My Life
- Reconciliación -
Harry se iba quedando dormido con la suave y romántica música, el rico olor a nardos que emanaba el cuerpo de Virginia...Ginny. Abrió los ojos para verla, ella los tenia cerrados, y una bonita sonrisa en sus labios. Unos deseos incontrolables de besarla embargaron su cuerpo. Se acerco un poco, solo unos centímetros mas y lo lograría...
-Quiero regresar a casa, estoy cansada -su voz se oía ahogada al hablar con la cabeza recargada en su pecho, aun con los ojos cerrados.
-Ginny, debiste decir antes -Harry se separo de ella con suavidad, pero su voz de decepción.
-¿Harry? ¿Eres tu?- abrió sus celestes ojos al distinguir a su pareja de baile. Se quedo anonada.
-¿Quién iba a ser? ¿Tu príncipe azul? -parecía que mordía cada palabra. Ironía.
-...¿Dónde están Hermione y Draco? -pregunto todavía alarmada. Creyó que era Gorka u otro, pero no el...
-Supongo que en la mesa donde estábamos, venga vamos -la tomo de la mano llevándola a su propósito. Ante la incredulidad de ella, no sabia que el mismo se sorprendió internamente ante tan reflejo como cogerla de la mano.
Harry paro en seco, Ginny choco contra su espalda, con el cejo fruncido le espeto:
-¡Ten mas cuidado! -el no se inmuto, solo miraba con sus esmeraldas algo que tenia enfrente, a unos metros. Ella giro la dirección a la que el veía. Se quedo alucinada.
-Hacen buena pareja...-soltó Ginny después de reaccionar, Hermione y Draco abrazados, sus ojos cerrados, parecían dormidos.
-mmm, si, hacen buena pareja -Harry la miro, se acerco a ella quien no se movió solo lo seguía mirando, Harry parecía ir a besarla pero al ultimo momento le susurro al oído...
-Tengo sueño, será mejor despertar a esos tortolitos. Se voltio y esta vez sin cogerla de la mano se dirigió a la mesa.
Ginny se quedo estática unos segundo, luego echo andar detrás, su celeste mirada brillaba y unas comunes cristalinas gotas de agua salieron de sus ojos que se disimulaban bajo su pelo, tenia la cabeza gacha.
Harry despertó a Draco quien pesadamente ayudo a Hermione a levantarse. Harry rió con pocas ganas cuando Hermione que cuando estuvo a punto de caerse se cogió del cuello de Draco, esos dos estaban muy borrachos.
Harry se ofreció a conducir. Atrás estaban Draco y Hermione abrazados, muy acaramelados. Y Virginia muy callada a su lado, tenia la cabeza gacha. Harry la miraba de reojo. Quiso sacar tema ya que solo se escuchaban los murmullos de Herm y Draco.
-Virginia, esta muy callada...-la miro unos segundos, luego volvió su vista a la carretera.
-No es de su incumbencia -le corto con la voz un poco quebrada. Harry de repente freno y estaciono el coche en una esquina. Ginny no se movió.
-Escúchame bien, estoy hasta los cojones de que te hagas la dura cuando por dentro eres mas frágil que un cristal. Ginny Weasley, ¿Qué cojones te pasa?- Harry exploto. No podía seguir así con ella, la quería. Atrás Draco ni Hermione se enteraban, solo se besaban.
-Quieres saber lo que me pasa, eh... Pues te diré que tengo un grave problema... -lo miro, Harry vio que sus ojos favoritos estaban llenos de lagrimas, se asusto.
-¿Cuál es el problema? -se quito el cinturón de seguridad y se abalanzo sobre ella. La abrazo, ella le respondió.
-El problema eres tu, Harry Potter...te he querido desde todos mis años de Hogwarts hasta ahora y tu siempre tan despistado...detrás de la arpía de Cho Chang... -su voz se convirtió en gemido. Harry la abrazo mas fuerte, como le dolía haberla hecho sufrir.
-Soy un idiota, como no pude suponerme que me odiabas por ser tan...idiota. Y lo peor es que me duele hacerte sufrir.
-Harry...-Ginny pareció suspirar su nombre. Harry se conmovió y sin previo aviso la beso.
La tumbo, como pudo, en los dos asientos. La beso con desesperación, como si hubiese esperado muchísimo tiempo para rozar con dulzura los labios rosados de ella. De cierta forma así era.
