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CAPÍTULO 2

RECUERDOS QUE VIENEN, RECUERDOS QUE VAN

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"Ha pasado un año desde entonces. Un año en el que poco ha pasado. Un año vacío, rutinario..."

Estamos en Ciudad Celeste, ciudad natal de Misty. Parece lejano ya el día en el que dejó a sus amigos, sin despedirse, para volver aquí, la ciudad que tanto odiaba. Su hermana Lily estaba muy grave, por supuesto, pero esa no era razón para ni tan siquiera despedirse de ellos... sobretodo, de Ash.

Quería decirle demasiadas cosas, y acabó por no decirle nada, por desaparecer sin dar explicaciones. Seguramente ya ni se acordaría de ella...

VIOLETA: ¡Misty! ¡Baja a comer! ¡La comida ya está lista!

MISTY: ¡Ya bajo!

Misty suspiró. Estaba en su habitación, mirando por la ventana. Tenía en una de sus manos la gorra de Ash, aquella que una vez encontró, mecida por el viento. Le traía tantos recuerdos...

MISTY: ** ¿Qué habría sido de mí si no hubiera conocido a Ash? Jamás habría vivido aquellas maravillosas aventuras... **

Se levantó de la silla y guardó con mucho cuidado la gorra en un cajón. No quería que sus hermanas comenzaran a imaginar cosas "raras". Era una gorra demasiado "llamativa" como para no saber de quién era...

Bajó las escaleras hacia el comedor. Un embriagador olor a comida ascendía hacia ella. ¡Su hermana Violeta cada vez cocinaba mejor!

Llegó al comedor, y las caras sonrientes de Daisy y Violeta la recibieron. Sin embargo, la cara siempre triste de Lily la desalentó. Estaba postrada en una silla de ruedas, con aquella horrible cicatriz aún marcándole el rostro...

Había sido terrible... Hace un año, poco después de la derrota de Ash contra Gary, su hermana Lily había tenido un terrible accidente... Ella y su novio circulaban de vuelta a Ciudad Celeste. Volvían de unas estupendas vacaciones en Aopulco... pero ocurrió lo inesperado. Era noche cerrada, y apenas se veía nada. La mala fortuna quiso que, a medio camino entre Ciudad Carmín y Ciudad Celeste, una cría de Stantler se les cruzó en el camino. Su novio, por no querer atropellarlo, dio un peligroso viraje y el coche se salió de la calzada, cayendo por un terraplén. No era muy profundo, apenas dos o tres metros, pero fueron suficientes para que él muriera en el acto...

La policía encontró el coche a la mañana siguiente. El cadáver del compañero de Lily fue llevado inmediatamente al médico forense... Lily, por otra parte, había sido encontrada a varios metros del siniestro, inconsciente, con la espalda rota y un gran corte cruzándole la cara desde el ojo izquierdo al pómulo derecho... Cuando se despertó en el hospital y le contaron lo ocurrido, sufrió un shock muy grande... Desde entonces, no ha vuelto a hablar...

Las consecuencias de todo esto no se hicieron esperar: el espectáculo de "Las 3 Hermanas Sensacionales" ya no existía, ya que Lily no podía andar y mucho menos nadar; y Misty difícilmente podría sustituirla, ya que no sabía natación sincronizada y la única experiencia que tenía en actuaciones acuáticas era cuando ella hizo de sirena...

Así que tuvieron que dejarlo. No podían vender el gimnasio, ya que...

