CAPITULO 6
A la mañana siguiente Harry se despertó tarde. Le echo un vistazo al reloj que se encontraba sobre la mesita de la noche. Las manecillas de este marcaban claramente la una de la tarde. Harry nunca había dormido tanto en su vida, pero se sentía reanimado.
Se puso ropa limpia y se dirigió al piso inferior. Llego a la cocina, donde se encontraba Sirius sentado en la mesa, tenía a una pequeña lechuza y varias cartas estaban colocadas en la mesa. Sirius se percato de la presencia de Harry.
¡Por fin te levantas Harry! ¡Ya era hora!- se burlo Sirius. Harry se rió sarcásticamente, para después mirar fijamente a un tazón con cereal.- ¿Cómo te sientes?- le pregunto Sirius. Harry desvió la vista del cereal.
¿Sirius es que tienes que preguntarme que como me siento cada cinco segundo?- le preguntó Harry molesto.
Lo siento Harry.. Se que todo esto te molesta..Pero tengo que estar seguro de que estés bien... Además recuerda que tenemos cita con el doctor este viernes, dentro de dos días para ser precisos - le dijo Sirius rápidamente ya que se encontraba ojeando las cartas que él leía antes de que Harry llegara y lo fulminara con la mirada, aunque ahora se encontraba haciéndole lo mismo. Sirius al ver a Harry así no pudo evitar que una sonrisa apareciera en su rostro, ya que recordó que Lily siempre le lanzaba ese tipo de miradas a James.
¿Sirius te sientes bien?- Le pregunto Harry con una ceja levantada, debido a la sonrisa burlona dibujada en el rostro de su padrino.
Lo siento..Es solo que estaba pensando...Bueno no importa- dijo Sirius cortándose a si mismo. Harry no insistió y tomo lugar en la mesa para comenzar a desayunar ese plato de cereal al que tantas miradas le había echado. Pero antes de ello saco algo de leche del refrigerador.
Toma- Le dijo Sirius pasándole a Harry unos pequeños sobres. Harry los miro extrañado- Son cartas de tus amigos Ron y Hermione; y esta otra de Hagrid.
¿Les dijiste?- Le preguntó Harry
Bueno no te mentiré solo les dije a Ron y Hermione.Pero como también le dije a Dumbledore supongo que tal vez el fue quien le dijo a Hagrid sobre tu situación- le respondió Sirius.
Espera.Creía que Hagrid tenía asuntos que realizar con Madame Maxime este verano- Le dijo Harry pensativamente.
Tienes razón..Ella se va a quedar con él en Hogwarts este verano...Están en una misión ultra secreta. No muy arriesgada.Dumbledore ni siquiera quiso decirme de que se trataba tan importante misión- Dijo Sirius- Aunque personalmente creo que él esta enamorado de ella.
Eso es más que obvio- Le dijo Harry. Como ya había terminado de comer su cereal, se puso de pie, lo recogió y se fue en dirección al fregadero para lavarlo.
Harry te ves algo pálido- le dijo Sirius, pero lamento haber dicho eso cuando se dio cuenta que Harry lo miraba airadamente y un pequeño trapo para lavar los trastes sucios se estrellaba en su rostro.
Mas tarde Harry subió a su habitación. Sirius tenía razón estaba algo pálido, pero no era todo, sino que tampoco se sentía nada bien. "que pasa conmigo, si estaba perfectamente bien esta mañana, pero ahora me siento fatal" se decía Harry.
Sirius había notado la mirada angustiada dibujada en el rostro de Harry antes de que se marchara. Sirius preocupado lo había seguido por las escaleras con dirección a su habitación. Para su suerte Harry todavía no se había percatado de su presencia porque si no le hubiera ido como en feria solamente por entrometido. Harry se dejo caer sobre su cama y se froto sus ojos. Sirius frunció el ceño.
¡Harry estas BIEN?- le preguntó Sirius preocupado después de pensarse si le preguntaba o no a su ahijado.
