Bueno, al ver que no había ni un solo FanFic de mi querido Yamaki-san,
decidí escribir yo uno en el que tuviera la mayor parte del protagonismo.
Eso, si, que quede claro que Digimon no me pertenece (más quisiera yo...), pero sí los personajes Kaishi, Raíko, Troy y sus digimons. Nireya, Tyler y sus digimons pertenecen a mi amiga Nire. Yolln, Sayuri, Natsumi y sus digimons pertenecen a mi amigo Yolln. Mizu, Saiya, Nagoshi y sus digimons pertenecen a mi amiga Mizu. Y cualquier otro personaje que no les suene de la serie, es que también es inventado por mí o mis amigos.
Si desean usar alguno de estos personajes para algo, pídannos permiso, por favor.
Y bueno, empiezo ya con la historia. Espero que les guste! ^_^
= = = = = = = = = = = = La Batalla de las 4 Estrellas = = = = = = = = = = = =
INTRODUCCIÓN
10 meses después de la lucha contra D-Reaper, y de que los digimons tuvieran que partir al digimundo, la barrera que Janyuu Wong y sus compañeros habían construido entre los dos mundos flaqueó. Esto dio paso a que la puerta digital volviera a ser abierta, y a que los digimons amigos de los niños volvieran al mundo real. Sin embargo, otros digimons menos pacíficos también viajaban al mundo real de vez cuando. Pero aun así, los miembros de la Banda Salvaje no hicieron nada esta vez para rehabilitar la barrera, ahora que los niños volvían a ser felices. Así que entre Hypnos y los niños, se encargaban de regresarlos a su mundo por nuevos medios.
Un año después, Yamaki se enteró de que su hermana, su cuñado y sus sobrinos volvían a Shinjuku después de 4 años viviendo en Hiroshima. Por eso, cuando llegaron, Yamaki presento a su sobrina a Takato, Henry y Rika, y a su sobrino a Ryo. Ellos se hicieron muy amigos de todo el grupo de tamers. Pero poco después, descubrieron que Kaishi, la sobrina de Yamaki, era una tamer desde hacía un año, y Troy, su sobrino, lo era desde hacía unos meses. Así empezó a crearse otro grupo de tamers. A las semanas, un chico de Matsumoto, que había conocido Kaishi en el tren, llamado Yolln Minekawa, y su hermana pequeña, Natsumi, se habían unido a ellos. Eran primos de Ryo Akiyama, el cual también se había ido a Shinjuku desde Fukuoka hacía varios meses para estar más cerca de su grupo de amigos. Yolln también era tamer hace un año, y su hermana hacía un mes. Más tarde, la mejor amiga de Kaishi en Hiroshima, Nireya Mareakane, tamer hacía un año, y su hermano Taylor, el mejor amigo de Troy, tamer hacía pocos meses, se mudaron también a Shinjuku. Y por último, Mizu Takizumi y su hermana Nagoshi, se mudaron también a Shinjuku desde Nagoya. Ella era tamer desde hacía un año, y su hermana desde hacía un mes. Y así se formó un nuevo grupo de tamers, que se añadieron al anterior.
Por eso, tres años después de D-Reaper, con tantos tamers que defendieran la ciudad, los niños y los adultos que sabían de los digimons llegaron a pensar que Shinjuku había vuelto a ser un lugar seguro. Pero no podían haber estado más equivocados...
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
CAPÍTULO 1. PRÓLOGO
"HIPER RAYO!!!!" "RAYO SOLAR!!!!" "ACUCHILLADA RELÁMPAGO!!!!" "DISCO FASHION!!!!"
Cuatro ataques de cuatro digimons campeones distintos chocaron contra un quinto, que desapareció.
"SI!! Lo conseguimos!" exclamó Kaishi. Era una chica alta, delgada, de pelo castaño oscuro y ojos marrón ambárico. Llevaba unas gafas de sol colgadas del cuello de la camiseta.
"Wow! Lo vencisteis fácilmente..." observó Henry.
