CAPITULO II: La Academia Cackle.

Una gran expectación crecia en Hogwarts conforme pasaban los dias de la semana.  La noticia de la visita de la Academia Cackle habia puesto a todos de cabeza pero con diferentes actitudes. Dumbledore estaba muy emocionado por la llegada de las invitadas ya que por fin conoceria a la tan afamada Amelia Cackle de la familia Cackle, fundadores de la prestigiada Academia Cackle, y no a su gemela malvada, la bruja fugitiva Agata Cackle, con quien en cierta ocasión habia coincidido en el Ministerio de Magia y le habia parecido tan desagradable. En cambio, aunque no lo demostraba, la profesora McGonagall, no estaba muy contenta con la decisión que habia tomado el director, las alumnas de esa escuela tenian una reputación ambigua: muchos decian que habia niñas con mucho talento y que aprendian el método Cackle con bastante perspicacia; sin embargo, habia otras que eran un verdadero desastre.

Ese sentimiento era compartido por bastantes alumnos, quienes pensaban que no deberia ser muy agradable compartir Hogwarts con alguien mas.

- Saben lo que esto significa? Cientos de brujas extrañas metidas no sólo en nuestros cuartos sino en nuestra vida!!!

Este y algunos comentarios mas fueron los que se oyeron durante toda la semana en los pasillos, especialmente provenientes de bocas slytherins.

El sabado por la mañana, en el desayuno, Dumbledore dio las listas de los cuartos que se compartirian, las brujas Cackle estarian repartidas entre las cuatro casas, pero antes de que hubiera terminado, las protestas comenzaron porque la repartición no estaba del todo equilibrada.

- Qué injusticia! – dijo Parvati Patil – nosotros tenemos 5 alumnas Cackle y el quinto año de Slytherin sólo tiene 2.

Ron lanzó una tremenda carcajada.

- 5 mas metidas en ese cuarto! Eso tengo que verlo!

- No es gracioso, Ron, mucha gente en un cuarto impide el ambiente de estudio – dijo Hermione.

- Tal vez no sea tan malo... quiza la repartición fue como la de nosotros, ya saben, dependiendo de sus personalidades. – dijo Harry.

Dumbledore también entregó las listas de cosas que los alumnos tenian que hacer antes de la visita como: mover camas, reorganizar espacios en el comedor y los salones, hasta adornar el castillo para darles la bienvenida... todo magicamente, claro esta, pero aun asi se sintió un sopor mas generalizado y empezaron de nuevo las quejas, pero esta vez con otras voces.

- QUE??? Adornar la fachada del castillo??

- Y con Slytherin???

- Toda la fachada???

- Es una injusticia!!!

Esta vez las risas vinieron de parte de Hermione y Parvati.

- Bueno, por lo menos ya les tocó hacer algo, no? – dijo Mione.

- Pero esto es demasiado, no vamos a terminar para mañana – reclamó Seamus Finnigan.

- Claro que si! Sólo necesitan organizarse... – empezó Lavender Brown.

- Y trabajar durante todo el dia y toda la noche. – completó Parvati.

Las chicas no dejaban de reir ante el gesto de desesperación de los chicos.

- Burlense!! No nos importa!!! De todos modos a ustedes les toca la peor parte, dormir con ellas – dijo enfadado, Ron.

- Oh, vamos, Ronnie, como ya dijiste, todos tendremos que hacer sacrificios – comentó Hermione.

- Exactamente, señorita Granger...

Una voz habia interrumpido su conversación, era Dumbledore que, con una sonrisa, aprobaba el ultimo comentario de Mione.

- Todos haremos sacrificios, pero estoy seguro de que algo bueno saldra de todo esto.

Dio unas palmaditas a los mas cercanos en el hombro y salió del Gran Comedor. Lo unico que animaba un poco a los gryffindors era ver la misma cara de horror en los slytherins y viceversa.

- No quisiera dejar el castillo, ni al señor Blossom.

- Vamos, Mildred, tal vez el señor Blossom logre convencer a la Maestra Cackle.

- Estoy de acuerdo con Mildred, hasta la señora Tapioca va a ir, el señor Blossom no puede quedarse aqui sólo y menos con los mortifagos cerca.

- Oye... Enid... qué pasa?

- Mmmm... nada... es sólo que...

- Te da nostalgia, como a mi, el alejarte del castillo, verdad?

- Si claro, en parte es eso, pero... no sé, tengo un mal presentimiento, qué tal que los alumnos de Hogwarts no nos aceptan?

