RECUERDOS DE USAKO....
"Esa noche"
Habían pasado 6 meses desde la llegada de Usako, la escuela terminaba
trayendo consigo, la graduación y la fiesta que, con tantas ansias, habían
esperado...
Durante la fiesta en la casa de uno de los estudiantes, muchas parejas
desaparecieron del lugar y fueron al hotel más cercano... sólo una pareja
era algo singular, nuca nadie lo habría imaginado y nunca lo comentarían.
Una chica de cabellos ondulados, engalanada con un vestido color lila y sin
mangas con unas delicadas sandalias rosa, y un chico con una coleta,
vestido con una camisa china blanca y unos pantalones negros... una extraña
pareja que camina furtivamente a un hotel... extraño... muchos creen y
saben que solo son "amigos"... o eso suponen...
En el hotel...
Se observan 2 siluetas en una hermosa habitación, una suite matrimonial
cubierta de pétalos de rosa e iluminada por cientos de velas puestas
alrededor en pequeñas lámparas especiales para ellas...
Por la ventana, entra la luz de la luna llena, y las estrellas brillan en
su máximo esplendor, como si profetizaran la unión inevitable de dos
jóvenes que se aman en secreto... 2 jóvenes que, al estar frente a frente,
comienzan a dudar de lo que van a hacer... pero y si... ¿Y si nunca más se
presenta la oportunidad y algo los aleja? Todo está confuso... Sólo ellos
pueden decidir...
Ranma: Usako, tú sabes que...
Usako: shhh... lo sé, yo también, pero tú y yo sabemos que no somos el uno
para el otro, no es nuestro destino...
Ranma: lo sé, pero... solo por hoy, solo por esta noche olvidemos nuestro
destino... por favor, quiero tenerte dentro de mí, quiero que seas la
primera en mi vida... tú sabes que quiero a Akane, pero es distinto...
Usako: Ranma, yo... te entiendo, sé lo que sientes...
Ranma: esta noche, seremos solo tú y yo...
Usako: (para sí misma) Y nuestra hija...
Ranma: (besándola) Te amo, Usako... Solo por esta noche, seremos tú y yo...
Usako: mañana deberemos volver a nuestras vidas...
Luego de este pequeño dialogo, Ranma se acercó a la joven lentamente... con
dulzura tomó su rostro y lo acarició, mientras le regalaba una sonrisa
llena de amor y seguridad... Usako temblaba bajo las dulces caricias de su
fugaz amante. De manera amorosa, el joven comenzó a besarla... primero en
los labios, luego en el cuello, siguiendo por los brazos hasta llegar a la
punta de los dedos de la chica...
Ella, por su parte, dejaba que el joven amante la acariciara sin
perjuicios.
Delicadamente, él le desabotonó el vestido y ella quedó en ropa interior...
ella lo miró un tanto avergonzada, pero Ranma la miraba con tal admiración,
que perdió todo tipo de timidez. En vista de esto último, ella tomó su
turno y comenzó a besarlo y, a la par, lo desvestía con cada una de
aquellas dulces caricias...
Casi desnudos cayeron a la cama, en donde siguieron su juego sexual por un
mediano lapso de tiempo... él la besaba subiendo y bajando por todo su
cuerpo sin dejar mayor opción para ella, que solo gemir de excitación por
aquella muestra de amor que él le propinaba... lentamente, bajaba por su
cuerpo dejando una estela de besos por su estilizada figura y, finalmente,
llegó a la última prenda... aquellas bragas que hoy, para ambos,
significaban un estorbo, el límite entre la amistad y el amor escondido...
Ranma miró a Usako, mostrándole una sonrisa maliciosa, para luego comenzar
a darle pequeños besos en el ombligo y al retomar su camino de nuevo...
mientras descendía, dibujaba la silueta de las bragas con su lengua,
haciendo que la joven ardiera cada vez más, debido a la pasión que esas
caricias lograban...
Ranma, por favor...mmm - suspirando - n-n-n-no juegues... ¡Ahhh!
¿Por qué no?... - dijo, poniendo cara de niño malo.
Con solo una mirada a los ojos de la chica, supo que podía continuar, por
lo que se dio a la tarea de explorar con devoción aquel lugar que por meses
le había estado prohibido y, sin embargo, había deseado con todo su ser...
Antes de que pudiera continuar, ella lo tomó por los hombros y lo recostó
en la cama...
Ahora me toca - le dijo, susurrándole al oído...
