CAPITULO 131: DILEMAS MORALES DE MAGOS DE PANTANO IRLANDESES Y COMO SEVERUS SNAPE SE CONVIRTIO A REGAÑADIENTES EN EL CABALLERO DE LA SOMBRIA ARMADURA QUE SALVA EL DIA, O ALGO PARECIDO.
Seamus cerro los ojos y suspiro agotado. Eran mediados de octubre y habian tenido que poner a Harriett en coma controlado en el hospital.
Temblores, espasmos, pesadillas incontrolables…. Dumbledore intentaba controlarla con ese voodoo extraño estilo viejo mundo y magia de sangre. Con los guardianes de la mente cerrados a cal y canto y con mucha meditacion habia conseguido aguantar. Tommy y los fantasmas ayudaban mucho. Y todo el annulus tambien. Pero habian limites. Y Harry estaba llegando al suyo. Por muy kelda que seas, solo hay una cantidad limitada de tiempo que puedes estar sin dormir, sin apenas comer, y atento a todo al cien por cien antes de colapsar. Y Harry habia aguantado mucho mas que cualquier otro en su situacion Y no podia mas.
Ponerla en coma con la pocion de muertos en vida, atada a la cama por si acaso era la unica opcion para ganar tiempo y protegerla a ella. Y a todos los demas de ella en caso de que no fuera suficiente.
Dumbledore aun estaba solo tanteando el terreno pero se les acababa el tiempo antes de que de algun modo consiguiera controlar a Harry. O que se hartara de intentar controlarla y decidiera matarla.
Muchos pensaban que eso no lo haria. Necesitaba que ella fuera vista como alguien malvado para que funcionara. Que solo matarla no era suficiente por que si no la convertiria en una martir, una victima…. Theo se aferraba desesperado a esa teoria. Pero Severus es lo que creia.
Blaise no paraba de llorar y Draco, por una vez, estaba solemne y muy serio.
No sentir a Harry en su vinculo… o sentirla asi… latente y pasiva era doloroso para todos ellos.
Neville y Alan parecian perdidos. Moon, Greg y Vince no levantaban cabeza.
Harry los mantenia unidos de algun modo y ahora estaban todos rodeando a su reina caida y rezando para que se les ocurriera algo.
Y Seamus no podia mas.
Tenia que hacer algo.
Tenian muchas ideas y teorias…. Pero con la plaga del agua las opciones eran limitadas, asi que no podian ir a confirmar nada.
Y no tenian nada concreto.
Seamus suspiro de nuevo.
Recordo como este verano todo habia sido diferente.
Y sonrio un poco.
Habia decidido ir a "Robar suerte".
Y no le habia ido nada mal.
En varios bares habia "Robado" hilos de suerte de imbeciles que acosaban a chicas. Y habia reido al verlos caer tras tropezar con sus propios pies y derramarse las bebidas encima mientras intentaban beber.
En uno de esos bares habia visto a un cretino hechar una pastilla en la bebida de una chica cuando ella no miraba. Sabia que era eso. Una de esas drogas de la violacion. Asi que a ese cabronazo no le quito un poquito de suerte. Se concentro en los hilos y pego un tiron todo lo fuerte que pudo llevandose toda la suerte que fue capaz de quitarle.
Y lo pillaron. Resulta que el primo de esa chica, que habia ido con ella a la discoteca, era cadete en la academia de la policia. Con la bebida intacta pudieron analizarla. Y lo habian pillado con las manos en la masa. No tardaron ni cinco minutos en arrestarlo. Y por lo visto, sin suerte de su parte, al muy imbecil le parecio una idea magnifica decir delante de los polis que lo arrestaban (y de las camaras de seguridad de los coches patrulla, lo que contituia una prueba innegable y usable en juicio) que no veia el problema en hecharle un poco de "docilidad femenina" en la bebida a una tia mediocre que deberia estar agradecida de que tuviera algun interes en ella, por que las chicas asi solo servian para ser colecciones de agujeros, asi que no veia nada malo en hacer uso de dichos agujeros, y que total, las mujeres la mitad del tiempo no saben lo que quieren, asi que para que pedirles permiso si con esas pastillas ni siquieran iban a recordarlo y eso hacia que no tuvieras ni que pedir perdon?.
El muy imbecil se giro guiñando un ojo a los polis esperando empatia masculina.
Lo que encontro fue un montonazo de agentes de la ley con cara de pocos amigos que se iban a asegurar de que ese mamarracho no volviera a ver la luz del sol.
