Hola, este es mi "fic" más corto, y más ¿picante? Espero que os guste y que lo disfrutéis tanto como yo lo disfruto escribiéndolo, y ya sabéis que los personajes (menos Maña, Lorenzo y Blanca) son de JKROWLING

Esa casa tan grande, le hacia sentirse insignificante. Todo estaba en silencio, y ojalá siempre quedara de aquella forma, no le apetecía nada escuchar por la mañana a sus padres, discutiendo…su destino…ser mortifago. Pero él no quería, no, él quería ser uno de los buenos, él no era malo… ¿o si?

No…- se dijo, pasándose el brazo por los ojos. Fue a parar a la habitación donde se suponía que tenían que estar durmiendo sus primos lejanos…pero ¡no era así!- ¿Dónde se abran metido ahora?- se pregunto, pero no muy preocupado, más bien divertido, desde que estaban ellos, esa casa era mucho mejor. Mejor era buscarlos, porque si sus padres se enteraban, tendrían problemas, graves y grandes problemas. Ya suponiendo donde estaban, fue a la cocina. Lo recibió Maña, su nueva elfa domestica, ya que desde que Potter le hizo aquella jugada a su padre, Dobby trabajaba en Hogwarts. Tal y como se imaginaba, encontró a los enanos jugar en la cocina.

-¡Venga, venga, cojee eso…y eso…!- le susurro el pequeño Lorenzo a su hermana, Blanca. 

-Chicos ¿Qué hacen aquí?- (N de A: soy española, pero la gente me empega su forma de hablar;-9).

-Draqui…no…si es que nosotros…solo…- intento, inútilmente, excusarse Blanca.

-¿Por qué no cogen la comida que hay allá? Esta mucho mejor que esta.

-¿Qué? ¿No, nos riñes?- se sorprendieron sus primos.

-No- respondió agarrando una bolsa de patatas de jamón. Ellos sonrieron y la cogieron.

- ¿Quieren algo más?- pregunto Maña, Lorenzo y Blanca se miraron y rieron picadamente. Ellos sonrieron y la cogieron. Ya eran como las tres de la madrugada, y los dos pequeños estaban que no se aguantaban del sueño que tenían. El chico los cogió cada uno en un brazo (el era el triple de grande que ellos), los llevo a su cuarto y les dejo la comida debajo de la cama, para que no la describirán sus padres y les echaran una buena reprimenda. Él también se fue a su cuarto, agotado. Durmió placidamente.

¡Buenos días!- Lorenzo se abalanzo sobre la cama de Draqui. Este se despertó espantado, lo había despertado justo cuando se iba a convertir en mortifago, por órdenes de su padre, se lo agradeció mucho a su primo, aunque también le hubiera gustado despertar más ¿tranquilamente? Sonrió divertido- ¿Desde cuando sonríen así los Malfoy de diecisiete años?

Desde que nací yo- respondió divertido Draco-. Yo era, soy y seré el más especial de la familia.- y se echo a reír. Los dos pequeños lo imitaron.

Draqui, te has vuelto muy gracioso- sonrió Blanca.

Y tu te sabes inventar nombres muy graciosos- dijo este- ¿Desde cuando me llamo Draqui?

¡Ah, estabais aquí!- era el padre de Draco: Lucius Malfoy. Draco lo miro malamente, y después volteo la mirada con profundo desprecio. Lucius ni se inmuto- Ya hoy vais a empezar Hogwarts.- Draco abrió los ojos como nunca ¡SE LE HABIA OLVIDADO! Había estado tan… ¿Cómo decirlo? Ni él mismo lo sabia, pero volviendo al caso, ya no lo recordaba. Tubo suerte de que lo despertasen, aun tenia tres horas y dos cuartos.

