Capítulo 7: EL retorno de los Ángeles.

La lluvia que caía encima de la casa anunciaba la llegada de un caótico día... La casa parecía un caos... EL día parecía estar lleno de desagradables sorpresas, al amanecer más o menos a las 4 y media de la noche, habían raptado a Hokuto... el motivo era desconocido. Seguramente habrían pensado que ella era la poseedora de la semilla de ángel...

Subaru no había parado de dar idas y vueltas por la habitación, estaba muy nervioso... ¿Y si le había pasado algo a su hermana? Recordó en el mal estado en el que cual se encontraba y le dieron escalofríos no deseaba volver a perderla... Estaba cansado de lamentos y búsquedas inútiles por todo Tokio... Cuando alguien le envolvió en un abrazo...

Iba a decir algo al respecto, estaba cansado de abrazos y de lamentaciones... intentó apartar los brazos fuertes que cubrían su cintura, cuando se dio cuenta de que no era otro que el Sakurazukamori quien le abrazaba...

Seishiro... -dijo posando su cabeza en los hombros del otro hombre- yo... Hokuto... no...

Subaru, ella no está muerta -dijo con una sonrisa en los labios- en caso de estarlo tu lo notarías...

Subaru asintió y dibujo una tiste sonrisa en su bello rostro... Se giró para verla cara de Seishiro, entonces le besó... Después se separó de él, y Seishiro notó en esos preciosos ojos de lujuria verde que el Sumeragi había tomado una decisión, esté le paró un momento cogiéndole de la mano, y le dijo:

Si vas tú, voy yo...

Subaru entendió perfectamente a través de la mirada de Seishiro que él también había tomado una decisión irrevocable, Subaru apretó su mano contra la del Sakurazukamori y en sus labios se perfiló una dulce sonrisa... EL hombre se quedó sorprendido de la actitud del Sumeragi... Y se quedó observando esas esmeraldas verdes que tenía como ojos, debía proteger esa inocencia, debía evitar que nadie volviera a dañarle... Por eso, y por que aunque le tenía un poquito de aprecio a la gemela del Sumeragi, aunque eso nunca lo confesaría ni en los últimos instantes de su vida, iría a buscarla al parque Ueno, sitio donde tanta y tanta gente había asesinado, y donde descansaba el Guardián el Sakura donde yacían tantísima gente... Seishiro tendría que enfrentarse a los fantasmas del pasado, una cosa que él había estado evitando a toda costa...

Subaru y él se vistieron correctamente para evitar así pasar frió, las hojas que caían de los árboles y el frío que asolaba esos días en las calles indicaban la llegada del invierno en finales de diciembre, hacia que la gente ya pensara en Navidad y el cambió al nuevo milenio... Pero muchos de ellos, en el fondo de su corazón dudaban si ese tan ansiado nuevo milenio podría llegar. Pues el día del fin del mundo parecía estar a la vuelta de la esquina...

........

Kamui vió salir a Subaru y a Seishiro por la puerta, paró un momento a Subaru...

Subaru... - dijo el joven con el rostro entristecido por la desaparición de Hokuto- yo, lo siento...

Kamui -dijo él onmyouji- tú no tienes la culpa de nada, seguramente se pensaron que ella era Arashi...

Pero...

Kamui, Seishiro y yo nos marcharemos, seguramente no volveremos hasta la hora de cenar- dijo con una sonrisa...

Subaru, -replicó el joven por última vez- ten cuidado...

EL Sumeragi se quedó mirando a su amigo y asintió con la cabeza, dejándose ir de la mano por la cual estaba sujeto y abandonando la casa... Kamui, rezó en su interior para poder volver a ver sanos y salvos a los dos hombres que habían cruzado el umbral de la puerta... "Quizás debas seguirles, para así correr su misma suerte..." le sugirió una voz un tanto perturbadora a su oído... Se giró, allí no había nadie, solo Fuma restaba a unos pocos metros de distancia, esa voz había sonado tan fría, diabólica, no, no podía ser Fuma eso era prácticamente imposible...

Entonces Karen tan observadora como siempre, quiso saber que pasaba allí... Pero entonces Arashi y Sorata que no se habían enterado de nada habían bajado al comedor al oír el ruido de los comentarios que hacían entre Dragones...

¿Se puede saber que pasa aquí? -dijo Sorata, que aún llevaba puesto el pijama y que tenía a Arashi sujeta por la cintura entre sus brazos...