NOTA DEL AUTOR: Ya sé que lo que voy a mencionar ahora no ha sido probado en ninguna parte, pero he de exponer mi teoría... ¡OJO! He dicho MI teoría. Con esto no quiero decir que tengáis que estar de acuerdo con esto o no... Los padres de Misty están probablemente muertos o trabajan en el extranjero (esto último me extraña: ningún buen padre que se precie trabajaría tanto tiempo). ¿Razones? Primero: ¿no os da la sensación de que Misty vivía CON sus hermanas? Segundo: Ha ido a visitar Ciudad Celeste y sólo fue a visitar a sus hermanas, con lo MAL que al parecer se llevaban... Tercero: Podríais pensar: "¿Y si Misty y sus hermanas YA se hubieran independizado?" Sus hermanas deberán tener entre 17 a 19 años: podrían independizarse perfectamente si quisieran y tuvieran medios, que los tienen... ¿Pero Misty? Dependiendo de la edad que tenga, ya que en ningún sitio se ponen de acuerdo, seguiría siendo menor de edad... con lo que eso significa. Los que quieran entender que entiendan... (FIN DE LOS ESTÚPIDOS COMENTARIOS DEL AUTOR)

No podían vender el gimnasio, ya que lo habían recibido de herencia de sus padres, fallecidos poco después de nacer Misty. La madre tuvo un parto difícil, y murió a las pocas horas después de dar a luz. Y su padre murió de pena, tras dos años de sufrimiento. A Misty no le quedaba ningún recuerdo de sus padres, debido a su corta edad...

Durante el tiempo que ella y sus hermanas eran pequeñas, habían quedado al cuidado de sus abuelos maternos, que vivían en la ciudad. Y así fue pasando el tiempo, hasta que las cuatro hermanas decidieron irse a vivir por su cuenta... Pero esa ya es otra historia, que deberá ser contada en otra ocasión...

El dinero lo traía el espectáculo "Las 3 Hermanas Sensacionales" y el Gimnasio Pokémon (como se supone, los Gimnasios están subvencionados por la Liga Pokémon, es decir, que los propietarios del Gimnasio se llevan un buen pellizco de dinero por parte de la Liga Pokémon). Acabado el espectáculo, y no siendo suficiente con el Gimnasio para alimentar a cuatro personas, tuvieron que buscarse trabajos...

Violeta aprovechó sus dotes culinarias para hacerse una estupenda cocinera, mientras Daisy aprovechaba su visión de la belleza (a veces me dan ganas de vomitar de lo que escribo... perdón por la interrupción) para trabajar de estilista. Misty, por su parte, siendo la mejor entrenadora de las cuatro, se ocupó de dirigir el Gimnasio. Lily, incapacitada para hacer nada, seguía postrada en su silla de ruedas, sintiéndose una inútil...

Pasó el tiempo, y las cosas parecían ir bien. Hace unas semanas el médico dijo a Lily que si no había complicaciones, pronto comenzarían con la rehabilitación. Había muchas posibilidades de que volviera a andar, pero tenía que saber que sería un gran esfuerzo, y para eso se necesitaban muchas ganas de querer vivir, cosa de la que Lily, en estos momentos, carecía.

Volvamos al momento presente. Allí estaba Misty, viendo la sonrisa de Violeta y Daisy, y la cara amargada de Lily, que ya había comenzado a comerse los suculentos macarrones humeantes que Violeta había preparado... La misma imagen de todos los días, desde aquel fatídico 25 de septiembre, el día en el que Misty tuvo que separarse de sus amigos, de su nueva vida, de sus sueños...

Se sentó a la mesa y miró a su plato. Alzó la vista y en su imaginación vio a Ash, sentado al lado suyo, con su "característica" manera de comer; a Brock, mariposeando de aquí para allá, admirando las "curvas", "ondulaciones" y "montañas" de sus hermanas (creo que voy a vomitar de nuevo... ¡Traedme una fregona!); incluso al pequeño Pikachu, jugando con Togepi...

Ahora que hablaba de Togepi, le vino un curioso pensamiento: ¿por qué Togepi aún no había evolucionado, después de todo este tiempo? Otra cosa que la extrañaba aún más era que, desde que Misty dejó a sus amigos, Togepi se había vuelto cada vez más triste, paralelamente a como Misty se sentía. Si algo tenía que ver con su no evolución, ella no lo sabía...

VIOLETA: ¿No comes, Misty? Se te va a enfriar...

DAISY: ¿Te pasa algo? Hacía tiempo que no te veía tan triste. ¿Hay algo que quieras contarnos?