Harry la abraza ahora por los costados, rozando las curvas de sus pechos, y apretó su pelvis con las de ella. Ginny no se hizo rogar y lo abrazo por los hombros sin dejarlo de besarlo ansiosamente. Sus largas y esbeltas piernas se agarraron de la cintura de el, obligándolo apretar y mover mas sensualmente sus pelvis.
Se besaban como locos, como si sus vidas dependiera de ello. Harry recorría el cuerpo de ella con su lengua y sus manos sin dejar de apretar sus cinturas... Ella hacia lo mismo.
Hermione y Draco estaban muy acaramelados, tumbados en la parte de atrás, viéndose y besándose, susurrándose al oído cosas que no tenían sentido, pero gustosos de sentir el murmullo del otro.
Draco no lo resistió mas, sus sentimientos se lanzaron en un dos por tres. Se monto arriba de Hermione viéndola con esa sonrisa de malicia que tanto le gustaba a ella. La beso con deleite.
Tocaba el cuerpo de ella con toda la paciencia del mundo, sin importarle los demás. Hermione esta vez se monto arriba de el, como una gata. Le quito la camisa, y le bajo los pantalones. Beso todo su cuerpo, era algo sensacional saborear cada trozo de piel del otro.
Hermione hizo hacia atrás su pelo, le estorba para probar la piel de Draco. Sin proponérselo giro su cabeza hacia el otro lado. Se puso rígida. El coche no se movía, bueno, sin contar el tambaleo que hacían ellos, pero en definidas cuentas nadie conducía, se hallaban bajo unos frondosos árboles, se confundió mas. Quiso saber que demonios hacían sus otros dos amigos, se aparto un poco de Draco quien la miro extrañado.
Draco vio como Hermione abría la boca lentamente hasta parecerse a un túnel de ferrocarril. Arqueo las cejas confundido y sin darle tiempo a ella de emitir ninguna palabra la jalo del brazo y ella pareció volver a la tierra porque miro a Draco, leyó la pregunta que se reflejaba en los ojos de su amado, solo pudo encogerse los hombros y volverlo a besar con entusiasmo.
Ni Ginny ni Harry podían dejarse de besar y si tenían que separar para coger aire fruncían el ceño. Harry no resistió mas, le bajo los pantalones, sin dejar de besas su piel, sus pechos... Ginny gemía con fineza y se excitaba cada vez mas con los gemidos ahogados de su chico y esas acaricias que parecían torturas, de esas torturas que deseas que terminen pero a la vez que continúen...
Al sentir que Harry le bajaba los pantalones y besaba sus pechos ya que su camisa y sujetador estaban estampados en el cristal junto con la camisa desbotonada de Harry.
Ginny no quiso ser menos y obligo a sus manos que estaban en la espalda de el, desabrochar los vaqueros. Después de un intento fallido ella se monto arriba del, dejo a Harry impresionado, sonrio para si.
-Me toca a mi, cariño...-susurro al oído de su amado. Harry no solo se estremeció por sentir su cálida y sensual voz en su lóbulo, sino por sentir su piel contrastar con los perfectos pechos de ella.
Ginny percibió como Harry miraba atontado sus pechos, se sonrojo, pero lo insito a hacer algo mas con ellos. Agarro las manos de el y se las puso en su pecho, sintió debajo de echa como el miembro de Harry aumentaba, lo torturo apretando sus piernas mas contra si. Sonrió con malevolencia cuando Harry dio un gemido sordo.
Pronto les estorbo las finas y delgadas bragas de ella y los ajustados boxers de el. Harry tomo el mando de la situación, se puso arriba de ella, con cuidado. Antes de entrar en ella...
-¿Estas segura? -fue tan grandiosa la sonrisa de ella que la beso y sin mas preámbulos, la penetro. Gimieron los dos sin importarles si eran gritos fuertes o suaves.
Ginny se abrazo a el con sus piernas y brazos, con su cara en el cuello de su amante. Su espalda de enarcaba a cada embestida que daba el, pequeñas lagrimas escaparon de sus ojos, era tanta felicidad la que sentía que no podía expresarla con palabras.
Su mente se bloqueo al sentir tantas emocione en una misma. Tener a Harry dentro era... Tratar de explicarlo seria como querer saber cuantas estrellas hay en el universo, o querer cuantos granitos de arena hay una playa, o cuantos litros de agua hay en el mundo...