Han secuestrado a Hokuto -dijo Kakyo con una voz realmente triste....

Arashi y Sorata se miraron, sabían de bien cierto de que a quien buscaban no era a Hokuto... Yuzuriha que tampoco se había enterado de nada, ya que Kusanagi había preferido que durmiera, bajo precipitadamente al oír algo de un secuestro....

¡Arashi! - gritó buscando a su amiga entre la multitud, cuando la encontró suspiró aliviada...

¿Para que querrían secuestrar a Arashi? - preguntó Karen queriendo llegar al fondo del asunto...

Pues... -dijo Yuzuriha mirando a Arashi que se estaba poniendo roja por momentos.

Si matasen a Arashi... - dijo Sorata con tristeza solo de pensar esa terrible posibilidad- solo la quieren matar... - ¿Por qué la querían matar? Pensó que él tampoco sabía por que deseaban matar a su futura esposa...

¿Por qué? Que tiene que ver Arashi en el secuestro de Hokuto... - preguntó Kakyo- yo pensaba que la habían raptado por ser la hermana de Subaru, al fin y al cabo quien la raptó fue el Dragón ese... Toga- Kakyo se quedó pensativo, no podía perderla otra vez, no... debía irla a buscar- me voy a buscarla... -dijo sin pensarlo ni una vez más.... Pero se vió cogido por un brazo, era Kamui, sus pupilas violetas le miraban intensamente...

No, eso ya lo han hecho Subaru y Seishiro.... -dijo mirando al suelo, - ellos son los únicos que tiene posibilidades de llegarla a encontrar... - dijo en un tono esperanzador.

Los otros le observaron y pese que muchos quisieron ir en su ayuda, Kamui le dijo que no, en contra de su propia voluntad... Pues sabía que seguro que ayuda no les iría mal, pero también estaba seguro de que nunca lograrían encontrarlos, su única opción de llegar hasta Subaru ahora era que Subaru y Seishiro hicieran un Kekkai, el joven líder de los dragones del Cielo intentó aferrarse a esa esperanza.

Pero temía no volver a ver al onmyouji, y lo peor era que tenía el terrible presentimiento de que Seishiro se intentaría sacrificar por Subaru dejando la vida en ello si hacia falta, y no sabía si el Sumeragi podría aguantar eso... Kamui se intentó quitar esos pensamientos de la cabeza, aunque por desgracia tenía el presentimiento de que alguien al finalizar el día moriría... Deseó que este fuera un dragón de la Tierra.

¿Pero haber que pasa con Arashi? -preguntó Karen cansada de no enterarse del asunto...

Arashi enrojeció, la verdad es que no tenía demasiadas ganas de explicarlo todo, hacia bastante rato que se sentía algo indispuesta... Entonces cayó desmayada, Sorata la cogió al instante...

Arashi, cariño... despierta... -dijo Sorata, ella abrió un poco sus ojos con la mirada algo perdida y un poco desenfocada...

A eso me refiero...-dijo Karen- se que hace unos días que Arashi no está en su mejor condición, o por lo contrario su poder aumenta descontroladamente.... Eso sin contar los múltiples intentos de asesinatos, que por suerte no han dado resultado alguno, después si esto no intrigara lo suficiente, ciertas preguntas de algunas adolescentes me han dejado algo preocupada...

Karen, ya que he sido yo la que ha hecho las preguntas indebidas creo que he de ser yo quien lo explique todo... - dijo Yuzuriha algo sonrojada.

Miró a Arashi aún algo convaleciente por la caída de hacia unos momentos, entonces cuando iba a contar la verdad que habían estado ocultando estos últimos días... Cuando entonces Arashi soltó un grito impresionante y empezó a jadear muy rápido mientras se sujetaba compulsivamente el vientre...

La tuvieron que llevar a una habitación aparte, mientras que la "Bestia" le hacia un chequeo con las más avanzadas tecnologías y mientras Kamui y los otros intentaban explicar al resto del grupo que pasaba con Arashi y todo lo ocurrido en los últimos días... Mientras ella sentía convulsiones, le parecía que su vientre iba a explotar, era como si algo estuviera creciendo en su interior a una velocidad pasmosa...

YA está, la "Bestia" tiene los resultados de Arashi ahora mismo sabremos lo que le está pasando...

¿Qué le pasa? -preguntó Kotori muy preocupada...

