CAPITULO 4
LA REALIDAD
Los siguientes días transcurrieron en la normalidad. Hermione había olvidado por completo el incidente que tuvo con Malfoy en los pasillos puesto que había mejores cosas en que pensar: las clases y sus labores como prefecta.
En aquel instante, Harry y Ron todavía se hallaban en clases y ella tenía libre aquella hora. No estaba de humor para encerrarse en la sala común. Hacía un lindo día y que mejor que ir al lago para despejar un poco la mente.
Escogió una sección cerca del lago donde estaba repleto de árboles frondosos y arbustos, frente a ella había un pequeño arroyo que se unía al lago y que prodigaba un agradable sonido. En ese momento solo esperaba poder avanzar un capitulo de su novela mientras esperaba a sus amigos. Nada en ese momento la hubiera hecho molestarse.... excepto Malfoy.
- Granger, .. Granger..- Se escuchó una voz en tono irónico que provenía a sus espaldas.- ¿ya se aburrieron tus amigos de ti tan pronto?
- Malfoy...- dijo exhausta.- ¿por qué siempre me persigues?.¿qué te hago para que me estés molestando todo el tiempo?.
- ¿Perseguirte?.- Draco sonrió burlón.- No estés dándote importancia Granger. A mi me gusta este lugar y ahora entorpeces mi hora libre. Estás estorbando así que... retírate.
- Yo llegue aquí primero... así que vete a donde puedas. –dijo enfadada.
- En primera yo voy a donde me dé la gana y en segunda,... ¡Quítate!. – Ordenó en voz alta.
Draco la miró directamente a los ojos y vio en ellos tanto odio que por un momento se sintió incomodo pero no se iba a dejar intimidar por una sangre sucia... él era un Malfoy.
- ¡Pues quítame!. – Hermione se levantó de su lugar de un solo salto. Su rostro reflejaba rabia.
- No me tientes Granger.- dijo en voz baja Draco.- Puedes arrepentirte de tus palabras.
- No te tengo miedo Malfoy, ya estoy harta de tus necedades y durante 5 años he soportado todos tus insultos. Así que puedes hacer lo que te venga en gana pero ni tú ni nadie me va a quitar de aquí.
La joven Gryffindor dio un golpe en el suelo con el pie mientras buscaba su varita en el bolsillo. Draco sintió un horrible sentimiento oscuro y solo pensó en hacerle algún daño a la Gryffindor.
- Vas a quitarte...- Musitó con cólera el Slytherin.
Draco no le dio tiempo de reaccionar a Hermione. La tomó de los brazos con fuerzas atrayéndola hacia él. La chica por unos segundos creyó que se encontraba en un grave aprieto pero lejos de lastimarla el Slytherin solo la miró fijamente con sus fríos ojos grises.
El rubio fue suavizando su expresión. El cabello de Hermione revoloteaba con el aire y su boca recién humedecida, parecía una cálida invitación a que los besara. Los segundos parecían correr con lentitud y Draco se vio envuelto en una nube que le empañó los sentidos. Se acercaba lentamente al rostro de su enemiga con el simple objetivo de averiguar a que sabían sus labios.
Hermione estaba petrificada, sin habla y sin poder reaccionar ante la actitud del Malfoy. Ella temblaba en una atmósfera densa, ¿qué estaba pasando?. Sin embargo un rayo de conciencia cayó sobre Draco, quien la soltó con cierta brusquedad.
El rubio la miró unos instantes antes de darse la vuelta para marcharse, dejándola totalmente desconcertada.
"¿Qué fue lo que pasó?". Pensó Hermione. Le pareció que Malfoy se había acercado mucho a su rostro, por un momento pensó que.. ¿estuvo a punto de besarla?. Hermione se cubrió la boca, el solo hecho de pensar en un beso de Malfoy la llenó de repulsión. Esa idea era de lo mas descabellada... ¡Draco Malfoy la odiaba con todas sus fuerzas!.
------
Malfoy caminaba hecho una furia, que bajo había caído, acercarse a Granger de esa manera... ¿Pero en que diablos estaba pensando?.
- ¡¡Quítate estorbo!!- dijo Draco empujando a un chico de cuarto curso de Griffyndor que tuvo la mala suerte de cruzarse en su camino.
Sus pasos se dirigieron a la sala común de Slytherin, escuchó su nombre pero ni siquiera volteó a ver quien le llamaba, si fuera por él mismo hubiera agarrado su varita y hubiera lanzado hechizos por doquier. Al entrar a su habitación dio un portazo con tanta fuerza que nadie se atrevió a acercársele.