"Si te digo la verdad, no se necesita demasiado para vencer a un Garbagemon..." aseguró Yolln, un chico moreno y de ojos marrones con lentes.
Era un viernes por la tarde, y los 16 niños, de diferentes edades, se encontraban en medio de la calle, junto a 15 digimons.
"Bueno, lo mejor ahora será irnos de aquí o alguien podría vernos."aconsejó el chico de los googles, Takato.
"Si Takato, sería lo mejor..." aprobó Henry.
"Entonces a que estamos esperando?? Vámonos de una vez!!" dijo Rika molesta.
"Bah! Rika solo está molesta porque no la dejaron luchar." comentó Kazu.
"Cállate Shiota, si aun deseas seguir vivo!!" contestó enfadada la chica.
"Bueno, a mí también me hubiera gustado luchar, pero no es para tanto..." dijo otro chico mayor que los demás, Ryo.
"Cállate tu también Akiyama!!" replicó Rika aun más enfadada.
"La verdad, no puedo comprender vuestras ganas de luchar..." dijo Henry.
"Bueno, ahora que ya no son destruidos sino regresados al digimundo..." justificó otra chica, morena y de ojos marrones, Nireya.
"Mmm... aun no entiendo bien eso de que sean devueltos al digimundo..." señaló Jen.
"Deja que te lo explique, Jen..." empezó a decir Kaishi.
"Espera." la interrumpió un moreno chico, de ojos negros, alto y delgado, de 17 años, Troy. "Si te lo explica mi hermana, seguro que se pondrá a hablarte en lenguaje informático, y dudo que todavía lo domines del todo" Jen asintió "Será mejor que te lo explique yo... Verás, cuando un digimon se realiza en el mundo real, los sistemas de Hypnos lo detectan. Y entonces le lanzan un programa que creó mi tío hace unos años, del que básicamente su finalidad es transportar sus datos de nuevo al digimundo, después de unos complicados procesos en la red. Pero como casi todos los digimons se resisten a ese programa, nosotros lo que hacemos es neutralizarlos o quitarles la energía para que el programa pueda devolverlos a su mundo." explicó el chico.
"Ah, creo que ya lo voy comprendiendo. Gracias Troy." agradeció Jen.
"Bueno, ahora vámonos, si?. Se está acercando gente." dijo Takato, señalando el final de la calle.
"Está bien, vamos al parque." aceptó Kenta, que tenía en brazos a MarineAngemon.
Todos pusieron rumbo al parque, pero Kaishi llamó su atención.
"Eh! No pensareis ir caminado??" preguntó.
"Claro, como vamos a ir sino?" respondió Yolln.
"Magisdramon puede teletrasnportarnos, Yolln." le recordó Kaishi.
"Pues rápido, antes de que nadie pueda vernos." apuró Mizu, una chica de pelo castaño tirando a rubio muy largo, de ojos verde pálido y lentes.
El gran grupo rodeó como pudo a uno de los cuatro digimons nivel campeón que habían luchado antes. En unos segundos, desaparecieron del lugar. Reaparecieron en el parque, en la zona donde se encontraba la caseta de Guillmon, dentro de la cual estaba la puerta digital. Apoyado sobre una de las paredes, se encontraba un hombre adulto, alto y rubio, vestido con un traje oscuro, con unas gafas de sol puestas y un mechero que abría y cerraba lentamente con una mano. Les sonrió amigablemente.
"Me preguntaba dónde estaríais..."
"Mitsuo!!" su sobrina se acercó a él "¿Qué haces aquí? No deberías estar trabajando??" preguntó curiosa.
"Bueno, yo también merezco unas horas libres, no?" sonrió de nuevo "Me apetecía coger el aire y se me ocurrió venir a veros."
"Me alegra" Kaishi le devolvió la sonrisa mientras se abrazaba al brazo de su tío.
"Y vosotros, ¿de dónde veníais con tanta prisa?" le preguntó al grupo.
