"Mistrust"
Scene 9 - Glaring Dream

El hospital.
Aborrecía ese lugar de una manera impresionante, y ahora, lo aborrecía muchísimo más, porque el que estaba en cama, no era él.
-Eiri-san...- Tohma trató de calmarlo poniendo una mano en su hombro, pero Yuki enseguida se apartó, rechazando el contacto.
Tohma miró en silencio.
La pequeña sala de espera permanecía en completo silencio, ni siquiera Ryuuichi que comúnmente hubiera estado jugando con Kumagorou, emitía un solo sonido.
K' y Sakano estaban en el pasillo con Suguru, haciendo montones de llamadas y negando a los medios que hubiera algún peligro, Tatsuha estaba sentado junto a Ryuuichi y Noriko en un sillón, mirando a su hermano en silencio.
Hiro caminaba como pantera enjaulada, de un lado a otro del pasillo y Tohma hablaba con todos los doctores y enfermeras que pasaban.
Y Kenji... "ese imbécil", como prefería llamarlo Eiri, estaba en completo silencio en un sillón, con la cara más seria y preocupada que se le había visto nunca.
Fue entonces que Yuki decidió que no necesitaba un cigarro, sino una cajetilla entera, y, desafortunadamente en los hospitales, eso no estaba permitido.
Suguru regresó en silencio con cara de consternación, seguido por Sakano y K', no más alegres.
-¡Maldita sea! ¡¿Qué tanto hacen ahí dentro?!-
-Nakano-kun, calma...- intentó Sakano.
-¡¿Calma?! ¡¿Cómo quieren que tenga calma en estas circunstancias?! ¡¡Por dios, mi mejor amigo de toda la vida está ahí dentro muriéndose y yo sin poder hacer nada!!- sus ojos estaban hinchados, nadie sabía por cuanto tiempo más podría retener las lágrimas.
-Nakano-san, no fue tu culpa... no fue culpa de nadie... los accidentes suceden y jamás hay nada que podamos hacer...-
Hiro estaba tan molesto que poco le faltó para soltarle un puñetazo en toda la cara a Fujisaki. De hecho ya tenía el puño arriba cuando sintió una presión mayor deteniéndolo...
-Kenji-san...-
Los ojos plateados de Kenji se clavaron firmemente en los castaños del guitarrista.
-Hiro-kun, es obvio que ninguno de nosotros podemos entender lo que sientes a la perfección, porque ninguno de nosotros es el mejor amigo de la infancia de Shuuichi...- hizo una breve pausa y prosiguió –...pero ten por seguro que a todos y cada uno de los que estamos aquí presentes nos importa muchísimo su estado...-
Hiro enmudeció por completo, de hecho todos miraban a Kenji impresionados.
Yuki sentía que la sangre hervía cada vez más en su interior y como escuchara una palabra más proviniendo de los labios de ese pseudo-actor, no se haría responsable de las consecuencias.
Afortunadamente para todos, el eco de los zapatos de Tohma resonó por el pasillo atrayendo la atención de todos.
-Shindou-san...- respiró –está estable...-
El alivio se reflejó en los rostros de cada uno de los presentes mientras Hiro sacaba el teléfono celular para llamar a Ayaka e informarle de lo sucedido.
-Sin embargo...-
Todos se quedaron de piedra de nuevo, los "peros, aunques y sin embargos" no eran precisamente las palabras más agradables que se podían escuchar en un hospital.
Tohma respiró, cerró los ojos y los abrió de nuevo.
-Sin embargo el estado de Shindou-san es extremadamente delicado...-
-¡¿Cómo que extremadamente delicado?!- Hiro se le hubiera tirado encima de no ser porque la presión que ejercía Ikeda en su hombro se lo impedía.
Tohma reunió valor, dios sabe de dónde, para responderle, tranquilamente.
-Shindou-san está en coma...-
