N/A: Hola!!! Esta vez no tardé tanto como la ultima vez . = ^ . ^ =. Primero quiero agradecer a Hitokiri Lady no solo por haber sido la primera en dejarme un review, sino también porque aun lo sigue haciendo y todos los consejos que da, Gracias!!. También a Meg, a quien prometo sinceramente actualizar mis fics mucho más seguido, además de más E/K. Zian Shiory gracias por tu review, espero que aun sigas leyendo esto. También quiero disculparme con todos aquellos que intentaron dejar un review y no pudieron porque mi login no aceptaba reviews anónimos, ya he arreglado eso, gracias a Hitokiri Lady. Bueno a la historia...
Disclaimers: nop, aun no me pertenece ninguno de los personajes de Rurouni Kenshin, -.-, sip es triste....
Entre Luz y Oscuridad
Capítulo cuarto:
"tratando de evitar..."
El sol, al salir en el horizonte, pintaba el mar en cálidos tonos, desde el rojo más puro al más brillante dorado, bañando poco a poco cada rincón de aquella bella playa, hasta llegar a la figura de un alto joven que yacía acostado sobre la arena, al iluminar su rostro causó que éste despertara. Había vuelto a tener aquella viaja pesadilla, pero en un momento esta se desvaneció, dejándolo en un descanso extraño para él. Bellos y fríos ojos turquesa recorrieron los alrededores hasta percatarse en un pequeño detalle, aquella mocosa no se encontraba en donde se suponía debía estar.

- "Donde demonios se habrá metido esa chiquilla"- y murmurando esto por lo bajo se levantó y fue a remojarse el rostro antes de salir a buscarla. Pero mientras se secaba el rostro con su remera escuchó algo bastante raro, una melodía a lo lejos, hermosa por cierto. La curiosidad ganó lo mejor de sí y fue en dirección de donde provenía aquella dulce melodía. Lo que encontró borró cualquier trazo de pensamiento inteligente dejando solo un 'guauu'.

*~*~*

-"Hajime, ¿estás seguro de que esto es lo mejor?"- preguntó Tokio a su esposo mientras servía la cena.

-"No te preocupes, tengo todo planeado, el tiempo y el espacio tiene muchas dimensiones"- fue toda la respuesta del lobo mientras tomaba un trago de sake.

*~*~*

- "¿dónde demonios puede estar Jou-chan?"- decía un exasperado Sanosuke mientras pasaba una larga mano por su oscura melena.

- "No pudo simplemente desvanecerse en el aire"- fue la respuesta de una muy preocupada Megumi.

- "Mejor sigamos buscando"- Kenshin se encontraba preocupado por Kaoru, pero no tanto como cierto shisou

- "Tenemos que encontrarla"- Hiko se hallaba al borde de una crisis nerviosa. Habían estado buscando a su pequeña ininterrumpidamente desde aquel resplandor, y aunque solo había sido hace quince minutos, la incertidumbre estaba ganando lo mejor de sí. No tenía ni la más remota idea de que demonios había pasado, no sabía donde se podría encontrar su pequeña, ni en que condiciones.

*-*-*

Enishi simplemente estaba embelesado por la escena que estaba presenciando, y tenía que admitir que cualquiera lo estaría.

En medio del bosque yacía una cristalina cascada, y en esta una hermosa joven de largos y oscuros cabellos tomaba un reconfortante baño mientras cantaba una bella y dulce melodía. A los ojos de Enishi, se semejaba a una sirena, y como en esos cuentos de piratas que su hermana solía contarle, no podía apartar la vista de ella, se encontraba perdido en su dulce voz y seguía el camino de cada gota que rodaba en su bello cuerpo, sus cabellos revueltos bajaban a su espalda como una oscura lluvia, hasta su pequeña cintura. Su rostro se encontraba mirando hacía el origen de la cascada, dejando que las gotas de agua jugaran en su rostro. Pero de repente, al sentir una intensa mirada quemándole la piel, se dio la vuelta, y las miradas se cruzaron. La de ella era de un azul profundo como el océano, que reflejaba una mezcla entre confusión y curiosidad. La de él trataba de guardar cada detalle de ella. Un suave rubor cubrió las mejillas de ambos y lo siguiente que supo Enishi es que se encontraba en el suelo con un gran moretón, la causa, una rama lanzada con muy buena puntería. Y mientras Enishi permanecía en el suelo, aun viendo estrellitas, Kaoru aprovechó para salir del agua y vestirse lo más rápido posible.

- "¿Querías algo?"- preguntó una aun furiosa Kaoru.

- "No estabas por ningún lado, así que salí a buscarte"- fue la respuesta de Enishi, quien no se atrevía a mirarla aun y apenas había logrado controlar el temblor en su voz, sin mencionar su sorpresa, esta chiquilla lo había prácticamente noqueado de un solo golpe.

-"Ahh, es que vine a buscar algo para el desayuno, y como descubrí esta pequeña cascada..."- decía Kaoru, mientras recogía nerviosa las frutas que había juntado antes de decidir darse un chapuzón. Aquella mirada, lo que le hizo sentir, la tenía preocupada.- "aquí están, vamos, muero de hambre"- pasó de largo a Enishi, necesitaba poner distancia entre ellos, lo más pronto posible, pero igual no pudo evitar sentir una atracción, perecida a la que tienen los imanes, al pasar cerca de él. Tampoco pudo Enishi, pero se contuvo de detenerla justo a tiempo.

