Hola a todos!!! Saben que? Mi familia me cree loca por gustarme Harry Potter....verán tengo 19 años, y piensan que debería concentrarme mas en el estudio que en leer "libritos de cuentos" como ellos le dicen...Bueno, se preguntarán por qué esta introducción, pues me gustaría saber por qué Harry Potter es un fenómeno masivo, por qué estamos tan necesitados de magia??, Tal vez con sus respuestas pueda entenderme a mi misma...así que espero sus respuestas...=)!!

Bueno, comencemos con la historia:

Capítulo 3

Harry sentía cómo su sien latía con fuerza. ¿Cómo era posible que su madre tuviera una hermana así? Cada verano era peor, los Dursleys siempre se la ingeniaban para ser mas fastidiosos. Sin saber por qué sus pasos conducían a la casa de la señora Figgs, una squib que lo había ayudado el verano pasado durante el ataque de los Dementores. Ya faltaba poco para llegar allí, así podría preguntarle si sabía algo del mundo mágico. Cuando Harry llegó a su puerta, observó que la casa estaba rodeada de lechuzas. Entró rápidamente olvidándose de tocar, encontrando a la señor Figg en la cocina, acariciando a su horrible gato Tibbles.

-"Ah! Hola"-dijo Harry observándola con curiosidad.

-"¿No sabes golpear?"-preguntó la anciana.

-"Sí, lo olvidé."-respondió Harry.

-"Ah, si, seguro que no viste a las lechuzas tampoco, no?"-dijo la señora Figg levantándose de la silla-"¿Un té?"

-"No, gracias."-respondió Harry observando el diario El Profeta, cuyo titular parecía no tomarlo por sorpresa:

Mortífagos escapan de Azkaban

Algunos Mortífagos, entre ellos el ex miembro del Consejo Escolar del Colegio Hogwarts de Magia y Hechizería, Lucius Malfoy; se escaparon de Azkavan la noche de ayer aproximadamente a las 9:45 p.m. En una de sus declaraciones, el Ministro Cornelius Fudge afirmó: "Sin la presencia de los Dementores se hace difícil el control de los prisioneros, pero el Ministerio s está ocupando del asunto".

-"Como siempre."-murmuró Harry.

-"¿Cómo siempre qué?"-repitió la señora Figg, alzando la vista hacia el lugar donde se encontraba la chimenea, en donde una figura masculina apareció tosiendo debido a la ceniza que había absorbido en el viaje. Harry recordó el efecto que producían en él los polvos Flu, el bramido ensordecedor, el remolino de llamas verdes que lo mareaba, nunca pudo acostumbrase a ellos. Harry observó al hombre con curiosidad, Mundungus salió de la chimenea dirigiéndose hacia la mesa, frotándose las manos en la cara para despejar el hollín del rostro.

-"Podrías limpiar tu chimenea de vez en cuando"-dijo luego de observar a Harry y al diario El Profeta que descansaba en la mesa.

-"No tuve tiempo, si te darás cuenta estuve ocupada"-respondió la señora Figg señalando a las lechuzas.

-"¿Cómo estás Harry?"-preguntó Mundungus mientras agarraba a Snowy de la cola, apartando su garra del ojo de una de las lechuzas que lo picoteaba en el lomo.

-"Bien, ¿has visto a Lupin?"-preguntó Harry recordando lo ocurrido la noche pasada.

-"Sí, lo vi el otro día cuando volvía de una transacción de negocios, ya sabes"-contestó Mundungus, cuya capa provocaba un ruido parecido a un sonajero.

-"¿Sabes si salió para algún lado?"-preguntó Harry mientras observaba una especie de medallón que colgaba de su bolsillo.

-"Mmm, no, está muy ocupado con las desapariciones"-

-"¿Qué desapariciones?"-preguntó Harry mientras la señora Figg le echaba una mirada fulminante a Mundungus, quien agachó la cabeza tratando de ocultar su rostro lo más posible.

-"Eh...eh...los Mortífagos!, ya sabes, los que escaparon de Azkaban"-

-"No me imagino cómo el Ministerio va a solucionar ése asunto"-inquirió Harry mientras observaba las manos entrelazadas de Mundungus.

-"Dumbledore cree que Fudge tiene un as en la manga"-contestó mientras la señora Figg lo miraba de la misma manera que lo había hecho antes- "Eh...digo...él tiene que tener algo para decir eso, ¿no?"-

Harry lo miró seriamente tratando de descifrar lo que realmente estaba ocultando. ¿Cómo era posible que no le hablaran claramente?¿No sabía acaso de la Profecía?¿No sabían que tendría que enfrentarse a Voldemort y morir en sus manos, o matarlo para poder vivir?

-"Y Volde-bueno, ¿El-Que-No-Debe-Ser-Nombrado?"-preguntó Harry tratando de encontrar algunas respuestas.

-"Desde que se confirmó su existencia, no se ha sabido nada de él"-

-"Es mejor que vuelvas a tu casa"-sugirió la señora Figg. Harry observó la mirada decisiva de la squib y asintió con la cabeza, igualmente, pensó, no le contarían lo que él quería saber; nunca sucedía y no iba a cambia ahora. Recordó que le único que le había explicado lo más posible fue Sirius, y ahora que no estaba todo había vuelto a la normalidad. Harry se levantó de la silla y se retiró del lugar. Mientras caminaba, sus pensamientos se centraron en las desapariciones. ¿Realmente se referían a los Mortífagos? Si era así, ¿por qué la señora Figg lo miró de ésa manera. ¿Qué es lo que oculta Fudge? Bueno, debería escribirles a Ron y a Hermiony sobre esto, y sobre lo ocurrido la noche anterior.

Para no tener que cruzarse con ninguno de los Dursleys, Harry entró a su habitación por la ventana, como si le preocuparan no verlo, pensó; aunque a él tampoco le molestaba la idea. Hedwig había regresado y mordisqueaba un gusano, cuando vio a Harry voló hacia el ululando.

-"Bueno, debes llevar unos mensajes por mi"-Harry comenzaba escribir las cartas para Ron y Hermiony, y cuando hubo terminada miró a su lechuza, la única amiga que tenía en el número 4 de Privet Drive -"Ésta es para Lupin, ésta para Ron y ésta para Hermiony"-Harry ató cuidadosamente las cartas en la pata de Hedwig, y le dijo-"No te vayas sin que te contesten"- Hedwig picoteó suavemente su mano y voló a toda velocidad.

Mañana sería seria su décimo sexto cumpleaños, y se sentía más solo que nunca, sin Sirius todo había cambiado.

Glosario de palabras en Latín:

In medias res casus belli: en el núcleo/corazón de una guerra.

Espero hayan disfrutado y nos vemos en el próximo!=)