¡Hola!
Bueno como siempre pongo mis notas al final, pero
antes quiero advertir algo: En ese capitulo hay unos pequeños
spoilers de la serie, aunque muy pequeños, tenia que advertir
primero o si no luego me matan.
Aparte lo de de siempre: Inu
Yasha no es mió, es de Rumiko - sensei, y ya mejor sigo el fic
y hablo
luego
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Sesshômaru
caminaba hacia la persona que había echo la kekkai, ya era muy
tarde y aunque el acostumbrarse a alejarse de su sirviente por
bastante tiempo sin importarle, mientras el estuviera con Rin lo
mejor seria llegar rápido antes de que algo pasara como la
ultima vez.
Era increíble que un frió Youkai como el
se preocupara por una débil niña humana, y aunque no
decía nada su casería tras Naraku era mas por que este
había intentado matar a Rin, que por (como había sido
al comienzo) lo hubiera intentado utilizar para sus propósitos.
El youkai estaba seguro de que la persona que buscaba estaba
cerca; una flecha rozo su mejilla dejándole una pequeña
cicatriz a la cual el no le presto mucha importancia, a juzgar por la
velocidad de la flecha había sido lanzada desde muy cerca,
este alzo la mirada hacia un árbol mas o menos cercano y vio a
la sacerdotisa mientras esta disparaba otra flecha hacia el.
Este
indiferente la tomo entre sus dedos y la destruyo de la misma forma
que lo había echo hacia ya bastante con un ataque parecido de
la compañera de Inuyasha.
-No entiendo porque mi Hama
no ya(1) no funciona en ti, pero de igual forma no me interesa -
Kikyo sonrió tranquilamente mientras bajaba un poco su arco
sabiendo que cualquier flecha dirigida hacia el youkai seria
inútil.
-¿Porque? - fue lo único que dijo
el Youkai mirando fríamente a la Miko, la cual parecía
confundida.
-¿Porque? - repitió Sesshômaru
- ¿porque intervino cuando yo iba a destruir a Naraku
?
-Jajajajaja - la risa de Kikyo se escucho claramente - yo
seré la única que destruya a Naraku, pero cuando este
sea un Youkai y tenga todo su poder.
El Youkai que estaba
frente a ella la miro mas fríamente que antes, la miko pensó
que este se iba a ir, alisto una de sus flechas y la disparo lo mas
rápido que pudo.
Sesshômaru se dio cuenta de
inmediato y saco su Tenseiga con la cual detuvo de inmediato el
ataque y destruyo la flecha, luego corrió hacia la Miko, la
cual había bajado del árbol de inmediato con la ayuda
de sus Shinidama chu, este pensaba atacarla con su Tenseiga, el sabia
que ella solo se mantenía por la almas que recolectaba, era
como un cadáver, algo parecido a lo que hacia aquel gato
youkai; pero esta vez era distinto, la tenseiga no le había
pedido que la usase, tal vez. ...
-Un cadáver... -
murmuro Sesshômaru sacando su otra espada, la toukijin, y
atacando inmediatamente el "cadáver" y haciéndole
una gran herida en su hombro.
Pasaron unos segundos, los
youkais blancos estaban alrededor de Kikyo, algunos desaparecieron y
la herida de esta había desaparecido también.
-Ja,
nadie me podrá matar hasta que cumpla con mi destino - dijo
esta disparando otra de sus flechas, dirigiéndola a la espada,
la cual estaba llena de maldad y si le afectaría la
flecha.
Sesshômaru no pudo reaccionar, la flecha que
había rozado la espada y ahora se dirigía a el, le
estaba haciendo un gran daño.
La tenseiga, tal como cuando
luchaba con Inuyasha, palpito y la flecha desapareció, de
igual forma esta ya le había echo una herida de considerable
cuidado en su pecho.
-Sesshômaru - la voz de Kikyo se
escucho nuevamente mientras esta se iba con sus pequeños
youkais - recuerda que a Naraku lo matare yo, y me seguiré
divirtiendo si llegan de nuevo a el.
Esta cada vez se alejaba
mas y mas, la mirada del youkai permanecía impasible; no había
podido matar a esa mujer, pero ella si le había causado un
gran daño a el.
¿Una humana que me ha causado
daño? Se pregunto a si mismo mientras se iba del lugar sin
ninguna prisa. No, no es una humana es un simple cadáver, si
hubiese usado la Tenseiga tal vez si se le podría considerar
como tal
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Kagome
despertó en un hermoso prado, el olor a cierta hierba que
Kaede-bachan le había mostrado hacia algún tiempo
inundo su nariz.
