CAPITULO 12 - EL ESCONDRIJO DE HOCICOS

El sabado por la mañana Ron se desperto muy temprano (por los suspiros que habia dado, Harry pensaba que mas bien no habia dormido en toda la noche) y, bastante nervioso, metio prisa a Harry para acompañarle a las pruebas para el equipo de Quidditch. Cuando bajaron, era tan temprano que el Gran Comedor estaba casi vacio... excepto por  Hermione, que desayunaba con John Ergan. Ron puso inmediatamente mala cara, pero John les saludo alegremente.

- Hola Harry, Ron - ambos se sentaron. Harry se preparo una tostada, pero era obvio que Ron, quiza por primera vez en su vida, no podia comer nada - Tu tambien te presentas a las pruebas de golpeador, ¿no Ron? - este asintio - Espero que tengamos suerte... el tiempo es bueno, asi que solo tendremos que pelearnos con las blugders.

- ¿Contra quien es el primer partido, Harry? - pregunto Hermione

- Slytherin, a mediados de noviembre - contesto Harry, somñoliento - tengo ganas de enfrentarme con Malfoy... 

- Probablemente cogeras la snitch antes de que Malfoy le de tiempo a subirse a la escoba - dijo Ron, recuperando un poco de su habitual sentido del humor - ese idiota... parece creer que todo en la vida puede comprarse con dinero.

- Todos los Malfoy son iguales - dijo John - Y es mejor no cruzarse demasiado con ellos, creedme

- ¿Conoces a la familia de Malfoy? - preguntaron Harry y Hermione a la vez

- Por desgracia si - suspiro John - su familia es muy antigua, al igual que la mia... y por eso coincidimos en algunas sociedades, y no precisamente por deseo nuestro... mi abuelo trato bastante al abuelo de Malfoy y siempre dijo que esa familia no era de fiar.

- Completamente de acuerdo - dijo Ron, sonriendo, y con aire indeciso, cogio un pastel.

- Sera mejor que nos vayamos ya - dijo John, levantandose. Ron tambien se levanto, con su pastel a la mitad. Harry suspiro, Colin Creevey se les acercaba... y no venia solo. Su hermano pequeño, Dennis Creevey, que empezaba el segundo año, tambien Gryffindor, estaba con el.

- ¡Harry! ¿Vienes a ver las pruebas? ¿Vienes, Harry? - Colin no le dio tiempo a contestar - ¡Mi hermano tambien se va a presentar a las pruebas de buscador suplente, Harry! - "Lo que faltaba", penso Harry

- Err.... hola Colin, hola Dennis. Venga, llegamos tarde - dijo rapidamente a los demas. Todos se dirigieron al campo de Quidditch, donde ya estaban McGonagall, Angelina y la profesora Hooch. La profesora dividio a los candidatos en grupos segun los puestos del equipo de Quidditich: cazadores, guardian, buscador y golpeadores. Empezaron por la prueba de cazadores. Alice tenia razon, la que mejor realizo las pruebas fue Natalie McDonald. Ella, Christopher ("Chris") Manfurd y James Farewell fueron elegidos como cazadores suplentes. Sobre quien seria el guardian la profesora y Angelina estuvieron discutiendo un rato, pero finalmente se decidieron por Brian Mills, un alumno de tercero. Tras elegir al guardian, empezaron las pruebas para buscador. Se presentaron tres alumnos, sin contar a los hermanos Creevey. Afortunadamente para Harry, tanto Colin como su hermano fueron descartados como buscadores... pero McGonagall se fijo en la rapidez de palabra de Colin (sobre todo si estaba Harry cerca), y le pregunto si no le importaria encargarse del magafono magico a partir del año siguiente, como comentarista de los partidos. El actual comentarista, Lee Jordan, amigo de los mellizos Weasley, terminaba ese curso en Hogwarts. Colin se entusiasmo, y Harry le oyo hablar con su hermano sobre comprarse un megafono en Hogsmeade en la proxima excursion... para ir practicando.

Angelina le hizo una seña a Harry, que, sorprendido, se acerco. La nueva capitana queria preguntarle que le habian parecido los candidatos para buscadores suplentes. Harry se alegro de que le preguntaran su opinion, pero no le dio tiempo de darla. Una voz, un tanto timida, pregunto:

- ¿Puedo hacer yo tambien las pruebas, profesora?

Todos se dieron la vuelta para ver a Lyana Nicholls, la amiga de Ginny. Tenia la escoba al hombro, y estaba muy acalorada, como si hubiese llegado corriendo. Su cara, ya habitualmente pecosa, parecia llena de puntos por todas partes.