Salid, por favor, tengo que cambiarme ¿podríais...?- hizo un ligero movimiento con la mano. Cuando todos estaban fuera, cerro la puerta en la que estaba apoyado. Lo primero que se quito fue la camisa del pijama, a cuadros verdes (claro y fuerte), se puso un jersey beig, y después se quito los calzoncillos (con una serpiente, por si alguien quiere saberlo) y se puso unos limpios, y se cambio los pantalones por unos tejanos. La ropa que solía llevar últimamente era estilo muggle, solo que con un pequeño hechizo lo disimulaba en casa y en la escuela, y cuando paseaba solo por la calle (o con sus primos) quitaba el hechizo. Salio de la habitación, seguro de que Maña ya abría preparado su baúl. Bajo al comedor, seguro de que vería a su padre y a su madre, y a algunos mortifagos haciéndose pasar por gente normal y corriente.

-¡DRAQUI!- lo llamo su primo- ¡YA NOS VAMOS! ¡TIO LUCIUS DICE QUE TENEMOS QUE PASAR POR ALGUNOS SITIOS ANTES DE NADA!

Lorenzo, que no cal que grites, que estoy aquí – le dijo tapándose los oídos Draco: estaba juntó al lado.

Hay…solo era por si acaso…- disimulo Lorenzo- Por cierto ¿Cómo es Hogwarts?

Es cierto…que hoy es vuestro primer año…uf…- Draco los miro de reojo mientras movía la mano de arriba hacia abajo-Es un sitio maravilloso, espectacular, os encantara. En serio, también hay gente maravillosa, ojalá olierais venido antes, podrías haber conocido al mejor director de todos lo tiempos: Albus Dumbledore. Que pena que ya no este con nosotros.

Si creo que leí algo ¿Qué le ocurrió?- pregunto interesada Blanca.

Lo recuerdo como si hubiera pasado ayer…El señor oscuro fue a…

¡Ah! Llámalo Voldemort, no se merece llamarlo por seudónimos- dijo Lorenzo, como si no fuera nada.

Ay…vale, Voldemort fue a la escuela, cuando yo cursaba quinto año, quería matar a Potter, Harry Potter, lo cazo y se lo llevo a algún lugar, no se donde. Dumbledore fue tras ellos, mientras los demás profesores intentaban matar o alegar a los mortifagos. Incluso vinieron los Dementotes. Todo era un caos, los prefectos también intentaban arreglarlo, ayudando, estaban todos asustados…

¿Y tu no?- lo interrumpió Blanca.

No, asustado no- acarició la cabellera amarilla de la niña-, lo que estaba era furioso, quizás algo preocupado. Bueno, pues, casi cuando solo quedaban unos treinta mortifagos, apareció Potter, herido como nunca habréis visto a alguien, sangraba por todas partes, y estaba ayudando a Dumbledore a andar. Dumbledore grito algo como: "¡FAWKES!" Y un fénix apareció.

¡ALA!- exclamaron ellos, imaginándoselo sorprendidos mientras Draco hacia gestos- Continua- más que pedirlo, parecían ordenarlo. Draco sonrió.

El fénix se poso al lado y Dumbledore le dijo algo inaudible, pero el fénix, fue directo a Potter y volando en círculos encima de él fue llorando, las lágrimas curaron a Potter, pues debéis de saber que es un poder de los fénix. Dumbledore se aclaro la garganta y hablo: "Queridos alum/alumnos…Voldemort a sido derrotado, para siempre…gracias a el señor Potter…pero me temo que…que yo ya no podré…continuar muchos días en esta escuela…"

Draqui, pareces entristecido- apunto Lorenzo.

Me duele recordarlo- dijo cabizbajo, los ojos los tenia cristalinos-. Toda la gente corriendo espantada, los mortifagos, los dementotes, hechizos, aurarores llegando, profesores al borde de la muerte, Potter con Dumbledore, este último casi no podía hablar, pero sonreía, tenía cara de felicidad, los ojos le centelleaban. Los alumnos reprimiéndose las lágrimas. Los profesores espantados ante la posición de Dumbledore…Todo era…demasiado. Demasiado duro…

Draco, cállate ya- le ordeno su padre, apareciendo a su espalda.

¡Tu no me mandas, cabrón!- le chillo Draco.