Despues de eso, Seamus se dedico a ir a los jurados. Habian juicios abiertos al publico.
Digamos simplemente que durante ese verano, pederastas, asesinos y violadores tuvieron una autentica plaga de mala suerte que les valio condenas durisimas.
Y estafadores que habian arruinado a familias.
Esos tambien habian encontrado de algun modo un castigo karmico a sus actos.
Asi que cuando fue hora de volver a Hogwarts, Seamus tenia en su haber una reserva mas que considerable de suerte. Y una vez en Hogwarts… solo decir que Zacharias Smith y Ronald Weasley se habian vuelto increiblemente propensos a tener extraños y muy curiosos accidentes. Sobretodo cada vez que hacian comentarios inapropiados delante de Seamus…..
Suspiro otra vez.
Aun estaba aprendiendo a usar sus magias familiares. No era nada facil.
Por que del mismo modo que cuando robas suerte no controlas lo que va a pasar a continuacion, solo que no sera a favor de tu victima, cuando usas suerte a tu favor, no debes jamas intentar controlar el resultado, por que debes confiar en el destino. A ciegas. Es parte de la naturaleza humana querer algo en particular.
Pero una cosa es lo que tu quieres y otra lo que en realidad necesitas. Y otra muy distinta el resultado optimo para la resolucion de una situacion aun que fuera algo que ni siquiera habias pensado como una opcion valida en primera instancia.
Por que hay cositas, pequeños detalles insignificantes, que la gente no tiene nunca en cuenta. Seamus era un mago oscuro de los pantanos. Y manipulaba la suerte. No el destino. La suerte. Eso significa el azar. Tirar los dados y que sea lo que Merlin y Morgana quieran. Y aun que la suerte y el destino estan fuertemente entrlazados, son cosas muy diferentes. Y al destino no le gusta que jueguen con el. A la suerte le encantan los juegos. Pero la suerte es caprichosa, y tiene sus propias reglas. Como por ejemplo, que tu no elijes. Debes confiar en ella ciegamente. Si no, hay consecuencias. Lo que Seamus podia robar era la "buena suerte". Lo unico que podia controlar era la direccion en la que la suerte se movia. A tu favor o en tu contra. Buena fortuna, mala fortuna. Donde quisiera llevar el destino ese cambio en el azar, nunca lo sabrias, hasta que pasaba. Pero sabrias que era bueno o malo para ti por que asi lo habias manipulado. Asi que confiabas. Y seguias a delante, con esa excitación de "A ver que pasa", sabiendo que habias puesto en marcha un efecto domino que nunca tenias claro a donde te iba a llevar pero sabiendo que ibas por el buen camino. O al menos, por el buen camino por el que la Magia decidia llevarte una vez habias cambiado la suerte a tu favor.
Y ahi es donde las cosas se ponian interesantes, por que la Magia no siempre te daba lo que querias, pero siempre pondria a tu disposicion aquello que realmente necesitabas. Y eso incluia cosas y acontecimientos que ni siquiera sabias que eran posibles o nunca habrias pensado que podrias necesitar. Pero de algun modo, siempre resultaba en el desenlace mas interesante y beneficioso para ti, aun que fuera uno que jamas se te habria pasado por la cabeza.
Seamus aun estaba aprendiendo a confiar asi en la magia. Pero vaya si no le estaba cogiendo el gusto…. Por que por lo visto, la manipulacion de la suerte era como ir siempre con una gotita o dos de Felix Felicis en tu sistema. No tanto como para que todos tus dias fueran perfectos… pero si lo sufciente como para que nunca fueran malos del todo, siempre que hubieras hecho que otros estuvieran cagandose en su mala suerte por que la has robado para ti, y usaras tu magia a tu favor…. O como solia hacer Seamus, la acumularas para cuando realmente la necesitaras. Y la intencion es algo muy, muy importante en la magia. Un detallito que la gente suele olvidar y no deberian. Por que puede decantar todas las balanzas…...
Pero ahora Seamus estaba frustrado, pensaba en como usar su suerte para ayudar y no sabia como. Tenia que ir con mucho cuidado. Manipular la suerte es un poco como manipular el tiempo… un paso en falso y puedes liarla pardisima. La red de hilos del destino de donde podia tejer y destejer la suerte y el azar era,…. Algo delicado. Toquecitos aquí y alla era una cosa. Pero ahora necesitaban algo concreto…. Y Seamus llevaba poco tiempo siendo un verdadero Finnigan como para saber sacar realmente partido a su poder natural.