La sala enmudeció, instantes o quizá minutos enteros, pero todos perdieron la noción del tiempo.
Ésta vez fue la voz suave de Kenji la que rompió el silencio.
-¿Qué...?- y de no haber estado todos en completo mutismo, es seguro que nadie lo hubiera escuchado, porque la pregunta fue apenas un susurro.
-Está en coma...- repitió Tohma como pudo, y dirigió una mirada hacia el rincón donde Yuki permanecía apartado.
El escritor no parecía dar señal alguna de sorpresa o conmoción. Permanecía inmutable, mirando al suelo y jugando ausentemente con su encendedor.
-No... no...- negó Hiro, con el rostro lleno de lágrimas. –Quiero verlo, déjenme verlo... ¡por favor!-
-No podemos entrar... no por ahora... los doctores dijeron que pasaría la noche en observación y que dependiendo de su condición, se aceptarían las visitas mañana.-suspiró. –Los análisis, para saber exactamente qué fue lo que lo puso así, tampoco estarán listos hasta el día de mañana.
Kenji tenía abrazado fuertemente a Hiro mientras Suguru trataba de calmarlo también.
Noriko, que se sentía tremendamente fuera de lugar hizo ademán de levantarse, pero la mano de Ryuuichi sobre la suya se lo impidió.
-Ryu-chan...- murmuró.
Él vocalista genio la miró y negó suavemente con la cabeza. -Espera... por favor...-
Ella respiró hondo y asintió.
-Sakano-san, Mr. K', encárguense por favor de informarle todo esto a la familia de Shindou-san, y que nada, absolutamente NADA de esto, salga de aquí.-
Ambos asintieron y con los corazones apretados salieron a realizar todas las llamadas necesarias.
Tohma comenzó a digitar el número de Mika en su celular y dirigió un vistazo al rincón de Eiri, donde Tatsuha se le había acercado e intentaba hacerlo decir al menos un insulto.
-Aniki... Eiri...- apretó su brazo fuerte, quería ver si por lo menos conseguía que lo mirara.
Yuki seguía con el mismo rostro frío y sereno, su mano derecha aún jugando con el encendedor y la izquierda en el bolsillo de su pantalón.
La vista perdida en la nada.
Entonces, sin soltarlo, Tatsuha dirigió la mirada hacia Tohma, esperando apoyo o alguna palabra... después de todo, Seguchi lo conocía mejor. Pero éste último se encontraba dándole todos los detalles a Mika por teléfono.
-Suéltame-
Y antes de que el moreno pudiera enterarse de que Yuki había dicho eso, se encontraba en el suelo, producto del fuerte empujón que le había propinado su hermano mayor.
-¡Tatsuha-kun!- Ryuuichi se acercó corriendo y de paso, llamando la atención de todos los demás.
-Estoy... bien... no fue nada...- se quejó débilmente, y al dirigir la mirada a Eiri notó que seguía en la misma posición de antes, como una estatua.
Sakuma ayudó al chico a levantarse. –Noriko-chan...-
Y con eso, Noriko recogió al pequeño animal de peluche del sillón y se puso de pie para acompañar fuera a Tatsuha y Ryuuichi.
Suguru le hizo un ademán con la mirada a Kenji para que entre ambos sacaran a Hiro de ahí.
-Descuida...- sonrió Kenji tranquilizador. –Encárgate de llamar a Ayaka-chan, yo lo llevo abajo-
En la sala, no quedaba nadie más que Tohma y Eiri, y el único sonido que se escuchaba era el ~click click~ del encendedor del escritor y de vez en cuando, la voz de una enfermera buscando a algún doctor por el altavoz.
-Eiri-san...-
-Vete-
Ni siquiera lo miró, pero esa única palabra y el tono en que había sido dicha, le bastó a Seguchi para entender que Yuki de verdad quería estar solo.
Que de verdad lo necesitaba.


