CAPITULO SEIS.
HOLDING
UN MES DESPUÉS.
Candidez. Es curioso no sentirse solo. Adictivo.
- Me he defraudado.
- Hmm… nada como defraudarse en París. - mano por la espalda. Aceitosa. Apetecible.
- Seriamente- pequeña agresividad. Cambios de piel, Lex se regocijo como niño chico. Incansable. Sonrieron tristes. La verdad duele.
- ¿Cómo es eso?- fingió fingir seriedad.
- No soy mas que un pobre y triste objeto sexual. Malgastando años de guerras, libros y sesiones fotográficas.
- Me gustan las fotos… deliciosas. Compre ese ejemplar… y Clark… - succión- no eres pobre.
- Hmm… mi vida es un mal argumento. Mi nombre es Mary Sue, vengo de Kansas y mi deseo es que todo el mundo tengaaaa!!!- sonrisa reptilinea sobre su pecho. Soplo sobre la piel- paz y terminar con el hambre.
- Clark. Tu le pateas el trasero a cualquier Miss Kansas, con o sin vestido.
- Lo sé, ¿no es eso triste?.
- No, no realmente. Solo interesante.
- Mi vida es un triste argumento. Okkkkkkkk!!!!!!. Haz eso de nuevo.
- No… y probablemente.
- Disfrazado de conversaciones sin tema especifico.
- Mutatis mutandis.
- Todo cambia y permanece.- leve mordisco en su hombro derecho. Saboreando. Era curioso, Lex nunca dejaba de hacer eso. Curiosamente obvio el hecho de que no era su estilo- No puedo evadir por siempre.- entonó solemnemente- Los caminos y decisiones implican el conocimiento de nuestra levedad y fortaleza, la levedad en la fuerza, la fuerza en..
- Clark, me provocaras dolor de cabeza. Cállate y sé hermoso.- sonriendo, Lex se acomodo encima de él. Sudor y algo más. Caliente. Horrendamente perfecto.-… - ¿Y luego que?.
- Luego nos sacamos la mierda, y nos emborrachamos en nombre de los ancestros. Ya sabes, el honor de la raza y todo eso.
- Profundo.
- Me solazo en la profundidad.
- Hmm, ¿en serio?- pequeño movimiento. Manos arañando. Un segundo y volvió a su… reposo.
- Aja. - Clark suspiro contento. Por alguna razón, Lex pensó que algo en el mundo debería estar explotando ahora mismo. No duro mucho, acerco al hombre arriba suyo y simplemente enterró las uñas y mordió ronroneando. Fuerte.
- ¡Mierda Clark, estas en pose agresiva!- sonrío. Clark no lo vio y lo miro con leve preocupación. A veces, simplemente no se medía.
- Debes decirme cuando no…- se corto. Lex sonriendo. Petulante. ¿Suave?.
- Créeme, lo haré.
- Veremos- Clark puso una mano en la cintura de Lex, y lo volteo con facilidad- Rumores dicen que tu padre esta escarbando sobre mí.
- Imagina eso…ah… mal chico- paso la uña sobre el pezón. Sobre excitado. Arañó lento. Lex solo sonrío entre presumidamente aburrido. Haha, vamos a ver cuanto te dura. Lex amaba eso, el punto exacto el cual el placer daba paso a lo insoportable.
- Y aquí estamos.
- Sí.
- Jugando con tu cabeza.
- ¿Hmm?- inocente. Movimiento perfecto, cortante sobre la piel. Rosado. Sobre piel blanca, casi traslúcida sobre las sabanas azules, ¿podría haber algo más cliché?. Clark sonrío tranquilo.
- Jugando con tu espíritu.
- Aja.
- Y no hay razones.
- Yay. - esta vez, simplemente rasgo.
- ¡Eso duele, maldita sea!- risa breve ronca. Casi esperada.
- Lo hace, ¿no es así?.
- … Dame razones.
- No.
- No. Dime. Explícame.
- No puedo dar sentido al mundo Lex- enterró la uña y Lex se resistió a emitir protesta. Sonrisa presumida.
- Me importa una mierda este mundo, Clark.
- No es cierto.