Según Kaede bachan esta hierba era muy
buena para curar cualquier tipo de veneno no muy fuerte, esa planta
tenia un olor peculiar que hacia que fuera fácil de encontrar,
incluso de noche.
-¿Como es que se llamaba...? -
murmuro en voz baja sin aun levantarse.
-¿Kagome-oneesan
ya te levantaste? - la suave voz de quien bahía cuidado hablo
apenas escucho el leve murmullo.
-Si, gracias por todo, pero
dime algo.... ¿Como me trajiste hasta este lugar? ¿Fuiste
tu quien me cuido? - pregunto Kagome mientras miraba a la linda niña
frente a ella.
-Si, Rin te cuido, Jaken sama me dijo que esa
planta serviría contra el veneno, y Ah-un ayudo a Rin a
traerla.
Kagome miro sorprendida a la pequeña niña.
Siendo tan joven y parecía ser la niña mas segura de si
misma en todo el mundo, la pequeña ya se había puesto
el kimono que ella le había dado, se veía
encantadora.
-¿Rin...chan? - una pequeña duda
acababa de nacer en ella.
-¿Si Kagome-oneesan? -
contesto la pequeña al momento
-¿Donde están
los demás? - A Kagome le era imposible creer que dejaran a una
niña indefensa sola
-Sesshômaru sama no a llegado
desde anoche, Jaken sama fue a buscar algo de comer, Ah-un esta aquí
- la niña sonrió al mirar al caballo de dos cabezas que
la cuidaba cuando no estaban los demás.
-¡RIN! -
Antes de que Kagome pudiera decir algo más llego un pequeño
youkai de color verde, en sus manos llevaba unos pescados.
-Arigatto
Jaken sama - la niña se levanto de inmediato y fue a tomar el
pescado para luego hacer una pequeña hoguera y comenzar a
cocinarlo.
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Kikyo se dirigía con sus shinidama chu a cualquier lugar,
no le interesaba, en realidad quería averiguar el porque a un
youkai como Sesshômaru no le había afectado su
flecha.
Al fin de cuentas era un ser lleno de maldad,
¿no?
Mientras seguía pensando en ese extraño
suceso vio algo abajo, alguien de ropas rojas y hermosa cabellara
plateada, era Inuyasha sin duda alguna.
Kikyo bajo y se paro
justo al frente de este, espiando algún gesto de sorpresa y
alegría de el.
-Ki... kikyo... - murmuro Inuyasha al
verla
-Que pasa Inuyasha ¿no te alegras de verme? -
dijo esta sonriéndole de un forma fría.
-Kikyo...
- el silencio se prolongo un poco mas, hasta que el Hanyo decidió
por fin preguntar lo que tanto temía - ¿que le hiciste
a Kagome?
La sorpresa de la Miko fue grande, esta no se había
encontrado con Inuyasha desde aquel hechizo y este no la había
visto, era extraño una pregunta así de parte de
el.
-No te entiendo ¿a que te refieres Inuyasha? -
pregunto esta calmada
-No me refiero al hechizo, si es lo que
estas pensando, eso ya paso, me refiero ahora, sentí el aroma
de Kagome cerca de a.C., pero te encuentro es a ti ¿¡QUE
LE HICISTE!? - Inuyasha había perdido la paciencia,
acercándose a la miko la tomo de los hombros y la
sacudió.
-Yo no se nada de ese estorbo - respondió
esta intentando soltarse de las garras de este - ni me interesa
-
Kikyo, quisiera creerte- Inuyasha se acerco a ella mirándola a
los ojos, sus rostros se acercaron cada vez más, pero el Hanyo
reacciono, tenía que buscar a Kagome, ella podía estar
en problemas.
Al momento soltó a Kikyo y la empujo un
poco lejos de el, mientras se iba corriendo sin darle ninguna
explicación.
-Inuyasha ¿te importa mas esa mujer
que yo? - murmuro
esta.
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Sango
y Miroku habían comenzando a buscar a Kagome con los primero
rayos del sol, Shippo iba en la espalda de Miroku medio dormido,
llevando consigo el nuevo arco para Kagome.
Inuyasha los había
despertado muy temprano, diciéndoles que por fin había
conseguido medio percibir el aroma de Kagome, este les indico el
lugar y se fue rápidamente en esa dirección sin
siquiera esperarlos.
-Ya llevamos bastante y aun no lo
encontramos, Houshi sama ¿cree que doblo por algún
lugar? - pregunto la Taijiya preocupada
-No creo Sango, el
estaba muy nervioso, seguro nos lleva aun una gran ventaja. -
contesto Miroku mirando pensativo el camino, el sol ya estaba
bastante alto y aun no encontraban a Kagome.