¿¡Pero como puedes hablarme así!? ¡Soy tu padre, por si lo has olvidado! Además… ¡¡ESTAN TUS PRIMOS PEQUEÑOS/MENORES (N de A: lo que os guste más) A VER SI VIGILAS TU LEGUAJE!!

¡Yo dijo lo que me sale de los huevos!- repuso Draco. De la nada apareció Maña y se llevo asustada a los dos pequeños, que estaban apunto de echarse a llorar. Cuando se fueron Lucios obofeteo a su hijo.

¡No me hables así!- dijo intentando mantener, inúltimente, la calma- Coge tus cosas, nos marchamos ya, hay un largo camino por recorrer.

Ahora no hagas ver que eres el padre perfecto el padre perfecto.- musito Draco, mientras le daba la espalda.

No lo hago ver, lo soy- Draco solo apretó con furia dientes y puños.

Capullo…- murmuro entre dientes. Para su suerte, su padre no se entero. Draco agarro sus maletas y salio a dejarlas en el coche mágico.

¿Por qué no has utilizado la barita?- escucho la voz de una mujer detrás suyo.

Mama ¿Qué quieres?- esa mujer también era como el hombre, los dos…los dos querían que él fuera un mortifago como ellos, además de que ellos eran mortifagos de los más grandes rangos.

Nunca llegaras a ser un gran mago si haces todo a mano, además, tenemos elfos que lo hacen todo por nosotros, no hacia falta que te molestases.

Están demasiado ocupados, además, por hacer ejercicio no me voy a morir- contesto algo pasota, cargando los baúles, los hico más pequeños con un hechizo y cabieron sin problemas.

¡¡Draqui!!- Lorenzo y Blanca iban corriendo hacia Draco.

Hola…- Draco los miro y ellos lo abrazaron, él se quedo sorprendido- Perdonadme- dijo devolviéndoles el abrazo mientras ponía una rodilla en el suelo.

¡Draco! Quita la pierna de hay o te ensuciaras- inquirió enfadada su madre.

¿No somos "grandes magos"? Si me ensucio creo ser capaz de usar un hechizo para limpiarme la ropa con un hechizo.- su madre hizo caso omiso a ese comentario y se marcho- Entrad- les abrió la puerta del coche/mini limusina a sus primos. Estos, se pusieron a jugar en el coche con juguetes mágicos de viaje, al poco rato, en la parte de delante se sentaron sus padres. El coche arranco. Draco solo miraba por la ventana, ese coche era como el autobús noctámbulo, todo les dejaba paso. Iban a una velocidad vergé tiñosa, pero eso no le importaba. Estaba ansioso por llegar a Hogwarts. Ser libre, además, la vería a ella. Ella, no sabia si la odiaba tanto que la amaba, era algo extraño. Además, una vez acabase la escuela, se iría de aquella casa, no volvería, quería llegar a ser auraror, seria alguien en la vida, no como ellos. Miro a sus primos entristecido, seguramente, ellos pasarían por lo mismo… ¿y si los adoptaba? Pues de seguro que sus tíos (N de A: o sea, los padres de Blanca y Lorenzo…lo dijo por si acaso ¬.¬ _-_) no querían mucho a Lorenzo y Blanca.

¡Ya hemos llegado!- anuncio Lucius.

¿Qué? ¿Ya?- se sorprendió Draco, siempre hacían el mismo trayecto, pero seguia sin acostumbrarse. Bajo del coche cogiendo las "maletas de bolsillo" y después de hacer grandes esfuerzos consiguió sacar a sus primos (estaban tan entretenidos que no querían salir).

¿Esto es Hogwarts?- pregunto Lorenzo al salir.

No, no, que va…- rió divertido Draco- Esto es la estación, tenemos que venir aquí para poder coger el expreso de Hogwarts, en el anden 9 ¾ y nos lleva a Hogwarts, pero acá, no hagáis nada de magia ¿OK? Es un sitio muggle.

¿En serio? ¡YUPI!- gritaron animados.

