CAPITULO 15
CAMPOS DE CEBOLLAS
DEDICADO A:
RICHARD
- Que terrible - dijo Gokuh cuando por fin pudo hablar - ¿Y ahora que?
- ¿Terrible? por la forma en que te reías no pareció afectarte tanto.
- Lo siento Gohan -, pero es que nunca tuve confianza en esta pobre excusa de ser supremo y este desafortunado incidente solo me dio la razón.
El supremo Kaioh no sabia donde meterse de la vergüenza. (N. de P. S.: Je, je)
- Es lamentable como degenera la juventud muchachito - dijo una voz.
El que había hablado era un extraño anciano muy parecido al supremo Kaioh Sama, que estaba de pie en el lugar donde habían caído los pedazos de la espada Z.
- ¿Ehhh? - pregunto Gokuh - ¿de donde salió ese viejito?
- ¿A quien le dices viejito, impertinente? Deberías de hablarme con mas respeto.
- ¿De casualidad no será...? - supuso el supremo Kaioh Sama.
- Bien jovencito, pon atención. Cuando te diga quien soy, no me lo vas a creer
A Vegeta comenzaba a saltarle esa vena en la frente. ¿Quién era ese tipo y por que se daba tanta importancia?
- Yo soy... nada mas y nada menos que... en serio que no lo vas a creer cuando lo diga... soy... agárrense y prepárense... soy... el supremo Kaioh Sama de hace quince generaciones.
Kibito y el supremo Kaioh estaban que no se la acababan (N de P. S.: con cara de
¡¡¡OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!), a quienes la noticia no les iba ni les venia eran, obviamente, Angela y Vegeta.
- ¿Y? - gruñó Vegeta, quien lógicamente estaba muy molesto con el mencionado viejito, por hacerle perder el tiempo - ¿Qué diablos esta haciendo ahora aquí? ¿De donde demonios salió?
El viejo lo barrio con la mirada de arriba abajo antes de responder.
- Pues, mozalbete impertinente y grosero, durante mucho tiempo estuve encerrado en la espada Z...
La mancha se extendía a lo largo y ancho del cielo. El viento comenzó a soplar frío por todo el mundo. Quienes esperaban en el templo sagrado dejaron de preguntarse que hacían ahí, porque hasta ellos podían sentir que algo muy malo se aproximaba.
- Entonces de eso se trata la leyenda de la espada - dijo Gokuh -. No es el arma en si, si no que quien la pueda dominar, con ayuda del supremo Kaioh Sama, puede convertirse en el ser más poderoso del universo.
- Eso es correcto - le dijo el viejo.
- ¿Y de que se trata la ayuda que nos puede dar, para derrotar a Zarach?
- Mmm.
El viejo se puso las manos en la espalda y dio unos pasos.
- A pesar de que es mi deber el enseñar a quien sacó la espada de la piedra, en esta ocasión, espero un pequeño favor a cambio
Todos: ...
"¿Que clase de ser supremo es ESTE?" se pregunto Vegeta "Espero que no sea como el otro inútil"
- ¿Cómo que un favor? - le pregunto Gokuh "¿Qué se ha creído este viejito?"
El viejo Supremo Kaioh Sama se acerco a Angela, quien lo miraba con cara de interrogación.
- Ejem, el pequeño favor que pido es una cita con esta linda señorita - sonrío.
Todos: ¡¡¿QUE!
- ¡ÓIGAME! - le reclamó indignado Gokuh -. En primera, es su obligación ayudarnos y no tiene por que pedir ese tipo de favores, viejo degenerado. Y en segunda, la señorita no...
- Guapo... - le interrumpió Angela -. Déjame hablar a mí.
Angela se acerco al supremo Kaioh Sama y le sonrío dulcemente.
- Por supuesto, será un honor salir con tan distinguido caballero - le dio un pequeño beso en la mejilla y el viejo casi se priva de la emoción.
Viejo Supremo Kaioh Sama: ¡¡¡¡¡YUPI!
Gokuh : ¬¬U
- Veamos, ¿quien fue él que saco la espada Z? - preguntó el ser supremo, mas que dispuesto a empezar el entrenamiento.
- Aquel - señaló Gokuh, cubriéndose los ojos con una mano con ademan de exasperación, al borde del colapso.
- Muchacho, ven acá - le indico el viejo supremo Kaioh.