_______________


Las horas siguientes fueron eternas y a Yuki le parecía que las manecillas del reloj que había en la pared se habían congelado por completo.
Las enfermeras y los doctores, cansados, habían dejado de insistir en que no tenía caso que se quedara ahí, porque de cualquier modo no podría ver a Shuuichi hasta el día siguiente, y, resignados a que lo más seguro era que pasara la noche ahí, incluso le habían llevado una taza de café y una manta.
Pero ni el café ni la manta habían sido tocados luego de que la enfermera los dejara en la mesita que estaba en la sala de espera.
Dos de la madrugada. Una pequeña luz proveniente de una lámpara que había en la mesa, era toda la iluminación que Eiri recibía. Había apagado el celular largo rato atrás, no porque las enfermeras se lo pidieran, sino porque estaba harto de las llamadas de Tohma, Mika y Tatsuha preguntándole cómo estaba.
A los tres les había colgado por lo menos siete veces.
Y a pesar de que el hospital estaba completamente mudo, (a excepción de una que otra enfermera o doctor de turno nocturno que pasaba haciendo guardia de rato en rato), Eiri no podía dejar de escuchar la voz de Shuuichi en su mente.
Lo más doloroso, es que no era su risa o sus gritos alegres, no eran sus berrinches ni los sonidos dulces que sólo emitía cuando Yuki estaba cerca y lo regalaba con caricias y palabras tiernas.
No. La voz del joven vocalista no se cansaba de repetir una y otra vez las mismas palabras que habían cruzado en su última discusión... hace dos semanas... la última vez que habían hablado.

~~~~~~~~~~~~~~

-¡¡EL QUE ESTÁ HARTO SOY YO!!-
Había enmudecido. Y se había soltado a reír luego, por falta de algo mejor que hacer. Por nervios... porque su orgullo se lo exigía.
-El alcohol te pone agresivo ¿eh Shu-chan?-
Y aún mientras Shuuichi lo arrinconaba contra la pared, no podía dejar de reír. No creía lo que estaba pasando.
-¡Estoy harto de ser tu juguete! ¡Harto de que sólo me busques cuando necesitas sexo! ¡Harto de que te burles de mí y me menosprecies! ¡Harto de no significar NADA para tí! ¡Harto de tu maldita actitud de hombre duro y frío! ¡Harto de que no te interese nada que me involucre! ¡HARTO DE TÍ!-
Lo miró llorar desesperadamente. Temblaba de pies a cabeza.
Él ya ni siquiera podía reír. Su mente y su cuerpo no coordinaban.
-¿Y? ¿No vas a decir nada? Cobarde-
Y la lucha que se llevaba a cabo entre su sentido común y su orgullo, tuvo como triunfador al último.
Lo abofeteó, lo derribó al suelo. Quería hacerlo callar.
-Cállate mocoso. Tus argumentos son absurdos. Exiges cosas que no das.-
Pero esta vez Shuuichi no se rendiría tan fácilmente. Ésta discusión era completamente diferente a cualquiera que hubieran tenido en el pasado.
Habría un ganador y un perdedor. Y Eiri no estaba dispuesto a salir con el rabo entre las patas. Porque si él no ganaba, entonces nadie lo haría.
-¿Cosas que no doy, eh?-
-Te he dado todo, todo absolutamente todo lo que tengo.-
¿Y qué podía responder a eso? El rubio empezaba a quedarse sin estrategias.
-Cada día, eres la primer cosa que está en mi mente al despertar. La última cosa en la que pienso antes de dormir. Te llamo siempre que puedo, te escribo cartas que no me atrevo a darte por miedo a tus burlas. Sería capaz de dar mi vida entera y más por tí si me lo pidieras.-
El delicado pecho de Shuuichi se inflamaba cada vez que respiraba. Yuki hubiera querido disculparse, olvidar todo y abrazarlo como nunca en su vida.
Pero su orgullo se lo impedía.
-¿Y tú? A ti no te interesa, no lo notas. Y si lo haces, seguramente lo ignoras. He leído tus libros, ¿sabes? ¿Tienes idea de lo horrible que es leer novelas llenas de romance y personajes felices cuando el autor no es capaz de dirigirle un te quiero a su propio novio?-
-Mis libros son mis libros, yo soy yo.-
¿Orgullo?
¿Estás seguro de que eso era orgullo, Uesugi Eiri?
¿No era más bien falta de coraje? No tuviste los pantalones para aceptar tu error. Eso era.
-¿Has escuchado alguna vez mis canciones? ¿Les has prestado un poco de atención? No para criticar lo malas que son o lo ridículas que suenan. ¿Has reparado en la letra acaso?-
Desarmado y completamente reacio a admitir cosas, no hizo más que encogerse de hombros fingiendo desinterés.
-Hablan de ti. Todas y cada una de ellas han sido escritas pensando en ti y en los momentos que paso a tu lado. En las cosas que me haces sentir, en las palabras que de vez en cuando me regalas. Sin ti no existirían mis canciones. Fui capaz de escribirlas bien hasta que te conocí...-
¿Y que hizo entonces?
Sacudir la cabeza. Porque no podía creerlo.
¿Por qué querría Shuuichi escribir sobre él después de como lo trataba?
-¿Y tú? ¿Te has inspirado alguna vez en mi para alguno de tus secundarios? ¿Has pensado en mi mientras escribes tus libros? Seguramente no, jamás me has regalado una sola dedicatoria. Nunca en todo el tiempo que llevamos juntos.-
-Deja de hacer dramas y vete a dormir.-
Si los golpes no lo hacían guardar silencio, quizá palabras funcionarían. Pero ya era demasiado tarde.
-¡¿Dramas?! ¡Permíteme recordarte que quien empezó todo esto fuiste tú!-
En cuanto lo vio ponerse en pie de nuevo, decidió que había sido derrotado. No tenía más argumentos que usar, ni los quería.
Se encogió de hombros por reflejo. Necesitaba dormir. Mañana podrían hablar con calma... quizá mañana tendría los pantalones para admitir que se había comportado como un imbécil.
Pero no hubo mañana. Porque esa misma madrugada, Shuuichi se fue.