- Bueno, para eso tenemos que estar preparadas, es lógico que no nos acepten, a nadie le gusta que invadan su espacio, pero creo que con el tiempo estaremos bien.

Enid no estaba muy convencida pero no dijo mas.

Harry y Ron se arremangaron la camisa y empezaron a revolver una especie de mezcla de varios colores para que Dean Thomas, que dibujaba muy bien, hiciera los escudos de las dos escuelas... claro, que a los dos segundos ya estaban mas que sucios y jugando a las guerras de pintura junto con Seamus. Al cabo de un rato, el profesor Snape fue a revisar el orden y los regañó alegando que no iban a terminar a tiempo si seguian con sus jueguitos, ademas de quitarle los 5 puntos respectivos por cada uno a Gryffindor, por lo cual, decidieron seguir pintando.

- Tenia que ser un Weasley, pero que mal gusto tienes!!

- Entonces pintalo tu, Malfoy.

- En realidad a mi no me importa, la visita de esas brujas me tiene sin cuidado... Potter, fijate!!!

Harry habia salpicado uno de los zapatos de Draco con pintura roja.

- Lo siento, pero no te hubiera pasado nada si no estuvieras ahi parado sin hacer nada...

- Sin hacer nada? – dijo Draco, con aire de superioridad – yo soy el supervisor de esta obra, sin mi, esto seria un fracaso total – y se retiró a seguir "supervisando".

- Supervisor de esta obra?? Quién se cree? Picasso?? – dijo Dean.

- Quien es Picasso?- preguntó Ron.

- Un pintor muggle muy famoso.

Siguieron poniéndole color al león de Gryffindor pero pronto fueron sacados de su concentración por Neville.

- Cuidado!!!

Todos corrieron en dirección de dónde habia provenido el grito... pero era demasiado tarde: Neville habia volcado uno de los baldes con pegamento magico desde el segundo piso y éste habia caido justo sobre Crabbe y Goyle. Como era de esperarse, ahora estaban completamente petrificados porque el pegamento magico seca en el instante en que se aplica. Se oyó una carcajada general, incluso Draco trataba de aguantar la risa.

El domingo por la mañana, la mayoria de las cosas encargadas ya estaban listas. Ron, Harry, Seamus, Dean y Neville, habian quedado exhaustos del dia anterior pero lo habian logrado, en la fachada del castillo ahora se podia ver la "H"  de Hogwarts rodeada por los escudos de las casas y un poco arriba a la derecha la Luna menguante y el gato de Cackle. Dumbledore estaba tan satisfecho que dejó dormir a los alumnos unas horas mas, mientras los maestros hacian unos cuantos ajustes en el Comedor.

- Usted va a disculparme, profesor Dumbledore, pero no voy a poder asistir a la ceremonia de Bienvenida.

- Pero por qué Sybil? Nos haras mucha falta si no asistes.

- Lo sé, lo sé, pero soy sincera, todos aqui lo saben – la profesora McGonagall hizo un gesto incomprensible cuando la Trelawney dijo eso – y he tenido algunas visiones de esas niñas que no me gustan nada, prefiero convivir con ellas y con sus maestras lo menos posible – y salió directo hacia su torre.

- Ah, claro! Y eso conlleva el no ayudarnos... – dijo la profesora Hooch.

- Hay algo raro en Sybil...

- Con todo respeto, profesor Dumbledore, la profesora Trelawney es bastante rara.

- Si, si, ya lo sé, Severus, pero... no lo sé, ultimamente esta mas agitada y preocupada...

Cerca de las 7 de la noche, las casas ya estaban arregladas y los alumnos sólo esperaban la siguiente hora para reunirse para la ceremonia de Bienvenida, el tren de Hogwarts traeria a la Academia Cackle. Draco decidió adelantarse un poco y fue el primero en entrar al Gran Comedor, "vaya, si que se esforzaron" pensó para si, el salón estaba adornado con las banderas de las casas de Hogwarts, como siempre, pero las velas del techo tenian un resplandor especial que los hacian brillar mas, al frente, detras de la Mesa Alta, se podian ver una "H" y una "C" entrelazadas y un poco mas arriba, un gran letrero que decia "Bienvenidas a Hogwarts" en letras rojas y grandes, "no sé para qué, deben ser un montón de niñas tontas". Se sentó en la mesa de Slytherin y como no tenia nada que hacer, contó los lugares que habia... sobraban, seguro para las Cackle que vinieran a su casa... sólo una cosa lo animaba de esa visita: Pansy Parkinson estaria tan ocupada en enseñarles el colegio y en enterarse de sus vidas que, por lo menos por unos dias, se olvidaria de acosarlo. Respiró profundo y dejó caer su cabeza en el respaldo de su asiento, se sentia cansado, el reloj del pasillo sonó, ya eran las ocho y la maldita ceremonia empezaria. No se habia equivocado, parvadas de alumnos comenzaron a entrar, Crabbe y Goyle tenian mirada idiota, Draco pensó que seguro era por que darian un banquete esa noche, por unos instantes se reprochó el haber escogido amigos tan imbéciles... pero después recordó lo gordos que estaban y como le habian servido para quitar del camino a los estorbos.