- ¿Yo? - pregunto Gohan señalándose a si mismo con el índice.
- Párate ahí - le señalo el viejo - ponte derecho y bajo ninguna circunstancia te muevas.
Una vez que Gohan se logro mantener quieto en el sitio indicado, el viejo comenzó a dar vueltas alrededor suyo, haciendo ruidos extraños y moviendo los pies y las manos.
"Esta loco el viejito" pensó Gokuh.
"En eso estoy de acuerdo, ¿de qué se trata toda esta comedia absurda Spawn?" preguntó Vegeta.
- Oiga - dijo en voz alta Gokuh - ¿Se puede saber que esta haciendo?
- No le hable en ese tono señor Gokuh - se alarmo el joven ser supremo -. Él sabe lo que hace.
Angela sonrió.
- Se trata de un ritual para que el chico incremente su fuerza - explico el viejo Supremo -. Tengo que hacer estos movimientos alrededor de diez horas.
- ¡¿DIEZ HORAS! - Gohan se mortifico - ¿Tengo que estar diez horas aquí parado?
- Pero Zarach esta por llegar a la Tierra - dijo Gokuh - ¿puede darse un poco de prisa?
- No muchacho baboso, este tipo de cosas no se pueden apresurar, con un poco de suerte terminaremos a tiempo.
"¿Muchacho baboso? ¿Cómo se atreve?"
- No te apures Spawny, los cazadores estarán para ayudar y ustedes están listos para pelear a la hora que sea. Saldremos de esta.
- ¿Estas segura?
- Claro. ¿Por que no tomamos una pequeña siesta? - Para estar descansados a la hora del combate.
"¿Siesta?" pensó Vegeta.
- ¿Siesta? Angela, no creo poder hacerlo en esta situación.
- Si puedes - después se dirigió a Gohan -. Niño, tu padre necesita un descanso, al rato regresamos. Ven con nosotros Vegeta.
- ¿Se van y me dejan aquí?
- No nos tardamos - se despidió Gokuh sin mirarlo, con un gesto de la mano.
Gohan nunca se había sentido tan incomodo en toda su vida. Miro al viejo, quien continuaba en su extraño ritual.
- Esta... loco... - murmuro.
Una vez lejos de los demás, Angela le dijo a Vegeta:
- Oye, todavía tienes esa marca en la mejilla.
- ¿CUÁL MARCA? - dijo indignado - ¡YA TE HABIA DICHO QUE YO NO TENGO NADA!
- No es cierto, oye Gokuh, ¿no te parece que tiene la forma de un bes...?
- ¡NO! ¡NO LE PARECE! - grito Vegeta poniéndose encarnado - ¡Y NO TENGO PORQUE QUEDARME AQUI ESCUCHANDO TUS TONTERIAS!
Y diciendo esto se marcho indignado.
- Seguro fue a lavarse la cara - se río Angela.
- No venimos a dormir la siesta ¿verdad? - le dijo Gokuh con mucha seriedad.
- Vamos a hablar.
- ¿Hablar?
- ¿Siempre haces tantas preguntas? ¿Puedo hacer yo unas?
- Eeeh... bueno.
- ¿Puedes hablarme de tu familia?
- ¿Que quieres saber?
"Maldita sea" pensaba Vegeta. Efectivamente había ido a lavarse la cara, y efectivamente la famosa marca era un beso. Estaba a orillas de un pequeño río en el planeta supremo. Antes de echarse agua al rostro, contemplo su mejilla con atención en su reflejo en el agua. Era solo un pequeño beso de despedida que Rachel le había dado. Solo eso. ¿No tendría lápiz de labios que no se pegara a lo demás? No estaba seguro pero creía que ya se habría inventado uno. Con una mano tomo una pequeña cantidad de agua y se detuvo. No quería hacerlo, por alguna extraña razón no quería quitarse la pintura de labios de donde estaba. De repente penso en Bulma ¿qué hubiera hecho si lo hubiera visto con eso en la cara?. Conociéndola le hubiera armado un escándalo por esa insignificancia. Se hubiera metido en un problema que no necesitaba por culpa de Rachel. Con furia se restregó la mejilla, aunque en el fondo, hubiera preferido no hacerlo.
- Cuéntame más, ándale, por favor - suplico Angela. Ambos estaban confortablemente sentados a la sombra de un pequeño árbol
- ¿Que más te puedo contar? - le decía Gokuh
- ¿Que es lo ultimo que recuerdas?