- Quiero saber el porque.
- Porque sí.
- Y pensar que entre los dos, al menos hay mas de doscientos de IQ.
- Habla por ti retrasado mental.- Clark río. Terrible humor, y Lex se quedo viéndolo. Era una de las pocas veces. Honesto. Abierto. Tranquilo. Verdadero. Retazos del pasado fluyendo en algo nuevo. Nuevo. Lex necesitaba renacer de vez en cuando y convertirse en sal.- ¿Por qué?.
- No sé.
- Sí sa…. Ha- resistió la urgencia de moverse- eso… duele.. Creo- Clark se dedico a lamer las pequeñas gotas de sangre.
- Bien, te he marcado, soy tu dueño, tu alma es mía, estilo alienígena, dominación, bwuaaa.- se estiro encima de él y Lex solo movió la cabeza. Insanamente feliz- Estoy aburrido.
- Pobre niño. Tienes el peor sentido del humor del mundo.
- Herencia de mi abuela.
- Ha. Eso lo explica.
- Hmm… no soy el único que evado y lo sabes- detuvo el movimiento que había empezado hace unos minutos.
- Ha, le quitas la diversión a todo. En fin Clark, es que simplemente eres un pedazo de c-- Clark mordió el pezón.- ¡Wow, cual es tu problema hoy!- sonrío.
- Ya sé que soy un buen pedazo de carne, Lex- Lex solo movió la cabeza.
- Exacto lo que iba a decir.
- Pero. - no presto atención a la interrupción- Soy mas que un rostro bonito- suspiro exageradamente.
- Ok.
- No soy el único que evado.
- Un punto a favor ojos verdes.- ahora, ¿de donde vino eso Lexy?. Yada, yada. Etc..
- ¿No pensé que lleváramos marcador?.
- Entre nosotros siempre, hermoso - Clark le envío una mirada asesina.
- Debería haber alguna cláusula en la declaración de principios de los bisexuales, con respecto a esa palabra. Evolucionamos cada día.
- En un tiempo mas, te casaras con Mary Sue.
- Serás mi madrina de bodas.
- Haha, haz eso de nuevo.
- No.- sonrío. Tranquilo.
- Hablemos del día a día.
- … Porque eso me pone nervioso.
- ¿Háblame de tu investigación?.
- Háblame sobre tu padre.
- Te diría Touche, pero eso es solo vulgaridad.
- Sabes que no lo haré.
- Mi curiosidad es famélica.
- Solo te importa porque interfiere con esto.
- Define "esto"… ¿no?, Hmm, o bien.
- … La gente comienza ha hablar.
- ¿Miradas?.
- Aja.
- ¿Comentarios?.
- Uno que otro.
- Hmm, perturbados. Confío en tu madurez verbal.- Clark busco a tientas el tubo. Lex sonrió. Mirada negra. La conocía. Hmm.
- Tu padre lo sabe.
- Clark, si no paras con esos comentarios vulgares sobre mi padre, mientras usas ese lubricante, empezare dudar de tu cordura- se quedaron mirando y lo que debió salir como una risa franca, se quedo en una sonrisa cubierta de algo peligrosamente parecido al afecto. Era suficiente para ambos.
- ¿Recién ahora te preguntas sobre eso? - beso. Succión. Mordisco. Peligrosamente parecido al afecto. Lex suspiro en el hombre de Clark y dejo que este empapara sus manos. Beso suave. Ninguno de los dos osa mirar. Clark besando su cabeza. Lex bajo la mano. Sonrío de pronto, pero ya sabía lo que venia. A veces no podía detenerse a sí mismo.
- ¿Qué esta sucediendo Clark?.
- ¿Con respecto a que?.- frotando las manos de Lex. Que gentil de su parte.
- … Hiciste un buen trabajo escondiendo las irregularidades de tu pasado. Sabes, podría ofenderme el que puedas formar aun frases completas. Es una cosa buena, que yo no me ofenda con facilidad…
- No me interesa compartir el día a día de mi trabajo.
- Como si eso me detuviera.
- Vamos Lex, solo di las razones y todos seremos más felices- por toda respuesta, Lex lo beso hasta que le quito al menos un mes de vida. Entre respiraciones entre cortadas pregunto bajando por su cuerpo.