Asi que solo suspiro. Y miro a su izquierda, donde Luna miraba por una ventana con un rabanito colgando de su oreja como un pendiente. Y oscilando tranquilamente.
De pronto se le hizo la luz.
Salio corriendo y rebusco entre el equipo de los chicos hasta encontrar un pendulo.
Y sonrio como un demente.
Corrio al mapa donde estaban trabajando en lo de las lineas Ley.
- Pero que haces?- Pregunto Draco con una ceja alzada.
- No tengo ni la mas remota idea, pero creeme, vamos a tener suerte- Seamus reia como un demente.
Encendio sus tres faroles, por que mejor estar a buenas con su propia magia y sabia que esas luces lo guiarian.
Cogio el pendulo.
Y salto a ciegas. Cerro los ojos. No iba a necesitarlo.
Dejo caer el pendulo sobre el mapa mientras cogia el estremo del cordon y dejo que oscilara a lo loco sobre el mapa.
Y se puso a sacrificar hilos e hilos de su reserva de suerte.
Todo a su favor.
Que la suerte los llevara a donde tuvieran que ir.
Aun que no supieran por que.
Y libero su magia.
El olor a pantano inundo el dormitorio siete.
Y sintio las magias de todos los demas respondiendo y uniendose a la de Seamus, colaborando con el. No tenian ni idea de que estaba haciendo… pero ahi estaban. A su lado. Como siempre habia sido. Como siempre seria.
Seamus sonrio y dejo que la magia le guiara.
- Apuntad esos dos puntos, no deja de oscilar entre esos dos lugares y señalarlos!- grito Draco histerico.
- Estoy en ello, estoy en ello!- Canturreo Luna rebuscando en su bolsa para sacar papel y pluma.
Cuando Seamus abrio los ojos, y miro el mapa, vio lo que todos los demas.
El pendulo oscilaba entre la ciudad de Tinworth, en Cornwall y Elgin, una ciudad en Escocia.
Llamaron enseguida a Severus. Que sonrio al ver los dos nombres.
- El refigio esta en Tinworth. Y en Elgin, Doge tenia una casa que presto en mas de una ocasión a Dumbledore. Al menos ya tenemos por donde empezar….
Ahora el problema era como ir a esos sitios sin correr peligro. Y Tanis se ofrecio voluntario a llevar a un pasajero por las sombras.
- No, de eso nada!- Grito Bass indignado- Yo soy vampiro, ya estoy muerto, al menos fisicamente hablando. La plaga no puede afectarme tanto como a vosotros. Asi que ire yo. Sev, tu te quedas.
Ese fue el momento en el que estallo una discusion. Sobre quien iba y quien no.
Hasta que fue Tanis el que puso fin a la bronca.
- Profesor Jefe es el que debe ir. Su mente muy fuerte. Su mente protegida. Mundo de Sombras no afectarle tanto. Otros en peligro de volver locos. Tanis no ser como Harry. Tanis no poder proteger mentes. Pero profesor Jefe tener mente protegida. Si ir y volver rapido, no hacerle daño. O no mucho.
Eso dejo a mas de uno con la boca abierta.
- Es cierto- Intervino Theo suspirando- Harry me ha llevado por las sombras en mas de una ocasión. Es desconcertante. Si su magia no me hubiera protegido ese lugar me habria vuelto loco. Pierdes la nocion del tiempo y la realidad. Es como estar catatonico y consciente y el mundo va muy despacio mientras todo dentro de tu cabeza va muy deprisa. Ahi dentro la cordura se esfuma con una facilidad pasmosa si no tienes el don de las sombras.
Una nueva oleada de respeto y sus santos cojones de acero goblin templado por segui a Harry a ese Mundo Detras del Mundo y seguir cuerdo paso por todos los presentes. Aun que lo de cuerdo en el caso de Theo era muy relativo…. Como todo con los chicos del Annulus. Pero lo suficientemente funcional. Eso si que era cierto.
Asi que al final, Severus fue el elegido para ir. Y Theo fue con el. Conocia el Mundo Sombrio. Habia estado alli. Y la pizca de magia de Harry que siempre habia en el lo protegeria. O al menos, durante algun tiempo. Y habia generado cierta resistencia a la locura que podia provocar estar en las sombras.
Y asi desaparecieron en la oscuridad. Los dos magos cogidos a las manos del Bauk.
