Disclaimer. Todos los personajes conocidos y lugares mencionados en este escrito pertenecen al genio de J.R.R Tolkien, todos los demás desconocidos son inventos de mi imaginación.
A Lord Elrond, Señor y amo de Rivendel
Escribo estas líneas arriesgando la vida de este guardia que se ofreció a llevar tal noticia hasta Rivendel. Muchas cosas han pasado en esta búsqueda y tal parece que pronto llegara a su fin, pues Aragorn a seguido el rastro de Gollum mas allá de las ciénegas Muertas, hasta una gran cueva donde se ha refugiado y de la que no tiene escapatoria.
Listos estamos para mañana entrar con antorchas en busca de tan temible criatura. Confiamos en salir victoriosos, mas la empresa se escucha muy fácil a mi parecer, temo alguna emboscada por las huestes del Oscuro señor y los valientes guerreros que me acompañan podrían desanimarse si saben que somos vigilados por ojos que mi vista no alcanza a distinguir.
Debería comentar el animo que tienen mis bravos caballeros en tal acción, mas dos de ellos me preocupan, uno parece ser un guardia del Bosque Negro, que se nos unió inesperadamente en nuestro camino, cuando nuestra búsqueda ya estaba comenzada, no le hubiera admitido si no es por las referencias tan buenas que Altadil el hijo de Thranduil a dado de él, al igual que Trancos y el mismo Haldir le conocen y comentan su valor en la batalla. El nombre de este joven elfo es Ascar, o al menos así le llaman, su cabeza parece girar en sueños infantiles, pues dibuja muy a menudo pequeños garabatos en la tierra simulando a un pequeño y su padre. Otras veces le escucho cantar por las noches alguna canción de cuna y sonreírle a las estrellas, murmurando nombres algunas veces y repitiendo entre suspiros el nombre de alguna dama lejana. Ninguna queja en la batalla tengo al respecto mas me inquieta un poco su comportamiento.
El otro que llama mi atención es nada mas que Altadil, príncipe heredero del Reino del Bosque Oscuro, hijo de Thranduil, pues su conducta me parece un poco extraña, trata con suma cortesía al capitán de guardias de Lorien así como al Dunedan, mas no acostumbra mucho su compañía, se refugia en platicas incoherentes con el antes mencionado Ascar, y mientras uno habla de los cuidados merecidos a un niño, el otro habla de su amor por alguna dama, su recuerdos y respetos por la bella dama Arwen y otra cuyo nombre no recuerdo en este momento. Pero le he visto pelear, y su puño nunca tiembla, tiene la mano firme y el ojo agudo pues sus flechas siempre aciertan a su blanco, ningún enemigo se le resiste y eso es lo que me tiene asombrado.
Bien, Elrond, es todo lo que tengo que informarte, mañana será un día importante pues será el día señalado para la captura de esa criatura tan feroz y salvaje llamada alguna vez Smeagol. Algo oscuro, una perdida tal vez se forja en mi mente mas no se a que se deba.
Gandalf el gris antes llamado Olórin
