CAPITULO 17
TÚ ERES LA RAZON
DEDICADO A:
USAGI YOJIMBO CHUN-GOHAN
En la Tierra las cosas se ponían muy mal. La confusión reinaba por todas partes, los cazadores atacaban todo lo que se movía, y no les preocupaba mucho las consecuencias, mucha gente fue asesinada al quedar atrapada entre el fuego cruzado. La mayor parte de las ciudades fueron reducidas a escombros y nada parecía poder detener la destrucción. Las bajas aumentaban de los dos lados, de los cazadores y de los demonios. Iban bastante parejos, lo que decidiría el resultado seria la batalla contra el mismo Zarach.
Como añadido, y a pesar de que lo niegue con todas sus fuerzas, Vegeta ahora tenia dentro de si, además del orgullo que siempre lo ha caracterizado, varios de los hábitos de los cazadores. No pudo dejar pasar la oportunidad de quedarse con todas las insignias que pudiera. Piccolo no se explicaba como, en medio de la gravedad de la situación, Vegeta se daba maña y tiempo para poder recogerlas de entre los restos de los Hellspawns y colgárselas del cinturón.
El entrenamiento que tuvo solo y después con Angela le sirvió bastante. Cualquiera al verlo podría pensar que nació con las armas que portaba. Con la habilidad de transformarse en cualquier cosa que deseara y pequeños ataques psíquicos (eso era lo que apenas estaba controlando), cada vez le era más fácil acabar con los Hellspawns.
El viejo supremo Kaioh Sama, su joven sucesor y Kibito, veían las batallas atravez de una esfera de cristal convocada por el anciano ser supremo.
- Antepasado ¿no cree que deberíamos ir a ayudarles?
El anciano no pareció escucharlo. Permaneció silencioso e inmóvil, poniendo especial atención en la batalla que se libraba en los pasajes infernales del hogar de Zarach.
- No creo que sea necesario - dijo, después de una larga reflexión.
La batalla seguía su curso, todo un regimiento de demonios se les dejaron caer con fuerza, cuando, de repente, los atacantes se detuvieron en seco. Un temblor de tierra sacudió las cuevas y los pasillos. Todos los demonios y Hellspawns, prácticamente desaparecieron en el aire y reaparecieron varios metros a lo lejos.
- ¿Que es lo que esta pasando? - pregunto Gohan
- No tengo idea - dijo Piccolo
Del suelo, surgieron unas columnas de fuego que por poco y los rostizan. Grandes grietas se abrieron alrededor de donde se encontraban. De entre las más profundas sombras salió una voz grave y fuerte.
- ¿QUIÉNES SE ATREVEN A MOLESTAR A ZARACH?
" ¿Que demonios... ? " penso Vegeta - ¿QUIEN LO PREGUNTA?
- TU, SER INSIGNIFICANTE ¿EN REALIDAD QUIERES SABERLO?
- ¡Si! ¡ Da la cara!
Y lo vieron. Era un enorme demonio, más grande de lo que se hubieran imaginado, todo él despedía una poderosa energía maligna, su piel parecía hecha de roca verde, en su horrible cabeza sobresalían un par de cuernos y de sus fauces asomaban enormes colmillos, sus ojos refulgían con una luz amarillenta. Su cuerpo parecía el de un león y estaba apoyado en cuatro patas, donde tenia garras gruesas y afiladas, cada paso que daba hacia que todo a su alrededor se estremeciera.
Después se escucho un chirrido ensordecedor que hizo que Vegeta, Gohan y especialmente Piccolo tuvieran la impresión de que su cabeza iba a estallar. Después se escucharon con claridad las palabras:
- MI NOMBRE ES ZARACH
La boca del demonio no se movía en absoluto. Su tremenda cabeza se movió despreciativamente hacia abajo a mirar a los tres guerreros que se habían atrevido a desafiarlo.
"¿Este es Zarach?" se preguntaba Vegeta "Es peor de lo que yo pensaba"
- LOS CONOZCO - dijo el demonio, aun sin mover los labios.
- ¡¿QUE?! - dijeron ellos.
Zarach se río, el sonido de su risa parecía venir de todas partes y de ninguna en particular. Su vista los recorrió uno por uno y al hacerlo se vio una chispa de burla en el fondo de sus ojos amarillos.
- SON GUERREROS MUY VALIENTES, Y MUY ILUSOS SI CREEN QUE PODRAN VENCERME.
- ¡Eso es lo que tu crees! - grito Gohan, aunque comparado con en volumen que podía alcanzar Zarach su grito sonó algo patético - !No te tenemos miedo!
- GOHAN - la voz de Zarach parecía un silbido de serpiente -. GOHAN, ES INCREIBLE LO MUCHO QUE TE PARECES A TU PADRE.