- Mmmh. No estoy seguro, no había pensado mucho en eso - respondió pensativamente cruzándose de brazos.
Angela lo tomo de la mano. Gokuh la miro a los ojos.
- Recuerda.
Gokuh solo podía mirar sus ojos, en ellos se reflejaba la luz. Entonces lo vio, él estaba entrenando en el planeta Gran Kaioh, con Kaioh Sama, hacia mucho que no pensaba en él. En el cielo se vio por un momento una mancha parecida a la que comenzaba a cubrir la Tierra, escucho varios truenos y en el suelo, justo bajo sus pies se abrió una grieta de la que salió una gran cantidad de ese asqueroso liquido verde, que lo atrapo y lo absorbió.
Gokuh retiro bruscamente su mano de la de Angela.
- Ya, eso es lo ultimo que recuerdo.
Angela pareció comprenderlo.
- Esta bien, no tienes por que avanzar mas.
Ambos se quedaron callados durante un momento.
- Tienes unos hijos adorables - dijo al fin Angela - se parecen mucho a ti, en lo físico se parece mas Goten. Y Gohan se ve que te quiere mucho.
- Quiero que se mantengan lejos de esto, no deberían ni de pensar en lucha contra Zarach -murmuró Gokuh. El engendro pedía "Quiero que estén lejos de mi... muy... MUY lejos de mi".
- ¿Cogliostro te esta entrenando verdad?
- Si, así es.
- ¿Sabes por que?
- Él... dijo... que yo tenia algo distinto a los demás...
- ¿Que? - dijo Angela acercando su rostro al de él.
- Eeh... es algo... muy tonto... - dijo retrocediendo un poco. Angela le sonreía - . Dijo algo... sobre... mi corazón.
- Hay una manera de comprobarlo - dijo la cazadora levantándose rápidamente -. ¡En guardia!
Angela blandió sus armas y se dirigió contra Gokuh, el cual estaba demasiado sorprendido para responder, hasta que la lanza dimensional paso a milímetros de su cara y atravesó el árbol que tenían cerca.
Con un rugido se transformo en el engendro.
- ¡Por Dios! No lo había notado. ¡Te ves aun mas tenebroso que antes! - Angela soltó su espada arrojándola hacia cualquier parte -. Pensándolo mejor, para solucionar esto me basto con mis dos manos.
La cazadora acerco amenazadoramente las uñas al rostro del engendro, comenzaron una lucha cuerpo a cuerpo, forcejeando y revolcándose en el suelo. Angela de un zarpazo le quito la mascara, dejando al descubierto su rostro desfigurado y horrible, Spawn la golpeo, pero no lo suficientemente fuerte, ya que ella no se alejo. Al contrario, enfurecida se acerco aun mas, lo agarro del cuello con fuerza, Spawn se defendió como gato boca arriba y le sostuvo las muñecas para que no lo siguiera apretando, estaban muy cerca uno del otro, casi nariz con nariz si Spawn la hubiera tenido. Entonces Angela se acerco todavía mas y...
Beso.
Spawn se levantó rápidamente y la empujó para alejarla, consiguiéndolo con mucho trabajo.
- ¿Qué demonios...? ¿Por qué hiciste eso?
- Es mi forma de saber mas de ti -. A pesar de tu arranque, ya comprobé algo. Cogliostro tiene razón, eres diferente de los demás enviados de Zarach... Y ahora sé que tienes miedo, de que en realidad hayas sido un ser maligno desde siempre... confía en mi, no lo eres. Sea cual sea la razón por la que vendiste tu alma no fue por maldad...
- Angela...
- Y aun hay alguien que tiene que saber de ello...
Vegeta decidió que si el inútil hijo de Kakarotto iba a tardarse tanto con su "entrenamiento" él podía ponerse a practicar un poco. Después de un rato como que se aburrió, no podía concentrarse al cien por cien, algo le molestaba. De ves en cuando recordaba a Rachel y su oferta de entrenar en la Ciudad de la Luz. También los comentarios sobre su nivel de pelea como "cazador" que le habían hecho Spawn y Angela.
Tenia algunas dudas a las que no les encontraba respuesta. La pelea contra esa cazadora y el demonio Dared. Cuando estuvo a punto de eliminarlo y no lo hizo. ¿Que fue lo que lo detuvo?
