17 Despedidas
(Con mucho cariño, para Jun)
Disclaimer: Todo esto pertenece a Tolkien, con excepción de Finw? que es una humilde creación mía.
A/N: He usado algunos diálogos del libro, modificados para adaptarlos a mi historia. La música (otra vez) es Bad, de U2.
*** If you twist and turn away / si te das la vuelta y te vas
If you tear yourself in two again / si te partes en dos de nuevo
If I could, yes I would / si yo pudiera, sí lo haría
If I could, I would / si yo pudiera, lo haría
Let it go / déjalo ir
Surrender / Rendición
Dislocate / Desarticulación (Bad - U2)
Aragorn se encerró en su habitación y se arrojó vestido sobre la cama. Tenía que hablar con Legolas esa noche. Estaba decidido a impedir que el elfo lo acompañara a cabalgar por los Senderos de los Muertos. El mensaje de Galadriel, su sueño, la profecía enviada por Arwen, todo contribuía a confirmar su temor de que Legolas corría peligro. Sabía que el elfo no aceptaría quedarse y que no daría crédito a sus palabras, pero no lo llevaría, por mucho que le costase lograrlo. Estaba seguro de amarlo, pero no se lo podía decir antes de hablar con Arwen y tomar la decisión de respetar su palabra o los deseos de su corazón. Pero el momento de las decisiones aún no llegaba, primero debía vencer en la lucha contra el enemigo oscuro.
Legolas esperó a que todos se hubieran retirado a sus habitaciones y salió de la suya en silencio. Caminó por el pasillo sin hacer ruido, pasando por la habitación de Elladan, donde le pareció escuchar lamentos. Al menos el molesto hermano de Arwen estaba allí y no vigilándolo. Llegó a la habitación de Aragorn y llamó a la puerta, lo más despacio que pudo.
El montaraz lo estaba esperando. Se abrazaron un momento interminable, hasta que Aragorn apartó al elfo suavemente, y lo llevó a la cama donde se sentaron.
Legolas miraba el piso. (El momento ha llegado, él me dirá que ama a Arwen). Aragorn pasó su mano por la barbilla del elfo, y lentamente hizo que levantara el rostro lleno de pena.
- "Hermoso mío, mañana debo partir al alba y cumplir así con lo que ha sido escrito".
- "Entonces, ¿insistes en no llevarme?", Legolas se sentía lastimado. ¿Por qué apartarlo ahora? ¿tendría que ver con la llegada de los gemelos?
- "Te lo he explicado, correrás peligro. No deseo que sufras ningún daño", Aragorn habló en un tono firme, aunque por dentro sufría tanto o más que Legolas.
- "Aragorn, soy un elfo y un guerrero. No temo a los espectros ni creo en las profecías de los hombres. Además, Elladan y Elrohir irán y ellos son también elfos", hizo una pausa para agregar - "Sólo temo separarme de ti".
Legolas tenía razón, los elfos eran la raza más fuerte de la Tierra Media, pero la visión y la profecía.¡no! no lo expondría en vano. Sólo quedaba una cosa por hacer.
- "¿Legolas, me amas?", estaba seguro de la respuesta. Cuánto hubiese dado por poder decírselo también, pero debía callar. Al menos eso le debía a Arwen.
- "Con cada partícula de mi cuerpo, con mis pensamientos, con mi corazón", Legolas lo miró con esos hermosos ojos azules. Aragorn le escondía algo, pero a la vez veía sufrimiento en sus ojos y no deseaba ser la causa de eso.
- "Entonces, mi bello elfo, sólo te pido que hagas una cosa por mí", dijo Aragorn con voz firme, "te quedarás en la fortaleza y esperarás aquí mi regreso. Promételo". Fueron las palabras que más le costaron pronunciar, sobre todo porque sabía el daño que le iba a causar a Legolas con ellas, pero no tenía alternativa.
Legolas no dijo nada. (¡Me quiere apartar de su lado! Cuánta razón tenía Haldir, ahora que ha recordado su promesa, no soy más que un estorbo en su camino)
- "¡Promételo!"