Los dos llegaron al éxtasis, una bolsa exploto en sus seres. Harry salió de ella exhausto, se fue acurrucar en el tibio pecho de ella. Ginny beso la cabeza de el y lo abrazo, Harry se quedo dormido con ese olor a nardos que esparcía su Ginny, y ella se quedo dormida sin impedir que unas pequeñas lagrimas salieses de sus celestes ojos, era una infinita felicidad lo que sentían.
Draco y Hermione, como era ya costumbre, se quitaron la ropa mutuamente, entre caricias y besos, Hermione debajo de Draco, con las piernas abiertas preparadas para lo que se avecinaba y los brazos alrededor de el, su cabeza escondida en su cuello. Draco abrazaba su cintura y apretaba su pelvis, estaban completamente desnudos, pero antes de empezar Draco quería sentir su piel con la ella.
No se hizo esperar mucho, entro en ella con un gemido sordo, Hermione gimió, pero un poco mas fuerte. Draco siempre la hacia a su modo, con fuerza y pasión, sin hacerle el mas mínimo daño y dejándole disfrutar de todas esas emociones, se aferró a el mas enérgicamente.
Era un paraíso, Draco acelero su marcha, sus gemidos se confundían con los de Harry y Ginny, no se enteraron de que al lado también lo hacían Harry y Ginny.
Se consumieron en todas esas emociones, Draco salió de ella agotado. Recorrió los hombros de ella con sus fuertes brazos. Hermione se enganchó a el, desnuda, con las piernas enredadas en la cintura de el y sus brazos pegados en el pecho de el.
Las dos parejas se quedaron dormidas, felices de saber que eran correspondidas. Encantados de que la vida les sonriese, fascinados de presentir que todas esas emociones pasadas las volverían a pasar con sus amados.
-- FIN DE LA HISTORIA --
Hola!
Espero que os haya gustado este ff, me ha gustado mucho escribirlo. No se si os ha gustado el final pero a mi si, un poco intrigante eso si.
Haré un EPILOGO, para que os enteréis de les pasara a estos en su feliz vida...
OH, ya lo se, es un final asquerosamente feliz, pero no me atrevo a matar a nadie, ni siquiera a Harry, jajaja
Besos y cuidaros!
Atte;
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Enviar reviews si queréis que ponga algo en el EPILOGO!!!!
- Reconciliación -
Harry se iba quedando dormido con la suave y romántica música, el rico olor a nardos que emanaba el cuerpo de Virginia...Ginny. Abrió los ojos para verla, ella los tenia cerrados, y una bonita sonrisa en sus labios. Unos deseos incontrolables de besarla embargaron su cuerpo. Se acerco un poco, solo unos centímetros mas y lo lograría...
-Quiero regresar a casa, estoy cansada -su voz se oía ahogada al hablar con la cabeza recargada en su pecho, aun con los ojos cerrados.
-Ginny, debiste decir antes -Harry se separo de ella con suavidad, pero su voz de decepción.
-¿Harry? ¿Eres tu?- abrió sus celestes ojos al distinguir a su pareja de baile. Se quedo anonada.
-¿Quién iba a ser? ¿Tu príncipe azul? -parecía que mordía cada palabra. Ironía.
-...¿Dónde están Hermione y Draco? -pregunto todavía alarmada. Creyó que era Gorka u otro, pero no el...
-Supongo que en la mesa donde estábamos, venga vamos -la tomo de la mano llevándola a su propósito. Ante la incredulidad de ella, no sabia que el mismo se sorprendió internamente ante tan reflejo como cogerla de la mano.
Harry paro en seco, Ginny choco contra su espalda, con el cejo fruncido le espeto:
-¡Ten mas cuidado! -el no se inmuto, solo miraba con sus esmeraldas algo que tenia enfrente, a unos metros. Ella giro la dirección a la que el veía. Se quedo alucinada.
-Hacen buena pareja...-soltó Ginny después de reaccionar, Hermione y Draco abrazados, sus ojos cerrados, parecían dormidos.
-mmm, si, hacen buena pareja -Harry la miro, se acerco a ella quien no se movió solo lo seguía mirando, Harry parecía ir a besarla pero al ultimo momento le susurro al oído...
-Tengo sueño, será mejor despertar a esos tortolitos. Se voltio y esta vez sin cogerla de la mano se dirigió a la mesa.
Ginny se quedo estática unos segundo, luego echo andar detrás, su celeste mirada brillaba y unas comunes cristalinas gotas de agua salieron de sus ojos que se disimulaban bajo su pelo, tenia la cabeza gacha.
