¡Hola! Por fin me pude medio inspirar para escribir algo.
Este fic está basado en el capítulo 118 pero no hay muchos spoilers así que no se preocupen.
Por si acaso los últimos capítulos de InuYasha los pueden conseguir en (fangirlfriday . org)
Bien para finalizar este es un Sango/Miroku, desde hace rato tenía pendiente hacer uno. Ai espero que te guste.
Disclaimer: InuYasha y sus personajes no son míos y al paso que voy nunca lo serán.
Cuando desperté me sorprendí mucho. Por un momento me asusté al pensar lo que me pudo haber hecho un pervertido como el.
Es que al fin de cuentas no todos los días me despierto con el Houshi-sama recostado encima mío.
Lo primero que hice fue levantarme como pude, mi corazón palpitaba con fuerza, no recordaba bien que había sucedido y cuando por fin recordé lo que pasó me moleste.
¡Él esta así por mi culpa¡Por que soy débil y deje que mi propia arma me venciera!
El usó su Kazaana sin importarle la cantidad de insectos que habían aquí. ¡Acaso lo hizo por protegerme?
-¿Houshi-sama¡Despierte¡Por favor! - fue todo lo que pude decir mientras lo sacudía levemente e intentaba contener las lágrimas que tercamente luchaban por salir de mis ojos.
Sin poder evitarlo más comencé a llorar. No sabia que hacer, era mi culpa.
-¿Houshi-sama¿Houshi-sama¡Por favor¡Abra sus ojos!-
-¿Houshi-sama?- dejé de sacudirlo, las lágrimas surcaban mis mejillas libremente, una de ellas cayó en su rostro.
Cuando abrió sus ojos no pude de mi felicidad. Aun estaba vivo.
-Sango... que bien, tú también reaccionaste. - dijo con voz débil.
No recuerdo bien que sucedió después, creo que dijo que me fuera y lo dejase allí. Pero yo no quise, no lo dejaría por nada del mundo allí para que lo mataran. No me iré sin él.
Después me pidió que sobreviviera por él.
Volví a comenzar a llorar y me negué rotundamente. No recuerdo cuales fueron las palabras exactas que dije en mi desesperación, creo fue algo parecido a que "prefería morir con él" y me puse a llorar en su pecho.
Él solo me abrazó y acarició mi espalda tiernamente.
Me alegro tanto que por primera vez no haya dañado un momento así.
En
esos instantes, a pesar de mi posible muerte, no estaba triste, me
sentía feliz de poder estar así con el Houshi-sama, no... no con el
Houshi, con Miroku.
De repente él se levantó hasta quedar sentado. No se si se sentía mejor a pesar de todo el veneno que seguramente absorbió. Comentó algo acerca de que era extraño que no nos hubiesen atacado aun, él tenía razón.
Cuando uno de los tantos youkais intentó hacerlo la famosa barrera apareció. Lo recuerdo perfectamente ya que en ese momento él me abrazó con más fuerza.
Cuando nos dimos cuenta que el youkai no lo consiguió llegar a nosotros el Houshi-sama hizo lo que pudo por levantarse y dijo que nos fuéramos o algo así.
-Houshi-sama ¿Está bien?- pregunté mirándolo, aun algo sonrojada.
-Sí. Parece que después de todo no tendremos que morir juntos- dijo en voz baja.
Sentí que mi corazón palpitaba cada vez más rápido y mi sonrojo fue mayor.
-Y... ¿yo dije algo así?- fue lo único que pude decir dándole la espalda, intentando ignorar los impulsos de abrazarlo y darle un beso.
Tuve la impresión de que se entristeció un poco, pero supongo que él también lo sabe que aun no es el momento.
Pero cuando todo termine espero que podamos estar juntos.
-o-
Y si llegaron hasta aquí déjenme algún review así sea diciéndome que no sirvo para esto o, por el contrario, que les gustó y debería escribir más.
Bye, bye.
-Nakuru Tsukishiro.