Harry no respondió, solamente se dedico a frotar con sus manos su cabeza. Sirius entro por completo a la habitación de Harry y se sentó a un lado de él en la cama. Extendió su brazo, para tocar el de Harry. Estaba tan helado como el hielo. No era buena señal.
Harry estas bien frió, deja te traigo una cobija- dijo Sirius mientras caminaba hacía la puerta, pero la voz de Harry lo detuvo.
No muy calida Sirius- le dijo Harry. Sirius lo miro extrañado y fue cuando noto que unas gotas de sudor resbalaban por la frente de Harry.
Harry creo que mejor iré a llamar al doctor- e inmediatamente después de terminar salio como bala de la habitación, sin darle oportunidad a Harry de protestar por su decisión.
Sirius bajo de tres saltos gigantescos las escaleras. Donde tuvo suerte de salir ileso, ya que por tales maniobras había perdido el equilibrio en el último salto que había dado y casi caía como costal de plomo en las escaleras y rodaba escaleras abajo. Si hubiera pasado eso quien necesitaría un doctor sería él y no Harry, pero para su suerte sus reflejos fueron más rápidos, logrando con ello estabilizarse.
Maldijo a las esclareas y se fue a la sala de estar a buscar sus polvos flu para "llamar" al doctor. Los encontró estaban tirados en el sofá, se le habían caído pero no recordaba cuando, aunque eso era lo de menor importancia. Agarro un puñado de lo que estaba regado en el sofá e inmediatamente estaba parado en la chimenea tirando los polvos flu a esta y gritando a todo pulmón el nombre del doctor.
¡Aaahhh! - se escucho un grito de sorpresa proveniente del doctor, ya que se asustó al escuchar salir de la pequeña chimenea así repente y sin ningún previo aviso la voz de Sirius y además gritando con todas sus fuerzas.
¡DOCTOR!- le gritó Sirius.
¡SEÑOR BLACK CUANTAS VECES LE TENGO QUE DECIR QUE NO ES NECESARIO QUE ME GRITE!- le reprocho el doctor como si estuviera regañando a un niño pequeño por haber echo alguna travesura. Sirius se encogió de hombros- Ahora tranquilícese y dígame ¿Qué es lo que pasa?
Este. Harry enfermo de nuevo- le dijo con la cabeza baja.
Ya veo. ¿me podría decir que le paso?- le pregunto con el mismo tono calmado que la ultima vez que tuvieron una charla.
Bueno. Primero yo lo veía algo pálido, por mas que el negaba que todo estaba bien, yo tenía mis dudas, así que lo seguí a su habitación y ahí me acerque a su cama donde estaba acostado y le toque su brazo derecho y estaba totalmente frió como el hielo. Me preocupe y le dije que le traería una manta gruesa para que entrara en calor, pero cuando iba a salir por una, el me llamo y me dijo que no le trajera una demasiado caliente. El estaba sudando- le dijo Sirius al borde del pánico.
¡TRAIGAMELO DE INMEDIATO!- le dijo el doctor con voz fuerte y clara, lo cual asusto a Sirius, ya que siempre utilizaba un tono calmado y relajante.
Sirius inmediatamente corto la comunicación con el doctor y subió de nuevo las escaleras, para después introducirse en la habitación de Harry, quien estaba apoyado contra la cabecera de la cama y tenia los ojos entreabiertos.
Harry te llevare al hospital- le dijo Sirius mientras lo agarraba entre sus brazos. Harry no quería ir al hospital de nuevo, acababa de salir, pero no tenía fuerzas estaba cansado.
No...Sirius...- le dijo Harry con voz débil. Sirius ignoro su comentario, pero lo que si hizo fue revisar la respiración de Harry, no quería que pasara lo mismo que la vez pasada.
Mas tarde llegaron al hospital y Sirius entro con Harry entre sus brazos. Al entrar al hospital de donde Harry había salido el día anterior, se quedo completamente sorprendido al ver al doctor rodeado de varias enfermeras esperando su llegada. Sirius ya se había asustado y los siguió por los pasillos hacía una habitación.
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Mil disculpas....