- Hola, Draco, por qué no nos buscaste?

- Por nada, Crabbe, no los necesitaba.

- Ah, bueno.

Cuando todos estuvieron sentados, Dumbledore entró y se hizo el silencio pues no venia sólo, iba con una señora medio regordeta, toda vestida de negro, de edad avanzada, con el cabello un poco menos blanco que el de él y con gafas alargadas. Cuando llegó al frente de la Mesa Alta volteó y les dedicó a sus alumnos una gran sonrisa.

- Mis queridos alumnos, me es muy grato presentarles a la Maestra Amelia Cackle, directora del colegio que nos visita.

Todos dieron un aplauso... algo apagado. La maestra Cackle se adelantó unos pasos.

- Debo decir que toda la Academia Cackle se siente muy honrada de ser tan bien recibida por una escuela como Hogwarts y estamos seguras de que esta experiencia sera no sólo agradable sino util para ambas instituciones.

- Ah, claro, se me olvidaba decirles, que mientras esta... experiencia... dure, tendran que compartir algunas clases que antes nosotros no teniamos y sera mejor que se vallan acostumbrando a los nuevos maestros con quienes también conviviran – repuso Dumbledore – Maestra Cackle.

- Bueno, sé que tal vez no sea muy agradable esa noticia, pero, créanme, nuestras maestras también son muy buenas y sus clases son de las mejores... – Amelia Cackle se mostraba algo nerviosa pero segura.

- Bien... ahora creo que es conveniente presentar al resto de las invitadas... Hogwarts, recibamos a la Academia Cackle.

Las grandes puertas del Gran Comedor se abrieron de par en par y Hogwarts pudo ver a una mujer alta, delgada, de piel blanca, con el cabello negro recogido en un gran moño y toda vestida de oscuro.

- Maestra Ogrumm, por favor, que pasen las niñas. – dijo la Maestra Cackle.

La maestra del moño, hizo una seña con la mano, volteando apenas hacia atras y comenzó a caminar. Detras de ella venian unas 100 niñas de diferentes edades, todas vestidas con una blusa azul claro con corbata combinada entre azul marino y plateado, y un jumper negro, traian capas negras como las de Hogwarts para cubrirse y llevaban una especie de cordón grueso y largo amarrado a la cintura. Habia 3 diferentes colores de cordón: morado, naranja o azul.

Todas las miradas se concentraron en ellas, revisandolas de arriba abajo, todas... menos la de Draco que estaba distraido viendo la cara de idiotas que ponian muchos, después de un rato decidió voltear y ver por el mismo... eran niñas comunes y corrientes, habia mejores en Hogwarts... de pronto vio a una en especial de entre todas, tenia el cabello negro azabache, lo que le recordó a Potter, pero con la diferencia que ése no le causaba repulsión, era largo y estaba recogido por una trenza larga y, al parecer de Draco, perfecta. Afinó la vista un poco mas pero ya no pudo distinguirla.

El profesor Dumbledore, después de darles la bienvenida, comenzó la ceremonia.

- Bien, niñas, cada una de ustedes sera recibida por una de las casas de Hogwarts – dio un ligero vistazo a sus alumnos – se les llamara para que sepan en cual... – hubo un murmullo entre ellas y algunas se miraron con terror - ... veamos... profesora McGonagall, quiere hacer el honor?

Con un aire estricto, la profesora McGonagall, se acercó y tomó la lista.

- Hummm... Clarice Crow…

De entre todas, salió una niña con coletas pelirrojas y alborotadas, tenia pecas en toda la cara. Harry le dio un codazo a Ron y en secreto le dijo: "se parece a ti", Ron primero se puso serio, después volvió a verla y asintió riéndose.

- ... Griselda Blackwood... Fenella Feverfew... Noata Grey... Erendira Whitecat...

Eran Cackles mas grandes, una con el cabello negro y otra rubia, una de cabello chino y otra con grandes ojos azules.