Y fue entonces cuando Severus comprendio por que su oclumencia habia sido el factor determinante.
Nada, absolutamente nada podria haberlo preparado para lo que lo asalto cuando cruzo ese velo de tinieblas y entro en el mundo de las Sombras.
Theo habia dicho que la nocion del tiempo y la realidad se perdian muy rapido.
No habia sido cierto.
No se perdian rapido.
Es que alli no existian.
Era estar en un constante estado de vertigo. Era ver pasar el tiempo y que todos tus sentidos esperimentaran simultaneamente todos los ecos de la realidad…. Todos los espectros proyectados en la oscuridad por objetos solidos cuando se encuentran con una luz.
Era ver el mundo real a traver de un velo transparente existiendo y no existiendo de forma perpetua mientras todo cambiaba y vivias en un estado de incertidumbre en el que eres solido y no lo eres mientras solo existen los tonos de gris, por que otra cosa que desaparece muy rapido en ese mundo es el color.
Sin hambre, sin sed, sin emocion alguna. Un reino de silencio perpetuo y un caleidoscopio de formas cambiantes que provocaban nostalgia. Un reino de cosas olvidadas, de momentos pasados, de todo lo que fue y podria haber sido. Un reino donde quedan recuerdos de todo lo que quedo atrás y que olvidamos.
Era para volverse loco.
Era hermoso.
Era aterrador.
Era una pesadilla bellisima y el sueño delirante de todo mago oscuro que se precie de su naturaleza.
Esta era la otra cara de la moneda.
Severus rio con histerismo.
Donde hay un Arriba, debe haber un Abajo.
Donde hay un mundo fisico, debe haber un mundo intangible.
Donde hay Luz, debe haber Oscuridad.
Donde hay Existencia, debe haber un Vacio.
Si Severus habia buscado alguna vez prueba alguna de que la magia era mas que mover una varita farfullando en latin, era esta.
Por que si algo como el Mundo de las Sombras existia…. Que mas habia ahi fuera?
Primero fueron al Refugio. O la Casa de las Conchas, como Molly solia llamarla. Severus solo rio aun mas ante la ironia de todo el asunto. Fue un paseo largo, y Tanis tiraba de ellos con paciencia infinita hablandoles y parloteando de forma incesante para mantenerlos anchados en la realidad. Y no los solto ni por un instante. Sus barreras de oclumancia estaban a plena potencia y aun asi se le desgastaban rapido. Podia notar la presion constante que ese mundo ejercia en la mente. Y miro a Theo, que estaba mucho mas palido de lo normal pero aguantaba bien. Harry debia haberlo estado preparando para algo asi. Y tuvo un escalofrio.
La ojiverde daba miedo con lo poderosa que era. Dumbledore habia tenido suerte de haberse hecho con los cadaveres de sus padres por que hay pocas tirando a nulas defensas contra magia de sangre de ese tipo, y era una de las pocas cosas con las que podria hacer daño real a la slytherin.
Pero eso se iba a acabar.
Severus no pudo mas que reir aun mas cuando vio que a traves del Mundo de las Sombras se saltaron alegremente todas y cada una de las defensas que habian puesto en la propiedad. Hasta el fidelius. Las sombras son ajenas a la realidad y estan en todas partes. Incluido dentro de dichas defensas, y dado que todas las sombras son proyecciones de la sombra primordial, todas estan interconectadas, sin excenciones. Harry tenia acceso a las puertas traseras de…. Bueno, absolutamente todo. Tuvo otro escalofrio y dio gracias por tener a la ojiverde de su parte. Por que ahora empezaba a entender por que la gente habia tenido panico de los umbramantes desde el origen de los tiempos. Pararlos era practicamente imposible y podian ir a todas partes. Nunca estabas a salvo contra un umbramante. Nunca. Lo unico que debia saber es donde estabas y siempre, absolutamente siempre, podia alcanzarte. No habia muro ni proteccion que los detuviera mientras hubieran sombras. Y siempre hay sombras.
Y ahora alli estaban.
Colandose como si nada en una casa fuertemente protegida.
Asi de facil.
O no tanto. Por que muy pocos pueden contar con la ayuda de un bauk. Pero mira tu por donde…. Que truco mas util.
Pasearon por la casa y lo encontraron en el sotano. La sala ritual con los cadaveres de los Potter profanados.
Y tarros con …. cosas.
Y pedacitos en preparacion.
Toda la casa estaba llena de partes de los Potter en distintos estados de ritualizacion.
Severus sintio hervir su sangre.