Venir aquí un momento, hay cosas que no entiendo... - dijo Satsuki muy extrañada- salir de la habitación...

Yo me quedó -dijo Sorata cogiendo la mano de Arashi...

Sorata, será mejor que vayas -dijo Yuzuriha- yo me quedaré con ella... tú te tienes de enterar de lo que está pasando.

Sorata vió a Yuzuriha decidida a echarle de la habitación, tanto como si quería como si no... Cuando fue a coger la mano de Arashi para intentar calmarla, notó entre sus dedos el anillo de compromiso de Sorata... Sonrió, así que la noche anterior todo había salido bien, se alegró mucho por su amiga. Pero entonces vió el motivo de el dolor de Arashi, y dio un chillido...

Los otros estaban intentando mirar los resultados con Satsuki, cuando oyeron a Yuzuriha gritar adentraron hacia la habitación...

¿Pero... pero... no estaba de un mes y medio? -dijo Karen ahora ya no sabía que pensar...

No me extraña que la pobre chillara de esa forma... - dijo Yuto en tono gracioso, pero recibió miradas censuradoras al instante así que decidió callarse...

El estado de Arashi no había mejorado, pero los dolores ya se habían acabado... así que se quedo dormida. Está vez todos, sin excepción salieron de la habitación tenían que hablar sobre lo ocurrido, en esa habitación. Y de cómo era posible que hubiera pasado eso...

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Subaru y Seishiro, iban saltando por los edificios de Tokio. LA ciudad estaba tranquila y a esas horas apenas había paseantes. Faltaban apenas tres días para que llegase Navidad, y la gente estaba entre la alegría y el nerviosismo del Fin de Milenio. Cuando observaron que ya habían llegado a su destino, Subaru se paró en un edificio, y respiró fuertemente el aire de la mañana y observó el sol que empezaba a salir y posarse dentro de la ciudad... EL parque Ueno, se mostraba solo y sin apenas vida, solo algún que otro pajarito que cantaba una dulce melodía par un Tokio aún dormido...

¿Te pasa algo Subaru? -preguntó Seishiro algo extrañado por su actitud...

No, gracias por preguntar, solo estaba tomando un poco de aire -dijo Subaru, con una mirada algo triste- Bueno sí... Seishiro-san prométeme que...

¿Qué, pasa Subaru-kun?- dijo con su habitual sonrisa...

Que pase lo que pase, está noche volveremos a casa. - dijo Subaru de golpe...

¿Eso como lo debo interpretar? -dijo divertido Seishiro...

AL Sumeragi se le tiñeron las mejillas de color carmesí, Seishiro siempre igual de bromista. Pero el Sumeragi le contestó con un beso... EL Sakurazukamori sonrió divertido, ¿Así que si hoy se llevaba bien, Subaru le daría una recompensa? Des de luego su presa sabía sorprenderle hasta en los momentos más difíciles, que ser tan dulce y inocente. Subaru miraba a Seishiro con curiosidad extrema intentando adivinar sus pensamientos...

- Qué escena tan dulce y divertida- dijo una sombra detrás de ellos- pero si volvéis a poneros así, probablemente me eche a vomitar....

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¿¡Dios, qué demonios le ha pasado a Arashi?! -dijo Sorata, algo más alterado de lo normal... - lo único que sé, es que mi futura mujer estaba embarazada de un mes y medio, y que ahora parece que lo esté de cinco meses. En menos de media hora su vientre a crecido, tres veces más de lo normal...

Tranquilo Sorata... ¿Futura mujer? Bueno en estos momentos da igual ya lo explicaras después eso... -intentó calmarlo Kamui- todo tendrá una explicación lógica. ¿Verdad Satsuki?

No Kamui, esto no tiene explicación. Excepto que como ha dicho Sorata el niño que hace unas horas tenía un mes y medio ahora tiene el tamaño de uno de seis, aparte que no...

Un momento -irrumpió Karen- ¿A que día estamos?

A 21 de diciembre... - respondió Seicchiro - ¿Pero Karen que tiene eso que ver?

Entonces Aoki empezó a comprender, y se quedó parado...

Karen, no intentaras decirnos que...

Por supuesto las sospechas de Karen eran las correctas, el "bebe" de Arashi estaba creciendo tan rápidamente, por que...