- ¿Es un poco tarde, no cree, señorita Nicholls? - contesto McGonagall, mirandola frunciendo el ceno

- Lo se... ya lo siento, pero bueno, yo, no sabia que hacer, quiero decir, - Lyana se estaba poniendo cada vez mas roja y evidentemente, no era por la carrera que se acaba de dar. Mas de uno disimulo una carcajada - que aunque me encanta volar, y siempre estoy practicando en verano con mi abuelo, no se si tenia el nivel, pero como... - parecia que se ponia cada vez mas nerviosa - me han dicho que si lo tengo, aunque yo creo que no, pero mi abuelo cree que si, y he ido con el a todos los partidos de los Caerphilly Catapults desde que tengo memoria, pero no sabia que hacer, pero esta manana mi abuelo  me ha mandado una lechuza para decirme que ya estaba bien de incoherencias y ...

- Su abuelo tiene razon, señorita Nicholls - atajo McGonagall, lo que dio a tiempo a Lyana para respirar - Esta bien, preparese, soltamos la snitch - le hizo una seña a Angelina

No habia la menor duda de que Lyana sabia volar... y de que habia practicado antes con la snitch. Su expresion cuando volaba le recordaba a Harry a la suya propia.., parecia como si hubiera nacido en una escoba. La mayor dificultad para los buscadores es tener que manejar la escoba sin manos, y Lyana lo hacia sin ningun esfuerzo. Angelina y McGonagall intercambiaron miradas de entendimiento entre ellas y despues con Harry. Harry asintio y asi Lyana fue elegida buscadora suplente. Harry intento zafarse cuando Colin felicito a Lyana por conseguir el puesto (al estar en el mismo curso, era obvio que se conocian) y de lo mucho que iba a aprender siendo Harry Potter el titular. Harry enrojecio, mientras Ron se reia, y Hermione intentaba disimular una sonrisa que parecia habersele pegado en la cara. Pero Ron no tuvo mucho tiempo para reirse; tras la pruebas para buscador suplente, pasaron a elegir a los golpeadores.

 Ron y John no fueron los unicos que se presentaron a las pruebas de golpeador. En total fueron cinco alumnos y una alumna. Harry le dirigio a Ron una mirada de animo cuando le llego el turno, justo despues de John Ergan, que le deseo buena suerte, pero parecia que Ron se habia quedado temporalmente sordo. Tanto Harry como Hermione cruzaron los dedos, pero la semana de entrenamiento habia dado sus frutos y Ron se batio perfectamente con las bludgers y esta vez no tuvo problemas para frenar cuando se acercaba demasiado a las "porterias".

McGonagall y la profesora Hooch estuvieron discutiendo un rato. Al final McGonagall dijo:

- Muy bien, señor Weasley, ya puede pedirle a sus hermanos que le enseñen lo mas posible sobre bludgers, porque sera usted golpeador el año que viene

- ¡Estupendo profesora! - los ojos de Ron estaban brillantes, mientras Harry le golpeaba afectuosamente el hombro

- ¡Felicidades Ron! - dijo Hermione, sonriendo ampliamente

- Gracias... - contesto Ron, tanto a Harry como Hermione. Parecia exhausto, como si al ser elegido, los nervios que le habian mantenido en estado hiperactivo durante una semana hubieran desaparecido, dejandole como un balon deshinchado.

- ¡Felicidades! - dijo tambien Lyana, con sus ojos violeta brillando. Ron tambien la felicito a ella y Hermione puso una cara muy extraña, como si acabara de darse cuenta de que Lyana tambien estaba alli.

- Y usted sera el otro golpeador, señor Ergan - continuo McGonagall - aunque espero que siga cumpliendo con sus deberes de prefecto - dijo, con cierto tono de sospecha, como si no creyera que John fuera capaz de hacerlo todo a la vez

- No se preocupe profesora - contesto John. Hermione tambien le felicito... y Harry alcanzo a ver la mirada de Ron, que se debatia entre la felicidad y el disgusto. McGonagall despidio a todos, y la nueva capitana anuncio que a partir de la semana siguiente se entrenaria los actuales jugadores tres veces por semana, y los reservas dos. Ron se echo a reir al ver la cara de Harry cuando este oyo que Colin Creevey tambien pretendia practicar... con el megafono durante los entrenamientos.

Tras las pruebas, Harry, Ron y Hermione fueron a darse una vuelta por el lago. El dia seguia siendo muy bueno. Aunque Hermione recordo que tenian que hacer los deberes (sobre todo de Pociones, ya que Snape les habia mandando hacer un trabajo sobre como conseguir una pocion para hablar chino y japones sin mezclarlos), Harry y Ron la convencieron para ir a hacer una visita a Hagrid. Este les recibio muy contento, todavia preparando el suffle, aunque ninguno lo probo; Harry no se atrevio a preguntar si lo habia tenido toda la semana en el fuego.

