"Una versión del futuro".
by amhy potter.
Nota: La adorada Jo, es dueña de todo. Pero, si por pura casualidad, se le da una muy buena vaga idea, y se le ocurre darme los derechos, pues... luego les aviso... Mientras tanto... Harry Potter no es mío, ni tampoco sus personajes. Sólo a Jo la iluminó el sol....
Capítulo 3: "Presentación".
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Harry suspiró... de nuevo. Respiró hondo y trató de tomar todas las fuerzas necesarias que el aire le pudiera dar. Esto no iba a ser fácil... nada fácil.
Se encontraba en el Gran Comedor frente a todos los estudiantes en la mesa de los profesores. Después de una charla muy interesante con su ex-director sobre lo que había pasado en los últimos 6 años, éste había decidido presentarlo esa misma noche ante la escuela.
Albus había reaccionado muy bien..., demasiado bien... Las noticias que Harry le dio sobre Voldemort lo impresionaron mucho, demasiado, diría él... (¿y a quién no?) Pero es que lo que Harry le dijo no era para más. En esos 6 años habían pasado muchas cosas, y de todo... Prácticamente, en esos 6 años, hubo una total revolución de la comunidad mágica...
Pero bueno, ahora tendría que prepararse para la reacción que tendría toda la escuela (n/a: muaca, muaca... ¿no creerían que les arruinaría la sorpresa de lo que pasó en esos 6 años, verdad?...), y Ron y Hermione... y los gemelos, y Neville, Sean, Thomas, Ginny, Draco, Hagrid, Minerva... ¡Severus!...
Harry rió silenciosamente. ¿Cómo reaccionaría Severus al hecho de que tendría como compañero a su más odiado alumno?... Esta vez, no tendría oportunidad de quitarle puntos a Gryffindor por su culpa.
Y ¡Sirius!... ¿cómo reaccionaría él?... A Harry no le gustó nada. Tragó saliva lentamente. Ahora recordaba que en esa época, al saber que Voldemort había vuelto, y que su principal objetivo era matar a Harry, Sirius se había vuelto excesivamente sobreprotector. Y sobretodo en quinto año: no lo dejaba salir fuera de los muros del castillo, y estuvo a punto de sacarlo del equipo de Quidditch varias veces, según él, sólo para su protección; no se le despegaba para nada, y siempre iba a todos lados con él (n/a: ¿Que porqué Siri estaba en el colegio?... ¿ya se había arreglado el asunto de su inocencia?... muaca, muaca... soy mala... lo sabrán cuando Siri vea a Harry y se lo pregunte personalmente.).
Y Remus... ¿cómo estará él en este momento?... Tal vez, Harry podría prepararle una eficaz poción mata—lobos modernizada, que Harry estaba seguro, no existía en este tiempo. Seguro que en cuanto tuviera oportunidad, les enviaría una lechuza para avisarles, si es que Albus aún no lo había hecho ya.
Harry fue interrumpido de sus pensamientos. El director se levantó y calló al alumnado para darles una noticia importante, suponían ellos, y suponían bien...
— Queridos alumnos, tengo que darles una noticia de mucha importancia; por favor, les pido toda su atención. Ha pasado ya casi un mes desde que iniciamos este año escolar, y aún no contábamos con un maestro de Defensa contra las Artes Oscuras... hasta ahora. Este año, contaremos con un joven maestro, pero que les aseguro, será un excelente tutor —exclamaciones de asombro y algunas miradas confusas de los profesores; ni siquiera a ellos, les había explicado de la situación—. Debido a su extraña y reveladora aparición, no pudimos ocultarles su verdadero nombre, como en un principio debería ser... —cuchicheos y exclamaciones por todo el Comedor—. Este joven... —dijo al tiempo señalando a Harry, haciendo que los murmuros subieran un poco el volumen— será su profesor, y estará con nosotros sólo este curso. Respondiendo sobre a su procedencia, les diré que, y ante lo extraño que parezca, él no es de esta época...
—exclamaciones sobre los presentes. Harry se sentía azorado... tanta gente verlo sólo a él... bueno, pues, no le gustaba...