Misty miró a Lily. Seguía comiendo y no dijo nada. Misty suspiró y respondió.

MISTY: No pasa nada. Sólo son recuerdos que me vienen a la mente.

VIOLETA: Los echas de menos, ¿verdad?

MISTY: (temblorosa) ¿A quién?

VIOLETA: ¿A quién va a ser? ¡A tus amigos!

A Misty casi se le escapa una lágrima. Sí, los echaba MUCHO de menos.

MISTY: Tenía que venir aquí. No podía... ya sabéis.

No quería continuar la frase estando Lily presente. No quería hacerla recordad nada.

VIOLETA: Te lo agradecemos mucho, Misty. Pero no tenías que haberte molestado.

DAISY: Debes saber que puede ser muy difícil que los vuelvas a ver.

MISTY: Ya lo sé... Conociendo a Ash, debe de estar en otro viaje Pokémon...

DAISY: ¿Ash? ¿Y qué pasa con Brock? ¿Es que acaso él no es tu amigo?

Misty "gote" de sorpresa. Como no tuviera cuidado se iba a confesar a quién no debía confesarse y en el momento menos apropiado.

MISTY: ("goteando") También le echo de menos. Pero supongo que Brock irá a donde vaya Ash, ¿no?

DAISY: Mmmm...

Continuaron comiendo. Lily, que ya había terminado de comer (no había perdido el tiempo hablando) se apartó de la mesa en su silla de ruedas y encendió el televisor. Era lo único que le interesaba en esos momentos, ya que no podía hacer nada.

DAISY: Gracias, Lily. ¿Ves como sí sirves para algo?

Lily, como siempre, no dijo nada. Volvió a su sitio y miraba impasible el televisor. En esos momentos estaban emitiendo las noticias. Aparte de las típicas noticias de política, catástrofes y demás, hubo una noticia que a Misty llamó especialmente la atención...

"Después de todo un año esperando a que volviera a ocurrir, la 23ª edición de la Liga Pokémon está a punto de comenzar. Como muchos sabrán, este año ha habido un pequeño retraso debido a las obras de remodelación del estadio de Meseta Añil, por lo que el campeonato comenzará a principios de octubre... Como añadidura, este año los aspirantes han tenido que recorrer la región de Houen, recogiendo medallas y..."

¡Por qué no lo habría pensado antes! ¡Ash seguramente vaya al campeonato! ¡No está todo perdido! ¡Podría volver a verle! Podría... Un momento... La última vez no estaba muy animado... ¿y si ya no quería seguir siendo un entrenador? ¿Y si le hubiera ido mal en esa región y no tuviera todas las medallas? ¿Y si... el Team Rocket...?

Tenía que hacer algo...

MISTY: Hermanas... Os tengo que decir algo...

VIOLETA: ¿Sí, Misty?

DAISY: ¿Hay algo que quieras confesar?

MISTY: Espero que no os importe, pero... ¡MAÑANA ME VOY A LA MESETA AÑIL!

Las palabras de Misty provocaron un gran revuelo en la mesa. Jamás habrían imaginado que Misty volviera a dejarlas. Ya se había ido una vez, pero ahora era distinto... Parecía realmente decidida...

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Misty estaba en su habitación, preparando su bolsa con todo lo necesario. Iba a irse, ya lo tenía decidido. Sabía que podría estar perdiendo el tiempo, pero si no iba a la Meseta Añil jamás lo sabría...

Mientras hacía esto, fijó su atención en el espejo que cubría parte de su habitación. Pocas veces se miraba en él, pero ahora se miró más detenidamente. No sabía por qué, pero sintió unas ganas enormes de mirarse en aquel espejo. ¿Por qué había algo en esa imagen que no la gustaba? Misty se veía bonita, mona... pero había algo raro. Miró con más detenimiento... Esa ropa, ese peinado... ¿no la daban un aire como de... marimacho????? No, por favor. ¿Cómo podía...? Le tenía mucho cariño a esa ropa. Le gustaba mucho... ¿Por qué iba a tener que cambiarla?