"De neutralizar a un salvaje." respondió Troy. Yamaki rió.
"Vaya, ya hablas como todo un hypno." comentó. Todos rieron.
"Bah! No será para tanto..." dijo Troy sonrojado.
"Pero bueno... Acaso ese salvaje os dio problemas??"
"Que va!! Si Magisdramon, Mainlymon, Grizzmon y Phirymon le vencieron de un ataque. Por qué preguntas eso??" cuestionó Kaishi.
"Por qué si no volvisteis transportados por Magisdramon, en vez de caminando??" le respondió a su sobrina
"Ah! Ya conoces a Kaishi..." contestó Troy en tono molestón.
"Eh!!" se quejó molesta su hermana. "Ya sabes que no me gusta nada caminar... es aburrido..." se defendió. Su tío le revolvió el pelo suavemente.
"Mmm... caminar no te gusta, pero correr..." le dijo sonriendo.
"Bueno, eso es diferente." contestó poniendo cara de pillina. Al grupo le hizo gracia su gesto.
Yamaki miró su reloj.
"Vaya... ya es hora de volver." comentó pensativo. "O si no Reika se me enfadará..." añadió sonriendo.
"Pues bueno, hasta luego. Y no trabajes demasiado!"
"Si por mi fuera no lo haría Kai, pero el deber es el deber..." dijo Yamaki, mientras hacía un gesto de despedida con la mano al resto y se alejaba en dirección al Edificio del Gobierno.
"Mmm... que mentiroso es... si no hay nada que le guste más que trabajar..." dijo Troy en broma.
"Parece que hoy tenía un buen día, se le veía muy animado..." comentó Henry.
"Si, y no paraba de sonreir." aseguró Nagoshi, la más pequeña del grupo, que estaba agarrada de la mano de su hermana Mizu. Tenía 9 años, y era castaña y de ojos verdes como los de su hermana.
Kaishi volvió con el resto del grupo.
"Oye, vosotros le tenéis miedo a mi tío??" preguntó extrañada.
"No. Por qué íbamos a tenérselo??" contestó Takato.
"Porque cuando lo veis os quedáis callados, y no decís ni pío..." les aclaró.
"Bueno, hablando de otra cosa. Qué vais a hacer mañana??" Rika interrumpió la conversación.
"A lo mejor podíamos quedar para ir a algún sitio todos." propuso Taylor, un chico de 16 años, moreno de pelo por debajo de las orejas, y ojos marrones.
"No es mala idea." aprobó Yolln.
Al poco tiempo, ya todos se habían dividido en grupillos. Ryo, Troy, Taylor, Monodramon, Rudermon y Richumon se apartaron un poco para jugar a las cartas, seguidos de Kazu, Kenta y sus respectivos digimons, que se acercaron con intención de curiosear. Rika y Jen también se pusieron a jugar, observadas por Renamon, pero al rato las tres fueron con el grupo de chicos para retarlos. Natsumi, la hermana pequeña de Yolln, de 11 años, pelo largo y rubio y ojos verdes, Nagoshi y Shu-chong, fueron a un claro que había a un lado de la caseta, y allí se pusieron a jugar juntas con sus digimons, Amywomon, Rybomon y Lopmon respectivamente. Enseguida se unieron al juego Guillmon y Terriermon. Y sentados en el suelo, apoyados en la pared de la caseta, estaban Kaishi, Nireya, Yolln y Mizu junto a sus digimons, que ya habían vuelto al nivel principiante, Teilsmon, Prinymon, Kumamon y Butterflymon respectivamente. Mientras Yolln atusaba a su digimon, que prácticamente no cabía en su regazo, y Nireya acariciaba pensativa la cabeza de su digimon perro, y Mizu y Butterflymon leían una pequeña revista, Kaishi, que estaba sentada al lado de su digimon gato y observaba detenidamente al resto del grupo, se dio cuenta de algo.
"Dónde están Henry y Takato??" preguntó.
"Ni idea" respondió Nireya.