Ni siquiera James Potter se merecia semejante…. Abominacion.
Pero Lilly…. Que Dumbledore se hubiera atrevido siquiera a pensar en hacerle algo asi a los restos de Lilly…. Eso si que no se lo perdonaba.
El problema ahora era llevarse todo eso.
Sobretodo por que no debian salir mucho de las sombras.
Y habian como 20 seguidores de Dumbledore en la propiedad haciendo cosas con los pedacitos de los Potter.
Y no eran cosas buenas.
- Como hacemos esto?- pregunto Sev mientras barajaba posibilidades.
Theo lo miro muy serio.
- Ahora es cuando enviamos un mensaje.
Sev alzo las cejas. Theo solo sonrio como un jodido tiburon. De esos a los que Harry adoraba comerse.
- Que tal se te da el fuego infernal, profesor? Todo desaparece, no nos dejamos nada, Dumbledore pierde un buen puñado de seguidores y de pronto descubre que no es tan intocable sin saber como narices ha pasado. Que tenga miedo de lo que no conoce. Que vea que podemos hacerle daño sin que nos vea venir. Y que sude frio intentando averiguar como narices lo hemos hecho.
Severus sonrio.
Brutal.
Efectivo.
Un tanto dramatico e innecesariamente excesivo.
Pero enviando un mensaje inconfundible que nadie prodria ignorar.
Mira tu que bien.
Sencillamente perfecto.
Saco su varita. Para algo tan controlado y delicado iba a necesitarla.
Tanis abrio un pequeño agujero en el velo y desde fuera de la casa pero dentro de la propiedad, Severus lanzo el fuego maldito contra la construccion. Contra toda la fachada.
Ese fuego iria de fuera hacia dentro.
De ahi no salia nada. Absolutamente nada. Ni nadie.
Los gritos no tardaron en comenzar.
Y tardaron 12 minutos en cesar de forma permanente.
El fuego tardo ocmo 45 minutos en consumirlo absolutamente todo.
La casa se habia derrumbado hasta los cimientos. Y solo quedaba un hoyo enorme donde habia estado antes la construccion.
Hasta los sotanos habian ardido.
Nada se habia salvado.
Su trabajo estaba hecho.
Severus sonrio con satisfaccion. Theo aun mas. Y Tanis tatareaba alguna cancion irreconocible inmensamente feliz.
Ahora solo faltaba esperar que no hubieran…. Partes de los Potter en otros lugares.
La casa de Cornwall, su segundo destino, era hermosa. Una casita de tres plantas hecha de piedra gris al lado de un gran rio, con un molino de madera girando perezosamente y un embarcadero privado tambien de piedra, con los balcones del salon en voladizos sobre las aguas. Increiblemente rustica, con una gran personalidad y con un aire bucolico y antiguo que era impresionante. Pero eso no iba a detenerlos.
Volvieron a saltarse todas las defensas como quien va por su casa y se colaron dentro.
Otra docena de seguidores de Dumbledore. Con una gran colección de artefactos y libros. Investiban algo. Y por lo que Severus pudo deducir de leer sobre sus hombros, eran leyendas antiguas sobre como conjurar profecias.
Los craneos de una docena de videntes y tarros con encantamietos de extasis llenos de sangre eran un silencioso testigo que no dejaba que nadie pudiera ignorar algunas de las cosas que Dumbledore habia estado haciendo.
Pero lo mas interesante lo encontraron en el sotano.
Alastor Moody inconsciente, con un aspecto lamentable, encadenado a una pared mientras. Por las conversaciones de los demas, Ojo Loco habia intentado volver a Inglaterra y desertar del lado de Dumbledore cuando este empezo a "hacer lo que debia hacerse".
Severus sonrio.
Moody habia aprendido a las malas que lider elegido no era lo que habia fingido ser siempre.
Bien por el.
O mal… por que bien no habia acabado el muy bastardo testarudo.
Pero ladeo la cabeza.
Moody habia pasado mucho tiempo con Dumbledore.
Y rescatarlo igual les daba cierta… informacion.
Se giro al joven que iba con el y vio la misma idea en su rostro.
Asi que en silencio, y sin hacer ruido, a traves de un agujero en las sombras, rompieron las cadenas de Moody lo agarrandolo de un pie, lo arrastraron al mundo sombrio. Suerte que Tanis podia cambiar de forma y aferro al ex-auror inconsciente con un tentaculo cargandoselo a la espalda.