EL día de la lucha final está cerca- respondió Fuma- los elegidos deben congregarse alrededor de un "Kamui" para asistir al fin del mundo... Antes de 10 días el mundo puede estar destruido o seguir su destino, los ángeles volverán para luchar con su propio calvario. Cuando el primer ángel vea la luz en este mundo, todo terminara para aquellos que anhelaban un mundo nuevo...

Fuma, Fuma... - dijo Kotori- despierta, has lanzado otra profecía...

Fuma no recordaba nada de lo que había dicho, y eso era extraño... Acaso volvería a ser su estrella gemela, Kamui siempre intentaba evadir los pensamientos como ese. Pero en este caso no pudo dejar de recordar lo raro que estaba su amigo últimamente. Entonces vió como Kotori algo preocupada le estaba observando, no deseaba preocuparla, al menos a ella no, y la dejó abrazada contra su pecho, pronto llegaría Navidad, debía comprar muchos regalos, demasiados...

¿Es una sonrisa eso que veo en tu rostro Kamui?-dijo Sorata algo más animado...

Si -entonces una mueca de disgusto salió dibujada en su faz- estaba pensando en Navidad, y que me voy a arruinar.

Sorata se echó a reír y dijo que él ya estaba medio arruinado solo de pensar en todas las cosas que tendría que pagar con la llegada del bebe, entonces una recuperada Arashi le dio un golpecito en el hombro, y le enseño su anillo. Sorata comprendió rápidamente a que se refería ella, y añadió que con los gastos de la boda, los pobres tendrían que vivir a pan y agua. Yuto salió con que como eran los "Salvadores de la tierra" el gobierno les tendría que pagar todo y dijo que entonces el que se arruinaría sería él, entonces Kotori añadió que si la profecía era cierta y ella y Yuzuriha poseían una semilla de esas el gobierno tendría que pagar por triplicado, lo cual izó enrojecer a Kamui y a Fuma diciéndole a Kotori que no les hacia gracia que fuera explicando sus intimidades por ahí, como si se trataran de nada... Todos se echaron a reír...

Yuzuriha salió de la casa y se dirigió hacia el jardín. El ambiente dentro de la casa era animado, pero ella había preferido salir a fuera, observó a los árboles y pensó que pronto brotarían de nuevo, lo cual la izó ponerse muy contenta. Entonces empezó a nevar...

Vamos a tener unas Navidades blancas, que bien, ¿No?- dijo Satsuki.

Yuzuriha e Inuki dieron un salto, pero al verse que se trataba de ella, Yuzuriha le dedicó una de sus sonrisas. Ellas dos no habían hablado nunca, aún así Yuzuriha tenía la inquietud de conocer a cada uno de sus compañeros. Inuki se acercó a Satsuki y la olisqueó con su pequeño morro, ella se sorprendió tanto por la actitud del inugami como por la actitud de su dueña, contando que meses antes los había intentado asesinar varias veces y en una de ellas el perrito había perdido su vida protegiendo a la joven...

¿Por qué es malo matar a seres humanos? -dijo en un susurro Yuzuriha ...

¿Qué? - Satsuki se quedó sorprendida esa pregunta se la había formulado momentos antes de asesinar a Inuki.

Por que habrá alguien que llorará por ellos, - dijo Yuzuriha con una sonrisa en los labios- esa es la respuesta, hace tiempo alguien me lo dijo, y aún no había podido responder ante tu pregunta...

Satsuki contempló el rostro sonriente de Yuzuriha, y ella también le dirigió una de sus escasas sonrisas. Pensó que si cuando ella iba al instituto hubiera encontrado alguien de las mismas cualidades de Yuzuriha, nunca hubiera llegado a pensar que las máquinas podían ser más interesantes que los seres humanos. Al fin y al cabo esa niña de aspecto alegre podía haber sufrido mucho, pero nunca perdía esa inocencia y esa alegría que tanto la caracterizaba. ¿Acaso estaba sintiendo algo más que indiferencia por otra persona? Recordó a los pocos seres que les tenía algún sentimiento especial, Yuto y Kanoe. Pero el respeto que le inculcaba la pequeña no era lo mismo que sentía por ellos dos, bien que Kanoe era siempre atenta y buena con ella, y Yuto... la verdad es que ella no sabía lo que sentía por él. Pero la joven Yuzuriha , le hacia sentir otro sentimiento desconocido por ella, simpatía, si esa era la definición exacta. Satsuki no se dio cuenta que aún tenía a Inuki en brazos y que el pobre animal estaba medio ahogado entre sus brazos, y que Inuki ya estaba algo cansado y quería volver con su ama, lo cual izó tambalear a Satsuki y que cayera al suelo ya cubierto por una densa y brillante capa de nieve... Entonces Yuzuriha acudió a ella toda asustada para ver si la joven se había echo daño, Satsuki quedó sorprendida ante la actitud de Yuzuriha, pero cuando esta le ofreció su mano para que se levantara, una gota de sangre cayó sobre su mano...