Malfoy comenzó a dar vueltas por toda la habitación, pateando y tirando lo que estuviera en su paso, exhausto se tiró a su cama. Posó una mano sobre su frente y noto que estaba mas frío de lo normal, ¡estaba casi congelado!. Mil ideas bombardearon su cabeza y se repetía a si mismo lo imbecil que era. ¿Un Malfoy besar a una sangre sucia?. ¿Pero que le estaba pasando?. ¿Qué tenia en el cerebro?.
El Slytherin fue molestándose más a medida de que pensaba en la insensatez de habérsele acercado a Granger y que ella se hubiera dado cuenta de lo que él trataba de hacer. De la boca de Draco comenzaron a brotar Maldiciones. Trató de calmarse y cerró los ojos para transportarse hasta el momento en que la tenía sostenida por los brazos.
Fue un circunstancia extraña. En aquel momento que tomó los brazos de Granger sintió una descarga eléctrica en todo su cuerpo y un vacío en el estomago. Fue como aferrarse a ella en vez de empujarla con las intenciones de quitarla del lugar. El haber visto a la bruja tan enfadada y tan cerca, lo primero que le vino a la mente fue acercársele y besarla.
Draco abrió los ojos... si la hubiera besado, si él no hubiera reaccionado a tiempo, seguramente a estas alturas Granger se estuviera burlando de él junto con Potter y Weasley. "¿Supiste lo del idiota de Malfoy?. Besó a Granger, si a la sangre sucia", Draco se imaginaba que eso es lo que hubieran dicho todos y a continuación su reputación se iría por los suelos. Pero para alivio suyo nadie había observado la escena, los únicos que sabían eran ellos dos.
---
Hermione, sin embargo, se había quedado totalmente petrificada en el lago. No sabía si moverse o no, solo acertó sentarse de nuevo y mirar el cielo. No entendía la actitud de Malfoy, su mente sacó miles de conclusiones pero todo parecía indicar que él se había acercado para besarla.
Pensó en un momento en esa posibilidad pero resultaba incoherente dado que si él sintiera algo ni siquiera la trataría como lo hace, además que él no besaría a una 'sangre sucia' como le decía él.
"No, eso es imposible". Se decía a si misma. "Estás loca si piensas que él se acercó para eso, lo más probable es que perdió el equilibrio y solo quiso tomar impulso... Si,.. si.. esa es la respuesta. Claro, ¿Cómo no se me ocurrió?. Malfoy solo estaba tomando impulso".
Hermione se sintió una tonta ante la respuesta a su pregunta pero parecía ser la correcta o al menos eso quería pensar. Después de haber encontrado la supuesta respuesta, ella se levantó para alcanzar a los muchachos, en unos momentos más tendrían que ir juntos a la clase de Transformaciones con la Profesora McGonagall.
La chica caminó con pasos firmes pero su mente estaba enmarañada de tanto pensar. Lo mejor que se le ocurrió fue no pensar mas en Malfoy antes de presentarse con sus amigos. Sino ¿cómo podría ocultar lo que le había sucedido?.
- ¡Hermione! - Saludó con alegría Ron al verla acercarse - Que linda te ves el día de hoy.
El Weasley se sorprendió interiormente de lo que acababa de decir y no pudo evitar sonrojarse.
- ¡Gracias Ron! - exclamó Hermione un poco tímida.- Err...¿Dónde está Harry?
- Ahora viene, se quedó platicando con Dean sobre no se que cosas, yo preferí salir a buscarte.
Nuevamente el chico volvió a sonrojarse. Hermione lo miró confundida.
- Y... ¿que estuviste haciendo?. - Preguntó Ron para cambiar el tema pues sentía que sus mejillas iban a explotar.
- Deje mis cosas en la sala común y me fui al lago a descansar un poco. Solo que no me fue tan bien, Malfoy se acercó a molestarme de nuevo.
Hermione guardó silencio. Por supuesto no iba a agregar lo demás que había pasado. Quien sabe como se lo tomaría su pelirrojo amigo.
- Pero lo puse en su lugar. - Concluyó.
- Ese tipo... - gruñó Ron. - No se porque no se lo come el calamar gigante o que venga un dementor y le dé un beso.
"Beso". La sola mención de esa palabra hizo que a la chica le diera escalofríos.
- Ron, es mejor no molestarse por alguien insignificante, es una persona infeliz. - dijo Hermione dudando de su propias palabras.