También podríais intentar no llamar la atención de todo el mundo, por una sola vez, tenemos que ser discretos…- les dijo Draco, mirando a muchos muggles que los miraban con cara divertida. Los dos gemelos solo rieron y se fueron corriendo a una señora pelirroja, seguida de un montón de crios pelirrojos, uno de pelo negro, y una con cabello marrón.

Anda, anda…si son los Weasley, Potter y Granger- apareció Lucios junto con los gemelos, Draco se quedo empegado en el sitio donde estaba. Delante suyo, de sus narices, junto a Potter, estaba ella, esa chica, a la que tanto odiaba y amaba, por la que se moría.

¿Lucis Malfoy?- la señora lo miro con desprecio.

¡Draqui!- lo llamo Lorenzo.

¿Draqui?- rió Harry.

Tu, cabeza rajada, cierra el pico si no quieres sufrir- Draco solo dijo esto para guardar apariencias, tenia un gran orgullo, pero si se lo tuviera que haber dicho a ella…simplemente no abría podido.

Draco…- ella lo dijo flojito, para que no lo escuchada nadie más que él. La pobre chica tenia ojos alegres, lo miraba con amor. Draco la miro, quería acariciar su sedoso cabello, el que llevaba alisado desde sexto curso, se lo había cortado, y tenia mechas amarillas y rojas, aparte de ya sus naturales mechas marrón oscuro, todo recogido en una trenza menos dos mechones juguetones a cada lado de su bella cara. Sus labios finos (N de A: supongo que preferirías carnosos, pero no me sueña bien la palabra), sus ojos castaños, tan naturales, su piel tostada por el sol, sus finas manos, todo, quería volver a ser un solo ser junto con ella, pero para todo eso, tenia que esperar, pero no mucho, después de comer, los dos dirían alguna mentira a sus amigos para irse juntos a alguna clase vacía, y la volvería a sentir.

Vamos, no tenemos nada que hacer aquí- dijo Molly Weasley, entrando juntó con su hija, casi la menor de todos, Ginny Weasley, pues en el año anterior, tubo mellizos (chico y chica, que estaban con su padre), y gracias al ascenso de Arthur Weasley, el cambio de trabajo de su hijo Percy, lo que enviaban sus otros dos hijos, y los gemelos trabajando, ganaban mucho, y ya casi no había problema económico, casi. Draco la miro.

¡Granger!- le grito, ella volteo rápido para verlo, sus ojos se encontraron.

¿Se puede saber que quieres, Dra.…? ¿Malfoy?- corrigió rápidamente. Sus ojos expresaban ilusión y a la vez, temor.

Los sangre sucia, seréis los primeros- le guiño levemente un ojo y ella se ruborizo. Desde que se habían confesado sus sentimientos, ella sabia que eso era algo como que: "los de familia muggle (con eso se refería a ella) seréis (serás) los primeros en hacerme enamorar (la primera en hacerme enamorar)". Los weasley cruzaron todos juntos por el anden 9 ¾ y pocos minutos después decidieron cruzar los Malfoy. Los dos pequeños no tuvieron ni pizca de miedo antes de cruzar, cosa que extraño a Draco, pues la primera vez, se suele tener bastante miedo. Tuvieron que subir deprisa al tren, porque solo faltaban unos cinco minutos para que se pusiera en marcha. Draco se encontró con los dos estupidos gorilitas, Crabbe y Coyle, y los cinco fueron a buscar un compartimiento. Draco no quería estar con ellos (bueno, puede que si con Lorenzo y Blanca), solo con ella, la chica perfecta para él, la que le robo el corazón, la que tanto amaba. Hermione Granger. Esa chica era todo lo contrario a él: Una honorable y valiente Griffindor, amiga de sus amigos, simpática, muy lista, de familia muggle…pero como se suele decir: los polos opuestos se atraen.

¡Draqui! Aquí, aquí…- Lorenzo movía la mano para decirle que fuese hacia él.

¿Un compartimiento vació?- pregunto él, asomando la cabeza.

No, bueno, si, bueno…- Blanca empezó a pensar si estaba o no vació.