- ¡¿QUE?! ¡NO TIENES POR QUE HABLAR DE MI PADRE DESPUES DE TODO LO QUE HA PASADO POR TU CULPA!
Gohan elevo su Ki, sus ojos brillaron en un resplandor verde oscuro, Piccolo fue él mas sorprendido de que pudiera expulsar esa cantidad de poder sin la necesidad de transformarse en super sayajin.
De los ojos de Zarach salieron dos rayos de luz amarilla que le dieron en el pecho a Gohan, derribándolo.
- ¿QUIERES... SABER... POR QUE... HIZO... EL TRATO? ¡FUE ALGO MUY DIVERTIDO!
- No sabemos ni nos interesa - dijo Vegeta.
Zarach siguió con los ojos la cruz plateada que se balanceaba siguiendo los movimientos de Vegeta.
- VAYA, VAYA ¿QUÉ ES LO QUE TENEMOS AQUÍ? ¡PERO SI ERES TU!
Sus carcajadas aumentaban de volumen de un modo considerable. Su piel de roca brillaba cada vez más. Entre la luz, se empezaron a distinguir figuras. Los tres guerreros vieron entonces como se distinguía el familiar rostro de Gokuh.
Gokuh entrenaba muy duro en el otro mundo, bajo la supervisión de Kaioh Sama. Estaba por alcanzar cierto nivel, que superaría al super saiyajin. Kaioh Sama le llamaba Super Saiyajin fase tres.
En el planeta Gran Kaioh, se la estaba pasando bastante bien, podría decir que el haber muerto en la batalla contra Cell fue lo mejor que le pudo haber pasado.
En el cielo se empezó a formar una espesa masa de nubes negras, algo muy extraño porque generalmente, el clima era mas que excelente. Gokuh detuvo un momento su practica.
- Mira Kaioh Sama ¿Qué es eso?
- Que extraño - le contesto el dios -. Aquí nunca había sucedido algo parecido.
Mientras veían al cielo, a las negras nubes, en el suelo se abrió una pequeña grieta, justo a los pies de Gokuh, en un instante, la grieta incremento su tamaño y de ella salieron unos repugnantes tentáculos de sicoplasma, que atraparon a Gokuh.
- ¿¡QUE!? ¿QUE DEMONIOS ES ESTO?
Gokuh forcejeaba, tratando de liberarse, pero mientras más lo hacia, mas atrapado quedaba, la sicoplasma le cubrió el rostro, ahogando su voz.
- ¡¡GOKUH!! - gritaba Kaioh Sama.
La sustancia lo jalo a la grieta y esa fue la ultima vez que Kaioh Sama supo de él.
Cuando Gokuh recobro el conocimiento, estaba en una oscura cueva. Un tenue resplandor verde fue lo primero que vio. Sentía mucho frío. Intento moverse pero no pudo, estaba atrapado en una especie de amasijo de tentáculos, que inmediatamente reconoció como los que lo habían jalado.
- Por fin despierta el bello durmiente - dijo una voz burlona.
Gokuh miro al lugar de donde salía la voz.
- ¿Quien esta ahí?
- Tengo varios nombres, por el momento llámame Clown - dijo el payaso.
- ¿Qué lugar es este? ¿Qué estoy haciendo aquí?
- Ssshh, el jefe esta por llegar, no querrás causarle una mala impresión ¿verdad?
- ¿Uh?
Unos ruidos parecidos a truenos indicaban la cercanía de Zarach, quien llego mostrando su imponente figura. Gokuh nunca se había sentido tan pequeño e insignificante como cuando lo vio. La voz de Zarach se dejo escuchar.
- ¿ES ESTE, VIOLATOR? ¿ESTE ES EL GUERRERO QUE TRAJISTE?
- Así es señor - dijo el payaso haciendo una profunda reverencia - ¿Qué le parece?
Hubo una breve pausa, Zarach vio a Gokuh directamente a los ojos, Gokuh tuvo la impresión de que de ese modo podía conocer todo sobre él. Su prisión de sicoplasma se volvía cada vez mas fría, tanto que lo hizo temblar.
- ES MUY FUERTE, ES VERDAD - dijo dirigiéndose a Clown y después le dijo a Gokuh -. TE OFREZCO UN TRATO.
- ¡¿QUE?! ¡ESCUCHA, YO NO VINE AQUÍ POR MI PROPIA VOLUNTAD! ¡Y NO VOY A HACER NINGUN TRATO CON NADIE!
- NADIE RECHAZA UNA OFERTA DE ZARACH - dijo este - ¿QUÉ ES LO QUE DESEAS? CUALQUIER COSA YO TE LA PUEDO DAR.
- Lo único que yo quiero es irme de aquí y que me dejes en paz - el maligno poder de Zarach se sentía por todas partes, ahogándolo, Gokuh solo podía sentir algo que nunca había experimentado: claustrofobia y una sensación de profunda angustia.
