Capitulo 4:

La Confesión de un Corazón ( Heero): Solos por Siempre Tú y Yo......

Abrió sus ojos y todo lo que diviso era fuego, estaba rodeado de incesante fuego en un lugar tenebroso, un lugar cálido y completamente ardiendo en llamas grandes y peligrosas llamas de fuego, vio a Duo, el estaba bien, pero parecía un fantasma caminaba como un zombie, sin conciencia de hacia donde se dirigía estaba pálido más pálido que cuando lo tenía en sus brazos herido, caminaba seguido de todos los soldados que el mismo había matado con sus propias manos. Duo continuaba caminando se dirigía rumbo hacia un abismo en donde el cual había millones de púas donde se podía observar una escalofriante vista de cabezas, brazos y cuerpos mutilados, ensartados en aquellas púas destino de los que caían en aquel precipicio. Todo lo que Heero veía era fuego ¿en que lugar estaba? Se preguntaba, veía a numerosos hombres caminando hacia ese abismo todos destinados a quedar clavados , era un lugar espantoso jamás había visto algo semejante; el suelo y las paredes estaban tapizados por diversos rostros humanos y el calor que sentía era infernal quemaba el cuerpo, la piel y parecía traspasar quemando inclusive los huesos.

- ¿En donde estoy?, esto parece un infierno - Heero reacciono

- ¿Acaso estoy en el infierno?- los ojos de Heero se abrieron por la sorpresa, si teoría era correcta, había muerto con Duo en sus brazos y ahora estaba indudablemente en el infierno, no lo aceptaba su deber era proteger a Duo y había muerto junto con Duo, corrió para alcanzar a Duo, pero Duo seguía caminando destinado al abismo, no había marcha atrás su destino sería quedar ensartado.

- ¡¡¡Duo!!!, ¡¡¡Detente!!!- corrió intentando alcanzarlo, pero era tarde vio a Duo caer, caía en un vacío sin fin llegando a su destino, quedo ensartado en mil pedazos atravesado por las filosas púas que traspasaban su cuerpo, brazos piernas, estomago, cuello, cabeza.

- ¡¡¡DUUUUUUOOOOOO!!!, ¡¡¡NOOOOOOOOO!!!, ¡¡¡DUOOOOOOO!!! - no lo asimilaba, se había permitido perder a Duo, no podía ser cierto, estaba muerto, ambos lo estaban, su dolor era tan intenso, tan profundo, tan fuerte, tan destructivo, que lo mataba por dentro, sintió una lagrima correr por su mejilla, tan solo una, en ese momento deseaba llorar, llorar era lo menos que podía hace por la muerte de Duo, era lo único que podía hacer por él. Al perderlo, solo en ese momento se dio cuenta de que tanto lo amaba, de que jamás lo hubiera querido perder, de que si pudiera regresar con Duo, jamás lo dejaría, lo protegería siempre, y lo amaría eternamente, pero ahora todo estaba perdido, la lagrima que resbalaba por su mejilla continuo su ruta y cayó en el suelo, y en ese momento despertó.

Todo había sido una pesadilla, Heero estaba, él estaba, en su departamento y en frente de él para su asombro estaba, estaba .........

- ¡¡¡Duo!!!- pronunció sobresaltado

- Duo ¿en donde estoy? - estaba impactado, lo ultimo que recordaba era haber salido de la base explotándola utilizando el detonador que no había funcionado con Duo, luego recordó llegar al hospital, desmayarse, la pesadilla y ahora en frente de sus ojos estaba Duo sonriéndole, pero con lagrimas en sus ojos, y ¡¡¡VIVO!!!, para su gran alivio.

- Heero, estas en nuestro departamento, yo desperté en el hospital, los médicos dijeron que estaba muy herido y tu también lo estabas, pero al igual que tu yo fui atendido y cuando, cuando te vi en la otra cama Heero, estaba muy preocupado, todo pareció una pesadilla, los soldados, el científico, todo Heero todo - sus lagrimas volvieron a salir de sus ojos al recordar lo acontecido - Perdí mucha sangre, pero me atendieron e hice reposo, sin embargo me recupere antes que tu, cuando mejoraste tu estado luego de algunas semanas, a pesar de que te encontrabas inconsciente yo ya estaba bien y pedí a los doctores traerte aquí para cuidarte, ha pasado un mes y algunas semanas desde lo ocurrido en la base, la misión fue un éxito, pero yo no quiero perderte Heero, jamás porque te amo, perdóname Heero no te odio, te amo Heero te amo, lo siento mucho - sus lagrimabas no cesaban. Heero acerco a Duo dejándolo descansar en su pecho y Duo lloro se sentía arrepentido, su alma no estaba en paz, tenía un dolor muy agudo. Heero sintió el dolor de Duo no quería soltarlo, no quería dejarlo no después de haber tenido esa pesadilla y sentir el dolor de perder a un ser querido, sólo quería estar con él, bien, junto a él, a su lado y para siempre........

- Duo, no te dejare, porque en aquel momento en el que me preguntaste si te amaba o te deseaba , yo quería decirte .......... lo que yo quería decirte realmente era:

- Duo, yo no puedo, pero al decirlo no salieron palabras, quería decirte que no puedo mentirme a mí mismo, que ya no puedo negar estas extrañas sensaciones que siento al estar contigo, que no puedo negar que te amo Duo, te amo, y si te perdiera estaría perdiendo y renunciando a una parte importante de mí Duo, si corazón mi propio corazón y mi vida, porque eso eres tu para mí Duo - Heero no lo podía creer había confesado todo, el jamás había logrado decir lo que sentía, el jamás decía mas de dos palabras que fueran monosílabos, pero ahora habían ocurrido tantas cosas, cosas que jamás creyó posible, estaba enamorado profundamente, desde niño fue entrenado, para no sentir, para no amar, para no tener emociones, ¿Cómo es posible que hubieran hecho semejante crueldad con él? quitarle los sentimientos algo tan preciado para una persona, para él ahora, algo único. Negándole a sentir aquel amor que tenía por su trenzado bonito y ahora después de tantos años arriesgando su vida, pensando que no tenía valor alguno, ni para él ni para nadie, podía sentirse, vivo, feliz, alegre lleno de vida, con un corazón capaz de sentir, ¡sentir!, una palabra que solo ahora recién conocía, como poder decir en palabras todo lo que pasaba por su corazón y su mente, como pudo decir todas esas palabras, en este momento el soldado perfecto ya no pensaba todo estratégicamente, siendo el soldado calculador y frío, ahora se sentía como un verdadero ser humano, que podía sentir, amar, vivir, querer, y soñar.

- Duo te amo, eres mi vida, cuando pienso en que tan solo podría perderte, en que algún día te podrías alejar de mi lado Duo, mi corazón es torturado, jamás había sentido, jamás había hablado como ahora, jamás sentí y ame, fui entrenado para ser un soldado al cual no se le permitió sentir, jamas me permití sentir por alguien y al hacerlo renuncie a vivir, pero ahora que estas conmigo jamás te dejare porque te amo, entiéndelo Duo- interrumpió sus pensamientos para decirlo, ahora era guiado tan solo por su vivo y cálido corazón.

- Heero...............Heero...........yo también te amo pronunció Duo. Heero acaricio el rostro de Duo, tomo su barbilla y lo beso profundamente, era un beso largo, tierno y lleno de amor, se separo de Duo para tomar aire, acerco su boca a una oreja de Duo introdujo su lengua en ella haciéndole cosquillas y le susurro, tiernamente.

Ya lo sé Duo y a partir de ahora solo seremos tu y yo

Continuara.......................