LILY, EL CHICO ADOLESCENTE

Capitulo nueve: Por que lo digo yo, parte I

El dulce mes de febrero llego con el mismo frió glacial que había imperado por los últimos dos meses, por todos lados en Londres se podían ver motivos alusivos al día del amor y la amistad. A Lily, lentamente, le empezaron a llegar las tarjetas y regalos de sus amigos, al igual que a Evan. Todo pintaba para ser un 14 de febrero perfectamente normal, cuando la carta fatídica llego un jueves por la mañana

Lily y Evan desayunaban y reían, aun era muy temprano y el gran comedor estaba prácticamente vacío, conversaban sobre sus planes para pasar el día catorce

- Van a pasar un maratón de películas musicales en el parque del centro

- Adoro las películas musicales - grito Evan entusiasmándose de pronto, los dijo tan alto que la mitad de los que estaban en el comedor al voltearon a ver - ¿Qué? Todos tenemos algún placer culpable.

- Entonces, ¿vamos a ir a ver las películas musicales?

- ¿Películas musicales? - preguntó Sirius sentándose junto a Lily, después de convivir civilizadamente un poco, se dieron cuenta de que, de hecho, si podían llevarse bien, y que de hecho tenía muchas cosas en común - Luke, Luke, Luke, te lo he dicho cientos de veces, esa es la clase de cosa que te hace sonar gay, solo a los gay y a las chicas les gustan las películas musicales

- Umm, hola, estoy aquí y soy una chica - dijo Evan alzando la mano - y ¿que tiene de malo si mi amigo me quiere acompañar a ver las un par de películas musicales? (yo he visto Star Wars cientos de veces por que le gusta)

- Y eso viene de la persona que juro no conocer a ningún hombre con un pizca de testosterona que pudiera ver La Bella y la Bestia, el musical, sin sentir arcadas - le informo Lily a Sirius

- En realidad eso lo dijo tu hermano, ¿recuerdas? Fue después de que volvimos de ese viaje escolar a Toronto, le estábamos diciendo a Ben que Greg dio una ovación de pie cuando la función termino - corrigió Evan

- Oh, si es cierto...

- No saben como me encanta cuando se ponen a hablar de gente que no conozco - dijo Sirius con sarcasmo

- Tú, Remus y James lo hacen todo el tiempo, no te quejes - intervino Evan.

Entonces el correo llego, como cada mañana, las lechuzas entraron rápidamente al comedor dejando paquetes y cartas. Evan no esperaba correo, así que siguió desayunando, Sirius, James y Remus abrieron sus propias cartas. Lily recibió una carta de su hermano, la había abierto muy contenta, pero, mientras avanzaba en su lectura, iba perdiendo el color

- ¿Estas bien? - pregunto James mirando a Lily, blanca como un papel

- Si, eso creo. Olvide algo en el dormitorio, ahora vuelvo - respondió levantándose tan rápido que casi tira su copa de jugo de naranja, y encaminándose a la salida del gran comedor

- Aquí vamos de nuevo - murmuro Evan poniéndose en pie y siguiendo a Lily, como lo sospechaba había ido a dar a la enfermería

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- Lily, espera, ¿quieres? - dijo alcanzándola justo afuera de la entrada de la enfermería - ¿Qué ocurre?

- Ben vendrá a visitarme, tiene que asistir a una conferencia en Londres y vendrá a verme,

- Uh- hu, Houston, tenemos un problema - dijo Evan en tono dramático

- ¿Cómo voy a lograr mantener mi secreto con él aquí? ¿Y si se le ocurre que quiere venir al colegio? Me voy a volver loca - Lily seguía balbuceando incoherencias mientras ingresaban a la enfermería - Doctor Fletcher, creo que me voy a morir - exclamo de pronto para llamar la atención del medico que fumaba un cigarrillo echando el humo por la ventana

- ¿Qué ocurre ahora? - preguntó sin voltear a verla - Hola Evan - agrego suponiendo que ella estaría ahí

- ¿Qué hay de nuevo, Doc?