- ¿Quién es Edward Fanning?- miedo. Absoluto. Un segundo, nada más. Pero ahí había estado. El millonario beso la cadera de Clark, pero tuvo la sensación de que estuvo a punto de ser botado de la cama por ese breve contacto. ¿Clark... con miedo?.
- Tu sabes quien es.- voz tranquila.
- Venta de armas, trata de blancas. Temas que has tratado.
- Temas vigentes.
- Pero sin embargo- no hizo caso a la interrupción.- aunque lo insinúas, jamás lo has nombrado en tus reportajes.- vio una ceja morena arquearse-¿Qué?, Leo el diario como cualquier ciudadano.
- Por supuesto. No hay pruebas, no hay historia. Al menos en su caso. Ley básica.
- No es un hombre fácil de rastrear.- pensativo. Clark se sentó y Lex lo siguió, frente a frente. Noto como Clark se resistía a dejarse llevar por el temperamento, siempre in crescendo, no como el suyo- Sin embargo,- trazo la mejilla izquierda con el dedo. Suave. Gentil noto como el deseo moría frente a él, por un largo periodo, él lo sabía, también noto que aunque lo deseaba, a veces simplemente no podía atrapar esos ataques de gentileza en los dedos…ha, si, claro Lex- hice mis tareas.
- ¿Cómo es eso Lex?- cuidadoso.
- Praga. Tres años atrás- inhalación. Exhalación. Lex dejo caer el dedo.
- Sexo y charlas inútiles, ¿realmente sería todo?.
- Si creías eso, eres muy ingenuo.
- Me siento tocado. Deberías hacer una revisión profunda de tus prioridades. Puedo ayudarte.
- ¿Por qué estas asustado Clark?.
- ¿Y eso en que te afecta Lex?. He recibido llamadas.
- He ahí el resultado de la revisión profunda, ¿alguien se retirara de alguna sociedad?, ¿Fondos?…
- Soy un hombre ahorrativo. Pero no, no realmente- mintió. Observo como el periodista se ponía la ropa interior, y se paraba cerca del balcón. Siempre cuidadoso.
- Y yo que pensé que era por mi encantadora personalidad… Hmm, con un telescopio apropiado, se podría ver mi apartamento.
- ¿Sigues en la eterna remodelación?- asintió ausente en respuesta.
- Lex.
- Praga. Ocho meses de tiempo oscuro- se levanto e imito a Clark en lo de la ropa. Sibarita. Trazo la línea de la columna de Clark, pero este no pareció notarlo y Lex respiro con calma.
- Soy reportero Lex, el tiempo oscuro en la agenda es obvio.
- Tendré que contar eso como excusas. Aparentemente Clark, el tiempo oscuro te esta cazando de vuelta.
- Llámalo deber cívico. Diez niños muertos.
- Praga- susurro en su oído, mas para estudiar su reacción que otra cosa. Dedo trazando círculos. Clark no cerró los ojos. Ahora lo sabía, no volvería a verlo en un buen tiempo. Pero si volvería. Siempre lo haría. Igual que él.
- Lex, ¿cualquiera diría, que estas intentando convencerme de que te interesa?.
- Cualquiera diría que eso solía excitarte.
- ¿Qué quieres?.
- La verdad. - imito a su padre. Sonrieron ausentes- Todo estaba bien, lo típico, ya sabes: Sexo en restaurantes, Lana, las culpas, las ironías de rigor, luchando por los derechos de los niños, mujeres, animales, alienígenas y de pronto, te escabulle por semanas, no respondes llamadas. Clark si quieres que la mente criminal aquí presente no se interese, al menos deberías inventar algo mejor, como alguna excusa de tipo erótico... – y eso, no es gracioso, Lex. No ahora.
- Eso sonó sospechosamente a una esposa. Que decepcionante.
- Hago mi mejor esfuerzo.
- Hablaste con Chloe.- volteo con calma pero Lex no retrocedió.
