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CAPÍTULO 1

SIENTO DECIR ADIOS

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Centro Pokémon de la Meseta Añil. El reloj de la pared marca las 13:24 horas. Por la puerta aparece la demacrada figura de Ash Ketchum. Su cara refleja el cansancio de una noche entera en vela: grandes ojeras, pelo revuelto, mirada perdida y la ropa arrugada. No había tenido una buena noche...

Misty y Brock lo vieron entrar. Estaban preocupados. Sobre todo Misty...

MISTY: ¡Ash! ¡Ya era hora de que volvieras!

BROCK: Eres un cabezota, Ash. No sólo te has quedado toda la noche sin dormir, sino que además has tenido el valor de levantarte temprano para irte al estadio. ¡Estás loco!

ASH: No me lo recordéis, por favor.

Misty miró a Ash de arriba a abajo. Notó que le faltaba algo...

MISTY: Ash... ¿No te falta algo?

ASH: ¿El qué?

MISTY: Tu gorra... Ya no está...

ASH: ¿Mi gorra? Qué me importa ya la gorra... Sólo quiero dor.... ZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZ

Ash se dejó caer como un saco de patatas sobre un sofá del recibidor, y comenzó a roncar como un poseso. Brock y Misty "gotearon".

MISTY: (sonriendo) Está muerto de sueño... Incluso se ha olvidado de su inseparable gorra.

BROCK: Va a estar durmiendo hasta mañana por la mañana...

MISTY: Tendrá mucha hambre...

BROCK: Ya se hinchará mañana... Vi al Profesor Oak esta mañana y me dijo que iban a celebrar una fiesta en el gran restaurante que hay a unas pocas calles de aquí. ¡Van a celebrar el octavo puesto de Ash por todo lo alto!

ASH: (al parecer, no estaba tan dormido) Y también el segundo puesto de Gary... El va a ser el alma de la fiesta... No un perdedor como yo... ZZZZZZZ... Esa gorra me daba mala suerte... ZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZ...

Brock y Misty le miraron, apesadumbrados. Pikachu estaba también con las orejas caídas, triste. El único alegre que allí había era "el huevo". El "estoyfelizysiempreloestaréporlossiglosdelossiglosamén" Togepi...

TOGEPI: (con la cara de felicidad más irritante que os podáis imaginar) ¡TOGIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII!

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Eran las 18:40 de la tarde. Ash seguía dormitando como un Snorlax. Poco a poco el Centro Pokémon se fue llenando de gente. Venían a recoger a sus Pokémon. Estaba claro que la Liga Pokémon había terminado...

Brock se había ido. Estaba cansado de estar en el Centro Pokémon, y no quería volver a encontrarse con la enfermera Joy. Aún le dolía la cara de la bofetada de antes...

En efecto, Brock no estaba. Se habría ido a "conocer" la ciudad... es decir, ver los "monumentos" de la ciudad, apreciar las "curvas" y "ondulaciones" del terreno, admirar las "montañas" de la agente Jen... es decir, las "montañas" de... de... ¡Y QUÉ MÁS DA LO QUE ESTÉ HACIENDO ESE PERVERTIDO, LECHES! (lo de pervertido lo digo de buen rollo: que no se ofenda ningún Brockmaníaco/a)

El caso es que Ash seguía durmiendo, con Pikachu a su lado. Misty, como le dijo a Brock antes, se había quedado a hacerle compañía.

MISTY: **Pobre Ash. Tenía tantas ilusiones... Tranquilo, Ash. Sé que ganarás algún día. Y te convertirás en un gran Maestro Pokémon... y yo estaré contigo en ese momento. **

Misty se puso colorada. Se sorprendió a sí misma pensando de esa manera. Menos mal que nadie la había visto...

MISTY: **¡Cada día estás peor, Misty! He de reconocer que me gusta Ash, pero... a él no le intereso. Al menos de la manera que a mí me gustaría... Será mejor que me olvide de momento... a Ash no lo puedo cambiar...**

Misty tuvo unas ganas enormes de darle un beso en la frente. ¡Estaba tan mono mientras dormía!

MISTY: **¿Estás loca, Misty? ¿Qué Ash te parece mono? ¡Es un estúpido que no hace más que ponerse en ridículo! ¡Por favor, Misty! ¡DESPIERTA!**

Pero no había manera. Misty sentía una fuerte sensación de amor-odio que la tenía confundida. Lo quería, pero en el fondo lo odiaba. ¿O lo odiaba pero en el fondo lo quería? ¿O era producto de su imaginación? ¿O Togepi la estaba manipulando?

TOGEPI MALVADO: ¡TOGEPIIIIIIIIIIIIIII! ¡JUAJUAJUAJUAJUAJUAJUAJUAAAAAAAA!

No. Esa idea era demasiado estúpida. Realmente, no sabía qué pensar...