- Deja de hablar como Bugs Bunny - dijo Lily a Evan, luego agrego - El asunto es que mi hermano viene de visita la próxima semana

- ¿El chico lindo de la fotografía que me enseñaste cuando Evan estaba perdida en el despacio? (chiste interno, disculpen) - eso había captado la atención del buen doctor

- Sí - respondió Lily - Vaya, me pone mas atención de lo que suponía. Como sea, ¿qué voy a hacer?

- Me lo podrías presentar...

- Olvídelo, es derecho como flecha - informó Lily, lo cual pareció desilusionar un poco al doctor

- Eso siempre sucede con los mas lindos - suspiro resignado - Bien, volviendo a tu problema, solo arréglatelas para mantenerlo lejos del colegio, cítalo en algún otro lugar, inventa cualquier excusa, que no dejan entrar muggles a la escuela, o que se yo. Necesitaras ropa de mujer, creo que Evan puede ayudarte con eso

- Sí, sabes que con una llamada telefónica, y tendrás lo ultimo de la colección de mi padre. El es diseñador de modas - agrego Evan para explicarle al doctor - Yanic Hennessy

- Eso es un problema menos - dijo el doctor - esto es lo que haremos: En cuanto Evan consiga la ropa la dejará aquí, antes de que salgas a ver a tu hermano vienes aquí con una mochila, tomas la ropa, sales. Te cambias antes de llegar a verlo, cuando te despidas de él te vuelves a cambiar y vuelves al colegio... y asunto arreglado

- Lo hace sonar tan fácil.... - dijo Lily

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James sabía que no debía espiarla, pero había estado actuando muy raro desde hacía un par de días, por eso aquella mañana de viernes se había ido tras ella para comprobar que todo estuviera bien, por mas que le preguntaba ella no respondía, por eso tomo acciones en sus manos. La siguió hasta un café en la calle Park West, la vio entrar sigilosamente e ingresar al baño de mujeres, diez minutos mas tarde salió una pelirroja vestida con una falda larga en varios tonos cafés, un suéter color arena y una chaqueta de mezclilla

La vio mirar el reloj y sentarse en una pequeña mesa para dos cerca de la terraza, momentos mas tarde un hombre rubio de ojos verdes ingreso al local, tendría unos diecinueve años a lo mucho, pensó James. Mirándolo mas detenidamente se dio cuenta que sus ojos eran iguales a los de Luke.

- Hermanita - grito el joven al ver a Lily sentada - ¿Cómo esta mi florecita?

- Hermano - dijo Lily levantándose y abrazando a su hermano mayor - Me da gusto verte, ¿cómo están todos en casa? ¿mamá? ¿Joan? ¿mis amigos?

- Todos están bien, Joan me pidió que te diera esto - dijo entregándole un paquete - Así que, Lily, ¿como te trata Londres después de tanto tiempo? ¿Te gusta tu colegio? ¿has hecho amigos?

- Me encanta mi colegio, y sí he estado haciendo algunos amigos, ya te contaré de ellos luego. Evan también esta aquí. Y que te parece, la ciudad a cambiado bastante ¿verdad?, yo no lo podía creer la primera vez que la volví a ver, un deja la ciudad una década...

- ... y todo cambia, lo sé. ¿No has visto al hombre? - "el hombre" era como Ben se refería a su padre

- ¿Al responsable de la mitad de mis genes? Nop, pero vi a Petunia antes de navidad

- ¿Qué dice la vieja jamelga? - (jamelgo es una forma de decir caballo, ¿recuerdan? Tía Petunia tiene cara de caballo)

- No mucho, tiene un novio, se llama Vernon Dusrley, es tanto o menos agradable que ella

- Vaya, y yo que pensaba que eso era imposible...

James los escucho por un rato, y se enteró de muchas cosas que no sabía sobre Lily, de principio que su nombre era Lily y no Luke, pero después de un tiempo decidió que ya era demasiada intromisión y salió furtivamente por la parte trasera del local, tener una capa de invisibilidad podía ser muy útil algunas veces.

