CAPITULO 6  - LA HUIDA DE DUDLEY

Los siguientes dias fueron bastante aburridos para Harry, despues de un cumpleaños tan animado. Los Dursley seguian furiosos con el, pero no se atrevian a tomar represalias, a parte de ignorar a Harry por completo, pero eso ya era normal viniendo de ellos.

Harry le habia pedido a Hermione que le buscara toda la informacion posible sobre los Anillos de Salomon. Le hubiera venido bien uno de los libros que tenia que tenia que comprar este año: Instrumentos y armas magicos. Manual de defensa y ataque, pero no se le habia presentado ocasion todavia de ir al Callejon Diagon a comprar los utiles para el nuevo curso. Hedwing volvio de casa de Hermione dando tumbos, cargada con dos libros enormes:  "Instrumentos magicos de las Artes Oscuras y como evitarlos" y "Objetos magicos desaparecidos en la ultima centuria". Harry se puso a investigar en la materia. Habia, en efecto, dos anillos anulares de Salomon; para distinguirlos se les llamaba "El diestro" y "El zurdo", y su unica diferencia era que para poder utilizarlos habia que ponerse el anillo en el dedo anular de la mano correcta.  "El diestro", como le habia dicho Carla, habia sido robado por los mortifagos, mientras "El zurdo" habia pertenecido durante trescientos años a una familia galesa de magos, los McKunigan. Segun Objetos magicos, Karl McKunigan, un fabricante de varitas, habia informado de la desaparicion del anillo unos treinta años antes, cuando los oficiales del Ministerio de Magia fueron a hacer una revision anual, pero no pudo decir si lo habia perdido o se lo habian robado, porque hacia ya bastante tiempo que no lo veia. Esto le costo una multa exorbitante, ya que el Ministerio vigila muy de cerca este tipo de objetos, y las familias de magos que los guardan tienen la obligacion de ser muy cuidadosas.

Al parecer la unica manera de rastrear un anillo de Salomon era con el otro anillo. Pero todos los intentos  fueron infructuosos, aunque la familia de magos que guardaba "El diestro" lo presto para la ocasion. Otro detalle muy interesante era que segun Instrumentos magicos de las Artes Oscuras, el poder de los anillos  no era completo, ni fiable al cien por cien. Por lo visto el mago Merlin si que habia conseguido neutralizar el poder de los Anillos de Salomon. Pero su ejemplo habia sido el unico. En Objetos magicos encontro tambien una nota diciendo que habia cierto rumor de que Merlin habia maldecido los anillos, pues casi todas las familias que los habian poseido habian tenido un final tragico o al menos desagradable (tener que pagar 777 galeones de multa, y encima de hace treinta años, era un asunto bastante desagradable, penso Harry).

Harry oyo a su primo que corria delante de la puerta de su habitacion hasta su propio cuarto, encerrandose dentro. El terror de Dudley hacia Harry se habia centuplicado tras la Junta de Comunidades y habia pedido a sus padres que mandaran a Harry a un campamento de verano, a ser posible en la otra punta del globo. Harry sabia que en condiciones normales hubiera tenido hecho el equipaje, con escoba incluida, en menos de una hora. Pero tambien sabia que ahora los Dursey no se atreverian, ya que estaba protegido por el miedo que sus tios le tenian tanto a Sirius como a Carla. Si no fuera por la amenaza de Voldemort, Harry hubiera estado encantado de ir a un campamento de verano, aunque fuera muggle, y librarse de sus parientes lo antes posible. Tras gritar tanto a su padre como a su madre durante una semana, Dudley parecia haberse resignado, pero habia sido el quien habia pedido ir al campamento, a pesar de que Harry sabia que Dudley odiaba ese tipo de sitios como odiaba cualquier lugar donde hubiera que hacer ejercicio fisico y no se pudiera ver la television diez horas al dia. Personalmente Harry pensaba que un campamento de verano le iria de perlas a su primo, ya que le ayudaria a perder algo de peso. Por su parte se pasaba los dias poniendose al dia en los deberes de verano de Hogwarts y esperaba que en algun momento le llegara una carta diciendo que podia irse a casa de Ron.