- He estado viendo las pruebas desde mi cabaña, Ron, ¿que tal han ido? - Ron sonrio y le conto que le habian elegido golpeador suplente. Hermione le recordo que John Ergan tambien habia sido seleccionado... lo que fastidio bastante a Ron, porque Hagrid tambien conocia a la familia Ergan ("¿Hay alguien que no les conozca?", le susurro a Harry).  Hagrid pregunto por las otras nuevas adquisiciones del equipo de Quidditch de Gryffindor, y parecio alegrarse cuando Harry le dijo que Lyana era la buscadora suplente.

- Tienes que enseñarla bien, Harry - dijo Hagrid - esa chica se lo merece... estudie con su abuelo, es una de las mejores personas que he conocido.

- ¿Conoces a la familia de Lyana? - preguntaron Ron y Hermione a la vez... con distintos tonos de voz,  por lo que noto Harry

- Si, su abuelo materno y yo nos hicimos bastante amigos en Hogwarts, aunque era un par de años mayor - dijo Hagrid, mientras preparaba unas tazas de te, con aire reminiscente - Le encantaba trajinar con cacharros magicos e inventar hechizos para encantar cosas... sabia que llegaria lejos como inventor.

- Creia que el padre de Lyana era muggle - dijo Harry, casi quemandose al intentar tomar su taza de te.

- Si, su padre es muggle, creo que es cantante o algo parecido, me lo dijo en una ocasion - contesto Hagrid - pero todos en su familia materna son magos, aunque al unico que trate fue a su abuelo.

Harry, Ron y Hermione se pasaron el resto de la mañana con Hagrid. Hermione, que parecia dejar el tema del nuevo equipo de Quidditch, o quizas mas bien el de Lyana, pregunto que hacian los botes de colores en el lago, que Harry recordaba haber visto en su primera clase. Hagrid les explico que los habia preparado para cuando estudiaran las criaturas acuaticas ("¡oh, no!", se le escapo a Harry), ya que pocos animales vivian en las orillas y tendrian que adentrarse bastante en el lago. Harry se hizo la nota mental de intentar agenciarse un bañador en cuanto le fuera posible... tenia el presentimiento de que iba a necesitarlo.

                                                                                *              *              *

El domingo Harry se levanto tarde, tras el madrugon del sabado. Todos habian bajado a desayunar y Harry disfruto de tener la habitacion para el solo. Se levanto y fue a la ventana. Hacia muy buen dia, parecia que el verano se resisitia a irse. Harry se puso las gafas y contemplo el paisaje desde la ventana de la habitacion... el lago brillaba con un azul tan profundo, que casi hacia daño a la vista

Harry se volvio a tumbar en la cama, boca arriba, pensando. Habia algo que le inquietaba y no sabia lo que era... Esa noche habia estado soñando... no con pesadillas, pero habia sido un sueño muy extraño. El entraba en el Gran Comedor, donde por cierto las mesas estaban colocadas en el techo y todos estaban comiendo boca abajo. Pero, como suele ser tipico en los sueños, nadie parecia preocuparse por tener que comer en esa postura tan incomoda, nadie excepto el propio Harry, que no conseguia mantener el equilibrio. Cuando ya renunciaba a comer oia ladridos fuera, y al salir vio a Hocicos, al que regaño por no haberle escrito... y en ese momento vio a Snape. La expresion de Snape al ver a Sirius fue de profundo odio (Harry estaba seguro que entre lo que habia soñado y la verdadera expresion de Snape al ver a Sirius no habria gran diferencia) y le preguntaba a Harry: "¿Que hace este perro aqui?", ya que Snape sabia perfectamente que Sirius era el animago. Harry queria llevarse a Hocicos con el, pero en ese momento Snape sacaba su varita y transformaba a Sirius en un secador de pelo... con el que apunto a Harry como si fuera a dispararle, mientras se reia. Harry se habia despertado en ese instante, todavia con los ecos de las  risas de Snape en su cabeza.

Echado en la cama, estuvo reflexionando que era lo que le preocupaba. Sirius no habia contestado la carta que le habia mandado hacia casi una semana, el dia que empezaron el curso... y se suponia que Sirius estaba en Hogwarts, por lo que no habia motivo para que la contestacion se retrasase. ¿Donde se habria escondido? Hedwing habia aparecido ocasionalmente en los desayunos, pero solo para picotear trozos de galletas. Como siempre que Sirius tardaba en contestarle, le preocupaba que le hubieran cogido y se lo hubieran llevado de vuelta a Azkaban, pero Hermione seguia recibiendo "El Profeta" todas las mañanas (se habia subscrito el año anterior) y el Ministerio de Magia estaba deseando probar que hacia algo bien; dificilmente ocultarian la captura de uno de los delincuentes mas famosos del mundo magico.

