"Ahora puedo descansar en paz".

   by amhy potter.

Nota: No, por más que rece y patalee, no tendré a Harry Potter en mis manos, pero... cualquiera puede soñar con que un día de estos pasará, ¿no? Bueno, mientras eso pasa, les digo que sólo Jo es la bendecida en esta tierra. No soy dueña de nada, desgraciadamente.

Capítulo 2: "¿Derrotado?".

~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~

Otro suspiro dejo escapar. Este día, hoy, ya no tengo por qué preocuparme, ya no tengo por qué sufrir. Estoy feliz, y ese vacío que hace muchos años me carcomía por dentro, ahora fue convertido en una inmensa sensación de alegría, una satisfacción de que no soy el único que se alegra y se siente feliz.

Algo de sentimiento me da por Ron, Hermione, Remus, Dumbledore, pero sobre todo, Sirius. Me siento un poco mal por ellos, pero aún así no puedo evitar sentirme bien porque ellos ahora ya no tienen que sufrir por mí, ahora, ellos pueden vivir alegres, vivir en paz, como yo. Ahora, ya nadie tiene que sufrir por mí.

¿Que porqué digo esto?... ¿Que porqué hablo de esa manera, como si yo... como si esa noche yo hubiera...? ... Bueno, creo, creo que es mejor que te cuente qué pasó después, y así sabrás a lo que me refiero...

"Harry..., ¿quieres luchar contra Voldemort?..., ¿quieres ser el heredero de Gryffindor?..., ¿quieres ser un huérfano?..., ¿quieres enfrentar a la muerte varias veces?..., ¿quieres sufrir y sentirte culpable por la muerte de tus padres, de Cedric, y por la pena de muchas otras personas más?..."

Otro suspiro... qué hubiera dado yo por poder escuchar esas palabras, sólo una vez.... sólo una vez... Si alguien me lo hubiera dicho, y me diera a escoger.... Pero, para mi desgracia, nadie hizo eso, nadie me preguntó si quería otra vida; para mi desgracia, esa era la única vida que tenía, no podía cambiarla, aunque lo deseara con todas mis fuerzas, cosa que más de una vez llegué a hacer. Tuve que aceptar esa vida, sin reproches y sin reclamarle a nadie, y encima eso, sin poder reclamar. Tragarme todo el sufrimiento que tenía, callarme y no quejarme, ahogarme entre mi propio dolor, ahogarme con mis lágrimas.

Bueno, ahora tampoco puedo quejarme, ya nada puedo hacer, y no hay marcha atrás. Pero no importa, en serio, estoy bien. Ahora, todo a mi alrededor es paz y tranquilidad, nadie me perturba, y soy más feliz de lo que nunca pude ser...

Creo que me salgo del tema, ¿no?.... Bien, la pregunta que te haces es, ¿qué pasó esa noche?... Algo, que aún incluso en las condiciones que hoy me encuentro, me duele recordar....

¿Cerré los ojos, y me dejé llevar, a una vida mejor, a un descanso eterno y en paz?.... Te juro que estaba decidido a hacerlo; tantos años de sufrimiento, tantos años callándome todo, y soportando el dolor, tantos años tan tristes y oscuros....Tantos años de soportar, en vez de fortalecerme más, hicieron que mi cuerpo y mi mente llegaran a un límite, mi alma puso un alto, ya no podía soportar más.

Cerrar los ojos.... ¿porqué no?.... Al fin y al cabo, todo dolor cesaría, y todo lo malo acabaría.... No más problemas, no más preocupaciones... No más..... no más.

Estaba decidido a hacerlo, y ya no me importaba lo que me pudiera pasar, no me importaba si dolería o no, ya no me importaba si no volvía a respirar otra vez, no importaba si daba el último aliento, sólo me importaba dejar de ser, sólo eso. Dejar de sufrir, dejar de vivir... ¿cuál es la diferencia?... sólo quería eso, dejar de ser.

Pero algo me lo impidió: justo cuando estaba a punto de dejarlo todo, un gran destello pasó ante mis párpados cerrados. Una gran luz cegadora acompañada de imágenes, recuerdos, sensaciones. Sentimientos hacia mis amigos, hacia todos los que me rodean. ¿Cómo pude ser tan estúpido?.... Ahora caía en la cuenta. ¿Cómo pude olvidar eso?, ¿Cómo pude olvidarlos?....