Ranma solo atinó a mirarla sorprendido, pero luego solo pudo dedicarse a
disfrutar del placer que cada caricia le proporcionaba... ella, sin ningún
preámbulo, comenzó a besarlo por debajo del ombligo, tomando entre sus
manos el pantaloncillo que el joven llevaba... a medida que besaba, bajaba
la prenda del chico... sus besos, se encontraron con la virilidad de su
amante, pero ella solo lo besó dulcemente y subió hasta la boca de Ranma,
para continuar con su romance...
Él la dejó tendida en la cama, y se puso sobre ella... sin embargo, la duda
comenzó a rondar en su mente...
¿Estás segura de esto? Aún podemos detenernos...
Sí... - susurró Usako...
Él comenzó a entrar en ella con mucha delicadeza, haciendo que sus cuerpos
y sus corazones se unieran para siempre, ahora ya nada los separaría...
aunque ellos no estuvieran juntos toda la vida, siempre serían el o la
primera en la vida del otro...
Esa noche se amaron como si la vida se les fuera a terminar... se amaron
con pasión y con deseo... con amor y ternura... como si solo ellos
existieran y la noche nunca fuera a acabar...
Al llegar la madrugada, se durmieron abrazados... él protegiéndola, ella
amándolo...
Por la mañana...
Hola, preciosa...
Hola... - sonriéndole
Deberíamos vestirnos y partir...
Ranma, yo no quiero...
Lo sé, yo tampoco quiero irme... quisiera pasar el resto de mis días
contigo...
Calla... sólo ámame una vez más...
La chica no tuvo que repetirlo 2 veces, simplemente la miró y se acercó a
besarla con mucho amor... una vez más se dio a la tarea de besarla entera,
cada una de sus curvas y cada uno de sus montes, mientras ella gemía de
placer deseando que él jamás se detuviera... lentamente volvió a entrar en
ella, alcanzando los 2 el éxtasis en el mismo momento...
Nunca se olvidarían, se amaban...
Él volvió a casa y ella se fue a su hotel, sus caminos se separaron... el
destino les preparaba nuevas pruebas y las deberían afrontar...
FIN
Esta es una historia basada en el fic "La verdad siempre sale a la luz",
así que no me maten porque Ranma me ama... jijijiji...
"Esa noche"
Habían pasado 6 meses desde la llegada de Usako, la escuela terminaba
trayendo consigo, la graduación y la fiesta que, con tantas ansias, habían
esperado...
Durante la fiesta en la casa de uno de los estudiantes, muchas parejas
desaparecieron del lugar y fueron al hotel más cercano... sólo una pareja
era algo singular, nuca nadie lo habría imaginado y nunca lo comentarían.
Una chica de cabellos ondulados, engalanada con un vestido color lila y sin
mangas con unas delicadas sandalias rosa, y un chico con una coleta,
vestido con una camisa china blanca y unos pantalones negros... una extraña
pareja que camina furtivamente a un hotel... extraño... muchos creen y
saben que solo son "amigos"... o eso suponen...
En el hotel...
Se observan 2 siluetas en una hermosa habitación, una suite matrimonial
cubierta de pétalos de rosa e iluminada por cientos de velas puestas
alrededor en pequeñas lámparas especiales para ellas...
Por la ventana, entra la luz de la luna llena, y las estrellas brillan en
su máximo esplendor, como si profetizaran la unión inevitable de dos
jóvenes que se aman en secreto... 2 jóvenes que, al estar frente a frente,
comienzan a dudar de lo que van a hacer... pero y si... ¿Y si nunca más se
presenta la oportunidad y algo los aleja? Todo está confuso... Sólo ellos
pueden decidir...
Ranma: Usako, tú sabes que...
Usako: shhh... lo sé, yo también, pero tú y yo sabemos que no somos el uno
para el otro, no es nuestro destino...
Ranma: lo sé, pero... solo por hoy, solo por esta noche olvidemos nuestro
destino... por favor, quiero tenerte dentro de mí, quiero que seas la
primera en mi vida... tú sabes que quiero a Akane, pero es distinto...
Usako: Ranma, yo... te entiendo, sé lo que sientes...
Ranma: esta noche, seremos solo tú y yo...
Usako: (para sí misma) Y nuestra hija...
Ranma: (besándola) Te amo, Usako... Solo por esta noche, seremos tú y yo...
Usako: mañana deberemos volver a nuestras vidas...