Harry bajo a desayunar. Al entrar en el Gran Comedor no pudo evitar mirar hacia arriba, como para asegurarse que no habia nada colgado. El techo estaba encantado para que pareciera que no existiera techo, asi que se veia un cielo cristalino y varios pajaros volando. En ese momento entraron varias lechuzas, que llevaban cartas y paquetes para los alumnos. Ron estaba sin duda en la mitad de su tercer desayuno, y saludo a Harry con la boca llena de algo que parecia un pastel de chocolate.

- Buenos dias, Harry - dijo Hermione, sonriendo, por encima del libro que estaba leyendo - parece que se te han pegado las sabanas esta mañana.

- He tenido un sueño de lo mas extraño - dijo Harry, mientras se sentaba. Tanto Hermione, que estuvo a punto de romper la pagina que estaba pasando en ese momento, como Ron, que se atranganto con el pastel, le dirigieron miradas asustadas - Tranquilos, no era nada malo.. lo que pasa es que era completamente loco. Estabamos comiendo, aqui, en el Gran Comedor... pero colgados del techo...

- Un poco incomodo, ¿no te parece? - sonrio Hermione - He estado recopilando todo lo que he encontrado sobre Avalon - continuo, sacando unos cuantos pergaminos - y esta es toda la informacion fiable que tenemos.

- ¿Que habeis encontrado?  - pregunto Ron, tras terminar de tragar el pastel - Aunque me parece que lo tenemos dificil... muchos magos han buscado Avalon sin resultado

- Tambien he mirado libros muggles - dijo Hermione, mirando a Ron con severidad - Nunca sabes por donde puedes encontrar algo. Por lo que se dice, Avalon es una de las islas de Devon... pero me parece que son fantasias muggles. Por lo que hemos podido sacar de la biblioteca, Avalon no tiene una localizacion exacta

- ¿Una isla errante, entonces? - dijo Ron, sonriendo. Harry tambien sonrio

- En cierta manera - contesto Hermione, con la vista fijada en los pergaminos - En realidad Avalon esta en otro plano de existencia, es decir, no tiene un lugar fisico tal y como nosotros lo entendemos.

- Entonces, ¿como es que existe un mapa? - pregunto Harry

- Eso no esta claro - contesto Hermione, frunciendo el ceño - El mapa del que nos hablo Hocicos no debe ser tal cosa, sino una especie de lista de instrucciones que hace falta para conseguir llegar a la dimension en la que esta Avalon

- ¿Instrucciones? - pregunto Ron - ¿Algo asi como un hechizo?

- Es un buen ejemplo - dijo Hermione - Lo que esta claro es que cuando Merlin creo Avalon para el rey Arturo, se aseguro de que no cualquiera pudiera entrar en el reino. Debio de crear el mapa o el conjuro y dividirlo en varias partes... Mirad - les paso uno de los pergaminos, que estaba como plastificado - Es un poema que escribio un mago llamado Jonathan Roberts, que vivio hace unos setecientos años - Les señalo la parte de abajo del texto en la que se veia escrito, con caligrafia muy antigua: "J.S.Roberts". Hermione les recito en voz alta:

"El reino donde no hay sombras,

las puertas de los cuatro guardianes fieles,

de los cinco de la Placa de Galaida

Avalon, Avalon, Avalon

morada y tumba

bajo tu playa descansan solo quienes lo merecieron,

Avalon, Avalon, Avalon

nunca podre atravesar tus puertas

pero tu nunca escaparas de mi memoria"

- ¿No veis nada raro aqui? - Ron y Harry miraban a Hermione con asombro, con la expresion de: "no entiendo nada" - Roberts habla todo el rato de las puertas, pero no dice que llegara adentro. Parece como si no fuera muy dificil llegar a las puertas, pero lo que es casi imposible es adentrarse. Fijaos lo que dice al final del todo: "nunca podre atravesar tus puertas". Y lo que es mas extraño...

- ¿No te precipitas un poco con tus conclusiones, Hermione? - dijo Ron - ¿Como sabemos que en realidad Roberts estuvo en Avalon? A lo mejor se invento todo esto.

- Es una posibilidad - acepto Hermione, levantando la vista para mirar a Harry y Ron - pero me he estado informando sobre el tal Roberts. Por lo visto fue profesor aqui, en Hogwarts, ademas de jefe de la casa Ravenclaw. Siempre estuvo muy interesado en la leyenda de Avalon, y dedico casi toda su vida a buscarlo - Ron y Harry se miraron asustados, como si temieran que Hermione les obligara a hacer otro tanto - Es una pena que no hubiera mas escritos suyos - murmuro Hermione -  el por lo menos llego a las costas de Avalon, aunque nunca entro en el reino.