- "Dime la verdad, Aragorn. ¿La amas aún? ¿cumplirás lo que prometiste, es eso? ¿Elladan y Elrohir han venido a recordártelo, no es así? Dime que no me quieres más a tu lado, ¡dímelo!", la angustia era evidente en la voz del elfo.
- "Lo hago por tu seguridad.", Aragorn trató desesperadamente de dominarse. Sonaba tan poco convincente.él mismo era consciente de que Legolas no le creía (¡Amor mío! Si pudieras leer mi corazón, sabrías que me duele más que a ti, pero ese sueño me atormenta cada día y prefiero alejarte de mi ahora que perderte para siempre)
- "Entonces no hay más que decir", Legolas se puso de pie. ("Tengo que salir de aquí, no puede verme llorar. Soy un elfo y no puedo mostrar esa debilidad ante un mortal")
El elfo salió de la habitación rápidamente. ("¡Deténme, por favor! ¡Tómame en tus brazos, que esto solo sea un mal sueño¡") Aragorn lo miró salir, cuánto hubiera dado por detenerlo, pero no podía. Se arrojó nuevamente en la cama, dejando fluir libremente las lágrimas. Al menos lo protegería, Legolas estaría seguro en la fortaleza. Trató de descansar en vano, un sueño intranquilo lo hacía despertar a sobresaltos, muchas veces estuvo tentado de buscar a Legolas, pero volvía a arrojarse a la cama, hundiendo la cabeza en la almohada. Se levantó al alba, cansado y triste. Se lavó el rostro y arregló sus ropas antes de salir al patio, donde Halbarad y sus hombres se preparaban para partir. Allí encontró también a Gimli y a Merry. - "¿Dónde está el elfo loco?, se ha levantado tarde esta vez", preguntó el enano. - "El no irá con nosotros, amigo mío", respondió Aragorn con voz cansada. - "¿Por qué?, ¿qué ha sucedido?", Gimli estaba preocupado por su amigo. - "Yo se lo pedí", contestó Aragorn. - "ahora, amigo mío", dijo dirigiéndose a Merry, - "te pediré un favor. Quédate tú también y cuida de Legolas. No te separes de él y no lo dejes seguirnos" Merry se mostró sorprendido. ¿Qué era lo que estaba pasando entre esos dos? Pero se alegró de no tener que ir al lugar aterrador del que hablaban y sentía gran afecto por el elfo, de modo que aceptó.
Los gemelos despertaron al alba y se vistieron en silencio, cuidando de no despertar a su joven compañero que descansaba aún. Finwë se movió un poco, buscando el calor de sus dos compañeros y abrió los soñolientos ojos al no encontrar a nadie en la cama. Elladan se acercó entonces, besándolo en la frente, y Elrohir hizo lo mismo. - "Debemos partir, pequeño elfo", dijo Elladan, - "espero que nos podamos volver a ver, si salimos con éxito de esa misión" - "Gracias a los dos por lo que hicieron por mí. Pero no debe volver a pasar, pues amo a otro", dijo Finwë abrazándolos. - "Dichoso aquél que tiene tu amor, sólo espero que lo merezca", contestó Elrohir besándolo en los labios. - "Nos diste el regalo más hermoso, siempre serás especial para nosotros", dijo Elladan, besándolo también. - "¡Que Elbereth los proteja!" Y con un abrazo final, los gemelos abandonaron la habitación.