- No se como puedes compadecerte de él a pesar de todo lo que hace. - Insistió Ron. – Su deporte favorito es humillarte y hacerte sentir mal.
- Lo se, pero es que después de todos estos años, sus palabras ya no me hacen efecto. De hecho hasta pienso que ya lo hace solo por costumbre. - dijo con aire pensativo.- Y además...
- ¡Qué tal!. ¿No creen que ya es hora de apurarnos?. McGonagall no tolera retrasos. - Dijo Harry sonriente interrumpiendo el dialogo entre los dos Gryffindor..
- ¡Es cierto!.. Tenemos el tiempo justo. - Dijo Hermione asustada al ver que solo le quedaban pocos minutos para ir por sus cosas a la sala común.
Hermione se apuró cuanto pudo para ir a su habitación y coger los libros que le servirían para su clase. La clase de McGonagall hizo que dejara de pensar en los sucedido en el lago con Malfoy.
En el camino a las clases, Hermione saludaba a todos y Ron no dejaba de mirarla de reojo. Pensaba que desde el cuarto curso Hermione había dado el cambio y él siempre se había tratado de convencer que lo que sentía por Hermione era solo cariño de hermanos pero la realidad era otra.
No escuchaba lo que decía Hermione, solo veía que Harry se reía, él solo tenía mente para una cosa: poner en regla sus pensamientos. Sabía que no podía seguir así y que Hermione no aceptaría ser más que amigos. Sintió una punzada en el corazón al imaginarse que ella no le correspondería sus sentimientos.
Ron respiró profundamente. Sin embargo, tenía un plan. Talvez funcionaría o tal vez no, pero al menos debía intentar.
-----
-----
-----
Terminó este capitulo. Y las preguntas que quedan en el aire son: ¿Volverá a intentar Draco besar a Hermione? ¿Que decision tomara?. ¿Que es lo que tiene planeado hacer ROn?.
Aahhh!!!... en este capitulo se me puso la "piel de gallina" al imaginarme aquel momento en que Draco besaría a Hermione. Pero ni modos, no hubo beso.
Les agradesco sus reviews y espero me sigan apoyando para que asi me de mas animos y siga escribiendo.
Hugsss and kisss.. Jaina Andley.
LA REALIDAD
Los siguientes días transcurrieron en la normalidad. Hermione había olvidado por completo el incidente que tuvo con Malfoy en los pasillos puesto que había mejores cosas en que pensar: las clases y sus labores como prefecta.
En aquel instante, Harry y Ron todavía se hallaban en clases y ella tenía libre aquella hora. No estaba de humor para encerrarse en la sala común. Hacía un lindo día y que mejor que ir al lago para despejar un poco la mente.
Escogió una sección cerca del lago donde estaba repleto de árboles frondosos y arbustos, frente a ella había un pequeño arroyo que se unía al lago y que prodigaba un agradable sonido. En ese momento solo esperaba poder avanzar un capitulo de su novela mientras esperaba a sus amigos. Nada en ese momento la hubiera hecho molestarse.... excepto Malfoy.
- Granger, .. Granger..- Se escuchó una voz en tono irónico que provenía a sus espaldas.- ¿ya se aburrieron tus amigos de ti tan pronto?
- Malfoy...- dijo exhausta.- ¿por qué siempre me persigues?.¿qué te hago para que me estés molestando todo el tiempo?.
- ¿Perseguirte?.- Draco sonrió burlón.- No estés dándote importancia Granger. A mi me gusta este lugar y ahora entorpeces mi hora libre. Estás estorbando así que... retírate.
- Yo llegue aquí primero... así que vete a donde puedas. –dijo enfadada.
- En primera yo voy a donde me dé la gana y en segunda,... ¡Quítate!. – Ordenó en voz alta.
Draco la miró directamente a los ojos y vio en ellos tanto odio que por un momento se sintió incomodo pero no se iba a dejar intimidar por una sangre sucia... él era un Malfoy.
- ¡Pues quítame!. – Hermione se levantó de su lugar de un solo salto. Su rostro reflejaba rabia.
- No me tientes Granger.- dijo en voz baja Draco.- Puedes arrepentirte de tus palabras.
- No te tengo miedo Malfoy, ya estoy harta de tus necedades y durante 5 años he soportado todos tus insultos. Así que puedes hacer lo que te venga en gana pero ni tú ni nadie me va a quitar de aquí.