¿Una cucaracha significa que no esta vació?- ante tal pregunta de Lorenzo, Draco se echo a reír.

¿Tu que crees?- le pregunto a s primo pequeño. Este se encogió de hombros- Va, venga, entrad ya- les dijo entre carcajadas. Draco se sentó con sus primos y los otros dos inveciles con una bolsa llena de comida-. Ahora vuelo.- musito Draco levantándose.

¿A dónde vas?- le pregunto Blanca, dejando de lado la partida de Snap explosivo que jugaba contra su hermano Lorenzo.

Tranquilos, ya vuelvo…- inquirió cerrando la puerta tras de sí. Solo deseaba verla, aunque fuera una vez, pero a solas, la buscaría y cuando la encontrara pensaría rápidamente una forma para que se quedaran los dos a solas. Fue caminando sumido en sus pensamientos, sin importarle nada más que ella. Era muy duro, con lo que le había costado que pudieran estar juntos, tener que esconderlo. La vida es dura, pensó.

¡Ahora vuelvo, chicos!- escucho una voz muy familiar, tan alegre como siempre.

Hermione…- murmuro. Fue corriendo hacia atrás, que era de donde provenía la voz- Hermione, Hermione…- se repetía una y otra vez- Esta por aquí ¿Cómo pude pasarla de largo?

 Draco…- de repente la encontró de frente, delante suyo, allí plantada, jadeando, pues ella también había corrido, el tren era muy grande, pero eso no importaba, pues aunque estuvieran cada uno en la otra punta del mundo, su amor era mucho más grande. Draco avanzo unos pasos, ella también, al final no lo soportaron más y se fundieron en un profundo abrazo- Te quiero…

Yo te amo…- contesto Draco, olorando su cabello, olía a lavado, olía tan bien... olía a ella. La abrazo más fuerte y acercándose a su oído le dijo- Te he echado tanto de menos…

Yo también a ti, esto es muy duro- le dijo con voz entristecida, separándose de él-. Parecemos Romeo y Julieta…

¿Los de ese libro muggle que me dejaste? Descubrí que el autor, en realidad, era medio brujo…

¿A si? Jaja, no lo sabia, muchas gracias por decírmelo.

¿Por qué no buscamos algún compartimiento vació?- le pregunto Draco acariciando su cabello- Quiero estar contigo, sin temor a que nos descubran.

Eso, que no quiero buscar cosas complicadas para estar juntos, que aun recuerdo la vez que decidimos usar la poción multijugos para que no nos descubrieran… Al final me confundí y en vez de en chica me convertí en chico, y tu también en chico, y un par de Ravenclaw nos vieron besándonos y se quedaron blancos ¡¡POR QUE SE SUPONIA QUE ERAMOS HERMANOS!!- los dos se echaron a reír. No querían soltarse, pues ambos sentían, en lo más hondo de su ser, que si lo hacían, ya no volverían a estar juntos nunca más.

 Hermione…

¿Si?

Casémonos- Hermione se separo de él inmediatamente, y reprimiendo el grito de su sorpresa le pregunto- ¿Qué?

Quiero casarme contigo, ahora, no quiero esperar, ya falta poco para que seamos mayores de edad, así que no pasa nada, te amo más que a nada, se que quiero casarme, eres lo que más quiero…

Yo también quiero casarme contigo, pero el matrimonio es la mayor aventura que se puede hacer…

Pues quiero emprender esa aventura, y se que quiero emprenderla contigo, no se que nos deparara el futuro, pero ahora quiero vivir este presente.

Yo quiero vivir todos los momentos contigo.

Entonces, casémonos, no esperemos, tal y como tú has dicho, falta muy poco para que seamos mayores para hacer lo que nos plazca con nuestras vidas.

No quiero algo a lo grande.

Si, será algo sumamente sencillo, algo que para los demás podrá ser un asco, pero para nosotros, será lo mejor.

La opinión de los demás me la suda- Hermione rió ante tal "observación" de Draco. Él le dedico una de sus más dulces sonrisas, a la que la chica respondió con una lágrima- ¿Por qué lloras?- pregunto, alarmado, Draco.