En el patio se habían reunido todos. Haldir, Rúmil y Eowyn acudieron a despedir a los que partirían. Halbarad iría adelante con Aragorn, seguidos de los dos elfos de Rivendel. Elladan y Elrohir montaron en sus caballos. Les extrañó no ver a Legolas, pero no dijeron nada. El montaraz se disponía a montar su caballo, cuando vio acercarse a Legolas. Vestido de blanco, con su arco y flechas al hombro, venía a despedirlos. Aragorn se adelantó unos pasos a su encuentro. - "¿Te irás, Aragorn?" - "Sí. Lo que está escrito ha de cumplirse", respondió él. - "¿No me permitirás acompañarte, como te lo he pedido?" - "No, amigo mío. Te he explicado ya los motivos y no puedo llevarte", respondió Aragorn, con firmeza. ("¡Amigo mío!, ¿es eso lo que siente? Nada tiene sentido entonces.") - "¡Te lo suplico!", susurró el elfo, con la voz quebrada por la pena. * If I could, you know I would / si yo pudiera, lo sabes
If I could, I would / si yo pudiera, lo haría
Let it go... / déjalo ir Gimli sentía encogerse su corazón, pues le parecía haber visto lágrimas en los ojos de su amigo. Como los otros, no entendía lo que estaba sucediendo, pero confiaba en Aragorn. Los gemelos intercambiaron una mirada de entendimiento, sus sospechas parecían confirmarse. - "No, querido amigo", dijo Aragorn, colocando su brazo en el hombro de Legolas, a manera de despedida - "Me esperarás aquí, como prometiste", y subió sobre su caballo, partiendo al galope, sin mirar atrás. Sólo los que lo conocían bien, supieron de su dolor al dejar a su amigo, aunque no sabían la razón de aquella actitud. * This desperation / Esta desesperación
Dislocation / desarticulación
Separation / separación
Condemnation / condenación
Revelation / revelación
In temptation / en tentación
Isolation / aislamiento
Desolation / desolación
Let it go / déjalo ir And so fade away / y así desaparecer
To let it go / para dejarlo ir
And so fade away / y así desaparecer
To let it go / para dejarlo ir
And so to fade away / y así para desaparecer
Legolas continuó de pie, sin moverse, con los cabellos rubios flotando al viento. En su angustia, se veía más bello que nunca y si Aragorn lo hubiese visto en ese momento, habría regresado a sus brazos. Pero el montaraz no volteó ni una sola vez, hasta perderse en el Monte de los Espectros, donde se encontraba la Puerta de los Muertos. Cuando los jinetes desaparecieron, Legolas dio media vuelta emprendió el penoso regreso a la fortaleza, con la frente en alto.
Los elfos de Haldir, con excepción de Finwë, que dormía aún, eran mudos testigos de esa despedida, pero para ellos solo fue el adiós de dos amigos. Los hombres de Rohan que habían acompañado a Eowyn a la fortaleza no habían salido, porque el miedo a aquellos extranjeros temerarios los mantenía ocultos en los refugios.
Haldir y Merry siguieron al elfo. Su mirada era serena, mientras pasaba delante de los arqueros de Lórien, con la majestuosidad de un príncipe élfico. Sólo Haldir, Eowyn y Merry sabían cuanto estaba sufriendo por la partida de Aragorn.
El guardián de Lórien le ofreció gentilmente el brazo, y así avanzaron por las escaleras de la fortaleza, hasta entrar en el pabellón donde estaban sus habitaciones. Caminaron por el pasillo en silencio, hasta llegar a la habitación de Legolas. Haldir abrió la puerta y empujó suavemente al príncipe hacia adentro. Una vez allí, el dominio que Legolas había demostrado se derrumbó completamente, y se arrojó en brazos de Haldir.
- "Ni siquiera volteó.ni una vez.", sollozaba, con la cabeza oculta en el hombro del otro elfo.
- "Shhh, Legolas", Haldir no sabía qué decir para consolar al bello elfo en sus brazos. Acariciaba sus cabellos mientras lo abrazaba, frotando su espalda y tratando de contener los sollozos que estremecían el esbelto cuerpo de Legolas. ¿Qué podría decirle para hacerlo sentir mejor? Él mismo había pensado que el mortal amaba a Legolas, pero se había equivocado porque. ¿qué otra razón habría para no permitirle ir con él?
- "El corazón del hombre es débil", dijo sin pensar, repitiendo algo que había oído desde la infancia.
- ".debí saberlo.es mi culpa.Arwen.", y se abrazaba a Haldir, que lo llevó cuidadosamente hacia la cama sin deshacer, quitándole el arco y flechas, y lo hizo sentar allí sin dejar de abrazarlo.
- "Tu no tienes la culpa de nada, el debió estar seguro antes", le limpió las lágrimas, besando sus párpados con ternura, hasta que poco a poco, Legolas comenzó a relajarse.
