Fragmentos de Tiempo
Autora: Lian_dana
Tipo: Serie
Disclaimer: Card Captors Sakura es propiedad exclusiva de CLAMP y otras empresas con fines de lucro U_U... Nada de nada. No intento infringir ninguna ley. Y ni quiero, ni me interesa infringirlas. Si estas en contra de una posible relación entre varios personajes como Yue- Clow, Eriol-Tomoyo, o combinaciones, mejor no lo leas. Aceptó de todo, menos virus y cosas dañinas para mi salud y la de mi computadora. No me caería mal un poco de dinero y sus reviews. Espero les agrade.
Dedicatoria: para todo el que lea esto. Para tiE-Mail: lian_dana27@yahoo.com.mx
Nota aclaratoria:
Se que este fanfic es producto de una mente alucinada, pero no importa a lo que iba: esta fanfic fluctúa entre el presente, pasado y futuro, es decir, no lleva una cronología establecida, como tampoco lleva un orden lógico de secuencias como puede estar Tomoyo en el presente y en el siguiente párrafo Eriol en el pasado, trataré de que se siga un orden, he dicho: tratare, no prometo nada. He divido secuencias, escena o como quieran llamarlo con un *, creo que será más fácil de comprender el fic con este pequeño símbolo. Es mi deber aclarar que las escenas pasan del presente al pasado, porque algún personaje esta recordando un hecho de su vida (ok, ya se que esta nota sale sobrando) y después de eso vuelven al presente. Algunos se preguntarán en donde anda el futuro???, ajajajaja, pues anda de parranda, ¬¬U, en los primeros caps, casi no mezclo al futuro como se darán cuenta, he dicho casi... Eso es todo, disfruten del fic!
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Capítulo II Elen
Las cortinas blancas semitransparentes ondeaban ligeramente, mientras una brisa inundaba la habitación. En la cama descansaba una persona, su largo cabello se extendía sobre la
almohada, su respiración era suave. En el balcón una figura plateada miraba al cielo.
*
- ¡Clow, yo te am...!- un dedo se poso en sus labios
- Es hora de dormir
- Pero...
- Shhhhht, vamos a dormir- sonrió
- ¡Yo no quiero dormir!
- ¿No?, ¿Qué quieres hacer?- pregunto gentilmente el mago
- Yo quería decirte... - algo lo interrumpió
Clow había introducido una galleta en su boca, rozando suavemente sus labios con los dedos. El guardián se sonrojo profundamente.
- ¿Te gusta?
Yue masticó y trago la galleta, no estaba mal, sin embargo él no quería comer galletas y le tenía sin cuidado el sabor de este en ese momento, lo que él quería era decirle finalmente que lo amaba y que no le importaría condenarse por toda la eternidad a causa de ese amor.
El ángel plateado se acerco al hechicero, súbitamente abrazo al hombre, este no movía ni un solo músculo.
- Clow- murmuró Yue, las mejillas blancas estaban teñidas de rojo
Clow suspiró el suave aroma del guardián. Una mezcla de fragancias: vainilla, athelas e invierno...
No se sentía capaz de rechazar tanto amor. Tocó suavemente el pelo del joven: sedoso, suave al contacto.
Sucedió...
Yue cerró el espacio, saboreando de nuevo lo agridulce de los labios de su amo. Clow cerró los ojos dejándose embriagar por la luna y el beso prohibido.
- ¡¿Qué estas haciendo, Clow?!- resonó una voz en su cabeza mientras acariciaba el cabello plateado del joven- Acariciando a Yue- contestó- ¡Te mereces el infierno!- Yue lo besó- ¡Ya estoy condenado a él!- se dejo llevar.
Clow empezó a corresponder ese beso inocente, convirtiéndolo en uno más profundo. Yue enredo sus dedos en el cabello negro-azulado del obre, emitiendo un ligero gemido contra los labios del hechicero.
- Muerte, dolor, tristeza... - resonó en la cabeza de Clow- amor, dulzura, comprensión- volvió a oír
La oscuridad lo rodeó, estaba sólo en aquel lugar
- Muerte, dolor, tristeza....
Una imagen paso frente a sus ojos: Yue llorando amargamente
- Amor, dulzura, comprensión....- la voz le era desconocida totalmente a Clow
Otra imagen: unos ojos verdes y pétalos de cerezo.
- Muerte, dolor, tristeza, amor, dulzura, comprensión... Poder tocar lo divino aquí en la Tierra- la voz ceso.