- La princesa intocable. Tienes serios problemas con respecto a eso hermoso. Y en realidad, fue ella quien lo hizo, pero debes entenderla, dos semanas sin verte, y además, Oh maravillas, ella te ama. Yo solo quiero que dejes de joder con mis asociados- sonrisa de oreja a oreja. Clark no quiso reconocer la mentira.
- Lex- advirtió.
- Chloe Sullivan.- recito aburrido- La enamorada sin esperanzas. Fuera de limites. Checado. Igual que tu madre… Puedo lidiar con socios de gustos… especiales, con chicas enamoradas y vendedores de armas. Pero si quieres saber algo de mis inversiones, pregunta.
- ¡Ha, el dedo en la llaga!. Seriamente Lex, como si me fueras a decir algo.
- Puedes hacer ago encantador, y tratar. Pintoresco, pero real.
- Me interesa una mierda si molesto a tus socios.
- A mí también, - Wow. ¿Verdades?. Imagínate. Entro al dormitorio de nuevo- pero me sorprende que no tengas cuidado con el cheque a fin de mes.
- Solo estas ofendido porque crees que estoy culpándote.
- Clark, se requiere algo mas que eso para ofenderme… por otro lado, ni te has molestado en no ir a la cama con el enemigo.- una botella de agua en la mano. Puso las manos en la baranda, de vuelta.
- Cruzo por mi cabeza- silencio-… estoy perdido- dijo de pronto.
- Lo sé.
- Es tu culpa.
- En parte… dime que haces, y te diré lo que puedo hacer.
- ¿Protegerme?, ¿Ayudarme?. Lex acabas de comprar las acciones de Von Mühlenbrock, las cuales no son las más redituables por estos días, y Daniel esta deslizando comentarios no muy halagüeños.
- Reconozco que mi padre tiene sus momentos- dijo tranquilo y Clark entrecerró los ojos.
- Curioso, curioso.
- Gracias.
- Y aquí estas.
- Eres mi misterio favorito.- le dijo todo inocente- Y no, no perderé LexCorp. No todavía.
- … No supongo que no.
- En todo caso. Los intereses de mi padre son… diversos- se paso la lengua por el labio, lamiendo una gota de agua.
- LuthorCorp era su vida y tu se la arrancaste traicionándolo, y casi lo matas en ese accidente en Aspen.- Lex se río.
- Lo haces sonar tan mal.
- Hago mi mejor intento.
- No creas todo lo que dicen los periodistas, son unas hienas.
- Primero te humillara.
- Dices, ¿cómo ahora?… Pero si, es lo acorde.
- Y aquí estas.
- Aquí estoy.
- Tratando de sacar información sobre alguien cuya vida es un cero a la izquierda. Fácil de eliminar.
- ¿La palabra alienígena te dice algo?, Pero si, aquí estoy.- sonrío travieso y a Clark le provoco lamerle esa sonrisa.
- ¿Por qué Lex?.
- Porque lo elijo.- silencio, y de pronto Clark se río porque era estúpido, porque Praga era solo un día mas en la vida de alguien y porque no quería aceptar lo evidente- Praga- Clark se vistió y se puso la chaqueta con calma.
- Busca un misterio más excitante.
- Tu siempre lo eres. Aun cuando salgas huyendo.
- ¿Por qué?.
- No lo sé- pero pudo ser una respuesta, o pudo ser el viento quien le hablaba. Le lanzo la bata y mientras se dirigía a la puerta hablo ausente.
- Aléjate de lo que no te incumbe. Enfócate en proteger lo tuyo.
- Es hago- vino la elegante replica.
- Nadie me posee Lex.
- ¿Así?.
- Así.
- … Entonces, ¿te veo el jueves?.- lo saludo alzando la botella- Tu actitud de perrito perdido e indefenso siempre fue refrescante- el reportero cerro la puerta tras de sí con calma. La última imagen con los hombros caídos. Gusto amargo donde no debía haberlo. Miro el reloj. 2 AM. La llamada de costumbre. Siempre así, siempre.. Tanto así me amas Clark. Amargo. Nadie jode con lo que es mío... a menos que lo deseé, y aun... aun no- Luthor- contestando la llamada. Un segundo después, se pasó la mano por el cráneo desnudo.
CONTINUARA