- "Duerme, principito. Necesitas descansar", Haldir levantó las cobijas y lo recostó en la cama mientras le quitaba gentilmente las botas.
Legolas estaba agotado, vencido por el llanto y el cansancio, se quedó dormido. Haldir lo arropó cuidadosamente, limpiándole las lágrimas. ¡Qué bello era, aún en su dolor! Lo besó ligeramente en los labios, pero su corazón empezaba a sentir algo distinto, ¿sería que deseaba probar la dulzura de otra boca?
Un tímido golpe en la puerta lo distrajo de sus pensamientos. Se acercó a abrir. Finwë y Merry se encontraban en el umbral de la puerta. Haldir se hizo a un lado para hacerlos pasar.
- "¿Está bien?", preguntó Finwë en un susurro, mirando la cama donde descansaba Legolas.
- "No, no lo está. El mortal le rompió el corazón", respondió Haldir con amargura.
- "Yo pensé.", empezó Finwë
- "Todos lo pensamos, incluso él. Pero ya ves que estábamos equivocados"
- "Los elfos mueren de pena, ¿verdad?"
- "¡No digas eso! Legolas es un príncipe, y es fuerte. Se sobrepondrá a esta pena, te lo aseguro", replicó Haldir.
-"¿Y tú qué sabes de penas de elfos? Por lo que sé, nunca sufriste por alguien", la voz del joven elfo estaba cargada de reproche.
- "Si tú sufriste antes, creo que ya encontraste el consuelo, y no te conformaste con uno.", dijo Haldir airadamente.
- "¡Basta! o lo despertarán. Aragorn me encomendó cuidarlo, y eso es lo que haré", dijo Merry sorprendiéndolos a ambos con su actitud decidida - "ahora por favor déjenlo descansar que yo velaré su sueño"
Los dos elfos se retiraron, visiblemente avergonzados. Finwë miraba de soslayo a Haldir ("¿sabrá lo que pasó?"), mientras que Haldir, sabiéndose observado, aparentaba indiferencia. ("¡me estoy poniendo en evidencia! ¿qué me pasa con este muchacho?").
TBC
(Con mucho cariño, para Jun)
Disclaimer: Todo esto pertenece a Tolkien, con excepción de Finw? que es una humilde creación mía.
A/N: He usado algunos diálogos del libro, modificados para adaptarlos a mi historia. La música (otra vez) es Bad, de U2.
*** If you twist and turn away / si te das la vuelta y te vas
If you tear yourself in two again / si te partes en dos de nuevo
If I could, yes I would / si yo pudiera, sí lo haría
If I could, I would / si yo pudiera, lo haría
Let it go / déjalo ir
Surrender / Rendición
Dislocate / Desarticulación (Bad - U2)
Aragorn se encerró en su habitación y se arrojó vestido sobre la cama. Tenía que hablar con Legolas esa noche. Estaba decidido a impedir que el elfo lo acompañara a cabalgar por los Senderos de los Muertos. El mensaje de Galadriel, su sueño, la profecía enviada por Arwen, todo contribuía a confirmar su temor de que Legolas corría peligro. Sabía que el elfo no aceptaría quedarse y que no daría crédito a sus palabras, pero no lo llevaría, por mucho que le costase lograrlo. Estaba seguro de amarlo, pero no se lo podía decir antes de hablar con Arwen y tomar la decisión de respetar su palabra o los deseos de su corazón. Pero el momento de las decisiones aún no llegaba, primero debía vencer en la lucha contra el enemigo oscuro.
Legolas esperó a que todos se hubieran retirado a sus habitaciones y salió de la suya en silencio. Caminó por el pasillo sin hacer ruido, pasando por la habitación de Elladan, donde le pareció escuchar lamentos. Al menos el molesto hermano de Arwen estaba allí y no vigilándolo. Llegó a la habitación de Aragorn y llamó a la puerta, lo más despacio que pudo.
El montaraz lo estaba esperando. Se abrazaron un momento interminable, hasta que Aragorn apartó al elfo suavemente, y lo llevó a la cama donde se sentaron.