Tia Petunia subio las escaleras y fue hacia la habitacion de Dudley, a terminar de hacerle el equipaje. Harry se preguntaba que maleta se iba a llevar, pues dudaba mucho que en ninguna cupiera la television y el video juntos. Desde el salon oyo los gritos del tio Vernon, que ya tenia a punto el coche para llevar a Dudley al campamento. En realidad Dudley no se iba muy lejos, seguramente para poderse volver tan pronto como Harry desapareciera de Privet Drive. El campamento estaba a dos horas y media en coche, en medio de un bosque. Dudley y tia Petunia (llorando como si su hijo se fuera a la guerra) pasaron por delante de la puerta de Harry y bajaron las escaleras. Harry no estaba seguro si debia ir a despedirle... pero cuando oyo que Dudley decia: "Llamadme por telefono en cuanto se haya marchado, me llevo el movil", renuncio a la idea. Oyo a Dudley y al tio Vernon irse en el coche, y a la tia Petunia, que seguira llorando a lagrima viva, meterse en la cocina.

Mientras cerraba los libros, Harry se pregunto si la desaparicion de "El zurdo" tambien seria obra de Voldemort. Hacia treinta años Voldemort habia estado viajando alrededor del mundo, aprendiendo lo mas posible de las Artes Oscuras, asi que, penso desalentado, parecia lo mas probable. Ademas, si ya tenia "El zurdo", podia rastrear donde estaba "El diestro", que era el que habian utilizado para el ataque a Privet Drive. En vista de la situacion, Harry tomo la decision de no desprenderse de su varita en ningun momento, ni para ir al baño. Tecnicamente seguia sin poder hacer magia fuera de Hogwarts, pero dadas las circunstancias, no estaba dispuesto a correr riesgos.

Harry habia recibido una carta de Sirius tres dia despues del ataque a Privet Drive. Decia que no andaba muy lejos, aunque no aclaraba donde. Por un momento, Harry habia pensado que a lo mejor estaba en casa de la señora Figg, pero cuando fue a echar un vistazo furtizo vio que no habia ningun rastro de que un perro viviera alli. Ademas, Hedwing no se dirigia hacia alli cuando le mandaba cartas, asi que probablemente su padrino estaria en casa de Lupin o de algun otro del grupo de Dumbledore. El descubrimiento de que su vecina de toda la vida era una bruja habia tenido un efecto curioso en los Dursey. Ya no se fiaban de nadie, hasta el lechero se habia asustado ante la mirada escrutadora del tio Vernon cuando se lo cruzo un dia en la puerta al hacer el reparto. Para ellos cualquier persona era ahora sospechosa de ser un... anormal, por lo que no habia habido mas visita en Privet Drive desde el cumpleaños de Harry.

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Tres dias despues de la partida de Dudley, Harry ya se habia dado cuenta de que la ausencia de su hijo no mejoraba la actitud de sus tios hacia el.  Obviamente la tia Petunia le culpaba de algo parecido a haber condenado a su hijo a un destierro forzoso. Sin Dudley ya no tenia sentido hacer ninguna dieta, ya que Harry era mas bien delgado para su edad, aunque habia pegado un buen estiron durante el ultimo mes, pero tia Petunia seguia preparando comidas dignas del mejor restaurante vegetariano; Harry temia acabar el verano con cara de maiz o de brocoli. Tia Petunia llamaba a Dudley una vez por la mañana y otra por la noche, tras hablar el director del campamento directamente con ella y decirle que no podia llamar cinco veces al dia para ver como estaba su hijo. El tio Vernon le habia preguntado a Harry si no pensaba irse a casa de ese amigo suyo pelirrojo o de su padrino (que al creer que era un asesino le tenian mas o menos en la misma consideracion que a Harry). Harry contesto que estaba esperando que le dieran permiso para hacerlo; intentar explicar la situacion de Voldemort a los Dursey era batalla perdida de antemano.