Sev y Theo se miraron y sonrieron como tiburones los dos.
Otro Fuego Infernal y la preciosa y bucolica casita de Cornwall estallo en llamas malditas con sus doce ocupantes, toda su investigacion, su biblioteca y su colección de artefactos oscuros y peligrosos para la guerra quedaron atrapados dentro de un insaciable fuego que solo no tener nada mas que consumir podia extinguir.
Y fue satisfactorio. Mucho.
Sobretodo por que nadie podria sospechar que Moody aun seguia vivo hasta que lo revelaran. Y solo lo harian cuando les dijera lo que necesitaban saber.
Habian pasado gran parte del dia fuera. Era hora de ponerse rumbo a casa con su botin. Y esperar que su contra ataque hubiera sido efectivo.
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Dumbledore estaba que hechaba humo.
Habia perdido dos casas. Dos.
Dos propiedades que habian estado bajo fidelius. Un fidelius que no se habia roto. Mas que nada por que EL era el guardian secreto.
Dos casas consumidas por fuego infernal.
En la que habia estado preparando su ataque contra la puta Potter y en la que habian estado investigando sobre las profeccias.
Habia perdido los cadaveres de James y Lilly y todo lo que tenia preparado con ellos. Todos sus planes en ese aspecto se habian ido a la mierda.
Habia perdido doce craneos de videntes, y doce botes de su sangre, que era algo irremplazable.
Habia perdido una biblioteca entera de magias adivinatorias y una colección completa de artefactos magicos belicos.
Ah, si, y habia perdido tambien a casi 40 seguidores. Y a Alastor Moody, al que aun estaba intentando convencer de que atendiera a razones por que por lo visto, no tenia estomago para ciertas cosas y habia sufrido un ataque de moralidad y etica nada oportuno. Pero una temporadita encerrado seguro que le hacia entrar en razon.
Las perdidas habian sido brutales.
Pero no eran nada, nada comparado con saber que habia un enemigo ahi fuera que podia localizarle, saltarse todas sus defensas, encontrarle aun bajo fidelius, prenderle fuego y marcharse sin dejar rastro alguno, sin dejar pista que seguir y sin revelar su identidad.
Albus tuvo un escalofrio.
Por que esa idea era aterradora.
- Que pasa, amor?- Se burlo Gellert sin piedad alguna- no se te ocurrio pensar que haciendo lo que haces ibas a cabrear a un monton de gente? Eres tan arrogante de creer que no hay magos o brujas tan poderosos como tu o incluso puede que mas? Por que creeme, mi querido Albus, has hecho enfadar a un montonazo de gente…. Y eso supone hacer enemigos. No todo el mundo adora tanto como tu estar bajo los focos. Algunos disfrutan mas del anonimato. Y mira tu por donde. Ahora todos esos magos y brujas estan furiosos contigo. Te haran daño si pueden. Y Vaya vaya vaya… parece que no los veras venir…. Da miedo si lo piensas, eh?
Albus fulmino con la mirada al carcajeante Gellert.
Pero no pudo evitar el escalofrio que le recorrio la espalda.
Molly segua aullando indignada sobre algo que no se molesto en averiguar que era.
Probablemente por la destruccion de una de las pocas propiedades de su familia.
Nimiedades en su opinion.
Albus de pronto ya no estaba tan confiado.
Con algo asi no habia contado.
Harry estaba descartada como sospechosa de esto.
Encerrada en Hogwarts y bajo el asalto de magias de sangre que ya no podria realizar, estaba temporalmente incapacitada.
Y sus amigos eran todos estudiantes de escuela. Y un puñado de hombres-perro. Y un vampiro.
Como iban a ser capaces de algo asi?
No…. Albus era mas listo que eso.
Habia otro jugador ahi fuera.
Otra faccion.
Alguien o algo que no habia tenido en cuenta.
Pero ya era tarde. Sus planes habian sufrido un gran reves pero no se habian detenido.
Ya averiguaria quien le estaba dando caza para lidiar con el.
Pero lo primero era lo primero.
Miro fuera de la tienda de campaña en la que estaba cerca de la campiña de Edimburgo.
El castillo Macgonnagall estaba frente a el.
Sonrio.
Minerva… la buena y leal Minerva.
Era hora de reunirse con su vieja amiga.
Albus estaba seguro de que aun podria contar con ella.
Minerva siempre habia atendido a razones.
Y era una aliada que les vendria muy…..muy bien.
Por que hay cosas que nunca cambian, no?