Legolas miraba el piso. (El momento ha llegado, él me dirá que ama a Arwen). Aragorn pasó su mano por la barbilla del elfo, y lentamente hizo que levantara el rostro lleno de pena.
- "Hermoso mío, mañana debo partir al alba y cumplir así con lo que ha sido escrito".
- "Entonces, ¿insistes en no llevarme?", Legolas se sentía lastimado. ¿Por qué apartarlo ahora? ¿tendría que ver con la llegada de los gemelos?
- "Te lo he explicado, correrás peligro. No deseo que sufras ningún daño", Aragorn habló en un tono firme, aunque por dentro sufría tanto o más que Legolas.
- "Aragorn, soy un elfo y un guerrero. No temo a los espectros ni creo en las profecías de los hombres. Además, Elladan y Elrohir irán y ellos son también elfos", hizo una pausa para agregar - "Sólo temo separarme de ti".
Legolas tenía razón, los elfos eran la raza más fuerte de la Tierra Media, pero la visión y la profecía.¡no! no lo expondría en vano. Sólo quedaba una cosa por hacer.
- "¿Legolas, me amas?", estaba seguro de la respuesta. Cuánto hubiese dado por poder decírselo también, pero debía callar. Al menos eso le debía a Arwen.
- "Con cada partícula de mi cuerpo, con mis pensamientos, con mi corazón", Legolas lo miró con esos hermosos ojos azules. Aragorn le escondía algo, pero a la vez veía sufrimiento en sus ojos y no deseaba ser la causa de eso.
- "Entonces, mi bello elfo, sólo te pido que hagas una cosa por mí", dijo Aragorn con voz firme, "te quedarás en la fortaleza y esperarás aquí mi regreso. Promételo". Fueron las palabras que más le costaron pronunciar, sobre todo porque sabía el daño que le iba a causar a Legolas con ellas, pero no tenía alternativa.
Legolas no dijo nada. (¡Me quiere apartar de su lado! Cuánta razón tenía Haldir, ahora que ha recordado su promesa, no soy más que un estorbo en su camino)
- "¡Promételo!"
- "Dime la verdad, Aragorn. ¿La amas aún? ¿cumplirás lo que prometiste, es eso? ¿Elladan y Elrohir han venido a recordártelo, no es así? Dime que no me quieres más a tu lado, ¡dímelo!", la angustia era evidente en la voz del elfo.
- "Lo hago por tu seguridad.", Aragorn trató desesperadamente de dominarse. Sonaba tan poco convincente.él mismo era consciente de que Legolas no le creía (¡Amor mío! Si pudieras leer mi corazón, sabrías que me duele más que a ti, pero ese sueño me atormenta cada día y prefiero alejarte de mi ahora que perderte para siempre)
- "Entonces no hay más que decir", Legolas se puso de pie. ("Tengo que salir de aquí, no puede verme llorar. Soy un elfo y no puedo mostrar esa debilidad ante un mortal")
El elfo salió de la habitación rápidamente. ("¡Deténme, por favor! ¡Tómame en tus brazos, que esto solo sea un mal sueño¡") Aragorn lo miró salir, cuánto hubiera dado por detenerlo, pero no podía. Se arrojó nuevamente en la cama, dejando fluir libremente las lágrimas. Al menos lo protegería, Legolas estaría seguro en la fortaleza. Trató de descansar en vano, un sueño intranquilo lo hacía despertar a sobresaltos, muchas veces estuvo tentado de buscar a Legolas, pero volvía a arrojarse a la cama, hundiendo la cabeza en la almohada. Se levantó al alba, cansado y triste. Se lavó el rostro y arregló sus ropas antes de salir al patio, donde Halbarad y sus hombres se preparaban para partir. Allí encontró también a Gimli y a Merry. - "¿Dónde está el elfo loco?, se ha levantado tarde esta vez", preguntó el enano. - "El no irá con nosotros, amigo mío", respondió Aragorn con voz cansada. - "¿Por qué?, ¿qué ha sucedido?", Gimli estaba preocupado por su amigo. - "Yo se lo pedí", contestó Aragorn. - "ahora, amigo mío", dijo dirigiéndose a Merry, - "te pediré un favor. Quédate tú también y cuida de Legolas. No te separes de él y no lo dejes seguirnos" Merry se mostró sorprendido. ¿Qué era lo que estaba pasando entre esos dos? Pero se alegró de no tener que ir al lugar aterrador del que hablaban y sentía gran afecto por el elfo, de modo que aceptó.