" A lo mejor están dentro." planteó Yolln señalando la caseta.
"Vamos a mirar." dijo Kaishi levantándose.
Los demás también se levantaron y la siguieron. Kaishi se asomó disimuladamente a la puerta de la caseta. Efectivamente, en el interior se encontraban Takato y Henry, que miraban en silencio la puerta digital. En el momento en que ya los cuatro se habían asomado, Henry comenzó a hablar.
"Tengo la impresión de que algo no va bien..." expuso a Takato.
"¿Qué quieres decir?" preguntó el chico de los googles extrañado.
"Había algo raro en ese Garbagemon..." aseguró.
"No te entiendo." dijo confuso Takato.
"No sé... varias cosas que me parecieron extrañas... no era un Garbagemon normal..."
"Sigo sin saber a que te refieres..."
"Por ejemplo, su color. ¿Te fijaste en su color?" Takato negó con la cabeza. "Era bastante más oscuro de lo normal, y tenía motas rojas. Su cubo y su bazoca eran de color negro, cuando normalmente son verdes o color caqui. Su pelo era rojo, y en mi carta del JCI es amarillo. Y sus ojos también eran rojos... Su color estaba totalmente variado." concluyó.
"Bueno, a veces los colores de los digimons varían sin que cambie su nombre..." justificó Takato.
"Lo sé, pero no era solo eso. Su comportamiento también era extraño. Cuando lo encontramos, no huyó, como hacen normalmente todos los salvajes para evitar que los devolvamos a su mundo, sino que parecía estarnos esperando. Y después cuando corrimos para cambiar de calle porque se acercaba alguien, nos siguió. Y luego se puso a murmurar, como si hablara consigo mismo, o con alguien invisible. Su comportamiento era realmente extraño, y parecía como si tuviese razones importantes para atacarnos... No lo sé... es muy raro..."
Takato no respondió. Se quedó pensativo, aún mirando la puerta digital.
"Por eso tengo la corazonada de que algo no va bien. Pero por favor, no le digas nada a los demás, no quiero preocuparlos. Además, quizás solo sean cosas mías." pidió Henry.
Takato asintió con la cabeza en señal de acuerdo. Kaishi, Nireya, Yolln y Mizu volvieron a sentarse donde estaban antes. Ellos también se habían quedado pensativos.
"Pues ahora que lo dice, es verdad. Aquel Garbagemon era muy raro..." apoyó Mizu.
"Ajá... pero quizás no le dimos importancia..." opinó Nireya.
"Yo creo que estábamos más concentrados en la lucha..." consideró Yolln.
"Si..." asintió Kaishi.
"De todas maneras, no hay razón para preocuparse. Como decía en un libro que leí hace un tiempo, 'Lo que tenga que venir, vendrá, y ya habrá tiempo para plantarle cara'" aseguró Nireya.
Sus amigos asintieron, y ya despreocupados, se embarcaron en una nueva charla sobre otro tema.
Cuando empezó a hacerse de noche, poco a poco todos se fueron yendo a su casa acompañados de sus digimons, y de los que más cerca vivían de su edificio, después de quedar en verse en el mismo lugar al día siguiente.
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
FIN DEL CAP. 1
Un Garbagemon extraño apareció... ¿Pero tan extraño era como para que Henry se preocupara?¿Realmente aquel no era un Garbagemon normal? ¿Por qué tendría Yamaki un día tan alegre?.... Y... ¿Qué pasará al día siguiente?¿Ocurrirá algo que confirme a Takato, Henry, Kaishi, Nireya, Yolln y Mizu que algo no va bien? Para saber la respuesta de estas preguntas y otras, solo espera al siguiente capítulo.^.^
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
Bueno, eso ha sido todo por el momento. La verdad es que este primer capítulo no se me quedó como desearía... pero que se le va a hacer...
Si desean dar cualquier opinión o comentario, ya saben, dejen un review, pero por favor, si pueden, eviten mandarme e-mails, que tengo el correo saturado...
