-Ya he estado en muchas operaciones como esta. Son muy al azar, lo entiendo. Pero la última vez uno de mis chicos fue herido gravemente. -Recordaba la vez en que Juugo resultó herido y no fue nada divertido de presenciar o de experimentar, no pondría en riesgo la vida de sus compañeros por una misión en la que irían con los ojos vendados. -Por eso pregunto, ¿Tienen datos concretos sobre el paquete? ¿O esto es a la suerte?

-Un poco de eso, Sgto. Es lo mejor que tengo por ahora. -Respondió la pelirrosa buscando alguna réplica por parte del sargento, pero curiosamente este se quedó callado.

-¿Qué es esa bestia? -Preguntó Suigetsu tratando de desviar el tema mientras señalaba una gran camioneta.

-Puesto de comando campal. -Respondió la pelirosa mientras se acercaba a Suigetsu.

-Esta cosa parece hecha de Legos. -Dijo Juugo provocando la risa de todos.

-Déjame adivinar, este es tu transporte, ¿cierto? -Pregunto Suigetsu.

La pelirrosa sólo respondió con un "Ujum" para afirmar dicha pregunta.

-Tú vas blindada y nosotros iremos sin puertas ni parabrisas.- dijo Suigetsu con decepción mientras señalaba dichas camionetas de dudosa procedencia.

-Sí, pero ustedes tienen armas grandes. -Sakura ladeó su cabeza para mirar hacia uno de los peliblancos. -Sgto. Kotetsu, sus datos muestran que habla árabe y levantino.

Misaki miró a la pelirosa.

-Sí, mándame, pero debería oír mi español. -Respondió provocando la risa de los marines con su coqueteo camuflado.

-Chiste interno. -Aclaró Suigetsu entre carcajadas.

Sakura hizo una mueca y se giró hacia la mujer pelirroja.

-Médico de campo, Karin. Irá en el camión conmigo.

-Sí, señora.

Todos se encontraban poniendo en orden sus equipos.

-Deberían quitarse sus distintivos.

-Esta no es nuestra primera piñata, señora. -Suigetsu pasó por su lado con su distintivo de la bandera estadounidense agitándose en el aire para posteriormente darle un beso.

-¿Cuál es el plan? -Preguntó Shikamaru.

-Ir a la frontera y esperar más datos. -Dijo la pelirrosa.

-Bien. Andando.


Las camionetas pasaron con rapidez por las carreteras rurales de aquel desolado lugar.

-Oigan, ¿Quién es el maldito con pelo de princesa aquí a mi lado? Sin casco, ni equipo mínimo, mirada de cien metros. ¿Qué es esto? ¿El maldito preescolar? -Suigetsu se burlo mientras miraba al castaño con cabello largo a su lado.

-Sí, es una vieja escuela en reserva. -Respondió Sai mientras manejaba.

-¿Y sabe hablar?

-Pregúntale cómo es ser un japonés, quizá responda.

-Ya lo dije. Soy japonés de la cintura para abajo. -Dijo Neji mirando a su alrededor.

-¿Y eso es bueno? -Preguntó Suigetsu.

-Es muy bueno.

-¿Así que te cuelga? -Suigetsu le arrancó carcajadas a los demás en la camioneta.

-Sí, es algo así. -Dijo Sai entre carcajadas.

-Entonces también debo ser japonés. -Suigetsu comenzó a reír al igual que los demás.

-Rayos. Amo a los estadounidenses. -Sai sonrió.

-Es un gran cañón, luego te muestro. -Dijo Suigetsu sacándoles carcajadas a sus compañeros- Él la vio. Juugo la vio.


Un avión aterrizó en la pista de vuelo en Israel y el Senador Minato Namikaze bajo de él, avanzó con rapidez, la preocupación que sentía por saber de su hijo lo consumía, no le había mencionado nada a su esposa Kushina para no preocuparla pero tarde o temprano lo haría y esperaba haber resuelto la situación para entonces.

Era seguido por las personas que esperaban su llegada. Las puertas del aeropuerto fueron abiertas por el personal a cargo dándole paso al apuesto rubio.

-¿Algún progreso? -Preguntó al encontrarse con el Ministro Japonés y el General Hatake.

-Tenemos un equipo con los mejores hombres. -El ministro estrechó su mano en forma de saludo al igual que él peligris.

-Eso no responde mi pregunta. -Minato bajo las escaleras del aeropuerto.

-Creemos que su hijo sigue vivo, Senador, pero fue tomado por Akatsuki. -Dijo el peligris.

-"Creemos". -Dijo el ministro a modo de suposición.

-¿Se contactó? ¿Quieren algo? -El rubio se detuvo y giro para hablarles de frente.

-Aún no. -Respondió el peligris mientras observaba al rubio.

-Necesito una evaluación calificada, ¿cuánto tiempo tiene mi hijo? -Minato retomó el camino.

23: 43: 17 hrs.


Se encontraba inconsciente y medio desnudo, cubierto solo por su bóxer negro. Estaba sujeto por ambos brazos con dos cadenas sujetas al techo. Su cuerpo estaba severamente lastimado y mostraba múltiples heridas por donde brota la sangre. Su cabeza estaba ligeramente inclinada y respiraba con dificultad, en su rostro también se podian observar heridas superficiales.

Abrió sus párpados mientras incorporaba su cabeza y volvía a posar sus pies en el suelo pero sus brazos aún colgaban a los lados de su cabeza.

El enmascarado estaba sentado cómodamente en su silla mientras lo observaba.

-Piloto de F-16. ¿Cuál es tu escuadrón?

-107. -Respondió con dificultad.

El enmascarado se levantó de su silla, se acercó a Naruto y le propinó un golpe en la cara haciendo que brotará sangre de su boca.

-¿No despegaste de Hatzerim? ¡Maldito! Me mientes. ¿Cuál es tu nombre?

-Naruto Uzumaki. 7473458.

-Al menos uno de esos nombres es correcto. -El enmascarado le enseñó el reloj que horas antes portaba con él. -"Para Naruto, con amor, papá".