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CAPÍTULO 6
AGUA
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MISTY: ¡NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!
HOMBRE: ¿Qué es lo que te pasa? ¡Chica, despierta!
Misty abrió los ojos. Ante ella vio la imagen de un hombre gordo y bigotudo que la miraba con aire de preocupación. A su lado estaba la enfermera Joy.
Misty se pasó instintivamente las manos por el pelo. Lo seguía teniendo tan suave como siempre, como si nada hubiera pasado. Y sus manos ya no estaban quemadas. No había rastro de aquel incendio...
MISTY: ¿Qué es lo que ha pasado?
HOMBRE: Pasaba yo por aquí para hablar con la enfermera Joy y te vi ahí sentada, durmiendo... Y de repente empezaste a dar gritos y pedir socorro... Me temo que sólo has tenido una pesadilla, muchacha...
MISTY: (aliviada) ¿Una... pesadilla? ¿Sólo ha sido una... pesadilla?
JOY: Tranquilízate... Ya ha pasado todo.
Misty intentaba poco a poco calmarse. Notó que entre sus manos seguía agarrando la gorra, y no parecía tener nada raro. Seguía siendo la misma gorra de siempre...
MISTY: **¿Qué me está pasando? ¿Por qué me está pasando esto?**
HOMBRE: ¿Estás ya mejor?
JOY: Con respecto a tu Togepi... sigo sin saber qué le pasa... Tendrás que dejármelo más tiempo... ¿De acuerdo?
Sin pensárselo dos veces, y sin hacer caso a la enfermera Joy, salió corriendo del Centro Pokémon. Allí no iba a encontrar nada...
No muy lejos del Centro había un pequeño parque, gobernado por un estanque que ocupaba gran parte de éste. Muchos niños pequeños, acompañados de sus padres, estaban dando miguitas de pan a los Pokémon de agua que se bañaban en el estanque. Se los veía felices y alegres, sin preocupaciones. Se lo estaban pasando en grande, para la alegría y el disfrute de sus padres...
Misty sonrió débilmente. Al menos el mundo seguía su curso, ofreciendo imágenes de felicidad y cariño... Lástima que la felicidad no se reparta a partes iguales entre todas las personas... Abrió su bolsa y sacó sus cinco Pokéballs...
MISTY: ¡Adelante, Pokéballs!
Y lanzó sus Pokéballs al estanque. Staryu, Corsola, Politoed y Goldeen aparecieron... Misty miró extrañada... ¿no había lanzado cinco Pokéballs?
PSYDUCK: ¿Psyduck? Psy ai ai...
Psyduck se había agarrado con todas sus fuerzas a la pierna de Misty. No le hacía mucha gracia el agua, la verdad...
MISTY: ("goteando") Psyduck, ¿te importaría meterte en el agua?
Psyduck negó con la cabeza.
MISTY: Después de todo este tiempo, Psyduck, debería haberte quedado algo claro... ¡ERES UN POKÉMON DE AGUA! ¡Y A LOS POKÉMON DE AGUA LES GUSTA EL AGUA!
PSYDUCK: (asustado) ¿Psy?
Misty, en uno de sus ataques de furia, agarró al estúpido pato por la cola y lo lanzó al estanque, ante el estupor y asombro de todos los presentes.
NIÑO: Papi, ¿por qué esa chica le hace eso al pobre Psyduck?
NIÑA: ¡Es mala!
MADRE: ¡Esta juventud es una vergüenza!
Misty, viendo la que se le venía encima, tenía que decir algo, aunque sólo le salió una patética excusa...
MISTY: (avergonzada) No es lo que ustedes piensan. Lo que pasa es que a mi Psyduck le gusta que lo lancen de cabeza al agua... ¡Es muy divertido!
PADRE: ¡Vámonos de aquí! ¡Esto no es un buen ejemplo para nuestros hijos!
Tras haber hecho completamente el ridículo, Misty volvió su mirada hacia el estanque...
MISTY: ¿HAS VISTO LO QUE ME HAS OBLIGADO A HACER, PSYDUCK?
Pero Psyduck, en esos momentos, estaba más preocupado luchando por su vida que en hacer caso a Misty. Con una sobrecogedora cara de sufrimiento Psyduck chapoteaba con todas sus fuerzas, intentando mantenerse a flote... La situación sería preocupante si no fuera porque el estanque apenas llegaba al medio metro de profundidad...
MISTY: ("goteando") ¿Por qué seguiré teniendo a este pato inútil? ¡Qué he hecho yo para soportar semejante carga!
Misty hizo volver a Psyduck a su Pokéball, mientras el resto de Pokémon seguía nadando alegremente...
Ajeno a todo aquello, una misteriosa figura observaba a Misty desde la lejanía... Estaba sentado en un banco, con un cuaderno amarillo en una mano y un bolígrafo negro en la otra. Unas gafas oscuras apenas dejaban ver sus ojos... Era él, otra vez...
MAKATRULL: **Ya queda menos, Misty. Ya queda menos... La oscuridad se acerca...**
Sin hacer ningún ruido, se levantó del banco y saltó la valla del parque. Al parecer, nadie lo había visto...
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Eran las dos de la tarde, y había que ir a comer. Había pasado toda la mañana en el parque, aburrida. Hacer estas cosas ya no era divertido sin sus amigos a su lado. Quería que al fin llegaran... Se sentía sola... Muy sola...
Hizo volver a sus Pokémon. El parque ya estaba vacío... y ya no resultaba agradable estar allí.
MISTY: Será mejor que me vaya. Tengo hambre y me siento cansada...
Se levantó y se dirigió a la salida... Al venir había visto un restaurante, así que iría a comer allí...
CONTINUARÁ...