*~*~*

Una vez de vuelta en la playa, mientras partía las frutas con ayuda de su espada y una vez recuperada totalmente la compostura por ambos, Kaoru volvió a entonar la suave melodía.

-"¿Cómo se llama esa melodía?"- Enishi no pudo contener su curiosidad hacia el origen de aquella música, tan bella y dulce.

-"Es una vieja melodía que compuse con mi madre, era algo así como nuestro proyecto, aunque aun no logro terminarla"- con esto le alcanzó a Enishi la mitad de una manzana- " ella solía decirme que solo la terminaré cuando tenga alguien a quien cantarla, extraño no?"

-"mmmnn"- fue toda la respuesta que recibió. Aunque a decir verdad Enishi no podía parar de preguntarse sobre esta chiquilla a su lado. Había algo en ella que lo atraía con una fuerza magnética, bueno estaba el hecho de que era increíblemente hermosa, pero no era solo eso, era algo en su forma de ser, totalmente confiada, cálida, pero al mismo tiempo había algo en ella que daba a entender que una vez furiosa era de temer.

- "¿Quién es Tomoe?"- esta pregunta tuvo la cualidad de borrar todo otro pensamiento de la cabeza de Enishi- "anoche creo que tuviste una pesadilla y no dejabas de mencionarla"

-"Mi hermana"- por primera vez en mucho tiempo Enishi tuvo ganas de decirlo todo, desahogarse de una buena vez, ser confortado, pero se contuvo, no iba a dar explicaciones a esta chiquilla que además de ser la elegida de la luz, era también una amiga cercana del causante de todo lo caótico de su vida. Y con esto último se levantó dispuesto a dar una larga caminata lejos de aquella chiquilla a pesar de que se le formó un nudo en la garganta al ver en esos ojos, tan azules y profundos como el océano, verdadera preocupación debido a su reacción.

-"En cuanto hallemos la manera de volver a donde pertenecemos, y la luna y Zan vuelva a aparecer, cumpliremos con nuestra misión, la profecía se cumplirá"- y con esto dicho se encaminó hacia dentro de la isla.

Mientras observaba su alta figura alejarse Kaoru no pudo evitar recordar la noche anterior...

-----Flash Back------

Una especie de gritos la despertó, las estrellas brillaban en el firmamento sin luna y la brisa jugaba con el mar, dando variedades de notas de acuerdo al tamaño y forma de las olas. Kaoru dirigió su adormecida mirada azul a sus alrededores, tratando de averiguar de donde provenían los gritos, de la fogata solo quedaba pequeñas llamas,suficientes como para permitirle distinguir sus alrededores. Fue entonces volteó a ver al joven de pálidos cabellos quien se revolvía en su sueño, murmurando cosas, de las cuales lo único que Kaoru pudo captar era 'Tomoe'. Kaoru gateo hasta llegar hasta él, estaba empapado en un sudor frío y al tocar su frente se dio cuenta de que ardía en fiebre, entonces fue hasta el agua y mojó un pedazo de tela, con el cual remojo el rostro del joven. No pudo evitar notar la belleza de sus facciones, así como la mezcla de tristeza y desesperación que había en su rostro iba desapareciendo para dar lugar a una calma extraña en él.

----- Fin del Flas Back----------

Kaoru simplemente no podía dejar de preguntarse que podría haber estado soñando, probablemente un recuerdo no muy grato. Y es que este joven le llamaba mucho la atención, siempre creyó que el elegido de la oscuridad sería de por sí un ser malvado y despiadado, pero había algo en él que le decía que no se trataba precisamente de una mala persona, había algo en sus ojos que hablaba de una gran tristeza, como los de un niño pequeño en busca de cariño y compresión. Sencillamente no podía hacerse a la idea de que este joven tan bello y triste era el encargado de traer la oscuridad a este mundo y que ella tendría que destruirlo.

-"Arggg, Muo! Esto me ocasiona jaqueca"- y terminando su desayuno se levanto y dirigió hacia el lado opuesto en que había ido Enishi. Ella también tenía que encontrar una forma de salir de este lugar, el destino del universo dependía de que así lo hiciera.

*-*-*

Enishi había estado caminando sin la menor idea de adonde se dirigía. Era inconcebible el que había estado apunto de desahogarse con aquella chiquilla. Luego de años tratando de suprimir sus emociones, bastaba una mirada de ella para desbaratarlo todo dentro suyo, si lo miraba así probablemente no podría destruirla, ¿cómo demonios iba destruir a alguien cuando sentía que ni siquiera podría mentirle u ocultarle algo?. Tenía que encontrar la manera de salir de este lugar lo más rápido posible, tenía que mantener su mente fría para poder salvar a su hermana. Fue en este punto cuando un grito llegó a sus oídos y todo pensamiento fue sustituido por una inmensa preocupación por 'aquella chiquilla'
N/A: Que dicen? Porfa dejen un review, ahora pueden dejar reviews anónimos, y prometo responder a todos, porfa....
ari-g