A Hermione, a Ron, a Remus, a Dumbledore, a ¡Sirius!... incluso hasta Snape, ¿cómo pude ser tan egoísta?... Ellos, todos ellos dependen de mí. ¿Cómo siquiera pude pensar en lo feliz que sería si yo dejara de sufrir, cuando todos ellos dependen de mí, cuando todos ellos esperan que no me de por vencido, cuando todos esperan que nunca, jamás, me deje caer, derrotado?... ¡Qué estúpido! 

Y a pesar del extremante dolor que aclamaba por mi vida, abrí los ojos, juntando todas las fuerzas que pude. En ese instante, mi cuerpo me indicó que lo mejor hubiera sido que no lo hiciera, porque el dolor se triplicó. Era como si cada una de las maldiciones se pusieran de acuerdo para saber cómo y cuándo atacar.

Pero Sirius, Ron, Hermione, Remus, todos.... Era imposible que me dejara caer, esta vez no era por mí, era por ellos, sólo por ellos, y juré que mataría a ese asesino sólo por ellos.

Y ahí fue cuando lo vi, incrementando aún más el dolor de la cicatriz al momento de encontrarme con su mirada. Me puse en pie casi de milagro, y tuve más confianza y seguridad, al ver la cara de sorpresa que puso Voldemort.

En ese preciso momento, no me importaba ya nada, el dolor quedó atrás, y mi único objetivo fue matar a Voldemort, salvar a mis amigos, salvarlos por última vez.

— Eres fuerte, ¿no, Harry? —me dijo ese idiota tratando de ocultar su nerviosismo—. Sí, igual que tus padres.

¡El muy estúpido se atrevió a mencionar a mis padres! Eso nunca se lo perdonaría. ¿Cómo se atrevía a referirse a ellos de esa manera? Maldito...

— Cállate, Voldemort —hasta hablar me costaba y me dolía. Ese nuevo maleficio si que era agotador. Jamás había sentido nada como esto, ni siquiera el cruciatus me dejaba así, tan exhausto, como si me hubieran absorbido la energía hasta el alma.

Pero no importaba, te juro que en ese momento no importaba. Voldemort estaba frente a mí, el asesino de mis padres y de Cedric estaba ahí, esperando ansiosamente y con una gran sonrisa a que la batalla entre nosotros comenzara... Idiota... Todo el coraje del mundo se vino encima y no me podía contener. Pero había un pequeño problema, sólo un pequeño inconveniente: yo estaba completamente agotado, y muy apenas podía quedarme consciente, ya no digo estar en pie. Mientras Voldemort estaba ileso, sin un rasguño y lleno de fuerzas, yo estaba a punto de desmayarme.

¿Pero eso qué importa? Tú me conoces: mientras alguien esté de por medio, no importa si mi cuerpo está despedazándose, haré lo imposible por poder ayudar y proteger a alguien. Y con mayor razón si se trata de Hermione, Ron, Remus, todos mis amigos; haré lo imposible por salvar a Sirius, y sin pensarlo, daré mi vida por él.

— Harry, Harry... —ese idiota dijo eso como si fuera alguien regañándome en tono burlón. Maldito asesino...— ¿No crees que deberías ser más respetuoso y educado?...

Maldito idiota. Si no hubiera estado tan exhausto, te juro que habría ido a darle una golpiza que jamás olvidaría... Y encima se rió por ese estúpido comentario, y mostró a sus "espectadores" la más maniática y sádica sonrisa que ese estúpido asesino tenía.

— Bien, Harry, basta de habladurías. Dime... ¿cómo quieres morir? Si tienes suerte, puedo darte una rápida muerte, aunque no prometo que no será dolorosa. Pero velo del lado bueno... verás a tus padres, ¿no te alegra? —otra risa maniática.

Maldito idiota. ¿Cómo se puede soportar él mismo?.... Te juro que me dieron unas ganas tremendas de callarlo de una buena vez por todas, de darle su merecido, hacer que pagara por todo lo que les había hecho a mis amigos, a mis padres, a Cedric... quería que pagara por lo que nos hizo a todos, que pagara por lo que a mí me hizo...