~~~~~~~~~~~~~~

-Shuuichi...-
Fue apenas un susurro. Acompañado de una suave caricia en la frente del que yacía en cama.
Lo miró por un rato. Se veía tan tranquilo ahí dormido, sin lágrimas bañando su rostro, sin ojos hinchados.
¿Y de qué le valía disculparse ahora si él no podía escucharlo? Era igual que lo que había hecho aquella noche. Si sus disculpas no podían ser escuchadas, era como si no existieran.
Suspiró y se arrodilló junto a la cama. Apoyó la cabeza sobre el colchón para que estuviera a la altura de su rostro.
Completo silencio en el lugar.
El pulso, el oxígeno y los demás aparatos que apenas emitían sonido, fueron silenciados... opacados por otro sonido dulce y suave.
-Disolviéndose, entre la multitud, un murmullo puede hacer...
que recuerdos que, encuentro al caminar, se mezclen todos una vez más...-

Se sentía raro escucharse cantando, pero al mismo tiempo se sentía tan bien...
-Brillando, en la calle en la que perdido voy
Fríamente, me ilumina, congelándome-

Su voz iba cobrando potencia poco a poco, sin llegar nunca a sonar estruendosa. Las palabras se escurrían de entre sus labios como miel y la tonada llegaba sola a su mente.
-Tiempos fríos, sueños que como siempre al llover, entre mis manos van deslizándose
Y luego al despertar, de un deseo en un millar, temblando en una ilusión tu reflejo veo hoy
Guiando mi camino está, aquella silueta...-
La tenía memorizada, como el resto de sus canciones. Podía cantarla completa.
-Si la eternidad, llegase a alcanzar, aquella amabilidad
Que habla de ansiedad, estoy seguro que, el mañana tampoco querré-

"Glaring Dream", era el título.
Aquella canción que los había, de una manera u otra, unido.
-Para ti, palabras que quiero hacerte llegar
Perdiéndose, entre sombras que no hay, en un día sin final-

Jamás lo olvidaría. La primera impresión que había tenido al leer aquellas palabras. La letra no era mala, en lo absoluto.
Pero para alguien que no era capaz de comprender el verdadero sentimiento que cargaba la canción...
-Con un dedo, sueños que empiezo a recolectar, sin siquiera detenerme a respirar
Empiezan a caer, ya no sé en qué confiar, ¿puedo al menos creer que te volveré a encontrar?
Y vi desaparecer, aquella silueta-

"No tienes talento", había dicho. Pero en realidad era él quien no tenía talento... capacidad, para sentir la canción.
-Al contemplar, esta triste y pálida estación
Me detuve, y muy lejos de aquí, fui llevado esta vez-