Después de un rato, al ver que no avanzaba para nada, no se le ocurrió nada más que hacer que ir a ver a Spawn. Cuando lo encontró se llevo una gran sorpresa, estaba acostado bajo la sombra de un árbol y Angela estaba durmiendo la siesta, cómodamente acurrucada sobre el pecho del engendro. Este, por su parte, miraba pensativo hacia el vacío.
"¿Que esta pasando aquí? ¿Que estará pensando este engendro?"
Spawn lanzo un suspiro.
- ¿Que demonios te pasa?
- ... No es asunto tuyo.
Vegeta no se sorprendió por el tono de voz, el mismo lo había utilizado en varias ocasiones. Tenia razón, no era asunto suyo. Lo miro a los ojos y pudo sentir que estaba triste, molesto y preocupado, nunca lo había visto así de mal. Ninguna de sus peleas lo había dejado en tal estado. En el fondo de su corazón encontró algo que jamas penso que podría estar ahí: Deseos de ayudarlo. Trató de justificarlo diciéndose que lo haría porque era su rival, a quien tenia que vencer y en las condiciones en que se encontraba lo acabaría fácilmente y la victoria no tendría objeto.
- Oye - le dijo dudoso -, sé que nunca hablamos mucho...
- ¿Tu y yo?
- Bueno, en realidad hablar, es lo que menos me imagine que podría hacer contigo, tu sabes muy bien que primero preferiría que peleáramos y..
- ¿?
- Desde que nos conocimos, mi meta en la vida ha sido derrotarte, y pues... nuestra relación no puede decirse que haya sido buena...
Spawn le lanzo una mirada muy expresiva.
- Tienes razón - aclaro Vegeta -, no fue nada buena, es mas, no tenemos ninguna relación, ni nada que se le parezca
- ¿Entonces...?
- ... ¡Arg! ¡No puedo!
- ¿Que quieres decirme?
- Yo... mmm... en realidad... mmm... si quiero saber... mmm... que... mmm... que es... lo que... te pasa...
- ¿Por qué?
- Porque... mmm... yo... mmm... tu... mmm... Spawn... mmm... quiero decir... Kakarotto... mmm... Go...
Por mas que intentaba no lograba que las palabras salieran, esto era lo más difícil que jamas había hecho. ¿Cómo lo hacían los terrícolas? Tan solo en casa de Bulma, hablar era muy fácil. De pronto recordó que su hijo jamas había intentado conversar en serio con él, sobre algún tema personal. Y que cuando Bulma le intentaba hablar, nunca le había querido hacer caso.
Una sonrisa se adivino bajo la mascara de Spawn.
-Ya te dije que no me gusta que me digas Kakarotto - dijo -. Pero... Gracias, sé que esto es muy difícil para ti Vegeta.
En la Tierra las cosas se ponían cada vez peor. El cielo se oscureció completamente, en todas partes el viento soplaba mas frío y cada vez mas fuerte. De vez en cuando se veían relámpagos púrpuras y se escuchaban truenos que helaban la sangre.
El viejo Cogliostro solo esperaba, cuando Piccolo quería hacerle alguna pregunta contestaba con murmullos de palabras inventadas.
En el planeta supremo, el viejo supremo Kaioh Sama detuvo sus extrañisimos movimientos, y dirigiéndose a Gohan le dijo:
- Esta bien, ya puedes sentarte
Angela, Vegeta y el engendro en su forma de Gokuh se acercaron. Angela se tallaba los ojos y trataba de desperezarse. Vegeta bostezaba, también se había quedado dormido.
- ¿Ya acabo? ¿Ya nos podemos ir? - preguntó Vegeta.
- No seas impaciente, muchacho impertinente - le contesto el supremo Kaioh, claramente se veía que no le caía bien -, apenas vamos a la mitad.
Gokuh y Angela: (Caída)
- ¿¡CÓMO QUE APENAS VA EN LA MITAD? - le gritó Angela, con los cabellos erizados de exasperación - ¡¿QUÉ NO SE DA CUENTA QUE TENEMOS PRISA? ¡¿Y ASI SE ATREVE A CORTEJARME! ¿QUE SE HA CREIDO?
- Angela, cálmate - murmuro Gokuh a su lado.
- ¡¡NO! ¡¡NO ME CALMO! ¡¡Y SEPA USTED QUE SI NO SE APURA PUEDE IRSE OLVIDANDO DE MÍ!