Los hermanos Evans hablaron por un buen rato, poniéndose al día, Ben no estaba muy contento con eso de que su hermanita dejara su hogar en el lindo y pintoresco Mapleville, que ostentaba el récord de criminalidad mas bajo del Canadá, donde él podía vigilarla todo el tiempo y asegurarse de que ningún pervertido se le acercara (y por pervertido, Ben entendía cualquier jovencito mayor de 16 años que no fuera homosexual); pero conocía de sobra a su hermana, y sabía que podía ser la persona mas dulce del mundo pero que tenía una voluntad de acero

Cerca de las dos, Ben anuncio que tenía que volver a su hotel por que tenía que reunirse con el grupo de amigos con los que había ido a Londres, iban a una visita guiada o algo así. Antes de que Ben se pudiera ofrecer a acompañar a Lily a la escuela, Lily dijo que ella lo acompañaría hasta su hotel

Después de que Ben se ofreciera a ir con Evan y Lily a ver las películas musicales al día siguiente, Lily se despidió de su hermano enfrente de los elevadores del hotel, una vez que la puertas del elevador se cerraron, Lily se dirigió a uno de los baños que había en el lobby del hotel se cambio, guardo su ropa de mujer en la mochila y se aseguro de haberse quitado del todo el maquillaje que se había puesto, una vez que termino, salió del hotel usando unos jeans, sudadera y gorra, por si acaso se topaba con Ben a la salida

Camino de regreso a Hogwarts y llego justo a la hora de la comida

- ¿Cómo te fue? - pregunto Evan a Lily mientras se servía una gran porción de puré de papas - Todo salió bien, ¿cómo esta Ben?

- Bien, te mando a saludar, dijo que nos acompañaría mañana por la noche a ver las películas, cree que no deberíamos andar solas por la calle en la noche. Sabes que es muy sobre protector -

- Sí, he tenido bastante de su sobreprotección - dijo Evan mas para ella misma que para Lily - Bueno, al menos todo ha salido bien.

El resto del día paso sin sobre saltos, todo iba a la perfección, por la noche se organizo una partida de Snap Explosivo, y todos estaban gritando y armando jaleo, se sentía un ambiente bastante feliz, James secretamente encontraba alivio en que no todos estaban sentados en parejas acarameladas, y de que Sirius no se la pasaba tratando de juntarlo con alguna amiga de cual fuera quien fuera la chica con la que estaba saliendo.

Lily se divirtió mucho, contenta de descubrir que para pasar un buen rato en vísperas de San Valentín, no se requería tener un novio, que con un grupo de amigos bastaba.

Sin embargo, al día siguiente, a la misma hora, las cosas no eran ni remotamente igual de felices, no para Lily y Evan al menos...

Evan y Lily volvieron a la escuela mucho mas temprano de lo que habían planeado, Evan iba llorando y se encerró en su cuarto tan pronto como alcanzo la puerta después de jurarle a Lily que estaría bien...

Lily, volvió a su dormitorio, la cabeza le daba algo de vueltas, se había enterado de muchas cosas muy de repente, la pelea entre su hermano y su amiga le había rebelado muchas cosa, como el que habían salido en secreto por mucho tiempo, que hasta hacía media hora eran novios, relación a larga distancia sostenida desde el momento en que Evan se había ido a Hogwarts hasta que se pelearon esa noche en el parque. De repente muchos cabos sueltos se ataron en su mente, como siempre estaban juntos, la forma en la que se solían mirar, las largas cartas que su hermano el escribía a Evan, y que Evan nunca le mostraba, todas y tantas cosas.

- He vuelto - anuncio Lily entrando a su habitación. James estaba ahí

- Es muy temprano, creí que volverías mas tarde - respondió él mientras cerraba el libro que había estado leyendo y volteaba a ver a Lily, no se veía muy bien - ¿Sucedió algo?