Soy feliz…- fue lo único que alcanzo a decirle ella.

Yo pensaba que ya lo eras…

Pero ahora mucho más- dijo aferrándose todo lo fuerte que pudo al chico, después lo soltó despacio-. Tenemos que buscar un sitio para estar los dos solos, y, así, planeamos mejor lo de después de la comida- Draco le beso la frente.

Creo que por allá hay uno en el que no suele entrar mucha gente, dicen que esta muy sucio- dijo.

¡Dios! ¿Pero es que a caso no son brujos/as?- Hermione movió los brazos airadamente.

Eso se supone, pero ¿Quién sabe?- los dos volvieron a reír. Draco agarro la suave mano de Hermione y la condujo hasta ese bacón, tan y como él habia dicho; estaba vació- Pues yo lo veo bien limpio, aparte de esas cuatro telarañas, esas cucarachas… Oh, ya lo arreglo- dijo dándose por vencida, después de intentar convencerse de que aquello no estaba tan mal. Una agitación con la varita, una palabrita por aquí, y todo como nuevo- Tendríamos que decirles a los chicos que…- Hermione, al girarse, fue callada por un habido beso de Draco, que cerro a puerta con su otra mano-…bueno, da igual…- dijo ella, en un descanso de tan profundo beso, estirándose en el asiento. Draco le beso toda la cara…el cuello- Espera, insonorícemos esto, y cerremos la puerta para que no pueda entrar nadie…- saco la barita y: dicho y hecho. Draco miro la puerta, sonrió con malicia, y continúo su trabajo: ser uno con Hermione. Ella se dejo, mientras acariciaba el cabello del muchacho. Draco beso sus brazos, la parte central de su pecho, no le apetecía bajar, pues aquel sitio era muy incomodo. Subió de nuevo, lo que más le gusta era besar su cara.

Ojalá este momento durara para siempre- dijo ella, satisfecha.

Ojalá.

Draco, perdona que te lo recuerde ahora…pero ¿te ha vuelto a mencionar lo de ser mortifago tu padre?- Draco paro y la miro directamente a los ojos, después se abrocho su camisa y se sentó, ella lo imito. Draco desvió la mirada y la fijo en el suelo, mientras sus pies jugueteaban con los de Hermione.

Si- a ella le dio un vuelco el corazón-. Dijo que si no lo hacia, me matarían, a mi, y a todos mis seres más heridos, pero me da igual que me amenace, ya no puede hacer nada, Voldemort a sido vencido, los mortifagos ya no tienen ningún poder, que le den por…- Hermione agarro su cara entre sus manos y lo beso dulcemente, él no se resistió- Cuando llegue a Hogwarts, lo denunciare, le diré a la directora McGonagall- Hermione sonrió entre contenta y entristecida, por una parte contenta por lo que acababa de decir Draco, por otra triste porque aun no se acostumbraba a tener nueva dirección en a escuela.

¿Por qué te quiero tanto?- le pregunto besándolo nuevamente.

No lo se, pero yo te quiero más...- contesto Draco.

Yo más…- se daban beso si, beso si, casi no podían hablar. Hermione lo separo- Ya basta, Draco. Los demás estarán preocupados por nosotros.

Me da igual ¿Por qué se van a preocupar? No he podido estar contigo en todo el verano, y solo podemos vernos a escondidas, que se jodan, ahora es nuestro momento- repuso él, besándola en el hombro. Siguieron besándose, hasta que se hartaron. Volvieron a tumbarse, esta vez Hermione encima de Draco- Soy todo tuyo, tigresa- Hermione hizo ver que rugía y comenzó a desabrocharle la camisa. Draco poso sus manos en los botones de la camisa de ella, y la imito. Hermione beso los pectorales de Draco, saboreándolos, eran tan perfectos. Draco se excitaba cada vez más. De repente los dos cayeron precipitadamente sobre el frió suelo y después de enmudecer unos segundos, se echaron a reír- ¿Se lo dirás?- Draco dejo de reír y dirigió un mirada seriosa a su amada.