Una noche, mientras leia en la cama un poco sobre Astronomia, Harry oyo que alguien (o algo) golpeaba en la ventana. Sin mirar siquiera, cogio su varita, pero se tranquilizo y se alegro muchisimo al ver a un... ¿periquito?, que traia en el pico un sobre con una carta. Abrio la ventana. El pajaro entro y volo alegremente por la habitacion, mientras Harry intentaba quitarle el sobre del pico. Le extrañaba que le hubieran mandado una carta con un periquito, el correo normal entre magos era a traves de lechuzas. El periquito parecia un remiendo de muchos colores, desde el plateado al azul oscuro, y no tuvo la mas minima verguenza en ir a picotear el maiz que Harry habia subido para Hedwing de las sobras de la cena de aquel dia. Hedwing se lo consintio, pero le miraba con expresion de superioridad, como si dudara de que un periquito fuera un mensajero capaz.

La carta, con una letra alargada y elegante, decia:

"Querido Harry:

Tengo muy buenas noticias que darte. Lo he estado hablando con Dumbledore y ya puedes irte a casa de tu amigo Ron a pasar el resto de las vacaciones. Yo llegue hace poco del extranjero, asi que podre irte a buscar mañana, sabado, a las once en punto de la mañana, a casa de tus tios en mi coche, y llevarte a casa de tu amigo. Por favor, ten todo tu equipaje listo para cuando yo llegue.

Te tengo preparado un regalo-tardio de cumpleaños, pero ya te lo dare mañana. No te sera muy util en Hogwarts, pero te aseguro que te vas a reir mucho.

Un abrazo

Carla

P.D: Manda respuesta a traves de Atix, por favor"

- ¿Atix? - dijo Harry en voz alta. Miro al periquito - ¿Eres tu? - el periquito revoloteo por la habitacion, dejando un rastro de plumas multicolor - Espera, que escribo la respuesta - cogio una pluma y un trozo de pergamino y escribio rapidamente.

"Hola Carla

Gracias por llevarme. La estare esperando a las once en la puerta de la casa de mis tios. Hasta mañana.

Harry

P.D: Gracias por lo del regalo, pero no tiene que molestaste. Y  por cierto, Atix se ha comido un monton de maiz, espero que no le siente mal"

Cuando Atix salia por la ventana estuvo a punto de chocarse con Pig, la lechuza de Ron, que tambien se puso a dar vueltas por la habitacion, por lo que el suelo de la habitacion de Harry parecia una alfombra hecha de plumas.

La carta de Ron era muy corta y parecia haber sido escrita a toda prisa:

"¡Harry, buenas noticias, puedes venirte este verano!. Carla te trae mañana en coche. No me ha dejado que te lo dijera antes, por lo visto quiere darte una sorpresa. Hasta mañana.

Ron"

¿Otra sorpresa? Pero Harry no quiso ni pensar en ello; al dia siguiente se libraria de los Dursey y eso era todo lo que le importaba. Despues de contestar a Ron, y mandar a Pig con la respuesta (no fue facil, porque la pequeña lechuza parecia muy interesada en las plumas que Atix habia desparramado por todo el suelo), Harry se puso a hacer el equipaje, metiendo todos sus libros y la escoba en su baul. Tras confirmar que no se dejaba nada, volvio a meterse en la cama. Habia pensado en bajar al salon y decirse a sus tios que se iba al dia siguiente, pero decidio dejarlo para el desayuno. Estaba seguro de que tia Petunia insistiria en que el tio Vernon fuera en ese momento a buscar a Dudley. Y - Harry sonrio mientras se iba quedando dormido - no habia la menor duda de que a Dudley le sentaria bien otra noche en el campamento, mucho mejor que cualquier tipo de dieta.

(CONTINUARA....)