- PUEDO VER... QUE TU CORAZON ES PURO - dijo Zarach -. ASI QUE, NO PODRE CONVENCERTE TAN FACILMENTE. NI CON RIQUEZAS, NI CON PODER - después se dirigió a Clown -. A PESAR DE LAS INFINITAS POSIBILIDADES DE ESTE GUERRERO, NO ME SIRVE. TRÁEME A ALGUIEN QUE VALGA LA PENA.
Volvió a clavar sus ojos en los de Gokuh.
- Creo señor - se atrevió Clown -, que él mas indicado para traerlo, seria ese otro guerrero, en el que habíamos pensado en primer lugar...
- ¿Que? - pregunto Gokuh.
- Es alguien a quien tu conoces bien ¿o me equivoco?
- VEGETA - dijo Zarach.
Al escuchar esto, Gokuh inclino la cabeza y se estremeció aun más.
"Vegeta".
La energía maligna de Zarach era algo que jamas había creído posible, aunque Gokuh pudiera liberarse no le presentaría una molestia a ese demonio. Muchos pensamientos cruzaron por su mente a toda velocidad. Por alguna razón tuvo la seguridad de que no podría escapar de la situación en la que se encontraba. Por mas que buscaba dentro de si no podía encontrar la fuerza necesaria para oponerse a Zarach. Cada vez lo ahogaba mas esa sensación de desesperación y el frío se incrementaba y lo penetraba hasta los huesos. Todo eso era obra de la sicoplasma que lo rodeaba y trataba de entrar en su cuerpo.
- No - murmuro.
- ¿Que dijiste? - le pregunto ansiosamente Clown.
- Espera Zarach.
Zarach guardo silencio, ansioso de escuchar las palabras de Gokuh.
- ¿Cuál es el trato?
- TU ESTARAS A MI SERVICIO HASTA QUE ME CANSE DE TI, TU ALMA SERA DE MI PROPIEDAD Y A CAMBIO... YO TE DARE PODER. PODER INCREIBLE, NUNCA EN TU VIDA TE LO HABRIAS IMAGINADO.
- ¿Y?
- ¿Y? - Zarach se sorprendió de que le importara mas el destino del otro saiyajin que su generoso ofrecimiento - DEJARE A VEGETA EN DONDE ESTA.
"Vegeta"
- ¿Lo juras?
- PARA MI, UN TRATO ES UN TRATO.
Gokuh alzo la cabeza. Zarach podía sentir el resplandor del corazón puro de Gokuh, definitivamente para este demonio seria una adquisición magnifica. Pero ese mismo corazón impedía que lo poseyera tan fácilmente, para ello necesitaba que el guerrero estuviera de acuerdo.
- ¡SOLO ACEPTA! !DI SI! ¡SOLO DI QUE SI! ¡SI! - lo urgió el demonio.
Una pausa, el saiyajin pensaba. Pensaba en alguien en especial.
- SI - respondió con tono firme Gokuh.
Tan pronto como hablo, la sicoplasma lo cubrió por completo, uniéndose a él. Gokuh pudo sentir como si un millón de agujas de hielo lo penetrara poco a poco. La oscuridad entro por sus ojos, el mal contenido en la sustancia verdosa lo consumía. Grito de rabia y dolor y pronto fue opacado por las carcajadas de Zarach. La sicoplasma formo a su alrededor un maligno capullo del que habría de surgir el nuevo Hellspawn.
- ¡¡¡ESO NO ES CIERTO!!! - rugió Vegeta.
Cerro los puños con fuerza y sacudía la cabeza en una feroz negativa.
- ¡¡Ese imbécil de Kakarotto!! ¿Cómo se le hacer ocurrió semejante estupidez?
- Papá... lo... hizo... por Vegeta.
"Por lo menos el ya estaría más tranquilo, no lo hizo solo por poder, como temía" pensó Piccolo.
Zarach mantenía su actitud burlona ante ellos. De pronto se escucharon unos pasos lentos y una voz cavernosa pero tranquila dijo:
- Así que era eso.
Nota sobre este capitulo: Aquí iba a meter una escena en la que Gohan retrocediera poco a poco hasta dar de espaldas contra una inexplicable cortina. Iba a tropezar y a tirarla descubriendo a un anciano estrafalario, moviendo palancas y botones, que claramente indicarían que estaba manipulando al enorme monstruo (que resultaría ser un monigote de cartón). Después de un silencio embarazoso, el tipo volvería a mirar en los monitores de su escondite y gritaría por un enorme micrófono: "NO LE PRESTEN ATENCION A ESE HOMBRE DETRÁS DE LA CORTINA, YO SOY EL GRAN ZARACH"