- ¿Que quiere decir con lo de "morada y tumba, bajo tu playa descansan solo quienes lo merecieron"? - pregunto Harry - por lo que miramos sobre Avalon, mientras estes en la isla eres inmortal, es decir, que no envejeces ni puedes morir... es uno de los pocos detalles que coincidian

- Es lo que mas me extraño de todo - admitio Hermione - pero creo que ya lo he comprendido. Roberts habla de "la playa", es decir, en la playa o en las costas de la isla, pero no dentro del reino de Avalon. Solo debes de ser inmortal una vez que atraviesas las puertas del reino de Avalon... las costas deben ser una especie de tierra de nadie....

- Como un vacio legal magico o algo asi - sonrio Ron

- Sobre lo de "solo descansan quienes lo merecieron" podemos ver que algunas personas han llegado a la isla - continuo Hermione - es decir, que encontrar la isla es relativamente facil... lo que nadie ha conseguido jamas es adentrarse en el reino. En varios libros he visto que algunos consideraban que enterrar a sus seres queridos en las playas de Avalon era una señal de respeto, como si de esa manera pasaran a ser parte de la magia de la isla

- ¿Asi que el reino de Avalon esta rodeado por un cementerio? - pregunto Ron con incredulidad

- ¡No seas burro Ron! - Hermione parecio enfadarse - Tampoco han sido tantas personas las que han encontrado la isla... ni todas las que lo conseguian enterraban alli a sus muertos. Si Roberts lo menciona, es que seguramente el si que lo hizo... pero no debe de haber mas de media docena de tumbas, como mucho.

- Por lo menos esta claro por que Voldemort busca Avalon.. siempre le ha interesado la inmortalidad. - dijo Harry, pensativo - ¿A que se referira con  "Las puertas de los cuatro guardianes"? ¿Y que es eso de  "los cinco de la Placa de Galaida"?

- Eso es lo que me convencio de que el poema es veridico - dijo Hermione, que parecia querer llenar la mesa con papeles - el unico otro lugar donde se habla de guardianes es en uno de los libros muggles - Lo saco y abrio - Mirad, aqui dice que Avalon tenia cinco guardianes... que creo que es a lo que se refiere con lo de "los cinco de la Placa de Galaida"...  pero que uno desobedecio

- ¿Desobecedio? - preguntaron Harry y Ron a la vez

- Es decir, que se marcho hace mas de mil años de Avalon  y nunca volvio - dijo Hermione - asi que quedaron "cuatro guardianes fieles"... que es lo que dice Roberts en su poema. Fijaos, esto es muy interesante... Roberts vivio hace setecientos años, y ya dice que faltaba uno de los guardianes. Este libro muggle no tiene mas de cien años y dice lo mismo... y de esto se deduce algo casi increible - Hermione hizo una pausa dramatica - que no solo magos han llegado a Avalon... parece que tambien ha sido visitado por muggles.... - Harry y Ron la miraron con incredulidad - En cuanto a la Placa de Galaida, debe ser lo que estamos buscando... es decir, el Mapa de Avalon. Los guardianes de las puertas debian estar encargados de custodiarlo o algo asi...

- ¿Y quienes eran los guardianes? - pregunto Ron

- Ni idea... ninguno los menciona. Seguramente criaturas que los magos suelen utilizar para guardar tesoros, como acromantulas - Ron se encogio visiblemente - o tal vez sphinxes, o tambien puede ser que Merlin creara alguna criatura nueva

- ¿Has encontrado algun dibujo de Avalon? - pregunto Harry

- Nada - suspiro Hermione, dejando todos los papeles - Y es una pena, porque podria haber alguna pista de cual es el conjuro que hace falta para llegar hasta alli... - en ese momento se callo, porque se oyo ruidos en la parte de fuera del Gran Comedor. Harry se quedo petrificado al notar que los sonidos eran ladridos. Se levanto de un salto y corrio hacia la salida, seguido de cerca por Ron y Hermione, que recogio apresuradamente todos sus pergaminos antes de seguir a Harry.

Alli, como en el sueño de Harry, estaba Hocicos, que saltaba alegremente de un lado a otro y que se lanzo contra Harry, tirandole al suelo, en lo que parecia un abrazo amistoso. Harry consiguio levantarse y riendo, empezo a acariciar las orejas del perro, que le miraba con la lengua fuera, como si hubiese estado corriendo. Harry susurro a Hocicos como es que no le habia escrito, pero se quedo asombrado cuando otra persona se acerco... nada mas y nada menos que Severus Snape. La expresion del profesor de Pociones se contorsiono en una mueca de rabia al ver a Sirius, de forma que Harry tuvo una increible sensacion de deja-vu, como si esta situacion ya la hubiera vivido.