Todos: ...
- Apuesto a que nadie le había hablado así antes - dijo en voz baja Gokuh
Efectivamente, nadie se había dirigido a él en ese tono.
- Claro que me doy prisa - balbució el viejo
... El extraño fenómeno meteorológico que esta afectando a todo el mundo, esta causando preocupación a todos los niveles. Las temperaturas siguen descendiendo hasta en los desiertos mas cálidos. En algunos lugares, el viento alcanza velocidades nunca antes registradas. Las autoridades han declarado estado de emergencia en todas las capitales. Mientras, la población se deja llevar por la histeria. Aquí vemos imágenes de ciudades en donde el cielo se ha oscurecido completamente, aun a medio día, la gente sale de sus casas en desbandada mientras los delincuentes comienzan con los saqueos y...
Vegeta, pidió (exigió) de comer. Angela solo lo miro reprobatoriamente.
- Como se nota que eres un cazador nuevo, no puedes mantenerte mucho tiempo sin comer.
El joven supremo Kaioh les llevo comida y Vegeta se la devoro con su estilo de saiyajin. Gokuh se alejo un poco de él. Gohan miro de casualidad lo que hacia su padre. Quedo pasmado, nunca se hubiera imaginado que su padre, bajo ninguna circunstancia dejara de comer. Spawn no podía ni recordar que se sentía tener hambre.
Alguna vez le había preguntado a Cogliostro sobre ese asunto. ¿Por qué no comía?
- Lo que sucede es que eres una criatura mágica. Magia infernal, pero magia al fin y al cabo. Utilizas una fuente de poder interna que viene de tu alma y es por eso que no necesitas alimentarte. Podrías comer. No lo necesitas, no te serviría de nada, pero podrías.
- Y esa fuente de poder ¿tiene algún limite?
El viejo suspiró.
- Si. Por eso te estoy enseñando a emplear mejor tu energía. Porque algún día se acabara ese poder, y eso significara que el "entrenamiento" por el que te enviaron a la Tierra también concluyo, y regresaras con Zarach, sin alma y sin voluntad... solo para servirle... para siempre.
Spawn se estremeció interiormente. Eso es lo que le esperaba a menos que pudieran vencer al demonio. Una eternidad de esclavo.
- Muy bien pelirroja - dijo Vegeta una vez que hubo terminado - ¿me quieres explicar que es lo que te traes en mi contra? Desde que te conozco solo escucho que me criticas en todo, ¿cual es tu problema? Y antes de que me restriegues en la cara tu experiencia como cazador, quiero que sepas que mas que un miserable "Cazador" soy un sayajin. Es mas, soy el príncipe de los sayajin, soy el gran Vegeta y no estoy dispuesto a que ninguna mujer me...
- Ya, para tu carro - lo interrumpió bruscamente, luego, se dirigió a Gokuh - ¿siempre se comporta igual?
- Si, por desgracia.
- Escúchame "gran príncipe saiyajin", no dudo de tu capacidad como guerrero, solo que, al igual que Gokuh, tienes mucho potencial, y me da rabia ver como un excelente cazador se echa a perder por no explotar todas sus habilidades ¡ESPECIALMENTE TU! - dijo señalando la pequeña cruz plateada que portaba el guerrero.
- ¡¡NO ME DIGAS CAZADOR! ¡¡ Y ESE NO ES ASUNTO TUYO! - grito tomando su dije con el puño, cubriéndolo para que nadie lo viera.
Para no hacerla larga, (N. de. P. S.: - creo que ya es tarde), después de muchos gritos y sombrerazos, Vegeta tuvo que aceptar la ayuda que le ofrecía, o por lo menos que le informara de sus propias habilidades. Le cayo el veinte cuando Angela, sin aviso de ninguna clase, se transformo en un espectacular león gigante que escupía fuego y estuvo a punto de hacerlo pedazos. El príncipe nunca supo si lo hacia por demostrarle lo que se podía hacer o solo por que ya la había hartado y quería darle una lección.
Vegeta no quiso admitir ni para sus adentros que había encontrado lo que le hacia falta al luchar con Angela. Pero notó algo extraño, cuando ella lo lograba dominar, no se sentía molesto contra ella, ni contra él mismo. No sentía esos ánimos de revancha como cuando había perdido la primera vez con Kakarotto, llego a darse cuenta de que en otros días, el que alguien le hubiera vencido en un entrenamiento bastaría para declararlo como su enemigo para toda la vida.