La joven Gryffindor dio un golpe en el suelo con el pie mientras buscaba su varita en el bolsillo. Draco sintió un horrible sentimiento oscuro y solo pensó en hacerle algún daño a la Gryffindor.
- Vas a quitarte...- Musitó con cólera el Slytherin.
Draco no le dio tiempo de reaccionar a Hermione. La tomó de los brazos con fuerzas atrayéndola hacia él. La chica por unos segundos creyó que se encontraba en un grave aprieto pero lejos de lastimarla el Slytherin solo la miró fijamente con sus fríos ojos grises.
El rubio fue suavizando su expresión. El cabello de Hermione revoloteaba con el aire y su boca recién humedecida, parecía una cálida invitación a que los besara. Los segundos parecían correr con lentitud y Draco se vio envuelto en una nube que le empañó los sentidos. Se acercaba lentamente al rostro de su enemiga con el simple objetivo de averiguar a que sabían sus labios.
Hermione estaba petrificada, sin habla y sin poder reaccionar ante la actitud del Malfoy. Ella temblaba en una atmósfera densa, ¿qué estaba pasando?. Sin embargo un rayo de conciencia cayó sobre Draco, quien la soltó con cierta brusquedad.
El rubio la miró unos instantes antes de darse la vuelta para marcharse, dejándola totalmente desconcertada.
"¿Qué fue lo que pasó?". Pensó Hermione. Le pareció que Malfoy se había acercado mucho a su rostro, por un momento pensó que.. ¿estuvo a punto de besarla?. Hermione se cubrió la boca, el solo hecho de pensar en un beso de Malfoy la llenó de repulsión. Esa idea era de lo mas descabellada... ¡Draco Malfoy la odiaba con todas sus fuerzas!.
------
Malfoy caminaba hecho una furia, que bajo había caído, acercarse a Granger de esa manera... ¿Pero en que diablos estaba pensando?.
- ¡¡Quítate estorbo!!- dijo Draco empujando a un chico de cuarto curso de Griffyndor que tuvo la mala suerte de cruzarse en su camino.
Sus pasos se dirigieron a la sala común de Slytherin, escuchó su nombre pero ni siquiera volteó a ver quien le llamaba, si fuera por él mismo hubiera agarrado su varita y hubiera lanzado hechizos por doquier. Al entrar a su habitación dio un portazo con tanta fuerza que nadie se atrevió a acercársele.
Malfoy comenzó a dar vueltas por toda la habitación, pateando y tirando lo que estuviera en su paso, exhausto se tiró a su cama. Posó una mano sobre su frente y noto que estaba mas frío de lo normal, ¡estaba casi congelado!. Mil ideas bombardearon su cabeza y se repetía a si mismo lo imbecil que era. ¿Un Malfoy besar a una sangre sucia?. ¿Pero que le estaba pasando?. ¿Qué tenia en el cerebro?.
El Slytherin fue molestándose más a medida de que pensaba en la insensatez de habérsele acercado a Granger y que ella se hubiera dado cuenta de lo que él trataba de hacer. De la boca de Draco comenzaron a brotar Maldiciones. Trató de calmarse y cerró los ojos para transportarse hasta el momento en que la tenía sostenida por los brazos.
Fue un circunstancia extraña. En aquel momento que tomó los brazos de Granger sintió una descarga eléctrica en todo su cuerpo y un vacío en el estomago. Fue como aferrarse a ella en vez de empujarla con las intenciones de quitarla del lugar. El haber visto a la bruja tan enfadada y tan cerca, lo primero que le vino a la mente fue acercársele y besarla.
Draco abrió los ojos... si la hubiera besado, si él no hubiera reaccionado a tiempo, seguramente a estas alturas Granger se estuviera burlando de él junto con Potter y Weasley. "¿Supiste lo del idiota de Malfoy?. Besó a Granger, si a la sangre sucia", Draco se imaginaba que eso es lo que hubieran dicho todos y a continuación su reputación se iría por los suelos. Pero para alivio suyo nadie había observado la escena, los únicos que sabían eran ellos dos.
---
Hermione, sin embargo, se había quedado totalmente petrificada en el lago. No sabía si moverse o no, solo acertó sentarse de nuevo y mirar el cielo. No entendía la actitud de Malfoy, su mente sacó miles de conclusiones pero todo parecía indicar que él se había acercado para besarla.
Pensó en un momento en esa posibilidad pero resultaba incoherente dado que si él sintiera algo ni siquiera la trataría como lo hace, además que él no besaría a una 'sangre sucia' como le decía él.