Clow vio frente a sí a Yue llorando, alas de mariposa, una mirada felina fría y distante, una cabellera azabache, los ojos esmeralda, finalmente una flor de cerezo que caía hasta posarse en sus pies, dejándolo de nuevo en la oscuridad.
Se aparto bruscamente del joven, este lo miraba atónito. Las palabras resonaban en sus oídos y las imágenes estaban aún nítidas en sus pupilas.
- Amo... yo...- Clow miró al ángel con sorpresa- si hice algo malo... le pido....
Corto las palabras del muchacho con un movimiento de la mano, no quería que Yue se disculpará por lo sucedido menos que se sintiera culpable por algo que ni siquiera él mismo comprendía.
- Es hora de dormir- su voz no sonaba como él quería que sonara. Era distante, fría, grave.
Yue bajo la mirada, apartándose lentamente del mago y crispando los puños con fuerza. Clow miró la escena sintiéndose miserable...
- Vamos a dormir- dijo tomando entre sus manos la mano de Yue- te llevare a tu habitación- sonrió cariñosamente
Yue no se movía ni un milímetro, sintió de nuevo el calor del cuerpo de Clow y se atrevió a verlo a la cara, este le sonrió, se dejo guiar por esa cálida mano por los corredores y escaleras.
- Buenas noches, Yue-chan- murmuró, para después salir de la habitación.
*
- Yue-san- escuchó que lo llamaban, volteó hacia la voz- Yue-san- una pequeña nota de miedo tenía la voz.
- Aquí estoy, Tomoyo-chan- contestó, mientras entraba a al habitación, contemplando la fina figura que estaba sentada en la cama.
- Pensé que te habías ido- la voz empezaba a quebrársele
- Te prometí quedarme- se sentó al borde de la cama
- Gracias- balbuceo- ¿Quién es Clow?
Abrió los ojos ante esa pregunta. ¿Por qué todo se reducía a una persona: Clow/Eriol?
- Tú no quieres saber quién es Clow sino quién es Eriol, ¿Me equivoco?- Tomoyo negó con la cabeza- no lo sé... esa es la respuesta más sincera que te puedo dar
- En un tiempo creía conocer a las personas- hablo Tomoyo con voz débil- Syaoran, por ejemplo, conocía sus sentimientos, mejor que él; Sakura-chan: despistada pero linda, sincera dulce; Chiharu: con una paciencia increíble; Rika-chan: madura y con una carácter gentil que conquistó el corazón de Tereda; Yamazaki-kun: mentiroso, sí, sin embargo de buen corazón, con una increíble imaginación: Naoko: fantasiosa y soñadora como nadie que haya conocido hasta ahora; Touya- kun: con un complejo de protección hacia Sakura, testarudo y terco, pero dulce y gentil... y tú... Yue-san: indiferente, frío, distante, arrogante, lleno de pasión, amor, dolor, nostalgia, dulzura, nobleza, ¡Una combinación digna de ser entendida!...- hizo una pausa- creía conocer a las personas... legó él y desde ese momento no me siento capaz de conocer a alguien porque nunca llegue a conocerlo a él... -Tomoyo se movió en las almohadas inquieta, como buscando algo- ¿Sabes?, no creo que alguien conozca a Eriol tal cual, como también creo que Clow es un misterio...
Yue la escuchaba en silencio, sin embargo al escuchar nombrar a Clow se agitó en donde estaba sentado.
Estaban en la habitación con la luz apagada, sólo la tenue luz de la luna se filtraba por la ventana.
*
El hombre se levanto del sillón rojo, con paso lento cruzó la habitación. No se molesto en apagar el fuego ni en correr las cortinas de la ventana, sólo camino hacia la puerta de roble, tomo el picaporte y lo giro, un ligero sonido producido por la puerta irrumpió en el silencio de la estancia. El hombre salió, comenzó a caminar por el corredor, este alumbrado por unas cuantas lámparas apostadas a los costados, llego a las escaleras principales y comenzó a subir, levantó la mirada y la encontró ahí.
- Rubymoon- murmuró y la guardiana lo miraba a los ojos con determinación
- Amo... - comenzó ella con voz quebrada
A Eriol le dio un vuelco al corazón al escuchar la voz de su guardiana devastada. No iba a cometer el mismo error del pasado, no estaba dispuesto a hacerlo...
*
Kerberos bostezaba enseñando los colmillos, Yue tenía la cabeza apoyada en el regazo del hechicero parecía somnoliento. Clow leía un libro con interés.
- ¿Estaremos toda la noche en vela?
