Todo llega a su fin, y éste es el último capítulo. He tenido más lectores de los que creía, muchas gracias. Y agradecer mucho más a los que me han mostrado su escribiéndome, gracias a todos y en especial a Phoebe17 y Danita M, por su constante auxilio en momentos necesarios.

Espero, a mi vuelta, poder escribir otro ff, si se me ocurre alguna idea. Creo que mi amigo Oscar, el cual no se creía que fuera a escribir nunca una cosa así, ha leído la historia. Si es así espero que te haya gustado, ya sabes que tus críticas son bien recibidas, o no. Es broma.

Espero que todos me digáis vuestro punto de vista a través de un review (al final de la página le das al "go" y escribes, es fácil, anímate). Me despido, no sin antes dejaros con el desenlace.

CAPÍTULO 18: LA DECISIÓN

Sara aún no podía irse del laboratorio. Necesitaba acabar mucho papeleo y acabar de dejar el caso resuelto con algunas pruebas que faltaban por confirmar. Esos malditos ordenadores iban demasiado despacio a veces, sobretodo cuando más te urgía irte. Es más, Grissom había insistido en que debía acabarlo todo cuanto antes, los agentes del FBI necesitaban llevarse a los inculpados para procesarlos en el primer estado donde cometieron su crimen. De repente, todo el mundo tenía prisa.

Pasaron varias horas hasta que hubo terminada todo. Ya se podía ir. Al salir hacia el aparcamiento se sorprendió al ver que ya era de día, debía ser ya tarde pues había mucha gente en la calle. Normalmente, cuando acababan su turno, las personas normales seguían durmiendo en su casa. Por lo tanto, debían ser sobre las 10 de la mañana. Llevaba más de 24 horas despierta, pero no tenía tanto sueño como se suponía que debía tener. De todos modos quería irse a dormir, pero antes era necesario ir al hospital.

El tráfico era insoportable. No estaba acostumbrada a coger la calle del Strip a hora punta, por la noche se conducía mucho mejor. Sara pensaba en coger un atajo, pero el camino más recto seguía siendo el Strip, aunque la cantidad de coches no te dejara ver el asfalto que tenías delante de ti.

A Sara le costó una hora más llegar al hospital. Era un día muy caluroso y el aire acondicionado del coche no la había ayudado mucho a soportar mejor las altas temperaturas. Aparcó el coche y subió a la segunda planta del hospital. Se dirigía a la habitación 202. Mientras subía por el ascensor pensaba en lo que le diría a Nick. ¿Qué le podía decir? No sabía muy bien cómo actuar, sólo sabía que debía ir a verle ¿Y una vez en frente suyo qué? En las últimas horas se había dado cuenta de que Nick era algo más que un amigo, sólo le lamentaba de que se diera cuenta de ello cuando estuvo a punto de perder a su amigo. Había sido muy cobarde.

Al abrir la puerta de la habitación vio que ésta estaba vacía. De repente se asustó ¿le habría pasado algo y nadie le había dicho nada? Miró en el lavabo, pero nada. Se dirigió hacia la recepción de emergencias.

"Perdone" dijo Sara "pero ¿qué ha pasado con la persona que estaba en la habitación 202?"

"¿202?" dijo la enfermera de recepción

"Nick, Nick Stokes" dijo Sara

"Ahhh, el señor Stokes. Fue dado de alta esta mañana bien temprano"

"¿De alta? ¿Pero si aún debería estar en reposo?"

"Por lo que tengo entendido el médico pasó de madrugada a hacer una visita a los enfermos que estaban hospitalizados en emergencias. El señor Stokes estaba fuera de peligro, estable, y sin peligro de posible recaída. Por lo que se ve, el señor Stokes rogó al médico que le diera el alta porque necesitaba hacer no sé qué, que era urgente"

"No entiendo ¿Y le dan el alta sin más? ¿Sin avisar a nadie, ni familiar ni nada?"

"El señor Stokes dijo que su familia no residía en Las Vegas, sino en Texas y que sus amigos debían de estar trabajando, por lo que prefería que no se avisase a nadie. Perdone pero no sé más. El alta lo dan los médicos, gracias a que yo estoy aquí delante de la puerta 202 y pude enterarme de casi toda la conversación. No es que yo sea cotilla, ya sabe, simplemente me preocupo por mis enfermos"

"Claro" dijo Sara como si le diese la razón a los tontos "gracias por la información de todas formas"

Mientras Nick ya estaba acabando de hacer las maletas. Era lo único que le quedaba por hacer. Había reservado un vuelo para Houston para el medio día, había tenido suerte de haber encontrado uno con tan poca antelación. Ya había llamado a Grissom para pedirle una semana libre. No había objetado nada incluso le había dicho que si necesitaba más tiempo lo cogiera, pero que lo quería de vuelta con las pilas cargadas, que lo necesitaban. Eso le había gustado a Nick, era la primera vez que Grissom admitía que era necesario en el equipo. Nick sabía que Sara y Warrick eran sus preferidos, él tan sólo pedía su lugar y que se reconociera su trabajo. Por fin lo había escuchado.