- ¿Que hace este perro aqui, Potter? - Snape dirigio una mirada asesina tanto a Harry como a Hocicos, el cual le enseño los dientes. Harry abrio la boca para decir algo... pero Snape no le dio tiempo para hablar. Aprovechando que ninguno de los alumnos que habia salido al oir el jaleo se atrevia a aproximarse, probablemente debido al tamaño del perro, o mas probablemente, a la expresion de ira de Snape, el profesor de Pociones se acerco a Sirius, que saco todavia mas los dientes - Quitate de mi vista, Black, o te aseguro que... - Harry estaba seguro de que Snape iba a sacar su varita y transformar a Sirius en un secador de pelo, pero no le dio tiempo a terminar su amenaza. Una voz sin aliento le interrumpio.

- ¡Uffff!! ¡Llegue! Gracias Severius, ya no sabia por donde se habia escapado - Carla se habia acercado a toda velocidad. Parecia que habia corrido bastante rato, ya que estaba acalorada y su larga trenza estaba despeinada. Tenia una correa en la mano, que en esos momentos ponia alrededor del cuello de Hocicos. Harry, Ron y Hermione se la quedaron mirando con la boca abierta. La profesora McGonagall salio en ese momento del Gran Comedor y le dirigio a Carla una mirada ceñuda

- Profesora Dumbledore, le he dicho muchas veces que... - empezo McGonagall

- Lo siento, profesora, ya lo se - dijo Carla, quitandose con la manga de la tunica el sudor de la frente - "Correr por los pasillos no es digno para una profesora de Hogwarts" - recito, a la vez que hacia un guiño a Harry - pero mi perro se habia escapado y...

- Deberia vigilarlo mas... y recordar que tiene que dar ejemplo a sus alumnos - dijo McGonagall, mirando severamente a Carla, y tambien a Harry, Ron y Hermione, antes de marcharse.

- ¿Os gusta mi perro, chicos? - pregunto Carla con una sonrisa - Parece que le habeis caido bien - Hocicos estaba en ese momento dandole golpes amistosos a Harry en un brazo. Harry volvio a la realidad y le acaricio detras de las orejas, lo cual el perro agradecio con un par de lametones.

- ¿Este perro es tuyo Carla? - pregunto Snape, mirando con odio al animal. Sirius parecio notarlo y le devolvio la mirada, ademas de ladrarle amenazadoramente

- Si, me lo regalo el tio Albus el dia que empezamos el curso, sabe que me encantan los animales. Es un buen perro, pero me ha tenido una semana en vela con sus aullidos. Venga, Padfoof, tranquilo - se volvio a Snape - parece que no le has caido muy bien, Severus...

- ¿Hay alguien al que le caiga bien? - murmuro Ron. Afortunadamente para el, todo el interes de Snape estaba centrado en Sirius y no le oyo

- ¿Como le ha llamado? - pregunto Hermione

- El director me dijo que se llamaba Padfoot, no me pregunteis por que... - la cara de Snape se contrajo, como si ese nombre le trajera algun recuerdo muy desagradable. Carla empezo a tirar de la correa y Hocicos no tuvo mas remedio que irse con ella - Voy a tener que ponerle un hechizo a mi despacho, se me escapa cada dos por tres.

- Seria mejor que le pusieras un hechizo al perro - dijo Snape, sonriendo maliciosamente. Carla tambien sonrio, aunque Harry estaba seguro de que Snape no lo habia dicho en broma.  Harry se despidio con la mano de su padrino, y se marcho con Ron y Hermione rapidamente hacia su sala comun; la expresion de  Snape se habia vuelto a convertir en una mueca de rabia mientras veia alejarse a Carla con Sirius, y de seguro empezaria a buscar motivos para quitar puntos a Gryffindor.

- Al menos ya sabemos donde esta Hocicos - dijo Harry, cuando llegaron a la sala comun, en la que no habia nadie en esos momentos, y se desplomaron en uno de los sofas - La verdad es que he pasado miedo.. por un momento pense que Snape iba a maldecirle- y les conto el sueño que habia tenido durante la noche. Ron y Hermione se quedaron con la boca abierta

- Tal vez tu si que tengas el verdadero "ojo" para ver el futuro, Harry - dijo Ron, intentando dar tono de broma a sus palabras - Deberias pedir el puesto de la profesora Trelawey