- Mildred Hubble... Jadu Wali... Ruby Cerezo... Helena Crieta… Cristine Coleto…

Esta vez salieron 5 niñas, algunas mas chicas que las anteriores, una tenia el cabello rojo muy oscuro en dos trenzas larguisimas, otra tenia aspecto indu, la tercera tenia dos pequeñas coletas paradas. La niña de las trenzas largas miró hacia sus compañeras con preocupación. Hermione lo notó y se acercó un poco mas a Ron y Harry, "seguro las estan separando, eso haria Snape si estuviéramos en su lugar".

- ... Enid Noche... Maud Moonshine y Sybil Hallow, estaran en Gryffindor.

Cuando la profesora McGonagall pronunció el nombre de Sybil hubo una risita general, Gryffindor se puso de pie y aplaudió mientras las mencionadas iban  a sentarse en los asientos vacios.

La ceremonia prosiguió de la misma forma, hasta que ya no hubo mas niñas. El profesor Dumbledore, dio de nuevo un discurso de Bienvenida y dejó que la cena comenzara.

- Gargolas galopantes!! Yo pensé que nos iban a separar!!! – dijo la niña de las trenzas largas.

- Ganas no nos faltaron, Mildred, - una profesora estaba parada cerca de la mesa y se apoyó de forma amenazante – si sucede algo que desprestigie a nuestra Academia, no habra excusa ni pretexto, sera causa de expulsión, entendieron?

- Si, maestra Ogrumm.

Respondieron todas con aspecto obediente pero en cuanto Ogrumm se fue, volvieron a reirse. Ron se quedó viendo a la profesora.

- Siempre es asi de exigente? – les preguntó.

- Ah, si, es su estilo – respondió una niña de lentes.

Hubo un silencio incómodo, que Harry tuvo que romper por una patada de Mione.

- AHU!! ... eh... Bienvenidas a... Gryffindor.... me llamo Harry, ella es Hermione y él es Ron...

- ... y nosotros somos Fred y George.

Los gemelos se habian acercado sospechosamente hasta ahi, intercambiando lugares se sentaron junto a Fenella y Griselda, las cuales se vieron dudosas.

- Bueno, yo soy Mildred – dijo la niña de las trenzas largas – y ellas son Enid y Maud – señalando a las dos personas de enfrente, Enid era la unica que tenia el primer botón de la blusa desabrochado y la corbata un poco mas floja, y Maud tenia el cabello rubio oscuro y usaba lentes.

- Y yo soy Jadu – dijo la niña de aspecto indu.

- Y yo, Ruby.

Durante la cena se platicaron ciertos aspectos de ambas escuelas, como el tipo de maestros, los alumnos... y entonces Mildred recordó algo.

- Qué tal es Slytherin?

- Agh... – dijo Ron – es la peor casa, parece que la mayor satisfacción de todos es molestar al prójimo.

Las Cackle empezaron a reir.

- Qué? Qué dije?

- Nada, nada, es que fue la casa perfecta para Ethel y Drusilla... parece como si nos hubieran leido la mente...

Harry se asomó un poco hacia Slytherin para ver si podia ver a las Cackle que habian quedado ahi... pero en lugar de eso, se encontró con la mirada de Draco que parecia estar buscando algo entre las mesas, cuando se percató de la vista de Harry, apartó los ojos inmediatamente.

NOTAS:

No todas las alumnas mencionadas tienen un papel importante en esta historia. Algunos de los nombres son nuevos y salidos de mi imaginación pero ninguno es de trascendencia. Se me habia olvidado recordarles que mis historias estan escritas sin acentos en algunas letras porque FF.net  no los codifica.

Gracias por todos sus reviews:

DIEL: bueno, aun no puedo revelar de quién se va a enamorar Draco, es algo complicado.

ARWEN-CHANG: hola de nuevo, bueno, es lo mismo que con Diel, aun no puedo decirles de quien esta enamorado Drakito.

SAKURA-CORAZON: gracias por empezar a leer mi historia de Draki, bueno espero que tu ojo interno no haya fallado.

CHIHARU /LI: muchisimas gracias por tu comentario, no creo ser una gran escritora pero le hago el intento, ja. Espero que te haya gustado también este capitulo.

STELLAH LHUDERL-HIL: hola, que bueno que te veniste a leer este fic también, mmm... no puedo revelar nada aun, tal vez sea una sorpresa mas grande.

CHO MALFOY02: gracias por animarte a leer mi fic, bueno, Draco va a sufrir un poquitin... o un mucho? Bueno, en realidad... no tengo idea,... bueno si la tengo... pero mejor lean.

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