A la mañana siguiente Harry se despertó tarde. Le echo un vistazo al reloj que se encontraba sobre la mesita de la noche. Las manecillas de este marcaban claramente la una de la tarde. Harry nunca había dormido tanto en su vida, pero se sentía reanimado.
Se puso ropa limpia y se dirigió al piso inferior. Llego a la cocina, donde se encontraba Sirius sentado en la mesa, tenía a una pequeña lechuza y varias cartas estaban colocadas en la mesa. Sirius se percato de la presencia de Harry.
¡Por fin te levantas Harry! ¡Ya era hora!- se burlo Sirius. Harry se rió sarcásticamente, para después mirar fijamente a un tazón con cereal.- ¿Cómo te sientes?- le pregunto Sirius. Harry desvió la vista del cereal.
¿Sirius es que tienes que preguntarme que como me siento cada cinco segundo?- le preguntó Harry molesto.
Lo siento Harry.. Se que todo esto te molesta..Pero tengo que estar seguro de que estés bien... Además recuerda que tenemos cita con el doctor este viernes, dentro de dos días para ser precisos - le dijo Sirius rápidamente ya que se encontraba ojeando las cartas que él leía antes de que Harry llegara y lo fulminara con la mirada, aunque ahora se encontraba haciéndole lo mismo. Sirius al ver a Harry así no pudo evitar que una sonrisa apareciera en su rostro, ya que recordó que Lily siempre le lanzaba ese tipo de miradas a James.
¿Sirius te sientes bien?- Le pregunto Harry con una ceja levantada, debido a la sonrisa burlona dibujada en el rostro de su padrino.
Lo siento..Es solo que estaba pensando...Bueno no importa- dijo Sirius cortándose a si mismo. Harry no insistió y tomo lugar en la mesa para comenzar a desayunar ese plato de cereal al que tantas miradas le había echado. Pero antes de ello saco algo de leche del refrigerador.
Toma- Le dijo Sirius pasándole a Harry unos pequeños sobres. Harry los miro extrañado- Son cartas de tus amigos Ron y Hermione; y esta otra de Hagrid.
¿Les dijiste?- Le preguntó Harry
Bueno no te mentiré solo les dije a Ron y Hermione.Pero como también le dije a Dumbledore supongo que tal vez el fue quien le dijo a Hagrid sobre tu situación- le respondió Sirius.
Espera.Creía que Hagrid tenía asuntos que realizar con Madame Maxime este verano- Le dijo Harry pensativamente.
Tienes razón..Ella se va a quedar con él en Hogwarts este verano...Están en una misión ultra secreta. No muy arriesgada.Dumbledore ni siquiera quiso decirme de que se trataba tan importante misión- Dijo Sirius- Aunque personalmente creo que él esta enamorado de ella.
Eso es más que obvio- Le dijo Harry. Como ya había terminado de comer su cereal, se puso de pie, lo recogió y se fue en dirección al fregadero para lavarlo.
Harry te ves algo pálido- le dijo Sirius, pero lamento haber dicho eso cuando se dio cuenta que Harry lo miraba airadamente y un pequeño trapo para lavar los trastes sucios se estrellaba en su rostro.
Mas tarde Harry subió a su habitación. Sirius tenía razón estaba algo pálido, pero no era todo, sino que tampoco se sentía nada bien. "que pasa conmigo, si estaba perfectamente bien esta mañana, pero ahora me siento fatal" se decía Harry.
Sirius había notado la mirada angustiada dibujada en el rostro de Harry antes de que se marchara. Sirius preocupado lo había seguido por las escaleras con dirección a su habitación. Para su suerte Harry todavía no se había percatado de su presencia porque si no le hubiera ido como en feria solamente por entrometido. Harry se dejo caer sobre su cama y se froto sus ojos. Sirius frunció el ceño.
¡Harry estas BIEN?- le preguntó Sirius preocupado después de pensarse si le preguntaba o no a su ahijado.