- "¿Estaremos?", Kerberos deberías irte a dormir de una buena vez si tanto sueño tienes- contestó Yue gravemente
- Cállate- el león le enseñaba la lengua al ángel- Clow, ¿Acaso no puedes leer mañana?
- ¿Por qué no te duermes y dejas de molestar a Clow?
- ¡No quiero!
- Entonces deja de quejarte
- ¡No quiero!- volvió a decir, sacándole de nuevo la lengua al ángel
- ¡Vete!- dijo el guardián perdiendo la paciencia
- Jo, ¿Y dejarlos solos?- señalo primero a Clow y después a Yue con la pata- ¡Naaaaaaah!
Yue estaba a punto de fabricar un par de cristales
- Kerberos, en verdad, ¿No tienes sueño?- hablo su creador por primera vez desde iniciada la discusión entre él y el ángel, de esa forma interrumpiendo los planes de Yue de asesinar al león
- Pues... sí- titubeo Kerberos
- Ve a dormir, en un momento te alcanzare
Kerberos bostezó de nuevo entrecerrando los ojos.
- De acuerdo- acepto para sorpresa de Yue- tengo... mucho sueño- deijo antes de bostezar de nuevo- Hasta mañana...
Con un andar relajado, Kerberos salió del estudio, murmurando unas cuantas palabras que para Yue fueron incomprensibles
- Se ha ido-dijo Yue con cierta sorpresa y Clow tenía una expresión divertida.
Yue apoyo de nuevo su cabeza en el regazo de Clow, este puso el libro en un taburete cercano mientras que su mano se deslizaba por el cabello plateado. Yue cerro los ojos, disfrutando el momento.
Después Yue se levanto y fue hacia la ventana, Clow lo siguió, rodeo la cintura del joven con sus brazos y hundió la cabeza en el cuello del joven.
- Te amo, clow- murmuró Yue, dándose vuelta para quedar frente al hechicero
- Yue...
La luna beso a Clow.
*
- ¡Hola, Rubymoon!- intento que su voz sonará alegre
- Eriol...
- Estoy por salir, no te preocupes por mí, quizá no llegue a dormir- se encamino con pasos rápidos hacia la puerta principal, tomo del perchero una chaqueta y se la puso precipitadamente- ¡Nos vemos!- gritó cerrando la puerta
La guardiana miraba confundida la puerta
- ¡Maldición!- exclamo dándose media vuelta y se dirigió a su pieza.
*
Tomoyo miraba con irritación el techo dela habitación. Yue dormía en la habitación continua, se había ido después de asegurarse de que ella estaría bien .
Ya no vivía en Tomoeda desde 5 años atrás, ahora habitaba una hermosa mansión en Inglaterra por cuestiones de trabajo principalmente. Yukito había venido con ella, ya que con el paso de los años se convirtieron en más que simples conocidos, Yukito/ Yue habia establecido con ella una relación especial.
Tomoyo y Yue solían pasar horas enteras en el salón de la mansión, platicando sobre diversos tópicos, ninguno en particular. A Tomoyo le encantaba poder contemplar la belleza del Ángel y a Yue la fragilidad de la joven... una relación bastante especial.
*
- Bilbo- dijo la chica- un nombre extraño, ¿Tú lo conociste?
- No, sólo su historia- negó con la cabeza- Clow solía hacerme leer libros acerca de la Tierra Media y a mi no me molestaba hacerlo.
Otra noche
- Estel: esperanza- sonrió- es un bonito nombre- hizo una pausa, mirando fijamente a Yue- si tengo un hijo lo llamare Estel- volvió a sonreír
- Y el anillo de Barahir representa el remoto parentesco entre los hombres y los Elfos- finalizó Yue con un brillo en la mirada
- Es fantástico- no pudo reprimir un bostezo, ya era tarde.
- Es hora de dormir- viendo como la joven luchaba por no cerrar los ojos por el cansancio y quedaba dormida en el sillón. Yue la contemplo- es interesante recordar viejas historias que marcaron la vida no sólo de la Tierra Media- murmuró.
Se acercó a la chica y con delicadeza la tomo en brazos llevándola a su habitación.
- Buenas noches, Estrella de la Tarde
*
- Estrella de la tarde- susurró Tomoyo
Yue la llamaba Estrella de la Tarde de cariño, no comprendía bien a bien el por qué de ese apodo cariñoso, algún día le preguntaría. Tenía una vaga referencia: Estrella de la Tarde había sido el amor de Aragorn, un hombre que había participado en la Guerra del Anillo.