ASH: (en sueños) Misty...

A Misty se le cortó la respiración... ¡Ash hablaba de ella en sueños!

ASH: ¿Podrías sentarte en otro sitio? ¡Contigo ahí sentada, no puedo estirar las piernas! ¡Y las tengo agarrotadas!

Misty le dio tal golpetazo que seguro que ya no se despertaría en bastante tiempo...

MISTY: **¡¡¡SERÁ IDIOTA!!! ¡Y yo creyendo que soñaba conmigo! Soy una tonta...**

Y Misty se levantó del sofá en el que Ash y Pikachu dormían, con un profundo pesar... No había manera... Ash siempre seguiría siendo Ash...

Se sentó en una silla, mientras sostenía a Togepi (¡JUAJAJAJAJAJA!... perdón, no he podido evitarlo: el pobre bicho es demasiado irritante para mi gusto) entre sus manos. Afortunadamente para ella, seguía durmiendo...

En el exterior, la noche comenzaba a caer. Pero el aire era cada vez más húmedo: se avecinaba una tormenta...

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La lluvia comenzó a caer con fuerza. Hacía mucho tiempo que no llovía de aquella manera. Ríos de agua y barro bajaban por las calles en cuesta de Meseta Añil. La gente se refugiaba en sus casas y las farolas de la calle se encendieron. Eran las 20:13 horas... Lo inesperado iba a pasar...

JOY: ¿DIGA?

El teléfono había sonado en el Centro Pokémon...

JOY: ¿Misty? ¿Aquí, en el Centro Pokémon? Voy a preguntar...

La enfermera Joy salió al recibidor, y vio a Misty allí sentada, que estaba comenzando a dormirse...

JOY: Perdona, joven. ¿Eres tú Misty?

MISTY: ¿Uh? Sí, claro. ¿Qué pasa?

JOY: Tienes una llamada para ti. Es de una tal Violeta. Parecía muy nerviosa...

Misty se quedó extrañada. ¿Qué querrían sus hermanas esta vez? Llevaban mucho tiempo sin interesarse por ella. ¿Al fin se preocuparían por ella? La curiosidad era inaguantable...

MISTY: ¿Dónde está el teléfono?

JOY: Allí, tras esa puerta. Ciérrala cuando termines, ¿vale?

Y la enfermera Joy se alejó por la puerta del mostrador. Misty, nerviosa, se apresuró a coger el teléfono. Estaba temblando...

MISTY: Hola, Violeta. ¿Qué querías?

Silencio. Sólo la respiración de Misty se oía en el silencio del recibidor, cada vez más oscuro. El ¡chop, chop! de las gotas al caer sobre el tejado metálico del Centro se hacía cada vez más intenso... al mismo ritmo que las lágrimas de Misty comenzaban a caer de sus mejillas...

MISTY: ¡NO PUEDE SER! ¡ESO ES TERRIBLE! ¿LILY? Sí. Iré para allá lo antes posible...

Misty colgó el teléfono rápidamente y comenzó a correr hacia donde Ash dormía. Cogió su bolsa y a Togepi, que chirrió sorprendido. Atravesó la puerta del Centro Pokémon a toda velocidad, y sintió el intenso frío del exterior. Corrió y corrió, con los ojos cerrados, manteniendo las lágrimas...

Al llegar a un cruce de calles, tuvo la mala suerte de chocar con alguien... conocido...

BROCK: ¡UAAAAAAAAAAAAAAY! ¡Desde luego, hoy no es mi día!

MISTY: Lo siento, Brock.

Misty se levantó como pudo y comenzó a correr de nuevo, sintiendo como la intensa lluvia la azotaba sin piedad, como millones de agujas heladas cayendo del cielo...

BROCK: ¡Espera, Misty! ¿A dónde vas tan corriendo?

Misty giró un instante la cara hacia Brock. Tenía los ojos rojos y la cara cubierta de lágrimas y gotas de agua...

MISTY: No tengo tiempo para explicaciones... Adiós...

Brock se quedó allí, en medio de la calle, viendo como Misty desaparecía entre la lluvia... Una lluvia que disimulaba un ruido aún más triste que la propia lluvia... un llanto en el silencio...

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Ash despertó. Unas pequeñas manos le estaban tirando del pelo... era Pikachu. Tenía cara de estar muy preocupado...

ASH: ¿Qué es lo que pasa, Pikachu?

PIKACHU: Pikachupi... (por si no lo habían notado, Pikachupi es la manera "pikachuresca" de referirse a Misty, a la vez que Pikapii se refiere a Ash, y también Togepi es llamado por Pikachu Pipipiii)

Ash no entendía qué es lo que pasaba. Vio como Brock estaba sentado a su lado, entristecido...

ASH: ¿Pasa algo, Brock? ¿Dónde está Misty?