-Extraño a
Kagome - murmuro el zorrito intentando encontrar con su vista a
Inuyasha.
-¿Houshi sama? - pregunto Sango mientras
seguían avanzando muy rápido gracias a Kirara
-¿Que
pasa Sango? - respondió el monje
-Lo que dijo
anoche.... - La Taijiya callo un momento dudando en si debía
preguntar o no - ¿es cierto? - al fin pregunto, tenia que
saberlo y tal vez ese era el mejor momento.
-Si Sango -
respondió este en un murmullo - yo no miento con esas
cosas.
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Sesshômaru
continuaba caminando lentamente, la herida en su pecho lo había
debilitado demasiado, aunque no lo demostraba, eso ni el mismo se lo
esperaba.
Ya era casi medio día, por suerte no faltaba
mucho para llegar.
Seguramente Rin se preocuparía por el al
verlo en ese estado, pero el no tenia ánimos de seguir sin
rumbo en ese bosque, de igual forma esa herida curaría en uno
o dos días, como siempre.
Al llegar al sitio donde había
dejado a la pequeña niña se sorprendió.
Rin
se encontraba con su nuevo kimono se veía muy tierna, y a su
lado una joven de pelo largo, la compañera de Inuyasha,
conversando con la pequeña tranquilamente mientras Jaken un
poco alejado preparaba algo de comer para las dos.
-¡Sesshômaru
sama! - la primera en verlo fue la pequeña Rin que se acerco a
recibirlo muy contenta como siempre
-Sesshômaru....
yo... - Kagome permanecía sentada ya que aun no podía
apoyar su pie muy bien, este se acerco seguido por Rin y se sentó
en un tronco cercano.
-¿Cuando llegó? - después
de un pequeño silencio Sesshômaru pregunto.
-Yo
llegue ayer, una serpiente me mordió y Rin chan me ayudo, e
estado aquí toda la mañana y ... - la miko se detuvo al
ver la herida en el pecho del Youkai - ¡esta herido!
La
joven se paro con alguna dificultad debido al dolor en su pie, aun
así se acerco al youkai, después sacando una vendas de
alguna parte le dio algunas instrucciones a Rin, para que esta
trajera unas hierbas que eran buenas para desinfectar
heridas.
Cuando Rin las trajo Kagome retiro un poco las ropas
de youkai, como toda una experta desinfecto la herida, la cual no era
tan profunda como parecía, luego la vendo, y sonrió
satisfecha: ya era casi una experta.
Sesshômaru no dijo
nado, miro el vendaje y acomodo de nuevo sus ropas
Cuando por
fin Kagome se dio cuenta de a quien había curado su vergüenza
fue inmensa, ella hacia eso casi de reflejo siempre que veía
una herida, pero si se hubiera puesto a pensar al menos un momento a
quien curaba posiblemente se habría detenido, pero había
algo extraño; el frió y hermoso Youkai no le dijo nada,
ni la alejo ¡NADA!.
Kagome bajo la vista muy
sonrojada
-Lo... lo siento - dijo esta - casi hago esto de
reflejo cuando veo una herida, lo siento Sesshômaru... en
realidad no quería incomodarlo y... - la miko se detuvo, el
youkai la observaba atentamente y esta entendió que por mas
que dijera no conseguiría siquiera una palabra de este.
Jaken
que había visto toda la escena no decía nada, era
extraño que su amo se dejara tocar por un humano, y mas curar
cuando el no lo necesitaba en realidad.
-No importa, esta bien
así - el frió youkai hablo sin dejar de mirarla
fríamente, ella se sentía muy nerviosa y su rostro
cobraba cada vez mas color - Jaken
-S... si ¿Sesshômaru
sama? - el youkai estaba distraído observando a su amo ser
amable con una humana aparte de Rin, al fin de cuentas eso no
se veía todo los días.
-El pescado - señalo
Sesshômaru
Jaken volteo a ver y vio que uno de los peces
se había chamuscado, los demás lo retiro al momento
para luego entregárselos a Rin, la cual le dio algunos a
Kagome. Esta seguía completamente enrojecida por lo que había
echo.
-¿Kagome-oneesan ? - dijo Rin sacándola de
sus pensamientos
-Si ¿Rin chan?
-¿No
quieres comer?
-Aaaah! Gomen Rin chan, estaba un poco
distraída - respondió Kagome comenzando a comer, no sin
antes mirar al youkai que seguía sentado paciente en el
tronco, aunque ahora miraba a cualquier lugar del horizonte.