Harry no respondió, solamente se dedico a frotar con sus manos su cabeza. Sirius entro por completo a la habitación de Harry y se sentó a un lado de él en la cama. Extendió su brazo, para tocar el de Harry. Estaba tan helado como el hielo. No era buena señal.
Harry estas bien frió, deja te traigo una cobija- dijo Sirius mientras caminaba hacía la puerta, pero la voz de Harry lo detuvo.
No muy calida Sirius- le dijo Harry. Sirius lo miro extrañado y fue cuando noto que unas gotas de sudor resbalaban por la frente de Harry.
Harry creo que mejor iré a llamar al doctor- e inmediatamente después de terminar salio como bala de la habitación, sin darle oportunidad a Harry de protestar por su decisión.
Sirius bajo de tres saltos gigantescos las escaleras. Donde tuvo suerte de salir ileso, ya que por tales maniobras había perdido el equilibrio en el último salto que había dado y casi caía como costal de plomo en las escaleras y rodaba escaleras abajo. Si hubiera pasado eso quien necesitaría un doctor sería él y no Harry, pero para su suerte sus reflejos fueron más rápidos, logrando con ello estabilizarse.
Maldijo a las esclareas y se fue a la sala de estar a buscar sus polvos flu para "llamar" al doctor. Los encontró estaban tirados en el sofá, se le habían caído pero no recordaba cuando, aunque eso era lo de menor importancia. Agarro un puñado de lo que estaba regado en el sofá e inmediatamente estaba parado en la chimenea tirando los polvos flu a esta y gritando a todo pulmón el nombre del doctor.
¡Aaahhh! - se escucho un grito de sorpresa proveniente del doctor, ya que se asustó al escuchar salir de la pequeña chimenea así repente y sin ningún previo aviso la voz de Sirius y además gritando con todas sus fuerzas.
¡DOCTOR!- le gritó Sirius.
¡SEÑOR BLACK CUANTAS VECES LE TENGO QUE DECIR QUE NO ES NECESARIO QUE ME GRITE!- le reprocho el doctor como si estuviera regañando a un niño pequeño por haber echo alguna travesura. Sirius se encogió de hombros- Ahora tranquilícese y dígame ¿Qué es lo que pasa?
Este. Harry enfermo de nuevo- le dijo con la cabeza baja.
Ya veo. ¿me podría decir que le paso?- le pregunto con el mismo tono calmado que la ultima vez que tuvieron una charla.
Bueno. Primero yo lo veía algo pálido, por mas que el negaba que todo estaba bien, yo tenía mis dudas, así que lo seguí a su habitación y ahí me acerque a su cama donde estaba acostado y le toque su brazo derecho y estaba totalmente frió como el hielo. Me preocupe y le dije que le traería una manta gruesa para que entrara en calor, pero cuando iba a salir por una, el me llamo y me dijo que no le trajera una demasiado caliente. El estaba sudando- le dijo Sirius al borde del pánico.
¡TRAIGAMELO DE INMEDIATO!- le dijo el doctor con voz fuerte y clara, lo cual asusto a Sirius, ya que siempre utilizaba un tono calmado y relajante.
Sirius inmediatamente corto la comunicación con el doctor y subió de nuevo las escaleras, para después introducirse en la habitación de Harry, quien estaba apoyado contra la cabecera de la cama y tenia los ojos entreabiertos.
Harry te llevare al hospital- le dijo Sirius mientras lo agarraba entre sus brazos. Harry no quería ir al hospital de nuevo, acababa de salir, pero no tenía fuerzas estaba cansado.
No...Sirius...- le dijo Harry con voz débil. Sirius ignoro su comentario, pero lo que si hizo fue revisar la respiración de Harry, no quería que pasara lo mismo que la vez pasada.
Mas tarde llegaron al hospital y Sirius entro con Harry entre sus brazos. Al entrar al hospital de donde Harry había salido el día anterior, se quedo completamente sorprendido al ver al doctor rodeado de varias enfermeras esperando su llegada. Sirius ya se había asustado y los siguió por los pasillos hacía una habitación.
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Mil disculpas....
