Buenas horas Medio Mundo.
Admito que tengo un par de fics que continuar y les prometo que lo haré (en caso de que uno de esos lectores esté aquí presente), pero no pude evitar querer iniciar algo nuevo en un nuevo fandom. Pero como dije, continuaré con las "Versiones KOF de películas" cuando pueda (osea, cuando tenga ganas, que no es siempre).
La idea de escribir esta historia fue inspirada por los dibujos de una artista de Deviantart, KitareHamakura, este universo lo creó ella por lo que el crédito le pertenece, yo solo estoy escribiendo una historia basado en su trabajo... además tengo su permiso.
Con todo eso dicho, a darle.
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Capítulo 1.
¿Qué decir de la vida actualmente? No tengo queja alguna. Corro junto al viento y disfruto de su suave caricia en mi rostro, la hermosa vista del paisaje a mi alrededor y el cielo perfectamente adornado con nubes; en resumen: un día excelente.
—Supongo que ya corrí bastante, hora de volver. — procedí a acelerar y dar un giro abierto de 180° grados para volver por donde vine. No tenía apuro realmente pero en trece minutos tenía que reunirme con Cream y prefiero que me sobre tiempo.
No busco romper ningún record personal ni nada, pero a veces siento que puedo correr más rápido que el día anterior, tal vez se deba a mis constantes salidas a campo abierto que sirven como una sesión de entrenamiento, o quizas el viento sopla a mi favor mas fuerte cada día, o puede que sea solo mi imaginación, pero sea como fuere no me quejo, es más, lo agradezco.
Durante el trayecto divisé una humareda que no había visto antes... y eso solo significaba una de tres opciones:
Opción 1: Unos campistas olvidaron apagar una fogata y ahora se estaba extendiendo.
Opcion 2: Un accidente de algún tipo empezó un pequeño incendio y es probable que hayan vidas en peligro.
Opcion 3: Badniks causando problemas.
—Sea cual sea será mejor investigar. — y opté por desviarme, la fiesta de té tendría que esperar un poco.
Apenas llegué se confimó mi sospecha, eran Badniks que estaban incendiando un par de árboles, ¿la razón? Ni idea pero esa no es excusa para no hacer nada. Acabé con los siete robots que habían, eché un vistazo a mi alrededor y luego de apagar el fuego echándole tierra procedí a explorar el terreno por si habían mas máquinas de Eggman, con algo de suerte encontraría una pista del objetivo actual del "Cara huevo".
Revisé el área por completo, de arriba a abajo pero no encontré nada.
—Esto plantea preguntas.— Entonces recordé a Cream y verifiqué la hora, faltaban dos minutos para reunirme con ella —Mejor me apuro, luego le informo lo que ví. — tomé posición de carrera y aceleré a tope.
No me tomó casi nada llegar a la casa de la conejita, y tampoco es muy dificil distinguirla por suerte: un taller casi tan grande como la propia casa sobresale de su estructura, seguido de un par de antenas con forma de orejas le dan un toque avanzado y adorable a la vez... eso sin contar el hecho de que es la única casa en los alrededores, estando muy alejada de la villa. Aún recuerdo la principal razón de su construcción y fue por un par de accidentes que ocurrieron en el pasado, sin olvidar tampoco el tamaño de varias de sus creaciones, su trabajo no podía continuar estando rodeada de vecinos y con un patio relativamente pequeño, por lo que Cream tomó la decisión de construir su propia casa-taller en un lugar alejado de sus vecinos por razones de seguridad, pero no demasiado lejos de su madre, pues aún seguía siendo una niña.
Frené en seco una vez que llegué a la puerta del frente.
"Toc toc toc"
Llamé esperando que contestara. En respuesta alcancé a escuchar el ruido de metales golpeándose entre sí, como si alguien los moviera con fuerza.
—Un momento. — la escuché decir antes de que abriera la puerta —Ah, hola Amy ¿qué te trae por aquí?
—¿Cómo que "qué me trae por aquí"? vine por la fiesta de té, ¿no era a esta hora? — genial, ¿me equivoqué de hora...?, ¿... o de día?
