Disclaimer. Todos los personajes conocidos y lugares mencionados en este escrito pertenecen al genio de J.R.R Tolkien, todos los demás desconocidos son inventos de mi imaginación.
Al príncipe Legolas, hijo de Thranduil, reino del Bosque Negro
Amigo y hermano mío, mucho es la pena que embarga a mi corazón, un sentimiento de culpa corroe mi alma y es contigo con el único con quien puedo desahogar este sufrimiento.
Creo que Altadil también aprovechara este mensajero para escribirte unas líneas, mas su carta no podrá expresar la angustia que siento yo aquí. Hemos encontrado diversas criaturas al seguir el rastro de esa criatura terrible llamada alguna vez Smeagol, y les hemos vencido sin perder ninguno de nuestros preciados elementos, Aragorn es el mas avezado en la materia de rastreo y creo que piensa llevarle de vuelta a algún lugar donde le custodien, habla mucho con Olórin acerca de ese asunto y tal vez elijan el Bosque Negro por cárcel.
No sé por que esa insistencia de encerrarle en nuestro querido reino, bien podría haber elegido tanto Rivendel como Lothlorien, mas a expresado un fuerte deseo en volverte a abrazar. Desde hace días ha guardado aquella hermosa prenda que le diera Arwen días antes de tu unión con Minya, ¿le recuerdas?, parece que sentiría mucho el perderla y la guarda en lo profundo de su equipaje.
Mas no es este el asunto que me atañe, lo único curioso es que ayer tu hermano prefirió mi compañía en el descanso nocturno, que la del Heredero de Isildur o el guerrero de Lorien, aún ahora escribe rápidamente unas líneas como si la vida le fuera en ello, me mira un momento, luego vigila alrededor suyo como si le acechasen otras miradas, y vuelve a estampar rápidos garabatos en el pliego que le ofrecí.
En fin, que me siento confundido y él no es la causa, mi amada Elithil me ha escrito llenándome de incertidumbre, ¿habré cometido alguna falta durante esta hermosa vida que me entregaron las estrellas, al castigarme de esta cruel manera? Confieso querido Legolas, que mi amor por Elithil es inagotable, deseo una vez mas estar en sus brazos y saborear la miel de sus labios, mas un problema se ha presentado y creo que dentro de 9 meses ese problema tendrá pies y manitas y misteriosamente podría tener algún parentesco conmigo. ¿Qué he de hacer en este momento de incertidumbre? Mi corazón me ruega me presente ante ella, mas mi razón y libertad me dicen que resista a su llamada. ¿tienes algún consejo que brindarme? ¿Será la paternidad un castigo o un premio en mi vida? ¿Cómo he de actuar?
Lleno de profundas dudas,
Ascacirithion hijo de Voronwë, perdido en tierras y miradas extrañas.