- No, nada conmigo, mi hermano y Evan... no sé, todavía estoy muy confundida - Lily no se dio cuenta de que había dicho confundida en vez de confundido - ¿Creí que no estarías aquí?

- No tenía mucho humor para salir. ¿Ya cenaste? - el estomago de Lily hizo un sonido que indico que no había cenado y que tenía mucha hambre. James se levanto de su asiento y se dirigió a Lily, la tomo de la mano y la arrastro fuera de la habitación - Ven, vamos a comer

- Pero el comedor ya esta cerrado, y dijiste que no tenías humor para salir

- Sí bueno, conozco un buen lugar, ¿te gusta la comida japonesa?

- Sí, mi abuela era mitad japonesa, solía hacernos comida todo el tiempo pero nunca entendí la diferencia entre el okonomiaki estilo sureño y el estilo Kyoto - dijo Lily de repente recordando algo

- Es por la salsa que acompaña los fideos, y por el tipo de condimentos - Lily lo miro asombrada, cada vez que ella le preguntaba a su abuela la diferencia entre el okonomiaki estilo sureño y el estilo Kyoto, su abuela le daba una lectura de al menos media hora sobre las tradiciones y otras cosas, ¿por que nunca le pudo contestar: el secreto esta en la salsa?

James la llevo a un pequeño local a unas calles de la escuela, lo estaban pasando muy bien, Lily hasta logro olvidarse de todo el asunto Evan-Ben por un momento, James estaba mas comunicativo que de costumbre, se veía muy contento. Estaban a punto de empezar a comer cuando se encontraron a...

- Luke, James ¿Qué hacen aquí? - pregunto Eric acercándose a ellos junto con su cita, una chica de Ravenclaw de quinto llamada Amanda Byrens - ella es Amanda, por cierto

- Hola - saludaron ambos al mismo tiempo - Solo nos dio algo de hambre

- ¿Podemos acompañarlos? - pregunto Eric, Amanda no parecía tan contenta, no quería pasar sus cita de San Valentín con otros dos sujetos

- Si quieren - contesto Lily, ahora James era el que no se veía tan contento. Pero Amanda y Eric se sentaron con ellos. Empezaron a comer, era bastante divertido ver como todos sufrían para comer con los palillos, James se dio por vencido y empezó a comer con el kofe, una especie de tenedor raro que él había aprendido a usar durante una temporada que había vivido en Japón

- Mi abuela, decía que es difícil comer con eso, voy a tratar - dijo Lily tomando otro kofe, con el tomo un pedazo de camarón, lo hundió en una salsa que tenían enfrente (de la cual salía humito) y antes de que James pudiera advertirle que la salsa estaba muy caliente y que el kofe, al ser de metal, se calentaba con mucha rapidez, Lily, se lo metió a la boca - Esta ca...lie...ente - dijo Lily tratando de no atragantarse

- Escupe eso - le dijo James poniéndole una servilleta en frente, Lily lo hizo - ahora toma un poco de agua y déjala en tu boca hasta que tu lengua se sienta mejor - Lily le hizo caso, poco a poco su lengua dejo de doler

- Ya estoy mejor, gracias - dijo después de un momento

- Bien, espera un poco y vuelve a comer, mantente lejos de la salsa, y come con los palillos. ¡Con los palillos! ¿De acuerdo? - Lily asintió. Amanda y Eric los miraban extrañados, era algo inusual ver la forma en la que "Luke" y James interactuaban

Cuando terminaron con la cena, Lily y James se despidieron de Eric, afirmando que no querían interferir mas con su cita con Amanda, y se dirigieron al colegio. Después de la cena, ambos estaban bastante adormilados, por eso, en cuanto volvieron a la escuela, se fueron directo a dormir (después de cepillarse los dientes, la higiene dental es muy importante). Tanto Lily como James se sentían secretamente contentos de haber podido pasar, aunque solo fuera una parte de la noche, el día de San Valentín juntos.

Al día siguiente...

Notas:

Todo mi conocimiento de comida japonesa viene del anime, no me odien si lo puse todo mal.