Ya antes Harry había experimentado extrema atención tal como esta, y aún incluso peor. Harry no pudo evitar el recordar... recordar aquellos tiempos, donde él era el centro de atención... Pero, a pesar de eso, Harry no puede decir que estuvo tan mal... ¡incluso estuvo genial! Una de las mejores cosas que le han pasado en toda la vida...: Buscador del equipo de Inglaterra... ¡participante activo de los mejores mundiales de Quidditch de la historia!
Justo después de salir de Hogwarts, Harry se dio un tiempo para descansar..., unas mini vacaciones, vaya. Después de los constantes ataques de Voldemort (n/a: lo cual no revelaré, hasta nuevo aviso...), Harry no podía menos que fatigarse... y hasta fastidiarse... Los ataques de Voldemort en ese tiempo se habían vuelto aburridos, anticuados, y obsoletos... El gran Señor Tenebroso ya no era original más... bueno, ya no... hasta, bueno, hasta la "última batalla"...
A Harry le cayó del cielo la propuesta del Comité de Deportes Mágicos de Inglaterra, ofreciéndole ser integrante del equipo. Fue una época muy feliz, claro, exceptuando eso del "enfado" de Ron, que llevó a Harry a una profunda depresión: Ron, al enterarse, se llenó de envidia y coraje, y lo aguantó por un tiempo, fingiendo, claro; pero no soportó mucho. Pocos meses después, Ron estalló... uuyy... esa sí que fue una época difícil...
Pero claro, como siempre hacen los mejores amigos, Ron "perdonó" a Harry por estar en el equipo; después de todo, él no era un absoluto perdedor como siempre le echaba en cara a Harry. No, Ron sí llegó a ser algo, a realizar su sueño: en quinto año, entró al equipo de Quidditch de Gryffindor como guardián, ocupando la vacante que Wood había dejado. Fue a las prácticas, más por insistencia de Harry que suya... Al dar los resultados, enfrente de todos los Gryffindors en la Sala Común, Ron estaba que no se lo creía. Tardándose un poco en reaccionar, Ron se puso rápidamente rojo de pies a cabeza. Jugó muy bien en su primer partido, a pesar de estar sumamente nervioso, y Harry así se lo hizo saber; incluso también jugó perfectamente en su segundo partido, y en el tercero, y en el cuarto, y en el quinto... sinceramente, y en opinión de Harry, Ron Weasley había sido, junto con Oliver, uno de los mejores guardianes que han existido en Gryffindor..., ¡Hogwarts, diría Harry! El siguiente año, sólo quedaron en el equipo Harry y él: los gemelos, y las chicas ya habían salido de Hogwarts... Sabiendo que debían formar un equipo de nuevo, integraron a varios candidatos muy calificados a los puestos vacantes. Después de eso, la votación para capitán se hizo, y por unánime, salió como el mejor postulado, al mejor en cuanto a estrategias se refiere (según Harry)...: Ronald Weasley... ¿Capitán?... ¡Capitán!... Lo mejor que le pudo haber pasado en la vida al pelirrojo, claro, a excepción de que su amor secreto le diera el sí...
—... sí, sí... sé que suena extraño, pero deben confiar en mí: es cierto —Albus siguió hablando, y Harry se reprendió mentalmente... ¿Cómo vuelan las ideas, no?... De una idea, pasó a otra...—. Este joven, estaba realizando un experimento, cuando, por accidente, regresó 6 años al pasado... —ahora sí que había un gran escándalo en todo el Comedor. Algunos tachaban de loco a Albus, y otros, creyendo incondicionalmente en él, se tapaban la boca para ahogar un grito. Harry distinguió entre la gran multitud, a sus mejores amigos de toda la vida: Hermione y Ron.
Increíble en lo que hoy, bueno, en su tiempo se habían convertido. Si a Harry, hace 6 años le hubiesen dicho el futuro de sus amigos, no se la hubiese creído aunque le pagaran 1000 galeones.
Sí, ellos también eran aurors, como Harry, pero al igual que él, poseían otra profesión. Harry era jugador y auror, pero su fuerte siempre había sido ser auror; el Quidditch sólo era un pasatiempo, una distracción para calmar el estrés de su verdadera pasión: ser auror. Ese trabajo era perfecto para él, y no podía pedir más. Defender e investigar eran sus deberes... nada más que eso, aunque en algunos casos, el ataque ofensivo también se acoplaba. A Harry le disgustaba mucho esto, pero, todo sea por el bien de la humanidad...