Volteé a ver a Sirius en ese momento, y vi en su mirada, un terror y una preocupación que yo jamás había visto en él. Una diferente forma de verme con esos intensos ojos azules, que ahora tenían el brillo apagado por la tristeza. Quería decirle que todo iba a estar bien, que nadie saldría lastimado, que yo lo protegería, que no me pasaría nada, que no se preocupara por mí..., que esa batalla no me lastimaría, y que saldría victorioso y con vida...

Desgraciadamente, en ese momento no estaba seguro de que podría cumplir con lo último. Pero un "Avada Kadavra" lejano me sacó de mis pensamientos, al tiempo que escuché gritos ahogados y exclamaciones por todo el Salón. Mis ojos no se habían separado de los de Sirius, y sabiendo lo que me esperaba, vi en su mirada, la impotencia, desesperación, pánico, miedo, terror, tristeza, angustia, y miles de emociones más que jamás creí ver reunidas en una sola persona. Tanto fue así, que me transmitió algo de dolor, pero no por mí, sino por él, porque sabía que él sufría por mí, y sólo por mí....

"No dejaré que sufra. Es lo único que tengo, y protegeré su vida con la mía. No sólo su cuerpo, sino también su alma. No dejaré que se le destroce de esa manera. Salvaré mi vida, y que todo sea por él, todo por él...."

Ese pensamiento, que ahora lo tengo muy presente y del cual jamás me olvidaré, hizo que me sintiera más seguro y confiado. Me renovó el alma y el cuerpo. Olvidé por completo el dolor, y la situación en la que me encontraba. Ahora sólo estaban Voldemort, el asesino, Sirius, a quien debía proteger a toda costa, y yo, que me encargaría de matar a ese asesino, y proteger a Sirius. Es todo lo que necesitaba saber. No había mortífagos, ni maestros. No había dolor afuera. No había angustias ni sollozos, no había carcajadas de los mortífagos. En ese momento, sólo había un rayo de luz verde que se dirigía a mí, y que no debía dejar que avanzara....

No era yo, y no sé cómo explicártelo, porque aún después de varios años, ni yo mismo he sabido qué significa. El caso es que me sentí diferente, como nunca, y jamás volví a tener esa sensación dentro de mí. Era una extraña vibración que me hacía sentir confiado y seguro, poderoso e invencible a la vez, pero relajado y tranquilo. Toda maldad se fue de mi cuerpo, toda angustia y dolor, toda impotencia y sufrimiento, todo temor y tristeza. Sólo existía la sensación que me indicaba detener ese rayo, que extrañamente iba a una absurda lentitud.

Aparté por un momento mis ojos de ese rayo, aprovechando la lentitud que éste llevaba, y noté el rostro de Voldemort, que se mostraba sádico y malicioso, creyendo que su objetivo de antemano, ya estaba terminado...

Maldito ingenuo estúpido... Me alegro de haber visto esa cara de sorpresa y terror ese día en él. Cuando levanté mi mano derecha por instinto, y el rayo se deshizo como polvo en mi mano, ese idiota puso esa expresión que jamás olvidaré. ¿Qué demonios importaba que todos estuvieran sorprendidos por el hecho de que yo haya parado una maldición imperdonable, la peor de todas?, ¿Qué importaba?... Voldemort estaba frente a mí, y tenía el poder suficiente para matarlo de una vez por todas... ¿Lo demás qué importaba?... Sirius estaba incrédulo, pero a la vez tan feliz como yo nunca lo hubiera visto... aliviado, alegre, emocionado, sonriente... Eso, exactamente eso, era lo único que importaba. Sirius ya no sufría, y eso era todo.

Pero luego me encargaría de disfrutar viéndolo sonreír. Ahora... ahora debía terminar lo que hace mucho debí haber hecho...

Voldemort estaba frente a mí, y esta vez, esta vez no escaparía. Juré que esa noche, sería la última para él...

~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~ * ~

Gracias por los reviews a: Catherine Granger, Juli3ta, y naiko-li.

Hasta la próxima, y gracias por leerlo...