—¿Fiesta de té? — preguntó ella mientras trataba de recordar; al parecer no fui yo la que se olvidó. Entonces reaccionó alarmada confirmando mis sospechas —¡Ay es verdad, la fiesta de té! — exclamó antes de entrar de nuevo a su casa dejando la puerta abierta.
—¿Puedo pasar? — pregunté mientras la veía acomodar el desorden que ocupaba parte de la sala —(Si va a guardar sus artilugios por cualquier parte ¿para qué necesita un taller?)
—Claro claro, pasa. — dijo antes de terminar de guardar todo en unas cajas. Se sacudió el polvo de su overol naranja y se dirigió a la cocina —Por favor siéntate.
Le hice caso y me senté. Aproveché para observar a mi alrededor; la verdad, no me deja de sorprender que pese a tener casi 11 años sea tan capaz de vivir sola.
—Entonces... — comencé a hablar antes de que me interrumpiera llegando con una bandeja de galletas y un té recién calentado.
—Lo siento, en serio lo siento pero me olvidé de nuestra reunión de fin de semana por culpa de un proyecto en el que estoy trabajando. — sirvió el delicioso líquido en las tazas y me pasó una a mi —Es realmente demandante y está ocupando gran parte de mi tiempo.
—Tranquila, no estoy enojada; un fin de semana sin reunión no nos hará daño, tampoco quiero obligarte. — intenté evitarle la culpa mientras tomaba de mi taza, definitivamente su té es de primera categoría —Además, encontré algo intrigante de camino aquí: siete badniks intentando iniciar un incendio.
Afortunadamente, Cream se olvidó del tema en el que estabamos para prestarle atención a lo que acababa de decir. Si bien no era mucho, le resumí lo que me había pasado recientemente.
—Eso es raro, ¿segura que no habían mas? —preguntó luego de que terminase de hablar.
—Segurísima, recorrí toda el area y no encontré nada, ni siquiera tiene sentido.
Vi como se puso pensativa, seguro buscando una respuesta lógica.
—A lo mejor estaban defectuosos... o sin órdenes, recuerda que Eggman no ha vuelto a aparecer desde hace seis meses. — dijo antes de comer una galleta.
—No lo creo, salvo por el intento de incendio se comportaban como siempre.
El silencio reinó por unos minutos, esperaba que Cream tuviese alguna idea porque a mi no se me ocurría ninguna. Entonces se levantó de la silla, me hizo un gesto de que esperara y se dirigió a su taller en busca de algo. Como era costumbre, el sonido de metales y demás chatarra siendo desparramada de un lado a otro se hizo presente ¿Por qué no se pone a ordenar de mejor manera? Regresó luego de unos minutos con dos aparatos, una especie de escaner y algo que parecía una cámara.
—Llévame a ese lugar, tal vez encuentre algo que se te escapó.
Sonreí divertida ante sus palabras.
—¿Me estás diciendo tonta? — pregunté viendo como mi mejor amiga reaccionaba nerviosa.
—Ay perdón, no quise decirlo en ese sentido. Pero tienes que admitir que se te suelen escapar muchos detalles.
—Cierto. — le dí la razón, entonces recordé lo que había ocurrido la semana pasada y sentí algo de frustración —No es lo único que se me escapa.
Pude oir la risa contenida de Cream antes de salir de la casa. Una vez afuera me estiré, acomodé mis púas ajustando la cola de caballo que las sujetaba, y luego de tomar en brazos a Cream procedí a acelerar.
A decir verdad, me considero alguien dificil de enfadar, pero hay cosas que en verdad me frustran como por ejemplo que se derrita mi helado, sobre todo si es de fresa; el desorden es tolerable hasta cierto punto, cada que entro a la casa de Cream tengo que aguantar mis ganas de ordenarlo todo. Pero hay algo que en serio logra frustrarme y es el hecho de que Sonic, mi amado paladín azul siempre encuentre la forma de evadirme. No lo culpo, cuando lo conocí sentí un flechazo tan fuerte en mi corazón que creí que explotaría, fue como si hubiese corrido diez millas, tres veces en el mismo instante y cuesta abajo, una sensación de adrenalina impresionante que me llevó a querer estar a su lado tanto como me fuera posible, y considerando que Metal Amy lo había secuestrado un par de veces pues, era mi oportunidad. Sin embargo, luego de varios momentos que, admito fueron muy infantiles de mi parte, él me dijo que no se sentía cómodo con mis muestras excesivas de amor. Desde entonces decidí darle su merecido espacio pero no por eso dejaría de intentar acercarme, aunque desde hace casi ocho meses siento que Sonic siempre se las arregla para trazar una línea entre ambos que no puedo cruzar y eso me frustra... bastante, de hecho.