"No, eso es imposible". Se decía a si misma. "Estás loca si piensas que él se acercó para eso, lo más probable es que perdió el equilibrio y solo quiso tomar impulso... Si,.. si.. esa es la respuesta. Claro, ¿Cómo no se me ocurrió?. Malfoy solo estaba tomando impulso".
Hermione se sintió una tonta ante la respuesta a su pregunta pero parecía ser la correcta o al menos eso quería pensar. Después de haber encontrado la supuesta respuesta, ella se levantó para alcanzar a los muchachos, en unos momentos más tendrían que ir juntos a la clase de Transformaciones con la Profesora McGonagall.
La chica caminó con pasos firmes pero su mente estaba enmarañada de tanto pensar. Lo mejor que se le ocurrió fue no pensar mas en Malfoy antes de presentarse con sus amigos. Sino ¿cómo podría ocultar lo que le había sucedido?.
- ¡Hermione! - Saludó con alegría Ron al verla acercarse - Que linda te ves el día de hoy.
El Weasley se sorprendió interiormente de lo que acababa de decir y no pudo evitar sonrojarse.
- ¡Gracias Ron! - exclamó Hermione un poco tímida.- Err...¿Dónde está Harry?
- Ahora viene, se quedó platicando con Dean sobre no se que cosas, yo preferí salir a buscarte.
Nuevamente el chico volvió a sonrojarse. Hermione lo miró confundida.
- Y... ¿que estuviste haciendo?. - Preguntó Ron para cambiar el tema pues sentía que sus mejillas iban a explotar.
- Deje mis cosas en la sala común y me fui al lago a descansar un poco. Solo que no me fue tan bien, Malfoy se acercó a molestarme de nuevo.
Hermione guardó silencio. Por supuesto no iba a agregar lo demás que había pasado. Quien sabe como se lo tomaría su pelirrojo amigo.
- Pero lo puse en su lugar. - Concluyó.
- Ese tipo... - gruñó Ron. - No se porque no se lo come el calamar gigante o que venga un dementor y le dé un beso.
"Beso". La sola mención de esa palabra hizo que a la chica le diera escalofríos.
- Ron, es mejor no molestarse por alguien insignificante, es una persona infeliz. - dijo Hermione dudando de su propias palabras.
- No se como puedes compadecerte de él a pesar de todo lo que hace. - Insistió Ron. – Su deporte favorito es humillarte y hacerte sentir mal.
- Lo se, pero es que después de todos estos años, sus palabras ya no me hacen efecto. De hecho hasta pienso que ya lo hace solo por costumbre. - dijo con aire pensativo.- Y además...
- ¡Qué tal!. ¿No creen que ya es hora de apurarnos?. McGonagall no tolera retrasos. - Dijo Harry sonriente interrumpiendo el dialogo entre los dos Gryffindor..
- ¡Es cierto!.. Tenemos el tiempo justo. - Dijo Hermione asustada al ver que solo le quedaban pocos minutos para ir por sus cosas a la sala común.
Hermione se apuró cuanto pudo para ir a su habitación y coger los libros que le servirían para su clase. La clase de McGonagall hizo que dejara de pensar en los sucedido en el lago con Malfoy.
En el camino a las clases, Hermione saludaba a todos y Ron no dejaba de mirarla de reojo. Pensaba que desde el cuarto curso Hermione había dado el cambio y él siempre se había tratado de convencer que lo que sentía por Hermione era solo cariño de hermanos pero la realidad era otra.
No escuchaba lo que decía Hermione, solo veía que Harry se reía, él solo tenía mente para una cosa: poner en regla sus pensamientos. Sabía que no podía seguir así y que Hermione no aceptaría ser más que amigos. Sintió una punzada en el corazón al imaginarse que ella no le correspondería sus sentimientos.
Ron respiró profundamente. Sin embargo, tenía un plan. Talvez funcionaría o tal vez no, pero al menos debía intentar.
-----
-----
-----
Terminó este capitulo. Y las preguntas que quedan en el aire son: ¿Volverá a intentar Draco besar a Hermione? ¿Que decision tomara?. ¿Que es lo que tiene planeado hacer ROn?.
Aahhh!!!... en este capitulo se me puso la "piel de gallina" al imaginarme aquel momento en que Draco besaría a Hermione. Pero ni modos, no hubo beso.
Les agradesco sus reviews y espero me sigan apoyando para que asi me de mas animos y siga escribiendo.
Hugsss and kisss.. Jaina Andley.