"Los cazadores estamos hechos de Vitalita, energía positiva pura, creación y vida... como ahora esta hecho de diferente manera, eso puede influir en su carácter... eso fue lo que dijo Rachel, y yo no le creí." Pensaba Vegeta mientras peleaba "Entonces ¿es por eso que estoy haciendo cosas raras?" (N de P. S.: raras para él) "En realidad si estaba molesto con esa bruja Leiel, a pesar de que nunca en mi vida la había visto. No destruí a Dared en la primera oportunidad porque sabia que la fuerza del ataque no solo afectaba a ese infeliz, sino que también pude haber lastimado al engendro y a la gente que estuviera alrededor, gente que no tenía nada que ver con la pelea. ¿Es la Vitalita lo que me hizo actuar así?
¿También es lo que me hace... preocuparme por Spawn?
¡No! No puedo dejar que eso me gane. ¿Yo un cazador celestial? ¿Una sabandija miserable que supuestamente lucha por el bien? ¡Que se vayan al diablo!"
Gokuh los miraba entrenar. Por fin pudo apreciar las habilidades de Angela, varias veces, Vegeta ni siquiera la alcanzaba a tocar, ya que sus listones lo impedían.
- ¿Por que no dejas tus listones? Así no es justo - se quejó Vegeta
- ¿No es justo? ¿Por qué?... ¡Ah! ¡ Ya veo! ¡Porque tu no tienes! - (apenas se dio cuenta)
Vegeta: ¬¬U
Gokuh intentó imaginarse a Vegeta rodeado de bonitos listones como los de Angela, pero no le fue posible.
- Oye muchacho - le pregunto el viejo a Gohan - ¿qué sabes de esa linda señorita?
- ¿De Angela? No mucho, creo que es amiga de mi padre, pero apenas ahora que la conozco, el no me había hablado sobre ella.
- ¿Solo amiga? Mmmm.
El supremo Kaioh Sama, decidió darse prisa y antes de que hasta Gokuh se quedara dormido, termino.
- Ya puedes levantarte muchacho
Gohan todavía no se la creía, tampoco nadie más. (N. de P. S: aquí todos tienen cara de "Yaaaaaaa") Claro que el joven Kaioh y Kibito no dudaron ni por un segundo.
- ¿Esta seguro, señor?
- ¿Por que no lo compruebas?
"Ya tengo ganas de verlo" penso escéptico Gokuh, algo extraño para él, recordaba que nunca antes, cuando estaba vivo, había dudado de su hijo.
El joven Supremo Kaioh Sama, Kibito, el engendro y los cazadores lo rodearon con curiosidad, y un poco (la verdad mucho) de escepticismo por parte del trío de locos (ya saben, los que quieren matarse entre ellos). Gohan concentro toda su energía, sus ojos se volvieron verdes, pero no necesito transformarse en super sayajin, todos salieron despedidos hacia direcciones distintas solo con la expulsión de poder.
Él más sorprendido era Gohan.
- ¿Yo hice eso? - pregunto asombrado al detenerse.
- Ehhh... si Gohan - le dijo Gokuh, sacudiéndose el polvo -, ese viejo es mas de lo que aparenta, fue un buen trabajo.
Vegeta también se sorprendió.
"¿Cómo es posible que el holgazán hijo de Kakarotto tenga tanto poder?", pensó el príncipe mientras se levantaba del suelo.
El viejo supremo Kaioh Sama se acercó a Angela. (N. De P. S.: con cara de "ya la hice")
- Ahora que yo cumplí con mi parte del trato, esperaba que usted y yo...
- Claro, claro - le contestó ella -, pero deberá disculparme, tenemos un par de cosas que hacer primero, usted comprenderá.
- ¡¿Qué!
- Gohan, Vegeta, vamonos. Spawn, sácanos de aquí.
Y diciendo, Angela jaló a Gohan y tomo del brazo a Gokuh, los tres se teletransportaron.
- ¡Gracias! - alcanzo a despedirse ella.
- ¿Gracias? ¿Solo gracias? - reclamo indignado el viejo - ¿Y tu muchacho impertinente? ¿Que tienes que decir?
- ¡¿YO! - preguntó Vegeta - ¡Arggg! ¡Esos me dejaron aquí!