Pues bueno, Hasta la Vista!! ^_^
*·-- Kaishi Miharashi de Yamaki --·*
Eso, si, que quede claro que Digimon no me pertenece (más quisiera yo...), pero sí los personajes Kaishi, Raíko, Troy y sus digimons. Nireya, Tyler y sus digimons pertenecen a mi amiga Nire. Yolln, Sayuri, Natsumi y sus digimons pertenecen a mi amigo Yolln. Mizu, Saiya, Nagoshi y sus digimons pertenecen a mi amiga Mizu. Y cualquier otro personaje que no les suene de la serie, es que también es inventado por mí o mis amigos.
Si desean usar alguno de estos personajes para algo, pídannos permiso, por favor.
Y bueno, empiezo ya con la historia. Espero que les guste! ^_^
= = = = = = = = = = = = La Batalla de las 4 Estrellas = = = = = = = = = = = =
INTRODUCCIÓN
10 meses después de la lucha contra D-Reaper, y de que los digimons tuvieran que partir al digimundo, la barrera que Janyuu Wong y sus compañeros habían construido entre los dos mundos flaqueó. Esto dio paso a que la puerta digital volviera a ser abierta, y a que los digimons amigos de los niños volvieran al mundo real. Sin embargo, otros digimons menos pacíficos también viajaban al mundo real de vez cuando. Pero aun así, los miembros de la Banda Salvaje no hicieron nada esta vez para rehabilitar la barrera, ahora que los niños volvían a ser felices. Así que entre Hypnos y los niños, se encargaban de regresarlos a su mundo por nuevos medios.
Un año después, Yamaki se enteró de que su hermana, su cuñado y sus sobrinos volvían a Shinjuku después de 4 años viviendo en Hiroshima. Por eso, cuando llegaron, Yamaki presento a su sobrina a Takato, Henry y Rika, y a su sobrino a Ryo. Ellos se hicieron muy amigos de todo el grupo de tamers. Pero poco después, descubrieron que Kaishi, la sobrina de Yamaki, era una tamer desde hacía un año, y Troy, su sobrino, lo era desde hacía unos meses. Así empezó a crearse otro grupo de tamers. A las semanas, un chico de Matsumoto, que había conocido Kaishi en el tren, llamado Yolln Minekawa, y su hermana pequeña, Natsumi, se habían unido a ellos. Eran primos de Ryo Akiyama, el cual también se había ido a Shinjuku desde Fukuoka hacía varios meses para estar más cerca de su grupo de amigos. Yolln también era tamer hace un año, y su hermana hacía un mes. Más tarde, la mejor amiga de Kaishi en Hiroshima, Nireya Mareakane, tamer hacía un año, y su hermano Taylor, el mejor amigo de Troy, tamer hacía pocos meses, se mudaron también a Shinjuku. Y por último, Mizu Takizumi y su hermana Nagoshi, se mudaron también a Shinjuku desde Nagoya. Ella era tamer desde hacía un año, y su hermana desde hacía un mes. Y así se formó un nuevo grupo de tamers, que se añadieron al anterior.
Por eso, tres años después de D-Reaper, con tantos tamers que defendieran la ciudad, los niños y los adultos que sabían de los digimons llegaron a pensar que Shinjuku había vuelto a ser un lugar seguro. Pero no podían haber estado más equivocados...
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
CAPÍTULO 1. PRÓLOGO
"HIPER RAYO!!!!" "RAYO SOLAR!!!!" "ACUCHILLADA RELÁMPAGO!!!!" "DISCO FASHION!!!!"
Cuatro ataques de cuatro digimons campeones distintos chocaron contra un quinto, que desapareció.
"SI!! Lo conseguimos!" exclamó Kaishi. Era una chica alta, delgada, de pelo castaño oscuro y ojos marrón ambárico. Llevaba unas gafas de sol colgadas del cuello de la camiseta.
"Wow! Lo vencisteis fácilmente..." observó Henry.