- Ha sido una idea ingeniosa de Dumbledore - comento Hermione. Su gato, Crookshanks, se habia subido a su regazo y ella le acaricio el lomo distraidamente -  Me refiero, a "regalarle" el perro a su sobrina... asi nadie puede sospechar de quien es verdaderamente, ya que ni siquiera Carla lo sabe

- Es raro que Dumbledore no se lo haya contado a Carla, despues de todo, parece que confia en ella - dijo Ron

- Supongo que es como medida de seguridad - Harry se encogio de hombros - Ya esta claro por que Hocicos no puedo contestar a la carta que le mande

- Tendriamos que contarle a Hocicos todo lo de Avalon - comento Ron - lo que pasa es que va a ser dificil encontrarle sin que Carla se entere

Harry, Ron y Hermione siguieron discutiendo un rato sobre como comunicarse con Sirius sin que la profesora de Defensa contra las Artes Oscuras se diera cuenta. El resto del domingo paso agradablemente Despues de cenar se pusieron a jugar al ajedrez magico. Ron gano tres partidas seguidas contra Harry y otras tres contra Hermione. Esto no puso de buen humor a Hermione, que recordo a Ron que tenia que terminar el trabajo sobre los Shestein para Hagrid... y a Harry que se pusiera a hacer el trabajo para Snape. Los dos rezongaron bastante, pero se pusieron manos a la obra. Hermione (que ya habia terminado los trabajos) se marcho para cumplir con alguna de sus tareas de prefecta. Ron termino con los Shestein y, como tanto Harry y el coincidieron que no les apetecia nada ponerse con Pociones, decidieron terminar el trabajo que les habia mandado la profesora Trelawey sobre las cartas mas peligrosas de la baraja.

La sala comun estaba bastante llena para entonces. Los gemelos Weasley estaba al lado de la chimenea, sentados uno enfrente del otro, haciendo señales con unos espejos circulares que soltaban chispas si alguien los tocaba. Neville se pego el susto del siglo cuando Fred (con un tono de voz casual) le pidio que le sujetara el espejo un momento... y de el salio una cara fantasmal que le grito: "¿Te ves guapo?".  Lee Jordan estaba haciendo experimentos con plumas de colores, y Harry vio como Ginny y Lyana, que estaban estudiando juntas en una mesa cercana, se reian y se pasaban notitas entre ellas. Harry intento concentrarse en su trabajo, pero el ambiente en la sala comun era tan alegre y relajado, que no estaba de humor para pensar en multiples desgracias.

- Ron, Harry, ¿os podemos hacer una pregunta? - tanto Harry como Ron se sobresaltaron. Era Lyana, que junto con Ginny, se habia levantado de su mesa y se habia acercado, con un monton de pergaminos en la mano.

- Hemos visto que estabais con Adivinacion - dijo Ginny, enrojeciendo un poco - y como Lyana y  yo tambien tenemos deberes de esa asignatura, queremos saber si nos podeis echar una mano.

- Ehhh, claro, por que no - dijo Harry. Estaban sentados en una mesa de seis, pero habia llenado las sillas con varias barajas y apuntes que necesitaba para Adivinacion - Esperad que os hago sitio - dijo, pero Lyana cogio rapidamente el sitio mas cercano a Ron, y sacando una tabla circular le empezo a hacer preguntas.

- De todas maneras, si quereis ayuda, podeis preguntarle a Hermione - dijo Ron, analizando el pergamino de Lyana - Ya sabeis que es la alumna mas aplicada... nuestros sistemas de Adivinacion no son muy... ortodoxos - dijo, con un guiño a Harry, que sonrio

- Ella dejo Adivinacion - dijo Lyana... su tono de voz, aunque era ligerisimamente despectivo, no se le paso a Harry desapercibido - por eso os preguntamos a vosotros.

Ron, que parecia halagado que alguien considerada que supiera mas que Hermione en algo, empezo a explicarle a Lyana como le gustaba a la profesora Trelawey que se hicieran sus deberes. Ginny no parecia necesitar mucha ayuda. En realidad, mas bien le ayudo ella a hacer los deberes a Harry; se sabia las cartas y sus significados de memoria. Harry no pudo evitar notar que Lyana no apartaba sus ojos violeta de Ron... pero no fue el unico que se dio cuenta. Hermione acababa de llegar, y miraba la escena con una expresion ciertamente similar a la de Snape al ver a Sirius. Rapidamente le pregunto a John Ergan (que venia detras de ella) si podia quedarse estudiando con ellos, asi que los dos prefectos de Gryffindor tambien se sentaron a la mesa. A Harry le costo mantenerse serio cuando vio que Hermione le hacia preguntas a John, cada vez de un tema distinto, y sin parase a oir la contestacion, mientras Ron seguia explicandole cosas a Lyana, mirando a Hermione y John por el rabillo del ojo. Hermione le echo un vistazo a los deberes de Ron:

- Ron esto no esta bien - dijo Hermione, interrumpiendo la discusion entre el susodicho y Lyana sobre que era peor, si las bolas de cristal o leer las manos - los Shesteins no eran crueles... de hecho eran conocidos por ser criaturas que conseguian sacar lo bueno que hubiera en las personas.

