Disclaimer. Todos los personajes conocidos y lugares mencionados en este escrito pertenecen al genio de J.R.R Tolkien, todos los demás desconocidos son inventos de mi imaginación.

A Altadil, hijo de Thranduil

Hermano mío, espero que con gracia del cielo te lleguen estas líneas que con tanto cariño te dedico, mi padre ha enviado algunos guerreros hasta donde ha tenido las ultimas noticias de ustedes deseándoles buena suerte en sus pesquisas.

Ascar se ha ofrecido como voluntario inesperadamente, y me hace extrañar su presencia, le he notado muy nervioso, y mas últimamente he visto que sus manos aparecen mas en su boca que en el arco y flecha donde deben de estar. No dejes de atenderle cuando tengas ocasión.

Minya como siempre te envía saludos y desea que pronto vuelvas a nuestro lado, y que el día en que tu presencia engalane este lugar nos traigas las historias de las victorias alcanzadas.

Mucho me agradaría el acompañarte, mas mi padre con tu partida me ha tenido ocupado en serios asuntos del reino, nuevas criaturas aparecieron rondando el reino además de los orcos y arañas. Toma tus precauciones y que el fuego de las fogatas te ilumine durante la noche, Haldir puede ser un gran apoyo, mas desconfía un poco cuando su mirada tenga otra luz que no sea la del ágil y fuerte guerrero.

¿Te encontraras con el montaraz acaso? Dale mis saludos si así sucede. Mientras la luz Evenstar brille en su cuello no habrá oscuridad que nuble su vista.

Deseando contemplar pronto la luz de tus triunfos, se despide

Legolas, hijo de Thranduil, reino del Bosque Negro