¿Sangre? - dijo Yuzuriha algo asustada, cuando miró hacia arriba estaba Hokuto Sumeragi encima de ellas como flotando y con un brazo herido.

Yuzuriha y Satsuki se apresuraron a intentar bajarla hasta el suelo y a llamar a los otros, cuando Hokuto recuperó momentáneamente la conciencia solo para pronunciar una palabras mientras jadeaba de cansancio...

Subaru.... Seishiro... una... una... trampa... no... vayáis... a... - y volvió a caer inconsciente entre delirios...

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Subaru giró su rostro para ver quien era el agresor de Hokuto, y exigirle que le devolviera a su hermana en ese instante sinó quería morir en ese preciso instante y así terminar con su macabra vida.

Cuando se giró se encontró otra vez con ese hombre, Toga, sí ese que tenía algo que ver con Seishiro y que les había intentado asesinar varias veces... Cuando lo vió su pulso se aceleró estaba cansado de ese hombre, de que le acosara continuamente y que tratara a Seishiro con tanta familiaridad, y para colmo había secuestrado a su hermana y le había echo daño, cosa que ya era imperdonable tratándose de un sujeto como ese, la sangre le hervía, cuando notó la mano fuerte de Seishiro sobre su brazo impidiéndole que hiciera algo que podría poner a la gemela del Sumeragi en peligro extremo...

¿Donde está Hokuto? - dijo Seishiro rompiendo el hielo...

Seguirme y lo averiguaréis- respondió Toga mirando fijamente al onmyouji y al asesino.

Subaru asintió pese a que sabían que eran una trampa, debían salvar a Hokuto costara lo costara... Observó atentamente a su rival, tenía una melena larga y pelirroja, de complexión fuerte pero a la vez delgada, Subaru pensó que si a ese hombre se le quitaba el pelo de color rojizo se parecía mucho a Seishiro...

Llegaron al parque Ueno todo empezaba a estar cubierto por una densa capa de nieve, los árboles ya no tenían hojas, y solo había algún que otro animalillo corriendo entre la nieve blanca y brillante, que empezaba a resplandecer con la fina luz que el sol proyectaba sobre esta. Parecía que estuviera que alguien rompiera esa extraña pureza que poseía manchándola de sangre de un inocente... Entre esta nieve se alzaba el maravilloso Sakura de la familia del Sakurazukamori, este árbol era el único que parecía estar vivo, sus flores nunca perecían, y tenían ese extraño color rosado. Fruto de la sangre de muchos inocentes y de la vida de otras personas fruto de los asesinatos cometidos por el Sakurazukamori...

¿Dónde esta Hokuto? - repitió Seishiro con una voz fría...

A, la joven... ya esta en casa. Solo era un anzuelo para atraeros a vosotros dos-dijo Toga- pero debo reconocer que me ha dado algún que otro problema. -afirmó mirándose una herida que tenía en el brazo- antes de mataros os tendría que contar como es posible que haya llegado hasta el Sakura... ¿No es eso en lo que estás pensando hermanito?

¿Hermano? Seishiro yo pensaba que o tenías hermano alguno... - dijo el Sumeragi, pero vió que el rostro de Seishiro tampoco salía de su asombro ...