- ¿Y si las personas no tenian nada bueno? - pregunto Lyana, sin mirar a Hermione.

- ¿Es eso posible? - interrumpio John, que parecia muy interesado en la conversacion - A mi me parece casi imposible que un ser humano sea pura maldad... al igual que es imposible que un ser sea puramente bueno.

- Se necesita el mal para poder apreciar el bien - comento Ginny, que habia acabado con Adivinacion y empezado con Transformaciones.

- Yo creo que si que hay seres que son pura maldad - insistio Lyana, fijando sus ojos en Hermione.

- Claro, las criaturas de las tinieblas, como los dementores, o los nundus... - tercio Harry, que queria quitar un poco de peso a la conversacion.

- No, me refiero a seres humanos - contesto Lyana, mirando a Harry y a Ron.

- Siempre hay algo bueno en todas las persona - dijo Hermione - La cuestion es encontrarlo.

- No estoy de acuerdo - contesto Lyana, con voz bastante gelida. Harry y Ron cruzaron miradas como diciendo: "La que se puede venir encima"- Hay personas que son malas por naturaleza... afortunadamente pocas, pero las hay. El ejemplo mas claro no hace falta ni nombrarlo - dijo, y fijo sus ojos con dureza en Hermione

Hermione parecia haberse quedado sin palabras. Todos sabian que Lyana se referia a alguien cuyo nombre la mayoria no se atrevia a mencionar: Voldemort, y Harry se dio cuenta de que, en efecto, todo en Voldemort era pura maldad. Harry se quedo pensando, por primera vez, si Voldemort habia querido a alguien en algun momento, si, antes de corromperse por completo, hubiera hecho algo bueno en su vida. Pero su madre, bruja, habia muerto al darle a luz, y su padre, muggle, le habia abandonado... lo que provoco que Voldemort creciera en un orfanato muggle hasta que fue a Hogwarts. Esto, junto con el abandono de su padre, le provoco un odio terrible contra los muggles, y contra los magos hijos de muggles (llamados de forma muy insultante sangre sucia), aunque el mismo fuese uno de ellos. Voldemort habia cometido su primer crimen a los dieciseis años... y los padres de Harry no habian sido sus unicas victimas; muchos habian perecido antes que ellos. Si, Lyana tenia razon, parecia imposible que en Voldemort hubiera nada bueno...  pero ¿lo habia habido en algun momento? Harry, sintio de repente algo muy extraño, algo que jamas, ni en sus suenos mas locos, hubiera pensado posible sentir acerca de Voldemort: compasion. ¿Como podia sentir compasion de alguien que le dejo huerfano y en las manos de los insensibles Durseys? ¿Compasion por alguien que habia asesinado tantas veces y que le habia intentado matar y habia fallado ya en cuatro ocasiones? Era absurdo, ridiculo... pero Harry no pudo evitar que esa nueva sensacion se extendiera, sobreponiendose al miedo y a la desesperacion. Harry sintio compasion por alguien que nunca habia tenido nada y que habia dejado que su alma se pudriera por completo. El, aunque no tenia familia, si que tenia a sus amigos y a Sirius... Voldemort no habia tenido a nadie, y, Harry se dio cuenta por primera vez, Voldemort habia estado tan cegado por su sed de venganza contra los muggles, que habia perdido todas las oportunidades de tener a nadie.

Harry intento poner en palabras lo que transcurria por su cabeza, pero se dio cuenta a tiempo que nadie lo comprenderia. Todos habian vuelto a sus ejercicios y Harry, que se estaba acariciando distraidamente la cicatriz, sin darse cuenta de lo que hacia, hizo lo mismo, aunque no pudo concentrarse en las cartas, y distraido, empezo a ayudar a Ginny con sus ejercicios de Transformaciones. Cuando, una hora despues, todos se marcharon a dormir, todavia meditaba esa nueva sensacion. Le gustaria poder contarsela a alguien, pero sabia que el unico que podria comprenderlo era Dumbledore, y Harry no queria molestar al director de Hogwarts por tan poca cosa. Mientras miraba desde la ventana de su habitacion el lago de Hogwarts, iluminado por la luna, Harry se dio cuenta de que probable e ironicamente pocas cosas pondrian mas furioso a Voldemort que el saber que su peor enemigo estaba sintiendo compasion por el en esos momentos.

- (CONTINUARA...)