki, Tu amigo Seiya.