Los gemelos despertaron al alba y se vistieron en silencio, cuidando de no despertar a su joven compañero que descansaba aún. Finwë se movió un poco, buscando el calor de sus dos compañeros y abrió los soñolientos ojos al no encontrar a nadie en la cama. Elladan se acercó entonces, besándolo en la frente, y Elrohir hizo lo mismo. - "Debemos partir, pequeño elfo", dijo Elladan, - "espero que nos podamos volver a ver, si salimos con éxito de esa misión" - "Gracias a los dos por lo que hicieron por mí. Pero no debe volver a pasar, pues amo a otro", dijo Finwë abrazándolos. - "Dichoso aquél que tiene tu amor, sólo espero que lo merezca", contestó Elrohir besándolo en los labios. - "Nos diste el regalo más hermoso, siempre serás especial para nosotros", dijo Elladan, besándolo también. - "¡Que Elbereth los proteja!" Y con un abrazo final, los gemelos abandonaron la habitación.
En el patio se habían reunido todos. Haldir, Rúmil y Eowyn acudieron a despedir a los que partirían. Halbarad iría adelante con Aragorn, seguidos de los dos elfos de Rivendel. Elladan y Elrohir montaron en sus caballos. Les extrañó no ver a Legolas, pero no dijeron nada. El montaraz se disponía a montar su caballo, cuando vio acercarse a Legolas. Vestido de blanco, con su arco y flechas al hombro, venía a despedirlos. Aragorn se adelantó unos pasos a su encuentro. - "¿Te irás, Aragorn?" - "Sí. Lo que está escrito ha de cumplirse", respondió él. - "¿No me permitirás acompañarte, como te lo he pedido?" - "No, amigo mío. Te he explicado ya los motivos y no puedo llevarte", respondió Aragorn, con firmeza. ("¡Amigo mío!, ¿es eso lo que siente? Nada tiene sentido entonces.") - "¡Te lo suplico!", susurró el elfo, con la voz quebrada por la pena. * If I could, you know I would / si yo pudiera, lo sabes
If I could, I would / si yo pudiera, lo haría
Let it go... / déjalo ir Gimli sentía encogerse su corazón, pues le parecía haber visto lágrimas en los ojos de su amigo. Como los otros, no entendía lo que estaba sucediendo, pero confiaba en Aragorn. Los gemelos intercambiaron una mirada de entendimiento, sus sospechas parecían confirmarse. - "No, querido amigo", dijo Aragorn, colocando su brazo en el hombro de Legolas, a manera de despedida - "Me esperarás aquí, como prometiste", y subió sobre su caballo, partiendo al galope, sin mirar atrás. Sólo los que lo conocían bien, supieron de su dolor al dejar a su amigo, aunque no sabían la razón de aquella actitud. * This desperation / Esta desesperación
Dislocation / desarticulación
Separation / separación
Condemnation / condenación
Revelation / revelación
In temptation / en tentación
Isolation / aislamiento
Desolation / desolación
Let it go / déjalo ir And so fade away / y así desaparecer
To let it go / para dejarlo ir
And so fade away / y así desaparecer
To let it go / para dejarlo ir
And so to fade away / y así para desaparecer
Legolas continuó de pie, sin moverse, con los cabellos rubios flotando al viento. En su angustia, se veía más bello que nunca y si Aragorn lo hubiese visto en ese momento, habría regresado a sus brazos. Pero el montaraz no volteó ni una sola vez, hasta perderse en el Monte de los Espectros, donde se encontraba la Puerta de los Muertos. Cuando los jinetes desaparecieron, Legolas dio media vuelta emprendió el penoso regreso a la fortaleza, con la frente en alto.
Los elfos de Haldir, con excepción de Finwë, que dormía aún, eran mudos testigos de esa despedida, pero para ellos solo fue el adiós de dos amigos. Los hombres de Rohan que habían acompañado a Eowyn a la fortaleza no habían salido, porque el miedo a aquellos extranjeros temerarios los mantenía ocultos en los refugios.