Uy, claro, claro... las formalidades... olvidaba que soy un bastardo por supuesto- dijo sonriendo- creo que antes de morir, y ver morir a quien amas te tendría que explicar un par de cosas - dijo en tono divertido- Como bien sabrás tu madre la heredera del poder Sakurazukamori solo tubo un hijo, es decir tú. Pero antes de que tu madre y tu padre te engendraran y que tu madre asesinara a nuestro padre. Mi padre tenía que asesinar a mi madre, era una victima perfecta belleza y inocencia, sin embargo no pudo asesinarle ¿A qué me suena eso? - dijo burlándose de ellos- bueno dejando atrás las herencias familiares, mi madre y nuestro padre mantuvieron una bonita relación amorosa, pero por lo visto mi madre no era lo suficientemente pura, así que decidió matarla... Pero alguien se interpuso, su hermana, que resulta que era tu madre. Tú padre se enamoró de tu madre al instante, y ella se sacrificó por mi madre accediendo a ser la esposa de nuestro padre a cambio de que dejar a vivir a mi madre. Mi madre que ya estaba embarazada me tuvo a mí, y me cuido durante 5 años, pero ella seguía enamorada de mi padre, así que se fue a buscarlo dejándome a mí en casa de unos tipejos ricos. Nuestro padre asesinó a mi madre, y tú madre como había faltado a su promesa a tu padre... Bueno ¿Pero qué tiene que ver en todo esto mi querido hermanito? La verdad nada en especial, pero la historia sigue. Cuando yo apenas tenía 21 años me casé con la mujer más maravillosa que he conocida en mi vida, era un hombre de familia rica, feliz... Hasta que un día TÚ asesinaste a mi esposa, por que alguien te lo había mandado, y como yo me opuse casi me matas a mí también...

Seishiro intentó recordar, eran tantas las personas que había asesinado. Sin embargo pronto dio con lo que buscaba, él no había asesinado a esa mujer, bien que era su presa y la tendría que haber matado. Pero por alguna razón cuando fue a buscarla alguien se le había adelantado solo recordaba al impertinente marido acusador, que intentó asesinarle y lo molesto que llegó a ser. Recordó el fastidio de no haber poder matado a su victima... Seishiro frunció el ceño y miró a Subaru había algo que se le escapaba de las manos, y no sabía que era....

Toga no dejo demasiado tiempo para que Seishiro y Subaru asimilaran todo lo que había dicho instantes antes, a continuación empezó a entonar un hechizo... Subaru y Seishiro al ver la lucha que se les acostaba hicieron una zona protegida, la estrella de diez puntas. Pero se dieron cuenta de que algo no iba bien...

¿Pero qué...? -exclamó Subaru...

Ah, sí, no os había comentado una cosa. Estamos dentro de una zona donde vuestros amigos no pueden notar vuestras acciones -dijo contento Toga- se puede decir que es lo contrario a una zona protegida , pues los destrozos aumentan... Tendréis que matarme para salir de aquí, igual que yo os tengo que matar para salir de esta estúpida zona protegida...

En un instante Subaru y Seishiro se vieron separados a varios metros, debido al primer ataque de Toga, este invoco al aire y después izó algún especie de ritual con el sakura, que le provoco una ilusión óptica. Subaru y Seishiro se dedicaron a hacer un ataque conjuntos pero Toga no parecía inmutarse...

Toga izó una última invocación al Sakura, y a continuación volvió a invocar al viento, volviendo a separar a Subaru y a Seishiro el uno del otro, esta vez considerablemente. Subaru notó que algo se le agarraba al pie, una rama del Sakura le sostenía, atrayéndolo hacia el árbol, Seishiro se fue a ayudarlo pero toga se lo impidió poniéndose delante de él. Pero Subaru ya había caído en la trampa de Toga, Toga izó un chasquido con los dedos, detrás de Subaru se alzó una cruz... Las ramas del Sakura le apresaron en la cruz, como si estuviera crucificándolo, igual que Fuma había echo con Kotori... El Sumeragi intentó librarse de las ramas , pero solo consiguió que sus fuerzas se escapasen y que el Sakura se asegurara de que no consiguiera escapar de tan inmensa cruz....

Seishiro salto lo más rápido que pudo e intento dirigirse hacia Subaru, pero Toga se lo impidió... - Estate quieto o tu bonita presa sufrirá muchos daños- le había dicho Toga, cuando él izó un paso adelante vió como las ramas del Sakura, se aferraban más fuerte al cuerpo del Sumeragi, sabía que cualquier movimiento en falso le podía costar la vida a su preciado Subaru- kun, un sentimiento de impotencia y desesperación recorrió, cada gota de sangre de su cuerpo... ¿Acaso no iba a poder ayudarlo? Y si le veía morir, sabia que volvería a ser esa cáscara sin nada que se mantuviera en su interior...

