Esto solía ser un Fictober, ahora solo es un reto de 31 historias cortas.
Día 22: Genderbend
Fandom: Naruto / Naruto Shippuden
Personajes: Obito Uchiha, Kakashi Hatake, Rin Nohara (todos en genderbender)
Advertencia: Relación poli amorosa
Título: Preocupación
Concluir la misión fue sencillo, eran un equipo excepcional, estaban dispuestos a protegerse a cualquier costo y eran tan respetados como temidos en el mundo shinobi. Kakashi era conocida como la ninja copia, aquella que había copiado más de mil jutsus con su sharingan; Obiko era la Uchiha del kamui, ágil e imperceptible como un fantasma al acecho; y por ultimo estaba Rin, el jinchuuriki del Sanbi quien tenía perfecto control de su bijuu.
Eran un equipo de temer, no había enemigo que pudiera sobrevivir a un combate de ellos si su deber era eliminarlo. Sin embargo, una vez de regreso en la seguridad y comodidad de su aldea, volvían a ser una familia, la única que tenían, una en la que eran felices.
—Obiko ¿Cómo te sientes? —la Uchiha escuchó su nombre de la voz de Rin, aunque ignoró totalmente que era lo que preguntaba por estar distraída viéndole—¿Obiko?
—¿Eh? Ah sí, sí, estoy bien gracias.
Rin no solo era el chico más guapo que había conocido en su vida, también era gentil, encantador, amable, atento. No había nada malo que pudiera pensar de él, para ella era el hombre ideal. No podía evitar solo mirarlo atontada cada que le sonreía con su natural dulzura.
La Uchiha retiró su mano para mirarla bien, estaba como nueva, no había esperado recibir una quemadura así tras aquel combate con ninjas enemigos. Le dolía que sus guantes acabaran chamuscados, le gustaban mucho, ahora tendría que comprar unos nuevos en su siguiente salida al mercado.
—¿Segura que estás bien? Pareces dispersa —le dijo con preocupación.
—Claro que está bien, solo anda en las nubes, como siempre —y ahí estaba la voz que faltaba, Kakashi.
Por otro lado, estaba Kakashi, quien parecía encontrar deleitante el meterse con ella bajo cualquier excusa. Era algo altanera y arrogante, también parecía desmotivada de hacer muchas cosas y le gustaba resaltarle todo lo que hacía mal. La relación con ella era compleja de explicar, pero no significaba que no se preocuparan constantemente la una por la otra, solo tenían una manera curiosa de expresarlo.
—No estoy en las nubes, estaba pensando —negó a modo de queja—. Ya estoy bien gracias a Rin.
—Deberías ser más cuidadosa ¿Cómo no evitaste eso con tu sharingan? —interrogó la de cabellos plateados haciéndola resoplar con fastidio.
—Tener un solo ojo a veces tiene sus desventajas, puedes devolverme el otro si tanto te preocupa mi percepción espacial —respondió sarcásticamente.
—No, no, los regalos no se devuelven.
Obiko era sentimental, demasiado para gusto de Kakashi, claro que también era fuerte y muy decidida cuando se trataba de proteger a las personas que quería. Desde que eran niñas siempre fueron así, claro que ahora sus discusiones eran mucho menos serias a las de entonces, cuando ni siquiera se soportaban. Quien diría que acabarían siendo compañeras sentimentales, bueno, él si lo había visto venir de algún modo, aunque no creyó ser parte de ello.
Tener una relación poli amorosa era complicado de explicar y de entender por lo que preferían mantenerlo como una cuestión meramente de ellos tres, para el resto del mundo quizás solo eran amigos de infancia demasiado cercanos o compañeros de casa. Tampoco querían tener las miradas juzgadoras de nadie encima, eran sus vidas privadas y las manejaban como ellos quisieran.
—Me alegra que tu mano esté bien, ten más cuidado la próxima —le habló Rin con una dulce sonrisa antes de besar el torso de su mano, haciéndola ruborizar.
—Ustedes dos siempre tan cursis —resonó la voz de Kakashi, la cual se dedicaba ahora a secar su cabello plateado con una toalla.
—¿Celosa? —Respondió Obiko, retándole con la mirada.
—Ya quisieras.