Nick sacó la bolsa con las pocas cosas que se llevaba y cerró la puerta de la casa. Mientras estaba de espaldas escuchó el ruido de un motor como paraba enfrente de su casa. Ese no era el taxi que estaba esperando, pensó, sonaba como su coche, era un Tahoe. Se giró y vio a Sara bajar del vehículo.

"¿Se puede saber qué demonios estás haciendo?" gritaba Sara

"Yo también me alegro de verte Sara"

"Deberías estar en el hospital en reposo"

"No me gustan los hospitales. Además el médico me dio el alta ¿no?, pues ya está"

"¿Y dónde vas? No creo que en tu estado debas ir ningún lado"

"Voy a casa"

"Nick, ya estás en casa"

"Vaya, gracias. Pero tranquila, sólo me voy una semana con mis padres. Seguro que mi madre está deseando mimarme un poco. Hace mucho que no voy a verla. Grissom me ha dado una semana de vacaciones y no tengo nada mejor que hacer por aquí"

"¿Una semana? Warrick me dijo-" Sara se acaba de dar cuenta de que Warrick la había engañado. Bueno, en realidad no, sólo le hizo dar a entender que Nick volvía a Texas y que les dejaba. Warrick, Warrick. Sólo lo había hecho para que reaccionara.

"¿Sara? ¿Qué decías? Parece que se te haya comido la lengua el gato"

"Nada, sólo es que, creía que te ibas y ya no volverías"

"¿No volver? Vaya no sabía que os querías deshacer de mí de buenas a primeras. ¿Pero qué ibais a hacer sin mí? Debes admitir que sería muy aburrido el trabajo-" Sara sonreía. Sabía que él tenía razón. De repente escucharon un claxon sonar y ambos se giraron.

"Mi taxi" dijo Nick. Éste cogió su bolsa "Bueno Sara nos vemos en una semana" y se dirigió hacia el taxi

"¡Espera!" dijo Sara cuando él tan sólo se había alejado un par de metros "Yo-" Sara no sabía articular palabra

"Sara, el taxi me espera, pero no creo que mi vuelo lo haga. Seguro que lo que tengas que decir puede esperar una semana" dijo Nick mientras se dirigía de nuevo hacia el taxi.

"No. Nick, te lo pido"

Nick se giró sorprendido "¿Cómo has dicho?"

"Que pido que te acerques a mi, que no me dejes. Te pido que te quedes"

"Sara no pidas algo de lo que te vayas a arrepentir" dijo mirándola a los ojos

"Te lo pido"

Nick soltó la bolsa y la dejó caer al suelo. Fue hacia Sara, cogió con sus dos manos su cara y la besó. Esta vez el beso sí fue correspondido. Sus manos rodearon la cintura de Sara y la apretaba más hacia él, mientras Sara colocó sus brazos rodeando el cuello de Nick. Se estuvieron así un rato hasta que el claxon del taxo volvió a sonar. Entonces se separaron.

"No te vayas" dijo Sara

Nick se separó y fue hacia el taxista y le dio algo de dinero por la espera. El taxi se fue y él se giró hacia Sara sonriendo.

"¿Y ahora qué?" preguntó Nick encogiendo los hombros

"Espero que no te importe, pero necesito dormir. Sé que no es lo que esperabas escuchar pero no puedo más"

Nick se acercó a ella y la volvió a rodear con sus brazos al tiempo que le daba un dulce beso en los labios. "No me importa, siempre que no te importe a ti que duerma a tu lado" dijo Nick con una de sus sonrisas en la cara

"No, creo que ya me voy acostumbrando a ello ¿Ahora tengo permiso para acurrucarme a tu lado?"

"Puedes hacer conmigo lo que quieras"

Nick cogió su bolsa con la mano derecha, mientras que con la izquierda cogió la mano de Sara. Ambos entraron en la casa de Nick, y ambos se quedaron dormidos al poco rato de acostarse. Dormían abrazados y con cara de felicidad. En ese mismo instante, el mundo era perfecto.

_____________________________ FIN_____________________________________