Pero, los fuertes de Hermione y Ron no eran ser aurors; no, su fuerte era algo, de lo cual Harry estaba orgulloso. Se le enormecía el corazón al verlos trabajar con pasión en lo que más les gustaba: ellos estaban felices, y Harry, por ellos, también...
— Por favor, déjenme terminar... ¡Silencio! —gritó el profesor al ver que sus alumnos se emocionaban—. Bien, sé que esto suena ilógico, pero por el momento no les daré más explicaciones, así que tendrán que preguntarle lo que deseen a él personalmente. Ahora, deberán acostumbrase a él, y tratarlo, aunque se les haga difícil, como profesor... —ante la confusa mirada de la mayoría de los presentes, Albus continuó—. Este joven, en esta época estaba estudiando aquí en Hogwarts... —hubo gritos ahogados de exclamación y caras incrédulas—. Así como él, su otro yo, fue transportado, pero 6 años en el futuro, y no se preocupen por él, porque se encuentra bien...
— Pero, ¿quién es?—preguntó un joven de Ravenclaw.
— Muy buena pregunta, Sr. Prang, y le aseguro, que se asombrará al saberlo... —contestó Albus al muchacho. Movidos por la curiosidad, algunos se fijaron mucho más en Harry, buscando alguna pista que les pudiera decir quién era...
— Mi nombre... —interrumpió por primera vez el muchacho, callándolos a todos de golpe. Harry ya se había fastidiado del rodeo de Albus, y pensó en cortarlo lo más pronto posible. Porque, si lo dejaba seguir, capaz y acaba mañana. A Albus le daba por hacer la maldad de mantener a su interlocutor en suspenso el más tiempo que le fuera posible. Harry miró a Albus, y vio que éste había entendido rápidamente la indirecta. Sonrió divertido, y dejó que Harry hablara...— es Harry Potter.
Un silencio sepulcral, y Harry se esforzaba por fingir que no le incomodaba que cientos de miradas se dirigieran específicamente hacia él...
Atención... atención... estúpida atención... no hace más que incomodar, y hacerlo sentir a uno estúpido. Harry sentía siempre que le miraban que lo penetraban con la mirada: era como si cada par de ojos lo cuestionara y criticara para mal, no importa qué; como si cada uno de ellos buscara algún defecto en él, algo con lo que pudieran sentirse a gusto por haber encontrado algo, que ellos tenían, y que el famosísimo Harry Potter, el "Niño que vivió", no.
Y eso era lo malo de ese nombre, lo único maldito en él...: la estúpida fama, el reconocimiento y el estúpido hecho de que cualquiera podría saber más de él que incluso él.
Y eso era lo que Harry le daba miedo: que en cualquier momento, alguien se parase frente a él, reconociese su famosa cicatriz, le dijese exactamente: "Por las barbas de Merlín, ¡eres Harry Potter!"; y se pusiese a hablar como loro sin parar sobre toda su vida, cosas que él nunca imaginó que alguien más se enterara, y cosas que incluso él mismo no sabía que sabía, o no sabía...
Un silencio sepulcral, y Harry entonces decidió fijar su mirada en sus dos mejores amigos. En la mesa de Gryffindor, Hermione y Ron, lo miraban a él, ambos con los ojos "cuadrados", podría decirse metafóricamente, aunque la descripción correcta sería completamente abiertos y sin pizca de credulidad, con la boca abierta hasta el suelo (hablando metafóricamente, claro).
Harry no pudo evitarlo, y sonrió a sus amigos, viéndolos de esa manera. Cientos de miradas lo vieron sonreír, pero Harry no se percató más. Se dio cuenta que sus dos mejores amigos notaron que esa sonrisa iba específicamente a ellos. Harry vio cómo se miraban el uno al otro, cuestionándose con la mirada. Después de que los dos se pusieran de acuerdo en algo, Harry los vio voltear hacia él otra vez, y seguido Hermione le pidió a señas silenciosas que se descubriera la frente.