Harry despertó a Draco quien pesadamente ayudo a Hermione a levantarse. Harry rió con pocas ganas cuando Hermione que cuando estuvo a punto de caerse se cogió del cuello de Draco, esos dos estaban muy borrachos.
Harry se ofreció a conducir. Atrás estaban Draco y Hermione abrazados, muy acaramelados. Y Virginia muy callada a su lado, tenia la cabeza gacha. Harry la miraba de reojo. Quiso sacar tema ya que solo se escuchaban los murmullos de Herm y Draco.
-Virginia, esta muy callada...-la miro unos segundos, luego volvió su vista a la carretera.
-No es de su incumbencia -le corto con la voz un poco quebrada. Harry de repente freno y estaciono el coche en una esquina. Ginny no se movió.
-Escúchame bien, estoy hasta los cojones de que te hagas la dura cuando por dentro eres mas frágil que un cristal. Ginny Weasley, ¿Qué cojones te pasa?- Harry exploto. No podía seguir así con ella, la quería. Atrás Draco ni Hermione se enteraban, solo se besaban.
-Quieres saber lo que me pasa, eh... Pues te diré que tengo un grave problema... -lo miro, Harry vio que sus ojos favoritos estaban llenos de lagrimas, se asusto.
-¿Cuál es el problema? -se quito el cinturón de seguridad y se abalanzo sobre ella. La abrazo, ella le respondió.
-El problema eres tu, Harry Potter...te he querido desde todos mis años de Hogwarts hasta ahora y tu siempre tan despistado...detrás de la arpía de Cho Chang... -su voz se convirtió en gemido. Harry la abrazo mas fuerte, como le dolía haberla hecho sufrir.
-Soy un idiota, como no pude suponerme que me odiabas por ser tan...idiota. Y lo peor es que me duele hacerte sufrir.
-Harry...-Ginny pareció suspirar su nombre. Harry se conmovió y sin previo aviso la beso.
La tumbo, como pudo, en los dos asientos. La beso con desesperación, como si hubiese esperado muchísimo tiempo para rozar con dulzura los labios rosados de ella. De cierta forma así era.
Harry la abraza ahora por los costados, rozando las curvas de sus pechos, y apretó su pelvis con las de ella. Ginny no se hizo rogar y lo abrazo por los hombros sin dejarlo de besarlo ansiosamente. Sus largas y esbeltas piernas se agarraron de la cintura de el, obligándolo apretar y mover mas sensualmente sus pelvis.
Se besaban como locos, como si sus vidas dependiera de ello. Harry recorría el cuerpo de ella con su lengua y sus manos sin dejar de apretar sus cinturas... Ella hacia lo mismo.
Hermione y Draco estaban muy acaramelados, tumbados en la parte de atrás, viéndose y besándose, susurrándose al oído cosas que no tenían sentido, pero gustosos de sentir el murmullo del otro.
Draco no lo resistió mas, sus sentimientos se lanzaron en un dos por tres. Se monto arriba de Hermione viéndola con esa sonrisa de malicia que tanto le gustaba a ella. La beso con deleite.
Tocaba el cuerpo de ella con toda la paciencia del mundo, sin importarle los demás. Hermione esta vez se monto arriba de el, como una gata. Le quito la camisa, y le bajo los pantalones. Beso todo su cuerpo, era algo sensacional saborear cada trozo de piel del otro.
Hermione hizo hacia atrás su pelo, le estorba para probar la piel de Draco. Sin proponérselo giro su cabeza hacia el otro lado. Se puso rígida. El coche no se movía, bueno, sin contar el tambaleo que hacían ellos, pero en definidas cuentas nadie conducía, se hallaban bajo unos frondosos árboles, se confundió mas. Quiso saber que demonios hacían sus otros dos amigos, se aparto un poco de Draco quien la miro extrañado.
Draco vio como Hermione abría la boca lentamente hasta parecerse a un túnel de ferrocarril. Arqueo las cejas confundido y sin darle tiempo a ella de emitir ninguna palabra la jalo del brazo y ella pareció volver a la tierra porque miro a Draco, leyó la pregunta que se reflejaba en los ojos de su amado, solo pudo encogerse los hombros y volverlo a besar con entusiasmo.