Y la canción se había olvidado. Glaring Dream estuvo incompleta hasta el momento en que Shuuichi había tomado una decisión.
-Vientos fríos que al soplar, son capaces de llevar, el ansia entumecida de mi corazón-
Hasta que había decidido que nada podría separarlo de Yuki ya. Que lo amaba, que lo necesitaba para vivir. Y que si la canción iba a estar bien escrita, necesitaba expresar todo lo que le inspiraba Yuki y más.
Así fue entonces. Una vez la canción estuvo terminada, el primero en leerla, en escucharla cantada dulcemente a capella en un concierto personal, había sido quien la había calificado de horrible.
Pero la amaba. Así como amaba el hecho de que Shuuichi hubiera ido hasta los Estados Unidos sólo por él, sólo para que la escuchara.
La amaba, así como amaba a Shuuichi.
-Tiempos fríos, sueños que oscilando al caer, entre mis manos yo hoy recibiré
Y luego al despertar, de un deseo en un millar, temblando en una ilusión tu reflejo veo hoy
Guiando mi camino está, aquella silueta...-

Y sin poder resistir más, se soltó a llorar como un niño aferrado de la mano de Shuuichi.

______________

*se larga a llorar también*
Ay, disculpen. Es que esa escena, es LA escena.
En serio, desde que se me ocurrió la idea para el ficcie, hace un buen rato ya, siempre tuve esa escenita en mente. Y ahora por fin pude escribirla, ¡¡buaaaaaaaa~ o!!
*ahem*

Bueno, y ahora un pequeño espacio dedicado a quienes leen y tienen la amabilidad de dejar reviewcitas de cuando en cuando ^__^.
Shuuichi, ¡trae el fanmail! XD
Shuuichi: No es fanmail y el hecho de que me tengas en coma no te da derecho alguno a usarme de ésta manera. Para eso tienes a Daisuke, ¿no?
Daisuke: De hecho ¬¬...
Ehm... bueno, bueno, ya, entonces seremos justos y lo haré yo solita entonces XP.
Shuuichi y Daisuke: *empiezan a gritar obscenidades mientras son cubiertos por una cortina que corre Ryu-chan*
Ahora si ^^;;

-A Kami-chan:
¿Qué va a pasar? Pues ya leíste, y lo demás no puedo soltarlo que destrozo el fic XD. ¿En qué está Yuki? Pos escribiendo, ¿qué más O_o? ¿Por qué diablos le provoqué a Shuuichi una dependencia a las pastillitas esas? Para que Yuki sufra, y para poder escribir la escenita de allá arriba ^^ (nada en contra de la gente que las utiliza, por cierto, una de mis mejores amigas también las toma ^^;; sólo quería aclarar, para que nadie se sienta aludido ^^U).
Mmh... sobre Ayaka, pues a mí tampoco me agrada mucho la señorita, pero quería hacerlo lo más apegado posible a la historia oficial (vamos, que meter a un original ya hasta podría calificárseme de fallo)... aunque... aquello de Hiro, pos igual en un futuro, o en otro fic ^_~.

-A Akari-san:
Ohohohohoh, atinaste X)

-A Reiko Noriko-san:
¿Demasiados químicos en el cuerpo de Shuu? Nooooo... ¡¿de dónde sacas esas ideas?! XP Jejeje... nah, pos lo mismo de arriba. Lo necesito para la trama, nada contra Shu-chan ^^;;

-A Hime-chan:
Saludos ^o^!! *waves*

-A Misato:
Ódiame XD. ¿Y tú que opinas? ¿HiroxKenji? ¿KenjixHiro? X3

-A Kousei/Tsu:
Hospital!Shuuichiiiii~!! Ahí ta ya XD.

-A todos los demás que leen y dejan reviews:
ARIGATOU NEEEEEEE~ ^O^!!!!!! *glomp*

-A todos los demás que leen y NO dejan reviews:
Malos ¬¬... eheheh, mentira, pero bueh, espero que al menos les guste como va esto ^^U.

Y bueno, disclaimer, Gravi no es mío, es de Murakami Maki, Glaring Dream tampoco es mía, es de Kotani Kinya, yo sólo hice una adaptación-lousy-cantable y no estoy sacando dinero (bueno fuera ¬¬). Kenji si es mío (pero lo presto si alguien lo quiere, sólo avisen ^^) XD.
Este capítulo fue escrito con las tres versiones de Glaring Dream en loop eterno de fondo. Reviews o cualquier donación será bien recibida en kyuuketsuki@iespana.es o en la hoja de reviews.
Hasta la próxima ^^.