Toga sonrió con malicia, era sencillamente perfecto incluso mejor de lo que nunca hubiera llegado a imaginar, el dolor y la desesperación que mostraba el rostro del Sakurazukamori, era puro placer para sus sentidos... La angustia y la certeza de no poder ayudar a un ser amado, la impotencia que esto hacia sentir dentro de la mente humana... Se divirtió observando la actitud de su oponente, pues en otras circunstancias hubiera caído muerto al instante, sin embargo él ahora tenia el poder, podía hacer lo que le viniera en gana.... Sin embargo Seishiro se dio cuenta de que las mortíferas ramas del Sakura se iban adhiriendo al cuerpo del Sumeragi, que a cual segundo que pasaba mas fuertes se hacían sus ligaduras entre ellas, y como empezaban a producirse pequeños cortes entre la ropa, que en pocos segundos se iban transformando en pequeñas heridas sobre la blanca piel de Subaru, el líquido rojo empezó a fluir por encima del Sakura, el Sumeragi estaba herido...

Mientras había estado observando a Subaru no se dio cuenta de que Toga había colocado algo a su alrededor, era una especie de barrera cuya energía le inmovilizó, sentía que su cuerpo pesaba mucho, se sentía muy casado y sus fuerzas le empezaban a fallar... cuando aún estaba aturdido por el hechizo que le impedía movimiento alguno, notó a su enemigo acercarse a su presa, mientras se reía de él descaradamente... Si lograba salir de ese estado ni por que Subaru le suplicase que no matase ese sujeto lograría salvar su pellejo despreciable... y el Sakura ya se podía ir preparando por que lo iba a talar, ni la sangre de sus ancestros lograría que viviese... El Sakura que notó los pensamientos de su amo, decidió mejor dejar al Joven que tenia entre sus ramas libre, pero sin embargo cuando lo izó ya era demasiado tarde y Toga estaba justo al lado del Sumeragi con una espada...

Seishiro ya se temía lo peor, y él no podía hacer nada, ni tan solo el esfuerzo fallido del sakura por intentar otorgarle su energía había no servido para nada, la barrera era demasiado fuerte... Antes había oído que esa barrera estaba echa con toda la energía de los Chii no Ryu, y si eso era verdad ni él mismo podría romperla... pero no podía permitir que a Subaru le hicieran daño... Toga se divertía de lo lindo, todo el cuerpo del Sumeragi estaba lleno de pequeñas heridas, que manchaban su bonita piel blanca y reluciente, era de decir que su hermano no tenía mal gusto, que pena que lo tuviera que matar tan "rápido" le hubiera gustado poder jugar un poco con él antes de empezar su bonita tortura...

El Sumeragi soltó un pequeño gemido cuando notó a su enemigo tan cerca, no obstante estaba dormido en un profundo y placentero sueño... Toga pensó que sería divertido despertarlo de una manera sutil... cogió su espada e izó un pequeño corte en el pecho del Sumeragi... se divirtió cuando el joven con la mirada pérdida en el horizonte abrió esos bonito ojos verdes y dio un grito de dolor. Este siguió haciéndole cortes por todo el cuerpo, así se desagnaría poco a poco y finalmente le arrancaría el corazón con sus propias manos... Seishiro vió como su enemigo hacia cortes por todo el maravilloso cuerpo de Subaru, sabía que ninguno dejaría marca pues eran superficiales, pero aún así la agonía de su víctima en ese momento era inevitable... decidido a usar u último recurso para ayudara Subaru empezó a recitar un canto antiguo, sabía que solo faltaban unos segundos para que Toga le arrancase el corazón a Subaru, la mano de Toga iba a hacer aquello que llevaba tanto tiempo esperando, una sonrisa de malicia apareció en su rostro y Seishiro supo que en ese momento lo iba a perder todo, Subaru desesperado se intentaba deshacer de su enemigo, pero estaba muy débil, pues uno de esos cortes no había sido tan superficial y le había atravesado la pierna derecha... Toga sentía puro placer recorriendo sus venas , entonces la mano de Toga se empezó a acercar hacia el corazón del Sumeragi...

Notas de la autora: Dios! He estado a punto de cargarme a Suby-chan ¬¬ que mardita k soy... Todo es culpa de mi amiga Ania XD que me mete esas cosas malévolas en la cabeza... Otro capítulo hecho viva! ES que ya era hora que lo terminase......

Resumen del próximo Cáp.: Recuerdos, evidencias.... el regreso de los ángeles... vuelta a la oscuridad...