Luego de este pequeño dialogo, Ranma se acercó a la joven lentamente... con
dulzura tomó su rostro y lo acarició, mientras le regalaba una sonrisa
llena de amor y seguridad... Usako temblaba bajo las dulces caricias de su
fugaz amante. De manera amorosa, el joven comenzó a besarla... primero en
los labios, luego en el cuello, siguiendo por los brazos hasta llegar a la
punta de los dedos de la chica...
Ella, por su parte, dejaba que el joven amante la acariciara sin
perjuicios.
Delicadamente, él le desabotonó el vestido y ella quedó en ropa interior...
ella lo miró un tanto avergonzada, pero Ranma la miraba con tal admiración,
que perdió todo tipo de timidez. En vista de esto último, ella tomó su
turno y comenzó a besarlo y, a la par, lo desvestía con cada una de
aquellas dulces caricias...
Casi desnudos cayeron a la cama, en donde siguieron su juego sexual por un
mediano lapso de tiempo... él la besaba subiendo y bajando por todo su
cuerpo sin dejar mayor opción para ella, que solo gemir de excitación por
aquella muestra de amor que él le propinaba... lentamente, bajaba por su
cuerpo dejando una estela de besos por su estilizada figura y, finalmente,
llegó a la última prenda... aquellas bragas que hoy, para ambos,
significaban un estorbo, el límite entre la amistad y el amor escondido...
Ranma miró a Usako, mostrándole una sonrisa maliciosa, para luego comenzar
a darle pequeños besos en el ombligo y al retomar su camino de nuevo...
mientras descendía, dibujaba la silueta de las bragas con su lengua,
haciendo que la joven ardiera cada vez más, debido a la pasión que esas
caricias lograban...
Ranma, por favor...mmm - suspirando - n-n-n-no juegues... ¡Ahhh!
¿Por qué no?... - dijo, poniendo cara de niño malo.
Con solo una mirada a los ojos de la chica, supo que podía continuar, por
lo que se dio a la tarea de explorar con devoción aquel lugar que por meses
le había estado prohibido y, sin embargo, había deseado con todo su ser...
Antes de que pudiera continuar, ella lo tomó por los hombros y lo recostó
en la cama...
Ahora me toca - le dijo, susurrándole al oído...
Ranma solo atinó a mirarla sorprendido, pero luego solo pudo dedicarse a
disfrutar del placer que cada caricia le proporcionaba... ella, sin ningún
preámbulo, comenzó a besarlo por debajo del ombligo, tomando entre sus
manos el pantaloncillo que el joven llevaba... a medida que besaba, bajaba
la prenda del chico... sus besos, se encontraron con la virilidad de su
amante, pero ella solo lo besó dulcemente y subió hasta la boca de Ranma,
para continuar con su romance...
Él la dejó tendida en la cama, y se puso sobre ella... sin embargo, la duda
comenzó a rondar en su mente...
¿Estás segura de esto? Aún podemos detenernos...
Sí... - susurró Usako...
Él comenzó a entrar en ella con mucha delicadeza, haciendo que sus cuerpos
y sus corazones se unieran para siempre, ahora ya nada los separaría...
aunque ellos no estuvieran juntos toda la vida, siempre serían el o la
primera en la vida del otro...
Esa noche se amaron como si la vida se les fuera a terminar... se amaron
con pasión y con deseo... con amor y ternura... como si solo ellos
existieran y la noche nunca fuera a acabar...
Al llegar la madrugada, se durmieron abrazados... él protegiéndola, ella
amándolo...
Por la mañana...
Hola, preciosa...
Hola... - sonriéndole
Deberíamos vestirnos y partir...
Ranma, yo no quiero...
Lo sé, yo tampoco quiero irme... quisiera pasar el resto de mis días
contigo...
Calla... sólo ámame una vez más...
La chica no tuvo que repetirlo 2 veces, simplemente la miró y se acercó a
besarla con mucho amor... una vez más se dio a la tarea de besarla entera,
cada una de sus curvas y cada uno de sus montes, mientras ella gemía de
placer deseando que él jamás se detuviera... lentamente volvió a entrar en
ella, alcanzando los 2 el éxtasis en el mismo momento...
Nunca se olvidarían, se amaban...
Él volvió a casa y ella se fue a su hotel, sus caminos se separaron... el
destino les preparaba nuevas pruebas y las deberían afrontar...
FIN
Esta es una historia basada en el fic "La verdad siempre sale a la luz",
así que no me maten porque Ranma me ama... jijijiji...