BROCK: Ya no está, Ash. Se ha ido...

ASH: ¿Cómo que se ha ido? ¿Cuándo?

BROCK: Hará más o menos una hora. Y no creo que vaya a volver...

ASH: ¿QUÉ? ¿QUÉ ES LO QUE HA PASADO?

BROCK: No lo sé. Lo único que puedo decirte es que se fue llorando...

A Ash se le vino el alma abajo. Misty... ¿llorando? Muy grave tenía que ser lo que le hubiera sucedido para provocar a Misty aquellas lágrimas...

BROCK: Me temo lo peor... Puede que no volvamos a verla en mucho tiempo...

ASH: No digas tonterías, Brock. Volverá... Tiene que volver, ¿verdad, Brock?

Ash miró a Brock, preocupado, esperando una respuesta que sabe que no se la daría... Misty se había ido, y puede que para... ¿siempre?

**********

Misty había llegado a la estación de la Meseta Añil. Un cartel luminoso indicaba que el siguiente tren hacia Ciudad Celeste llegaba dentro de veinte minutos.

Estaba sentada en un banco del andén, esperando al tren que la llevara a Ciudad Celeste. Se había gastado todos los ahorros que la quedaban en el billete. Era el gasto más amargo que había tenido en su vida...

MISTY: **Siento decir adiós, aunque ya sea tarde. Siento marcharme así. No me he despedido como debiera, pero es mejor así. Si no, me habría costado mucho más irme. Y en casa me necesitan...**

Togepi lloraba. Nunca le había gustado la lluvia, y tenía frío. La tristeza que inundaba a Misty impedía cualquier intento de consolarlo. Estaba calada hasta los huesos... Había perdido su goma del pelo por el camino, y ahora su pelirroja melena le caía sobre los hombros, con los cabellos húmedos y deshechos por la lluvia. Misty había perdido aquel brillo que siempre la hacía recuperarse de los golpes, aquella fuerza que tanto la caracterizaba, aquella sonrisa que te alegraba en los momentos más tristes... Ya no era Misty la Poderosa... Ni tan siquiera era Misty.

Comenzó a soplar el viento con fuerza. Misty sacó su chaqueta rosa de la mochila (la que llevaba en la 2ª película, para quien la viera) y se la puso, para intentar calentarse. De repente, sus acuosos ojos verdes vieron como, mecido por el viento, un llamativo objeto de color rojo se posaba sobre las vías. Curiosa, Misty se levantó y caminó hacia el borde del andén. Había dejado a Togepi en su bolsa, en el banco en el que antes estaba sentada, a resguardo de la lluvia.

Una vez en el borde del andén, miró de izquierda a derecha. No venía ningún tren y no había nadie a la vista. Como si algo la impulsara a moverse, bajó con sumo cuidado a las vías, conocedora del peligro que conllevaba aquello. Se acercó cuidadosamente al objeto, y no pudo creer lo que vio: era la gorra de Ash. Aquella que nunca se quitaba, aquella que esa misma tarde abandonó a su suerte.

MISTY: Dios mío... Ash...

Las lágrimas cayeron de nuevo sobre sus mejillas, mientras apretaba con fuerza la gorra entre sus manos. Eso tenía que ser una señal, un anuncio divino, un...

GUARDIA: ¡EH, TÚ! ¿TE HAS VUELTO LOCA? ¡SAL DE AHÍ AHORA MISMO!

Misty estaba aterrada. Se guardó la gorra en un bolsillo del pantalón y se apresuró a subir al andén. El guardia, a pesar del enfado que tenía, quiso ser amable y la ayudó a subir.

MISTY: Lo siento, señor guardia. Se me había caído una cosa y como no había nadie he tenido que bajar yo misma. Lo siento mucho...

GUARDIA: Está bien. Te creo. ¡Pero que sea la última vez que bajas ahí sin avisar! ¡Es muy peligroso!

El guardia se fue a su puesto. Misty, sudorosa, se sentó de nuevo en el banco y se sacó la gorra del bolsillo. Estaba manchada de barro y tenía varios descosidos. Pero en esos momentos le pareció la cosa más maravillosa del mundo.

MISTY: ¡Cuánto os voy a echar de menos! Ash, Brock, Pikachu... Sobretodo a Ash. Si no le hubiera encontrado aquella vez, no sé que estaría haciendo yo ahora... (esbozando una pequeña sonrisa) ¡Supongo que ahora AÚN tendría mi bici!

Un pitido se oyó a lo lejos. Por megafonía se anunciaba la llegada del tren Meseta Añil-Ciudad Celeste. La lluvia seguía cayendo con fuerza. El aullido de un Houndoom se oyó a lo lejos. El chirrido del tren al frenar inundó el aire. El calor del interior estremeció los helados huesos de Misty... Buenas noches...

CONTINUARÁ...