Por: Jenny Anderson
Len Tao ojeaba los reportajes que estaban en la hemeroteca, tenia cara de fastidio pero acompañaba a su amigo Horo, a quien se le habían metido ideas un tanto extrañas en la cabeza, no sabia que a muchos kilómetros otra persona pensaba darle aun más noticias extrañas.
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-Así que esta pasando de nuevo"- Dijo una voz grave
-"Si, me preocupa padre, mi hijo se encuentra en ese lugar"-
-"Así tenia que ser, Hen(N/A: Así se escribe)Len tiene que estar ahí"-
-"No me gusta nada padre, esa persona es mucho más astuta que Len, no por que mi hijo no sea bueno, si no por que hay décadas de diferencia"-
-"Hen, tengo que decirte que jamás pensé que el regresara hace 30 años fue vencido por nuestra familia y lo dimos por muerto pero ahora a regresado con más fuerza que antes"-
-"Si, y tu no me dejas ir a advertirle a mi hijo lo que esta pasando"-
-"No puede hacer nada, hasta que ese chico Hao Asakura no se entreviste con ellos"-
-"jamás pensé que un Kyôyama siguiera con vida"-
-"Yo tampoco pero esto nos da una oportunidad más, por que el tampoco lo esperaba, y estoy seguro que anda con la guardia baja"-
-"No deberíamos fiarnos tanto de ella, después de todo no fue criada como debía ser"-
-"Lo tiene en la sangre, como Len, cuando llegue el momento el tendrá que enterarse de la fuerza espiritual que nuestra familia posee"-
-"No creo que lo acepte, así nada más"-
-"tendrá que, después de todo, ninguno de nosotros Eligio ser lo que somos"-
El viento empezó a soplar fieramente, los enormes ventanales que poseía la mansión se cimbraron unos instantes, antes de que una sirvienta entrara al salon
-"El joven Hao Asakura lo busca, señor Hen"-
-"Hazlo pasar"-
Unos instantes después el chico de largos cabellos entre a la habitación, su semblante era tranquilo, el aura que lo rodeaba era extremadamente pacifica, a su lado Lyserg miraba todo detenidamente
-"Ustedes deben saber por que estoy aquí"- Dijo a la vez que Hen Tao, le hacia un seña con la mano para que se sentara
-"Lo imaginamos Joven Asakura"-
-"Estoy muriendo"- Dijo tranquilamente con una sonrisa como si tal asunto fuera el ultimo de su problemas -"Y eso solo aumentaría el poder de nuestro enemigo"-
-"Disculpe si lo interrumpo pero.. es que el parecido entre el y usted es increíble"-
-"Así lo cree?"-Contesto con voz divertida
-"Si, así lo creo"-
-"Seguramente es verdad, yo no tengo el gusto de conocerlo, o al menos no soy capaz de recordarlo, pero si tengo entendido, el debe tener mi edad, es una lastima, era muy joven"-
-"Como usted si no logramos matarle antes de que su enfermedad se lleve su fuerza"-
-"ESo no pasara, pero que descuidado soy no les he presentado a mi amigo el es Lyserg Diethel, el domina el arte de la radiestesia, o la dominaría si no hubiera decidido convertirse en detective"-
-"En eso se parece a mi hijo"- Murmuro Hen Tao mirando al chico
-"Y cual es su interés señor Diethel en este asunto"-
-"Ayudar a mi amigo en lo que pueda"- Contesto este mirando cariñosamente a Hao
-"La amistad es un gran tesoro, pero no creo que con eso lo derrotemos"-
-"Estoy de acuerdo tengo entendido que tiene a 3 personas que le ayudan, y que se consideran sus amigos"-
-"No puedo creer como una persona como él, puede tener amigos"-
-"Señor, si el es capaz de hacer amigos, será mucho más difícil de derrotar"- La voz de Lyserg se hizo notar haciendo que ambas personas maduras lo miraran un poco asombrados
-"Joven Diethel, no debe dejarse llevar por el carácter aparentemente amable, ni tampoco por su semblante pacifico por que la única verdad es la que yo le narrare"- El anciano sonrió provocando una risita de diversión de Hao y un suspiro de resignación de Hen