—Ya no discutan —les interrumpió el jinchuuriki—¿No necesitas que te revise? Tuvimos una batalla bastante complicada.
—Estoy bien, no soy tan descuidada como Obiko —negó provocando el enojo de la azabache.
Nohara suspiró un poco, era muy común que discutieran, a veces incluso podría parecer que no se querían de ninguna manera, pero él sabía que nada estaba más lejos de esa posibilidad.
—No deberías ser tan dura con ella —le comentó una vez la Uchiha se retiró a la habitación que compartían. Rin se dedicó a recoger algunas cosas que estaban regadas primero.
—Es muy descuidada, no quiero que salga lastimada por eso —suspiró Hatake, continuando con su labor de secar su cabello. El jinchuuriki decidió acercarse y ayudarla con eso—. Hoy fue una quemadura, pero otros días podría ser algo más grave, no entiendo donde tiene la cabeza.
—Sé que te preocupa, a mí también —respondió, dejando la toalla a un lado para cepillar su largo cabello a continuación—, pero podrías ser más linda con ella de vez en cuando.
—Sabes que eso no me sale tan bien, además que ya es suficiente contigo en cuanto a consentirla.
Nohara dejó salir una risa antes de solo plantarle un beso en la frente. Kakashi sintió sus mejillas algo calientes, simplemente viéndole recoger todo lo de la cena para irse a la cocina a lavarlo. Dejó salir un suspiro y fue hasta la habitación que compartían los tres, ahí pudo ver a la Uchiha tendida sobre la cama leyendo un libro.
—¿Aun no lo terminas? —Interrumpió su lectura con una pregunta, pasando a recostarse a su lado.
—No, me faltan un par de capítulos. Me sorprende que Jiraiya-sama escribiera un libro bueno que no sea de perversiones —respondió, acomodando el marca-páginas para cerrarlo—. Al menos entiendo porque el nombre que escogió Minato-sensei para su hijo.
—Es una buena historia, no entiendo porque no se hizo más famoso con ella —comentó, recostándose sobre su costado para verle mejor—. Obiko deberías tener más cuidado, en serio, no puedes dejar que Rin y yo siempre te estemos protegiendo, haces ataques muy descuidados.
—Confío mucho en ustedes, sé que estaré bien —le restó importancia— y solo fue una quemadura, ya no te preocupes tanto.
—Sí, pero si algo te pasa ¿Sabes lo que provocaría en Rin?
Hubo un breve silencio en el que claramente las dos pensaron lo mismo. Era cierto que el castaño tenía un control perfecto del bijuu, sin embargo, eso no implicaba que si sus emociones se desbordaban de forma muy intensa no fuera a perder el control. Ambas eran lo más preciado para él, perder a cualquiera de ellas desataría alguna catástrofe sin igual.
—Tendré más cuidado —cedió Obiko finalmente.
—Qué bueno que seas una chica lista —comentó de forma irónica, aunque antes de que la azabache se quejara simplemente la abrazó contra sí y besó suavemente su frente del mismo modo que Rin lo había hecho con ella.
Obiko entendía que muchos de los regaños de Kakashi eran porque se preocupaba, tanto por ella como por Rin. Apreciaba mucho que lo hiciera y que siempre le ayudara a poner los pies en tierra cuando era necesario, si, su relación era complicada, pero definitivamente se amaban tanto como amaban a Rin.
Para cuando el nombrado ingresó a la habitación, pudo contemplar con una suave sonrisa como ambas parecían haberse quedado dormidas. Acomodó un par de cosas más en la habitación y finalmente se recostó en el espacio sobrante de la cama. No pasó mucho para que sintiera como le jalaban, invitándole a unirse al cómodo abrazo en el cual la Uchiha quedaba en medio.
—Buenas noches —murmuró Rin suavemente.
—Buenas noches Rin —respondió Obiko.
—Que descasen —dijo Kakashi.
FIN
Holis ¿Cómo están? La verdad tenía hartas ganas de escribir de esta OT3 hace rato y al fin me saco la espinita. Vi algunos fanarts de ellos en genderbender que me encantaron por lo que me pareció adecuado para este reto. Espero les haya gustado, nos leemos pronto en otro one.