Harry agrandó su sonrisa, y se dio cuenta por primera vez, que estaba empezando a disfrutar esta situación, esta época. La idea de quedarse ahí ese curso, ahora le parecía muy, pero muy divertida...
Aún con su sonrisa, y ante todas las miradas atentas a él, Harry se descubrió la frente.
Un "¡Oh!" general se escuchó por todo el Comedor.
Algunos le creyeron, aunque fueron muy pocos. Los demás, no sabían si debían hacerlo o no. Harry aún sonreía a sus dos mejores amigos, cuando una voz de una de las mesas más alejadas se escuchó.
— ¿Y cómo sabemos que no te la hiciste tú?... Si eres Potter, demuéstralo.
Voz que arrastraba las palabras completamente reconocible. Malfoy, Draco Malfoy... Harry volteó hacia él, al tiempo que el mismo silencio sepulcral se hizo. Algunos apoyaron a Malfoy asintiendo con la cabeza, y la mayoría de las miradas se dirigieron a "Harry", para ver su reacción.
Harry mantuvo su sonrisa, e incluso la agrandó más. Si tan sólo Draco supiera en lo que 6 años se había convertido... Si tan sólo supiera...
— Sr. Malfoy... ¿Desea ponerme a prueba? —dijo con la misma sonrisa, y un tono divertido. Draco no se lo esperó: ese tono nunca se le había presentado. Pero, igual y esbozó una maliciosa sonrisa.
— Tal vez... —dijo con descaro, al tiempo que su maliciosa sonrisa se extendía por su rostro.
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¡Hola!.... Vuelvo de nuevo.... ¡Y con mucha más acción!
Y ahora, contesto los reviews...
Yochy: Muchas gracias, me alegro que te haya gustado... y sí, yo también espero que se vaya poniendo más interesante, pero no te preocupes, por que eso, depende de mí. De nuevo, muchas gracias.
Lucil: Me alegra que te guste, ¡gracias! Ahora, te responderé algunas de tus preguntas... ¡pero sólo algunas!, ¿eh?
En cuanto a cuándo aparece Sirius, pueeees... te diré, que aún no sé, pero te aseguro que será pronto. Apuesto a la reacción de que su ahijado venga del futuro, le parecerá muy... eh... interesante... Sólo espero que no le dé un infarto... pero no te preocupes, soy fanática de él, y aquí tendrá un buen papel, por mi cuenta va...
A lo de Draco, lo lamento, pero no te lo puedo decir, luego, a su tiempo, lo sabrás, y cuando el tiempo llegue, estarás lista para asimilarlo, hija mía, y... (¡sape!)... ejem... lo siento, jeje.
Sí, si hay una Orden del Fénix, y, probablemente... probablemente luego la veremos, aunque todavía no sé.
Sobre cuándo supo Harry sobre esto, bueno, al igual que lo que pasó con Voldemort, no te lo puedo decir... Sorry...
Kento: Hola, estoy complacida y me halaga que mi gran ídolo se haya dado una vuelta por estos rumbos. ´Ta wueno, yo sé que me pasé con lo del imperius, pero tampoco es para que tú me lo eches a mí... Te prometo actualizar seguido, si tú lo haces... ¿oky?
Jeje... Espero que se hayan divertido tanto como yo... Luego daré una vuelta para poner la actualización, pero ¡ideas y sugerencias son bienvenidas!... comentarios, reflexiones, confesiones, acusaciones..., lo que sea. Y pues, si quieren enviar un howler, pues... b—bue—no... sólo que no sea muy agresivo... ¿s—sí?... o_O....
P.d.: Si quieren hacerme el favor de mandarme sugerencias sobre cómo y qué profesión tienen cada uno de los personajes en el futuro, se los agradecería mucho. Aún no sé qué será de Remus y Sirius, ni tampoco Ginny, y otros personajes. De Ron, Hermione, Draco y los gemelos me doy una idea, y también para Neville, pero, si tienen algún puesto vacante interesante para ellos, favor de llamar a los siguientes teléfonos: 555-62103 (6: mes; 21:día; 03: año. Día de publicación de "La Orden del Fénix".... jeje)
Sorry, si no viste el número telefónico, es que eres un muggle, esto es sólo para los magos.... muaca, muaca...
Bye, bye..... hasta la próxima, y ¡gracias por leerlo!