"Si te digo la verdad, no se necesita demasiado para vencer a un Garbagemon..." aseguró Yolln, un chico moreno y de ojos marrones con lentes.
Era un viernes por la tarde, y los 16 niños, de diferentes edades, se encontraban en medio de la calle, junto a 15 digimons.
"Bueno, lo mejor ahora será irnos de aquí o alguien podría vernos."aconsejó el chico de los googles, Takato.
"Si Takato, sería lo mejor..." aprobó Henry.
"Entonces a que estamos esperando?? Vámonos de una vez!!" dijo Rika molesta.
"Bah! Rika solo está molesta porque no la dejaron luchar." comentó Kazu.
"Cállate Shiota, si aun deseas seguir vivo!!" contestó enfadada la chica.
"Bueno, a mí también me hubiera gustado luchar, pero no es para tanto..." dijo otro chico mayor que los demás, Ryo.
"Cállate tu también Akiyama!!" replicó Rika aun más enfadada.
"La verdad, no puedo comprender vuestras ganas de luchar..." dijo Henry.
"Bueno, ahora que ya no son destruidos sino regresados al digimundo..." justificó otra chica, morena y de ojos marrones, Nireya.
"Mmm... aun no entiendo bien eso de que sean devueltos al digimundo..." señaló Jen.
"Deja que te lo explique, Jen..." empezó a decir Kaishi.
"Espera." la interrumpió un moreno chico, de ojos negros, alto y delgado, de 17 años, Troy. "Si te lo explica mi hermana, seguro que se pondrá a hablarte en lenguaje informático, y dudo que todavía lo domines del todo" Jen asintió "Será mejor que te lo explique yo... Verás, cuando un digimon se realiza en el mundo real, los sistemas de Hypnos lo detectan. Y entonces le lanzan un programa que creó mi tío hace unos años, del que básicamente su finalidad es transportar sus datos de nuevo al digimundo, después de unos complicados procesos en la red. Pero como casi todos los digimons se resisten a ese programa, nosotros lo que hacemos es neutralizarlos o quitarles la energía para que el programa pueda devolverlos a su mundo." explicó el chico.
"Ah, creo que ya lo voy comprendiendo. Gracias Troy." agradeció Jen.
"Bueno, ahora vámonos, si?. Se está acercando gente." dijo Takato, señalando el final de la calle.
"Está bien, vamos al parque." aceptó Kenta, que tenía en brazos a MarineAngemon.
Todos pusieron rumbo al parque, pero Kaishi llamó su atención.
"Eh! No pensareis ir caminado??" preguntó.
"Claro, como vamos a ir sino?" respondió Yolln.
"Magisdramon puede teletrasnportarnos, Yolln." le recordó Kaishi.
"Pues rápido, antes de que nadie pueda vernos." apuró Mizu, una chica de pelo castaño tirando a rubio muy largo, de ojos verde pálido y lentes.
El gran grupo rodeó como pudo a uno de los cuatro digimons nivel campeón que habían luchado antes. En unos segundos, desaparecieron del lugar. Reaparecieron en el parque, en la zona donde se encontraba la caseta de Guillmon, dentro de la cual estaba la puerta digital. Apoyado sobre una de las paredes, se encontraba un hombre adulto, alto y rubio, vestido con un traje oscuro, con unas gafas de sol puestas y un mechero que abría y cerraba lentamente con una mano. Les sonrió amigablemente.
"Me preguntaba dónde estaríais..."
"Mitsuo!!" su sobrina se acercó a él "¿Qué haces aquí? No deberías estar trabajando??" preguntó curiosa.
"Bueno, yo también merezco unas horas libres, no?" sonrió de nuevo "Me apetecía coger el aire y se me ocurrió venir a veros."
"Me alegra" Kaishi le devolvió la sonrisa mientras se abrazaba al brazo de su tío.
"Y vosotros, ¿de dónde veníais con tanta prisa?" le preguntó al grupo.
"De neutralizar a un salvaje." respondió Troy. Yamaki rió.