—Emm, Amy... ¿no me dijiste que era en ESE sector?
Escuché a Cream logrando que volviese a la realidad, volteé a verla y noté que señalaba hacia mi izquierda. Estaba tan metida en mis pensamientos que no me fijé que me había pasado de largo.
—Uy, mi error. — dije y enseguida corregí mi ruta sin perder velocidad.
Llegamos al lugar que le habia mencionado y todo permanecia tal cual como lo dejé, con badniks destruídos y el rastro de un incendio que apenas pudo iniciar.
—Lo primero será escanear la zona, y dado que los ojos y oídos no siempre son confiables... — estiró su mano derecha hacia mí, entregándome el escaner —Pulsa el botón y luego revisa el lugar, si hay alguna señal electromagnética, el escáner lo detectará.
—Osea, que si detecta algo... ¿se trata de un badnik?
—No necesariamente, pero si detecta algo vuelves y me lo dices. Yo analizaré los restos. — dijo mientras sacaba la cámara y tomaba una foto del lugar.
Pulsé el botón correspondiente, y al ver que el aparato comenzó a funcionar corrí por toda la zona vigilando mi alrededor para no chocar, observando algo que pudiese tachar de sospechoso y verificando el propio escáner por si detectaba algo. Para salir de dudas decidí buscar un poco más lejos del lugar, a ver si tenía mejor suerte.
Luego de haber dado muchas vueltas (perdí la cuenta tras la trigésima tercer vuelta), regresé con Cream quien aparentemente me esperaba desde hacía un rato.
—(Espero no haber tardado tanto) ¿Tuviste suerte?
—No lo sé, tengo que volver a mi taller y ahí podré analizar las fotos que tomé. — inmediatamente guardó la cámara en su mochila —¿Y que tal tú?
—Nada, tres vueltas más y habría formado una pista de carreras. — volteé a ver el terreno detrás mío, si bien suelo tener cuidado a la hora de correr en lugares cerrados y en distancias cortas, las leyes de la física aún me atan y hay cosas que no puedo controlar, como el desgaste del terreno al pasar de forma tan continua sobre un mismo sitio, motivo por el cual prefiero por mucho correr en espacios abiertos —¿Será que soy muy rápida para tu escáner?
—No, lo programé para que pueda soportar tu velocidad. Tal vez la señal de los badniks haya sido cortada al momento de destruirlos... — dijo haciéndome sentir como una bruta que no piensa —...o fueron programados para operar sin necesidad de recibir señales. Sea cual sea la razón no podemos determinar de dónde vinieron, pero con estas fotos tal vez sepamos que querían.
Con esas palabras, la tomé nuevamente en brazos y corrí devuelta a su casa. Es hora de trabajar.
MINUTOS DESPUÉS
Llevábamos ya bastante rato de haber vuelto así que para aprovechar el tiempo me decidí a ordenar su casa. Normalmente no me tomaría tanto tiempo pero tengo que verificar que la basura y los trabajos incompletos no se mezclen, ubicar los aparatos según su función y tamaño, y para terminar, evitar que Cream no se sienta perdida en su propia casa; un trabajo tedioso para cualquiera pero no para mí, que de vez en cuando me gusta bajarle a mi velocidad para hacer bien una tarea.
—Encontré algo. — la escuché decir desde su taller.
Rápidamente me puse a su lado y fijé mi vista a la pantalla.
—¿Una pista?
Ella me sonrió con una mirada que mezclaba emoción y orgullo de una manera sorprendentemente tierna.