A la voz de ya, se teletransporto, dejando al joven supremo Kaioh Sama y a Kibito a calmar al viejo, quien estaba plenamente convencido que se merecía su recompensa en ese instante o antes de ser posible.
Los tres aparecieron en el interior del templo sagrado, luego los alcanzó Vegeta. Cogliostro los recibió.
- Que bueno que ya llegaron, fue más rápido de lo que yo esperaba -.
- Hola viejo, ¿qué ha pasado? - le preguntó Gokuh.
- Afortunadamente nada aun, pero ya no tarda mucho...
Piccolo sintió la energía de Gohan y llego tan pronto como pudo.
- Hola señor Piccolo.
- ¡Gohan! ¡Gokuh!
- ¿Mi mamá y mi hermano están aquí? - pregunto el muchacho.
- Si, todos están aquí - contestó Piccolo con un tono que quería decir que ya estaba harto de ellos -, también esa chica ¿cómo se llama?
- ¿Videl? - Gohan se ruborizo.
- Eeeeeeeeeee - le dijo su padre -. Eeeeeeeee, Videeeeeel ¿quien es y por que no me habías hablado de ella? ¬¬ ¿Tiene algo que ver con que te hayas disfrazado del Gran Payoman?
- ¡Papá! ¡Sayaman! ¡Y este no es el momento para hablar sobre esas cosas! - le reclamo su hijo, rojo como la capa del engendro.
- Lo que sea... (Je, je, je -)
- Me alegra que se diviertan - dijo Cogliostro - ahora ¿pueden ser tan amables de acompañarme?
En un instante, gracias al poder del Conde, se encontraban frente a una especie de enorme grieta en el suelo entre los callejones de las ratas, al mirar al cielo notaron que estaba de color negro, y el viento soplaba tanto que prácticamente los cegaba.
- ¿Que demonios estamos haciendo de nuevo en este lugar? - pregunto Piccolo.
- Es el lugar exacto donde apareció Spawn, podríamos decir que es la entrada al infierno - explicó Cogliostro -. Es un portal que Zarach construyó para llegar aquí.
- ¿Y donde esta ese demonio de porquería? - pregunto Vegeta.
Una voz chillona que salía de la grieta le contesto:
- Pero que grosero. Por el momento el jefe esta ocupado, pero yo con mucho gusto me encargo de atenderlos.
Vieron que de la grieta salía lentamente una figura baja y gorda que Gokuh reconoció de inmediato.
- ¡CLOWN!
- Así es mi pequeño Hellspawn ¿qué es lo que has hecho? te ves un poco diferente de cómo yo te recordaba.
Gokuh rápidamente cambio su forma, las cadenas chasquearon y la capa se extendió.
- Esta mejor, eres un oficial de las tropas de Zarach, que no te dé vergüenza. Es mas, deberías sentirte orgulloso... A pesar de que con eso te ves como la caperucita roja.
De la grieta salía una gran cantidad de energía maligna.
- ¿Que es lo que quiere Zarach, Clown? - pregunto Cogliostro - ¿A qué ha venido a la Tierra?
- El jefe ha decidido empezar su conquista en este preciso momento.
- ¿Por que comienza aquí?
Clown señaló a Spawn.
- En parte tu protegido tiene la culpa.
- ¿¡YO?
- Tu. El señor Zarach ha visto lo que tu puedes hacer, todo el poder que puedes alcanzar. También sabe que te has llevado por delante a algunos de los nuestros. Viene para acá, y aprovechara para asegurarse de que tu cumplas con el destino que te forjaste al hacer el trato
- Eso lo veremos - exclamo Vegeta -, no esta solo, dile a tu jefe que se apure antes de que lo encontremos nosotros
- ¿Quieres decir que lo desafías? ¿Justamente tu?
Clown comenzó a reír, después, la risa se volvió histérica, mientras que detrás de él, de la grieta salía una multitud de demonios y Hellspawns, en medio de una luz verde, sucedió tan rápido que nadie pudo hacer nada. Las criaturas del infierno se extendieron por toda la Tierra y comenzaron el ataque.
- ¡DEMONIOS! - gritaron.
De pronto, en el cielo se vio un rayo de luz, se abrió un portal brillante del que emergió el cuerpo de cazadores al completo, todos con sus armas y armaduras montados en diversos vehículos voladores, listos para hacer frente a la armada de Zarach. Pronto se dispersaron y la batalla comenzó.