"Vaya, ya hablas como todo un hypno." comentó. Todos rieron.
"Bah! No será para tanto..." dijo Troy sonrojado.
"Pero bueno... Acaso ese salvaje os dio problemas??"
"Que va!! Si Magisdramon, Mainlymon, Grizzmon y Phirymon le vencieron de un ataque. Por qué preguntas eso??" cuestionó Kaishi.
"Por qué si no volvisteis transportados por Magisdramon, en vez de caminando??" le respondió a su sobrina
"Ah! Ya conoces a Kaishi..." contestó Troy en tono molestón.
"Eh!!" se quejó molesta su hermana. "Ya sabes que no me gusta nada caminar... es aburrido..." se defendió. Su tío le revolvió el pelo suavemente.
"Mmm... caminar no te gusta, pero correr..." le dijo sonriendo.
"Bueno, eso es diferente." contestó poniendo cara de pillina. Al grupo le hizo gracia su gesto.
Yamaki miró su reloj.
"Vaya... ya es hora de volver." comentó pensativo. "O si no Reika se me enfadará..." añadió sonriendo.
"Pues bueno, hasta luego. Y no trabajes demasiado!"
"Si por mi fuera no lo haría Kai, pero el deber es el deber..." dijo Yamaki, mientras hacía un gesto de despedida con la mano al resto y se alejaba en dirección al Edificio del Gobierno.
"Mmm... que mentiroso es... si no hay nada que le guste más que trabajar..." dijo Troy en broma.
"Parece que hoy tenía un buen día, se le veía muy animado..." comentó Henry.
"Si, y no paraba de sonreir." aseguró Nagoshi, la más pequeña del grupo, que estaba agarrada de la mano de su hermana Mizu. Tenía 9 años, y era castaña y de ojos verdes como los de su hermana.
Kaishi volvió con el resto del grupo.
"Oye, vosotros le tenéis miedo a mi tío??" preguntó extrañada.
"No. Por qué íbamos a tenérselo??" contestó Takato.
"Porque cuando lo veis os quedáis callados, y no decís ni pío..." les aclaró.
"Bueno, hablando de otra cosa. Qué vais a hacer mañana??" Rika interrumpió la conversación.
"A lo mejor podíamos quedar para ir a algún sitio todos." propuso Taylor, un chico de 16 años, moreno de pelo por debajo de las orejas, y ojos marrones.
"No es mala idea." aprobó Yolln.
Al poco tiempo, ya todos se habían dividido en grupillos. Ryo, Troy, Taylor, Monodramon, Rudermon y Richumon se apartaron un poco para jugar a las cartas, seguidos de Kazu, Kenta y sus respectivos digimons, que se acercaron con intención de curiosear. Rika y Jen también se pusieron a jugar, observadas por Renamon, pero al rato las tres fueron con el grupo de chicos para retarlos. Natsumi, la hermana pequeña de Yolln, de 11 años, pelo largo y rubio y ojos verdes, Nagoshi y Shu-chong, fueron a un claro que había a un lado de la caseta, y allí se pusieron a jugar juntas con sus digimons, Amywomon, Rybomon y Lopmon respectivamente. Enseguida se unieron al juego Guillmon y Terriermon. Y sentados en el suelo, apoyados en la pared de la caseta, estaban Kaishi, Nireya, Yolln y Mizu junto a sus digimons, que ya habían vuelto al nivel principiante, Teilsmon, Prinymon, Kumamon y Butterflymon respectivamente. Mientras Yolln atusaba a su digimon, que prácticamente no cabía en su regazo, y Nireya acariciaba pensativa la cabeza de su digimon perro, y Mizu y Butterflymon leían una pequeña revista, Kaishi, que estaba sentada al lado de su digimon gato y observaba detenidamente al resto del grupo, se dio cuenta de algo.
"Dónde están Henry y Takato??" preguntó.
"Ni idea" respondió Nireya.
" A lo mejor están dentro." planteó Yolln señalando la caseta.
"Vamos a mirar." dijo Kaishi levantándose.