¿El que a quien?- se extraño ella, con ojos inocentes enfrentados a los fríos y duros, ahora ablandecidos, de Draco.

A Potter y Weasley- después pensó algo-, quería decir a cabeza rajada y el pobretón- se corrigió, con la voz que solía usar delante de ellos: arrastrando las palabras. Hermione reprimió las ganas de reír-, lo nuestro ¿les dirás?- Hermione dejo de reír para mirarlo y borro la línea recta de su oca para hacer una corva y movió afirmativamente la cabeza.

Son mis mejores amigos.

Díselo ahora, yo voy contigo, ahora descubrirás si en realidad son tan buenos amigos.

Gracias- Hermione volvió a abrocharse al igual que Draco, cuando acabaron se miraron, Hermione deshizo el encantamiento y se cogieron de las manos.

¿Preparada?

Preparada- cerraron los ojos y los volvieron a abrir, Draco estiro la mano hacia el pomo, cinco centímetros, cuatro, tres, dos unos…beso a Hermione como nunca, ante la sorpresa de ella, y volvió al pomo, lo empujo hacia uno de los lados y la puerta se abrió chirriando. Se aferraron mucho más fuertes las manos, y se acercaron. Hermione lo guiaba, Draco no decía nada, solo la miraba, tan seria, tan bella- Es/es aquí…- le dijo entrecortadamente mirándolo con soslayo, Draco solo le dirigió una sonrisa de apoyo, ella la acepto y sonrió convencida de que sus amigos, estarían con ella. Abrió despacio la puerta del compartimiento, segura de lo que iba a hacer- Chicos.

¡Herm!- chillo de repente Ron, sobresaltándola al levantarse y estirarla del brazo hacia él, haciéndolos caer a los dos en el suelo.

¡¿Pero que coño haces, Ronald?!- se enfureció la chica, apartándose bruscamente de un Ron estupefacto, que de repente enfureció.

¡Te e salvado de Malfoy!- chillo señalando al rubio (N de A: Casi pongo "rubiazo de preciosos ojos grises e increíbles pectorales…pero he pensado que quedaría algo extraño XDXD.

¡Idiota!- le inquirió Hermione.

¿Mione, estas bien?- ahora quien hablaba era Harry. Ella asintió.

El es…es…- dijo, una vez más calmada.

Es Draco Malfoy- acabo Ron por ella, pero en vez de agradecérselo Hermione le dirigió una mirada de odio.

Si, pero es algo más.

¿Tu novio?- todos voltearon a ver a un cabizbajo Harry- Malfoy te esta agarrando de la cintura desde que te levantaste- todos miraron la mano de Draco (incluso él), todos menos Harry.

¿¡QUE!? ¿¡TU ESTAS LOCA!?- vocifero Ron. Gente empezó a ir a verlos.

¡TU CALLATE GILI…RON!- después agarro a Draco del brazo y lo metió en el compartimiento, después echo a unos cuantos curiosos y se sentó- Ronald Weasley, vosotros dos sois mis mejores amigos, y a veces pienso que los únicos, o sea, que por favor, déjame hablar y compréndeme. Draco y yo nos amamos por encima de todas las cosas y por eso nos vamos a casar.- Ron golpeo fuertemente la pared del compartimiento, en cambio, Harry ni siquiera levanto la cabeza- ¿No decís nada?

Es tu vida, y tu nuestra mejor amiga, no podemos hacerle nada, pero que sepas- Harry alzo la cabeza, sonriendo-, que tu eres la persona que más queremos. Eres una hermana para nosotros, y como Malf… Draco (N de A: Anda, que entonces serán cuñados) te haga algún daño, ya sea exterior o interior, lo mataremos sin piedad- esta vez dirigió una mirada sombría a Draco, pero Hermione sonrió.

