CAPITULO OCHO.

MUZZLE

Denso. Mundo. Deseos que siempre traicionan. Muertos. El llanto. El llanto de Clark, deberías verlo, yo casi no puedo. Puedo desconectarme de tus labios antiguos, después de todo, solo soy otra rata en un mundo que inspira aburrimiento.

Así que, ¿qué hago?. Pasatiempos favorito Luthor: conquistar, joder, destruir, re inventar, construir. Desnudos. Cubriéndonos del reposo ajeno. ¿Y que hice?. Me senté frente a ti, mas de doce horas y luego de arroparte huí.

Soldado que huye…

El mundo drena, y no hay manera de huir de ti, nunca lo hubo, ¿o sí?. Pero de todas las cosas que no pude aceptar o soportar… tu rostro dormido. Débil. Débil emocional, melodramático. Corriendo hacia la única cosa que puede sostener un corazón viejo. Un corazón Luthor. Divertimiento.

Temo que conozco el destino, pero solo soy un ser ordinario. Siempre te odie. Aun lo hago.

2 AM.

- ¿Cómo esta?.

- Bien. En unas dos semanas, la cicatriz desaparecerá.- apago el teléfono, y se quedo viendo el vacío. Reminiscente.

Temo que conozco el destino y que estoy vivo de nuevo. Clark, Clark, el mundo es difícil de entender, el mundo esta hecho a la medida de tu corazón, y ella nunca fue plenitud. El mundo es el vacío de la juventud. El mundo es el eco del amor. El mundo es tu prisión y la mía. Despojados en el desde el día en que nacimos. Olvidados.  Aun Luthor no le agrada ser olvidado.

Lex, Lex. Emocional.

¿Y entonces que?, Llevaba años huyendo, años bailando en sueños con una chica morena, hermosa, de sonrisa limpia y dientes blancos, tan blancos, como los tuyos. Cabellos negros. Brillantes. Seda. Risa. Un suspiro al frente suyo, lo saco de su ensimismamiento. Clark, no hay día en que no haya hablado. No hay día en que no se reniegue. Gee, Lex valiente, valiente.

Bebió otro trago y luego deposito el vaso con cuidado. El teléfono de mierda sonó de nuevo. Y se sintió transportado. Apartamento ruinoso.

HORAS ANTES

- Háblame.

- …

- … Fanning Clark, Praga. - Clark cerro los ojos y suspiro. Ojos cerrados y una sonrisa tibia- Tiempo muerto de ocho meses.

- Ocho- susurro.

- Ocho.

- Ocho meses, tres semanas.

- ¿Que sucedió?.

- No afectara a tus inversiones Lex.

- Clark- se paso una mano por la cabeza. Fría.

- Sí, si, - no abrió los ojos. Lex no esta seguro de que Clark siquiera estuviera ahí. Eso lo enfureció. Síndromes. Síndromes - Praga- mas de una hora en silencio.

- Puedo ayudarte.

- No lo quiero.

~ Quiero oírte gritar ~

- ¿Razones?.

- No me gustas.- sonrío de pronto-... No puedes borrar lo que soy.

- No quiero eso.

- Deberías.

- No seas melodramático.

- Quiero dormir.

- ¿Traicionaste a alguien?… Clark… - se levanto un segundo, sacándose la camiseta. Lex solo lo observo. Mas de dos horas de silencio.

~ Quiero oírte gemir ~

- Tarde casi dos días en volver a la conciencia. - apenas audible. Ojos cerrados. Sentado- Tuve suerte, el doctor no noto nada… los exámenes nunca allegaron a destino. Ventajas de hospitales rurales

- Fanning- el tono de voz hizo que Clark abriera los ojos. Cuidadosamente neutral.

- Por mas de un año, estuve tras su pista. Giles, Water, Grant y yo nos encargamos de la investigación… cada uno con contactos en diferentes lugares.. Asia… Europa del este…Cuento corto. Water nos vendió. Teníamos unas pistas, vigilancia nocturna en el muelle. Y si, hubo entrega, pero pequeña, debimos saberlo. La familia de Giles vivía en Praga… me arrinconaron en la calle, aun con supervelocidad, no hay mucho que hacer cuando hay un arma apuntando a la hija de un amigo… al parecer sabían de mí...  durabilidad- Lex inhalo lento- pero ni yo pude… y al parecer Fanning tenía cierto especial interés en mi persona. Me tuvieron por dos semanas. - imágenes en la calle. De noche. Golpes en el estómago.

- Ramírez no negoció.- cuidadosamente neutral.

- No lo esperaba.

- Pero él esperaba tu apoyo en la campaña…

- Como dije, Fanning me dejo con vida. Al parecer disfruta eso. Figúrate…

- No negocio.

- Lo sé. - ahora también yo.- De todas maneras, siempre fue su política mientras estuvo en el cargo. Nunca hizo excepciones a la regla, yo no iba a ser diferente.

- Entregaste el material…- te quebraste. Clark miro sus manos- ¿Clark?.

- Los mató de cualquier manera… su familia- cerro los ojos y descanso la cabeza contra los cojines a su espalda.

~ Quiero oírte respirar ~

- No tenías opción. Punto.

- Siempre hay opciones- Lex se levanto y se sentó en la mesita frente a él. Mas cerca.

- No para ti Clark- sonrío. Trazo la línea de su quijada.

~ Una boca tan hermosa. Quiero oírte suplicar ~

- No puedo dejarlo.- sin esperanzas.

- Lo sé.

- ¿Lo sabes?.- sonrío un poco.

- Chloe, tus amigos y tu madre son vulnerables. No yo.

- Mas de tres millones.

- Tres millones y cuatrocientos mil.

- Menciono a tu padre.- Praga. Lloviendo. Tomando fotos. La cámara rota en la calle.

- Es lo mas seguro.

- … Lo siento Lex- hilo de voz. De vuelta a los diecisiete, el chico que le insuflo vida. El que le extendió la mano. Se tendió y Lex lo cubrió con una manta. Praga. Despertando en un cuarto oscuro. La familia al frente suyo. Viendo. Sangrando en medio de las piernas.

- Lo sé…- dos horas más.

- … Estoy tan triste.

- Lo sé.- y así se siente. Hey, así que así se siente. Roto. Lex respiro profundo. Latidos fuertes. Cortos. Intensos. Igual que hace diez años atrás. E igual que hace diez años atrás, Clark no lo noto, no pudo, no podía. Así se siente. Dios... no... negocio- Y yo sigo aquí- Clark se quedo dormido mientras Lex seguía acariciando la frente ausentemente.

~ Grita por mi Kent, sabes que lo deseas ~

HORAS DESPUÉS

Horas viéndolo dormir. Su celular sonó nuevamente y lo trajo de vuelta al presente en su Penthouse numero cinco.  Después de seis años. Contesto.

~ Quiero sentir tu sangre ~

CONTINUARA