Haldir y Merry siguieron al elfo. Su mirada era serena, mientras pasaba delante de los arqueros de Lórien, con la majestuosidad de un príncipe élfico. Sólo Haldir, Eowyn y Merry sabían cuanto estaba sufriendo por la partida de Aragorn.
El guardián de Lórien le ofreció gentilmente el brazo, y así avanzaron por las escaleras de la fortaleza, hasta entrar en el pabellón donde estaban sus habitaciones. Caminaron por el pasillo en silencio, hasta llegar a la habitación de Legolas. Haldir abrió la puerta y empujó suavemente al príncipe hacia adentro. Una vez allí, el dominio que Legolas había demostrado se derrumbó completamente, y se arrojó en brazos de Haldir.
- "Ni siquiera volteó.ni una vez.", sollozaba, con la cabeza oculta en el hombro del otro elfo.
- "Shhh, Legolas", Haldir no sabía qué decir para consolar al bello elfo en sus brazos. Acariciaba sus cabellos mientras lo abrazaba, frotando su espalda y tratando de contener los sollozos que estremecían el esbelto cuerpo de Legolas. ¿Qué podría decirle para hacerlo sentir mejor? Él mismo había pensado que el mortal amaba a Legolas, pero se había equivocado porque. ¿qué otra razón habría para no permitirle ir con él?
- "El corazón del hombre es débil", dijo sin pensar, repitiendo algo que había oído desde la infancia.
- ".debí saberlo.es mi culpa.Arwen.", y se abrazaba a Haldir, que lo llevó cuidadosamente hacia la cama sin deshacer, quitándole el arco y flechas, y lo hizo sentar allí sin dejar de abrazarlo.
- "Tu no tienes la culpa de nada, el debió estar seguro antes", le limpió las lágrimas, besando sus párpados con ternura, hasta que poco a poco, Legolas comenzó a relajarse.
- "Duerme, principito. Necesitas descansar", Haldir levantó las cobijas y lo recostó en la cama mientras le quitaba gentilmente las botas.
Legolas estaba agotado, vencido por el llanto y el cansancio, se quedó dormido. Haldir lo arropó cuidadosamente, limpiándole las lágrimas. ¡Qué bello era, aún en su dolor! Lo besó ligeramente en los labios, pero su corazón empezaba a sentir algo distinto, ¿sería que deseaba probar la dulzura de otra boca?
Un tímido golpe en la puerta lo distrajo de sus pensamientos. Se acercó a abrir. Finwë y Merry se encontraban en el umbral de la puerta. Haldir se hizo a un lado para hacerlos pasar.
- "¿Está bien?", preguntó Finwë en un susurro, mirando la cama donde descansaba Legolas.
- "No, no lo está. El mortal le rompió el corazón", respondió Haldir con amargura.
- "Yo pensé.", empezó Finwë
- "Todos lo pensamos, incluso él. Pero ya ves que estábamos equivocados"
- "Los elfos mueren de pena, ¿verdad?"
- "¡No digas eso! Legolas es un príncipe, y es fuerte. Se sobrepondrá a esta pena, te lo aseguro", replicó Haldir.
-"¿Y tú qué sabes de penas de elfos? Por lo que sé, nunca sufriste por alguien", la voz del joven elfo estaba cargada de reproche.
- "Si tú sufriste antes, creo que ya encontraste el consuelo, y no te conformaste con uno.", dijo Haldir airadamente.
- "¡Basta! o lo despertarán. Aragorn me encomendó cuidarlo, y eso es lo que haré", dijo Merry sorprendiéndolos a ambos con su actitud decidida - "ahora por favor déjenlo descansar que yo velaré su sueño"
Los dos elfos se retiraron, visiblemente avergonzados. Finwë miraba de soslayo a Haldir ("¿sabrá lo que pasó?"), mientras que Haldir, sabiéndose observado, aparentaba indiferencia. ("¡me estoy poniendo en evidencia! ¿qué me pasa con este muchacho?").
TBC