Cuando
terminaron de comer, ambas le pidieron a Jaken traer algo de agua,
cosa por la cual este se fue refunfuñando algo sobre que lo
utilizaban, mientras Rin y Kagome reían
alegremente.
Sesshômaru sonrió levemente, una
sonrisa que nadie vio, tener tanta gente alrededor, sus risas y
pequeñas molestias por parte de Jaken, era algo sencillo,
demasiado tal vez, pero que por un momento le pareció
agradable, era como algo que el no recordaba, una pequeña
familia....
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Inuyasha
continuaba corriendo, hacia mucho había perdido el aroma de
Kagome, pero aun así continuaba, intentando en lo posible no
pensar en Kikyo, y en que ella no tenia nada que ver con la
desaparición de esta.
Ya había pasado todo un
día, el sol comenzaba a ocultarse y no encontraba nada
-Tal
vez Kagome se fue a su hogar, por el pozo - Pensó el Hanyo -
aunque esta muy lejos.
Al momento descarto esa posibilidad, sin Kirara se demoraría
demasiado en llegar, sabia que por ahora lo mejor seria volverse y
hablar con sus amigos, pero sus instintos se lo impedían.
Pronto
oscureció, Inuyasha de detuvo a esperar a sus amigos, los
cuales llegaron bastante tiempo después.
-Inuyasha -
Miroku comenzó a hablar - cuando veníamos encontramos
esta flecha en una parte del bosque, pero a sus alrededores no había
pisadas o posibles pistas, la flecha esta desgastada posiblemente dio
en el blanco.
El monje extendió las flechas a Inuyasha,
el cual las olfateo.
-No, estas flechas no son de Kagome, son
de Kikyo - contesto el Hanyo después de un momento - y la
sangre en esta es de....
IMPOSIBLE pensó
Inuyasha
-¿¡QUEEEEEEE!? - Shippo estaba a punto
de explotar - ¿la viste a caso también ? La cambiaras
por Kagome ¿Inuyasha? Por tu culpa pasa todo esto - el pequeño
zorro miro con odio a Inuyasha, el cual no respondió, solo
partió la flecha en dos.
-Cálmate Shippo,
encontraremos a Kagome - intento tranquilizar el monje al pequeño,
mientras que Inuyasha intentaba una vez mas percibir el olor de su
compañera y los demás preparaban algo de comida y donde
dormir, ya que de noche no podían hacer mucho.
El monje
sabia que Inuyasha no había dicho algo, ya lo averiguaría
el después
...
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Myoga se encontraba en las alas de un pequeño ruiseñor,
ese día había partido a buscar a su amo, ya que había
escuchado rumores de que Naraku se ocultaba en alguna parte de las
montañas orientales.
El pequeño pájaro se
detuvo cuando estaba comenzando a oscurecer en un frondoso árbol
cerca a un pequeño claro.
La pulga se dispuso a
descansar allí y el DIA siguiente continuar en su viaje,
aunque suponía que no faltaba mucho para llegar al sitio donde
Inuyasha se encontraba.
Cuando la pulga se estaba durmiendo en
las alas de su amigo vio una pequeña luz, algo parecido a una
fogata.
Tal vez sea Inuyasha-sama y los demás la
pulga se fue rápidamente con sus saltitos al claro, cuando
estaba muy cerca vio a Kagome sentada en un tronco hablando
alegremente con alguien.
Cuando por fin vio claramente la
escena la pulga decidió no avanzar mas, y se quedo oculto en
la hierba observando todo.
Una pequeña dormía
profundamente al lado de un caballo de dos cabezas, Jaken el
sirviente del hermano mayor de Inuyasha estaba cerca a la hoguera,
mirando a ratos a la niña, a ratos a su amo.
Pero lo
mas extraño para el fue ver a Kagome sentada en un tronco
junto con Sesshômaru hablando tranquilamente.
-De donde
vengo - decía la joven Miko - hay muchas cosas útiles,
como bolsas de dormir, comida precocida, a veces traigo de esas cosas
aquí, lastima que deje mi maleta, creo que a Rin y a ustedes
les habría sido muy útil algo de esa comida, así
no tendrían que detenerse tanto a buscar.
El Youkai
solo asintió levemente, después de un corto silencio
pregunto - ¿y como llego aquí? - esto lo pregunto con
su acento frió de siempre, pero con un leve brillo no muy
notorio en sus ojos.