Gracias, Harry- le dijo, después se volteo a Ron, que tenia el puño aun en la pared y la cabeza apoyada (N de A: No se explicarlo muy bien, así que imaginároslo como queráis, pero yo lo veo muy sexy ;-9) en él. Para sorpresa de todos sonreía con amabilidad.

Draco, ten en cuenta de que ahora serás de la "familia", así que la pasaremos juntos, y nos pelearemos más- rió. Draco lo miro sonriente, ya más aliviado por la contestación de los dos.

¿Cuñados?- pregunto entregándoles la mano para que la estrecharan.

Cuñados- respondieron ellos, amarrándola.  El resto del trayecto lo pasaron hablando, haciéndose amigos, lo que no habían conseguido en tantos años lo conseguían entonces. El tren aminoro la marcha mientras anunciaban "Pronto llegada a Hogwarts".

Que rápidos esta vez…- dijo Hermione, levantándose.

Cuando uno se lo pasa bien, el tiempo se le pasa volando- dijo Ron.

Salid, que me cambiare yo primera que voy más rápido y después vosotros- dijo Hermione, echándolos fuera.

Yo no cal que salga- se le escapo a Draco.

¿¡YA LA HAS VISTO DESNUDA!?- preguntaron sorprendidos Harry y Ron, con solo el sonrojo de la pareja obtuvieron respuesta.

Da igual, nos cambiamos todos aquí, pero yo no os miro y vosotros tampoco a mi ¿vale?- los chicos asintieron. De espaldas se cambiaron rápidamente- ¿Acabasteis todos?- un "si" respondieron todos a coro. Se giraron poco a poco- Mis chicos…

Nuestra chica…

Bueno, pues….

¿A que pensabais que cavaría así de mierda?

Justo cuando los tres acababan de decir esto el compartimiento se abrió y aparecieron Lorenzo y Blanca (que se tiraron en el cuello de Draco) seguidos de un Crabbe con cara de rata y un Goyle con cara de pájaro carpintero.

¿Qué habéis echo esta vez?- les pregunto haciendo esfuerzos sobrehumanos para no reírse. Los otros no se esforzaban en nada más que burlarse de los dos gorilitas.

Les echamos una maldición- ya el tren había parado.

Bueno, da igual, creo que están más guapos así- est vez si se rio, y Crabberata y Goylepajaro se alarmaron, cuando los otros los empujaron para hacerse paso. Todos marcharon riendo.

Chicos, id vosotros, y vosotros dos, Lorenzo y Blanca id hacia allá- les dijo Hermione (Draco habia echo presentaciones antes) al llegar a los carruajes encantados-. Nosotros dos iremos en otro.- dijo agarrando el brazo de Draco, los otros dos chicos no dijeron nada.

Cuando llegaron a un carruaje desocupado enseguida subieron y pidieron que se pusiera en marcha- Te amo tanto…no soporto estar lejos de ti, ojalá fuesemos a la misma casa- Draco le agarro la barbilla y al beso dulcemente en los labios. Hermione se lo devolvio.

Te entiendo, yo tengo unas ganas terribles de casarme contigo, de independizarnos…- Draco empezo a besarla por la barbilla, el cuello, el pecho…Hermione solto una risita- ¡Me haces cosquillas!- dijo, pero no lo detubo. Él siguió su trayectoria y le desabrocho la tunica, pero de repente el carruaje ceso de moberse y ella se la abrocho rapidamente- Otra vez nos emos emocionado Dra…amor mio- Draco sonrio dulcemente y volvieron a besarse.

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡AHORA SI QUE FIN!!!!!!!!!!!!!!!! (Alegría: Pos yo lo veo tan mierda como el otro…) (Yo: Tu a callar)

Espero que os haya gustado y que dejesi muchos Review, y por primera vez en mi vida voy a dedicar un "fic" a alguien…¡A MI! No, no, que es broma, es para… ¡TODOS VOSOTROS! (Alegría: Pos vaya_._)

Si os a gustado, como si no, dejadme un review, por favor.

Por cierto, esto es para Iraist (Teri): ¿Cuándo te puedes conectar en el Messenger?

SALU2 MAGICOS DE AMNI