Ni Ginny ni Harry podían dejarse de besar y si tenían que separar para coger aire fruncían el ceño. Harry no resistió mas, le bajo los pantalones, sin dejar de besas su piel, sus pechos... Ginny gemía con fineza y se excitaba cada vez mas con los gemidos ahogados de su chico y esas acaricias que parecían torturas, de esas torturas que deseas que terminen pero a la vez que continúen...
Al sentir que Harry le bajaba los pantalones y besaba sus pechos ya que su camisa y sujetador estaban estampados en el cristal junto con la camisa desbotonada de Harry.
Ginny no quiso ser menos y obligo a sus manos que estaban en la espalda de el, desabrochar los vaqueros. Después de un intento fallido ella se monto arriba del, dejo a Harry impresionado, sonrio para si.
-Me toca a mi, cariño...-susurro al oído de su amado. Harry no solo se estremeció por sentir su cálida y sensual voz en su lóbulo, sino por sentir su piel contrastar con los perfectos pechos de ella.
Ginny percibió como Harry miraba atontado sus pechos, se sonrojo, pero lo insito a hacer algo mas con ellos. Agarro las manos de el y se las puso en su pecho, sintió debajo de echa como el miembro de Harry aumentaba, lo torturo apretando sus piernas mas contra si. Sonrió con malevolencia cuando Harry dio un gemido sordo.
Pronto les estorbo las finas y delgadas bragas de ella y los ajustados boxers de el. Harry tomo el mando de la situación, se puso arriba de ella, con cuidado. Antes de entrar en ella...
-¿Estas segura? -fue tan grandiosa la sonrisa de ella que la beso y sin mas preámbulos, la penetro. Gimieron los dos sin importarles si eran gritos fuertes o suaves.
Ginny se abrazo a el con sus piernas y brazos, con su cara en el cuello de su amante. Su espalda de enarcaba a cada embestida que daba el, pequeñas lagrimas escaparon de sus ojos, era tanta felicidad la que sentía que no podía expresarla con palabras.
Su mente se bloqueo al sentir tantas emocione en una misma. Tener a Harry dentro era... Tratar de explicarlo seria como querer saber cuantas estrellas hay en el universo, o querer cuantos granitos de arena hay una playa, o cuantos litros de agua hay en el mundo...
Los dos llegaron al éxtasis, una bolsa exploto en sus seres. Harry salió de ella exhausto, se fue acurrucar en el tibio pecho de ella. Ginny beso la cabeza de el y lo abrazo, Harry se quedo dormido con ese olor a nardos que esparcía su Ginny, y ella se quedo dormida sin impedir que unas pequeñas lagrimas salieses de sus celestes ojos, era una infinita felicidad lo que sentían.
Draco y Hermione, como era ya costumbre, se quitaron la ropa mutuamente, entre caricias y besos, Hermione debajo de Draco, con las piernas abiertas preparadas para lo que se avecinaba y los brazos alrededor de el, su cabeza escondida en su cuello. Draco abrazaba su cintura y apretaba su pelvis, estaban completamente desnudos, pero antes de empezar Draco quería sentir su piel con la ella.
No se hizo esperar mucho, entro en ella con un gemido sordo, Hermione gimió, pero un poco mas fuerte. Draco siempre la hacia a su modo, con fuerza y pasión, sin hacerle el mas mínimo daño y dejándole disfrutar de todas esas emociones, se aferró a el mas enérgicamente.
Era un paraíso, Draco acelero su marcha, sus gemidos se confundían con los de Harry y Ginny, no se enteraron de que al lado también lo hacían Harry y Ginny.
Se consumieron en todas esas emociones, Draco salió de ella agotado. Recorrió los hombros de ella con sus fuertes brazos. Hermione se enganchó a el, desnuda, con las piernas enredadas en la cintura de el y sus brazos pegados en el pecho de el.
Las dos parejas se quedaron dormidas, felices de saber que eran correspondidas. Encantados de que la vida les sonriese, fascinados de presentir que todas esas emociones pasadas las volverían a pasar con sus amados.
-- FIN DE LA HISTORIA --
Hola!
Espero que os haya gustado este ff, me ha gustado mucho escribirlo. No se si os ha gustado el final pero a mi si, un poco intrigante eso si.
Haré un EPILOGO, para que os enteréis de les pasara a estos en su feliz vida...
OH, ya lo se, es un final asquerosamente feliz, pero no me atrevo a matar a nadie, ni siquiera a Harry, jajaja
Besos y cuidaros!
Atte;
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