-Cerca al árbol donde Inuyasha fue
sellado hay un pozo, en mi época también esta ese pozo,
un día, en mi cumpleaños una mujer cien pies salio del
pozo y me trajo hasta a.C. por la Shikon no tama, luego pasaron
muchas cosas y ... - la chica se interrumpió dudando un poco,
si contar o no - sin querer rompí la Shikon no tama y aunque
descubrí que podía ir y volver a mi casa, me tuve que
quedar a recolectar los kakera(1) y ahora paso mas tiempo aquí
que allá, ya me acostumbre, incluso hay veces que prefiero
estar aquí que allá, aunque muchas veces mi vida corra
peligro y cosas así ....
La chica por fin dejo de
hablar, Myoga seguía escondido sin quitar la vista de
Sesshômaru, cuando Kagome nombro a Inuyasha sus ojos brillaron
mas aun, pero con odio, para luego volver casi a la normalidad y
escuchar atentamente lo que esta decía.
A Myoga esa
escena le parecía familiar, pero no conseguía recodar
de donde.
-¿No le da miedo? - pregunto de nuevo con
frialdad el youkai, era extraño para el hablar tanto, y mas
con una humana, pero ella era interesante y aunque hablaba mas que el
mismo Jaken le agradaba un poco.
-A veces si - la chica tomo
un mechón de su cabello de forma nerviosa - aunque de igual
forma cuando tome la decisión de seguir tras Naraku no sentía
miedo, es mas las veces que lo hemos enfrentado no e sentido miedo,
solo siento un gran valor dentro de mi, y bueno se que siempre saldré
bien, tal vez la confianza que le tengo a mis compañeros y
a.... - Kagome bajo la voz hasta convertir la ultima palabra en un
susurro que solo Sesshômaru escucho - Inuyasha
La Miko
suspiro después de decir eso, los ojos del Youkai seguían
brillando mientras que junto a la pequeña fogata Jaken dormía
tranquilamente, pasaron varios minutos en los que todo estaba en
silencio, la luna hacia posible que todo se viera con bastante
claridad.
-Mañana - el youkai rompió el silencio
- ¿que hará?
-¿Mañana? - la
pregunta tomo desprevenida a Kagome, ella no quería incomodar,
pero tampoco quería volver con Inuyasha, no aun. - no lo se...
tal vez regrese a mi casa unos días
En ese momento
Myoga por fin recordó donde había visto una escena
similar antes.
El youkai asintió levemente y se paro,
la miko lo imito y fue al lado de Rin a dormir, cuando llegara el día
tendría que separarse de ellos.
Las horas pasaron
rápidamente mientras la pulga ordenaba sus recuerdos
Si,
sin duda alguna, es demasiado similar a ese DIA, cuando Inu no taisho
sama y la madre de Inuyasha se conocieron
Continuara
Reviews:
Sakura Kinomoto: Lo que
Miroku le dijo a Sango se sabrá mas adelante jeje, y bueno si
Kagome se tenia que encontrar de alguna forma con mi lindo Sesshômaru
sama, intente no demorarme con este cap, espero que te guste.
Sailor
Aoi: Gracias, si Kagome se enamora o no de Sesshômaru
es algo que aun no se.
Saya/Ayachan: No te
preocupes, yo también soy muy posesiva con mi lindo Sesshômaru
sama, aunque me toco dejar eso un poco para poder escribir. Gracias
por tus comentarios
Cess007: Lastimosamente no
fue el lindo Sesshômaru sama quien salvo a Kagome, el estaba
muy lejos de allí para hacerlo, y lo de Sango y Miroku ...
jeje se sabrá mas adelante .
Karmein Metallium Ul
Copt: Son demasiados halagos insisto, como sea, Graaacias!
Claro que tomo en cuenta tu opinión y bueno si que los celos
de Inuyasha serán por Sesshômaru sama, ahora el problema
para mi será que pareja dejar al final ..... ya pensare en
algo
Fargok: Que bueno que te haya
gustado.
CaMiLa: Intente no demorarme mucho con
este cap, espero que te haya gustado.
ChibiKagome-Chan:
Que bueno que te haya gustado, y tranquila que Kikyo no la pasara muy
bien en este fic
Ai: S/M supongo que abra
pronto, pero lo que le dijo Miroku a Sango .... jeje eso no se sabrá
aun U Gracias por tus comentarios.
Maytelu:
Que bueno que te haya gustado! y claro que lo seguiré,
aunque no se como
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¿Que les pareció este cap?
Nakuru espera
algunos tomatazo o algo parecido
En fin espero tener el próximo
capitulo pronto (tengo que decidirme además por la pareja
final, cosa que aun no se ... ) espero muchos reviews, gracias a
todos.
Bye,bye.
Notas:
(1)Hama no ya : es el ataque de Kikyo, que también
tiene Kagome, este ataque solo afecta a los seres malignos.