Los demás también se levantaron y la siguieron. Kaishi se asomó disimuladamente a la puerta de la caseta. Efectivamente, en el interior se encontraban Takato y Henry, que miraban en silencio la puerta digital. En el momento en que ya los cuatro se habían asomado, Henry comenzó a hablar.
"Tengo la impresión de que algo no va bien..." expuso a Takato.
"¿Qué quieres decir?" preguntó el chico de los googles extrañado.
"Había algo raro en ese Garbagemon..." aseguró.
"No te entiendo." dijo confuso Takato.
"No sé... varias cosas que me parecieron extrañas... no era un Garbagemon normal..."
"Sigo sin saber a que te refieres..."
"Por ejemplo, su color. ¿Te fijaste en su color?" Takato negó con la cabeza. "Era bastante más oscuro de lo normal, y tenía motas rojas. Su cubo y su bazoca eran de color negro, cuando normalmente son verdes o color caqui. Su pelo era rojo, y en mi carta del JCI es amarillo. Y sus ojos también eran rojos... Su color estaba totalmente variado." concluyó.
"Bueno, a veces los colores de los digimons varían sin que cambie su nombre..." justificó Takato.
"Lo sé, pero no era solo eso. Su comportamiento también era extraño. Cuando lo encontramos, no huyó, como hacen normalmente todos los salvajes para evitar que los devolvamos a su mundo, sino que parecía estarnos esperando. Y después cuando corrimos para cambiar de calle porque se acercaba alguien, nos siguió. Y luego se puso a murmurar, como si hablara consigo mismo, o con alguien invisible. Su comportamiento era realmente extraño, y parecía como si tuviese razones importantes para atacarnos... No lo sé... es muy raro..."
Takato no respondió. Se quedó pensativo, aún mirando la puerta digital.
"Por eso tengo la corazonada de que algo no va bien. Pero por favor, no le digas nada a los demás, no quiero preocuparlos. Además, quizás solo sean cosas mías." pidió Henry.
Takato asintió con la cabeza en señal de acuerdo. Kaishi, Nireya, Yolln y Mizu volvieron a sentarse donde estaban antes. Ellos también se habían quedado pensativos.
"Pues ahora que lo dice, es verdad. Aquel Garbagemon era muy raro..." apoyó Mizu.
"Ajá... pero quizás no le dimos importancia..." opinó Nireya.
"Yo creo que estábamos más concentrados en la lucha..." consideró Yolln.
"Si..." asintió Kaishi.
"De todas maneras, no hay razón para preocuparse. Como decía en un libro que leí hace un tiempo, 'Lo que tenga que venir, vendrá, y ya habrá tiempo para plantarle cara'" aseguró Nireya.
Sus amigos asintieron, y ya despreocupados, se embarcaron en una nueva charla sobre otro tema.
Cuando empezó a hacerse de noche, poco a poco todos se fueron yendo a su casa acompañados de sus digimons, y de los que más cerca vivían de su edificio, después de quedar en verse en el mismo lugar al día siguiente.
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
FIN DEL CAP. 1
Un Garbagemon extraño apareció... ¿Pero tan extraño era como para que Henry se preocupara?¿Realmente aquel no era un Garbagemon normal? ¿Por qué tendría Yamaki un día tan alegre?.... Y... ¿Qué pasará al día siguiente?¿Ocurrirá algo que confirme a Takato, Henry, Kaishi, Nireya, Yolln y Mizu que algo no va bien? Para saber la respuesta de estas preguntas y otras, solo espera al siguiente capítulo.^.^
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
Bueno, eso ha sido todo por el momento. La verdad es que este primer capítulo no se me quedó como desearía... pero que se le va a hacer...
Si desean dar cualquier opinión o comentario, ya saben, dejen un review, pero por favor, si pueden, eviten mandarme e-mails, que tengo el correo saturado...
Pues bueno, Hasta la Vista!! ^_^
*·-- Kaishi Miharashi de Yamaki --·*