-"Fue hace 40 años, yo era un joven de su edad y mi padre me entrenaba para ser la nueva cabecilla de la dinastía, no es ningún secreto que nuestra familia, a acecinado a mucha gente para lograr la estabilidad del país, para ese tiempo llego a las puertas de nuestra casa un chico y su padre el joven no podía tener más de 12 años, su padre ya era un hombre de edad, se nos presentaron como miembros de la familia Kyôyama, nosotros habíamos oído de ellos, había grandes sacerdotisas y grandes chamanes, que en ese tiempo habían empezado a tener un menor respeto, nos contaron lo que los traía hasta nuestras tierras, perseguían a un hombre, que había matado a la madre y esposa de aquellos hombres, hasta ese punto su relato no nos pareció nada del otro mundo, pero entonces empezaron a contarnos que aquel hombre poseía el espíritu de un antiguo samurai y que el mismo era un demonio y que venia de la familia Asakura, la familia Asakura era reconocida por los grandes Chamanes que tenia, nos contaron que ese hombre no era un chaman ordinario que era un No muerto, y que era muy peligroso por que se adueñaba de la muerte y esta actuaba a su voluntad, cuando aquel demonio se presento ni siquiera yo podía creer lo que esos hombres habían dicho, pues el chico era una hombre de mi edad, con una sonrisa de inocencia y paz que nadie se imaginaba de lo que era capaz, combinando el poder de su espíritu y su fuerza por ser un no muerto, nos encontró desprevenidos y.... "- Se detuvo para dar más emoción a su relato, el cual solamente Lyserg escuchaba por que los demás, estaba charlando entre ellos -"acabo con 5 de nuestro hombres, hasta que una plegaria de los Kyôyama libero su espíritu, hasta la fecha creímos que jamás regresaría, pues aun con su fuerza, sin su espíritu seria muy absurdo querer vencernos"-
-"Ya entiendo, pero si una plegaria logro liberar al espíritu, no podría otra regresarlo"-
-"No queda nadie que sepa esas plegarias, los Kyôyama han acabado"-
-"Pero aun queda una no?"-
-"Ella no sabe nada de las plegarias, fue criada lejos de todo eso"-
-"Talvez tenga razón"-
-"Joven Hao se ve cansado pase a una habitación a descansar"-
Ambos jóvenes se quedaron solos en una lujosa habitación, fue Lyserg quien rompió el silencio
-"Sabes, me parece increíble como el destino jugo con ustedes"- al notar la mirada de incomprensión de su amigo continuo-"Me comentaste que conociste a Anna en el Kinder Garden y no tenias idea de quien era en realidad por que ella era una Anderson, después se reencuentran en la secundaria, donde por cierto también conoces a Len Tao, yo más bien creo que el destino los quería juntos para acabar con él de una vez por todas"-
-"Es gracioso que comentes lo del destino Lyserg"- La voz de Hao tenia un toque de misterio -"Por que he estado pensando que, si él tiene amigos, estos deben también tener cierta conexión con su vida"-
-"Hao, fuera de que el es de tu familia, no te da miedo parecerte tanto"-
-"Ja, la verdad es que si, pero no es algo para andar divulgando por el momento la que me preocupa es Anna, y esa carta que tengo que entregarle"-
-"Sabes, yo más bien creo que tu abuela no te dijo toda la verdad y esperas que en esa carta que escribió a tu amiga se te revelen más cosas o me equivoco"-
-"No, la verdad es que creo que hay algo más, algo que se centra en Anna, y supongo que solo ella podrá quitarme estas dudas"-
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-"No te das cuenta que mi vida ya no tiene sentido, sin ella" – Fausto miraba suplicante al chico que estaba frente a ella
-"Pero lo que me pides, es muy arriesgado, no podrás reunirte con ella, por que nuestra vida es mucho más larga que la de los demás"- Dijo el tranquilamente mirándolo compasivo
-"No me importa Yoh, vengare la muerte de Elisa, aun siendo un no muerto"-
-"Bien fausto es lo que has decidido, pero no habrá vuelta atrás"- Se inclino sobre el y …
Notas de la autora:
Otro capitulo más espero que este esté entendible, y que empieza a aclarar las dudas que tengan, ya saben criticas y comentarios, manden un review que la verdad me ayudan mucho para componer la historia.
"Entre Tu y yo"