—Tres en realidad. — tecleó algo y se mostraron las imágenes que había tomado —Las quemaduras no fueron provocadas ni por una chispa ni por combustible, sino por una especie de líquido autoinflamable, parecido al fósforo blanco.
Esa última parte me perdió un poco, así que aproveché la pausa que hizo para pedirle una explicación mas simple.
—Espera ¿que?, ¿autoinflamable?, ¿fósforo blanco?
—Verás, el fósforo blanco tiene la característica de que, bajo ciertas temperaturas puede producir un fuego por cuenta propia, sin fuente externa.
Con esa corta pero simple explicación me di por bien servida.
—Eso significa entonces que lo que haya provocado el fuego no fue algo convencional. — pregunté al entender mejor por donde iba la cosa.
—Exacto, parece ser que se trata de un compuesto químico que produce fuego al entrar en contacto con el oxígeno y una superficie que sea propensa a quemarse, como la madera; otros materiales producirían un fuego leve y corto al no ser capaces de transmitirlo facilmente, como las piedras que encontré en el lugar y que estaban chamuscadas. — volvió a teclear algo que, obviamente yo no era capaz de entender —Lamentablemente no quedó rastro del compuesto por lo que no sé con lo que estoy trabajando.
Sin embargo algo hizo click en mí: el fuego lo inició un compuesto químico pero... esa solo es una pista.
—¿Que no eran tres pistas? — pregunté esperando una respuesta al respecto.
—La primera es el como iniciaron el fuego... — ajá, anotado —... la segunda es que fue uno de los badniks que destruíste, ya que parte del compuesto provocó quemaduras en el suelo y el propio robot al exponerse al oxígeno... —bueno, eso no lo había notado y es uno de los motivos por el cual Cream me ayuda tanto con estas cosas, es muy observadora en estos detalles —... y la tercera es esto. — dijo mostrándome una pieza en particular que deduje era de uno de los badniks que habían ahí.
—¿Qué es? — pregunté al no entender a lo que se refería.
—Ese badnik en particular fue programado para moverse de forma individual y sin necesidad de señales externas, por lo que es capaz de funcionar como una antena portatil. — dijo sumamente emocionada, algo comprensible al ser una niña que en vez de muñecas tiene máquinas construidas por ella misma.
—Osea... — sospechaba algo pero quería que ella lo confirmara.
—Con esto uno es capaz de mandar señales a una mayor distancia y con mayor precisión, o incluso de programar órdenes que el propio robot puede enviar a otros badniks sin necesidad de la intervención de Eggman.
Al oir eso se me vino a la mente la imagen de Metal Amy, un robot con la capacidad de actuar por cuenta propia pero que a la vez seguía órdenes de Eggman, ¿qué pasaría si el huevo ambulante crea toda una línea de robots con esas características?
—Eso significa que el bandalismo que detuve era una prueba, ¿no?
—Es muy probable. — respondió algo mas calmada— Puedo averiguar mas cosas con el tiempo suficiente, solo espero que lo que sea que planee Eggman no pase tan pronto.
—Tu tranquila, cuando el "Cara huevo" quiera atacar lo hará gritándolo a los cuatro vientos, como siempre. — respondí con total seguridad —Bueno... — me estiré —... me tengo que ir. Avísame cuando tengas algo.
Me encaminé a la puerta con la intención de irme, cuando escuché la voz de Cream.
—Que tengas suerte, te hará falta. — soltó una risita contenida. A veces sabe como golpear en el orgullo.
—Ja ja, muy graciosa. — dije con sarcasmo antes de hecharme a correr. Juraría que soltó una carcajada en el momento que cerré la puerta.
Bueno da igual, tengo el resto de la tarde libre así que es hora de buscar a mi adorado paladín azul... Sonic.
—A veces siento que mi vida es una rutina... y no me quejo.
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Y este es el primer capítulo, ¿que opinan?
No me pondré a explicar los cambios entre este universo y el original, prefiero contarlos a travez de la historia la cual, espero que les resulte interesante ya que planeo adaptar gran parte de los videojuegos.
Eso es todo por ahora. Nos vemos.
Chau.