Ella recordó a sus hermanas. Siempre estaban espléndidas. Comparada con ellas, Misty, en cuanto a aspecto físico, no valía mucho: delgaducha, poco desarrollada, peinado extraño y ropa poco favorecedora... Sí, Misty era mona y bonita, pero poco atractiva. ¿Sería esa la razón por la que Ash no mostraba ningún interés por ella, aparte, por supuesto, del fuerte carácter? Lo intentaba, quería ser amable, sonreír a cada momento, pero su carácter iba ligada a su personalidad. Misty, sin su fuerte carácter, no era ella...

Pero, ¿por qué pensaba tanto en todo esto ahora? Antes nunca le había importado, y ahora se preocupaba demasiado...

Bajó al comedor. Era hora de cenar. Las mismas caras, la misma suculenta comida en la mesa y los mismos pensamientos...

VIOLETA: Mañana por la tarde saldrá el primer tren hacía la Meseta Añil. ¿Tienes todo preparado para mañana?

MISTY: Sí, pero aún me falta hacer una última cosa... Daisy, ¿puedo pedirte un favor?

DAISY: ¿Sí?

MISTY: ¿Podría ir mañana, antes de irme, de compras contigo?

Daisy, medio contenta medio sorprendida, sonrió.

DAISY: Pensé que jamás ibas a pedírmelo. ¿Para quién vas a ponerte guapa, Misty?

MISTY: (molesta) ¡¡LLEVAS TODO EL DÍA INSINUANDO LO MISMO!! ¿ES QUE ACASO NO PUEDO CAMBIAR DE "LOOK"?

VIOLETA: No te enfades. Es que nos sorprende eso de ti...

DAISY: Yo, si quieres, te puedo arreglar un poco el pelo... Siento decírtelo, pero tu peinado es horrible...

MISTY: (sarcasmo) Gracias por ser tan sincera, Daisy...

Lily se marchó a la cama. Siempre era la primera en terminar. Comía poco y no perdía el tiempo hablando. Sin mencionar que la conversación no le gustaba nada, por razones obvias... (para los que no lo vean tan obvio, el hecho de que Misty fuera a ponerse guapa para "supuestamente" gustar a alguien no podría ser de mucho agrado escuchar para alguien cuya cara había sido desfigurada por una horrible cicatriz y que había perdido a la persona que más quería en el mundo).

MISTY: No tenía que haber sacado el tema...

DAISY: Déjala. Es una exagerada... Está preocupada por una estúpida cicatriz que, tal como avanzan los tiempos, podrá ser disimulada fácilmente con una operación. Además, su novio era un cerdo. Es ella la que tiene que cambiar... Cuando vuelva a andar, verá las cosas de otro modo.

MISTY: Eso espero...

VIOLETA: Dejad de hablar tanto. La cena se enfría...

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Era de noche, y la tenue luz de la luna iluminaba débilmente la habitación. Misty, tumbada en la cama, miraba al techo, pensativa. Entre sus manos jugueteaba con la gorra de Ash: la traía tanta paz, y al mismo tiempo tanta tristeza...

MISTY: ¿Y si no lo vuelvo a ver?

Quería quitarse esa idea de la cabeza. Pero no podía. Quería volver a verlo... incluso a Brock, por muy loco que estuviera.

MISTY: Me da lo mismo si él no me quiere tanto como a mí me gustaría. Puede que yo también esté confundida y no sepa lo que siento. Pero me conformo con volver a verle, con verle mejorar, con verle superarse. Me basta con ver como cumple sus sueños... Me basta sólo con eso...

Misty se arropó y se dispuso a dormir. Echó un último vistazo a Togepi, que seguía durmiendo, y cerró los ojos... Se sorprendió a sí misma abrazándose a la gorra... Lo llevaba haciendo todas las noches y hasta hoy no se había dado cuenta.

MISTY: Vaya... ¡cuánto tarda en llegar mañana!

CONTINUARÁ...