Se levanto de la cama, poniéndose unas zapatillas de dormir de color blanco, el camisón de un color lila tenue se arrastró por el suelo, se acerco al balcón sintiendo el aire pegarle en la cara y pecho, el mismo aire que hacia ondear las cortinas, salió al balcón extendiendo los brazos a la luna.
- Libre... ¡Quiero ser libre!- casi grito- libre de estos sentimientos.
*
Eriol vagaba por las calles de Londres, las manos las llevaba dentro de los bolsillos de la chaqueta, de vez en cuando alzaba la vista hacia el cielo. Se dejo caer pesadamente en la orilla de una banqueta, mirando hacia el cielo; las estrellas titilaban alegremente y el suave murmullo del agua de una fuente cercana rompía el silencio reinante. Cerró los ojos y respiro profundamente. Sus labios reflejaban una especie de sonrisa
Remolinos de sentimientos y sensaciones...
- De nuevo- susurró
En una vida ya había cometido un error que le costo caro... ahora, siglos después había vuelto a cometer ese error.
- El hechicero más poderoso de toda la historia, vencido por simples sentimientos... dos veces- murmuró con voz amarga con los ojos aún cerrados.
*
Daidouji se sentó en la banca dejando que el murmullo del agua alejará todos sus pensamientos, levantó la cabeza mirando la copa de un árbol.
- ¿Qué es amor?- preguntó al viento
- ¿Por qué huyes?
- No huyó
- Sí lo haces
- ¿de qué o de quién?
- ¿Por qué huyes de mí?
- Ya te conteste
- No lo haz hecho- empezaba a lloviznar
- Piensa lo que quieras...- corto sus palabras, una voz le taladraba sus oídos
- Muerte, dolor, tristeza- resonaba en sus oídos
- Contesta, por favor.
La mujer lo miraba petrificada y con miedo en los ojos, él no había escuchado nada... La lluvia caía con fuerza...
- ¿Quién eres?- atinó a decir
*
Estaba cansado no había llegado a casa en toda la noche y día, evitando de esa manera a la guardiana lunar, abrió con pesar la puerta de su habitación y con pasos lentos se dirigió a la cama, cayo de bruces sobre ella, con la cara hundida en una de las almohadas.
*
- ¡Bien hecho, Hiragizawa!- lo felicitaron en un corredor de Hogwarts.
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Notas disparatadas de la autora:
En esta ocasión no dire que se me han agotado las ideas (mentirosa!), jejeje, creo que un poco sí, pero la buena noticia es que ¡Aún no me estoy golpeando la cabeza contra el ordenador!, ese ya es un avance. Lamento que este fic sea confuso y demás aberraciones de la mente de esta autora se estén plasmando en el fic, pero qué quieren que yo haga?, jejejeje. A qué soy adorable? Y modesta? Jejeje ^^UU. Se aceptan sugerencias, cajas de tomates, lechuga y demás, quizá pueda hacerme una ensalada estilo César! Jiji, comentarios, críticas (constructivas), regalos, Elfos perdidos (Légolaaaas!!!!!!!! +_+), Fox, Mulder, Tom Cruise, Sirius Black, mangas, Oliver Wood, Daniel Radcliffe, entre otras personalidades también se aceptan, fanfics, muchos fanfics......No se aceptan: cartas bomba, e-mails no productivos, lunáticos, paranoicos, cebollazos y saludos a mi madre. Sin más que decir, me despido. Se me olvidaba FELICES FIESTAS DECEMBRINAS!!! Ups! Creo que soy yo la que ya esta alucinando. @_@ no le hagan caso a lo último jejeje.
Última nota aclaratoria:
Se hace referencia a:
· El Señor de los Anillos. J.R.R. Tolkien
· Harry Potter. J.K. Rowling (espero haberlo escrito bien)
· Elizabeth, la reina virgen 1998
Glosario:
· Athelas: sinónimo de hojas de reyes o asèa aranion. El olor de las hojas de athelas tienen una frescura vivificante. La fragancia "recuerda una mañana de rocío, a la luz de un sol sin nubes, en una tierra en que el mundo hermosos es apenas una imagen fugitiva" S.R.R. El Retorno del Rey
· Elen: estrellas, élfico quenya
· Elfos: gente hermosa, según Tolkien y su mitología
· Estel: esperanza. Uno de los tantos nombres de Aragorn.
Nota casi olvidada:
Ya se imaginaran quien o debo decir quiénes? Se integraran al fic, verdad?. Son locuras mías, locuras, locuras.....
Loca por tus besos,
Loca de pasión,
Loca tú me tienes.....
Shalalala, estoy delirando, también omitan esos versos o lo que sean, ups! Creo que es una canción... ¬¬ UUU
